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6.2 Andrés el Capellán y el Tratado del amor co rtés

6.2.3 Concesión de Autoridad de El Capellán

Existen muchas pistas que nos indican las razones por las que debemos considerar a Andrés El Capellán como autoridad en el tema del amor.

En primera instancia el hecho que El capellán fuera religioso dice mucho, teniendo en cuenta que en el medioevo la iglesia tenía una gran influencia en la sociedad, “la enseñanza es función eclesiástica”98. “El cristiano se hallaba convencido de haber contraído una obligación de sumisión y de fidelidad con los santos, habiéndose convertido en una especie de subvasallo de Dios.”99 Esto se vio reflejado en muchos caballeros que en su vida adulta se regalaban al servicio de la iglesia, pero también en que la gente tomara sus decisiones basadas en el consejo eclesiástico. Muchas estrategias de poder eran utilizadas por la iglesia para controlar la vida privada, técnicas como la confesión, la dirección de conciencia, de cartas o de conversaciones, la predicación, etc., “la repetición de tales intervenciones permite a los frailes difundir una enseñanza entre cuyos propósitos primordiales, aunque implícito, se manifiesta con total claridad el control de la vida privada.”100 “La cultura, al fin de cuentas, es cuestión de la fe; el obispo (del lugar) pretende conservar su control.”101 Además de ser capellán, el autor era un académico de primera línea, pues -como decíamos al comienzo- fue 96

Duby, Georges (1993), Op. Cit. Pág. 318. 97 Ibíd. Pág. 318.

98 Le Goff, Jacques (1985). Los intelectuales en la Edad Media, Barcelona, Gedisa. Pág. 72. 99

Duby, Georges, Ariès, Philippe (dir) (2001b), Historia de la vida privada: de la Europa feudal al renacimiento. Madrid, Taurus. Pág. 48

100 Ibíd., Pág. 314. 101

especialista en derecho canónico, derecho romano y medicina -entre otros-, estudios que lo ubicaban en una situación de ventaja frente al vulgo de la época. Para los clérigos de la Edad Media, su función no radicaba únicamente en predicar la palabra de Dios y evangelizar, ellos cumplían una función social múltiple, “los clérigos pudieron hacer las veces de profesores, de sabios y de escritores”102.

La Universidad es de una manera única, internacional por sus miembros […], por la materia de su actividad […], por sus horizontes sancionados por la licentia ubique docendi, el derecho a enseñar en todas partes, que tienen por estatutos los graduados de las mayores universidades. Esta corporación no tiene sólo, como las otras corporaciones, un monopolio sobre el mercado local; su ámbito es la cristiandad.103

Con la aparición de las primeras universidades en Bolonia en 1088 y luego en París en 1150, la iglesia apoya su independencia de la influencia de la monarquía reconociendo la importancia y el valor de la actividad intelectual como elemento de poder. La universidad y sus miembros se convierten en figuras de gran importancia social, cuyas opiniones son tomadas con seriedad.

El Capellán fue respetado no solamente por su posición como miembro de la iglesia, sino por su estatus de universitario y académico, su libro “Tratado del amor cortés”, también conocido como De arte honeste Amandi fue todo un éxito a pesar de su prohibición cien años después de publicado. El tratado del Capellán se convirtió en toda una normativa en el tema del amor y del erotismo, al punto de ser usado como la base de enseñanza en las cortes del amor, “his treatise was considered authoritative on one of the most popular subjects of medieval investigation, erotism, and attained wide popularity over most of Europe. It is reported that in Spain it even "served as a textbook for those courts of love that were established in Barcelona by King Juan of Aragon (1350-1396) and his wife Violant de Bar."104 Hoy en día, el tratado de El Capellán es objeto de discusión de círculos académicos que se ocupan del amor y de la Edad Media en Occidente

102

Le Goff, Jacques (1985). Op. Cit. Pág 25 103 Ibíd. Pág. 76

104Clarke, Dorothy Clotelle (1972, otoño), Juan Ruiz and Andreas Capellanus, Hispanic Review, Vol. 40, No. 4, Pág 391.

pues es de los pocos documentos que existen que regulan y normalizan el fine amour.

Ahora bien, la autoridad otorgada al Capellán no se dio únicamente por personas ajenas a él que consideraron su trabajo valioso. En el tratado, que fue escrito para un supuesto amigo Gualterio, el Capellán se otorga la experiencia como carácter de autoridad para ayudar a su amigo a vencer a Venus, y sus flechas clavadas en el corazón.

Me dices que eres un nuevo recluta del Amor y que, como hace poco que te han herido sus flechas, no sabes gobernar sabiamente las riendas de tu caballo, y no encuentras ningún remedio apropiado. No hallo palabras adecuadas para explicarte bien lo serio que es esto y cuánto me preocupa. Sé muy bien, por experiencia propia, que de nada aprovecha al ligado el servicio de Venus el querer concentrar su atención en cosa alguna, si no es en ver

cómo pueda ocuparme siempre en algo que le enrede cada vez más en sus cadenas…105

Toda la argumentación que sigue al prólogo -donde él mismo promete ayudar a su amigo a conquistar el mundo del amor- fue hecha desde un conocimiento en profundidad del tema. Describe lo que el amor es, los personajes que pueden acceder al amor, el origen la palabra misma, sus efectos y cómo conseguirlo, es decir, todo un tratado –como el mismo libro se denomina- explicando lo que se debe saber sobre el amor, para –finalmente- poder “vencerlo”.

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