• No se han encontrado resultados

MEDIOS DE COMUNICACIÓN E INFORMACIÓN Y REDES SOCIALES EN LA POLÍTICA EXTERIOR DE BOLIVIA, ECUADOR Y VENEZUELA ( )

N/A
N/A
Protected

Academic year: 2021

Share "MEDIOS DE COMUNICACIÓN E INFORMACIÓN Y REDES SOCIALES EN LA POLÍTICA EXTERIOR DE BOLIVIA, ECUADOR Y VENEZUELA ( )"

Copied!
125
0
0

Texto completo

(1)

1

MEDIOS DE

COMUNICACIÓN E

INFORMACIÓN Y

REDES SOCIALES

EN LA POLÍTICA

EXTERIOR DE BOLIVIA,

ECUADOR Y

VENEZUELA (2006-2012)

Por: Ptgo. MsRE. Alfredo Alfonso Torrealba

(2)

2

INDICE

INTRODUCCIÓN ………гей

1.- CARÁCTERÍSTICAS DEL SERVICIO DIPLOMÁTICO

DE BOLIVIA, ECUADOR Y VENEZUELA EN EL PERIODO 2006-2012………ж7 1.1. PRINCIPALES CARÁCTERÍSTICAS DEL SERVICIO DIPLOMÁTICO

DE BOLIVIA, ECUADOR Y VENEZUELA EN EL PERIODO 2006-2012……….…гж7 1.1.1.- Enfoques sobre el origen de las instituciones diplomáticas

formales en América Latina: Desafíos……….…ггж7 1.1.1.1.- El triple discurso diplomático……….…г20 1.1.1.2.- Las Franquicias Consulares………..21 1.1.1.3.- El Profesionalismo del Diplomático Latinoamericano…………22 1.1.2.- Diferencias y Semejanzas entre las cancillerías de Bolivia,

Ecuador y Venezuela: Oficinas Substantivas y de apoyo; y

el principio de “dignidad”………г26 1.2.- PRINCIPALES TEMAS DE INTERÉS DE LA POLÍTICA EXTERIOR

DE BOLIVIA, ECUADOR Y VENEZUELA EN EL PERIODO 2006-2012………г36 1.3.- PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS DE LA POLÍTICA EXTERIOR

DE BOLIVIA, ECUADOR Y VENEZUELA EN EL CONTEXTO DE

LA DIPLOMACIA PÚBLICA Y LA DIPLOMACIA CIUDADANA………гггйз 1.3.1.- El encuentro entre la Diplomacia Pública de EUA y la

Diplomacia Pública de Bolivia, Ecuador y Venezuela………г………гйз 1.3.2.- La Diplomacia Ciudadana en la construcción de la

política exterior de Bolivia, Ecuador y Venezuela………гкж 2.- LA e-DIPLOMACIA Y LA PARADIPLOMACIA EN

LA POLÍTICA EXTERIOR DE BOLIVIA, ECUADOR Y VENEZUELA

EN EL PERIODO 2006-2012. ……….………кл 2.1.- LA e-DIPLOMACIA EN EL PROCESO DE CREACIÓN

DE LA DIPLOMACIA PÚBLICA………г………кл 2.1.1.- Redes Sociales y Blogs………глз 2.1.2.- Sistemas De Comunicación Móvil………ггло 2.2.- LA e-DIPLOMACIA EN EL PROCESO DE CREACIÓN DE LA

DIPLOMACIA CIUDADANA………г………гмж 2.3.- LA PARADIPLOMACIA Y LA e-DIPLOMACIA EN LA

(3)

3

3.- MEDIOS DE COMUNICACIÓN E INFORMACIÓN Y REDES SOCIALES COMO INSTRUMENTO DE DIFUSIÓN DE LA POLÍTICA EXTERIOR DE BOLIVIA, ECUADOR

Y VENEZUELA EN EL PERIODO 2006-2012………гмл 3.1. MEDIOS DE COMUNICACIÓN E INFORMACIÓN Y

REDES SOCIALES EN LA DIFUSIÓN Y DESARROLLO

DE LAS IDEAS DEL SOCIALISMO……….…..……ггмл 3.2. MEDIOS DE COMUNICACIÓN E INFORMACIÓN

COMO PROYECTOS DE INTEGRACIÓN POLÍTICA EN

AMÉRICA LATINA………г………г………...……гг85 CONCLUSIÓN……….…..….…оз GRAFICO 1 – ORьцNIьRцMц DE Lц шцNшILLERIц DE чOLIVIц Эзежж)……г……ггг…гом GRAFICO 2 – ORьцNIьRцMц DE Lц шцNшILLERIц DE EшUцDOR Эзежз)……г…ггг…гом GRAFICO 3 – ORGANIGRAMA DE LA CANCILLERIA DE VENEZUELA (201з)…………гон TABLA 1 - CUADRO COMPARATIVO DE LA PARTICIPACIÓN DE

LOS PAÍSES LATINOAMERICANOS EN OTROS PROYECTOS DE

INTEGRACIÓN DE AMÉRICA LATINA - ACTUALIZADO AL 2014………гг…оо TABLA 2 – LISTA DE PAÍSES DE AMÉRICA LATINA ORDENADA QUE

NO NECESITAN VISA PARA INGRESAR A OTROS PAÍSES………ггжее

GLOSARIO………жеж BIBLIOGRAFÍA………ггг………гжек

(4)

4

INTRODUCCIÓN

En el siglo XX, en América Latina, los Medios de Comunicación Social ocuparon un lugar importante en la relación entre los ciudadanos y los gobiernos democráticos. Los Medios de Comunicación Social fueron percibidos como instancias fiscalizadoras de la gestión pública, como mediadores entre los poderes y los ciudadanos, en el sentido de articular demandas, descontentos y aspiraciones de los ciudadanos ante las autoridades electas. Al mismo tiempo, la ciudadanía consideraba que los Medios de Comunicación Social tenían el deber de ofrecer información oportuna e imparcial, ya que esto era indispensable para mejorar el rol de las instituciones democráticas y acabar con la corrupción. En este sentido, las políticas liberales reivindicaban la importancia del periodismo en la construcción de la participación ciudadana. Sin embargo, también fue un hecho que en el siglo XX aparecieron Medios de Comunicación Social independientes. Estos medios independientes fueron apareciendo a medida que la publicidad se estaba transformando en una importante fuente de recursos financieros; y estaba interfiriendo, condicionando, distorsionando y presionando la función social de informar “objetivamente” de los mediosб así como la libertad de expresión y de información.

En este orden de ideas, en el siglo XX se hicieron populares dos tipos de Medios de Comunicación Social en América Latina: los medios que pertenecían a gobiernos, partidos políticos, empresas, sectores religiosos o posiciones ideológicas; y los medios independientes, los cuales estaban relacionados a los valores democráticos y estaban comprometidos a cumplir un importante papel en la formación ciudadana. Sin embargo, Olga Dragnic (2007) comentó que con el paso de los años estos dos tipos de medios terminaron inclinándose a favor de grupos políticos y financieros; o se volvieron organizaciones monopólicas y oligopólicas; o se transformaron en actores políticos, y reemplazaron a los partidos políticos tradicionales. Entretanto, y hasta finales del siglo XX, los medios independientes siempre fueron apareciendo en cada ciudad y en cada país; y ellos se identificaban, en la mayoría de los casos, como medios de comunicación que estaban comprometidos con los temas sociales y la autonomía.

Pero a finales del siglo XX, en el marco del desarrollo de las telecomunicaciones e información, surgieron un conjunto de Medios de Comunicación Social que fueron denominados Medios de Comunicación Social Alternativos, los cuales están conformados por ciudadanos y grupos sociales que fueron excluidos de la oferta mediática tradicional y tenían como propósito informar sobre los temas comunitarios y locales, los cuales no tenían mayor importancia para los medios tradicionales de información. Pero, incluso así, no se pudo evitar que surgiera un sentimiento de desconfianza en la ciudadanía en torno al rol de los Medios de Comunicación Social. En un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Harvard en зееиб citado por Olga Dragnicб se señaló la grave y “creciente desconfianza del ciudadano en la profesión periodística, desconfianza que a veces se convertía en odio” ЭKOVACH Y ROSENSTIEL: 2004, 15). Asimismo, en dicho estudio se señaló que los ciudadanos habían entendido que los Medios de Comunicación Social eran

(5)

5

utilizados para difundir información cuya orientación concuerda con los intereses de los grandes capitales. Pero este estudio no evaluó el rol de los Medios de Comunicación Social para difundir información cuya orientación concuerda con los intereses de los gobiernos, como es el caso de Estados Unidos de цmérica ЭEUц) y su “Diplomacia Pública”г

La “Diplomacia Pública” intenta transmitir los valores norteamericanos hacia otros países. Así lo estima la United States цdvisory шommission on Public Diplomacyп “La

diplomacia pública es aquella actividad que complementa la diplomacia tradicional entre los gobiernos a través de la comunicación de las políticas norteamericanas y la información acerca de EUA a la gente y los gobiernos de otros países, y al favorecer los contactos personales y el mutuo entendimiento a

través de programas educativos y culturales” (2014). Según Erick Fernández y Mauricio Ruíz Soto

(1999)б durante este proceso de transmisión de informaciónб EUц emplea “la manipulación

sistemática de imágenes, símbolos, discursos, slogans, gestos, entre otros, para alterar, controlar, o en última instancia, influir en las actitudes, valores, creencias y acciones de la población de un país extranjero, hasta el punto de lograr que acepte los puntos de vista de los propagandistas. Así, veremos que no hay diferencia con el objetivo de la Diplomacia Pública” (344). Para ellos, gran parte de los

Medios de Comunicación Social en América Latina a lo largo del siglo XX sirvieron como canales para los intereses norteamericanos. Pero ellos sostienen que luego de la derrota electoral de George H. W. Bush en 1992 ante el demócrata Bill Clinton; y como resultado de la distensión de fuerzas de control de EUA en América Latina a raíz de la caída de la Unión de República Socialistas Soviéticas (URSS); la forma en que se administró “la guerra del golfo”; y la falta de resultados para conseguir un consenso mundial en torno al sistema político cubano, el Departamento de Estado norteamericano puso en la mesa la “suspensión de

las actividades de la Diplomacia Pública” para цmérica Latina yб en especialб para шubaг Pero

estas iniciativas nunca lograron obtener resultados debido a la fuerte presión que ejercieron los cubanos exiliados en Miami en el gobierno de Bill Clinton. Por su parte, Demetrio Boersner (2003) señaló que la “Diplomacia Pública” y la política exterior de EUA hacia América Latina, tuvo un cambio importante luego de la caída de la URSS:

“Cuando EUA perdió –algo- interés en mantener el férreo control político en el continente

americano, luego de la caída de la URSS a principios de los años 90´s, casi de inmediato se comenzaron a ver un conjunto de movimientos y posturas políticas en los países latinoamericanos que probablemente nunca habrían tenido cabida durante la Guerra Fría.

Las –libertades- que concedió EUA a la región en esos años, fueron el resultado de la

despreocupación de ese país por América Latina y su interés creciente por seguir los eventos convulsivos que ocurrían en Europa. Antes de este periodo, cualquier iniciativa política latinoamericana debía ajustarse al guión escrito por EUA para el futuro de la región, de no ser así, EUA habría actuado para sofocar esa acción, y si hubiera sido necesario, hubiera mandado a ajusticiar a sus principales promotores (…) Durante la Guerra Fría, EUA se esforzó para tener el control de la región. Obviamente, hubo grandes fracasos como lo ocurrido en Cuba; y grandes puntos álgidos como el Golpe de Estado en Chile en 1973, y el Golpe de Estado de Granada en 1983, (casos en que murieron ambos presidentes de esos países), cuando EUA estuvo a punto de perder influencia en la región. Sin contar, la Guerra de las Malvinas en 1982 y el caso de Contras en Nicaragua en 1984

(6)

6

y la guerra civil colombiana. Pero en mayor o menor medida, el continente estuvo controlado durante ese periodo, y una vez concluida la amenaza de expansión de la Unión Soviética a la región, EUA bajó el nivel de control en América Latina y se preocupó por “capitalizar las ganancias políticas de la desaparición de la URSS en Europa”

(BOERSNER: 2003).

En consecuencia, cuando EUA desvió la mirada política para concentrarse en sus asuntos en Europa a principios de los años 90s, el escenario político latinoamericano fue propicio para la aparición de importantes revueltas ciudadanas y militares en la región. Por ejemplo, en 1992 ocurrieron dos golpes de Estado en Venezuela1, así como en Perú. Y la revuelta de los indios y campesinos pobres de Chiapas, México en 1994 (SAINT-PIERRE: 2000). Luego, vino la caída de Bucarán (Ecuador, 1997); Cubas (Paraguay, 1999); De la Rúa (Argentina, 2001); Sánchez de Lozada (Bolivia, 2003); Lucio Gutiérrez (Ecuador, 2005), todos producto de fuertes protestas ciudadanas. Paralelamente, nacieron dos grandes manifestaciones populares en Argentina (puebladas, 1994) y Brasil (Movimiento de los Trabajadores Sin Tierra, 1996) (MACHADO: 2001). Todos estos eventos, probablemente, hubieran tenido otro significado durante el periodo de la Guerra Fría.

Otro hecho importante que sugiere también la despreocupación de EUA por esta región tras el fin de la “ьuerra ыría”, es que en 18 países hubo un total de 316 reformas constitucionales entre 1989 y 2009 (DETLEF: 2011). Lo cual significo que bastó que EUA perdiera interés en la región, para que en cuestión años América Latina fuera la región con más cambios y reformas constitucionales que en cualquier otra región del mundo (DETLEF: 2011) y que desde 1986 toda la región multiplicó por tres el número de leyes nacionales en diferentes materias y contenido. Por otro lado, en la escena internacional, en los años 90s, los pueblos latinoamericanos vieron que el mundo ahora tenía una escena llena de múltiples actores, pero sin un multilateralismo, con baja legitimidad de instituciones emergentes que no lograron (ni logran) dar gobernabilidad global (ROJAS ARAVENA: 2012); lo cual creo posibilidades políticas para que los países pudieran “disentir” del control estadounidense y buscaran su propio camino.

En lo económico, en los años noventa, casi toda América Latina vivió la experiencia del neoliberalismo en sus políticas públicas que, en gran medida, desarticuló la matriz estatal, administrativa y de políticas desarrollistas desplegada entre 1945 y 1975 (SCHWEINHEIM: 2011). En este sentido, a partir de los años 90s, los gobiernos de América Latina tuvieron que ajustarse a las nuevas realidades y tendencias económicas, e implementaron una nueva matriz de políticas administrativasб financieras y productivas “no supervisadas por el imperio” o el “шonsenso de Washington”2, que a su vez permitieron que los países de

1 Recuérdese el Golpe de Estado contra el Presidente Hugo Chávez en el 2002, financiado por EUA.

2 Para Rubí Martínez Rangel (2012), el consenso de “шonsenso de Washington” no comprendió las estructuras

económicas de América Latina, e incluso, no comprendió su desarrollo. Además, el “шonsenso de Washington”

tenía objetivos limitados en la región y carecía de instrumentos. Pero ahora, en el contexto de la era “Post-

(7)

7

América Latina amoldaran sus instituciones políticas y la totalidad de sus sistemas económicos a las realidades particulares e inherentes de sus pueblos, cultura, historia, religión, educación, idiosincrasia y localización geográfica. La llegada de esas reformas acabó con aquel modelo “nacional y de desarrollo” y la “arquitectura política institucional” que por más de cincuenta años implantó EUA en la región y que poco pudieron resolver los problemas más básicos de muchos de los países (DINIZ: 2009).

Desde ese entonces, América Latina no es ajena a los rápidos e intensos cambios en la naturaleza, las fuentes y las pautas de distribución del poder que caracterizan al sistema internacional, cuyo centro de gravedad comenzó ya hace varios años atrás a desplazarse desde el área nor-atlántica hacia la de Asía-Pacífico. En este contexto, la región ha experimentado un doble proceso de ascenso y creciente diferenciación. América Latina ha podido aumentar su peso económico y político, con países que se afirman como líderes regionales y afianzan su influencia global como países emergentesп “con mayor confianza en sí

mismos, esos países ensayan políticas exteriores más asertivas y de mayor alcance, con nuevas formas de regionalismo y multilateralismo que buscan, de manera expresa, ampliar los márgenes de

autonomía” ЭSцNцHUJцп зеж2, 13) e independencia en un mundo que se percibe multipolar.

“Esa diversidad se observa también en las estrategias de desarrollo adoptadas. Lejos

queda el periodo en el que se asumían de forma generalizada, aún con variantes nacionales, las políticas del -Consenso de Washington-. Las dudas sobre ese modelo surgidas tras las crisis financieras vividas desde mediados de los noventa, la aparición de estrategias de desarrollo más abiertas del llamado -Post-consenso Washington-, las transformaciones de la estructuras productivas y de las exportaciones, y el cambio de ciclo político de los años 2000, son, entre otros, los factores que han dado paso a un panorama más diverso de políticas de desarrollo, modalidades y estrategias de inserción internacional y de visiones de regionalismo y la integración regional. En concreto, algunos países de la región mantienen políticas liberales ortodoxas, otros apuestan por el modelo alternativo del -socialismo del siglo XXI-, y en otros casos se plantean distintas combinaciones de estabilidad macroeconómica, inclusión social y desarrollo industrial que se situarían en el marco del denominado -consenso de Brasilia-” (SANAHUJA: 2012, 13-14).

Pero la consecuencia más importe que ha traído esta falta de control de EUA en América Latina, es la aparición de una cierta resistencia a apoyar “con los ojos cerrados”: las formas neoliberales; la intromisiones de potencias en los asuntos nacionales de las repúblicas; y el rol de la “Diplomacia Pública”б la cual se articulaba con los Medios de Comunicación Social; las Organizaciones No Gubernamentales (ONG); y el trabajo de agencias nacionales de EUA como Drug Enforcement Administration (DEA), Central Intelligence Agency (CIA) y Federal Bureau of Investigation (FBI). En conjunto, estas organizaciones durante la “Guerra Fría” funcionaron como agentes de control de las democracias latinoamericanas; pero su rol ha venido en franco deterioro desde los años 90s y, más aún, a medida que han aparecido gobiernos con tendencia izquierdista en la región en la primera década del siglo XXI (CASTAÑEDA: 2006) (FRENCH: 2009) (PANIZZA: 2005) (WEYLAND: 2009). El asenso de

(8)

8

los gobiernos izquierdistas en la región estuvo también asociado a un conjunto de tendencias sistémicas que, en general, pudieran aproximarnos a las principales características de las relaciones internacionales de América Latina en este periodo. Por ejemplo, 1) los países de América Latina desarrollaron posturas internacionales que apoyaron los modelos económicos neoliberales y los modelos económicos alternativos. En este sentido, Argentina, Brasil, Bolivia, Nicaragua, Cuba, Uruguay, Ecuador y Venezuela, se diferenciaron por impulsar políticas económicas alternativas al Fondo Monetario Internacional (FMI), al Banco Mundial (BM) y a los lineamientos de EUA, a diferencia de los otros países que muestran una seria orientación a seguir los lineamientos neoliberales; 2) los países de América Latina mostraron una tendencia a apoyar estrategias multilaterales en el “Nuevo Orden Internacional”, incluyendo el impulso a las relaciones Sur-Sur y acercándose al movimiento mundial de “Países No Alineados”. Fortaleciendo nuevas rutas de desarrollo económico y comercio intrarregional, regional e internacional; 3) los países de América Latina mostraron una tendencia hacia la integración política y económica. Resulta interesante ver el aumento de la cantidad de convenios internacionales entablados por los países latinoamericanos con otros países no tradicionales en diversas áreas de desarrollo y ámbitos de cooperación; 4) en los países de América Latina aumentó el número de Medios de Comunicación Social, así como su poder de influencia en los gobiernos. También llama la atención la aparición de Medios de Comunicación Social nacionales e internacionales que transmiten información contraria a la política exterior de EUA y apoyan políticas económicas alternativas al neoliberalismo; 5) los países de América Latina han tenido mayor libertad para adecuar sus políticas consulares en todo el mundo y abrir nuevas embajadas; 6) el proceso de integración en América Latina se ha visto entorpecido por la política internacional de EUA, al tratar de imponer el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), así como sus constantes interferencias en los asuntos nacionales de los Estados Latinoamericanos; 7) Se ha desprestigiado el rol de la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Convención de Derechos Humanos de San José de Costa Rica, la Comunidad Andina, Sistema Económico para América Latina, por mantener una postura al servicio de los intereses de la política exterior de EUA; al mismo tiempo que se fortalece el Mercado Común del Sur (MERCOSUR) y la Alternativa Latinoamericana de los Pueblos de Nuestra América (ALBA); 8) la región avanza hacia el aumento de su armamento y tecnología militar, en virtud de los cambios de paradigmas en cuanto a seguridad, amenazas, riesgos y desafíos de la seguridad hemisférica; 9) en la región se ha consolidado el Sistema Democrático, con sus excepciones. Además han ocurrido progresos en la desaparición de grupos terroristas y rebeldes en el continente, la lucha antidroga; a la par de la superación de barreras históricas que se creían infranqueables, como la pobreza, el hambre o la debilidad de las instituciones; 10) los países de América Latina mostraron una tendencia para impulsar políticas para la conservación y protección del medio ambiente, derechos humanos, derechos de la mujer, derecho del niño y del adolescente, a los trabajadores, a las minorías, a los pueblos originarios; y finalmente, 11) los países de América Latina comenzaron a entender la diferencia entre Globalización, Soberanía, Independencia y Solidaridad, para construir sus agendas políticas en temas de desarrollo económico y político, incluyendo ideas las integración regional. Sin embargo, a la par existe una profunda crisis de conceptos e ideas a lo largo de toda la región, que pareciera

(9)

9

sugerir que cada gobierno de América Latina tiene su propio concepto o idea acerca de la democracia, economía, elecciones, sociedad, derecho, entre otros.

Ahora bien, en este complejo escenario es preciso referirnos a la aparición de tres gobiernos de tendencia izquierdista en la región. Nos referimos al gobierno de Juan Evo Morales Ayma (26-10-1959) (Estado Plurinacional de Bolivia); Rafael Vicente Correa Delgado (06/04/1963) (República de Ecuador); y Hugo Rafael Chávez Frías (28-07-1954/17-03-2013) (República Bolivariana de Venezuela). La llegada de Evo Morales al gobierno de Bolivia en el 20063; la llegada de Rafael Correa al gobierno de Ecuador en el 20074, y la reelección presidencial de Hugo Chávez 20065 en Venezuela, pudieran considerarse hechos aislados de no ser porque su llegada al poder significó un punto importe en el impulso de las ideas socialistas en Suramérica. Debido al fracaso de las políticas neocapitalistas y neoliberales que se habían aplicado en cada uno de estos países hasta el año 2005, la mayoría del electorado había votado a favor de los proyectos políticos de estos candidatos que se caracterizaban por ofrecer un cambio sustancial en el modelo económico que se estaba utilizando. Gracias al liderazgo de Hugo Chávez, quien en enero de 2004 había mencionado la necesidad de encaminar a Latinoamérica por otros modelos económicos como el modelo “del socialismo de lo pequeño”6, y gracias a las reuniones políticas que Hugo Chávez había mantenido con Evo Morales y Rafael Correa en su etapa preelectoral, a partir del año 2006 los tres países compaginaron su política exterior no sólo al dar prioridad a la búsqueda de un modelo económico propio basado en ideas socialistas, sino también a hacer resistencia la tradicional intromisión de EUA en la región, así como priorizar otros problemas como el narcotráfico, la guerrilla, el desarrollo económico, el rol político de los medios de comunicación, la integración económica y política; y el desarrollo tecnológico. Y aunque en más de una ocasión Hugo Chávez invitó a los demás gobiernos de América Latina a unirse en este proyecto, tan sólo obtuvo la respuesta expresa de tres gobiernos caribeños: el gobierno de Daniel Ortega Saavedra (Nicaragua7), Fidel Alejandro Castro Ruz y Raúl Modesto Castro Ruz (Cuba); y José Manuel Zelaya Rosales8 (Honduras). En Cambio, los gobiernos de Fernando Armindo Lugo Méndez (Paraguay9), Néstor Carlos Kirchner y Cristina Elisabet Fernández de Kirchner (Argentina)10, Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Vana Rousseff (Brasil)11, si bien se inclinaron por apoyar las ideas socialistas en Venezuela, nunca

3 Evo Morales fue elegido presidente de Bolivia por 53.72% de los votos.

4 Rafael Correa fue elegido como presidente de Ecuador por 56,67% de los votos.

5 Hugo Chávez fue reelegido presidente de Venezuela con más del 62,84% de los votos.

6 La primera vez que Hugo Chávez habló sobre socialismo ante los medio de comunicación, utilizó éste término

con el objeto de darle un nombre a una nueva estrategia para crear un Estado dirigido a impulsar el Socialismo en las clases sociales más bajas, mientras que se aceptaba la idea de prácticas neocapitalistas en las clases media y alta.

7 Presidente de Nicaragua desde el 2007.

8 Presidente de Honduras en el periodo 2006-2009.

9 Presidente de Paraguay en el periodo 2008-2012.

10 Néstor Carlos Kirchner fue presidente de Argentina en el periodo 2003-2007. Y desde 2007 Cristina Elisabet

Fernández de Kirchner es la presidente de Argentina.

11 Luiz Inácio Lula da Silva fue presidente de Brasil en el periodo 2003-2011. Y desde 2011, Dilma Vana Rousseff

(10)

10

oficialmente expresaron su intención de adherirse al proyecto del “Socialismo del Siglo XXI” ni tampoco aplicaron políticas socialistas en sus países, pues en las palabras de Lula Da Silva esta era una idea que aún “había que madurar con calma” y no “había necesidad de apresurarse”12, pues era sólo “un eslogan”13. En consecuencia, Argentina, Brasil y Paraguay continuaron con su propia política exterior estrechando lazos políticos con todos los países sudamericanos en forma habitual14; mientras por otro lado, los gobiernos de Chile, Colombia, Perú y Uruguay15, no manifestaron interés en esta propuesta y han continuado su tradicional política exterior “en fraternidad”г Por ejemploб Miriam Lang (2010, 7-22) considera que Bolivia, Ecuador y Venezuela están transitando por un cambio que, sin duda, suponen la ruptura con un modelo económico neoliberal y esto los identifica del resto de los países suramericanos, lo cual es algo similar a lo que ocurre en Centroamérica, con Cuba y Nicaragua, países que son los otros ejemplos izquierdistas de la región y también partícipes de las ideas del “Socialismo del Siglo XXI” 16.

La organización “Seminari d’economia crítica Taifa” en un informe del año зе09, consideró que los rasgos principales de los modelos económicos y sociales que se están llevando a cabo, o que se están intentando llevar a la práctica en América del sur, permiten distinguir que entre los años 2006-2012 existían diferentes tipos de gobiernos: los gobiernos que apoyan el neoliberalismo americano como Colombia, Chile y Perú; los gobiernos que podrían denominarse “gobiernos híbridos”б porque tienen políticas que armonizan las políticas neoliberales y “las políticas con alto contenido social”б como es el caso de чrasilб Argentina o Uruguay; y por último los gobiernos que pretenden romper con el neoliberalismo apoyándose en la movilización popular: Bolivia, Ecuador y Venezuela. Las diferentes orientaciones políticas de estos gobiernos permitieron que se fortalecieran las relaciones políticas y diplomáticas entre Bolivia, Ecuador y Venezuela, principalmente. Por lo que las ideas del “Socialismo del Siglo XXI” quedaron dividas en dos grandes alianzas en términos geopolíticos. En Suramérica, en Bolivia, Ecuador y Venezuela; y en Centroamérica, en Nicaragua, Cuba y Honduras. Al mismo tiempo que EUA, desde el norte, activo sus mecanismos de “Diplomacia Pública”б contra estos países por estar promocionando ideas “antidemocráticas” que podían amenazar sus intereses en la regiónг

Por otro lado, los gobiernos de Evo Morales, Rafael Correa y Hugo Chávez llevaron a cabo reformas constitucionales en sus países para impulsar sus proyectos políticos, los cuales se caracterizaron por tener gran contenido de ideas socialistas y participativas. El politólogo finlandés Rickard Lalander (2011, 55-85) considera que Bolivia, Ecuador y Venezuela se distinguen del resto de los países americanos en el periodo 2006-зежжб no sólo porque “dirigen

12 Palabras del presidente Lula Da Silva en torno a seguir las propuestas del “Socialismo del Siglo XXI” en зееог

13 Palabras del ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Celso Amorín en 2012.

14 María Teresa Romero (2012), reconoce que en el caso de Brasil, durante el gobierno de Lula Da Silva

(2003-2010) hubo un acercamiento ideológico al presidente venezolano Hugo Chávez; no obstante, con el gobierno de Dilma Rousseff se percibe “menos ideología y más pragmatismo” con el líder venezolanoг

15 Incluso durante la presidencia del “izquierdista” José Mujica Эзеже - … )г

16 Para Marta Harnecker (2012), Bolivia, Ecuador y Venezuela son el principal escenario de desarrollo del

(11)

11

la llamada transformación hacia la izquierda en América Latina y el -Socialismo del Siglo XXI-“б sino

porque, en ese mismo periodo, estos países presentaron al mundo nuevos textos constitucionales con el objeto de acentuar esos cambios socialistas; tuvieron procesos electorales y referendos populares muy frecuentes; y como enfatiza Steve Ellner (2012: 98), si bien los gobiernos de Chávez, Morales y Correa no se caracterizaron por una acentuación de la represión intensa y sistemática de los adversarios políticosб si hubo “acusaciones sobre

tendencias más autoritarias por parte de segmentos de la oposición en Bolivia, Ecuador y Venezuela”г

Por ejemplo, la nueva constitución de Bolivia fue aprobada en 2009 y la de Ecuador en 2008; sin embargo la aprobación de una nueva constitución para Venezuela fue rechazada en 2007 mediante referéndum, no obstante, en Febrero de 2009 se realizó el Referéndum Aprobatorio de la Enmienda Constitucional, en el cual fueron modificados cinco artículos de la constitución de Venezuela de 1999. Otro detalle que diferencia a estos tres gobiernos, es que en este periodo tuvieron un acercamiento diplomático importante. Tan sólo entre 2006 y 2012, estos países firmaron más de 300 acuerdos internacionales entre ellos y en diversas áreas. Esto significó un impulso importante en la organización de los servicios diplomáticos de estos países, los cuales tenían la misión de hacer el seguimiento y los correctivos a cada uno de los acuerdos alcanzados por los líderes tanto en la diplomacia multilateral y bilateral; así como la misión de llevar el mensaje oficial al mundo de los cambios económicos que estaban ocurriendo. Además, durante este periodo los gobiernos de estos tres países impulsaron de forma acelerada un conjunto de leyes en el área de los Medios de Comunicación Social e informaciónб con el objetivo de construir su propia “Diplomacia Pública”б para hacer frente al ataque de la “Diplomacia Pública” de EUц y las nuevas necesidades del “Nuevo Orden Internacional”; al mismo tiempo que impulsaron, de forma acelerada, un conjunto de leyes en el área diplomática con el objeto de mejorar la profesionalización de los diplomáticos y la capacidad de respuesta institucional de sus Ministerios de Relaciones Exteriores. En este orden de ideas, jugó un papel importante la política del uso del “Software Libre” –Ubuntu- en las instituciones públicas de cada uno de estos países; la creación del canal de televisión internacional TELESUR y la Radio Internacional La Radio del Sur; y lanzamiento del satélite VENESAT-1 (Simón Bolívar), el cual fue el primer satélite artificial propiedad del Estado venezolano lanzado desde China el día 29 de octubre de 2008, y el cual estaría a disposición de Bolivia y Ecuador no sólo para brindarles el acceso y transmisión de servicios de datos por Internet, telefonía, televisión, telemedicina y teleeducación, sino también para asegurar la continuidad de la nueva “Diplomacia Pública чolivariana” en caso de alguna interferencia comunicacional de EUA.

Igualmente, los servicios diplomáticos de Bolivia, Ecuador y Venezuela, tuvieron la necesidad de crear estrategias para trabajar en conjunto y para engranar sus estructuras burocráticas como factor clave para el éxito de la política exterior de sus países. En consecuencia, debido a la vertiginosa agenda de trabajo conjunta de los presidentes Hugo Chávez, Rafael Correa y Evo Morales, los recursos comunicacionales y el desarrollo tecnológico comenzaron a jugar un rol clave para la coordinación de esfuerzos entre los cuerpos diplomáticos. Pero la influencia de los cambios tecnológicos significó sacrificios para cada uno de estos países, en el sentido que los cuerpos diplomáticos tuvieron que adaptar sus

(12)

12

estructuras burocráticas al hecho que las nuevas tecnologías simplificaban mucho las rutinas de trabajo tradicionales. Esto trajo como consecuencia que en Bolivia, Ecuador y Venezuela se cerraran, crearan o fusionaran embajadas; así como consulados y oficinas administrativas; a la vez que significo el fin de la tradicional forma de trabajo diplomático de las llamadas “legaciones” y el oficio del “pendolista”б entre otrosг En conclusiónб los cambios tecnológicos ocurridos en el periodo 2006-2012 jugaron un papel muy importante en la administración de los asuntos diplomáticos de estos tres países y en la difusión de su política exterior.

Finalmente, ya en una perspectiva más histórica, Rickard Lalander cree que la experiencia de Bolivia, Ecuador y Venezuela merece ser estudiada en forma aislada, sin incluir a países como Nicaragua y Cuba, pues en términos más amplios, hay ciertas semejanzas y diferencias decisivas entre estos países:

“Venezuela se destaca por su temprana democratización, ya en el año 1958, que se

compara con 1979 en Ecuador y 1982 en Bolivia. Los tres son parecidos en cuanto a la existencia histórica de fuertes estructuras oligárquicas, acuerdos entre grupos de élites y una distribución desigual de los ingresos. En Bolivia, las élites económicas más poderosas

se han concentrado más que todo –por lo menos desde mediados del siglo pasado– en la

región de Santa Cruz en las tierras bajas, mientras que en Ecuador los empresarios más influyentes están en Guayaquil, en la costa pacífica. Venezuela presenta un panorama más diferenciado en términos de grupos de élites económicos. Nuevas formaciones de élites emergieron a través de la democratización en 1958 alrededor de los dos partidos políticos

tradicionalmente dominantes –los socialdemócratas AD (Acción Democrática) y el partido

social cristiano COPEI– con un control firme de las organizaciones sociales y con nexos sólidos con los sectores empresariales. Hasta el inicio de los años noventa, Venezuela tuvo un fuerte sistema bipartidista, pero a partir de la descentralización en 1989, esta dominación partidista se vio socavada rápidamente con la emergencia de actores políticos alternativos a nivel subnacional. En comparación, la Venezuela pre-Chávez carece de una tradición fuerte de movilización de movimientos sociales de masas. En Bolivia, la descentralización tuvo lugar en 1994, con la Ley de Participación Popular/LPP y la municipalización del sistema político. La LPP llegó a ser una plataforma vital para el partido-instrumento político del MAS (Movimiento Al Socialismo) de Evo Morales, si bien es cierto que otros factores contribuyeron, como protestas populares y movilizaciones sociales (como también en Venezuela y Ecuador). Por cierto, Ecuador tiene una tradición más larga de elecciones políticas locales que la gran mayoría de los países vecinos. En la práctica, no obstante, los dirigentes políticos en estos niveles han sido políticamente débiles por la ausencia de recursos económicos o por la escasez de transferencias económicas del Estado central a los gobiernos locales. Asimismo, los gobiernos locales han estado

tradicionalmente plagados de prácticas patronales, clientelares y corruptas”г

En perspectiva, toda esta relación de sucesos y eventos abrieron las puertas a una etapa histórica en donde fue muy común ver la polaridad ideológica en las escuelas de Relaciones Internacionales de América Latina. En menos de seis años, las escuelas de Relaciones Internacionales llenaron sus bibliotecas de investigaciones y estudios científicos y académicos

(13)

13

que validaban o rechazaban los cambios políticos provocados por Evo Morales, Rafael Correa y Hugo Chávez en la escena internacional del continente. Estos documentos, lejos de ofrecer acuerdos en la comunidad científica, más bien profundizaron la brecha ideológica, incluso, entre profesores y estudiantes de una misma casa de estudio. Asimismo, la orientación académica e ideológica de las universidades en estos temas, permitió que las universidades se distanciaran entre ellas, lo cual hizo que los congresos nacionales e internacionales de Relaciones Internacionales se transformaran en verdaderas tribunas políticas de discusión y debate, antes que tribunas para el consenso. Sin embargo, lejos de esta realidad, las academias diplomáticas de América Latina también produjeron investigaciones y estudios científicos y académicos, que poco contribuyeron al debate científico en torno a estos temas, porque tenían la imagen de carecer de “reputación científica” ante las escuelas universitarias de relaciones internacionales debido al hecho que habían sido producidas en los ambientes “ideologizados” o “burocratizados” de los ministerio de relaciones exterioresг Sin embargoб pese a esa imagen, las investigaciones y estudios científicos y académicos provenientes de las Academias Diplomáticas siempre se han caracterizado por crearse en áreas que están muy próximas a las relaciones exteriores, en comparación con la relación que existe entre esos temas y los miembros que participan en las escuelas universitarias de relaciones internacionales. Esta situación permite a las Academias Diplomáticas tener una posición de ventaja ante las universidades cuando se trata del estudio de las relaciones exteriores; ya que sus miembros son parte de las relaciones exteriores, en especial, cuando estas relaciones exteriores están “en pleno desarrollo”. Sin embargo, a juzgar por las tendencias académicas universitarias de América Latina, las investigaciones y estudios científicos y académicos provenientes de las Academias Diplomáticas no ocupan un lugar importante en el estudio de las relaciones internacionalesг Por esoб creyendo que la experiencia “burocrática” en temas de relaciones internacionales tiene validez, se presenta la siguiente investigación denominada “MEDIOS DE COMUNICACIÓN E INFORMACIÓN Y REDES SOCIALES EN LA POLÍTICA EXTERIOR DE BOLIVIA, ECUADOR Y VENEZUELA EN EL PERIODO 2006-2012”, la cual no tiene como objetivo hacer una relación detallada sobre el rol de los Medios de Comunicación Social e Información y redes sociales en el proceso de construcción de la política exterior de чoliviaб Ecuador y Venezuelaб y su relación con la “Diplomacia Pública”б la “Diplomacia шiudadana” y la “Paradiplomacia” en este periodo; pero si persigue el objetivo de analizar las características generales de cada uno de estos temas, con el fin de iniciar un debate que permita aproximarnos científica e históricamente al rol político de los gobiernos de Evo Morales, Rafael Correa y Hugo Chávez en las relaciones exteriores en el periodo 2006-2012, tomando en consideración no sólo las investigaciones y estudios científicos y académicos provenientes de las Academias Diplomáticas, sino también, universitarias; pues ambas áreas son complementarias en el análisis de la investigación.

En este contexto, es preciso indicar que para los efectos de esta investigación, se han hecho uso de un conjunto de “ideas constantes”б es decirб ideas que si bien pueden no estar expresas en el texto, están presentes a lo largo de esta investigación como un parámetro de referencia importante. Se puede señalar que estas ideas son parte del marco teórico, pero además son clave para entender la perspectiva de la investigación. En primer lugar, en esta

(14)

14

investigación se utiliza al modelo de sistema político y sociológico de David Easton (1965) para evaluar el rol de las instituciones públicas. Este modelo propone que las instituciones públicas reciben las demandas del entorno social y del gobierno; para luego producir respuestas a esas demandas con el objeto de satisfacerlas. En este contexto, una institución pública actúa como si fuera una –máquina independiente- que ocupa un lugar en un sistema político determinado. Por lo que la fortaleza de una institución se basa no sólo en su organización y la experiencia y liderazgo de los jefes de las aéreas, sino en su “capacidad de recepción de demandas” y en su “capacidad de emisión de respuestas”г En este sentido, se ha aislado el papel de los Ministerios de Relaciones Exteriores de Bolivia, Ecuador y Venezuela como un centro de interés del análisis, pues la política exterior de estos países, más allá de la voluntad política de sus gobernantes, es el resultado de la “capacidad de recepción de demandas” y la “capacidad de emisión de respuestas” de éstas cancillerías. Por lo que a lo largo de la investigación se hace alusión a estas ideas. En segundo lugar, se ha dado preferencia a los documentos cuya autoría procede de especialistas con comprobada experiencia en cada uno de los temas tratados en esta investigación, teniendo como parámetro de referencia la cantidad de obras y artículos analizados en sus escritos. Asimismo, se ha dado preferencia a utilizar la información oficial publicada por los gobiernos de Bolivia, Ecuador y Venezuela para minimizar el riesgo de realizar especulaciones en torno a los asuntos que aquí se tratan. Y se han incorporado documentos e informes provenientes de las Academias Diplomáticas de estos tres países y documentos escritos por diplomáticos de amplia experiencia que, incluso, tomaron parte presencial en la construcción de la política exterior de estos países y en diversas cumbres hemisféricas. Lo que no quiere decir que se hayan dejado de lado las investigaciones académicas de las universidades del continente, sin embargo, es preciso aclarar que siempre se tuvo presente dar preferencia a la versión diplomática de los hechos por tener una relación más directa con la fuentes de información que en el caso de las investigaciones académicas universitarias. En tercer lugar, a lo largo de la investigación se maneja la idea de que los gobiernos de Evo Morales, Rafael Correa y Hugo Chávez, han sido criticados por el gobierno de EUA y que este país ha intentado en varias ocasiones influir en la opinión pública de Bolivia, Ecuador y Venezuela a través de sus estrategias de “Diplomacia Pública”г Para sustentar este punto de vista, hemos partido de la información obtenida por la página web wikileaks.org, y de los diversos documentos oficiales que allí se han publicado; y en donde se deja constancia de la injerencia de EUA en los asuntos nacionales de estos países, cuya política de gobierno representó una amenaza para EUA en el periodo 2006-2012. En cuarto lugar, es preciso destacar que a lo largo de esta investigación se ha preferido utilizar fuentes de información en español, portugués, francés, alemán, húngaro, hebreo, árabe e inglés. Y salvo algunas invaluables excepciones, se ha optado por no tomar en cuenta las fuentes de información en idioma ruso relacionadas con la historia política de Bolivia, Ecuador y Venezuela en el periodo 2006-2012, así como todas las investigaciones en materia de historia económica y cultural de América Latina en el periodo 2006-зежзб debido a la “sorprendente” cantidad de omisiones, inexactitudes y plagios de contenidos informativos en la mayoría de los documentos; así cómo, por la precaria metodología; la ausencia de información oficial diplomática en materia de política exterior; por las dudosas fuentes de información; y por el

(15)

15

sistema para hacer referencias que usualmente se usa, el cual es un hibrido entre el sistema “Turabian” (Kate Turabian); el sistema de American Psychological Association (APA) y el Modern Language Association (MLA). Finalmente, en quinto lugar, se ha establecido que el periodo de análisis de la investigación comienza en el año 2006, fecha en que Evo Morales, Rafael Correa y Hugo Chávez asumen el poder político; y termina en 2012, a raíz de la enfermedad de Hugo Chávez y su retiro de la escena política internacional por el cáncer, lo cual provocó que a partir del 2013 se percibiera un replanteamiento de la relación diplomática entre estos tres países como consecuencia de la muerte de Hugo Chávez y el ascenso al poder de Nicolás Maduro Moros en la presidencia de Venezuela (23-11-1962).

Ahora bien, el documento se ha organizado de la siguiente forma: el primer capítulo de la presente investigación analiza las características generales de los servicios diplomáticos de estos tres países, esto como información clave para entender la dimensión histórica y el alcance político de los cambios llevados a cabo por los gobiernos de Evo Morales, Rafael Correa y Hugo Chávez en materia de política exterior, y para reivindicar el rol de los diplomáticos en éstas áreas, debido a la insistente tendencia académica de pasar por alto el rol del profesionalismo de los diplomáticos en la ejecución formal de la política exterior. Asimismo, en este capítulo analiza los temas oficiales de la política exterior de Bolivia, Ecuador y Venezuela. Seguidamente, se evalúa el rol de la “Diplomacia Pública” estadounidense con respecto a estos tres países, y los esfuerzos políticos que se ejecutaron para construir una “Diplomacia Pública” propia de Bolivia, Ecuador y Venezuela como respuesta a la agresión comunicacional de EUA. Finalmente, se evalúan las experiencias de participación ciudadana en la construcción de su política exterior. En el segundo capítulo, se analiza el rol de la relación entre Internet y Diplomacia (e-Diplomacia) en la construcción de la “Diplomacia Pública” y “Diplomacia шiudadana” de чoliviaб Ecuador y Venezuelaр así como su influencia en eventos políticos relacionados con la “paradiplomacia”. En el tercer capítulo, se analizan dos de las principales áreas de interés de la política exterior de Bolivia, Ecuador y Venezuela en el periodo 2006-2012. Es decir, los esfuerzos por impulsar las ideas socialistas y la integración en la región suramericana, y el rol que jugaron los medios de comunicación e información e Internet en la consecución de dichos objetivos. Y finalmente, se presenta las conclusiones alcanzadas y un glosario de apoyo, el cual tiene como objetivo aclarar la terminología empleada en la investigación.

Finalmente, a continuación presentamos los objetivos generales y específicos y algunas ideas complementarias que persigue la presente investigación (tradición académica rusa):

 El objeto de esta investigación: Medios de Comunicación Social e Información y Redes Sociales en la política exterior de Bolivia, Ecuador y Venezuela.

 El tema de investigación: los Medios de Comunicación Social e Información y Redes Sociales como instrumentos de la “Diplomacia Pública” de EUц para derrocar los gobiernos de Bolivia, Ecuador y Venezuela; y de cómo estos países, han utilizado los Medios de Comunicación Social e Información y Redes Sociales

(16)

16

como instrumentos para la construcción de su propia “Diplomacia Pública” y su “Diplomacia шiudadana”.

 El objeto de la tesis: es analizar el rol de los Medios de Comunicación Social e Información y Redes Sociales en la política exterior de Bolivia, Ecuador y Venezuela.

Para lograr el objeto de la tesis, se han establecido los siguientes objetivos específicos:  Describir los términos y categorías básicas de la teoría de la “Diplomacia

Pública” y la “Diplomacia шiudadana” para explorar el rol político de los Medios de Comunicación Social e Información y Redes Sociales en la política exterior de Bolivia, Ecuador y Venezuela.

 Describir los términos y categorías básicas de la teoría de la “e-Diplomacia” como instrumento de la “Diplomacia Pública” de чoliviaб Ecuador y Venezuela.  Explorar el rol del servicio diplomático en la ejecución de la política exterior de

Bolivia, Ecuador y Venezuela.

El marco cronológico de la tesis se limita al periodo de 2006 al 2012, ya que en este segmento de la historia la política exterior de Bolivia, Ecuador y Venezuela promueve el “Socialismo del Siglo XXI” al mismo tiempo que aumenta el rol político de Medios de Comunicación Social e Información y Redes Sociales en la región.

Los principales fundamentos teóricos de la tesis son los siguientes:

 Diplomacia Pública: la cual nos permitirá evaluar como los Medios de Comunicación Social e Información y Redes Sociales pueden ser utilizados como instrumentos de propaganda política para los intereses de los gobiernos. En este sentido, la “Diplomacia Pública” nos dará parámetros de referencia para ver cómo los Medios de Comunicación Social e Información y Redes Sociales son utilizados por los intereses de EUA para influir en la opinión social a través de la transmisión de estereotipos ideológicos y psicológicos cuyo fin es crear división y preocupación social frente a gobiernos de política izquierdista.

 Política exterior comparada: la cual nos permitirá establecer las semejanzas de la política exterior de los Estados para establecer conexiones empíricas generales entre las características del Estado y las características de su política exterior.

 Análisis de documentos e informes oficiales de los Ministerios de Relaciones Exteriores de Bolivia, Ecuador y Venezuela. Además, se utilizaran declaraciones de líderes políticos, informes periodísticos, documentos legales, fuentes históricas, materiales estadísticos y obras literarias y fuentes de información de internet.

(17)

17

1.- CARÁCTERÍSTICAS DEL SERVICIO DIPLOMÁTICO DE BOLIVIA, ECUADOR Y VENEZUELA EN EL PERIODO 2006-2012.

1.1.- PRINCIPALES CARÁCTERÍSTICAS DEL SERVICIO DIPLOMÁTICO DE BOLIVIA, ECUADOR Y VENEZUELA EN EL PERIODO 2006-2012

1.1.1- Enfoques sobre el origen de las instituciones diplomáticas formales en América Latina: Desafíos.

En el siglo XIX, las guerras de independencia devastaron la región de América Latina y las nuevas repúblicas tuvieron que reconstruir sus países en medio de diversos problemas. Sin embargo, pareciera un hecho que aquellas guerras de liberación fueron un móvil para que las oligarquías latinoamericanas llevaran a cabo “revoluciones burguesas”б tras la fachada de patriotismo (GUERRA VILABOY: 2007). Lejos de los valores de libertad, independencia política y administrativa de sus territorios17; las nuevas repúblicas buscaron adecuar sus sistemas económicos a la necesidad de los grupos dominantes latinos para que ellos tuvieran un espacio productivo en el mercado mundial (QUESADA MONG: 2009). En este escenario, lleno de confrontaciones civiles internas por el poder, fue donde se originaron las primeras relaciones diplomáticas de цmérica Latina con el mundo “en sentido formal”г Es decir, con instituciones diplomáticas debidamente constituidas, legales y legítimas.

Según MOIR, las relaciones formales interamericanas se inician en América con la constitución de los Estados-Nación y no antesг Durante la coloniaб цmérica Latina era “otra

cosa”18б pues no tenía definida una identidad política ni era “un continente” ЭMOIR)г Luego del nacimiento de Estados Unidos de América (EUA) en 1776, y otros Estado-Nación en América Latina en las primeras décadas del siglo XIX, las relaciones diplomáticas interamericanas tomaron forma a medida que los nuevos Estados consolidaban sus ministerios de relaciones exteriores y sus intereses.

En aquel momento, las nuevas repúblicas tenían intereses muy similares, básicos y elementalesр debido a que ellas compartían una “historia común” con las mismas “necesidades originales”г Por ejemploп ц) шada país necesitaba defender su independencia con la instalación de instituciones nacionales: B) Cada país debía establecer los límites de sus territorio; C) Cada país debía resolver los conflictos y guerras internas, las cuales fueron producto colaterales de las guerras independentistas; D) Cada país tenía que defenderse ante los enemigos exteriores; E) Cada país necesitaba obtener reconocimiento internacional; F) Cada país valoró establecer alguna forma de alianza americana, aparte de la aspiración federativa de las antiguas colonias españolas ideada por Simón Bolívar (MOIR): G) Cada país centró su atención en la modernización de sus estructuras sociales al estilo de los países desarrollados, las cuales enfatizan la productividad y la eficiencia basada en el desarrollo

17 El hambre, la pobreza y la salud de los pueblos quedaron en un segundo plano de interés.

18 Palabras del historiador colombiano Germán Arciniegas (1990), para expresar la diferenciación radical de éste

(18)

18

técnico-científico; y H) Cada país intentó alcanzar la identidad latinoamericana reivindicando lo propio: lo autóctono (DEVÉS VALDÉS: 2000) (VILLARROEL PEÑA: 2011).

цquellos países latinos del siglo XIX compartían una misma “visión de mundo”б la cual permitió construir una percepción común de cómo funcionaba la arena internacional y de cómo debían ser sus relaciones exteriores a posteriori. Incluso, se ha dicho que la política exterior latinoamericana fue estructuralmente la misma en términos generales por años, aunque el contenido intelectual y su “práctica” fueron diferentes ЭROMEROп з003). Junto con esa visión hay que recordar que hasta las dos primeras décadas del siglo XX, los países latinoamericanos mostraron grandes avances en establecer políticas exteriores con cierto grado de independenciaг No obstanteб esa “independencia” fue desafiada cuando EUA comenzó a profundizar su política intervencionista en la región19.

Por ello, no es inapropiado argumentar que en la era colonial o post-independencia hubo dos etapas importantes en la política exterior latinoamericana. Una primera etapa caracterizada por una intervención moderada de EUA en América Latina, cuyos inicios están asociados a la Doctrina Monroe (1823) a la par del desarrollo de esa compartida “visión de mundo”р y una segunda etapa posteriorб caracterizada por la intervención clara y acérrima de EUA, la cual persiste hasta nuestros días y que sus inicios están simbólicamente asociados a la imposición de la Diplomacia del Garrote (1901) y sus variantes.

Ambos periodos han sido profundamente analizados por historiadores de América y el mundo. Sin embargo, el primer periodo y una fracción de los principios del segundo han sido tan estudiados por economistas, sociólogos, politólogos e internacionalistas que pareciera que ya casi todo esta descrito, visto y discutido, aunque eso no signifique calidad (VAN KLAVEREN: 1992)20г Destaca el trabajo de Eduardo ьaleano “Las Venas цbiertas de цmérica Latina” Эжомж)б Demetrio чoersner “Relaciones internacionales de цmérica Latina” Эжонз)б Thomas чailey “ц diplomatic history of the цmerican peoples” Эжоме)б Juan чosch “De шristóbal шolón a ыidel шastroп El шaribeб frontera imperial” Э2009), Gordon Connell-Smith “Los Estados Unidos y цmérica Latina” Эжо95)б Tulio Halperin Donghi “Historia contemporánea de цmérica Latina” Эжоон)б Manfred Kossok “La revolución en la historia de цmérica Latina” Эжоно)б y muchos otros másг Peroб el segundo periodo es en general un tema inacabado, con muchas discusiones en la mesa aún por resolver; aunque existen algunos acuerdos clave entre los teóricos. Por ejemplo, uno de esos acuerdos clave sobre el segundo periodo dice que la política intervencionista de EUA se ha venido debilitando en desde

19 El control de EUA en la región fue tal que durante el siglo XIX y principios del siglo XX existió una

diplomacia latina de segundo planoб en donde se discutían problemas muy específicos “para no molestar al jefe norteamericano”г En esos espacios se discutían problemas como la migración e inmigración, el narcotráfico, la guerrilla, la delincuencia organizada, el terrorismo, las aduanas, la seguridad pública, la salud, la corrupción, entre otros. Es decir, asuntos poco interesantes para Washington.

20 En este sentido, si bien particularmente a partir de la década del setenta, ha habido un desarrollo significativo

en el campo de las relaciones internacionales de América Latina, éste no ha sido similar al estudio de las políticas exteriores, generándose “una cobertura y una calidad desigual” ЭSERчINп зеео)г

(19)

19

mediados siglo XX, gracias a la existencia de un conjunto de factores de orden mundial21 y otro conjunto de factores estructurales de la política exterior norteamericana22.

Ahora bien, a lo largo de esos dos periodos: la mayoría de los países hicieron cambios en sus sistemas políticos tratando de buscar la mejor organización política para atender los asuntos internacionalesб sin tener un plan de referencia a seguirг ыueron periodos de “ensayo y error”г ыueron periodos de múltiples reformas constitucionalesб leyesб reglamentos y organigramas. Fueron periodos donde muchos asuntos políticos se resolvían con la información de día y en forma práctica. Y las instituciones diplomáticas latinoamericanas nacieron, crecieron y maduraron mientras atravesaban por estos diversos escenarios políticos. En consecuencia, ellas adquirieron “personalidad propia” como resultado de la acumulación de experiencias en la administración de los asuntos internacionales y de la percepción de la política exterior de sus gobernantes. Aunque en un principio tuvieron similares estructuras organizacionales, las instituciones diplomáticas alcanzaron con rapidez características propias e independientes que las diferenciaron no sólo de la administración pública, sino también de las otras instituciones diplomáticas de los países vecinos. Pero curiosamente, durante ese proceso, los gobiernos tuvieron que encarar tres grandes desafíos que amenazaban con obstaculizar la formación de un servicio diplomático de calidad. Esos desafíos no se encontraban ubicados fuera de los Estados, al contrario, se localizaban dentro de las mismas instituciones diplomáticas y desde allí imponían una serie de prácticas que estaban acabando con la política exterior de los pueblos. En ese sentido, a continuación presentamos esos tres grandes desafíos:

21 La globalización, los nuevos actores internacionales, la consolidación de las instituciones supranacionales y el

multilateralismo, entre otros.

22 Una de las características indiscutibles de la política exterior norteamericana ha sido su homogeneidad y la

invariabilidad de sus objetivos. Aun cuando la realidad mundial ha cambiando, los mecanismos de política exterior utilizados por Washington y sus ideales perseguidos han permanecido prácticamente inalterados en el siglo XX y XXI. Este panorama ha logrado dar un significado especial a aquellos presidentes norteamericanos que han optado por imprimir a las relaciones con América Latina una dinámica distinta. Los ejemplos son escasos, pero sobresale en primer lugar Franklin D. Roosevelt quien, durante su discurso inaugural en 1933, anunció la “Política del чuen Vecino” orientada a respetar los derechos de los otros países americanos y a terminar con el intervencionismo excesivo en la región (BARRETO VELÁZQUEZ: 2012). Casi treinta años más tardeб el presidente John ыг Kennedy se convertiría en el segundo ejemplo con su “цlianza para el Progreso”г Kennedy asumió la presidencia con la revolución cubana en pleno apogeo, por lo cual diseñó un plan de ayuda orientado a aumentar y redistribuir los ingresos reales en América Latina mediante un agresivo plan financiero con el objetivo de detener la expansión comunista en el hemisferio. Una década después, el presidente Jimmy Cárter fue el tercer ejemplo con su lucha incansable en favor de la defensa de los derechos humanos y el respeto a los principios de derecho internacional. Finalmente, el cuarto ejemplo lo constituyó el presidente George Bush cuya política exterior se diseñó bajo una coyuntura mundial más favorable para EUA (FRANCO: 1994). Bush creó un estilo nuevo en las relaciones con América Latina que fue continuado por Bill Clinton y Barak Obama, el cual se ha caracterizado por dejar de lado, prácticamente, las reuniones presidencialistas con líderes suramericanos y utilizar sus representantes y embajadas como portavoces de sus intensiones.

(20)

20

1.1.1.1.- El triple discurso diplomático:

Según el Centro de Investigación para el Desarrollo, en el siglo XIX América Latina tuvo dificultades para diseñar una política exterior coherente que respondiera a las necesidades de los países (CIDAC: 1992, 15-46). Esto se debió a diferentes causas, entre las que podemos nombrar: las luchas internas en nuevos países; la debilidad de los gobiernos independientes; y, en especial, gracias al rol de los jefes de gobierno, quienes impusieron sus proyectos personalistas sobre los intereses nacionales de sus propios pueblos. Bajo esta dinámica, la creación de las primeras embajadas latinoamericanas no fue necesariamente producto de un plan nacional de política exterior, al contrario, fue resultado de la decisión de algunos pocos y su forma particular de entender el mundo y leer los mapas.

Los primeros pasos de la diplomacia formal en América Latina fueron orientados por la voluntad de los grupos dominantes, los cuales pretendían mantenerse en el poder aún a costa de las pérdidas de sus naciones (CIDAC: 1992, 15-46). Ellos utilizaron a la diplomacia como un vehículo para alcanzar sus intereses de corto plazo; y a los embajadores y diplomáticos como sus representantes privados. En ese momento, el quehacer diplomático tenía necesariamente un triple discurso: En primer lugar, los diplomáticos latinoamericanos eran portavoces de los grupos dominantes de sus países y sus intereses particulares; en segundo lugar, ellos eran portavoces de sus propios intereses personales; y en tercer lugar, de manera tímida, portavoces de los intereses de sus pueblos.

Esa conducta dio paso a otro fenómeno más espontáneoг ьracias a esa diplomacia “sin

horizonte”б los países latinoamericanos terminaron por mostrar interés en lineamientos

políticos que, en su gran mayoría, nada tenían que ver ni con ellos ni la región. En cambio, si tenía relación con los intereses de las élites dominantes de países europeos o norteamericanos; con la excepción de algunos pocos gobiernos que históricamente y, en la actualidad, de manera solitaria y dificultosa, buscan desarrollar políticas autónomas (PEDRAZA: 2008, 79-119).

Los primeros en notar esa cultura “vende patria” fueron los movimientos de izquierda en Latinoamérica, los cuales comenzaron a ejercer presión a los gobiernos para orientar la política exterior de América Latina hacia una mayor autonomía e independencia. Y si bien esos gobiernos no eran de “derecha”б las críticas de los grupos disidentes e izquierdistas los definieron a ellos como talesб por cuanto su política era en general “no nacionalista”г Sin embargo, los resultados llegaron muy tarde. De hecho, fue a finales del siglo XX que varios países latinoamericanos asumieron una actitud muy interesada en reconquistar la soberanía de su política exteriorб la cual había sido “vendida” a las oligarquías y EUц desde antes de la Segunda Guerra Mundial e hipotecada durante la Guerra Fría. Por ejemplo, Venezuela, Ecuador Bolivia, Argentina, Brasil, Nicaragua, Uruguay y Paraguay, entre otros, en los últimos 15 años cambiaron la orientación de su política exterior hacia caminos de libertad e independencia y profesionalismo diplomático. Pero al contrario, en la actualidad, México, Perú, Chile, Colombia, Costa Rica, Panamá y muchos más, tienen que discutir su política

(21)

21

exterior en las embajadas norteamericanas con mucha regularidad, con lo cual hoy América Latina es un territorio bipolar (RODRIGO SALAZAR: 2008, 228)г цunque claroб eso “siempre será discutible”г

1.1.1.2.- Las Franquicias Consulares23:

Debido a que los diplomáticos utilizaban las embajadas como sus oficinas personales, no paso mucho tiempo para que sintieran la necesidad de expandirse, tal cual como una empresa capitalista que necesita abrir filiales en otras ciudades. A finales del siglo XIX y ya a mitad del siglo XX, las embajadas latinoamericanas en Europa, Asía, África, Oceanía y América del Norte solicitaban muy a menudo a sus ministerios la necesidad de abrir consulados en ciudades satélites bajo el pretexto de “brindar un mejor servicio a la cantidad de

ciudadanos nacionales que vivían en esas áreas”24; cuando en realidad el embajador de turno

buscaba tener una sucursal de su negocio (y un responsable) en otra ciudad para el óptimo desarrollo de sus operaciones económicas y financieras; y para ejercer funciones de supervisión y corrección (MORALES LAMA: 2004).

En ese entonces, por ejemplo, la fundación y distribución estratégica de consulados en EUA y Europa atendió a factores de interés personal de los embajadores, en vez de planes de desarrollo integral de la política exterior de los gobiernos latinoamericanos. Incluso, se sabe que el 96% de los consulados que tiene Venezuela en el mundo fueron fundados a partir de la recomendación expresa de las embajadas (TORREALBA: 2005). Y el resto, se fundó gracias a ciudadanos venezolanos que, conociendo la información y teniendo vínculos políticos, se fueron a vivir a las zonas más remotas del mundo para solicitar al Ministerio de Relaciones Exteriores que les permitiera fundar un consulado allá, a la vez que se autodefinían como шónsules o Embajadores “цd Honoren”25 y que les enviaran su primer “sueldo”г

Esto era posible porque los Consulados en el derecho administrativo venezolano en el siglo XIX eran considerados Registros o Notarías públicas ultramar. Por lo que, un consulado podía “auto sustentarse” en la teoríaг No obstanteб en la práctica este factor no se respeto, pues desde mediados del siglo XIX, los Cónsules venezolanos, directa o indirectamente recibían una manutención del gobierno (TORREALBA: 2005)

23 En atención al Artículo 50 de la Convención de Viena Sobre Relaciones Consulares, las Franquicias

шonsulares sonп “Exenciones de inspección y derecho aduanales que el derecho internacional concede al Cónsul o a la

oficina consular”г Sin embargoб por razones didácticasб utilizaremos este concepto para describir cómo

aparecieron los consulados latinoamericanos en el mundo como modelo de negocio.

24 Un consulado es la representación de la administración pública de un país en otro distinto, y el cual colabora

con sus propios nacionales en las funciones siguientes principios: 1) establecer y renovar documentos oficiales (por ejemplo, pasaportes); 2) emitir partidas de nacimiento, de defunción, de matrimonio, entre otros; 3) ofrecer atención y cuidado a los nacionales detenidos y controlar la legitimidad de los procedimientos judiciales correspondientes, y 4) establecer visados a extranjeros e informar acerca de los permisos de residencia o de trabajo. Convención de Viena sobre Relaciones Consulares, 1963.

Referencias

Documento similar

The leadership role of Venezuela in coordinating governments that advocate social change to deal as a whole with different political, economic and social issues, among

Finalmente, para poder implementar sistemas de consciencia contextual como apoyo al aprendizaje se requiere de la sinergia de diferentes áreas del

comentario con su opinión, un like ó que compartan el contenido en sus perfiles, ó en los diferentes grupos a los que pertenecen, de esta manera podrás hacer más viral tu mensaje o

El documento apuesta, con especial interés, por reflejar la importancia de este proceso para el presente y futuro de los pueblos indígenas que habitan el país, así como

En Ecuador, luego del levantamiento de 1990, las organizaciones indígenas amazónicas presentaron al gobierno una demanda de autonomía territorial que también fue interpretada por

Por ello, el presente trabajo busca analizar el uso comunicativo que los partidos políticos realizan de la red social Twitter, así como la relación que se produce entre

Gráfico 1. En el caso venezolano, los mecanismos de transmisión entre los shocks externos y el resto de la economía pasan, esencialmente, por el área fiscal. Los shocks externos

El Tratado de Maastricht introduce como elemento fundamental de la Unión Europea la cooperación en los ámbitos de la justicia y en los asuntos de interior (JAI) y establece la doble