CAPITULO I
EL PROBLEMA
1. Planteamiento del problema
En el transcurso del tiempo se ha generado cambios sustanciales en el entorno de los negocios a escala mundial, donde las organizaciones no solo han sido coparticipes mediante la adaptación de nuevos enfoques de trabajo sino también incorporando tendencias que las han conllevado a establecer mecanismo de acción, a fin de mantener su estatus, credibilidad, confianza y reputación en el mercado donde ejerce valor agregado desde sus bienes y servicios, comprometida con la realidad social para contribuir de manera significativa con la formación integral de forma eficiente el cual hace posible su proyección organizacional .
He allí como surgen iniciativas en el seno de negocios de hoy, de plantear formas para promover novedosas estrategias tanto en organizaciones públicas como privadas que permitan activar la economía de las naciones de origen, buscando implementar la cultura del emprendimiento, el cual suscribe desde las acciones de estas hasta proyectarla ante las instituciones educativas y la formación universitaria.
Sobre este particular la inclusión del emprendimiento, actualmente conlleva a momentos de cambios caracterizados por procesos como: la globalización, los avances científicos y tecnológicos, el nivel de demanda de productos y servicios de calidad, modificando los patrones de comportamiento de las empresas en sus escenarios de trabajo, generando un notable incremento en las corrientes de comercio e inversión, dentro del
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cual se encuentran inmersas las organizaciones de la actualidad, facilitándole a los gerentes revisar las estrategias competitivas para lograr ocupar una mejor participación en los mercados globales.
Por tanto, el emprendimiento conlleva a forjar una visión de cambio mediante la adopción de ideas creativas e innovadoras para insertarse en la estructura económica donde desea establecer la funcionalidad de los bienes o servicios al cual desea encausar su plan de trabajo. De tal forma, el emprendimiento según Karatko (2008), es un proceso dinámico de visión de cambio y creación, este requiere la aplicación de energía y pasión, a través de la creación e implementación de nuevas ideas y soluciones creativas, siendo el emprendedor una persona con condiciones para poder salir de la crisis, viendo oportunidades donde otros no las ven.
En este sentido, el emprendimiento se asocia a un patrón de pensar y actuar; el cual soporta a un sistema de trabajo de las organizacionales tradicionales a apoyarse hacia una nueva visión de oportunidades, para dejar de lado las estructuras convencionales y promover nuevas tendencias gerenciales para el desarrollo de estrategias impulsoras, mediante la excelencia en el manejo del desempeño empresarial, induciendo de algún modo a incorporarse en un mundo global para ser más productivas, eficientes, y en definitiva competitivas.
Sin embargo, en los últimos tiempos en el marco de los negocios se ha apreciado un incremento del emprendimiento, las cuales muestran la aplicación desde los pilares que la fundamentan, para generar un valor agregado a las organizaciones sin exclusión a de las referentes al sector académico, pues estas definen el rumbo estratégico de las misma, basada en un enfoque consolidado de cómo llevar con éxito su comportamiento en el entorno, en tal caso tener una mirada prospectiva de cómo conducir, organizar , vender, producir y administrar los procesos de trabajo y con ello los bienes y servicios derivado como resultado de la naturaleza de su gestión.
No obstante al hacer inferencia acerca de cómo llevar a cabo el emprendimiento resulta interesante otorgar un valor agregado desde su gente, por lo que el emprendedor como agente de cambio propicia actividades creativas e innovadoras la cual facilita la intervención de sus ideas desde sus competencias no solo innatas sino adquiridas, forjando en su conjunto elementos impulsores del éxito en el mercado, siendo capaces de demostrar la inteligencia, talento y aprendizajes indispensables para su constante renovación, a fin de producir desde su desempeño competitividad en un mundo de cambios desafiantes, en vez de comportase como agentes pasivos, inertes y estáticos.
En virtud de ello, ser emprendedor es un proceso el cual se constituye día a día, para descubrir y desarrollar la capacidad de crear o iniciar un proyecto, una empresa o un nuevo sistema de vida, convirtiéndose, en una actitud o capacidad útil en las actividades laborales, donde éste es algo más que autoemplearse, es una forma de vida, siendo una persona capaz de ver e ir más allá de las expectativas del mercado, alguien que no sólo piense en ideas sino las desarrolla de la mejor manera a objeto de obtener resultados posibles, considerando las características distintivas reflejado en un ser genuino de su entorno, es decir, muestra valentía, visión, perseverancia, autoconfianza, orientación hacia los resultados, liderazgo y creatividad.
En líneas generales, el emprendedor no solo se proyecta desde la figura del quehacer del emprendimiento, sino debe contar con características particulares, conllevándolo a realizar estrategias para comprometerse en una campo de acción que coadyuve una verdadera oportunidad de negocio, siendo entre ellos la capacidad de idear y realizar cosas nuevas, por consiguiente ofrezca respuesta a la necesidad del colectivo social en el entorno.
Al respecto, el emprendedor para alcanzar los objetivos planificados desarrolla cualidades como el autocontrol y seguridad de si mismo frente a la exposición de ideas, demostrando iniciativas las cuales configuran la
construcción o restructuración de una situación, para alcanzar el bien común, siendo ante todo optimista, ante el logro de sus actividades pero manteniendo el compromiso que lo hace humilde y leal ante lo anhelado. Sin duda, el emprendedor es una persona con ilusiones, lleno de energía, creatividad, estando convencido de sus capacidades, teniendo la confianza en sí mismo, asumiendo riesgos moderados, siendo independiente y autónomo.
Partiendo de los supuestos anteriores, en las organizaciones el emprendimiento surge como medio estratégico generador de competitividad, donde su aplicación hoy en día constituye un marco referencial en un mundo globalizado, el cual se funda como un proceso de creación de valor combinando los recursos disponibles de manera innovadora.
Por tanto, el emprendimiento implica una evolución en el reconocimiento de una oportunidad para no solo emprender ideas como una forma de atender las necesidades del entorno sino gestar la competitividad en la producción de bienes y servicios, en los cuales convergen los recursos económicos, sociales y medioambientales; además van acompañados de una movilización de personas con capacidades y cualidades dando paso a nuevas oportunidades a emprendimientos viables partiendo de sus capacidades.
De acuerdo con Porter (2012), la competitividad representa la capacidad para sostener e incrementar la participación en los mercados internacionales, con una elevación paralela del nivel de vida de la población, siendo el camino sólido para lograr esto. En este sentido, la competitividad es la capacidad de una empresa para generar productos con valor agregado en cuanto a costos, beneficios, características y calidad, respecto a los de otra empresa de servicios similares.
En síntesis, se infiere a la competitividad en el mundo de los negocios, como una actitud particular o atributo para enfrentar amenazas asimismo desafíos cotidianos propios de la realidad de los mercados abiertos, en
efecto la gerencia de las organizaciones en la actualidad asumen retos que facilitan incorporar estrategias como un accionar desde la gestión de sus procesos de trabajos, implicando la integración empresa con su gente desde un campo simbiótico, a objeto de mantener personas integrales pero al igual competentes, con el propósito de lograr la excelencia en el desempeño de las actividades empresarial, aunado a ello la permanencia e incluso su estabilidad en el mercado donde dispone sus bienes y servicios.
Atendiendo a estas consideraciones los elementos de la competitividad están enmarcada por la innovación, siendo un elemento clave para conseguir ventajas competitivas; empleando con ello la tecnología en función a la gestión de los recursos disponibles, para alcanzar resultados orientados a las necesidades de los clientes, considerando las interrelaciones principalmente entre entorno, estrategia y servicio que se desee obtener; asimismo estableciendo patrones comunicacionales vinculante a todos los colaboradores de la organización con los objetivos del negocio.
En este sentido, cabe agregar que el alcance de la competitividad en el mundo de los negocio implica conjugar sus acciones con los factores de ellas, convirtiéndose en signos vitales para la organización, a través del análisis y medición de costos el cual conlleva la producción de bienes y servicios.
Seguidamente la competitividad revela el comportamiento financiero y de gestión, según la necesidad de los datos requeridos por la gerencia en virtud del análisis de los costos de trabajo; pues bien focalizando resultados en la productividad ante la medición del valor producido por unidad de recursos humanos, económicos y naturales, asimismo gestando un campo sistémico donde dependen de la acción pública por la amplitud de las políticas implicadas, los grandes costos y bajos retornos de las inversiones necesarias.
Por consiguiente, en el mundo de los negocios para que una empresa triunfe se asocia a competitividad, promoviendo ventajas donde la condición
se busca de la combinación de diversos factores para producir en el contexto, en el cual se mueve el esfuerzo, habilidad para atender las necesidades del entorno desde su capacidad de respuesta. En efecto, existen factores de la competitividad quienes marcan la diferencia entre el éxito y el fracaso de una empresa como son la productividad, calidad de servicio e imagen corporativa.
Sobre la base de las ideas expuestas, Rodríguez (2013), coordinador del centro de Emprendedores del Instituto Universitario de Estudios Superiores en Administración (IESA), expresa que el emprendedor se adapta a su entorno y se va desarrollando igual que su entorno. Asimismo, según el Monitor Global de Emprendimiento (2011), Venezuela muestra una medida particularmente elevada en la percepción de las capacidades. Este hecho podría estar relacionado con la percepción cultural de la capacidad para llevar a cabo los desafíos, también destaca el mejoramiento de su ecosistema empresarial en los últimos dos años con varias iniciativas las cuales surgen del sector privado y la academia.
En virtud de los aspectos planteados, se infiere que los venezolanos se caracterizan por ser creativos, innovadores y sobre todo emprendedores;
donde desde sus características, cualidades y competencias crean y aportan ideas para gestar nuevas formas de negocios. Pues bien ser emprender no es fácil, ya que no se trata sólo de tener una idea, sino saber dónde va, además qué se necesita para hacerla realidad. Sin embargo, vale acotar de modo similar para innovar no se requiere sólo de creatividad, son necesarias otras habilidades con el propósito de producir un cambio significativo dentro del contexto deseado.
Por consiguiente, las organizaciones académicas específicamente del municipio Maracaibo no escapan de la realidad del mundo de los negocios en Venezuela, si bien no solo se trata del emprendimiento para producir además de ejecutar ideas que coadyuven las necesidades del entorno, desde el campo de sus competencias ante la formación de profesionales con
capacidad, espíritu y cultura emprendedora sino ir más allá de ello bajo el aporte de actividades como soporte a la innovación e uso de la tecnología, siendo parte de los pilares, por ello fundan las bases en la docencia, investigación y extensión, donde de forma conjunta sustentan la necesidad de dar respuestas a un mercado laboral pero también social .
En virtud de ello quizás, la ausencia de fundamento en el desconocimiento de crear una cultura basada en el emprendimiento, aunado a las características y cualidades para emprender pudiese, decaer en el mercado competitivo, producto del desconocimiento atribuible a cómo llevarla a cabo para adaptarse a un entorno cambiante en búsqueda de la competitividad. Aunado a la situación la innovación, creatividad, los procesos productivos, las acciones comerciales, son factores competitivos que al no conducirlos de manera adecuada conllevan al fracaso a la organización.
El anterior planteamiento surge de evidencias obtenidas del uso de estrategias metodológicas como entrevistas no estructuradas, pudiendo abordar la expresión de síntomas en las referidas organizaciones, en los cuales se denota poca visión del entorno posiblemente por los cambios fluctuantes de los escenarios académicos asociado a las directrices del Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria.
Así como también los limitados criterios para llevar a cabo la toma de decisión, aunado a la capacidad de adaptación hacia innovación, creatividad, gestionar de las acciones sobre la planeación de los objetivos, desarrollo de alternativas para satisfacer las necesidades de sus clientes, del mismo modo el manejo de los conflictos y evaluación de los resultados, tienden a trabajar con estrategias cotidianas generando la aplicación de mecanismos tradicionales competitivos, interrumpiendo la estructura correcta del mercado donde ejerce.
En este orden de ideas, entre las posibles causas que originan esta investigación es la inadecuada cultura de innovación, el desconocimiento del abordaje de conflictos además la generación de soluciones creativas,
practicas generales rutinarias, emprendedores poco comprometidos con la formación integral de la empresa, imposibilidad de responder a las exigencias del mercado así como perdidas en la producción, dejando como consecuencia la salida del mercado competitivo, sin tomar en cuenta toda la inversión tanto en el área organizacional como en infraestructura y tecnología de punta y el capital intelectual como elemento clave de la competitividad.
Por consiguiente, de continua con la situación previamente descrita, se pronostica perdida de los indicadores competitivos, pudiendo afectar la credibilidad, reputación y posición de la organización académica en el mercado, así como también la reducción de ganancias, producto de la disminución de los números de clientes los cuales serían captados por otras organizaciones del mismo sector, debido a que cada día existen en el mercado alternativas que forman parte directa de la competencia, cediendo el paso donde estas logren presentar una mejor calidad de servicio.
Por lo tanto, se precisa mejorar las actividades destinadas al emprendimiento, mediante estrategias orientadas a la innovación y creatividad, además de crear condiciones contextuales propicias para impulsar la competitividad, incrementando la participación de la organización en escenarios académicos para el desarrollo de la nación y con ello la calidad de vida de la gente.
Sin lugar a dudas, todo lo anterior expuesto lleva a la necesidad de generar lineamientos estratégicos para el emprendimiento como estrategia impulsora de la competitividad en organizaciones académicas del municipio Maracaibo, con el fin de obtener resultados que puedan dar respuesta a la situación planteada.
1.1 Formulación del problema
Considerando los supuestos planteados como parte de la situación objeto de investigación se suscribe la siguiente interrogante de estudio: ¿De
qué manera el emprendimiento impulsa la competitividad en organizaciones académicas?
1.2 Sistematización del problema
¿Cuáles son los pilares del emprendimiento en organizaciones académicas?
¿Cuáles son las características del emprendedor en organizaciones académicas?
¿Cuáles son las cualidades del emprendedor en organizaciones académicas?
¿Cuáles son los elementos de la competitividad en organizaciones académicas?
¿Cuáles son los factores de la competitividad en organizaciones académicas?
¿Cómo serán los lineamientos estratégicos para el emprendimiento como estrategia impulsora de la competitividad en organizaciones académicas?
2. Objetivos de la investigación
2.1. Objetivo general
Analizar el emprendimiento como estrategia impulsora de la competitividad en organizaciones académicas.
2.2. Objetivos específicos
Caracterizar los pilares del emprendimiento en organizaciones académicas.
Describir las características del emprendedor en organizaciones académicas.
Identificar las cualidades del emprendedor en organizaciones académicas.
Describir los elementos de la competitividad en organizaciones académicas.
Caracterizar los factores de la competitividad en organizaciones académicas.
Generar lineamientos estratégicos para el emprendimiento como estrategia impulsora de la competitividad en organizaciones académicas.
3. Justificación de la investigación
El presente estudio se focaliza en la práctica sistemática de mecanismos metodológicos encausado en el proceso investigativo, con actividades que soportan aspectos insertos en las realidades donde se abordan elementos derivados de una problemática o necesidad en el campo explorado, aplicando acciones de interés o utilidad, es decir, incorporando elementos teórico, práctico, metodológico y social.
Sobre el particular del estudio se sustenta desde el campo teórico, mediante la consulta, revisión y exploración de aspectos documentales de fuentes provenientes de teorías conceptualizada de autores sobre los temas que focalizan las variables emprendimiento y competitividad, permitiendo ser utilizado como estrategia de razonamiento investigativo, para abordar el sector al cual se estudia, es decir, las organizaciones académicas, además de contribuir a la generación de ideas como valor agregado en las áreas objeto de estudio, a través de un discernimiento dialógico desde las respuestas obtenidas en el escenario investigado.
No obstante, el interés práctico, resulta del alcance de información obtenida de la investigación, bajo el apoyo de criterios del investigador,
facilitando la generación de lineamientos estratégicos para llevar cabo el emprendimiento como estrategia impulsora de la competitividad en organizaciones académicas, desarrollando además criterios a las referidas organizaciones para promoverla como acción desde las conclusiones y sugerencias derivas de la misma, en todo caso como elementos que dinamizan la gestión de una sociedad en constante cambio y transformación.
En relación a la utilidad metodológica se presenta a través de la elaboración de instrumento; además de la aplicación de técnicas que representan el soporte ante la obtención y análisis de datos característicos de las variables de estudio, asimismo al aporte de conocimientos que podrán ser utilizados como fuentes referencial a futuras investigaciones con características particulares acerca de los aspectos temáticos desarrollados.
En referencia a la importancia social, al hacer mención del término de emprendimiento y competitividad, estas representan un eje sistémico en las organizaciones académicas, permitiendo la integración de sus procesos de trabajos con ideas creativas e innovadoras mediante el valor del conocimientos de su gente, y con ello mantener la competitividad como estrategia impulsora en el mercado donde se desenvuelve para generar sociedades sostenibles con emprendedores con visión competitiva hacia la innovación; productividad, crecimiento, utilidad.
4. Delimitación de la investigación
Esta investigación se realizará en diversas Organizaciones Académicas, como la Universidad Privada Doctor Rafael Belloso Chacín, Universidad Rafael Urdaneta y Universidad Doctor José Gregorio Hernández, ubicadas en el municipio Maracaibo, Estado Zulia., esta se efectuara en el lapso correspondiente desde marzo 2014 a enero 2016.
Por otra parte , a los efectos del desarrollo investigativo, se enmarca en las directrices suscritas en las líneas de investigación del Centro de
investigación de Ciencias Administrativas y Gerenciales (CICAG) de esta Universidad, siendo en este particular la línea matricial Gerencia de las Organizaciones, línea operativa Comportamiento organizacional como base del éxito de las organizaciones. En relación a la revisión y consulta de los preceptos teóricos, que respaldan las variables de estudio se consultaran diversas fuentes documentales, tales como Herrera (2012), Porter (2012);
Martin (2007); Kurlat (2010); Lizarazo (2010); Amaru (2008); González (2007); Munch (2007) entre otros.
