ANGELES DE COMPOSTELA
O LA S PIEDRA
S SIENT E
ASUN BERNÁRDEZ
RODAL
T
iene la expresión
poética algo de premonitorio, alg
o d e
avanzadilla en el tiemp o qu
e l a acerc a a
la magia
de las
cosas. L o poétic o e
s capa z d
e substraers e a
l devenir , a
la
temporalidad que nos envuelve. Le
o Ángeles de
Compostela, y
consigue despertar e
n m í reflexione s qu
e pertenece n má
s a
nuestros días que a aquello s qu
e viví a e l poet a mientra s escri
-
bía el libro . Lo s tiempo s cambia
n y las preocupaciones
humanas
con ellos, per
o e l art e est á ah í par a hacerno s pensa
r sobr e
nosotros mismos
y nuestr a relació
n co n e l mundo .
Nuestro entorno
contemporáneo se caracteriza
por esta r for -
mado por u n sinfí n d e objetos . No
s encontramo s instalado
s e n
un universo
material, replet o d
e cosa s qu e s e ha n convertid o e
n
el centr o d
e l a felicidad . Hast
a hac e poc o tiempo , l
a filosofí a
occidental s e habí a esforzad o e
n clarifica r l
a posició n de
l hom -
bre en el mundo , e
n relació n co
n do s polo s opuestos : Dio
s y los
animales. Per o ho y e n dí a l o divin o y a n o represent a un
a medi -
da comparativa
para el hombr e com
o habí a venid o ocurriend
o
desde los griegos. Ahor
a nuestr a posició
n vien e determinad a
por lo s objetos . No
s preocupa n la
s cosas , l
o qu e e s e l mund o
material, l o qu e s e sitú a má s alejad o d
e l o human o po
r se r pur a
materia privada
del hálit o d e vida .
El univers o d
e lo s objetos , d
e l o material , a
l convertirs e e
n
piedra angular d
e nuestr a existenci
a h a hech o qu
e surgiera n e
n
nosotros preguntas
sobre la existencia
de lo inanimado, d
e l o
inorgánico. L a preocupació n n
o e s sól o filosófica , sin
o qu e tra -
bajos artísticos
de distinta
índole han llegado
a crea r u n imagi -
nario colectivo
sobre el tema . Así
, po r ejemplo , l
a ciencia-ficció n
se ha ocupado
en los últimos
tiempos en jugar co n lo s concep -
tos de orgánico
e inorgánic o confundiend
o y sobreponiendo
lo
natural y lo artificial: e
l viejo robot e
s abandonad o e
n lo s desva -
nes de la memoria
como un juguete
viejo y es sustituido
por
figuras intermedias
que participan
de lo antropológico
y l o toc -
cualquier element o de
l mundo..
. ¿tare a inhumana,
pétrea l a
poética o simplement e humanizadora?
En la poesía
en general, y
en Ángeles d
e Compostela en
par-
ticular, n o exist e un
a diferenci a entr
e l o orgánic o (qu
e siente ) y
lo inorgánico
(que no siente), tod
o e l univers o est
á dotad o d
e
sentimiento; inclus o la
s piedras , eso
s objeto s materiale
s ta n ale -
jados de «lo humano», precisament
e porqu e simbólicament
e
son lo que permanece
inmutable, cohesionad o a
lo largo del
tiempo, y , po r l o tanto , ajen o a los cambios
continuos que forman
el deveni r d
e l a existenci a de
l hombre . Po
r eso , e l luj o de l len -
guaje metafórico
permite que el auto r defin a s
u propi a vo
z com o
«de arista aguda
y fría»
, porqu e lo
s sonidos , l
a voz , l o etére o
puede ser a la vez lo más sólido, l
o má s material .
Gerardo Diego
es ante todo un poeta, u
n artífic e d
e l a pala -
bra que juega a hace r u n simbolism o persona
l y universal a
la
vez, haciend o u
n jueg o ambivalente . L
a piedr a e
s «l a piedr a
madre», a pesar d
e se r l o má s alejad o d
e l o biológico , y
puede
por tant o da r l a vida
; y las piedras, rota
s e n mucho s fragmento
s
simbolizan también
la disgregación
física y mental , l
a enferme -
dad o l a derrota . Po
r eso , e n u n poem a com
o Lluvia o llanto
apa-
rece el element o pétre
o disuelt o ahor
a e n arena :
La tierra está sedienta, abierta,
rota, / seca de
aristas, dura
de cristales.
/ El alma es
toda vidrios y arenales.
/ Ni una flor,
ni
una brizna en ella
brota.
Las piedras
están en relación
con los elementos
aparentemen-
te más dispares
y etéreo s qu
e l e hace n perde
r su s cualidade s d
e
dureza e inmutabilidad , transformándos
e e n u n materia l nuev
o e
inexistente en la naturaleza. As
í puede n navega
r la s aguas :
Muoro on oí mar la oslóla,
/ la ploclra aquí
rióla, / vitola, yo
to
oajos artísticos
ae distinta
índole han llegado
a crea r u n imagi -
nario colectivo
sobre el tema . Así
, po r ejemplo , l
a ciencia-ficció n
se ha ocupado
en los últimos tiempo
s e n juga r co n lo s concep -
tos de orgánico
e inorgánic o confundiend
o y sobreponiendo
lo
natural y lo artificial: e
l viej o robo t e s abandonad o e
n lo s desva -
nes de la memoria
como un juguete
viejo y e s sustituid o po
r
figuras intermedias
que participan
de lo antropológico
y l o tec -
nológico, qu e so n humana s y
no-humanas a la vez. Surge n as
í
los cyborgo lo
s androide s d
e Blade Runnerque desconoce
n s u
condición de seres artificiales, y
cuando la reconocen
se aferran
y lucha n po
r ella . Per o l a preocupació n sobr
e e l mund o d
e l o
inmaterial n o sól o s e hac e present e e
n l a ciencia-ficción , sin
o
que también
en la literatura
aparece en escritores
como José
Saramago, qu e e n s u recient e libr
o d e narracione s corta
s Casi
un objeto, describ
e u n univers o dond
e lo s objeto s cobra
n vid a y
son capaces
de arrebatar a
los hombres
el domini o sobr
e e l
entorno.
Seguramente a esta s altura s estar
á surgiend o e
n l a ment e
del lecto r l
a inevitabl e pregunta
: ¿Per o qu
é tien e qu e ve r tod o
esto con Ángeles d
e Compostela y Gerard
o Diego
?
Simplemente, quier o pone
r e n evidenci a com
o alg o qu e parec e
obvio para la creación
poética, hac e rechina r lo
s resorte s de
l
sentido común: l
a existenci a d
e u n sentimient o d
e l o inmaterial ,
de lo inanimado
está presente
en nuestra
cultura de diferentes
formas, manifestándos e e
n un a gra n varieda d d
e expresione s
artísticas. E n e l cas o d e Gerard o Diego
, e l sentimient o d
e l o ina -
nimado aparece
representado en los objetos
que tradicional-
mente se han considerado
radicalmente alejado
de lo humano:
las piedras, element
o fundamenta l de
l libro . Po r es o hablába -
mos a l principi o d
e l a capacida d d
e l o poétic o par
a adaptars e a
nuestras preocupaciones
más temporales, má
s circunstanciale s
e inmediatas , cifrada
s e n est e cas o e n l a pregunt a ¿e
s posibl e
atribuir u n sentimient o a
las piedras?
¿tenemos tan clara la divi-
sión entre lo poético
y e l mund o real,
que podemos
aceptar d e
una manera
obvia el sentimient o d
e l o inmateria l si
n l o circuns -
cribimos al proces o d
e humanizació n de
l arte
? Po r otr a parte , s i
lo que separa
el mund o d
e l o viv o d e l o qu e n o lo es, e s la capa-
cidad para sentir, y
esa capacidad
es atribuida
por e l poet a a
Las piedra s está
n e n relació n co
n lo s elemento s aparentemen
-
te más dispare s y
etéreos que le hacen
perder su s cualidade s d
e
dureza e inmutabilidad , transformándos
e e n u n materia l nuev
o e
inexistente en la naturaleza. As
í puede n navega
r la s aguas :
Muere en el mar la estela,
/la piedra aquí riela,
/ vuela, yo te
lo digo, /meu amigo.
o bien , se r modelada s po
r l a música :
El ritmo en vuestras
túnicas modela / pliegues
de piedra
musical y estrías, /
y las jambas -oh,
esbeltas jerarquías- /
entrecruzáis mientras la danza
vuela.
En Ángeles d
e Compostela se
realiza una unión entre con-
trarios simbolizada
precisamente por la s figura s d
e lo s ángele s
y d e la s piedras . Lo
s ángele s qu
e representa n l
a espiritualidad ,
lo invisible, la
s fuerza s qu
e ascienden , y
, e n definitiva , l
a ten -
dencia del alma , n
o aparece n com
o radicalment e diferente
s a
las piedras , e
n s u significad o d
e materialida d incorruptibl
e capa z
de substraerse
al tiempo . Est
a unió n d e contrario s aparec
e bri -
llantemente expresada
en el poem a «L
a Gárgola»
:
Sueña la gárgola a
cántaros/lo que va de
sierpe a ángel (...)
La diversidad, e
l sentimient o d
e la s fuerza s bipolare
s qu e for -
man el univers o s
e hac e patent e a
l fina l de l poema :
Allá abajo el chorro
espeso / busca en las
losas el valle, /
el
cielo de los suicidas.
/¿La gárgola fue antes
ángel?
La opacidad
del lenguaj e poético
, s u capacida d par
a traspa -
sar l a pur a referencialidad , e
s l o qu e no s permit e qu
e un a obr a
como Ángeles d
e Compostela nos
transporte más allá del
mundo al qu e remit e s
u literalida d y
podamos meditar sobr
e
cuestiones que son de hoy, per o qu e está n latente s desd
e siem -
pre en el senti r poético
.