“mi primera relación sexual, a los 12 años. (Edad al primer embarazo)... bueno yo quedé embarazada a los 14 años y mi niña nació a los 15 años” “Marta”
Comunicado de Prensa
Embarazo
no
deseado
‐Características de los conocimientos y comportamientos de las mujeres.
‐Como problema de salud pública, afecta la vida de las mujeres, sus familias, sus hijos/as y repercute en sus proyectos a corto y mediano plazo
San José, 10 de agosto de 2012. En Costa Rica el 58% de las mujeres entre 15 y 24 años vieron interrumpida la continuación de sus estudios, al quedar embarazadas y mencionaron que su principal motivo, se encuentra referido al cuido de sus hijos/as (65.3%). Las mujeres con menor acceso a educación y por tanto a recursos de información, poseen menos herramientas para controlar sus expectativas reproductivas, de esta forma un 19% del total de embarazos no deseados se da en mujeres con primaria, y solamente un 8% en mujeres con educación universitaria. En lo referente al uso de métodos anticonceptivos un 75% de las mujeres entre 20 y 24 años,
mencionaron que no utilizaron ningún método anticonceptivo en los meses previos al embarazo reportado como no deseado.
Estos son algunos datos que arrojó una Investigación realizada por la Asociación Demográfica Costarricense (ADC), a 150 mujeres, de entre 15 y 49 años, en los meses de julio y agosto de 2011 denominada “Embarazo no deseado: características de los conocimientos y comportamientos de las
mujeres.”, instrumento que servirá para desarrollar en un futuro investigaciones nacionales que den
cuenta del embarazo no deseado y faciliten la construcción de una respuesta efectiva, que le permita a las personas y en especial a las mujeres ejercer de forma libre e informada sus derechos sobre su propio cuerpo.
Adrian Barrientos investigador a cargo del estudio, de la ADC, manifestó que “esta problemática presenta limitaciones en los proyectos de vida de las mujeres debido a que un embarazo no deseado les obliga a posponer o cambiar sus expectativas, siendo la educación el ámbito que se ve más afectado. Otro dato preocupante que presenta la investigación es que la mayoría de las entrevistadas dieron como razón para su embarazo no deseado lo que ellas mismas llaman “el descuido que tuvieron con el uso de los métodos anticonceptivos usados”, esto por lo tanto refleja una necesidad urgente que tiene el país, en el sentido de que se brinde una educación en salud sexual y reproductiva más integral y se le dé seguimiento a lo largo de la vida de las personas. En ese sentido, desde la ADC proponemos un trabajo conjunto que se planee de forma integral y con la creación de alianzas estratégicas entre las organizaciones sociedad civil y el Estado tendientes a desmitificar el tema de la sexualidad y lograr que sea asumido como lo que realmente es: un tema de Derechos Humanos”.
Algunos resultados
Características de las mujeres entrevistadas
La mayoría de las mujeres entrevistadas tenían entre 25 y 44 años (66%), y habían alcanzado estudios en secundaria o más (61.3%). La proporción de mujeres en unión fue de 70%.
Aspectos relacionados con los embarazos no deseados
Factores de Protección: Los datos evidencian que cuando las mujeres no logran controlar sus expectativas reproductivas, las posibilidades de continuar sus proyectos de estudio y/o retomarlos posterior al nacimiento de su hijo/a bastante escasas. El acceso a la educación y su continuidad después de un embarazo tendrían como objetivo principal fortalecer los factores protectores, potenciando oportunidades que les permitan a las mujeres mejorar su calidad de vida.
En el cuadro uno se observa como un 39% de las mujeres entrevistadas tenía entre sus expectativas futuras continuar y o concluir sus estudios, siendo cierto que únicamente el 21% de ellas logró mantener su proyecto de estudio posterior al embarazo no deseado.
De esta forma, 58% de las mujeres entre 15 y 24 años vieron interrumpida la continuidad de sus estudios y refieren como principal razón de la imposibilidad el cuidado de los niños y niñas (65.3%)
Cuadro 1. Distribución porcentual sobre el estado del acceso a la educación de las mujeres entrevistadas: deseo futuro, situación actual,
razones que dificultan el acceso.
Variables Porcentaje
(n = 150)
Deseo de continuar estudios
Si 38.7
Estudia actualmente
Si 20.8
No 79.2
Razones que dificultan el acceso (n=118) Cuidar hijos/as 65.3 Rendimiento académico 8.5 Necesitaba trabajar 8.5
Marta: “y yo tal vez… si no los hubiese tenido a ellos creo que hubiese seguido estudiando.
¡Si yo le hubiera hecho caso a mi mama! cuando me dijo que no tuviera hijos…, ahorita estaría yo con una carrera de algún tipo”
Camila “[…] él con un poquito que tomara era para amenazar a mi mamá, le decía a mi
mamá que la iba a matar y nosotras nos metíamos y era aquel burumbum; ¡claro!... yo creo que nadie se daba cuenta aquí (barrio), pero yo creo que nosotras sufrimos mucho eso también, y esa fue una de las causas por las que tal vez muchas veces queríamos irnos de la casa, el motivo de nosotros era querer hacernos de un novio o de alguien; quedar embarazadas o yo qué sé o irnos, tal vez no era ese el punto quedar embarazadas, porque diay uno nunca lo piensa, pero como tipo escapatoria para ya dejar de vivir en la realidad”.
Relación del nivel educativo de la mujer con su pareja: La mayoría de las mujeres, al momento del embarazo no deseado, tenían como parejas a hombres con estudios en secundaria en un 44.2% (Ver cuadro 2). Sin embargo la distribución del nivel educativo de las parejas se agrupan de acuerdo al nivel educativo de las mujeres, es decir, las mujeres que alcanzaron la primaria, tuvieron como pareja al momento del embarazo no deseado, a hombres con un nivel educativo de primaria (45.5%), lo mismo para estudios de secundaria (59.6%) y los estudios universitarios (65%).
Cuadro 2. Comparación del nivel educativo de las mujeres entrevistadas y el nivel educativo de sus parejas al momento del embarazo no deseado Nivel educativo
de las mujeres
Nivel educativo de la pareja (n=104)
Primaria Secundaria Universitaria NR Primaria 45.5 38.6 11.4 4.5 Secundaria 25.5 59.6 14.9 - Universitaria 15.0 15.0 65.0 5.0
Fecundidad: Número ideal de hijos/as y espaciamiento
Para el caso de las mujeres entrevistadas en el estudio se observa (ver cuadro 3) que un 67.3% de las mujeres entre 15 y 19 años hubieran preferido esperar más de 4 años para su embarazo. En términos generales un 20.4% de todas las mujeres entrevistadas hubieran preferido esperar un lapso de entre 2 a 3 años, mientras que un 36.7% hubiera preferido una espera de 4 o más años.
El porcentaje de mujeres que manifiesta no querer más hijos/as aumenta conforme se incrementa la edad y lo mismo sucede con el número de hijos/as tenidos vivos.
Cuadro 3. Porcentaje de mujeres según el espaciamiento que hubieran deseado para su último embarazo por edad.
Edades (n=80) Espaciamiento 15 a 19 20 a 24 25 a 29 30 a 34 35 a 39 40 a 44 45 a 49 1 año 0.0 15.0 0.0 8.0 0.0 3.5 4.0 2 a 3 16.7 20.0 40.0 28.0 23.0 7.5 12.0 4 ó más 67.3 37.0 21.0 24.0 27.0 27.0 28.0 No quería tener hijos/as 16.0 30.0 37.0 40.0 50.0 62.0 56.0
Prácticas sexuales
El gráfico 1, presenta una comparación entre las edades medianas de inicio de relaciones sexuales y la edad del primer embarazo.
Es de suma importancia aclarar que el 18.1% de las mujeres entrevistadas indicó que la edad de su primer embarazo fue menor a los 17 años, por lo cual la distribución de la edad mediana presenta una edad de inicio de relaciones sexuales superior a la edad del primer embarazo por lo que se excluyó este grupo del análisis. Como muestran los datos la edad mediana del primer embarazo es de 13 años, para las mujeres entre 20 y 24 años es de 12.5 años. Hasta los 35 años los datos no muestran un espaciamiento entre la edad de inicio de relaciones sexuales y la edad del primer embarazo.
Martha: “Ahí conocí un muchacho y desgraciadamente con solo una
vez que me acosté con él quedé embarazada de mi niño; primero que todo porque a mí no me gusta el condón como ya le repito…”
Métodos anticonceptivos
Uso de métodos anticonceptivos: En este sentido el cuadro 4 permite mostrar como cerca de la
mitad de las mujeres unidas entrevistadas (49.5%) no utilizó ningún método anticonceptivo antes de su último embarazo.
De esta forma un 75% de las mujeres entre 20 y 24 años, un 54% de quienes tienen entre 25 y 29 años, un 40% de aquellas mujeres entre los 30 y 34 años, y un 55% de las que se ubican en 45 a 49 años, mencionaron que no utilizaron ningún método anticonceptivo en los meses previos al embarazo no deseado.
Cuadro 4. Distribución de uso de métodos anticonceptivos al momento del embarazo no
deseado, según edad.
‐ Mujeres en unión- (n =105)
Variable Si usó No usó
Total 50.5 49.5 20 a 24 25.0 75.0 25 a 29 46.2 53.8 30 a 34 60.0 40.0 35 a 39 57.9 42.1 40 a 44 57.1 42.9 45 a 49 45.0 55.0
Barbará: “yo iba a comprar las pastillas y me dio pereza, me iba a
poner el DIU: ¡ay que juepucha cochinada más cara! Y quedé embarazada, ¡si! no me cuidé, en dos platos, descuido garrafal…. ponga, bueno no, no, porque pobrecito no tiene la culpa”
Conocimiento de uso de métodos anticonceptivos: Las repuestas obtenidas por las mujeres
entrevistadas dan cuenta de la carencia de conocimientos correctos sobre el funcionamiento de los métodos anticonceptivos.
El cuadro 5 identifica el conocimiento de las mujeres sobre cómo se usa y cómo funcionan los métodos anticonceptivos, para aquellos métodos que se reportaron como mayormente usados al momento de darse el embarazo declarado como no deseado.
La información muestra como la mayoría de las mujeres tienen conocimientos elevados sobre la forma de uso de los métodos anticonceptivos, 100% para anticoncepción oral e inyectable y 84% para el condón masculino. Sin embargo se evidencia una carencia de conocimientos respecto del funcionamiento del anticonceptivo para evitar los embarazos.
Cuadro 5. Porcentaje de mujeres que saben cómo se usan y funcionan los métodos anticonceptivos
que utilizan (n=49) Sabe como Método Se usa Funciona Pastillas anticonceptivas 100 36.4 Inyectables 100 14.3 Condón masculino 84.6 61.5
Talia: “ósea sí, como yo no estaba acostumbrada la primera vez se
me olvidaron, ¡diay! yo salía corriendo para el trabajo y se me olvidaban las pastillas, verdad, yo me las tomaba en la mañana, y si fue un descuido, entonces yo le dije a mi esposo: … “oye hace tres días que no me tomo la pastilla, entonces el me dijo, vaya hágase un examen porque ya debe de estar embarazada” y si fue así, verdad”
Marco Muestral
Este estudio analizó los datos recolectados en una encuesta de visita domiciliar en el Área Metropolitana. El diseño de la muestra fue aleatoreo‐bietápico y tomó como base los segmentos censales utilizados en la Encuesta Nacional de Salud Sexual y Salud Reproductiva 2010 (ENSSR‐10) seleccionando todos aquellos segmentos correspondientes al área metropolitana que tuvieran porcentajes mayores al promedio nacional de embarazo no deseado.
La primera etapa se realizó por muestreo aleatorio simple con reemplazo, mediante la cual se definieron los segmentos a incluir. En la segunda etapa para cada segmento seleccionado se efectuó un barrido completo para identificar a las mujeres que cumplieran con el requisito de inclusión, mujeres con un embarazo no planeado y/o deseado en los últimos 5 años y que tuvieran entre los 15 y 49 años de edad, para cada segmento se entrevistaron 5 mujeres seleccionadas al azar, se realizaron 150 entrevistas en total.
Se aplicó un cuestionario estructurado con 66 preguntas relacionadas con prácticas y prácticas en salud reproductiva que podían contribuir a la ocurrencia de embarazos no deseados. La recolección de información se dio entre los meses de julio y agosto del 2011.
Adicional al proceso de entrevistas domiciliarias, el estudio incluyó la recolección de información cualitativa, con la finalidad de reconstruir la vivencia del embarazo no deseado. La recolección de esta información se basó en historias de vida temáticas, para nuestro caso la que abarca el periodo comprendido entre la confirmación del embarazo y los tres meses anteriores
Algunas conclusiones relevantes
‐
El embarazo no deseado, como problema de salud pública, afecta la vida de las mujeres, sus familias, sus hijos/as y repercute en sus proyectos a corto y mediano plazo. El acceso a la educación y el trabajo como factores de protección se ven severamente limitados cuando las mujeres no logran controlar sus deseos reproductivos, cerca del 60% de las mujeres deben por lo tanto posponer sus planes de vida y dedicarse al cuidado de los hijos/as. De igual forma, el proceso de toma de decisiones en salud reproductiva y las posibilidades de que las mujeres realicen sus expectativas en esta materia, se ve condicionado por la participación de los hombres.‐ Los datos arrojados por la investigación indican que una proporción importante de las mujeres que deciden suspender el uso de métodos anticonceptivos, toman la decisión producto de los intereses de sus parejas. De igual forma, la relación entre el nivel educativo de las mujeres y la probabilidad de tener un embarazo no deseado, presenta además como variable el nivel educativo de su pareja. ‐ La tendencia general a la disminución en la edad de inicio de las relaciones sexuales requiere de una respuesta efectiva del Estado. Reconocer que las personas son seres sexuales y que por lo tanto, pueden expresar sus deseos, necesidades, fantasías y aspiraciones mediante el ejercicio de una vida sexual activa es un paso indispensable en la construcción de una respuesta adecuada.
‐ Es necesario prestar especial atención a como los embarazos no deseados podrían asociarse a edades de inicio de relaciones sexuales por debajo de la media nacional, y cómo este inicio temprano se vincula con edades muy bajas para la primera gestación. Si bien es cierto, la cantidad de datos recolectados no permite realizar generalizaciones, es de suma importancia evidenciar que para las mujeres que declararon su último embarazo como no deseado, la diferencia entre la edad mediana de inicio de relaciones sexuales es cinco años menor que la de la población en general.
‐ En este sentido, tal y como se encuentra documentado en la Encuesta Nacional de Salud Sexual y Salud Reproductiva de 2010, es necesario, además, profundizar el análisis de las edades medianas de inicio de las relaciones sexuales, comparando las edades de las mujeres con las de su pareja
sexual, particularmente referido a las diferencias de edad que superan un quintil. “las prácticas sexuales en los y las adolescentes es para suplir alguna necesidad emocional o como forma de escapar de su realidad y contexto cotidiano” Baeza, Póo, Muñoz y Vallejos (2007).
‐ Finalmente, la investigación permitió identificar brechas importantes en el reporte del uso de métodos anticonceptivos, y en la necesidad de repensar los servicios de salud reproductiva en función de las consejerías sobre métodos anticonceptivos; especialmente referidas a que las mujeres comprendan y aprehendan el funcionamiento de sus cuerpos, su ciclo reproductivo y cómo actúan los métodos en ellas. Desde 1999 Costa Rica presenta una prevalencia anticonceptiva que supera el 80%, por lo cual es necesario que las investigaciones futuras en salud sexual y salud reproductiva se replanteen las estrategias de recolección de información. Los datos observados en esta investigación indican que el 49.5% de las mujeres casadas o unidas no utilizaba ningún método anticonceptivo antes de quedar embarazada, pero únicamente 4% lo hizo por su deseo de embarazo.
‐ Controlar la reproducción es un derecho humano fundamental garantizado tanto en la legislación nacional como en la legislación internacional. Producir información que permita identificar aquellos conocimientos y prácticas que han influido para mantener el porcentaje de embarazo no deseado sobre el 40% desde hace 12 años, es una deuda pendiente del Estado Costarricense. Esta investigación tuvo como objetivo aportar elementos que permitan el desarrollo futuro de investigaciones nacionales que den cuenta del embarazo no deseado, y faciliten la construcción de una respuesta efectiva, que le permita a las personas y en especial a las mujeres ejercer de forma libre e informada sus derechos sobre el cuerpo. Poder decidir abre un mundo de posibilidades.