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Manual de Voudon Frater Atal

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Academic year: 2021

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La Couleuvre Noire

(Lave-Tete)

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INTRODUCCION

Las enseñanzas y prácticas que se describen en este manual de Vudú Esotérico son el producto de un sincretismo realizado a partir de diversas elementos esotéricos de finales del siglo pasado que tuvieron su origen en Europa y Haití.

En los círculos ocultistas franceses de dicha época, aparece la figura del Doctor Gerald Encausse (Papus) que reunió a su alrededor una serie de tradiciones esotéricas y ocultas de épocas anteriores: Martinismo, Rosicrucianismo, Gnosticismo y otras tendencias iluministas que Encausse recibió de distintos iniciados europeos. Dentro del círculo de Papus se encontraba un ocultista Haitíano, Lucien-François Jean-Maine, que había sido consagrado Obispo Gnóstico en el año 1899 por Tau Synesio. Lucien-François nació en 1869 en Leogane, Haití y recibió en Francia primero y luego en España importantes sucesiones iniciáticas y gnósticas, aunque ya anteriormente en Haití, había recibido las iniciaciones de los cuatro grados del Vudú en el templo de su propio padre en Leogane. Este rito esotérico del Vudú, funcionaba ya en Haití desde los años de la independencia de Francia, habiendo sido creado por Toussaiít--Louverture y derivaba de tradiciones iluministas y cabalísticas francesas entremezcladas con las corrientes esotéricas africanas traídas por los esclavos negros a Haití.

Papus autorizó a Lucien-François Jean-Maine para que formase su propia orden esotérica en Haití y en las Antillas de habla francesa. Sin embargo, Jean-Maine no pudo viajar a Haití hasta el año 1921. En dicho año creó la Ordo Templi Orientis Antiqua (O.T.O.A.) como rama Haitiana de la O.T.O. ya existente en Europa, cuya Jefatura ostentaba en esa época el famoso mago y ocultista Aleister Crowley.

A diferencia de la O.T.O. europea, que tenía diez grados, la O.T.O.A. de Jean-Maine se estructuró en 16 grados. Aún siendo la O.T.O.A. una orden templaria, tenía incorporados elementos de Magia y Vudú.

Al año siguiente Jean-Maine creó la orden mágica LA COULEUVRE NOIRE (La Culebra Negra) con elementos puramente vuduistas y comprendiendo cuatro grados con un grado previo de miembro a prueba y otro administrativo. La Culebra Negra fue desarrollándose progresivamente en Haití y llegó a absorber a la O.T.O.A., que continuó solamente en España. En el año 1949 fue sustituido en la jefatura de la orden por su hijo Hector-François, el cual la dirigió desde Haití hasta el año l.

El teósofo y ocultista norteamericano Michael Bertiaux, de ascendencia francesa y residente en Chicago, viajó a Haití en el año 1963, tras varios años de estudios de Vudú. En este viaje Bertiaux recibió de Jean-Maine las iniciaciones del Vudú e hizo contacto directo con el Loa o dios Haitiano Grand Legbha. Tras estas iniciaciones Bertiaux comenzó a trabajar en la creación de un sincretismo mágico a partir de las enseñanzas y prácticas del Vudú y las tradiciones esotéricas occidentales del Martinismo y

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En 1970 Bertiaux fue nombrado por Hector-François Soberano Gran Maestre de la O.T.O.A. y en el año 1975 sucedió a éste en la jefatura de L.C.N. y comenzó a escribir todo el material que compone su enseñanza esotérica, mágica y gnóstica del Vudú Esotérico, que por fin ha sido publicada en Estados Unidos en 1988 y que se presenta aquí en español por vez primera y en un lenguaje claro y abierto.

Las enseñanzas del Vudú esotérico enseñan a hablar a los espíritus y recibir de ellos conocimientos y enseñanzas de como avanzar en el sendero de la iniciación. Se trata de una enseñanza gnóstica (Gnosis es una antigua palabra griega que significa conocimiento espiritual) porque enseña a tomar contacto con los espíritus.

Michael Bertiaux contactó también posteriormente en Japón con los espíritus que allí reciben el nombre de "Kami". Todos estos espíritus son universales y allí en Japón Bertiaux, bajo la dirección del Maestro Kammamori, conoció las leyes de los Kami o espíritus de la religión Shinto. Esta experiencia junto con la anterior en el Vudú, produjo en él un conocimiento completo de la energía espiritual, que es la meta final de la enseñanza gnóstica.

Estas enseñanzas enseñan a entrar en comunicación con Dios y poder ver, las cosas como El las ve. A través de ella podemos vivir en constante conversación o diálogo con la divinidad, porque podemos trabajar diariamente con los dioses o emanaciones espirituales de Dios, y cada día podemos reiniciar una conversación con El a través de la gnosis de los espíritus.

Estas enseñanzas esotéricas son poderes y experiencias auténticas que alimentan el alma. Proporcionan una serie de operaciones mágicas que hacen posible que el poder espiritual sea dirigido hacia el operador, no sólo para que pueda resolver un problema determinado, sino incluso para otorgarle el poder de la luz espiritual, la iluminación perseguida por todos los movimientos esotéricos y espirituales.

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LOS GRADOS DE L.C.N.

Los Grados de L.C.N. son cuatro: 1. LAVE-TETE o INICIADO. 2. CANZO o SERVIDOR.

3. HOUN'GAN o SACERDOTE. 4. BAILLE-GE o HIEROFANTE.

Estos grados reflejan la estructura de la ciencia iniciática atlante y corresponden a las cuatro iniciaciones en los Cuatro Elementos y las cuatro direcciones simbólicas de la consciencia espacial, así cómo a los cuatro planos de manifestación.

Los templos del Vudú actúan como instrumentos mágicos de poder oculto. No nos referimos aquí a los templos de la religión Vudú Haitiana, sino a los del Vudú Esotérico. Durante la iniciación en este sistema mágico, se crea una fuerza que sigue unas líneas de movimiento geométricas muy precisas. Como la iniciación ocurre dentro del templo Vudú, éste toma una significación muy importante y es por ello que tiene que tener una estructura geométrica para que las energías fluyan siguiendo las líneas de un esquema exacto. En cada punto del espacio surge una fuerza oculta que depende del emplazamiento en que se encuentra dicho punto. El poder, durante la iniciación, deriva su fuerza de la localización de cada punto.

Tenemos pues unas fuerzas y una estructura en el espacio del templo. En el Perystile del Vudú, hay influencias ocultas que actúan como campos de fuerza invisibles que están bajo el control de los Maestros.

La energía especial se estructura de acuerdo con estos campos de fuerza de una forma geométrica exacta y esta estructura geométrica deriva del orden y equilibrio que producen las formas de pensamiento e imágenes simbólicas que los Maestros han proyectado en el esquema ritual. Las formas de pensamiento de los Maestros se convierten en las fuerzas espaciales y en los campos de energía que forman un modelo exacto que está de acuerdo con las leyes ocultas del universo.

En el templo Vudú, la estructura de la fuerza espacial, obedece a una división cuádruple representada por las cuatro Cruces de la Cábala Criolla. Es decir, que la estructura mágica que ha sido proyectada en el templo, es la estructura cabalística de las cuatro Cruces, en la que el espacio es repartido de acuerdo a un plano oculto que está dividido en cuatro secciones : Norte, Oeste, Sur y Este.

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Cada una de estas cuatro secciones del espacio, tiene un valor determinado, de tal forma que a cada región, pertenece cierto tipo de operación oculta. Esta asignación es exclusiva para cada región, ya que de cada una se extraen solamente las energías que surgen en ella como fuerzas espaciales. Cada estructura y cada función son exclusivas de su propia región, aunque existe cierta relación con las demás.

Independientemente de la cualificación de las energías en cada región del esquema del templo, hay también un movimiento de las fuerzas espaciales desde lo inferior hacia lo superior, es decir, desde el Norte hacia el Este, a través del Oeste y del Sur. Este movimiento se llama evolución, porque lo inferior busca la perfección de lo superior. Hay aquí una transferencia de energía desde el Norte hacia el Este. Entonces se desarrolla un centro de energía oculta, mediante el cual las formas de pensamiento son impuestas sobre las fuerzas espaciales y el templo entero funciona como una unidad, como un instrumento mágico perfecto, como un mandala de energía oculta.

Los grados de L.C.N. se corresponden con las cuatro regiones del templo de la forma siguiente:

Lave-Tête (Señor de la Cruz del Norte), representa al Loa Guedhe-Nibbhó, y corresponde al subdiaconado de la Ecclesia Gnóstica Spiritualis.

Canzó (Señor de la Cruz del Oeste), representa al Loa Ogou-Fer, y corresponde al diaconado de la Ecclesia Gnóstica Spiritualis.

Houn'gan o Mambo (Señor de la Cruz del Sur), representa al Loa Simbí, y corresponde al sacerdocio de la Ecclesia Gnóstica Spiritualis.

Baille-ge (Señor de la Cruz del Este), representa al Loa Damballah-Wedo, y corresponde al episcopado de la Ecclesia Gnóstica Spiritualis.

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LOS ESPIRITUS HUDU

El sistema operado por La Culebra Negra es un sistema de Vudú Esotérico, es decir, que difiere del Vudú religioso practicado en Haití porque conserva dentro de sí las ancestrales tradiciones iniciáticas de origen atlante que pasaron a ciertas regiones de la costa occidental de Africa, y que de forma secreta sobrevivieron hasta la llegada de los blancos.

Con su posterior reinserción en el Caribe, estas tradiciones esotéricas se enriquecieron con otras traídas del viejo continente europeo, también de origen atlante, pero filtradas por el tamiz de la civilización judeo-cristiana: celtas, brujería, masonería, martinismo, cábala, etc.

Fue así como la tradición atlante resurgió nuevamente en círculos intelectuales Haitianos entre iniciados de los cultos más secretos y poderosos del Vudú, dando lugar al Vudú Esotérico, que nunca antes había salido de los oscuros velos de las sectas secretas Haitianas.

Lo primero que el estudiante del Vudú Esotérico debe trabajar es el sistema de Espíritus Hudú. En general el Vudú es un sistema que está relacionado enteramente con el mundo de los espíritus. Puede decirse que tiene grandes paralelismos con los sistemas espiritistas más recientes. Hasta tal punto, que hoy día existe cierta simbiosis de elementos espiritistas dentro de muchas prácticas vuduistas.

En relación con los espíritus, debemos antes de nada hacer una referencia a la concepción que el Vudú tiene de ellos en su sistema.

Los dioses del mundo sobrenatural del Vudú se denominan Loas, Mysteres, Vodouns o Saints (Santos). Algunos de estos Loas son divinidades africanas originarias de las tribus Arara, Yoruba, Congos, etc..; otros proceden de otras fuentes como los de la "familia" Guedhé, de probable origen indio.

Los de origen africano son los más elevados en santidad y pureza, siendo arquetipos de niveles espirituales superiores y por tanto los mas venerados en los templos vuduistas. Otros en cambio, son de origen criollo, sobre todo los de los ritos Petró, que corresponden muchas veces a espíritus de iniciados muertos que han adquirido el status de Loa.

A este respecto, puede decirse que el panteón Vudú no cesa de enriquecerse constantemente con los espíritus de los adeptos que han conseguido su iluminación y con ello pasar al estado de Loa.

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También hay Loas que son desconocidos por los vuduistas pero que existen en el plano astral, muy cerca de los mortales y que se revelan en los sueños y meditaciones de los iniciados, entrando también poco a poco en el panteón Vudú.

Hay divisiones de los Loas según su origen africano o americano, aunque también otras hay divisiones que se corresponden con su funcionalidad o con el nivel o plano en que habitan.

En general hay dos grandes grupos de Loas: los que son más "éticos" o generalmente hablando "más buenos o más blancos", llamados Rada, con sus cultos y ritmos propios; y los que son menos éticos, más "malvados, obscenos y peligrosos", que corresponden a los llamados Petró, entre los que incluimos a la "familia" Guédhé.

En este segundo grupo hay fuertes elementos de origen Congo, mientras que en el grupo Rada hay muchos elementos de origen Arara y Yoruba. Los grupos de Loas se denominan en general "nachon" (nación), para recordar sus orígenes tribales africanos. El término "nanchon" es sinónimo de "fanmi" (familia), aunque muchas veces la "fanmi" indica una subdivisión funcional dentro de una "nanchon".

Hay diferencias en el Vudú entre lo que los Haitianos llaman "el buen Dios", el Dios Todopoderoso, y los Loas. El "buen Dios" no tiene nombre, o bien su nombre ha sido olvidado por los hombres. Es superior a los Loas y tiene una naturaleza impersonal y en un nivel de vibración por encima de ellos.

Aunque el término Loa traduce a veces como "dios" por los no iniciados, en realidad debería traducirse por espíritu o ley, que es su acepción más adecuada.

Los Haitianos encuentran que los Loas están en un nivel intermedio entre Dios y los hombres, lo mismo que ocurre con los Orishas de la tradición Yoruba.

Los Haitianos afirman que los Loas habitan en Africa, en Guinea (Guinée) o bien en una isla sepultada bajo las aguas del océano Atlántico. Algunos habitan permanentemente en ciertas piedras sagradas llamadas "pierre-loa" que son patrimonio de los iniciados y que son pasadas después de su muerte a otros iniciados y así de generación en generación. Algunos Loas habitan también en ciertos lugares sagrados de Haití.

Los Loas conviven con los espíritus de los muertos, sobre todo con los de los iniciados del Vudú. Estos espíritus montan sobre los adoradores en las reuniones rituales en las que algunos caen en trance, siendo "poseídos" por los Loas, que los utilizan como si fueran caballos.

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Durante estas "posesiones" las personas cambian su forma de expresión y se mueven, danzan y hablan con las características del Loa que les ha poseído. Los Loas descienden por el Potteau Mitan (poste central) del Hounfor (templo). Este poste tiene en su base una especie de piedra altar a cuyo lado se improvisan los diagramas sagrados de los Loas, pintados con harina blanca o con tiza sobre el suelo. Allí es donde son ofrecidos los sacrificios propiciatorios para el descenso de los espíritus, todo ello acompañado de cantos y batir de tambores sagrados.

El Vudú afirma que cada niño nace con un Mait Tete o espíritu que es maestro de su cabeza, que actúa como Loa personal y que debe ser desarrollado hasta un nivel consciente para conseguir la iniciación completa; de otra forma, el individuo solo poseerá el Loa familiar. Una vez conocida la naturaleza de su Loa personal, el iniciado puede integrarse él mismo como un Loa en la Ciudad Sagrada arquetípica celestial, donde habitan los espíritus.

Estos iniciados, una vez que mueren, se les retira el Loa Mait Tete de su cabeza para ser conservado en un recipiente especial (Govi) en donde madura y termina su preparación como Loa para luego ser liberado y arrojado a las aguas y desde ellas integrarse en el mundo de los espíritus.

Pero aquí vamos a tratar del Vudú Esotérico, tal como se practica dentro de una de las sectas más secretas del Vudú Haitiano: La Société des Zobops: La Couleuvre Noire (La Culebra Negra).

Como una rama más del esoterismo, se trata de un sistema iniciático que opera sobre el individuo desde los planos inferiores hasta las más altas esferas de los niveles espirituales.

No es necesario ser negro o Haitiano para acceder a este sistema porque ha sido elaborado para mentalidades modernas de cualquier origen cultural. Lo que sí es importante es tener en cuenta que es un sistema espiritualista, o sea, que trabaja con los espíritus, aunque se trate de los espíritus del Vudú. En este sistema se aprende a comunicarse con estos espíritus y a recibir sus poderes con el fin de avanzar en el sendero material y espiritual.

Los espíritus Vudú funcionan con cualquier tipo de individuo que haya sido iniciado en este sistema, sea Haitiano o no, sea de raza negra o de cualquier otra. Lo importante es llegar a familiarizarse con ellos y comenzar a realizar el contacto que producirá el intercambio de sustancias sutiles entre el iniciado y los espíritus con el consiguiente beneficio para ambos.

Los espíritus del nivel más cercano a los mortales son los llamados espíritus Hudú. Ellos están muy cerca del hombre porque necesitan para su propia evolución superior una serie de energías vitales de procedencia humana para realizar dicho trabajo en los

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planos astrales. A cambio de estas donaciones u ofrendas que el iniciado les proporciona, ellos le ofrecen conocimiento y poder desde su plano de existencia.

Los espíritus Hudú, lo mismo que los demás espíritus, no son visibles para la visión ordinaria y solo pueden ser percibidos con la segunda visión o clarividencia. También pueden ser oídos por clariaudiencia o contactados directamente en el plano astral o en los sueños.

Entre los espíritus Hudú están las almas de los antiguos magos atlantes que se hundieron con su isla en el cataclismo final que hizo desaparecer dicho continente. Su magia fue muy poderosa y aún lo es después de muertos, en el plano astral. Se encuentran actualmente en dicha isla sumergida bajo el mar de los Sargazos, en el triángulo de las Bermudas. Sus cuerpos están allí abajo y su magia los retiene allí, y sin embargo sus espíritus están libres en el astral para comunicarse con los mortales y seguir con su ayuda su propia evolución espiritual.

Bajo ese bosque de algas de dicho mar hay una isla donde sigue reinando un antiguo mago-rey de grandísimo poder. Se trata del Maestro del Gran Bosque de las Islas bajo el mar (Maitre Grand Bois d' Ilet). que generalmente suele llamarse simplemente "Maitre". Estos espíritus de muertos que yacen bajo el océano se denominan espíritus "Hu".

Los restantes espíritus Hudú son las almas de otros magos que han muerto y cuyos cuerpos yacen en cementerios en Haití; son los espíritus "Du", cuyo rey es el Loa de los muertos "Papá Guédhé Nibbó".

Estos dos grupos de espíritus son los primeros en los niveles ascendentes, que el practicante de Vudú Esotérico tiene que contactar y trabajar. Con su ayuda y su magia podra lanzarse a empresas mas elevadas en el sendero de la iniciación.

Existen otros espíritus que serán tratados y estudiados en otras secciones posteriores, pero por ahora debemos dedicarnos exclusivamente a los Hudú como la base de estudio y práctica del principiante del Vudú Esotérico de La Culebra Negra.

Hay que tener en cuenta que para que un individuo pueda seguir adecuadamente el sendero iniciático, debe tener cubiertas sus necesidades ya sea por haberlas satisfecho (sendero del mago) o bien por haberlas restringido (sendero del asceta). En el primer caso, el mago puede hacer uso de la ayuda que le brindan los espíritus para obtener aquello que necesitan para sentirse feliz y en buenas condiciones físicas para iniciar su desarrollo espiritual. La renuncia al bienestar material puede conducir a represiones que obsesionan al individuo y lo acosan durante su trabajo en el sendero.

El mago puede necesitar para sentirse feliz una buena salud. bienes materiales suficientes para no sentirse incómodo en su trabajo de dedicación mágica, una pareja

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adecuada para completar y colmar su vida y por último una corriente de conocimiento que le ilumine constantemente el sendero.

Todo ello puede ser corregido con la voluntad del individuo y la ayuda de los espíritus. Los Hudú están ahí precisamente para ayudar al hombre en estas empresas; son como los ángeles y demonios de las religiones judeo-cristianas. Necesitan el contacto humano para su propia misión y a su vez ayudar al hombre en su propio desarrollo.

El acercamiento a estos espíritus se hace mediante ciertas ceremonias rituales de tipo mágico. Aunque algunas personas con capacidad natural o adquirida mediante desarrollo esotérico puedan contactar directamente con estos espíritus con solo dirigir su mente hacia ellos, la realidad es que la mayoría de las personas, incluso los iniciados necesitan ciertas operaciones rituales mágicas para invocarlos.

Los métodos para atraer a los espíritus son más efectivos si contienen elementos mentales y físicos a la vez, porque el ambiente apropiado, los símbolos y los ritos que se efectúan, acondicionan la mente del mago para que se coloque en un estado especial propicio para dicho contacto. Los elementos físicos potencian la mente del mago, el cual emite ciertas radiaciones en sus invocaciones que son percibidas por los espíritus en él plano astral y acuden a dicho foco, tomando contacto con el invocante.

Pero no debemos pensar que los espíritus Hudú solo pueden proporcionar beneficios materiales a los que los invocan. Estos espíritus tienen también el poder de desarrollar la mente del mago. Ellos vienen del plano astral, que es el que compone las capas inferiores de la mente, allí donde las ideas toman forma. De ahí que estos espíritus proporcionen una mayor riqueza de imágenes mentales en el mago que los invoca, favoreciendo su poder mental y las facultades paranormales en su psique.

Este aumento de poder mental se traducirá generalmente en un mayor control de la mente de los demás, lo cual puede ser beneficioso para el mago en los casos en que tenga que ejercer su autoridad sobre otras personas de nivel espiritual inferior. Muchas veces, por razones de autodefensa o por otras de otra índole, necesitamos controlar a otras personas y dirigirlas para su bien o para el nuestro. Entonces es muy útil el poder tener control mental sobre los demás, y una de las formas de conseguirlo es con la ayuda de los espíritus Hudú.

Los espíritus en realidad no son malos, no actúan negativamente. Lo que ocurre en relación con la presencia del mal en este planeta es que durante milenios, la humanidad ha estado generando influencias negativas, fuerzas mentales envenenadas que actúan sobre el psiquismo colectivo afectando a las personas que no saben defenderse de ellas. No son espíritus de ningún tipo sino solamente larvas astrales generadas por el hombre. Para evitar sus efectos, el hombre debe dirigirse a los espíritus para que le ayuden con su bondad a evitar estas malas influencias.

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Pero hay personas que tienen mala suerte, que siempre están frustradas, que todo les sale mal y otras que son felices y no fracasan en sus empresas. Podemos decir que las primeras están bajo la influencia negativa de estas larvas astrales que son atraídas por ellos mismos y en cambio las segundas han atraído a los espíritus, que les ayudan en sus empresas.

Los espíritus Hudú ayudan también en los asuntos económicos, tanto en la búsqueda o mejora de trabajo, como incluso en los juegos de azar. Se han dado casos de personas que han conseguido un buen trabajo o acertar en la lotería o quinielas, etc, por medio de la ayuda de los espíritus. Ellos ayudan a elegir los números que saldrán premiados si se les invoca sinceramente y sin deseos de codicia para este fin.

Lo mismo ocurre en relación con la búsqueda de una pareja con la que compartir la vida y el amor. Los espíritus ayudan a realizar la atracción necesaria para que la persona adecuada llegue a contactar y a relacionarse con el que los ha invocado, creándose así las bases para que el amor surja entre ellos. Los Hudú pueden poner en movimiento el encuentro con dicha persona.

También potencian los espíritus Hudú la sexualidad del mago que los invoca. La sexualidad en el Vudú no es vista como algo negativo, sino todo lo contrario. Los individuos con una mala o baja sexualidad son más bien considerados negativos, porque la sexualidad es algo necesario en la vida.

La atracción sexual que se siente hacia otra persona es debida a la búsqueda del fluido sexual que desprende la persona en cuestión. Se trata de un fluido electromagnético que emana del cuerpo físico. Esto es lo que hace al hombre ser atraído por la mujer y viceversa. Se trata de la necesidad de absorber, de los cuerpos físico-etérico, astral y mental de la otra persona, este fluido. Esta atracción es espontánea y normal, y es tan necesaria para la salud mental y corporal de las personas como comer y respirar.

El contacto sexual es ante todo un acto de ingestión de la energía polarizada proporcionada por la pareja como una forma real de alimento. Incluso la masturbación proporciona también ese fluido. Los fluidos eléctrico y magnético existen en nuestros cuerpos físico-etérico, astral y mental. Los hombres tienen abundancia de fluido eléctrico (elemento Fuego), mientras que las mujeres tienen abundancia de fluido magnético (elemento Agua). En el proceso del contacto sexual con un miembro del sexo opuesto, cada uno proporciona la energía opuesta que se necesita para mantener la salud en los tres cuerpos del otro.

Cuando uno no es accesible al compañero o compañera sexual, y elige realizar un acto autoerótico, el proceso es similar aunque no esté completo. En este caso se crea en las aguas de la sustancia astral y mental, una forma temporal llena de fluido polarizado que proporciona, aunque en menor cantidad y más indiferenciado, el fluido que emana de esta forma astro-mental. Se trata de un contacto sexual en el que no hay fluido físico sino solo astro-mental. Pero hay que tener en cuenta que la masturbación tiene un efecto

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colateral, y es que la persona temporal creada por el operador, permanece algún tiempo en el plano astral, a menos que sea conscientemente disuelta. Las entidades astrales trataran de tomar posesión de ese cuerpo astro-mental sin vida propia, pudiendo permanecer en la vecindad del masturbador habitual para inspirarle en sus frecuentes masturbaciones.

Es interesante hacer notar que la masturbación no es nunca experimentada como una absorción completa del fluido y ésta es la razón de que uno no pueda quedar completamente satisfecho solo con las prácticas autoeróticas, porque no se da la absorción física del fluido.

En cuanto al sexo oral, hay que hacer asimismo notar que es la forma más nutritiva de contacto sexual, ya que tanto la vagina como el pene son los dos puntos de máximo almacenamiento de fluido electromagnético. Por lo tanto al aplicar la boca masculina sobre la vagina o la femenina sobre el pene, la persona puede cargarse rápida y efectivamente con el fluido. No es necesario llegar al orgasmo para que esto suceda, ya que el solo hecho de que la boca entre en contacto con estas áreas tan potentes, se producirá una sensación inmediata de energía.

En el acto sexual, en el momento de la eyaculación masculina dentro de la vagina, se crea un fluido especial de un tipo muy poderoso de energía. Por ello para que ambos miembros de la pareja puedan absorber la mayor parte de este elixir, es necesario que el varón mantenga su pene dentro de su pareja femenina por lo menos diez minutos después del orgasmo.

El Vudú Esotérico afirma que en la zona sexual de cada persona yace dormido Papá Guédhé, que es el que nos ha triado a la vida y el que nos lleva a la muerte. El rige la vitalidad física y sexual, y su centro está en la base de la columna vertebral y en los órganos sexuales externos (pene y clítoris). La excitación sexual despierta a Guédhé y éste estimula y aumenta a su vez el poder sexual, lo cual se traduce en una vida sexual sana y activa hasta una edad bastante avanzada.

Aquí radica la fuente de la juventud física y mental del individuo, porque Papá Guédhé nos da la fuerza y energía para mantener dicha juventud.

Todo esto es así porque en realidad el alimento preferido de los espíritus Hudú, aquello que los ayuda más en su desarrollo en el mundo astral, es la energía desprendida del fluido sexual y de las secreciones sexuales durante el acto sexual. Esta energía es transformada por ellos en poder mágico que revierten sobre los magos que les invocan de esa forma. Con ello los espíritus se benefician y a su vez benefician también a los que les otorgan el alimento sagrado. De todos son bien conocidas las ofrendas de sangre (sacrificios) que se ofrecen a los espíritus y dioses en el Vudú popular y otras religiones africanas, todas ellas de origen atlante.

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Sin embargo estas aportaciones de sangre, aunque sea sangre humana, no tienen tanto valor para los espíritus de las secreciones sexuales cuando les son dedicadas, porque estas últimas tienen un poder o fluido mayor que los hindúes denominan "Ojas". Estas energías son las que sirven de base para la producción de poderes en el mago por parte de los espíritus. Se trata solo de un intercambio de energías, una especie de alquimia espiritual.

En las antiguas religiones mágicas de Atlantis se adoraba al Sol de nuestro sistema planetario y al Espíritu divino o Logos que lo habita. Este Sol estelar está representado dentro del hombre por los testículos y el falo con su producto e1 semen, en el hombro; y por los ovarios, el clítoris y la sangre menstrual en la mujer. El primero es designado simbólicamente como el Sol Blanco y el segundo como Sol Rojo y ambos cultos pasaron a Egipto como los cultos a los Hermanos Gemelos (Horus y Set) y se encuentran en todos los sistemas mágicos heredados de Atlantis.

Si la humanidad ofreciese a los dioses, como en tiempos muy antiguos lo hiciera, su esencia o fluido vital, llegaría a poder ver el mundo tal como lo ven los espíritus y la vida en este planeta cambiaría. Pero desde la caída de Atlantis, el hombre reemplazó el fluido o esencia vital por la sangre, primero de los cautivos, y luego de animales, y desde entonces un baño de sangre recorre continuamente la faz de este planeta.

En la práctica con los espíritus Hudú no es necesario construir templos ni iglesias, simplemente se necesita tener un lugar determinado de la casa para ello, bien sea una habitación especialmente dedicada a ellos o si eso no es posible, una zona, de la habitación con un mueble o mesa dedicada a los trabajos de invocación de los Hudú. En dicha habitación habitarán permanentemente estos espíritus, por ello es muy importante que no sea un lugar transitado por extraños al mago.

Un buen sitio para que los Hudú tengan su morada cuando no hay posibilidad de tener una habitación dedicada a ellos, es utilizar una zona del dormitorio o una sala de estudio tranquila y retirada del ruido de la casa.

Pero aún así, los espíritus requieren una caja especial o recipiente (generalmente una caja de madera) que pueda cerrarse completamente, donde habitarán o por lo menos tendrán su foco de poder almacenado. Esta caja se denomina "Atua" y es donde el mago guarda todos los objetos de ritual mágico: inciensos, perfumes y aceites, etc.

Este "Atua" debe ser de buena madera y estar pintado por fuera y por dentro con los símbolos de los espíritus en sus colores adecuados. Una vez terminada y comenzado el trabajo con los espíritus, el "Atua" se carga de poder y no debe abrirse en presencia de personas extrañas. Cualquier objeto ritual, talismán o amuleto que se coloque dentro del Atua una vez cargado de poder, queda a su vez lleno de dicho poder.

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Solamente las personas que se dedican al trabajo con los espíritus tienen un Atua. lo cual los diferencia de aquellos que por curiosidad simplemente tantéan este terreno mágico que es el Vudú Esotérico.

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RITUAL DE DEDICACION A LOS ESPIRITUS HOODOO

Al iniciar el trabajo con los espíritus Hoodoo (HuDu) es preciso hacer un primer contacto en el que debemos expresar nuestro deseo de dedicarnos al servicio y trabajo con ellos. Una vez establecido puede pasarse al resto de los trabajos de investigación. 1.- Sentarse mirando al Este delante de una mesa que hace de altar. En ella hay que colocar cuatro velas: Roja para el Este, Verde para el Sur (derecha), Azul para el Oeste y Amarilla para el Norte (izquierda). En el centro del altar se coloca un vaso de agua pura. 2.- Encender las velas, y en voz alta decir.

¡En el Mundo de los espíritus no hay Oscuridad! ¡Quiero ser un Hijo de la Luz!

¡Espíritus del fondo de las Aguas, Espíritus de los Muertos, estoy aquí para serviros!

3.- Tocar el agua con los dedos de la mano derecha y mojar el centro de la frente diciendo:

Dedico mi Ser al servicio de los Espíritus Hoodoo.

Solicito vuestra ayuda y os invoco para que os hagáis presentes en este altar y en el elemento que os es mas afín, el Agua.

Os pido que me ayudéis y a cambio me ofrezco para serviros.

¡Me ofrezco al servicio del gran Rey de los Espíritus bajo el Mar, Maitre Grand Bois d'Ilet.

4.- Cerrar los ojos y sentir como acuden los espíritus. Permanecer en silencio unos momentos y luego beber el vaso de agua, porque el poder de los espíritus estará ya en ella. Meditar unos minutos y luego apagar las velas y recoger el altar.

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RITUAL DE EVOCACION DE LOS ESPÍRITUS HOODOO

1.- Colocar sobre el altar las cuatro velas como en la practica anterior. Luego poner una vela negra en el centro.

Antes de realizar el ritual es necesario escribir en un papel lo que uno desea de los espíritus. Dicho papel se coloca entre las velas roja y negra, mientras que ahora el vaso de agua se coloca ente la negra y azul.

2.- Sentarse delante del altar mirando al Este, y encender las velas por orden, diciendo: (vela amarilla)

¡Espíritu de la Cruz de Luz del Norte, manifiéstate! (vela azul)

¡Espíritu de la Cruz de Luz del Oeste, manifiéstate!

(vela verde)

¡Espíritu de la Cruz de Luz del Sur, manifiéstate!

(vela roja)

¡Espíritu de la Cruz de Luz del Oeste, manifiéstate!

(vela negra)

¡Yo soy el Mago-Sacerdote de los Santos Espíritus del fondo del Océano y de la Muerte! ¡Aquí estoy para serviros!

3.- Hacer la petición a los Espíritus:

¡Espíritus Hoodoo, quiero recibir lo que he escrito en el papel. Ayudadme a obtener lo que deseo!

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4.- Frotar las manos durante unos minutos y luego extenderlas con las palmas y los dedos hacia arriba, hacia los espíritus. Esta es la energía que ellos usarán a cambio de su ayuda.

5.- Cerrar los ojos y visualizar a los espíritus en forma de luz descendiendo hacia el altar y devolviendo la energía tomada de las manos en forma de poder mágico que se concentra en el agua del vaso.

Abrir los ojos y observar el movimiento de las llamas de la vela; cuando se muevan es el momento en que los espíritus han descendido. Esperar el tiempo que sea necesario. Beber entonces el vaso de agua con el poder mágico depositado en ella. Luego apagar las velas en la secuencia negra, roja, verde, azul y amarilla.

Recoger el papel con la petición y guardarlo entre las hojas de un libro cualquiera de la biblioteca y olvídalo completamente.

Retirar el altar.

Nota.-Puedes hacer pequeñas modificaciones de este último ritual para trabajos específicos incorporando vevés o sigilos.

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1.- Quemar incienso y encender una vela azul, mientras se invoca a Legbha pidiéndole que venga en nuestra ayuda. Debería hacerse al amanecer, mirando la salida del Sol Naciente, después de darse una ducha fría.

2.- RUEGO A LEGBHA QUE VENGA Y ME AYUDE EN MI TRABAJO DE

INVESTIGACION. QUIERO INVESTIGAR LOS SECRETOS DE LOS PODERES ESPIRITUALES QUE SON TU FAMILIA.

SOY LUAGE, TU HERMANO GEMELO AQUI EN LA TIERRA.

TE RUEGO SEÑOR DEL CONOCIMIENTO, QUE ME DES TU AYUDA.

3.- Meditar en actitud receptiva a los poderes de Legbha, para que fluyan en la consciencia.

RITUAL PARA APRENDER A DIRIGIR

LAS ENERGÍAS DE LES VOUDOU

1.- Quemar incienso y encender una vela roja, para sentir el poder de Les Voudou en el cuerpo.

Sentado en una mesa, dirigir los pensamientos al mundo de los Espíritus, y en su modo de actuar en nosotros.

2.- ESTOY LLENO DE ALEGRIA POR PODER SERVIR PARA QUE LA

EENERGÍA PUEDA VENIR AL MUNDO, OH LEGBHA. ENVIO MIS ESFUERZOS HACIA TODAS LAS FACULTADES DE PODER Y TODAS LAS DIRECCIONES, PARA QUE PUEDAS DIFUNDIR ESTE PODER A TRAVES DE MI.

3.- Meditar a continuación y ver que todas las energías que se mueven en

incontables direcciones, vengan hacia la Tierra. Todos podrán beneficiarse de los Rayos de Legbha.

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DE LES VOUDOU

1.- En estado tranquilo, y con incienso encendido, focalizar la mente en actitud de ayuda hacia los que la necesitan.

Invocar los poderes de Les Voudou para que bajen y pasen a través de uno. Las energías serán enviadas por el proceso de radiación a los que están a nuestro alrededor

2.- QUIERO SER UTIL, OH GRAN LEGBHA. USAME COMO FOCO EMISOR

DE TU EEENERGÍA PARA AYUDAR Y MIRAR A AQUELLOS QUE LA NECESITAN

3.- Visualizar a las personas que necesitan ayuda, repitiendo o sus nombres relajarse unos momentos y dejar que nos invada la somnolencia, para que las energías puedan fluir a través nuestra, sin interposición egoica.

RITUAL PARA INVOCAR LOS PODERES

DE LES VOUDOU DENTRO DE UNO

1.- Quemar incienso y encender una vela roja. Estado de Relajación.

2.- EL PODER ILIMITADO ESTA DENTRO DE MI Y ESTA SIENDO

DIRIGIDO HACIA MI MENTE. ESTOY AHORA UNIDO A LOS GRANDES ESPÍRITUS VUDU. OS RUEGO, OH ESPÍRITUS, QUE SURJAIS Y VENGAIS A MI IMAGINACION Y ME LLENEIS DE VUESTRA PRESENCIA. OS RUEGO QUE ME ENVIEIS LA LUZ DE VUESTRA EEENERGÍA PERMITIENDOME VEROS EN LA IMAGEN DE MI MAESTRO ESOTERICO. OS AMO Y OS SALUDO.

3.- La energía será sentida gradualmente. Es un ruego para obtener imágenes mentales. Después de la invocación es necesario relajarse y dormir, dejando que las fuerzas operen sin disturbio.

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PRACTICAS DE PODER MENTAL

Oración Ritual: Sirve para obtener energía mental de los espíritus al ponerse uno en armonía con ellos.

Para esto basta con aislarse de las condiciones externas y concentrar la mente en los espíritus Hudú, eliminando cualquier pensamiento ajeno, entonces, una vez en sintonía con ellos rogar su ayuda en el desarrollo del poder de la mente. Esta práctica puede ser realizada en cualquier momento y en cualquier lugar.

Templo Sagrado: Se trata de usar la imaginación mental creativa Y la visualización, para viajar al Templo astral donde habitan los espíritus.

Una vez visualizado el Templo según la intuición del iniciado, debe penetrar allí con su mente y su consciencia, y recibir la energía mental que necesita. Puede ser realizada esta práctica en cualquier momento a lo largo del día y en cualquier lugar donde haya quietud y silencio.

Proyección en el Sueño: Se trata de antes de dormirse, concentrarse en los espíritus Hudú y pedirles que nos eleven durante las horas del sueño a conocer los misterios del plano astral, bien en forma directa o simbólica.

Una vez dentro de los ensueños de la noche, los espíritus acudirán y nos llevarán a regiones o a épocas que nos serán reveladoras o nos darán enseñanzas y símbolos que nos abrirán la mente al conocimiento de nosotros mismos y del universo.

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Al despertar hay que anotar los sueños y hacer una meditación sobre sus posibles significados. Es conveniente antes de ir a dormir realizar la práctica denominada "baño de sombra".

Baño de Sombra: Se trata de un método muy antiguo del Vudú Esotérico y usa los poderes de las sombras, que son de gran poder mágico, para preparar el cuerpo físico-etérico y astral del iniciado para trabajos durante el sueño.

Se realiza por la noche antes de ir a dormir, colocando una vela negra en la habitación oscurecida previamente. A continuación el iniciado toma un baño o ducha para limpiarse de las impurezas, luego se frota el cuerpo con un aceite perfumado. Una vez terminada esta limpieza purificadora, se entra en la habitación oscura, se enciende la vela negra colocándose entre la vela y la pared para que se proyecte una sombra. Luego pasará la manos a unos centímetros de la piel desnuda, primero por delante y luego por detrás, mirando hacia la vela.

Este baño de sombra le proporcionará una gran energía mental propicia para su trabajo de proyección en el sueño y otras energías de vibración más baja que sirven para curar y mantener el cuerpo fuerte y enérgico.

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PRACTICA PARA EL CONTROL MENTAL DE LOS DEMAS.

Para poder influenciar o controlar la mente de otras personas en beneficio del mago o de la colectividad en general, los espíritus Hudú pueden ser invocados.

Se trata aquí del intento de uso por parte de una mente superior, más desarrollada mágicamente (el mago) de otras mentes no iniciadas y siempre en beneficio de si mismo y sobre todo de la persona que va a ser influenciada o controlada. No se trata aquí de una coartación de la libertad individual de la persona controlada, porque ésta es menos libre en si misma que el mago y por lo tanto al entrar en su esfera de influencia, adquiere más libertad, bienestar y equilibrio. Por otro lado nadie puede usar este método para hacer daño a una persona ya que el que la hace con éxito debe ser más evolucionado espiritualmente que el sujeto a controlar, de lo contrario esta magia no opera. Por eso ningún mago puede controlar a otro mago excepto que sea más poderoso y evolucionado que él.

Para realizar este control hay que hacer un cuadrado mágico con el nombre de la persona que uno quiere influenciar, mientras se visualiza su aspecto físico de la forma más perfecta posible. El cuadrado mágico se construye de la forma siguiente:

l. Se construyen las líneas periféricas de la forma siguiente: J U A N

U A A U N A U J

quedando el nombre escrito frente a las cuatro direcciones del espacio: Este, Sur, Oeste y Norte.

2. Se rellena el interior cruzando el cuadrado diagonalmente desde la parte inferior izquierda a la superior derecha con la letra de ambos extremos:

J U A N U N A A N U N A U J

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3. Rellenar los huecos que quedan con la letra que hay en ambos extremos de la línea inclinada que se forma:

J U A N U A N A A N A U N A U J

Una vez terminado el cuadrado mágico, hay que impregnarlo de la intención mágica que se quiere inducir en la persona y para ello hay que ir haciéndolo de una en una por cada letra que compone el cuadrado mágico, después de decir:

!Impregno este Cuadrado Mágico con el Poder de mi Mente!

Una vez impregnado el cuadrado, se coloca en el altar dispuesto como de costumbre con las velas y en vez de una copa de agua, se pone una copa de licor (ron, coñac, pacharán, vino aromático, etc.) entre la vela azul y la negra, y el cuadrado mágico entre la vela negra y la roja. Se encienden en el orden habitual y luego leer cada una de las palabras que se forman en

el cuadrado desde arriba abajo y de izquierda a derecha.

Estas palabras son ofrecidas a los espíritus al ser pronunciadas. Decir a continuación:

¡Poderosos espíritus HuDu! ¡Yo, vuestro Sacerdote y Servidor debo controlar la mente de ... para su propio bien y el mio. Aceptad el Cuadrado Mágico como ofrenda de mi servicio!

¡Tomo en mi ser los Poderes Mágicos de los Espíritus poderoso e invisibles HuDu, que están aquí presentes y ahora!

Beber el licor y sentir la fuerza de los espíritus dentro, luego devolver la copa al altar y apagar las velas en orden inverso a su encendido y decir.

¡Espíritus HuDu, recoged en vuestro seno este Cuadrado Mágico y la intención de mi Voluntad!

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Cuando se necesita una pareja de sexo opuesto para compartir la vida y el trabajo mágico, el iniciado usa estas prácticas para atraer a dicha persona a su esfera. Para ello debe tener paciencia y elegir bien a su futura pareja no solo por su apariencia física, sino también por otros factores mucho más importantes como son sus cualidades de personalidad y mentalidad.

Ante todo debe ver si la persona elegida tiene consonancias astrológicas con su propio signo, para ello debe tener en cuenta que los aspectos más importantes son el signo en que está el Sol y en el que está la Luna. Pero ante todo debe observar durante mucho tiempo a su futura pareja, conversar con ella y tratar de ver si tiene posibilidades de desarrollo esotérico y si no está dominada por ideas obsesivas negativas que le impedirán su futuro desarrollo mágico.

Aún así, no es una tragedia irremediable que uno no se encuentre con una pareja que no satisface totalmente sus perspectivas esotéricas, pues ante todo debemos tener en cuenta que el sendero espiritual es individual y aunque dos personas lo recorran, lo que les une en él es la meta y no el nivel evolutivo en que se encuentren cada uno de ellos. Para realizar el trabajo de control mental sobre la futura pareja elegida para el amor, el mago hará el método anteriormente descrito pero visualizando a la persona y luego al siguiente diagrama colocado al lado de la copa de licor :

Antes de beber la copa añadirá:

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PRACTICA PARA VENCER LA NEGATIVIDAD.

Cuando uno sienta que está rodeado de fuerzas negativas que le inducen al fracaso, y desea librarse de ellas, e inducir unas influencias positivas en si mismo y en el medio que le rodea, puede usar esta técnica de los espíritus Hudú para conseguirlo.

Se cogerá un momento de retiro y quietud. Visualizará las energías de los espíritus, con los que ya está familiarizado y luego exclamará en voz alta o mentalmente:

¡Deseo que los Espíritus HuDu induzcan en mi una buena influencia que aleje la Negatividad de mi entorno!

A continuación exclamará:

¡Fuerzas Negativas y maléficas, Alejáos de Mi! ¡Fuerzas Positivas y benéficas, Entrad en Mi!

Es conveniente hacer después de este trabajo un dibujo Vudú (Vevé) de protección en un papel o fieltro como el que se representa a continuación y llevarlo consigo durante un tiempo para ayudar el trabajo de los espíritus.

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PRACTICA PARA CURACION Y REJUVENECIMIENTO.

En esta práctica se utiliza la energía sexual en sus manifestaciones físicas, las secreciones sexuales masculina y/o femenina, es decir, el semen y las lubrificaciones vaginales o sangre menstrual.

El altar habrá de ser erigido como de costumbre, con las cinco velas habituales en sus posiciones adecuadas. Entre la vela negra y la vela azul, una copa de licor.

Una vez encendidas las velas en el orden habitual, se invocan los espíritus HuDu y luego una vez sentida su presencia en el templo, comenzará un acto sexual con la pareja o en solitario, que en este último caso acompañarse de las imágenes eróticas que la imaginación elija. Estas imágenes serán vivificadas por los espíritus, que incluso incorporarán astralmente estas formas para manifestarse al mago.

Una vez terminado el acto el iniciado mojará sus dedos en las secreciones sexuales y los introducirá en la copa de licor para ofrecerlos a los espíritus como ofrenda. Ellos se alimentarán de los efluvios sutiles que hacen posible su avance en el desarrollo espiritual hacia los planos superiores y a cambio otorgarán al mago una serie de energías que le fortalecerán física, etérica, astral y mentalmente.

Una vez efectuada la ofrenda, el iniciado beberá la copa con el sacramento de la transmutación espiritual que los espíritus han realizado. Para asegurar que este trabajo sea correcto y ninguna otra influencia negativa entre en el templo, el iniciado debe pintar el dibujo sagrado Vudú (Vevé) de protección que se muestra a continuación y colocarlo entre la vela negra y la vela roja antes de la operación ritual.

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GRIMORIO VUDU

El Grimorio Vudu no es un libro de magia que haya sido confeccionado para el publico ocultista, pues no se trata más que de unas tablas simbólicas que el iniciado debe confeccionar él mismo con el fin de aplicarlas a sus propios trabajos mágicos.

Cada mago Vudú debe tener su propio Grimorio y utilizarlo como referencia para la confección de sus rituales y prácticas mágicas. Hay una conexión entre los símbolos del Grimorio y las realidades de los planos internos. De esta forma los Loas o espíritus Vudú se interconexionan con el mago para ayudarle con su fuerza espiritual en las operaciones mágicas que realiza.

Cada Loa tiene un nombre y un diagrama mágico (Vevé), especie de sigilo o mandala mágico que se utiliza para su invocación y evocación.

Los Loas pertenecen a distintos niveles de los planos sutiles. Hay espíritus que pertenecen al plano astral, que se corresponden con el Id de la psicología freudiana, como los Hudú; hay otros que pertenecen a otros planos, cuya clasificación en el Vudú se asemeja bastante a la del sistema ocultista en general.

El Ego o centro del individuo encarnado, donde se centraliza su actividad externa y se producen los intercambios entre distintas funciones psíquicas, es el que domina la escena de la vida vigílica de cualquier persona. Muchas veces se esconde ante los demás detrás de una máscara, la personalidad, que es una imagen artificial de como el Ego cree que los demás deben verle. Durante toda la vida, el Ego se esfuerza en manifestarse en esa forma.

Por encima y por debajo, desde el punto de vista de su función, están el Supraconsciente v Ego Transcendental y el Subconsciente o Id. Ambos son partes de la

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Transcendental o aspecto supraconsciente de la psique, es donde las ideas arquetípicas o símbolos abstractos de la realidad actúan como impronta conduciendo al Ego por los caminos de lo que se considera superior, espiritual, ético y celestial. Por debajo del Ego está el Subconsciente, con sus tendencias e instintos, actuando desde niveles generalmente suprimidos por el entorno cultural humano, que se esfuerza en tapar su naturaleza animal tan manifiestamente activa. Es el ID, donde Las fuerzas de Los Espíritus Hudú actúan y funcionan en el subconsciente colectivo.

Por encima y por debajo, es decir, fuera de esta esfera Id-Ego-Ego Transcendental, que compone el huevo áurico humano, se encuentra algo que nos une con la abstracción pura, con el absoluto, y que a pesar de lo desconocido de su existencia y función, está ahí y en contacto con el hombre. Se trata de lo que llamaremos simplemente Inconsciente o Id Transcendental y siempre se encuentra en relación directa con las dos esferas de la psique: Id y Ego Transcendental. Es la transcendencia, que está compuesta por esencias que no pueden ser aprehendidas por el hombre fácilmente y que requieren un acceso a través del Id y del Ego Transcendental a la vez. No se puede acceder a esta realidad directamente desde el Ego, sino a través de estos dos niveles de la psique antes citados.

Se trata de llegar a los niveles más oscuros del Id y a los más luminosos del Ego Transcendental, porque solo en estas profundidades infinitas de Luz y Oscuridad puede accederse a la transcendencia pura.

Los Loas con los que trabaja La Culebra Negra, que forman su sistema de Vudú Esotérico, están en los límites más oscuros del Id y en los más luminosos del Ego Transcendental, es decir en los límites de la subconsciencia y de la supraconsciencia. Son simplemente leyes que actúan como fuerzas de empuje sobre el universo manifestado tanto macrocosmicamente (el universo), como microcosmicamente (el hombre).

Estos Loas son imprescindibles para el trabajo gnóstico del Vudú Esotérico. En la Gnosis son denominados: Daemones (los que pertenecen al Id) y Aeones (los que pertenecen al Ego Transcendental).

Hemos de hacer aquí una advertencia, la Luz siempre ha sido considerada por el hombre como algo eminentemente bueno, espiritual y ético-moral, una vía única de auto-realización, en detrimento de la oscuridad, que se asocia siempre con el mal, el infierno, el demonio y otros mitos negativos de la cultura humana. Esto es debido a que el Ego tiende de forma natural a fluir hacia el Ego Transcendental y a huir del Id, lo cual hace que como fenómeno cultural general, la búsqueda de la oscuridad del Id haya sido vista siempre como algo demoníaco, negativo y aborrecible.

Esto ha sucedido sobre todo a partir de que el hombre olvidó su origen estelar (la oscuridad del cielo plagado de estrellas) para refugiarse en su Sol luminoso cuya ley

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egóica enmascara su realidad última y transcendente, el Absoluto, que no tiene ni luz ni oscuridad porque las comprende a ambas a la vez.

El Grimorio Vudú comprende pues, una serie de atribuciones simbólicas que corresponden a la división en 16 partes del espacio, tal como la consciencia lo puede captar y concebir en los dístintos planos de manifestación. Esta división en 16 porciones es importante en el Vudú Esotérico, así como en otros sistemas de origen afro-atlante. Los Loas están clasificados según estos 16 espacios o niveles y tienen su funciones, rituales especiales y otras operaciones mágicas, de acuerdo con estos 16 espacios. La suma de los 16 componen un conjunto global y armonioso que opera como un verdadero mandala. Hay que tener en cuenta que cada Loa por estar ocupando una zona particular de la totalidad, está relacionado con los que están en los niveles contiguos y asimismo con el que está localizado en la zona opuesta del mandala.

El Grimorio Vudú funciona como un instrumento mágico personal que actúa por la actividad de sus diversos componentes a través de la consciencia del mago. Por ser un instrumento, los magos de este sistema llaman a su representación diagramática MANDALUM INSTRUMENTUM.

El propósito del Grimorio es crear un sistema de trabajo mágico capaz de erigir un templo alrededor de la consciencia del mago que puede conectar su propia realidad individual con el Todo, con la totalidad del Cosmos. De esta forma las esencias divinas subyacen y dan forma al universo y el mago las hace penetrar en

su experiencia personal y cierran el circuito completo que es la razón última de la creación universal, reencuentro entre el origen y su final, la cabeza de la serpiente alquímica que llega a morder su propia cola cerrando así el círculo cósmico.

Al penetrar estas energías esenciales transcendentes en el mago, este se transforma él mismo en templo donde habita lo divino. Los iniciados del Vudú, cuando han trabajado este Grimorio, llegan a constituir una verdadera Ecclesia, una reunión de adeptos iluminados que componen la Gnosis Vudú, por eso el Vudú Esotérico está tan estrechamente unido a la Ecclesia Gnóstica Espiritual, cuya sede no está en ningún lugar o templo físico, sino en el mundo arquetípico ideal que los adeptos Vuduistas erigen con su consciencia espiritual.

Hay que diferenciar el concepto Ecclesia tal como es concebido aquí y el de iglesia tal como es concebido por la generalidad de los no iniciados. Más adelante, cuando se estudien los aspectos gnósticos relacionados con este sistema de Vudú Esotérico, se ampliarán los conceptos relacionados con este tema.

A continuación vamos a presentar una serie de tablas de atribuciones simbólicas correspondientes a los 16 espacios o niveles de este sistema, que harán posible la confección del Grímorio.

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Centros Exotéricos: Corresponden a partes del cuerpo del hombre arquetípico, que en el Gnosticismo se llama ABRAXOS.

Este esquema del hombre como modelo del universo es común a la mayoría de los sistemas, esotéricos. Conexionan al hombre como microcosmos, con el universo o macrocosmos, del que no es más que una réplica diminuta. Los centros exotéricos o externos tiene cierta relación con los chakras hindúes y puntos energéticos de la ciencia Taoista china. Tienen una relación micro-macrocósmica, es decir, que cada centro exotérico del cuerpo se relaciona con un aspecto astrológico-alquímico. Los centros son los siguientes :

I. PIE DERECHO - Tierra de Tierra - Luna en Escorpio, Cáncer y Piscis. II. PIE IZQUIERDO - Agua de Tierra- Sol en Tauro.

III. RODILLA Y MUSLO DERECHO -Aire de Tierra- Sol en Virgo.

IV. RODILLA Y MUSLO IZQUIERDO -Fuego de Tierra- Sol en Capricornio. V. BASE DE LA COLUMNA -Tierra de Agua- Sol en Escorpio.

VI. PALMA DE LA MANO DERECHA -Agua de Agua- Luna en Tauro, Virgo y Capricornio.

VII. PALMA DE LA MANO IZQUIERDA -Aire de Agua- Sol en Piscis. VIII. ORGANOS SEXUALES -Fuego de Agua- Sol en Cáncer.

IX. PLEXO SOLAR -Tierra de Aire- Sol en Libra. X. PULMONES -Agua de Aire- Sol en Acuario.

XI. BRAZO DERECHO -Aire de Aire- Luna en Leo, Aries y Sagitario. XII. BRAZO IZQUIERDO -Fuego de Aire- Sol en Géminis.

XIII. CORAZON -Tierra de Fuego- Sol en Sagitario. XIV. GARGANTA -Agua de Fuego- Sol en Aries. XV. ENTRECEJO -Aire de Fuego- Sol en Leo.

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XVI. CORONILLA -Fuego de Fuego- Luna en Géminis, Libra y Acuario.

Centros Crebrales: Se trata de ciertos centros ocultos y esotérrcos del cuerpo humano que son las puertas de entrada a las fuerzas espirituales que provienen de las zonas limítrofes del Ego Transcendental o Supraconsciencia. Se trata de fuerzas luminosas que afectan al mago cuando son invocadas, abriendo estos puntos o puertas para irrumpir en su consciencia para dotarle del poder mágico necesario para la transmutación y desarrollo espiritual le conducirá a la iluminación. Estos centros son: I. CORAZON.

II. LIGERAMENTE ENCIMA DEL PEZON DERECHO. III. LIGERAMENTE ENCIMA DEL PEZON IZQUIERDO. IV. CENTRO DE LA CLAVICULA.

V. ZONA TIROIDEA EN LA GARGANTA. VI. ZONA PARATIROIDEA DERECHA. VII. ZONA PARATIROIDEA lZQUIERDA. VIII. RAIZ DE LA LENGUA.

IX. SENOS FRONTALES.

X. PUNTO CENTRAL ENTRE EL OJO Y EL OIDO DERECHOS. XI. ENTRECEJO.

XII. PUNTO CENTRAL ENTRE EL OJO Y OIDO IZQUIERDO. XIII. CENTRO DE LA CORTEZA CEREBRAL.

XIV. CENTRO DEL CEREBRO DERECHO. XV. CENTRO DEL CEREBRO IZQUIERDO. XVI. ZONA SUPERIOR DEL CRANEO.

Centros sexuales: Se trata de ciertos puntos de la zona inferior del cuerpo que son en si mismos puntos de poder y puertas de entrada de las fuerzas espirituales oscuras que provienen de las zonas limítrofes del Id, que al irrumpir en la consciencia del mago le proporcionan los poderes mágicos necesarios para su transformación interna y autodesarrollo espiritual total. Estos centros son:

Para el Hombre.

I. BASE DE LA COLUMNA. II. BASE ANAL DERECHA. III. BASE ANAL IZQUIERDA. IV. RECTO.

V. CENTRO EN PERINE ENTRE EL ANO Y EL PUNTO MEDIO ENTRE LOS TESTICULOS.

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VI. FRENTE A LA BASE DEL MUSLO DERECHO Y EQUIDISTANTE DEL PUNTO MEDIO ENTRE LOS TESTICULOS Y EL ESCROTO.

VII. BASE DEL MUSLO DERECHO ENTRE EL ESCROTO Y LA APERTURA ANAL.

VIII.TESTICULO DERECHO. IX. TESTICULO IZQUIERDO.

X. ENTRE LOS TESTICULOS Y EL PUNTO MEDIO ENTRE ESTOS Y EL ANO. XI. FRENTE A LA BASE DEL MUSLO IZQUIERDO Y EQUIDISTANTE

DEL ESCROTO Y EL PUNTO MEDIO ENTRE TESTICULOS.

XII. BASE DEL MUSLO IZQUIERDO ENTRE EL ANO Y EL ESCROTO. XIII. PUNTO MEDIO ENTRE LOS TESTICULOS Y EL ANO.

XIV. CENTRO PROSTATICO. XV. BASE DEL PENE.

XVI. GLANDE DEL PENE. Para la Mujer.

I. BASE DE LA COLUMNA. II. BASE ANAL DERECHA. III. BASE ANAL IZQUIERDA. IV. RECTO.

V. ENTRE ANO Y EL PUNTO MEDIO ENTRE VAGINA Y ANO. VI. LADO DERECHO DE LA VAGINA.

VII. ENTRE BASE DEL MUSLO DERECHO Y VAGINA. VIII. OVARIO DERECHO.

IX. OVARIO IZQUIERDO.

X. ENTRE OVARIOS Y PUNTO MEDIO ENTRE VAGINA Y ANO. XI. LADO IZQUIERDO DE LA VAGINA.

XII. BASE DEL MUSLO IZQUIERDO EN LA VULVA. XIII. PUNTO ENTRE LA VAGINA Y EL ANO.

XIV. CUELLO UTERINO. XV. BASE DEL CLITORIS. XVI. GLANDE DEL CLITORIS.

Colores: Se trata de una escala de colores que al complementarse entre si simbolicamente dan a los diagramas o Vevés una realidad simbólica acorde con la realidad que representan. Los colores simbólicos están relacionados aquí con los cuatro elementos. Hay dos escalas, una Zotiriana que se emplea con los Espíritus luminosos y otra Vuduista propiamente dicha que se emplea con los Espíritus oscuros.

ESCALA ZOTIRIANA

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II. MARRON/MAGENTA. III. MARRON/NARANJA. IV. MARRON/FURPURA. V. AZUL-VERDOSO/ROJO OSCURO. VI. AZUl-VERDOSO/MAGENTA. VII. AZUL-VERDOSO/NARANJA. VIII. AZUL-VERDOSO/PURPURA. IX. AZUL/ROJO OSCURO.

X. AZUL/MAGENTA. XI. AZUL/NARANJA. XII. AZUL/PURPURA. XIII. GRIS/ROJO OSCURO. XIV. GRIS/MAGENTA. XV. GRIS/NARANJA. XVI. GRIS/PURPURA. ESCALA VUDUISTA I. AMARILLO/NEGRO. II. AMARILLO/AZUL. III. AMARILLO/VERDE. IV. AMARILLO/ROJO. V. AZUL/AMARILLO. VI. AZUL/NEGRO. VII. AZUL/VERDE. VIII. AZUL/ROJO. IX. VERDE/AMARILLO. X. VERDE/AZUL. XI. VERDE/NEGRO. XII. VERDE/ROJO. XIII. ROJO/AMARILLO. XIV. ROJO/AZUL. XV. ROJO/VERDE. XVI. ROJO/NEGRO.

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Direcciones: Se trata de la división del espacio en forma de círculo en 16 puntos o direcciones tal como lo podemos hacer desde cualquier punto de la superficie de la tierra si exceptuamos los polos.

I. ENTRE EL ESTE Y NORDESTE. II. NORDESTE.

III. ENTRE NORDESTE Y NORTE. IV. NORTE.

V. ENTRE NORTE Y NOROESTE. VI. NOROESTE.

VII. ENTRE NOROESTE Y OESTE. VIII. OESTE.

IX. ENTRE OESTE Y SUROESTE. X. SUROESTE.

XI. ENTRE SUROESTE Y SUR. XII. SUR.

XIII. ENTRE SUR Y SURDESTE. XIV. SURDESTE.

XV. ENTRE SURDESTE Y ESTE. XVI. ESTE.

Números de expresión: Se trata del número de Espíritus esenciales que se expresan en cada uno de 16 niveles. Hay en total l44 Espíritus esenciales en este sistema, que proceden del Absoluto o Transcendencia, y que se expresan a través de las 16 Leyes o Loas en el campo mágico de la consciencia del iniciado Vudú gracias a sus operaciones rituales.

Estos l44 espíritus o esencias, no tienen nombres en si mismos, sino que han de ser investigados por cada mago en particular. Los números que estos l44 espíritus esenciales divinos (llamados también "Les Vudú"), son importantes para la confección del Grimorio, porque son una referencia al origen esencial desde donde se canalizan todas las energías a través del Ego Transcendental o Supraconsciencia y del Id o Subconsciencia, hacia el Ego o mente del mago. Estos números son los siguientes : I. 5 II. 9 III. 12 IV. 5 V. 2 VI. 3 VII. 3

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VIII. 11 IX. 9 X. 4 XI. 4 XII. 10 XIII. 6 XIV. 7 XV. 8 XVI. 6

Loas luminosos: Son aspectos del Gran Loa Legbha o "Gran Camino" o Logos del sistema Vudú. Se trata de las leyes que rigen el universo y que, partiendo de la esencia divina, penetra en la esfera del mago a través de la Supraconsciencia.

Son luminosos, no porque sean buenos o malos o más o menos espirituales que otros Loas, sino porque penetran en la consciencia por la esfera del Ego y éste considera luminoso todo lo que entra en su esfera de visión mental. Estos Loas están relacionados con los centros cerebrales. Son los siguientes :

I. Maitre Grand Bois d'Ilet II. Cousin Azaka

III. Simbi

IV. Guedhe Nibbho

V. Agwe-Maitre Grand Bois d'Ilet VI. Agwe-Azaka

VII. Simbi-Agwe VIII. Ogou Fer-Agwe IX. Simbi-Guedhe

X. Maitre Grand Bois d'llet XI. Agwe-Chango

XII. Simbi-Azaka

XIII. Damballah-Nibbho XIV. Ogoufer-Chango XV. Damballah-Simbi

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Loas oscuros: Son aspectos del Gran Loa Guédhé, el espíritu oscuro del sexo y la muerte. Se trata de una serie de fuerzas o leyes que, emanando de la esencia divina del Absoluto, penetran en la consciencia desde los límites más externos del Id o Subconsciente. Son oscuros, no por ser malos, aunque para los no iniciados pueden representar fuerzas negativas y malignas debido a su desconocimiento de su propia realidad y de la del cosmos. Son oscuros porque para el Ego, proceden de la zona más desconocida y reprimida social y culturalmente de la psique, el subconsciente. Están relacionados con los centros sexuales, y son:

I. Baron la Croix

II. Mystére Toile d'Araignée III. Barón Cimitiere

IV. Mystere des Blattes V. Barón Samedi VI. Mystére Araignée VII. Barón Piquant VIII. Ti Moufette IX. Barón Scorpion X. Ti Zariguin XI. Ti Jean Zombi XII. Ti Pied Mille Fois XIII. Barón Zombi XIV. Barón Zariguin XV. Guedhe Nibbho XVI. Guedhe Brav

PRACTICAS Y RITUALES

Contacto con el Papa Vudú

Los sacerdotes del Vudú Esotérico tiene como máxima Jerarquía a su Papa Negro, lo mismo que la Iglesia Católica Romana tiene su propio Papa. El Papa Negro habita en Leogane, Haití, y es de raza negra. Su nombre es Hector-François Jean-Maine. Es el representante de los ritos mágicos afro-atlantes en nuestros días.

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Cualquier estudiante o iniciado de Vudú Esotérico, una vez terminado su Grimorio, puede contactar con él, sobre todo si es de raza negra. Para ello debe hacer el siguiente ejercicio :

En el templo o habitación habitual de trabajo, en penumbra, con una vela encendida frente a uno, colocar la palma de la mano derecha delante de los ojos.

Hay que mirar entonces los dedos de la mano como tubos de energía luminosa que se proyectan hacia el espacio circundante.

En los lugares de flexión de los dedos, aparecen unos pliegues que dividen a éstos en tres espacios para cada dedo, lo cual hace un total de l5 espacios.

En el centro de la palma de la mano, en los pliegues de la misma, existe otro espacio más, que hace con los anteriores, un total de 16 espacios o centros de poder.

Hay que mirar atentamente, concentrando la mente en cada uno de estos 16 espacios, uno por uno lentamente, para poner en marcha estos centros de poder y para que empiecen a emitir energía oculta.

Con un poco de paciencia podrá empezar a verse perfilándose en la palma de la mano, la figura del Maestro Hector-François Jean-Maine, con un rostro de anciano de raza negra, con cabellos blancos y perilla y bigote del mismo color, con unos ojos oscuros con destellos azulados. Puede verse mejor moviendo los ojos de una zona a otra de la palma de la mano.

La persistencia en la concentración sobre los centros secretos de la palma de la mano, aumentará el contacto con el Papa Negro.

No se trata de un trabajo forzado, por lo que hay que dejar fluir las energías Vudú que desde Leogane afloran a la palma de la mano, que funcionará como una pantalla de televisión. Este contacto se puede hacer cuantas veces se quiera, bien para pedir consejo al Papa negro del Vudú, o bien para fortalecer las facultades de visualización y visión interior.

Para probar el Poder del Grimorio:

Para ver en que disposición se encuentra uno para utilizar el Grimorio Vudú, puede hacerse el siguiente ejercicio:

Sentado en el templo sin ninguna otra iluminación que una vela colocada frente a uno. Sentir el poder de la llama como una energía Ígnea que posibilita el contacto con los planos internos.

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Hay que concentrar la mente sobre la llama para que ésta responda con movimientos a los requerimientos del operador. El fuego será el contacto elemental para el diálogo entre la mente consciente y los poderes ocultos que se encierran dentro de las propias potencialidades mágicas del operador.

Los movimientos de la llama de delante atrás, corresponden a respuestas afirmativas y los movimientos laterales serán las respuestas negativas. Las preguntas que se hacen a la llama son:

¿Estoy concentrando correctamente mi mente?.

¿Estoy preparado para hacer contactos con los planos internos?

¿Puedo ser dirigido n mi desarrollo espiritual por los poderes ocultos? ¿Estoy preparado para comenzar mi trabajo mágico con el Grimorio Vudú? ¿Estoy sensibilizado a las influencias espirituales?

¿Soy capaz de percibir las emanaciones mágicas de los 16 centros de poder?

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En el Vudú Esotérico es necesario trabajar dentro de un templo simbólico que tenga una disposición esquemática lógica, con atribuciones adecuadas para que la Voluntad del mago pueda funcionar mágicamente. Si estas atribuciones no fuesen correctas, los símbolos no tendrían ningún poder mágico bajo la voluntad del operador, pues no son más que símbolos de relación que evocan el poder y la energía mágicos, para que se materialicen en la esfera de influencia alrededor del mago.

En el Vudú Esotérico no es la mente del mago la que realiza todo el trabajo mágico, sino que también los símbolos tienen poder en si mismos, ya que actúan como instrumentos mágicos. Los espíritus o Loas, actúan a través de ellos sobre el mundo físico produciendo los efectos deseados por el mago.

Para la debida colocación de estos símbolos, el mago debe erigir su templo orientándolo de una forma adecuada para que funcione la magia. Sin ello, los espíritus no se manifestarán.

Para establecer la orientación de todo templo Vudú, es necesario hacerlo con arreglo a las ocho direcciones del espacio: Nordeste, Norte, Noroeste, Oeste, Sudoeste, Sur, Sureste y Este.

Estas ocho direcciones principales y las intermedias que se forman entre ellas, constituyen 16 puntos en el espacio, que corresponden a los 16 niveles mágicos de consciencia y sus Loas correspondientes. Cada uno de estos puntos es una puerta por donde entran las fuerzas que representan los símbolos a ellos atribuidos, formándose así, una especie de Mandala en tela de araña.

Esto es debido a que este templo es matemático y los Loas que lo habitan poseen una perfecta geografía mágica.

El mago se coloca mental y astralmente en el centro de este Mandala y desde ahí opera con las fuerzas mágicas que recibe.

Cuando utiliza el Templo, ha de tener en frente suyo un espejo mágico sobre el que proyectar su consciencia una vez conformado el esquema del templo, para atraer las fuerzas mágicas hacia el centro, donde reside su consciencia.

Antes de proyectar la consciencia en el espejo mágico, puede utilizar técnicas de invocación y magia sexual como las que se utilizan en el trabajo con los Hudú, con la finalidad de

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