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El cultivo del almendro en zonas muy frías con variedades de floración extra-tardía

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16 Vida RURAL(1/Octubre/2013)

Federico Dicenta y José Egea.

Grupo de Mejora Genética de Frutales. Consejo Superior de InvestigacionesCientíficas(CSIC). Centro de Edafología y Biología Aplicada del Segura (CEBAS). Espinardo (Murcia).

E

spaña, con sus 450.000 ha de almen-dros, es uno de los principales produc-tores a nivel mundial. Sin embargo la productividad media es extremadamen-te baja, en torno a los 100 kg de almendra-grano/ha, lo que frecuentemente no llega a cu-brir los costes de producción. Además, a pesar de que la superficie se ha mantenido más o menos constante durante los últimos años, la producción presenta importantes fluctuaciones anuales, lo que nos indica que algo no esta-mos haciendo bien. Las causas de esta baja productividad son principalmente tres: el culti-vo en secano, la polinización deficiente y las heladas.

La obtención en los programas de mejora de variedades autocompatibles y de floración tardía o extra-tardía, está contribuyendo a me-jorar la situación y permite actualmente su cul-tivo rentable en zonas donde anteriormente se helaba o no se consideraba su cultivo, supe-rando además los problemas tradicionales de polinización (macheo) frecuentes con las va-riedades autoincompatibles.

Por otro lado, las cada vez más frecuentes plantaciones en regadío y bien cultivadas están obteniendo producciones muy elevadas, lo que pone de manifiesto la importancia del agua en la producción y reducción de costes en este cultivo.

El cultivo del almendro

presenta muchas ventajas

frente a otros frutales,

derivadas de su adaptación

a ambientes muy distintos, su

posibilidad de mecanización,

de la buena conservación de

la almendra y de los elevados

precios actuales que parece

que se van a mantener en

los próximos años. La

obtención de nuevas

variedades autocompatibles y

de floración tardía ha

supuesto un enorme avance

para el almendro en muchas

áreas frías de cultivo de

nuestro país. Sin embargo, en

algunas zonas la floración de

estas variedades no es

suficientemente tardía

para escapar a las heladas,

lo que puede solucionarse

cultivando las nuevas

variedades de floración

extra-tardía.

Autocompatibilidad floral, maduración temprana y resistencia a enfermedades, son otras de sus características

El cultivo del

almendro en zonas

muy frías

con variedades de

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Otro aspecto que merece la pena señalar es la comercialización de un excesivo número de variedades que frecuentemente se venden mezcladas, incluso con almendras amargas. Aún en el caso de Marcona y Desmayo Largue-ta que se comercializan por separado, frecuen-temente vienen mezcladas con su respectiva variedad polinizadora o incluso con otras va-riedades de morfología similar. En este sentido, el reciente establecimiento de grandes planta-ciones monovarietales de variedades autocom-patibles, está facilitando la comercialización de un producto homogéneo y con garantía varietal.

Caracteres de interés en

zonas frías

A nuestro juicio son cuatro los caracteres especialmente importantes para el cultivo del almendro en las zonas frías: la floración tardía, la autocompatibilidad floral, la maduración temprana y la resistencia a enfermedades. La floración tardía

El almendro soporta temperaturas muy ba-jas cuando está en reposo durante el invierno, incluso por debajo de -20ºC. Sin embargo, tanto las flores como los frutos recién cuaja-dos son especialmente sensibles a las bajas temperaturas y pueden dañarse irreversible-mente durante las heladas. Algunas horas por debajo de -2ºC son suficientes para perder la producción. Por ello es muy importante que los almendros florezcan cuando el riesgo de hela-da es bajo. Esto se consigue mediante el culti-vo de variedades de floración tardía o extra-tar-día. Estas variedades florecen a finales de

mar-zo o en abril, cuando la probabilidad de que haya una helada se ha reducido notablemente. Está demostrado estadísticamente que cuanto más tarde sea la floración del almendro, menor es el número de años que sufriremos la pérdi-da de cosecha por helapérdi-da(figura 1). La autocompatibilidad floral

En estas zonas frías, la climatología adver-sa durante la floración dificulta el vuelo de las abejas, lo que en las plantaciones con varie-dades autoincompatibles supone una reduc-ción notable de la producreduc-ción. Por ello, espe-cialmente en estas zonas, debemos cultivar va-riedades autocompatibles. Estas vava-riedades son capaces de polinizarse ellas mismas (cada flor con su propio polen) incluso en ausencia de abejas. A pesar de ello, está demostrado que la presencia de abejas siempre incremen-ta la producción, por lo que es recomendable

introducir al menos 5 colmenas/ha. La planta-ción monovarietal de variedades autocompati-bles presenta muchas ventajas frente a la plan-tación tradicional con dos o más variedades, sobre todo en las condiciones de cultivo espa-ñolas en las zonas frías(cuadro I). Diversos trabajos han demostrado que la polinización es igual de eficiente con otra variedad que con-sigo misma y que las características del fruto no se ven afectadas (Dicenta y col. 2010). La maduración temprana

La maduración tardía en almendro es es-pecialmente un inconveniente en las zonas frí-as. Si la maduración es muy tardía podemos encontrarnos con el frío y las primeras lluvias del otoño, lo que retrasa progresivamente el proceso de apertura y secado del fruto. Esto es además importante por el desarrollo de hongos que, con los frutos, van a la partidora pudiendo

CUADRO I.

Ventajasde cultivar variedadesautocompatiblesen plantación monovarietal en comparación con lasplantacionestradicionalesde doso másvariedades autoincompatibles.

Plantación tradicional Plantación monovarietal (Autoincompatibles) (Autocompatibles)

Necesidad de cultivar juntas dos o más variedades

intercompatibles de floración coincidente. Sí No

Es obligatorio introducir colmenas en la parcela. Sí No1 Climatología favorable que permita el vuelo de las abejas. Sí No2 Recolectar separadamente las variedades por su maduración

diferente o frutos de distinta morfología. Sí No

La introducción del polinizador, normalmente menos interesante,

reduce el número de árboles de la variedad principal. Sí No 1No es obligatorio, pero muy recomendable para aumentar la producción.

2No es imprescindible pero es beneficioso para favorecer la polinización.

FIGURA 1

Riesgo de helada para las variedades tempranas Ferragnès y Penta en Caravaca, Murcia a 866 m de altitud.

En color se han señalado los periodos con riesgo de helada por debajo de -1ºC (en azul claro) y de -2ºC (en azul oscuro). Todas las temperaturas señaladas en la tabla son negativas.

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infectar las almendras. Hay un tipo de hongo,

Aspergillus, especialmente peligroso por pro-ducir aflatoxinas, sustancias cancerígenas que son estrictamente controladas en los merca-dos internacionales. Por otro lado, en las áreas tradicionales del viñedo, donde se está

produ-ciendo una expansión notable del almendro, viene bien recolectar la almendra antes de co-menzar la vendimia. Afortunadamente, la flora-ción y la maduraflora-ción son caracteres indepen-dientes y se pueden obtener variedades de flo-ración tardía y maduflo-ración temprana como

Marta, Antoñeta y Penta. En lafigura 2, se pre-sentan las épocas de floración y producción de algunas variedades de floración y maduración tempranas y tardías, a modo de ejemplo. Resistencia a enfermedades

En estas zonas frías y húmedas el desarro-llo de enfermedades fúngicas es mayor que en las zonas más secas. Las más importantes son la mancha ocre, la monilia yFusicocum. Estos hongos producen diferentes daños en las ho-jas, flores y tallos que repercuten enormemen-te en la producción. Los ataques de monilia en flor son determinantes porque pueden afectar a todas las flores, acabando con la producción. Por ello debemos de evitar las variedades muy susceptibles a estas enfermedades.

Elección del patrón

Al contrario que con las variedades, no hay muchos estudios sobre qué patrones de al-mendro son más idóneos para el regadío y pa-ra el secano. Los patrones híbridos como el GF677 y el Garnem han mostrado un excelen-te comportamiento en regadío. Son muy vigoro-sos y hacen rápidamente árboles grandes que ocupan la totalidad de la parcela.

En secano, estos patrones también se darrollan antes hasta cierto volumen en que es-tancan su crecimiento. Esto es debido a que su sistema radicular es muy superficial y se li-mita al entorno más próximo del tronco. En los años especialmente secos, cuando estos gran-des árboles están cargados de almendra, el sistema radicular no es capaz de aguantar la demanda de agua y se pueden perder muchos árboles. Ya se han observado muchos casos con este problema en los secanos más duros. Los patrones francos aguantan mucho mejor esta situación al tener un sistema radicular más profundo y extenso.

Importancia del cultivo en

la producción

Como hemos señalado, la elección del ma-terial vegetal en estas zonas es determinante para evitar la helada, asegurar la polinización, recolectar la almendra lo antes posible y tener árboles sanos y productivos durante mucho tiempo. Actualmente, estas variedades están en el mercado y el agricultor tiene diversas op-ciones.

La situación altamente favorable del mercado de la

almendra y la disponibilidad de variedades idóneas

suponen una oportunidad única para la explotación rentable

de este fruto seco, tan representativo de la agricultura

española, en áreas extremadamente frías

[

CUADRO II.

Recomendaciones para el cultivo del almendro en zonas frías. Erradicar al máximo las variedades de floración temprana

Reinjertar las plantaciones tradicionales, con variedades de floración tardía.

Evitar nuevas plantaciones con variedades tempranas (Marcona, Desmayo Largueta, Fernanda, etc.).

Generalizar el uso de variedades auto-compatibles

Determinar el comportamiento de las variedades tardías auto-compatibles en cada zona de cultivo (Antoñeta, Marta, Guara, Marinada, Vayro, Soleta, etc.).

Identificar las áreas con riesgo de frío extremo para aconsejar en ellas el empleo de variedades extra-tardías auto-compatibles, como Penta.

Cultivar variedades de maduración temprana

La maduración temprana permite la recolección de la almendra en condiciones secas evitando la proliferación de hongos y en consecuencia reduciendo el nivel de aflatoxinas.

Cuidar al máximo la polinización

Cuando se cultiven variedades auto-incompatibles, como Ferragnès, comprobar que tenemos al menos el 30% de árboles de la variedad polinizadora y suficientes colmenas (al menos 5 por ha). En caso contrario, reinjertar un 30% con una variedad auto-compatible que florezca al mismo tiempo.

Introducir colmenas siempre que se pueda, aunque se trate de una variedad auto-compatible y evitar los tratamientos fitosanitarios durantela floración.

Prestar la máxima atención al aprovechamiento del agua

Desfondar la parcela antes de la plantación. Alternativamente, hacer grandes hoyos con retroexcavadora.

Evitar la evaporación trabajando el suelo adecuadamente y evitar las malas hierbas.

Aumentar la superficie regada cuando sea posible. A más riego, más rentabilidad.

No reducir los marcos de plantación por debajo de 7 m.

Cuidar el estado sanitario del árbol

Evitar el empleo de variedades muy susceptibles a enfermedades criptogámicas.

Realizar los tratamientos fitosanitarios adecuados.

FIGURA 2

Época de floración y maduración de algunas variedades donde se observa la independencia de estos dos caracteres de gran importancia en las zonas frías. Penta es la variedad de ciclo más corto y Desmayo Largueta la de ciclo más largo.

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Sin embargo, la parte más olvidada del almendro es el cultivo. Si queremos tener plantaciones rentables tenemos que esmerarnos en cuidar los árboles. Un cultivo esmerado puede duplicar o incluso tri-plicar la producción respecto a otro mediocre y, por supuesto, reducir notablemente los costes de producción. Cada inversión acertada que realicemos en la plantación el almendro nos la devolverá con creces, sobre todo con los precios actuales(cuadro II).

Aspectos fundamentales del cultivo son la elección y preparación del terreno, la dotación de agua y fertilizantes y los tratamientos fito-sanitarios.

Elección y preparación del terreno

Ya va siendo hora de que no plantemos los almendros en la pe-or tierra que tengamos, con la excusa de que el almendro se adapta muy bien a todo. El almendro, al igual que cualquier otro frutal, se des-arrollará mejor si lo colocamos en una tierra buena y hacemos un buen hoyo con fosfato y materia orgánica en el fondo donde pueda desarrollar pronto su sistema radicular. El suelo deberá estar bien la-brado y sin malas hierbas que compitan con el árbol por el agua. La dotación de agua y fertilizantes

Como media, una hectárea con riego adecuado puede producir unos 2.000 kg de almendra-grano, lo mismo que 10 o 20 ha de se-cano. Sin embargo en el secano tendremos que podar, tratar y vibrar más árboles, cultivar más hectáreas, etc. Es decir, con una hectárea tendremos menos gastos y los mismos ingresos. Por eso, cuando sea posible, recomendamos siempre regar los almendros todo lo que sea posible. En California para obtener los 2.000-3.000 kg de almendra-grano/ha riegan con 10.000 m3/ha. Además, es evidente que un co-rrecto programa de fertirrigación en regadío o de aportación de nu-trientes en secano es determinante para el crecimiento del árbol y conseguir una producción estable año a año. El riego por goteo supo-ne un aprovechamiento del agua y por tanto de su rendimiento que casi duplica al del riego por inundación.

Los tratamientos fitosanitarios

El almendro es uno de los frutales que requieren menos cuidados en este sentido, pero especialmente en las zonas frías debemos es-tar atentos a los tratamientos de invierno (para prevenir el desarrollo de hongos en la primavera), en botón rosa (contra la monilia), en pri-mavera (contra los pulgones y hongos) y en verano contra el tigre. Una plaga de especial relevancia es el gusano cabezudo, contra el cual hay tratamientos fitosanitarios eficientes (Soler y Dicenta 2013). El patrón franco, por sus raíces más profundas, es más resistente al cabezudo que los híbridos, que tienen unas raíces más superficiales cerca del tronco, donde el adulto del cabezudo pone los huevos y las larvas penetran en sus raíces con facilidad.

Perspectivas económicas

para el almendro

Parece que vienen buenos tiempos para los productores de al-mendra y que debemos aprovecharlos. El incremento que han sufrido recientemente los precios de la almendra como consecuencia de la

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fuerte demanda en China, India y Rusia, y que parece que va a mantenerse, supone un ali-ciente más para cultivar almendros.

Si somos capaces de cultivar razonable-mente bien la plantación, debemos de alcanzar los 300 kg de almendra-grano/ha en secano y los 2.000 kg de almendra-grano/ha en rega-dío, dependiendo de la dotación de agua. A 5 €/kg de almendra-grano, supone unos ingre-sos brutos de entre 1.500 y 10.000 €/ha res-pectivamente. Esta gran diferencia de ingresos pone de manifiesto de nuevo el interés de cul-tivar el almendro en regadío siempre que sea posible. Las perspectivas para el

secano, con variedades adecuadas y bien cultivadas son igualmente halagüeñas.

Penta, la nueva

variedad para zonas

frías

La nueva variedad del CEBAS-CSIC Penta, supone un importante avance en la floración tardía del al-mendro para evitar la helada. Es autocompatible, muy productiva, de floración extra-tardía y maduración temprana y está pensada para ser

cultivada en áreas donde las variedades de la época de floración de Ferragnès, Guara, Anto-ñeta o Marta se hielan con cierta frecuencia.

Penta ha sido obtenida mediante un proce-dimiento natural, polinizando la selección del CEBAS-CSIC S5133 con la variedad francesa Lauranne. Fue registrada en 2007 en la Oficina Comunitaria de Variedades Vegetales, es pro-piedad del Consejo Superior de Investigacio-nes Científicas (CSIC) y puede ser multiplicada exclusivamente por los viveros autorizados.

Como principales características, Penta tie-ne un vigor y un porte intermedio, con una

ra-mificación equilibrada fácil de podar. Su fructi-ficación es principalmente en ramos mixtos y brindillas(foto 1).

Su floración es extra-tardía, término que empleamos originalmente para describir la épo-ca de floración de esta variedad. Florece entre 10 y 20 días después que Ferragnès, Guara, Antoñeta o Marta. Las fechas de floración varí-an ligeramente en función de los años y de la zona de cultivo. Penta presenta una elevada densidad floral y es autocompatible, es decir es capaz de dar frutos en ausencia de otras varie-dades polinizadoras y abejas. Por lo tanto, no hace falta poner otras variedades en la parcela. Se puede cultivar sola. Sin embargo, la presen-cia de abejas aumenta significativamente la producción, por lo que recomendamos la intro-ducción de colmenas en la plantación.

A pesar de su floración extra-tardía, Penta es muy temprana de maduración (unos días después de Antoñeta o Guara). Es de rápida entrada en producción (dependiendo de lo que nos esmeremos en el cultivo) y muy productiva. Es fácil de recolectar y los frutos no se caen prematuramente. Además, es bastante resis-tente a las principales enfermedades produci-das por hongos.

Su fruto es de cáscara dura, con un rendi-miento de hasta el 30% y una forma típica de almendra elíptica. Tiene una almendra de 1 gramo, con un atractivo color marrón claro y no presenta semillas dobles(foto 2).G

Bibliografía

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Egea J, Dicenta F. 2001. Nuevas variedades de almendro pa-ra nuestpa-ras regiones productopa-ras. Vida Rupa-ral, 127 (7): 52-53.

Egea J, Dicenta F. 2005. Deficiencias productivas y solucio-nes propuestas para el almendro. Vida Rural, nº 221: 62-65.

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Soler A, Dicenta F. 2012. Control del gusano cabezudo (Cap-nodistenebrionis L.) mediante tratamientos fitosanitarios. Agrícola Vergel, Julio-Agosto, 358:249-255.

M

Foto 1.Penta es una variedad muy productiva con un porte intermedio y una ramificación equilibrada fácil de podar.

Foto 2.Frutos de la variedad Penta donde se observa su uniformidad, el color claro del tegumento y la cáscara dura.

Referencias

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