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5.   CARACTERIZACIÓN DE LOS HORMIGONES 131

5.3.   PROPIEDADES DEL HORMIGÓN FRESCO 132

5.3.2.   Consistencia y docilidad 133

La consistencia es la aptitud de un hormigón para conservar las posiciones relativas de sus componentes en estado fresco; en este sentido es sinónimo del término, quizás más gráfico de “cohesión”.

La docilidad es la aptitud de un hormigón para admitir deformaciones plásticas, adaptándose a la forma del molde, bajo determinadas condiciones de compactación sin perder su homogeneidad (ACHE 2000).

En esta fase, para determinar la consistencia del hormigón de las distintas amasadas se han utilizados dos sistemas diferentes, teniendo en cuenta que en las amasadas previas no se habían producido un descenso en el cono de Abrams de más de 10 mm y como además se incorpora fibras a la mezcla del hormigón, se ha optado por utilizar el cono invertido para medir la docilidad de la mezcla siguiendo las indicaciones que marca la norma UNE 83503 “Hormigones con fibras. Medida de la docilidad por medio del cono invertido” (Aenor 2004) y la del consistómetro Vebe para medir el asentamiento y por lo tanto la docilidad de la mezcla según la Norma UNE-EN 12350-3 “Ensayos de hormigón fresco. Parte 3: Ensayo Vebe” (Aenor 2006).

El ensayo de asentamiento del cono de Abrams se ha realizado según marca la Norma UNE-EN 12350-2 ya descrito en la fase experimental y la media de los resultados obtenidos en esta fase definitiva en las diferentes amasadas están reflejadas en la Tabla 5.2

Imagen 5.1 Ensayo de asentamiento

El ensayo de la medida de la docilidad por medio del cono invertido es específico de los hormigones con fibras para determinar la docilidad de estos HRF. El ensayo se ha realizado siguiendo las indicaciones de la Norma UNE 83503 y consiste en medir el tiempo que tarda en vaciarse de hormigón el cono invertido colgado de la tapa de un recipiente de 355 ± 2

mm de diámetro y de 305 ±2 mm de altura de tal forma que la base más pequeña del cono quede a 100 ±5 mm del fondo del recipiente.

El cono invertido se llena de hormigón en tres capas de un tercio del volumen del mismo, evitando compactar cada capa pero alisándola por medio de la barra para evitar la existencia de huecos. Una vez lleno se alisa con la paleta o la barra. A continuación y midiendo el tiempo que transcurre, se vibra el cono con un vibrador de aguja de 25 ±3 mm de diámetro y con una frecuencia mínima de 7000 ciclos/min, situándole vertical y centrado en la base superior del cono y haciéndole descender ya vibrando hasta el fondo del recipiente en 3 ±1 segundos, evitando tocar el cono con el vibrador. Se detiene el vibrador cuando el cono quede vacío es decir cuando llegue a ser visible el extremo inferior del mismo, midiendo el tiempo de vaciado.

Imagen 5.2 Ensayo del Cono invertido

Los resultados medios de los tiempos de vaciado del cono invertido en las amasadas definitivas se muestran en la Tabla 5.2

El ensayo del consistómetro Vebe consta de dos fases, en la primera se mide el asentamiento del hormigón fresco previamente compactado en el molde con forma de tronco de cono (cono de Abrams) determinado su consistencia y posteriormente se pone en marcha la mesa vibradora del aparato y se mide el tiempo que tarda la cara inferior del disco transparente en cubrirse totalmente de pasta (tiempo Vebe).

Imagen 5.3 Ensayo consistómetro Vebe

Dosificación EL SL ML

Cono de Abrams (mm) 140 60 130

Cono invertido (seg) 67 92 75

Vebe tiempo contacto (seg) 4 5 4

Tabla 5.2 Resultados de asentamientos, cono invertido y webe

Si tenemos que definir la consistencia obtenida con los diferentes métodos utilizados para definir la consistencia de las amasadas, podemos apreciar resultados bastante contradictorios.

Según el cono de Abrams las amasadas EL y ML tienen consistencia fluida, mientras que la SL refleja una consistencia blanda en el límite con la plástica. Sin embargo para HRF es el método menos recomendado para evaluar la consistencia de estos hormigones como se ha mencionado anteriormente en el capítulo 2.4.1.

Con respecto a los otros dos métodos recomendados para los HRF, consistómetro Vebe y el cono invertido, los valores de tiempo recomendados para utilizar como método apropiado el consistómetro Vebe oscilan entre 5 y 30 segundos para que el disco transparente se cubra totalmente de pasta, en nuestro ensayo obtenemos 4, 5 y 4 segundos que

están en el límite inferior de la franja recomendada y que representa una consistencia semi-seca.

Por lo que respecta al cono invertido los valores normales en segundos para vaciar el cono invertido que se recomienda para utilizar este sistema van de 10 a 30 segundos, por lo que los valores obtenidos en las diferentes amasadas 67, 92 y 75 segundos se disparan muy por lo alto.

Hay que tener en cuenta que estas recomendaciones de valores están establecidas para hormigones convencionales con fibras, es decir con áridos naturales. Al intervenir en la mezcla de nuestro hormigón con fibras escoria negra en un porcentaje aproximado del 75% del árido total, todos estos valores correlacionados de estos tres métodos se trastocan, no pudiendo relacionarles entre sí. El beneficio obtenido por el vibrado en un HRF convencional, anulando la rigidez estática que las fibras proporcionan al hormigón, se ve descompensado con la rugosidad de las escorias que impiden ese deslizamiento.

En base a estos razonamientos se cree que los valores del cono de Abrams pueden considerarse válidos para establecer los tipos de consistencia de las diferentes amasadas, reconociendo que el hormigón conseguido es un hormigón poco trabajable como consecuencia de los dos componentes, fibras y escorias, que intervienen en su fabricación. No obstante el hormigón que se está estudiando en esta tesis, es para utilizarlo en pavimento y soleras que aunque sea poco trabajable, su puesta en obra no es tan exigente como pudiera serlo para otros elementos constructivos y tampoco requiere obligatoriamente bombeo para su puesta en obra.