Los medios de comunicación masiva y los jóvenes

Los jóvenes en los tiempos actuales son los principales consumidores de los medios de comunicación masiva, conocen y se desenvuelven como pez en el agua en el mundo de los medios masivos y digitales.

Los creadores y productores de contenido para los medios, ven a los jóvenes como su audiencia predilecta y enfocan sus esfuerzos en contentar a este sector de la población. Hay dos medios en particular, que son los más usados por los jóvenes, la televisión y la Internet; son estos medios los que llevan la delantera en cuanto a los niveles de consumo por parte de la juventud.

La televisión es un medio masivo de alto consumo, un joven entre 15 a 18 años ve televisión entre dos a cuatro horas al día, aunque hay jóvenes que observan más de cuatro horas al día este medio, dependiendo de factores como el consumo en fines de semana o periodos vacacionales que son épocas en donde los niveles de consumo aumenta.

También hay otros aspectos que producen un incremento en el consumo televisivo por parte de los jóvenes, como son: 1) Hay variedad y contenido televisivo atractivo para este grupo. 2) Muchos jóvenes tienen un televisor en su dormitorio. 3) La televisión es utilizada como una “niñera” mientras los padres se encuentran trabajando. 4) Es un instrumento de sociabilización entre los jóvenes, muchos de sus temas de conversación gira en torno a este medio.

La variedad de programas y series televisivas, es un factor que atrae a los jóvenes para que vean este aparato audiovisual. Los jóvenes prefieren los programas y canales de índole musical, series de televisión juveniles y realitys shows, motivo por el cual programas como The Simpsons, Walking Dead, La Voz, etc. Han tenido tanto éxito en la audiencia juvenil. Sin embargo estudios como los realizados por la agencia española Nielsen, demuestran que el consumo televisivo está decayendo año tras año desde el 2012. En el año 2014, los jóvenes entre 18 y 24 años, vieron televisión en un promedio de 19 horas semanales, es decir, dos horas menos que en el año 2013. Desde el año 2012 hasta la actualidad se ha producido un descenso de 45 minutos al día de consumo televisivo. (Suárez, 2015: párr. 4)

Entre las causas que encontramos para este descenso del consumo de televisión tradicional, esta principalmente el auge de las plataformas de video on line y la televisión por Internet. Plataformas como YouTube son seguidas por millones de personas, en especial jóvenes, que dedican varias horas al día para observar los contenidos que se proyectan por este medio. Sin embargo la televisión tradicional sigue siendo líder en el consumo de medios por parte de los jóvenes. (Aierbe y Orejudo. 2009: 293)

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El internet es otro medio muy utilizado por los jóvenes y poco a poco está desbancando a la televisión como principal medio de consumo por parte de la adolescencia y juventud, es tal la consolidación de la Internet, que fue uno de los factores para el descenso de lectura de los medios impresos en especial por los jóvenes, que prefieren informarse a través de los medios digitales.

Este medio interactivo es utilizado por los jóvenes para realizar varias actividades y estudios como los realizados por la Universidad Camilo José Cela en España, que investigó sobre los hábitos y usos que hacen los jóvenes de este medio, demuestran lo siguiente:

- Los jóvenes en su mayoría, utilizan la computadora para conectarse a Internet, escucha música y ver videos.

- Un porcentaje menor utiliza su computadora e Internet para realizar sus tareas escolares. - El consumo de Internet por parte de los jóvenes se enfoca en su mayor parte para la descarga de contenidos (juegos, musiva y videos) así como en la visita de portales web que ofrecen ver videos, series de televisión y una menor cantidad utilizan para visitar páginas de contenidos variados y para entrar en blogs o salas de chat.

- Un punto aparte es el consumo de redes sociales, que son muy visitadas por la mayoría de jóvenes entre 18 a 25 años, que utilizan estos recursos interactivos principalmente para subir fotos y comentar en los muros de sus amigos, mandar mensajes privados y actualizar el perfil y jugar (Yuste, 2015: pág. 183, párr. 5-7).

Un aspecto fundamental que debemos tomar en cuenta, es que la juventud es vista por sectores como la publicidad y los medios mercantilistas como futuros compradores y consumidores de sus productos, sin importar que los contenidos que ofrezcan sean beneficiosos para el crecimiento personal y en valores para ellos.

Lamentablemente en la etapa de la adolescencia, es donde las personas están más vulnerables a ser influenciadas por programas o contenidos que se trasmiten en los medios, lo que es aprovechado por estos, para bombardear a este grupo social con publicidad y programas basura que solo buscan tener altos índices de audiencia, dejando de lado aspectos como la educación y orientación, que forman parte de las funciones que debe cumplir un medio de comunicación.

La televisión e Internet son especialistas en crear modelos o estereotipos de personas o situaciones en donde se rinden culto a la violencia, al sexo y al consumo de drogas, que son seguidos por millones de jóvenes que ven ellos un modelo a seguir, provocando situaciones

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que son considerados como problemas sociales como los embarazos en adolescentes y la formación de pandillas juveniles.

Leonard Eron, una autoridad en el tema de la influencia de los medios de comunicación en los niños dijo:

"Ya no queda duda alguna de que la exposición repetida a la violencia en la televisión es una de las causas del comportamiento agresivo, el crimen y la violencia en la sociedad. La evidencia procede tanto de estudios realizados en laboratorios como de la vida real. La violencia de la televisión afecta a los niños de ambos sexos, de todas las edades y de todos los niveles socioeconómicos y de inteligencia. Estos efectos no se limitan a este país ni a los niños predispuestos a la agresividad". (Hohf, 2009: párr. 9).

Siendo responsabilidad de los padres, profesores y personas que intervengan en la educación de los jóvenes. El controlar lo que observan y consumen los jóvenes en los medios de comunicación y orientarles sobre los contenidos que se emiten en los medios, para que no tergiversen lo que observan y saquen conclusiones equivocadas que lleven a realizar acciones equivocadas.