UNIVERSIDAD ADVENTISTA DE CHILE Facultad de Teología
Licenciatura en Teología
EL NUEVO ATEÍSMO: UNA EVALUACIÓN DE LOS DIÁLOGOS ENTRE LOS NUEVO ATEOS Y LOS TEISTAS SOBRE LA FE Y CIENCIA
TRABAJO FINAL INTEGRADOR-TESIS Presentado en cumplimiento parcial de
los requisitos para optar al grado de Licenciado en Teología
Por
Bryhan Luis Ruiz Jiménez
Profesor guía: Gheorghe Răzmeriță
ii RESUMEN
La presenta investigación aborda los debates televisivos entre los nuevos ateos y teístas en el campo de la ciencia y la religión. El estudio procede de la siguiente forma. El primer capítulo identifica el problema u otros elementos de introducción del trabajo. Capítulos dos y tres ocupan el método histórico filosófico para describir el origen y desarrollo del teísmo, ateísmo y el nuevo ateísmo, como también la historia de los debates entre los nuevos ateos y los teístas cristianos. El capítulo tres además destaca los argumentos y las características principales del nuevo ateísmo. El capítulo cuatro analiza y evalúa los debates televisivos entre los teístas y nuevos ateístas. Por último, el quinto capítulo presenta el resumen y la conclusión de la investigación. El trabajo concluye que la teología adventista tiene un potencial significativo para contribuir a la apologética cristiana en general y a al dialogo entre la ciencia y religión en particular. PALABRAS CLAVES: teísmo, ateísmo, nuevo ateísmo, apologética cristiana, ciencia y religión, existencia de Dios.
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AGRADECIMIENTOS
En primer lugar, doy gracias a Dios por la oportunidad de haberme permitido trabajar en su misión y poder realizar la presente investigación como trabajo de finalización académica de la Licenciatura en Teología
En segundo lugar, agradezco en gran manera al Pr. Gheorghe Răzmeriță y su esposa Diana Răzmeriță por su gran apoyo en esta investigación y en la vida académica.
De igual manera, agradezco a Yesler García Rojas por su gran apoyo en cada momento de mi vida y por su contribución en el trabajo de redacción de la
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TABLA DE CONTENIDOS
CAPÍTULO I ...1
INTRODUCCÍON ...1
Trasfondo del Estudio ... 1
Problema del Estudio ... 5
Propósito ... 5
Justificación ... 6
Delimitación ... 6
Método-Tipo de Trabajo ... 6
CAPÍTULO II ...8
MARCO HISTORÍCO PARA EL DIALOGO TEÍSTAS-NUEVO ATEOS ...8
Teísmo Cristiano Occidental hasta el Siglo XVIII d.C. ... 8
Ateísmo Occidental hasta el Siglo XVIII d.C. ... 18
CAPÍTULO III ...26
TEÍSMO, ATEÍSMO, NUEVO ATEÍSMO ENTRE SIGLOS XIX – XXI...26
Teísmo Cristiano en el Siglo XIX ... 26
Teísmo Cristiano en Siglo XX ... 30
Ateísmo Occidental en el Siglo XIX ... 33
Ateísmo en el Siglo XX ... 37
Nuevo Ateísmo ... 39
Principales Exponentes del Nuevo Ateísmo ... 39
Argumentos de los Nuevos Ateos ... 42
CAPÍTULO IV ...45
DEBATES TELEVISIVOS ENTRE TEISTAS Y NUEVOS ATEOS ...45
Análisis de los Debates ... 45
Debate Richard Dawkins–Cardenal George Pell ... 45
Debate Sam Harris-William Lane Craig ... 48
Debate Christopher Hitchens-William Lane Craig ... 52
Debate Richard Dawkins-Deepak Chopra ... 54
Debate Richard Dawkins-John Lennox ... 57
Debate Christopher Hitchens-John Lennox ... 59
Debate Matt Ridley-Michael Shemer-Richard Dawkins vs Rabbi David ... 61
Debate Sam Harris-Reza Aslan ... 63
Tabla Comparativa de los Nuevos Ateos ... 67
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Características Generales de los Nuevos Ateos en los ... 69
Características Generales de los Teístas en los Debates Televisivos ... 72
CAPÍTULO V ...75
RESUMEN Y CONCLUSIONES ...75
Resumen ... 75
Conclusiones ... 76
1 CAPÍTULO I INTRODUCCÍON
Trasfondo del Estudio
El ateísmo tiene sus orígenes en la antigua Grecia, pero no surgió sino hasta fines de la Ilustración. Se considera que el primer ateo fue Diágoras, uno de los
filósofos griegos del siglo V.1 Desde este filósofo, varios otros comenzaron a discrepar en la creencia de dioses, pues no había espacio para la fe sino solo para la razón. Desde esta instancia se generó un conflicto entre los griegos religiosos y no religioso. El tema de discusión entre ambos era si la creencia en dios o dioses estaba bien en la lógica humana.Este dialogo tuvo el mayor auge del ateísmo al comienzo del siglo XX, pues este pensamiento encontró aceptación en una gran variedad de filosofías tales como el existencialismo, el objetivismo, marxismo y movimientos racionalistas y científicos.
En un sentido más estricto el ateísmo (llámese a cualquier persona no cree en ningún dios o dioses o alguna relación con ello) se opone tan solo al teísmo (concepción de Dios personal, como un ser infinito que se distingue del mundo y lo transciende como creador) sino también al deísmo y a panteísmo.2 Mario Gozzini, un estudiante del
1 Diágoras de Melos (465-410) poeta y sofista griego, se volvió ateo tras una experiencia
personal en la cual uno de sus enemigos entra en un juicio donde queda sin castigo después de haber cometido perjurio y jurando en el nombre de los dioses.
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ateísmo, distingue tres formas de ateísmo: el ateísmo teórico, el ateísmo práctico y el ateísmo especulativo-practico.3
Según Gozzini, el ateísmo teórico se puede definir de dos maneras ya sea negativo como positivo. El aspecto negativo conlleva a la negación de la existencia de Dios y exponer su opinión ante las demás personas. En cambio, el aspecto positivo era la creencia en la inexistencia de Dios, pero de manera pasiva.4
El ateísmo practico conlleva a la creencia de la inexistencia de Dios, pero dejando la posibilidad de un ser no personal que haya creado el mundo. Por último, el ateísmo especulativo-practico tiene su fundación en un juicio de especulación y práctica en la cual se excluye a Dios de la actividad humana. Con esto se relaciona mucho el ateísmo deísta y el ateísmo positivista que tiene este principio como característica principal. 5
El surgimiento del ateísmo tuvo tres fases de origen. La primera fase se le denomina periodo de combate, que representa la protesta contra la fe como fuente suprema de conocimiento por encima de la razón. Esta fase también se le llama racionalismo porque reivindica la autonomía y la libertad de los sectores culturales teniendo como centro del periodo a Descartes con su ateísmo metódico en el siglo XVII. La segunda fase llamada periodo de reducción teológica-filosófica, la cual comienza a fines del siglo XVII y comienzos del siglo XVIII, y finaliza en la primera mitad del siglo XIX. Los máximos exponentes en este periodo son Baruch Spinoza, Emmanuel Kant y Georg Hegel. La característica principal de este periodo es la consideración del mundo y del hombre como una manifestación y realización del Absoluto. Pues el fin y
3 Ibid., 70.
4 Ibid., 74.
3
destino del ser humano no debe ser buscado en un ser transcendental al mundo, sino que en el mismo proceso de los acontecimientos de la historia.6
Juan Sahagún Lucas describió una exacta definición de que:
Spinoza con su natura naturans, Kant con la verdad como patrimonio del sujeto humano y Hegel con su concepción del hombre como conciencia del Absoluto, propugnan un ateísmo racionalista en el que Dios aparece como el creador del mundo y garante del orden moral humano, pero no como proveniente y atento al cumplimiento y desarrollo del mundo y del hombre. Más que verdadero teísmo, es el suyo deísmo o naturalismo religioso que termina con la sustitución de Dios por el hombre completamente desarrollado7
La última fase de la historia del ateísmo es la disolución antropológica. Esta etapa ocupa la mitad del siglo XIX8 y está representado principalmente por L. Feuerbach, quien desenmascara la imagen idealista de Dios propuesta por Hegel, denunciándolo como una ilusión y producto de una imaginación humana.9
Después de su origen el ateísmo se subdividió en ateísmo naturalista, ateísmo antropológico o existencialismo, ateísmo ontológico u otros. Dentro de estas
subdivisiones el ateísmo perdió fuerza a nivel global hasta fines del Siglo XX. Desde la fragmentación del ateísmo surge en el siglo XXI un nuevo movimiento llamado nuevo ateísmo.
El nuevo ateísmo es un término que hace referencia a un movimiento que establece una brecha en la cual cuestiona la religión ocupando métodos analíticos, para negar el concepto de la fe y lo sobrenatural. La base del nuevo ateísmo es la filosofía y la ciencia. Este movimiento describe la religión como un aspecto negativo para la sociedad moderna llamándola enfermedad. El nuevo ateísmo posiciona a Dios como un
6 Juan Sahagún Lucas, Dios, Horizonte del hombre (Madrid: Biblioteca de Autores Cristianos,
1994), 283.
7 Ibíd., 289.
8 Ibid., 290.
4
ser irreal. Algunos exponentes de este movimiento son Richard Dawkins, Daniel Dennett y Christopher Hitchens.10
Los ateos y nuevos ateos siempre han tenido debates contra los teístas. En el siglo XVIII tras la ilustración y la revolución francesa surgió el libre pensamiento, escepticismo científico, y la crítica de la religión11. Generando con ello un debate indirecto en la sociedad, ya que los argumentos que se presentaban eran aspectos sociales e históricos, razones en las cuales no debía creerse en deidades. En esta situación el problema del mal que era un tema frecuente, fue un ápice que ayudo a desarrollar un dialogo entre los ateos y los teístas.12 En este aspecto, la filosofía ayudó en ampliar los argumentos de los ateos para atacar y contrarrestar cada uno de los argumentos de los teístas13.
En la segunda parte del siglo XX investigaciones y descubrimientos científicos ampliaron el cuadro que había entre los teístas y ateístas. El dialogo llego a una nueva cumbre con un ataque renovado de los nuevos ateos en contras de los teístas. Las dos partes se alimentaron de argumentos e investigaciones para poder contrarrestar en su dialogo.
La disputa entre los teístas y del nuevo ateísmo ha ocasionado literatura, en la cual cada uno de los exponentes argumentan y contra argumentan. Además, la literatura no es el único medio que se ve este debate sino también se desarrolló una moda de debates televisivos en diferentes áreas tales como salas, auditorios y especialmente medios universitarios.
10 Antony Flew, Dios existe (Madrid: Trotta, 2012), 137.
11 Juan Draper, Historia de los conflictos entre la religión y la ciencia (Compañía Argentina,
1962), 57.
12 Eduardo Rosales L., El ateísmo y los fulgores de Dios (Andrés Bello, 1970), 177.
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Problema del Estudio
La discusión teísta-nuevo ateísta genero un interés especial en las sociedades occidentales secularizadas, especialmente interesados en el campo de la ciencia y religión. Diferentes personas apelan a estos debates con el propósito de fortalecer sus pensamientos o buscar la verdad. Los cristianos esperan en estos debates la
confirmación de su fe y los argumentos últimos que van a derrotar a su influencia creciente. Por otro lado, los ateos esperan la victoria final ante el cristianismo teísta.
En estos debates se instauró una percepción general de que los nuevos ateos son mártires de la ciencia o ganadores de los debates. Aun teístas se presentan
decepcionados por el resultado de los debates y se preguntan si la apologética cristiana tiene una solución ante este problema.
Por otro lado, aunque hay una percepción general de los debates, falta un análisis y una evaluación de las discusiones de manera integral para dar una dirección adecuada a los debates o diálogos entre ambas líneas de pensamientos que se contraponen. Esta situación genera algunas preguntas ¿cuál es el contexto entre los diálogos teísta-nuevo ateísta? ¿Cuáles son los argumentos de estos debates? ¿Cuál es la postura de los participantes en la discusión? ¿Qué recomendaciones puede surgir ante este análisis y evaluación de los debates?
Propósito
El propósito de este trabajo de investigación es analizar y evaluar el dialogo de los debates televisados entre teístas y nuevos ateístas en el contexto de las
conversaciones entre la ciencia y religión con el fin de proponer preparación para una participación en estos tipos de conversaciones.
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Justificación
Este trabajo es relevante al dialogo entre teístas y nuevos ateístas en el campo de la ciencia y la religión. El nuevo ateísmo puede entenderse mejor a la luz de este
trabajo. En segundo lugar, beneficiará a los teístas en el análisis y mejoramiento de este dialogo, el cual está generando más adeptos en la discusión e interesados en el dialogo que se está abriendo entre estas dos líneas de pensamientos que se enfrentan, ayudando a discernir a los espectadores de los debates televisados, sabiendo los argumentos relevantes y argumentos que no tienen lugar al área presentada.
Delimitación
El marco de investigación que tendrá este trabajo se delimitará y se centrará en los debates televisivos entre los teístas cristianos y del nuevo ateísmo. El trabajo dejará de lado todo pensamiento deísta y panteísta. El análisis se concentrará en teístas
cristianos y no tomará en estudio a los teístas judíos, musulmanes o de otra religión.
Método-Tipo de Trabajo
En el presente trabajo se ocupará dos formas de metodología que nos ayudaran a contrastar la diferencia entre las dos posiciones, estas son la descriptiva y la
comparativa. Descriptiva pues se mostrarán y se presentarán los argumentos de cada una de las posturas, y de la misma manera comparando entre sus mismos argumentos de diferentes exponentes, con el fin de encontrar contrastes, no dejando de lado la historia donde centraremos hechos concretos de los campos de pensamiento en el área de la ciencia y la fe.
El estudio procederá de la siguiente forma. El primer capítulo presenta el problema y una breve introducción describiendo el tema. El segundo capítulo ocupa el método histórico filosófico para describir el origen del nuevo ateísmo y la historia de los debates con teístas. El tercer capítulo realiza una descripción de ambos
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movimientos, ateísmo y teísmo en los siglos XIX y XX para dar un contexto al
movimiento del nuevo ateísmo, describir el surgimiento del movimiento nuevo ateísmo, sus argumentos y sus características principales. El cuarto capítulo presenta los debates televisivos entre los teístas y nuevos ateístas. Y por último el quinto capítulo presenta el resumen y la conclusión de la investigación.
8 CAPÍTULO II
MARCO HISTORÍCO PARA EL DIALOGO TEÍSTAS-NUEVO ATEOS
Teísmo Cristiano Occidental hasta el Siglo XVIII d.C.
El siguiente capítulo presenta el teísmo y el ateísmo desde el siglo VI hasta el siglo XVIII. El teísmo es sinónimo con la creencia de Dios, siendo un Dios, como en el monoteísmo. El uso de un Dios no lo distingue del deísmo y el panteísmo, pero si la trascendencia de Dios. Se refiere a la creencia de un Dios creador personal, distinto del mundo y en constante actividad en el mundo, por esta misma razón debe ser adorado. Este Dios en el teísmo es inteligente y poderoso, como persona es capaz de revelarse a sí mismo, siendo un ser moral preocupado por su creación y sus acciones. Siendo trascendente es libre de actuar soberanamente en la creación. Por otra parte, en su actividad inmanente es capaz de buscar sus propios buenos propósitos para la historia en general y para las personas en particular. Los teístas son posicionados como hombres que toman una posición filosófica, la cual se remonta hasta Platón en el Occidente y siendo desarrollado por pensadores mahometanos, judíos y cristianos, entre los últimos San Agustín, Tomas de Aquino y Duns Escoto. En tiempos modernos teólogos como Juan Calvino y filósofos como Descartes y Emmanuel Kant dieron forma a la
tradición.14
Los primeros indicios del cristianismo son Jesús y los apóstoles. Ellos
pensaban de una manera diferente a los judíos y a los griegos. Los judíos creían en un
14 Sinclair B. Ferguson y David Wright, Nuevo diccionario de teología (Casa Bautista de
9
Dios, pero no en una trinidad a diferencia de los apóstoles y Jesús (Mt 3:16-17; 28:19; Mr 16:15-18; Lc 1:35; Jn 10:30; 15:26; Hch 1:7-8; 2:38-39; 5:31-32; 7:55). Los griegos creían en un Dios que no era personal a diferencia de los planteamientos teológicos de Jesús, presentando a Dios como un Dios trascendente, inmanente con una personalidad plural, pero no dejando de ser monoteístas.
En la edad patrística que comienza en el Siglo II hasta el siglo VII después de Cristo, cada uno de los teólogos de la época construía su propia teología, con sus rasgos específicos. El primer término que se puede destacar de este periodo de la historia es el elemento bíblico exegético, siendo una herramienta que les ayudaba a realizar sus reflexiones sobre la fe, de esta misma forma la reflexión, tenía que estar siempre apoyada directamente sobre las sagradas escrituras, la base de la teología. La obra teológica que ellos realizaron fue fundamentalmente una explicación y defensa de los escritos sagrados. Pues ellos dedicaban tiempo para conocer a fondo la Biblia y llegar a una meditación frecuente y una explicación exhaustiva de la escritura.15
El segundo aspecto identificativo de este periodo es la configuración de una ordenación sistemática de la doctrina de la fe. En esta misma época, cada cristiano veía la necesidad de una labor catequista de formación, el obispo a cargo procuraba realizar dicha labor a través de medios de alcances; surgiendo así las escuelas catequistas, de las cuales las más conocidas son la de Alejandría y la de Antioquia. La primera escuela catequista fue la alejandrina, ubicada en una ciudad helenista con bastante actividad cultural y una biblioteca distintiva del lugar. Panteno, obispo filósofo estoico fue designado como el primer director de esta escuela, generando a la biblioteca un sentido científico. A Panteno lo sucedió Clemente Alejandrino, quien fue reemplazado por Orígenes en el año 206 d.C. Y es en esta parte de la historia del cristianismo donde
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aumenta el nivel científico y teológico, superando la tendencia neoplatónica en filosofía por su método alegórico en exegesis. Por esta razón se puede decir que la teología nació como un saber científico de la mano de Clemente y de Orígenes.16
Por último, la teología patrística desarrollo en especial la función apologética ante los paganos y los herejes de este tiempo, generando un modelo teológico que integra y armoniza la práctica de la fe (revelación) y la razón (filosofía), su punto fuerte consta en adquirir conocimiento y apropiarse del plan divino de salvación que está en Cristo, el cual conocemos por medio de la revelación, es así que la teología y la vida espiritual están íntimamente relacionadas. Es la teología entonces, sabiduría en un sentido pleno, desarrollando conocimientos unidos a las necesidades espirituales y pastorales. Este modelo patrístico tiende a una visión unitaria de la teología, conectando la especulación, la vida cristiana, la defensa de la fe y el progreso espiritual del
creyente. Como resultado, la teología se concibe como un comentario bíblico básico orientado en la contemplación de Cristo y la vida espiritual del creyente.17
Al periodo patrístico, le sigue el surgimiento de las escuelas catequistas que fueron la base para la vida y el periodo monástico que comienza en el siglo VIII y finaliza en el siglo XI. Este periodo se caracteriza por el dominio teológico de los monjes por sobre la muchedumbre, quienes abordan el pensamiento previo a la teología pre escolástica; debido al respeto y legado que dejaron las escuelas monásticas por su contribución en material teológico, como copias y manuscritos del antiguo y nuevo testamento; se presenta como herencia el pensamiento patrístico a las generaciones futuras. Los monjes eran responsables del material teológico, en virtud a su
preservación, se les otorga el valor de patrimonio patrístico. Otra característica que
16 Ibíd., 30.
11
identifica a este periodo es la lectura y meditación de las escrituras dirigidas por los monjes, quienes repetían los textos bíblicos con un sentido de salvación. 18
Posterior al auge cultural producido por las escuelas monásticas comienza una nueva fase en la historia. Pues al comienzo del siglo XI se ven varios cambios políticos, sociales y económicos. Florece la economía afianzada a la burguesía y da vida a las villas y ciudades. Surgen así. Las escuelas episcopales, las cuales son completamente independientes, a diferencia de las escuelas monásticas, produciendo un aumento en las investigaciones y un interés en el pueblo, derribando la autoridad intelectual de los monjes.
La tendencia racional y critica surge en un cierto movimiento que lleva a considerar y estudiar las cosas en sí mismas, y no solo en la perspectiva religiosa y trascendente. Se inicia un proceso de autonomía en lo terrenal. En medio de una
sociedad teocrática, el emperador Enrique IV reivindica la independencia de la sociedad política frente al Papado.
El siglo XI es un periodo de tiempo caracterizado por las luchas dialécticas entre escolásticos y monjes tradicionalistas. Siendo los escolásticos defensores de la letra humana, la literatura y de la filosofía, pero por otro lado los monjes condenaban estas disciplinas como profanas.
Producto de este dialogo entre monjes y escolásticos, la historia del cristianismo tiene un cambio brusco puesto que hacia el año 1100 d.C se produce el cambio
medieval, aparecen las ciudades o burgos de Occidente las Escuelas Catedralicias o Urbanas, donde estudiaban y formaban clérigos. La teología que se comenzó a cultivar en dichas escuelas urbanas supuso un nuevo estilo y modelo teológico que dio origen a lo que llamamos Teología escolástica. Esta propone el estudio de las sagradas escrituras
12
bajo la guía de los Padres de la Iglesia. El estudio teológico ocupa métodos analíticos que conceden una amplia importancia a la especulación racional a partir de la fe. Resultado de esto sumado a los diálogos entre los mismos teólogos se ve la necesidad de instaurar escuelas teológicas.
El nuevo método teológico nace y se desarrolla en el interior de estas instituciones académicas, primero, las escuelas urbanas, y, después, la universidad naciente, quienes deben tener en cuenta las exigencias no solo científicas sino también didácticas y prácticas. El monje que filosofa o que razona en torno a las verdades de la Fe, lo hace normalmente en el silencio, en un monologo que lo que lleva a unirse plenamente con Dios, aunque tenga consecuencias pastorales y puede trascender en la predicación o en la catequesis cristiana. En cambio, el “scholasrticus” o “profesor” de las escuelas urbanas debe exponer su clase a un público juvenil, turbulento y discutidor; tiene que exponer las verdades que ha de enseñar a sus alumnos con la ayuda de la dialéctica y sometiéndose a sus reglas. Un ejemplo de esto es el modo al que se enfrenta el problema de la existencia de Dios. Anselmo de Catemburg, por ejemplo, inicia sus consideraciones con una oración (y esto forma parte de su reflexión racional): “Señor, permíteme comprender que existes”. Por otro lado, Pedro Abelardo supone un cambio fundamental que responde a una nueva situación escolar y metodológica: la misma cuestión se formula dentro de las exigencias del trabajo dialectico del saber: “Dios existe y no existe”. El primer planteamiento es representativo del modelo monástico, en cambio, el segundo supone un cambio evidente que significa la inauguración del
método escolástico.19
Entre estas dos concepciones de hacer teología se plantea un debate cada vez más explícito y abierto. De un lado, la Teología Monástica, se mueve en la línea de la
13
tradición y la estrecha unión a la Patrística sapiencial y contemplativa; la Teología Escolástica inaugura una línea que pretende alcanzar desarrollos y progresos consecutivos. Mientras en épocas anteriores el debate teológico se refería a temas
particulares (eucaristía, trinidad), en el renacimiento teológico del siglo XII, la discusión se desplaza a cuestiones generales previas, no se mira tanto a los contenidos teológicos sino a sus instrumentos y métodos. En el fondo se plantea el eterno tema de las
relaciones entre la pura Fe y la Razón filosófica entre los defensores de la absoluta gratuidad de la fe y los partidarios de la racionalidad de la fe. El monje defiende la tradición frente a las novedades, mientras los maestros pretenden conectar e injertar las novedades en el tronco de la tradición, con el propósito de mantenerla viva y hacerla crecer.20 De este modo, el enfrentamiento se centraba sobre en la naturaleza misma de la
teología, cuestionando si ella tenía el derecho de ser construida como una ciencia independiente, teniendo un principio, métodos y lenguaje propio o por el contrario la teología debía enfocarse al ámbito bíblico.
Durante el siglo XII la teología se desarrolla en la Dialéctica (Lógica), en búsqueda de un mayor rigor crítico y científico en el quehacer teológico dando a lugar un nuevo método científico teológico. Esto es ocasionado por un mayor radio cultural, una amplitud en el estudio de los problemas y por otra parte se logran resolver estos problemas con la utilización de toda la obra aristotélica, dando un uso sistemático y perfeccionista al método escolástico, es decir, el análisis y la resolución de las cuestiones planteadas, reuniendo pruebas a favor y en contra, con el perfecto rigor lógico, argumentando racionalmente las soluciones adoptadas. 21
20 Ibid., 64.
14
Los teólogos disponían de una filosofía completa, teniendo un conocimiento racional de las cosas y también de la psicología humana. Todo este instrumental
filosófico podría ser utilizado para construir la teología cuyas exigencias racionales iban en aumento. El problema que existía era que todo este caudal de ideas era muy distinto, y en definitiva poco armonizable con las doctrinas escolásticas elaboradas y en efecto se había logrado síntesis entre la Cultura clásica y la fe cristiana, por medio del
pensamiento de san Agustín, que recogía y remodelaba a su modo la línea platónica cristianizándola.
Los padres y la primera escolástica (XI-XII) concebían a la razón como una fuerza original o como una potencia de conocimiento de la que el creyente podía hacer uso para comprender mejor la fe. Dicha potencia era distinta de la fe, pero solo se ejercía en el marco de las finalidades de la salvación; habían pedido al neoplatonismo una filosofía que proporcionase los marcos generales que permitiesen conocer e
investigar al mundo en su referencia a Dios. Su teología era, en el fondo, una búsqueda personal de Dios, búsqueda salvífica por la unión con la verdad divina que se nos proporciona con la fe cristiana.
Con la recepción de una “ciencia” de las estructuras de lo real (Aristóteles significa esto), san Alberto y Tomás aprenden a distinguir dos esferas de conocimiento distintas, pero no opuestas: la esfera de lo que la razón puede demostrar (área natural), y la esfera de las verdades que el hombre solo puede alcanzar por revelación divina (área sobrenatural). Esto significa la legitimidad del conocer (las cosas creadas) por sí mismo, que es una perfección absoluta del ser racional; así lo considera la filosofía, como un saber propio no con una búsqueda personal de salvación (tradición patrístico-
agustiniana). Por otra parte, santo Tomas concibe la posibilidad de aplicar
15
especificidad de la revelación; la teología será ciencia, y ciencia principalmente especulativa, una ciencia de lo revelado, ciencia del conocimiento explicativo y
sistemático de las estructuras del orden salvífico- sobrenatural incluyendo la creación.22 En el siglo XIII, la preocupación fundamental queda orientada a la discusión del estatuto científico de la teología y en esta cuestión decisiva para el futuro de la teología, Tomás es el primero que se atreve a plantear netamente la tarea de aplicar los
mecanismos y procedimientos de la ciencia del dato revelado, constituyendo de este modo una disciplina sistemática y deductiva.
La suma teológica es un clara muestra de estructura de Tomás de Aquino: ¿Hay Dios?
Si señor
¿Por qué lo decís?
Porque si no lo hubiese, no podría existir cosa alguna ¿Cómo lo demostraríais?
Mediante el siguiente raciocinio. Lo que necesariamente ha de recibir de Dios el ser no existiría, si Dios no existiese. Es así que nada puede ser, excepto el mismo Dios, si no recibe de Él existencia. Luego si no hubiese Dios, no podría existir cosa alguna.23
Tomás perfeccionó el método teológico y lo unió estrechamente a una visión precisa de la teología como tarea científica convertida en una disciplina autónoma. No toma sus principios de otras ciencias humanas, sino de la ciencia de Dios y de los santos, de tal manera que no depende intrínsecamente de la filosofía ni de ninguna otra área del saber.
La situación de crisis en la teología escolástica trajo consecuencias a la ruptura de fe-razón, operada por el nominalismo, y la crisis de autoridad eclesiástica. A principios del siglo XVI se da un clamor generalizado de rechazo de la Teología
22 Ibid., 79.
16
escolástica y de reforma de la teología para adaptarla a los nuevos tiempos y las necesidades de la época.
Los refuerzos que se dieron para adaptar la teología fueron los siguientes: a) Crear una teología nueva: Hacer tabla rasa a todo sistema y métodos
teológicos antiguos e inventar una teología totalmente nueva y diferente a la que había (teología escolástica). Esta es la línea del Humanismo y de la reforma luterana.
b) Renovar la teología escolástica tradicional: Tratar de volver al espíritu científico de la escolástica, adecuando las nuevas exigencias, e incorporando a la teología los valores modernos adoptados por el humanismo. Pero sin perder el carácter científico y deductivo de la escolástica. En definitiva, lo que se intento es purificar dicha teología y enriquecerla con los nuevos logros filosóficos y culturales del humanismo.
El humanismo es un fenómeno cultural que inicialmente comenzó en Italia y supone una visión nueva del mundo y del hombre. Esta concepción pone al hombre y los valores humanos en el centro del todo, viendo a su vez la cultura clásica greco-romana como la realización del ideal humano. Una actitud fundamental del humanismo es la actitud crítica ante la cultura y los métodos científicos.
La teología reacciono ante esta evolución general de la ciencia y la cultura. Su renovación fue la meta de muchos humanistas. No se podía olvidar que la teología todavía estaba en el centro de la vida científica, pero al mismo tiempo se encontraba con las opiniones de los humanistas. Esta decadencia teológica es vislumbrada por la
degeneración lingüística, su mala dialéctica, su método científico y pedagógico erróneo. Este nuevo espíritu crítico y escéptico se notó a lo largo de toda la evolución del humanismo. Espíritu crítico que lenta y progresivamente conduciría a la ciencia de a
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principios del siglo XXI. El primer término que rechazaban los humanistas era el método deductivo y dogmático, ante esta situación la teología debió retroceder a su forma simple, a la palabra de Dios, dejando de lado las sutilezas dialécticas. Los humanistas se oponían a todo lo racional y deductivo de lo revelado, a las conclusiones teológicas, a las formulaciones dogmáticas: todo lo cual era esencial al método
escolástico tradicional.
El humanismo es racionalista, pero limita su racionalismo a la crítica histórica y filológica, no aplicando a la labor deductiva y sistemática de la razón. Da importancia a todo aspecto practico y moral, religioso vivido.
La teología pasa a ocupar un deber primordial en la interpretación sencilla de la palabra de Dios y dando una aplicación moral cristiana siendo una práctica de la
religiosidad evangélica. Ante esta situación, Erasmo tiene ideas sobre la sana reforma de la teología, su objetivo es contribuir a la tarea teológica mostrando la importancia de los estudios de las lenguas y generando críticas a los textos bíblicos. 24
Por otra parte, el humanismo contribuyo positivamente a la forma del método teológico, sobre todo en el aspecto histórico-crítico y filológico, de manera que se puede afirmar que son precursores de la exegesis bíblica moderna. Sin embargo, la gran
limitación era la concepción de la teología, la cual no tenía una comprensión dogmática y una fuente fidedigna para los creyentes. A esto se le añade, que el terreno teológico era superficial, faltando una verdadera formación teológica profunda. 25
El periodo anterior de luchas a favor o en contra de la palabra de Dios sucede un periodo de lucha contra el cristianismo. A la época creyente en la revelación
24 Plans, Historia de la teología, 192–195.
25 Wilhelm Dilthey, Historia de la filosofía (Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica, 1956),
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sobrenatural sucede ahora la época hostil a la revelación sobrenatural. Este periodo se destaca por la ilustración en el siglo XVIII con una doble manifestación, tenemos a Inglaterra con el deísmo y por otro lado a Francia con el enciclopedismo, época que se caracteriza por la lucha en contra de la revelación y su defensora, la iglesia católica. En el trascurso del Siglo XVII en Inglaterra y principios del siglo XVIII en Francia, el panorama cultural va cambiando hasta llegar a una nueva etapa cultural en occidente. Con el Deísmo inglés y poco después el enciclopedismo en francés el marco cultural sufre un giro copernicano. Partiendo de una base filosófica que tiene una comprensión del hombre como ser autónomo, cuya razón científica es capaz de comprender y mensurar todo. Se llega a una crítica cada vez mayor a la religión cristiana revelada.
La razón ilustrada niega la existencia de misterios en sentido estricto, verdades trascendentales que escapan la inteligencia humana. Siendo la misma razón humana quien imita estos frontis de la realidad. Además, la razón es la única fuente de conocimiento verdadero. Ante esta situación la Iglesia Católica queda paralizada no sabiendo como responder a esta línea del pensamiento que estaba atacando las principales bases del cristiano. Lo único que a la iglesia le queda es reaccionar de manera defensiva mencionando que los que dudan de las fuerzas naturales de la razón humana se refugian en la fe separando todo orden racional del ámbito de la fe cristina revelada. Lo segundo que dijo fue que los que con más espíritu positivo deciden intentar explicar con subsidios racionales los dogmas de la fe cristiana, que de una u otra forma son inteligibles e incluso demostrables, estos son los semirracionalistas que florecen sobre todo en Alemania.26
Ateísmo Occidental hasta el Siglo XVIII d.C.
El concepto ateísmo proviene del griego ἄθεος que significa “sin dios” o negación de Dios. Hacia mediados del siglo V a.C. se realiza una revolución en la civilización griega, pues las circunstancias políticas nuevas dan origen al gremio de los sofistas, que representaban la enseñanza superior que prepara para la actividad política, fueron estos los que orientaron el estudio hacia hechos espirituales y sociales, trayendo consecuencias negativas contra el conocimiento de la naturaleza y la ilustración
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filosófica arremete contra las creencias religiosas. De esta forma, prosperó la concepción de hechos espirituales y sociales un espíritu individualista y escéptico.27
Diágoras de Melos fue conocido como el primer ateo pues blasfemaba haciendo públicos las injusticias que había en el pueblo. Poco después los atomistas Leucipo y Demócrito intentaron explicar el mundo de una forma materialista, sin realizar referencia a lo espiritual ni místico.
Las primeras generaciones de sofistas aluden declaraciones contrarias a la creencia de los dioses. Uno de los primeros sofistas fue Protágoras, alrededor del año 486 a.C. ejerció en las ciudades de Grecia y especialmente en Atenas. Su imagen la encontramos en el dialogo platónico que lleva su nombre. En el año 411 a.C. fue acusado de ateísmo por su obra sobre los dioses que se titulaba “De los dioses no se puede saber si existen o si no existen” y anciano murió de 70 años ahogado en un viaje a Silicia. Su principal tesis fue “el hombre es la medida de todas las cosas de las que son en cuanto a que son, de las que no son en cuanto que no son”.28 El sofista Gorgias de
Leontini nació entre 490 y 480 a.C., inicio sus estudios en Silicia donde el año 427 llega como embajador de su ciudad natal, Atenas, presentando ideas nihilistas, tal como nada existe, si existiera, no sería conocible, de ser conocible, no podría ser comunicado.29
Las circunstancias en Grecia cambian, con ello comienza a surgir una segunda generación de sofistas quienes presentan la moral, el derecho y el estado como
conceptos que derivan del egoísmo individual, lo mismo que el orden del cosmos se deriva del juego de los átomos en la escuela atomista. Uno de los sofistas de esta generación es Calicles quien es desconocido pues su existencia no es segura, pero
27 Dilthey, Historia de la filosofía, 39.
28 Ibid., 40.
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defiende el derecho natural del hombre que puede moverse a través de las leyes escritas y es el mismo capaz de imponerse a la naturaleza.30 Esta época que se caracteriza por los sofistas es también conocida como el desarrollo de la ciencia, la política y la historiografía de Grecia.
Luego de la aparición de los sofistas en la segunda mitad del siglo V, en las colonias griegas prosiguió la especulación científico-natural. La intención de los sofistas era dar contraste entre la religión y la moral, ayudando a concebir una ley natural. Según Protágoras, toda opinión es verdadera, en algún sentido. Esta propensión a
negarle a la verdad el carácter de objetividad absoluta lleva fácilmente a la consecuencia de convencer a alguien, el sofista procuraba persuadir o discutir con quien no estaba de acuerdo con él. De esta manera, en el pueblo los sofistas cuestionaban los fundamentos de las instituciones tradicionales a las creencias y a las costumbres, fomentando
actitudes relativistas. Con este relativismo, reaccionaron Sócrates y Platón, esforzándose por sentar con firmeza las bases del conocimiento verdadero y juicios éticos.31
Sócrates se ocupó de las definiciones universales, de la posibilidad de llegar a conceptos fijos. En cambio, los sofistas proponían doctrinas relativistas rechazando las doctrinas. El hecho de que el concepto universal siga siendo siempre el mismo, los ejemplos concretos pueden variar, más la definición se mantiene inerte. Según
Aristóteles, al hombre se le define como animal racional; cada hombre posee distintos dotes, unos tienen muchos más talentos que otro. Existen hombres que no gozan de su libre razón y asea por estar dormidos o que estén mentalmente mal. Pero todos están dotados de razón, tanto si la emplean o no. Pero esta facultad de pensar y razonar está
30 Ibid., 42.
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presente en el ser humano. Sócrates también deja un espacio en su estudio para preocuparse de la ética y los valores morales de los seres humanos.32
Teeteto, joven matemático, entra en conversación con Sócrates, y le pregunta que piensa él sobre la naturaleza del conocimiento. Teeteto le responde mencionando la geometría, las ciencias y las artes; pero Sócrates le menciona que el conocimiento no es la percepción sensible, ni tampoco es el simplemente juicio verdadero, sino que es la razón. Pues el verdadero conocimiento como lo plantea Platón es infalible y se acerca a lo real, para que haya un verdadero conocimiento deben ser presentados ambas
características. El real conocimiento es aquel que no se deja llevar por los sentidos, ni la percepción sensible, sino que a partir de nuestra razón. Pues la percepción sensorial es relativa como la plantea Protágoras, pero esto no quiere decir que el universo es relativo.33
La lógica Aristotélica se relaciona con el conocimiento científico, consiste en deducir lo particular de lo general condicionado de su causa, de manera que se sepa la causa de la que el hecho depende y la conexión necesaria entre el hecho y su causa. Se tiene conocimiento científico cuando conocemos la causa de la que depende el hecho como la causa de ese hecho y no de otro, y sabemos además que el hecho no podría ser distinto del que es. Aristóteles se ocupa no solo de las pruebas científica sino también de la demostración o deducción. La deducción es un proceso que se genera a través de una inducción de información, sacando aspectos sobrenaturales y teniendo como base la razón y la lógica para llegar a la verdad.
La inducción científica significa para él, la inducción completa, es decir el método eficaz para poder encontrar la respuesta a la interrogante. Pues la inducción
32 Ibid., 1:120.
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procede mediante una enumeración de todos los casos. La inducción incompleta, es aquella que no se puede encontrar todas las respuestas a las interrogantes y le es útil sobre todo al orador para poder obtener información y llegar a través de la deducción a la respuesta correcta. Aristóteles se sirvió del experimento, pero no elaboro una
metodología inductiva científica ni implemento la hipótesis. En pocas palabras, él trabaja con el procedimiento antes de plantear una hipótesis.34De esta manera no se
puede criticar a Aristóteles porque no realizo un estudio completo de todas las formas de razonamiento y no planteo ni resolvió todas las cuestiones que se puedan plantear acerca de las formas del pensamiento humano.
Posterior a Aristóteles surgió la filosofía estoica cual rechazo la doctrina platónica del universo trascendental, sino también la doctrina universal concreta. Pues nada más existen los individuos y nuestro conocimiento de objetos particulares. Estos objetos particulares producen una impresión en el alma y el conocimiento es, ante todo noticia de esa impresión. Adoptando ideas contrarias a Platón pues mientras estos menospreciaban la percepción sensible. El alma humana es originalmente una tabula rasa, y para que conozca algo es necesaria la percepción.
Los estoicos fueron por lo tanto empiristas, pero manteniendo también el racionalismo que apenas se compaginaba con una posición enteramente empirista y nominalista. Ellos presentaban que la razón era el producto de un desarrollo, ya que va creciendo a partir de las percepciones y únicamente acaba de formarse del todo hacia los catorce años de edad, sostenían también que no solo existen ideas generales formadas, sino que algunas ideas generales que precedían a la experiencia.35
34 Ibid., 1:286.
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Posterior a los estoicos, Epicuro tiene una percepción del mundo que se produce cuando las imágenes de los objetos penetras en los órganos de los sentidos. Pero
agregando todo aspecto sensorial imaginativas. La explicación del origen del mundo era la colisión de dos átomos entre sí. Este movimiento de los átomos era espontaneo en sentido oblicuo, teniendo una desviación por la que se aparataban en línea recta. De esta manera, él explica la primera colisión entre los átomos, lo que produjo con ello los movimientos rotatorios y estos trajeron nuevos planetas. 36
Las ideas de Epicúreo son aproximadamente del año 300 a.C. Posteriores a las ideas de Demócrito y los atomistas. El expuso una filosofía materialista sin la necesidad de la intervención divina. Aunque, creía que los dioses existían, pero eran indiferentes a la existencia humana, doctrina similar al deísmo. El objetivo de Epicúreo y los
seguidores de las ideas de él (los epicúreos) era alcanzar la paz mental exponiendo que el miedo a la ira divina era irracional. Los epicúreos antes sus ideas no fueron
perseguidos, pero causaron controversia y fueron duramente atacados por las escuelas estoicistas y por el neoplatonismo. Teniendo termino a fines del imperio romano.
La idea de la no participación de los dioses o dios en la historia humana tenía influencia que perduro en el tiempo, trayendo como reacción en la edad patrística una línea de apologistas que defendían la participación de Dios en la vida del ser humano. “Taciano, quien reconocía la capacidad de la mente humana para experimentar la existencia de Dios, por medio de las criaturas, debido a que él creo al ser humano con categorías filosóficas, trayendo este pensamiento una repercusión en el desarrollo de la teología. Un ejemplo claro es el Logos que procede de la esencia de Dios, no cayendo en el vacío de las categorías sino en es un instrumento divino de la Creación. Utilizando su semejanza para explicar la formación del pensamiento y el habla humana, es así que
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el Verbo fue la explicación del pensamiento de Dios trayendo consigo un agente creador. Llamado también Demiurgo.”37
El ateísmo desaparece dentro de algunos siglos y resurge en el siglo XVIII con la ilustración. Pues el periodo histórico denominado la ilustración o enciclopedismo o siglo de las luces, discurre desde el deísmo ingles hasta el idealismo alemán de Hegel y Kant. El proceso cultural y filosófico se va desarrollando a partir del tiempo, alcanzando formas más radicales y desarrolladas.38
La razón ilustrada niega la existencia de misterios, verdades trascendentales que escapan a la inteligencia humana, aquellas que no pueden ser demostradas
científicamente por el ser humano. Siendo la única fuente de conocimiento verdadero es la propia razón. De esta manera, el cristianismo quedo fuera de la sociedad cultural moderna.
El racionalismo moderno tiene varias manifestaciones, una de ellas fue el
deísmo, el primer país en tomar esta ideología fue Inglaterra, el cual contribuiría para el nacimiento de este movimiento. De este país, pasa a Francia, quien será la difusora de las ideas ilustradas en toda Europa, debido a su posición socioeconómica.
Uno de los precursores del empirismo es Francis Bacon quien presenta la idea de la ciencia como un estudio de la naturaleza sin prejuicio alguno, con métodos empíricos de razonamiento.39 Por otra parte, Herbert de Cherbury, trasfiere el método empírico al ámbito religioso dando a lugar a la religión natural. Aceptan a Dios, pero se trata de un Dios hecho a la medida de la razón. No se niega la religión, pero es una religión sin misterios, sin dogma pues la misma razón es capaz de descubrirlo, es decir, no se
37 Copleston, Historia de la filosofía, 2:29–30.
38 Plans, Historia de la teología, 198.
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necesita dogmas o una guía espiritual, sino solo la razón. El contenido de la religión es triple, Dios, la virtud y el más allá. Su fin es la práctica de la virtud natural. Este es el sistema llamado deísmo.40
Los deístas son pensadores que rechazan toda religión revelada sobrenatural y todo misterio. Dios existe, pero es un Dios extraído por completo de la razón, siendo un Dios que no interviene para nada en el mundo. Este pensamiento siguió aumentando su auge entre los pensadores de ese tiempo, provocando ataques contra la religión revelada y extendiéndose en contra de la iglesia católica.
Tomas Hobbes pensaba que la religión era algo proveniente del estado, teniendo el propósito de unir a la gente. Por otra parte, John Locke, intentaba relacionar la razón con lo sobrenatural. David Hume, con su empirismo crido y su crítica, echó por tierra todos los fundamentos de la religión, llegando al escepticismo absoluto. Y a la conclusión que llego es que, sin religión, sin Dios también se puede ser virtuoso y vivir feliz. Estos pensamientos tomaron lugar en Inglaterra como librepensamiento, los cuales estaban en contra a la religión oficial y obligada del estado.41
El presente capitulo muestra las transiciones que ha tenido el teísmo y el ateísmo desde los siglos VI hasta el siglo XVIII, siendo el teísmo una línea de pensamiento que comenzó con la teología enclaustrada en el clérigo, los monjes se atribuían ser los únicos dignos de leer los manuscritos sagrados; pero producto de la ilustración la sociedad se vio impactada generando un interés en estudiar las sagradas escrituras. Esto creo la necesidad de crear escuelas catequistas, tales escuelas tenían diferentes
profesores y cada maestro tenía una línea de pensamiento diferente que provoco un quiebre en ellas. Es así que ambos movimientos tuvieron transiciones con periodos que favorecieron o que impactaron contrariamente, produciendo efectos notorios.
40 Ibid., 203–204.
26 CAPÍTULO III
TEÍSMO, ATEÍSMO, NUEVO ATEÍSMO ENTRE SIGLOS XIX – XXI
El capítulo realiza una descripción de ambos movimientos, ateísmo y teísmo en los siglos XIX y XX para dar un contexto al movimiento del nuevo ateísmo.
Describiendo el surgimiento, sus argumentos y sus características principales El siglo XIX comienza con dos grandes revoluciones, la francesa (1789-1799) y americana (1763-1789).
Teísmo Cristiano en el Siglo XIX
Justo Gonzales menciona “el hecho de que el siglo XIX fue un periodo en el que las circunstancias políticas, económicas y culturales parecían desaparecer la fe cristiana, al menos en sus formas tradicionales.” 42
“La revolución industrial trajo la desgracia en los patrones sociológicos los cuales trajeron duda en la sociedad y pertenencia en la iglesia. El desarrollo industrial apoyaba los descubrimientos científicos poniendo en duda la cosmovisión cristiana.”43
Este periodo se desataca también por haber un despertad en las iglesias protestantes, trabajando en cumplir la misión y llevando el mensaje a diferentes partes del mundo. Además, la conciencia cristiana despierta frente a la situación de esclavitud en que se encontraban algunas personas en este siglo.
42 Justo L. González, Historia del pensamiento cristiano (Barcelona: Clie, 2010), 863.
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A pesar de estas complejidades de la época, la teología no quede fuera de esta explosión de conocimiento, algunos teólogos intentaron solucionar problemas del pensamiento moderno que la sociedad estaba teniendo por consecuencias de los grandes auges de conocimientos. Dentro de esta línea de pensamiento humano el teísmo llego a dividirse en dos grandes escuelas de pensamientos, los liberales y los fundamentalistas.
El liberalismo era quienes por las circunstancias de los avances de la ciencia y de las maquinarias intentaron mezclar los fundamentos del cristianismo con el método científico o método crítico. De los grandes exponentes del liberalismo son Friedrich Schleiermacher, Rudolf Bultman, Paul Tillich, Martin Heidegger y Albrecht Rischl. Se mencionan estos teólogos pues fueron quienes contribuyeron para plantar las bases del tema de la investigación y no se realiza un análisis de los teólogos fundamentalistas pues la línea de recopilación bibliográfica se centra en la historia del ateísmo.
La teología liberal rechaza la Biblia como revelación divina especial y se enfoca en la experiencia religiosa del ser humano El liberalismo presenta que la Biblia está llena de mitos y su utilidad es un libro de auto ayuda. Por otra parte, el
fundamentalismo intento también responder al despertar de conocimiento científico, enfatizando los fundamentos principales del cristianismo, los cuales estaban basados en la Biblia, como la única regla de fe, revelada verbalmente por Dios. En este periodo se ve una división del teísmo, como respuesta al método científico y al despertad que había ocasionado ilustración y las revoluciones anteriormente mencionadas.
La teología liberal es una fase de la historia de la teología protestante que corresponde en el periodo XIX y XX, siendo un intento de conciliar el cristianismo con la filosofía, la ciencia y los conocimientos modernos.
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Friedrich Schleiermacher fue hijo de capellán reformado del ejército, siendo el mayor exponente y padre del liberalismo44. Da énfasis en cambiar el centro de la verdad, pues la teología no es el centro de la verdad, la teología es parte de la relación entre Dios y el hombre, teniendo lugar este contacto en el alma inmortal del hombre.45 Presenta alma algo sobre natural, divino y es ahí donde se encuentra Dios con el ser humano, Dios no transmite nada porque el alma no está equipada para ello. Solo es un encuentro místico.46
Schleiermacher se basó en la filosofía de Emmanuel Kant mencionando que el hombre no tiene por qué someter su razón a ninguna autoridad más a ella de sí mismo. Kant, sin duda extrae información relevante de Descartes (siglo XVIII) quien fue el primer teólogo en proponer la filosofía comenzó con el sujeto humano.47
Tras la línea de pensamiento liberal este comenzó a dividirse por diferentes líneas de pensamiento, entre las cuales fueron lideradas por Georg Hegel, Soren Kierkegaard y varios teólogos contemporáneos.
Georg Hegel comenzó sus estudios de teología en Tubinga.48 Interesándose de dos temas, el carácter histórico del cristianismo y como la religión se relaciona con los acontecimientos históricos. El segundo era la relación entre el amor y la posición legalista del pecado. Producto de esto, el veía a Dios, un personaje que estaba en la historia, pero mucho más que esto, Dios es la historia, porque la historia es la vida del
44 Adriana Figueroa Velasco, Conociendo a los grandes filósofos (Buenos Aires, Argentina:
Universitaria, 1994).
45 González, Historia del pensamiento cristiano, 873.
46 Fernando Luis Canales, The Cognitive Principle of Christian Theology: A Hermeneutical
Study of the Revelation and Inspiration of the Bible (Berrien Springs, MI: Andrews University Lithothec, 2005), 153–180.
47 Ibid., 139–152.
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espíritu, pues si miras la historia, miras la vida del espíritu. En otras palabras, la historia es el espíritu mismo de Dios. Hegel presenta el desdoblamiento del espíritu a través de la tesis, antítesis y síntesis. Quienes son la base de la vida. Por otra parte, encontramos a Hegel, quien comienza a mezclar la historia con Dios, mostrando una manera de
relacionar las ciencias exactas como la historia y poder introducir la idea de un Dios existente.49
Kierkegaard presenta que la verdad es subjetiva puesto que la fe es un
sufrimiento, siendo la existencia una sacudida del todo a la cual podemos comparar a lo que llamamos pasión. La existencia es un sufrimiento mezclado con la pasión,
queriendo llegar a la máxima expresión cristiana de existencia, muriendo al yo, al yo autónomo, y al mismo tiempo es un gozo, pues lleva a la resurrección del nuevo yo.50
La teología de Kierkegaard establece el existencialismo, en la aceptación de la
existencia, producto de este análisis racional, él puede encontrar la mayor respuesta, que es Dios, la respuesta de toda la existencia.
En el mismo periodo, la teología católica se pone a la defensiva, con el propósito de realizar una apología de la fe ante una sociedad que ha comenzado a secularizarse, puesto que la mentalidad de las personas está dominada por el progreso científico y la razón. A causa de esto progreso científico está trayendo más adeptos a dudar de todo y comprobarlo. Al mismo tiempo, la teología se refugia en los seminarios, no realizando ninguna investigación nueva, sino que se limita a conservar y a repetir la tradición recibida desde los apóstoles.51
49 Ibid., 876.
50 Hugh Rose Mackintosh, Corrientes teológicas contemporáneas (Buenos Aires, Argentina:
Methopress, 1964), 203.
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El liberalismo mezcló en el teísmo elementos filosóficos que perjudicó gravemente al teísmo. El efecto de esta mezcla se ve en el neo liberalismo, en la teología Dios está muerto y en el panenteísmo del teísmo evolucionista. Todas estas corrientes teológicas surgen del liberalismo, quien transforma el teísmo en panenteísmo, en deísmo, en teísmo no-religioso o en teísmo secular.52
Paralelos al auge de estos movimientos encontramos el otro extremo del pensamiento cristiano que es el fundamentalismo. Quien busca poder conservar y fundamentar todo argumento que este en contra de los designios o tradiciones cristianas, teniendo cinco grandes marcos. El primero es la inspiración de la Biblia por el espíritu santo, es decir, la inerancia de la Biblia. En segundo lugar, el nacimiento virginal de Jesús. La muerte vicaria de Jesús por el pecado. La resurrección corporal de él y los milagros son reales.
Mientras los fundamentalistas alistaban esta línea de argumentos, los liberales rechazaban estos puntos mencionando que los milagros son mitos, la muerte de Cristo era algo inmoral, que el nacimiento virginal de Jesús era mentira.
Teísmo Cristiano en Siglo XX
La teología liberal sigue con adeptos, uno de ellos es Rudolf Bultman, quien es un teólogo importante para fines del siglo XIX y comienzos del siglo XX. Presenta el concepto de la desmitologización, en el cual Bultman propone sacar los mitos de la Biblia para hacer más cercano y entendible el mensaje bíblico a las personas del siglo XX. Bultman presenta dos tipos de vidas. Por una parte, la vida de la carne, la vida que está llena de miedo a la muerte, con angustia ante un Dios que te va a castigar por el pecado o un error humano. Por otra parte, la vida de la fe es la esencia de la vida
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autentica, el vencer el miedo a la muerte y a los mitos introducidos por la iglesia. Él que nos ayuda a saltar de la vida de la carne a la vida de la fe es Jesús, quien venció la vida de la carne y alcanzó la vida autentica. Su resurrección fue un acto alegórico sobre el miedo a la muerte, sobre una vida centrada al yo, sobre una vida de vicio y culpa.53
Hacia fines del siglo XIX y hasta la primera guerra mundial (1914-1918) existe una dominación de la teología critica-liberal liderada por el racionalismo. Según Plans la primera guerra mundial (1914-1918) tuvo repercusiones para la teología protestante. Se crea un ambiente pesimista y crítico. Existe un interés por la teología sistemática pues se aprovecha el material exegético y hermenéutico. Es este periodo denominado teología dialéctica o teología de la crisis.54
La teología neo-ortoxa surge como una reacción frente al fracaso de la teología liberal.55 Entre los principales neo-ortodoxos son Karl Barth, E. Brunner y E.
Thurneysen.56
Karl Barth57es uno de teólogos de la neo-ortodoxia enfoca que la teología cristiana de su tiempo está basada en la verdadera revelación divina, la Palabra de Dios. Esta revelación se encuentra en tres niveles: Jesucristo, la verdura y suprema revelación, la Biblia como testigo de la Revelación divina en Jesucristo, en la proclamación de la Palabra. La Biblia no puede ser la palabra de Dios en sentido directo pues definir a Dios en palabras es limitar a Dios. Sin embargo, la Biblia no es un producto netamente humano, sino que hay un testigo de la revelación, que se encuentra en Cristo, la
53 Ibid., 939–942.
54 Plans, Historia de la teología, 277.
55 Charles Caldwell Ryrie, La neo-ortodoxia: lo que es y lo que se hace (Chicago: Moody, 1996),
18.
56 Plans, Historia de la teología, 277.
57 Karl Bart nace en Suiza en 1886. Estudia en Berlín y Turinga bajo la influencia de teólogos
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verdadera revelación divina sobrenatural, milagrosa. Es en Jesucristo que el Dios transcendente se encuentra con la humanidad pecadora.58
Siguiendo la tradición calvinista, Barth plantea una doble predestinación. Pero esta predestinación conllevaba a Jesús, no al hombre. Fue Jesús quien fue predestinado a morir antes de la eternidad y a su vez ser el representante de la humanidad ante Dios.59 Así, Barth presenta un teísmo clásico, un Dios trinitario, personal, creador,
transcendente, pero inmanente en Jesucristo, en quien se crea, se revela y salva. Dietrich Bonhoeffer60 siguiendo la línea de los nuevos ortodoxos, propone una teología sobre su visión de una humanidad madura. El Dios de Bonhoeffer es un Dios del juicio y de los castigos Bonhoeffer en sus cartas expone la idea básica del mundo contemporáneo como un mundo secular en el que paulatinamente va desapareciendo la referencia a la religión61. En vez de esta, Bonhoeffer propuso un concepto poco
entendido, una religión no religiosa. Aunque Bonhoeffer no tuvo tiempo para poder liderar un pensamiento filosófico. Algunos teólogos posteriores fructificaron estos conceptos y desarrollaron la teología secular. Entre estos teólogos se puede mencionar a John Robinson y su libro Honest to God.62 Robinson afirma: “Nunca he dudado
realmente de la verdad fundamental de la fe cristiana, aunque reiteradas veces me haya sorprendido poniendo en duda la expresión de esa fe”63
58 González, Historia del pensamiento cristiano, 932–938.
59 Carlos Jiménez Ramírez, Crisis en la teología contemporánea (Vida, 1989), 51.
60 Dietrich Bonhoffer nace en Breslavia en 1906 de una familia de alta burguesía alemana siendo
pastor protestante. Ver más en Plans, Historia de La Teología, 280.
61 Ibid., 281.
62 Floreal Ureta, Introducción a la teología contemporánea (Mundo Hispano, 1992), 144.
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Jerald Brauer define el secularismo como “a comparatively new concept in Christian theology. There is no evidence of its use as a specific concept before the nineteenth century, and it did not become widely used until the twentieth.”64 Pero a su vez “Secularism has been used to define almost any spirit of opposition to Christianity regardless of the spurce of content of that opposition”65
Hans Kung menciona: “El mundo secular es el sentido prioritario del hombre por sobre el estado y las religiones. El hombre no se siente a gusto tan solo con los bienes religiosos, sino que el mundo secular conlleva a los ámbitos decisivos del individuo. Reflejándose en la cultura, educación, medicina, es un bienestar social. Pues el hombre está cansado del miedo de la ira de Dios, ya que esto es solo un mito.
Presentando al hombre como un agente que quiere una sociedad real, con acontecimientos reales, no con mitos, ni con agentes sobre naturales.”66
Ateísmo Occidental en el Siglo XIX
El ateísmo en el siglo XIX comienza su época de apogeo producto a la
revolución francesa en 1789. Un representante de este siglo es Ludwig Feuerbach quien influirá a pensadores como Karl Max y Friedrich Nietzsche.67 Feuerbach propuso un ateísmo antropológico68, Max ampliara el concepto del ateísmo político-social69, y
64Arthur A. Cohen, A Handbook of Christian Theology: Definition Essays on Concepts and
Movement of Thought in Contemporary Protestantism (World Pu: Nashville , 1958), 339.
65 Ibid.
66 Hans Küng, Ser cristiano, 4a ed. (Cristiandad, 1978), 22–23.
67 Friedrich Nietzsche nació en Rocken, Prusia el 15 de octubre de 1844. Ver más en Heinrich
Mann, El Pensamiento vivo de Nietzsche (Buenos Aires: Losada, 1942), 9.
68 Hans Küng, ¿Existe Dios? Respuesta al problema de Dios en nuestro tiempo, 4a ed. (Madrid:
Cristiandad, 1979), 227–250.
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Nietzsche presenta una crítica a la cultura70. Por otro lado, encontramos a Sigmund
Freud con el ateísmo psicoanalítico.71
Según Feuerbach, la relación de Dios con el hombre es de hecho que el hombre crea a Dios a su imagen, con el fin de fundamentar y certificar la ignorancia, los miedos y las implicancias del ser humano. Por esta razón cada vez, Dios tendrá menos lugar en la vida humana mientras la ciencia aumente y sea capaz de explicar lo que aun la humanidad no entiende. El concepto de la existencia de Dios tiene un lugar negativo, pues el impone una moral y una forma de comportamiento anti natural. Siendo la religión quien realiza este acto. Dios produce en el ser humano el concepto de
alienación. Que consiste en un dolor vital, un miedo en tener códigos morales fuera de nuestra lógica humana.72
“Evidentemente para Feuerbach la religión debe entenderse con mayor
profundidad: ¡principio, centro y fin de la religión es el hombre mismo; la religión es la auto adoración del hombre!”73 Además Feuerbach sigue rectificando que cualquier manifestación humana de fe, esperanza y amor, es sin duda un momento de proyección de la vida espiritual.74
En una definición que se volvió popular, Karl Marx presenta a la religión como el opio del pueblo, siendo un medio de apaciguar y dar consuelo social. 75 La religión para Marx es una experiencia irreal, considerando al igual que Feuerbach el concepto de
70 Ibid., 385.
71 Ibid., 302.
72 L. Feuerbach, La esencia del cristianismo, 35–47.
73 Küng, ¿Existe Dios?, 239.
74 Hans Küng and José Manuel Lozano Gotor, El principio de todas las cosas: ciencia y religión
(Madrid: Editorial Trotta, 2007), 60–61.
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Dios no existe pues es el hombre quien lo crea. Esto es así puesto que el sujeto humano realiza una actividad que crea una propia identidad. Siendo la religión o la existencia de Dios una identidad del ser humano, pero proyectando algo en contra a su realidad, ya que Dios es infinito, en cambio el hombre es finito. Este Dios es una invención del ser humano para poder huir de la realidad y encontrar una salida ante la situación social que se estaba viviendo. Marx presenta la religión como “una especie de aguardiente
espiritual, en el que los esclavos del capital ahogan su rostro humano y sus aspiraciones a una vida medio digna del hombre.”76 Por ejemplo: la muerte de bastantes personas
por la revolución francesa. Marx se volvió materialista, haciendo mención que lo material es lo real. De esta manera, el universo está compuesto por materia, estando la materia en la condición óptima para que el objeto fuese real. Es así, que Marx introduce al pensamiento la dialéctica materialista.77
El fundamento de la crítica religiosa es: el hombre hace la religión, y no ya, la religión hace al hombre. Y verdaderamente la religión es la conciencia y el sentimiento que de si posee el hombre, el cual aún no alcanzo el dominio de sí mismo o lo ha perdido ahora. Pero el hombre no es algo abstracto, un ser alejado del mundo. Quien dice: "el hombre", dice el mundo del hombre: Estado, Sociedad. Este Estado, esta sociedad produce la religión, una conciencia subvertida del mundo, porque ella es un mundo subvertido. La religión es la interpretación general de este mundo78
Otro exponente importante del ateísmo del siglo XIX es el científico Charles Darwin quien presenta la teoría de la evolución, siendo una de las áreas de la biología que el ateísmo propone para dar respuesta al génesis de la especie humana. 79 En su
libro, El Origen de las Especies, publicado en 1859,80 Darwin presenta el concepto de la
76 Küng, ¿Existe Dios?, 279.
77 Jules Monnerot, Dialéctica del marxismo (Madrid: Guadarrama, 1968), 113–150.
78 Karl Marx, José María Ripalda, Introducción a la crítica de la filosofía del derecho de Hegel
(Valencia: Pre-Textos, 2014), 5.
79 Julián Huxley, El Pensamiento vivo de Darwin, 2a ed. (Buenos Aires: Losada, 1943), 9.
80 Francisco Rothhammer, El Desarrollo de las teorías evolucionistas después de Darwin
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selección natural, la sobrevivencia del más fuerte y los débiles son quienes mueren o menguan.81 Debido a esta sobrevivencia algunas especies mutan de manera biológica para sobrevivir a los improvistos surgidos por el ambiente en el que viven. Huxley explica que “La selección natural actúa exclusivamente por medio de la conservación y la acumulación de las variaciones que son útiles a cada individuo en las condiciones orgánicas e inorgánicas donde puede encontrase colocarse en todo el periodo de la vida”82 El profesor Hebden Taylor define la evolución: como un proceso direccional y
esencialmente irreversible ocurrido en el tiempo, la cual en su curso da lugar al
incremento de la variedad y un incrementado alto nivel de organización de productos.”83 Giuseppe Sermonti nota que “Darwin comprendió que la selección natural proporciona un mecanismo automático gracias al cual un organismo complejo puede sobrevivir y aumentar tanto en números de ejemplares y en complejidad.”84 Bajo esta mirada no es necesario creer que hubo un creador que hizo todas las especies, y gracias a la teoría de la evolución y el método científico, el ateísmo se enriqueció y le trajo herramientas que le contribuyeron al pensamiento a-religioso.
Por último, uno de los representantes de este siglo que trazo las bases para el ateísmo psicosocial es Friedrich Nietzsche que repercute en la sociedad con la frase “Dios ha muerto”, siendo que la fe en el Dios cristiano ha perdido toda credibilidad. El ateísmo de Nietzsche como lo presenta Küng niega a Dios, a todo tipo de Dios, y en particular al Dios cristiano.85 Nietzsche declara:
81 Charles Darwin, El Origen de las Especies (Mexico: Ercilla, 1988), 135.
82 Huxley, El Pensamiento vivo de Darwin, 137.
83 Hebden Taylor, ¿Evolución o reformación en la biología? (T.S.E.L.F, 1974), 20.
84 Giuseppe Sermonti, Más allá de Darwin: crítica al evolucionismo (Buenos Aires, Argentina:
Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino Católica de Tucuman, 1984), 10.
