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Psicologías científicas alemanas no wundtianas

2. La psicología científica alemana

2.2. Psicologías científicas alemanas no wundtianas

Aunque la psicología científica en las últimas décadas del siglo XIX tuvo en Alemania como foco central el enfoque experimental wundtiano enclavado en la Universidad de Leipzig, existieron, además, otros centros de trabajo que, sien- do independientes del Laboratorio de Leipzig, realizaron un profundo trabajo experimental y contribuyeron, por la misma época, con aportaciones notables a la configuración de la psicología científica experimental. Como señala Antonio Caparrós:

rimental y la función fundante del wundtismo no supuso la integración automática de todos los desarrollos filosóficos, fisiológicos o de otro tipo, generadores de conoci- miento psicológico en la nueva ciencia”

Caparrós, A. (1984). La psicología y sus perfiles. Introducción a la cultura psicológica. Barcelona: Barcanova (pág.126).

El contexto universitario alemán, donde se estaba produciendo el avance hacia la cientificidad de la psicología, se puede imaginar a través del siguiente gráfico.

En el gráfico aparecen las más importantes universidades alemanas con sus correspondientes autores. Fue en la Universidad de Leipzig, de la mano de Wundt, donde se generó el prototipo de la psicología que iba a imperar durante los pró- ximos años. Sin embargo, hubo otras universidades como la de Berlín, la de Göttingen o la de Würzburg que dejaron, a través de los autores que desarrolla- ron allí sus trabajos más representativos, una especial huella en la psicología ale- mana de aquellos momentos.

Algunos de estos autores defendieron el trabajo en el laboratorio, mientras que otros respaldaron una psicología empírica alejada de la investigación experimen-

tal. En los próximos apartados nos referiremos a estas posiciones alternativas a la de Wundt que descansan, principalmente, en manos de hombres como Brentano, Ebbinghaus, Dilthey, Hering, G.E. Müller, o, Stumpf. Dejamos para el capítulo IV los trabajos llevados a cabo sobre el pensamiento por parte de los componentes de la Escuela de Würzburg, porque están mejor enmarcados dentro del proceso del surgimiento de las diferentes escuelas o corrientes aparecidas durante la pri- mera mitad del siglo XX.

2.2.1. Hermann Ebbinghaus y el estudio experimental de la memoria

Hermann Ebbinghaus (1850-1909) inició sus estudios universitarios en 1867, interesándose primero por la filología y la historia, para decidirse, finalmente, por la filosofía. El 16 de agosto de 1873 se doctoró en Filosofía en la Universidad de Bonn con un trabajo sobre Eduard von Hartmann. Los años siguientes a su doc- torado hasta su incorporación a la Universidad de Berlín como Privatdozent, son unos años de difícil concreción en los que se dedicó a su formación independien- te y a la enseñanza como maestro o tutor. Fue durante estos años cuando Ebbinghaus lee los Elemente der Psychophysik de Fechner. Este libro parece ser que fue el que le inspiró la metodología para realizar sus sistemáticos experimentos sobre la memoria. Podemos hallar así su interés por la memoria, ligado a su labor educativa y la lectura de los Elemente, aunque probablemente podemos encon- trar también una cierta conexión con el tema de su tesis doctoral, al considerar los aspectos del recuerdo inconsciente.

Sus primeros experimentos de memoria fueron realizados entre 1879 y 1880 con interés de obtener su habilitación en la Universidad de Berlín. Justamente durante su estancia en esta Universidad es cuando realiza la publicación de su obra más famosa Über das Gedächtnis. Untersuchungen zur experimentellen Psychologie (“Sobre la memoria. Estudios en Psicología Experimental”) en 1885, que recoge tanto los experimentos que le sirvieron para su habilitación, como los realizados en el período de 1883 a 1884, y que le permitió obtener el nombramiento como

ausserordentlicher Professor (profesor asociado).

La trayectoria académica e investigadora de H. Ebbinghaus

La trayectoria académica e investigadora de Ebbinghaus a partir de su habilitación en la Universidad de Berlín puede dividirse en dos grandes etapas:

desde 1880 a 1894 y se centra fundamentalmente en investigaciones monográficas de gran especificidad; es el período en el que se ubica la publicación de Über das Gedächtnis en 1885.

• Una segunda etapa es la que recoge su vida académica en las Universidades de Breslau y Halle, en la que, al margen de algunos pequeños trabajos monográficos entre los que destaca su famosa prueba de inteligencia, centró sus preferencias hacia la preparación y elaboración de sus dos obras de carácter generaly sistemáti- co, Abriss der Psychologie (“Compendio de Psicología” ) y Grundzüge der Psychologie (“Principios de Psicología”), que tuvieron una gran aceptación en su época.

Los trabajos experimentales llevados a cabo por Ebbinghaus en la Universidad de Berlín representaban un cierto atrevimiento en aquella época, puesto que tanto Wundt como Fechner, pioneros de la psicología científica, no veían viable el estudio experimental de la memoria. Sin embargo, los resultados de sus inves- tigaciones no dejaron de impresionar, como ha indicado el historiador español Antonio Caparrós, por su seguridad cuantitativo-experimental, rigor, originalidad, e imaginación innovadora, así como por su estilo claro, sobrio, preciso y enérgi- co. Con esta aportación Ebbinghaus se convertía en el pionero del estudio de este proceso, ejerciendo una profunda influencia sobre la manera de abordar la investigación de la memoria. Con su sistema de trabajo, rompió con los méto- dos introspectivos aún vigentes en el laboratorio de Wundt en Leipzig y abrió, al mismo tiempo, un nuevo campo de investigación con el que demostró la posibilidad de utilizar el método experimental en los procesos cognitivos.

Los estudios sobre la memoria

Ebbinghaus era consciente de la complejidad de la memoria humana, pero ignoró expresamente esta dificultad intentando demostrar que su estudio era posible. Si el pro- blema de la memoria era complejo, la solución, para Ebbinghaus, era simplificarlo para convertirlo en abordable.

En síntesis, las investigaciones de Ebbinghaus sobre la memoria consistieron en la presentación de listas de sílabas, generalmente sin sentido (llegó a generar alrededor de unas 2.300), que bajo su criterio, permitían un mejor control del material y de la situación experimental. Estudió los efectos de la longitud de la lista, del número de repe- ticiones y la amplitud del intervalo de retención. Analizó la evolución temporal de la memoria y estableció lo que hoy conocemos como “la curva del olvido”, encontran- do que éste ocurría rápidamente al principio pero se enlentecía después.

Conviene destacar que, a pesar de la extrema meticulosidad que Ebbinghaus impu- so a sus investigaciones, sus experimentos sobre la memoria fueron realizados tenien-

do como único sujeto experimental al propio Ebbinghaus y no se llevaron a cabo en ningún laboratorio, ni formal ni informal de psicología, aunque ello no le impidió man- tener unas condiciones experimentales constantes y que sus experimentos tuvieran el rigor necesario que exigía la metodología científica. Desde sus publicaciones, Ebbinghaus remarcó que la ampliación de los conocimientos sobre la memoria no podía hacerse sin la utilización de los métodos de las ciencias naturales.

Inspirándose en Fechner, buscó una medida indirecta de la memoria basada en el método del ahorro a la hora del reaprendizaje, medido generalmente en función del número de repeticiones. Este planteamiento es su mayor invención, puesto que fun- damentándose en el tiempo o los ensayos empleados en un primer aprendizaje y el tiem- po y los ensayos empleados para el reaprendizaje, los relacionó con la variable del intervalo de retención entre el primer aprendizaje y el reaprendizaje. Este paradigma básico proporciona datos consistentes y fácilmente replicables relativos a la tasa de olvido en el tiempo.

Ebbinghaus propició, así, el inicio del estudio objetivo de la memoria, introducien- do un material nuevo (las sílabas sin sentido), un procedimiento experimental (reapren- dizaje o método del ahorro) y resultados cuantitativos que le permitieron apoyar sus conclusiones. Su trabajo sobre la memoria recogido en Über das Gedächtnis tuvo, como hemos dicho, el mérito de mostrar como un problema aparentemente inabordable podía ser tratado experimentalmente.

En resumen, con respecto a la memoria Ebbinghaus:

1) Abandonó la confianza en el testimonio de la instrospección en favor de la evidencia objetiva, usando el método del reaprendizaje y del aho- rro, pudiendo con él inferir la retención que se producía.

2) Inventó un material calibrado (sílabas sin sentido) que permitía un mejor control experimental.

3) Criticó las leyes asociativas de la contigüidad y de la sucesión inmedia- ta, para introducir un estudio cuantitativo de las asociaciones remotas. 4) Hizo uso de nociones estadísticas y matemáticas para medir la signifi- cancia de sus hallazgos y para formular sus resultados de acuerdo con un “modelo” matemático.

Pero su mérito histórico no debe limitarse exclusivamente a su trabajo sobre la memoria, aunque éste haya sido habitualmente su referente; hay que consi- derar, por ejemplo, la postura experimentalista de Ebbinghaus y su afán de hacer de la psicología una ciencia experimental cuantitativa similar metodológica- mente, y no conceptualmente, a las ciencias naturales, su test para el examen de las aptitudes intelectuales (1897), probablemente una de las primeras prue-

bas de inteligencia y que fue un trabajo auténticamente pionero en Alemania como investigación aplicada, o su deseo institucionalizador al crear, junto a König, un órgano de difusión independiente de los dictámenes wundtianos como lo fue el Zeitschrift für Psychologie und Physiologie der Sinnesorgane y fundar en Berlín el que puede ser considerado el tercer laboratorio de Psicología Experimental de Alemania.

Repercusión del trabajo de Ebbinghaus

Ebbinghaus no creó una escuela, a pesar del hecho de que tuvo algunos personajes conocidos entre sus discípulos, como Max Dessoir (1867-1947), William Stern (1871- 1938) u Otto Lipmann (1880-1933). Su Über das Gedächtnis, pequeña en cuanto a exten- sión, generó un pronto reconocimiento y representó una fuente fecunda para la investigación posterior, que permitió la apertura experimental de otros procesos superiores –como el pensamiento en la Escuela de Würzburg–, aunque tuvo sus crí- ticas, éstas fueron insignificantes en relación a la acogida que tuvo la obra en distin- tos ámbitos, como en la revista “Mind”, donde Jacobs recomienda la lectura de la obra, o William James, que reconoció la aportación de Ebbinghaus en sus Principles of Psychology, o Titchener que la recomendaba a sus estudiantes de Cornell. En 1890, Ebbinghaus había adquirido un cierto renombre, que hizo que la Universidad de Cornell en Estados Unidos, por medio de Schurman, le propusiera ocupar una cáte- dra con su propio laboratorio de psicología y la posibilidad de participar en la publi- cación de una nueva revista. Motivos de índole personal y familiar hicieron recha- zar a Ebbinghaus esta oferta, que quizá hubiera cambiado el perfil de la Historia de la psicología.

Ebbinghaus aportó a la naciente psicología experimental un rigor cientí- fico y un marco metodológico que permitía la paulatina separación de la psicología de la filosofía. Aunque como acabamos de decir no creó una escuela, su estela se extendió en la tradición funcionalista y asociacionis- ta del estudio de la memoria. La posición teórica de Ebbinghaus puede ser catalogada de empírica, ateórica o carente de escuela, orientada a la inves- tigación y ecléctica, lo cual le imprime un cierto carácter independiente de las escuelas dominantes en esa época en Alemania y puede ser consi- derado, en cierta medida, como un funcionalista europeo.

2.2.2. Georg Elias Müller y su labor en el Laboratorio de Psicología Experimental de la Universidad de Göttingen

Georg Elias Müller (1850-1934) fue uno de los “grandes gigantes” de la ini- cial psicología científica alemana. Sus estudios universitarios le llevaron por las Universidades de Leipzig y Berlín donde estudió filosofía e historia, aunque su for- mación definitiva se halla bajo la tutela de Lotze, del que fue amigo personal y quien le influenció intensamente en su pensamiento. El grado de doctor en Filosofía lo obtiene en la Universidad de Göttingen, bajo la dirección de Lotze, en 1873 con el trabajo titulado Zur theorie der Sinnlichen Aufmerksamkeit (Teoría

de la atención sensible), a juicio de algunos, el primer estudio empírico acerca de

la atención, citado ampliamente durante décadas.

Müller y la Universidad de Göttingen

La vida profesional de G.E. Müller está vinculada casi exclusivamente a la Universidad de Göttingen, donde se inicia como dozent en 1876, y acaba como catedrático en 1921 con su jubilación. Con excepción del año 1880, que ocupó una cátedra de Filosofía en Czernowitz, la labor académica de Müller debe ser siempre referida a su estancia duran- te cuarenta años en la Universidad de Göttingen4. La cátedra de Filosofía que ocupó en esa Universidad –de gran prestigio– fue “herencia” de los dos pensadores que más le habían influenciado: J.F. Herbart, quien permaneció en ella durante ocho años y R.H. Lotze, quien la mantuvo durante treinta y siete años, dejándola vacante en 1881 cuan- do aceptó la cátedra ofrecida por la Universidad de Berlín.

Müller se dedicó a la psicología siguiendo inicialmente el camino trazado por Lotze para convertirse luego en un psicólogo riguroso, crítico y experimentalista –con Ebbinghaus y Titchener fue uno de los que más batalló por mantener separadas la Filosofía y la Psicología–. En 1881 funda su Laboratorio de Psicología Experimental, que gozó de un gran reconocimiento y captó el interés de múltiples estudiantes3 que pasaron algunos trimestres e incluso años preparándose e investigando bajo la supervisión de Müller. El ímpetu y buen hacer de G.E. Müller hicieron de su labo- ratorio el segundo más importante de Alemania, por debajo sólo del de Leipzig.

4. Discípulos de G.E. Müller. Entre sus alumnos se cuentan Ach, Henri, Jaensch, Jost, Katz, Kroh, Külpe, Martin, Mc Gamble, Pilzecker, Rubin, Rupp, Schumann, Spearman, Viqueira, entre otros; algunos de ellos serían antes o después discípulos de Stumpf en Berlín, de Külpe y Marbe en Würzburg, o de Wundt en Leipzig.

Analizando la labor científica emprendida por Müller, podemos determinar dos etapas en su vida productiva:

• Primera etapa: ocuparía aproximadamente las décadas de 1880 y 1890 y estaría centrada en la problemática de la psicofísica y del estudio experimental de la memoria, como continuación a los trabajos de Ebbinghaus.

• Segunda etapa: comenzaría con el siglo XX y perduraría hasta su muer- te, versando sus investigaciones sobre el área de la percepción visual, en una línea nativista muy cercana a la de E. Hering.

En el campo de la psicofísica, haciendo uso de su gran capacidad crítica, refu- tó a Fechner e hizo una revisión profunda de la metodología psicofísica. En 1889 publicó con Schumann un trabajo sobre pesos, que mostró claramente la inciden- cia de las actitudes. Su trabajo determinó que los juicios sobre lo “más pesado” y lo “menos pesado” dependían de las anticipaciones musculares del estímulo. Todos estos trabajos le llevaron a convertirse en el líder de la investigación en esta área, tras la muerte de Fechner.

En el estudio sobre la memoria, Müller trabajó –siguiendo, como hemos dicho, a Ebbinghaus– en la mejora de los procedimientos de investigación, preparando, incluso, unas reglas para la formación de sílabas sin sentido.

Contribuciones más significativas de Müller al campo de la investigación de la memoria

La ley de Jost, elaborada inicialmente por Pilzecker y Müller y publicada por su alum- no Jost, cuya formulación afirma que: “cuando dos asociaciones tienen la misma intensidad, la repetición fortalecerá a la más antigua de ellas”. Esta teoría de Jost explicaba la ventaja que tiene distribuir las repeticiones en el tiempo.

La ley de Müller-Schumann que manifiesta que: “cuando dos ítems se asocian resulta más difícil luego que cualquiera de ellos se una a un tercero”.

La teoría de la interferencia en el olvido: en esta teoría el olvido no se produce únicamente en función del desuso o desvanecimiento de la información almace- nada en la memoria, sino que es fruto de la interferencia que produce el nuevo mate- rial adquirido sobre el recuerdo de lo aprendido anteriormente.

Respecto a los problemas psicofisiológicos relacionados con la percepción visual, se centró especialmente en la teoría del color de E. Hering, psicofisiólogo de la

Universidad de Leipzig, de tendencia nativista y de gran relieve personal, que en más de una ocasión, había mantenido debates abiertos contra las posturas empi- ristas de von Helmholtz. En este sentido, Müller investiga sobre las tres sustancias retinianas que Hering había señalado como las productoras del color en la visión, afirmando que dichas sustancias eran de carácter químico y no metabólicas como había postulado ese autor. Sus trabajos y los de sus alumnos en esta área, repercu- tieron sobre las nuevas orientaciones de la psicología de la Gestalt.

Hering y los psicofisiólogos nativistas

Aunque en Alemania la psicología científica experimental contó entre sus principales promotores a una serie de fisiólogos que como Weber, Von Helmholtz o Wundt abor- daron problemas de la mente desde posiciones teóricas acordes con el asociacionismo, también existieron, en aquella época, un considerable número de fisiólogos que igual- mente participaron muy eficazmente en la constitución de la psicología científica en los ámbitos que entonces acaparaban el interés, como la psicofísica y la psicofisiolo- gía sensorial visual y auditiva, aportando en estos dominios teorías primordialmente vinculadas a las orientaciones nativistas. Los más importante psicofisiólogos de orien- tación nativista fueron, A.W. Wolkmann (1800-1877), K. von Vierordt (1818-1884), H. Aubert (1826-1892), W. Preyer (1842-1897), B. Exner (1846-1926), H. Zwaardemaker (1857-1930), M. von Frey (1852-1932), A. Konig (1856-1901) y E. Hering (1834-1918). Hering destacó por su influencia, no sólo en G.M. Müller, sino también en destacadas figuras como Stumpf y los psicólogos de la Gestalt.

2.2.3. Las psicología empíricas

Los autores que hemos ido comentando hasta el momento, aunque discrepan- tes en algunos aspectos con el sistema wundtiano, estarían de acuerdo con las bases paradigmáticas establecidas por él. Creerían, pues, en una psicología de la con- ciencia que estudiaba sus contenidos a través de condiciones experimentales, con objeto de asimilarla a las ciencias naturales. Pero el experimentalismo psico- lógico, aunque fue lo que imprimió más fuerza a la psicología del siglo XIX, tanto en Europa como en Norteamérica, también tuvo sectores críticos que no vieron adecuada su orientación positivista enfocada al estudio experimental.

La controversia estuvo centrada en la inadecuada identificación de la psi- cología con las ciencias naturales, especialmente con la biología-fisiolo- gía, y en el recurso a los métodos de estas ciencias para fundamentarla.

Estas tendencias contrapuestas fueron sobre todo centroeuropeas, princi- palmente alemanas y austríacas, y aunque nunca se mostraron como actitudes perfectamente delimitadas o sistemáticas, sirvieron de contrapunto, con sus deba- tes y nuevas fórmulas teóricas, a la psicología del contenido, desarrollada, espe- cialmente, desde Leipzig, ofreciendo una psicología como ciencia empírica, filo- sófico-argumentativa vinculada a los datos científicos, a la propia experiencia, pero alejada del experimento en el laboratorio.

Muchos de estos cultivadores de la psicología, ubicada como sabéis en facul- tades de Filosofía, prefirieron no desgajarla del habitual tratamiento de las cien- cias culturales y del espíritu, ciencias que siempre habían tenido una estrecha rela- ción con la filosofía. Los enfoques de estos autores discrepantes de las formulaciones y orientaciones wundtianas fueron más humanistas que naturalistas.

Aunque el valor de las tendencias de muchos de estos autores en el momen- to en que se estaba iniciando la psicología científica fue relativo, no cabe duda de la importancia de su presencia para las futuras generaciones de psicólogos alemanes, que se vieron intensamente influenciados por ellos, como es el caso de los psicólogos de la Gestalt. Además, con su presencia