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III COPLAS DE DON JORGE MANRIQUE POR LA MUERTE DE SU PADRE I

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Academic year: 2021

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(1)

COPLASDEDONJORGEMANRIQUEPORLAMUERTEDESU PADRE I

Recuerde el alma dormida, avive el seso e despierte contemplando

cómo se passa la vida, cómo se viene la muerte tan callando;

cuán presto se va el plazer, cómo, después de acordado, da dolor;

cómo, a nuestro parescer, cualquiere tiempo passado fue mejor.

II

Pues si vemos lo presente cómo en un punto s'es ido e acabado,

si juzgamos sabiamente, daremos lo non venido por passado.

Non se engañe nadi, no, pensando que ha de durar lo que espera

más que duró lo que vio, pues que todo ha de passar por tal manera.

III

Nuestras vidas son los ríos que van a dar en la mar, qu'es el morir;

allí van los señoríos derechos a se acabar e consumir;

allí los ríos caudales, allí los otros medianos e más chicos,

allegados, son iguales

los que viven por sus manos e los ricos.

INVOCACIÓN IV

Dexo las invocaciones de los famosos poetas y oradores;

non curo de sus ficciones, que traen yerbas secretas sus sabores.

Aquél sólo m'encomiendo, Aquél sólo invoco yo

de verdad,

que en este mundo viviendo, el mundo non conoció

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V

Este mundo es el camino para el otro, qu'es morada sin pesar;

mas cumple tener buen tino para andar esta jornada sin errar.

Partimos cuando nascemos, andamos mientra vivimos, e llegamos

al tiempo que feneçemos; assí que cuando morimos, descansamos.

VI

Este mundo bueno fue si bien usásemos dél como debemos,

porque, segund nuestra fe, es para ganar aquél

que atendemos. Aun aquel fijo de Dios para sobirnos al cielo descendió

a nescer acá entre nos, y a vivir en este suelo do murió.

VII

Si fuesse en nuestro poder hazer la cara hermosa corporal,

como podemos hazer el alma tan glorïosa angelical,

¡qué diligencia tan viva toviéramos toda hora e tan presta,

en componer la cativa, dexándonos la señora descompuesta!

VIII

Ved de cuán poco valor

son las cosas tras que andamos y corremos,

que, en este mundo traidor, aun primero que muramos las perdemos.

Dellas deshaze la edad, dellas casos desastrados que acaeçen,

dellas, por su calidad, en los más altos estados

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IX

Dezidme: La hermosura, la gentil frescura y tez de la cara,

la color e la blancura, cuando viene la vejez, ¿cuál se para?

Las mañas e ligereza e la fuerça corporal de juventud,

todo se torna graveza cuando llega el arrabal de senectud.

X

Pues la sangre de los godos, y el linaje e la nobleza

tan crescida,

¡por cuántas vías e modos se pierde su grand alteza en esta vida!

Unos, por poco valer, por cuán baxos e abatidos que los tienen;

otros que, por non tener, con oficios non debidos se mantienen.

XI

Los estados e riqueza, que nos dexen a deshora ¿quién lo duda?,

non les pidamos firmeza. pues que son d'una señora; que se muda,

que bienes son de Fortuna que revuelven con su rueda presurosa,

la cual non puede ser una ni estar estable ni queda en una cosa.

XII

Pero digo c'acompañen e lleguen fasta la fuessa con su dueño:

por esso non nos engañen, pues se va la vida apriessa como sueño,

e los deleites d'acá

son, en que nos deleitamos, temporales,

e los tormentos d'allá, que por ellos esperamos, eternales.

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XIII

Los plazeres e dulçores desta vida trabajada que tenemos,

non son sino corredores, e la muerte, la çelada en que caemos.

Non mirando a nuestro daño, corremos a rienda suelta sin parar;

desque vemos el engaño y queremos dar la vuelta no hay lugar.

XIV

Esos reyes poderosos que vemos por escripturas ya passadas

con casos tristes, llorosos, fueron sus buenas venturas trastornadas;

assí, que no hay cosa fuerte, que a papas y emperadores e perlados,

assí los trata la muerte como a los pobres pastores de ganados.

XV

Dexemos a los troyanos, que sus males non los vimos, ni sus glorias;

dexemos a los romanos, aunque oímos e leímos sus hestorias;

non curemos de saber lo d'aquel siglo passado qué fue d'ello;

vengamos a lo d'ayer, que también es olvidado como aquello.

XVI

¿Qué se hizo el rey don Joan? Los infantes d'Aragón

¿qué se hizieron?

¿Qué fue de tanto galán, qué de tanta invinción como truxeron?

¿Fueron sino devaneos, qué fueron sino verduras de las eras,

las justas e los torneos, paramentos, bordaduras e çimeras?

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XVII

¿Qué se hizieron las damas, sus tocados e vestidos,

sus olores?

¿Qué se hizieron las llamas de los fuegos encendidos d'amadores?

¿Qué se hizo aquel trovar, las músicas acordadas que tañían?

¿Qué se hizo aquel dançar, aquellas ropas chapadas que traían?

XVIII

Pues el otro, su heredero don Anrique, ¡qué poderes alcançaba!

¡Cuánd blando, cuánd halaguero el mundo con sus plazeres se le daba!

Mas verás cuánd enemigo, cuánd contrario, cuánd cruel se le mostró;

habiéndole sido amigo, ¡cuánd poco duró con él lo que le dio!

XIX

Las dávidas desmedidas, los edeficios reales

llenos d'oro,

las vaxillas tan fabridas los enriques e reales del tesoro,

los jaezes, los caballos de sus gentes e atavíos tan sobrados

¿dónde iremos a buscallos?; ¿qué fueron sino rocíos de los prados?

XX

Pues su hermano el innocente qu'en su vida sucesor

se llamó

¡qué corte tan excellente tuvo, e cuánto grand señor le siguió!

Mas, como fuesse mortal, metióle la Muerte luego en su fragua.

¡Oh jüicio divinal!,

cuando más ardía el fuego, echaste agua.

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XXI

Pues aquel grand Condestable, maestre que conoscimos

tan privado,

non cumple que dél se hable, mas sólo como lo vimos degollado.

Sus infinitos tesoros, sus villas e sus lugares, su mandar,

¿qué le fueron sino lloros?, ¿qué fueron sino pesares al dexar?

XXII

E los otros dos hermanos, maestres tan prosperados como reyes,

c'a los grandes e medianos truxieron tan sojuzgados a sus leyes;

aquella prosperidad qu'en tan alto fue subida y ensalzada,

¿qué fue sino claridad que cuando más encendida fue amatada?

XXIII

Tantos duques excelentes, tantos marqueses e condes e varones

como vimos tan potentes, dí, Muerte, ¿dó los escondes, e traspones?

E las sus claras hazañas que hizieron en las guerras y en las pazes,

cuando tú, cruda, t'ensañas, con tu fuerça, las atierras e desfazes.

XXIV

Las huestes inumerables, los pendones, estandartes e banderas,

los castillos impugnables, los muros e balüartes e barreras,

la cava honda, chapada, o cualquier otro reparo, ¿qué aprovecha?

Cuando tú vienes airada, todo lo passas de claro con tu flecha.

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XXV

Aquel de buenos abrigo, amado, por virtuoso, de la gente,

el maestre don Rodrigo Manrique, tanto famoso e tan valiente;

sus hechos grandes e claros non cumple que los alabe, pues los vieron;

ni los quiero hazer caros, pues qu'el mundo todo sabe cuáles fueron.

XXVI

Amigo de sus amigos, ¡qué señor para criados e parientes!

¡Qué enemigo d'enemigos! ¡Qué maestro d'esforçados e valientes!

¡Qué seso para discretos! ¡Qué gracia para donosos! ¡Qué razón!

¡Qué benino a los sujetos! ¡A los bravos e dañosos, qué león!

XXVII

En ventura, Octavïano; Julio César en vencer e batallar; en la virtud, Africano; Aníbal en el saber e trabajar; en la bondad, un Trajano; Tito en liberalidad con alegría; en su braço, Aureliano; Marco Atilio en la verdad que prometía.

XXVIII

Antoño Pío en clemencia; Marco Aurelio en igualdad del semblante;

Adriano en la elocuencia; Teodosio en humanidad e buen talante.

Aurelio Alexandre fue en desciplina e rigor de la guerra;

un Constantino en la fe, Camilo en el grand amor de su tierra.

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XXIX

Non dexó grandes tesoros, ni alcançó muchas riquezas ni vaxillas;

mas fizo guerra a los moros ganando sus fortalezas e sus villas;

y en las lides que venció, cuántos moros e cavallos se perdieron;

y en este oficio ganó las rentas e los vasallos que le dieron.

XXX

Pues por su honra y estado, en otros tiempos passados ¿cómo s'hubo?

Quedando desamparado, con hermanos e criados se sostuvo.

Después que fechos famosos fizo en esta misma guerra que hazía,

fizo tratos tan honrosos que le dieron aun más tierra que tenía.

XXXI

Estas sus viejas hestorias que con su braço pintó en joventud,

con otras nuevas victorias agora las renovó

en senectud.

Por su gran habilidad, por méritos e ancianía bien gastada,

alcançó la dignidad de la grand Caballería dell Espada.

XXXII

E sus villas e sus tierras, ocupadas de tiranos las halló;

mas por çercos e por guerras e por fuerça de sus manos las cobró.

Pues nuestro rey natural, si de las obras que obró fue servido,

dígalo el de Portogal, y, en Castilla, quien siguió su partido.

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XXXIII

Después de puesta la vida tantas vezes por su ley al tablero;

después de tan bien servida la corona de su rey

verdadero;

después de tanta hazaña a que non puede bastar cuenta cierta,

en la su villa d'Ocaña vino la Muerte a llamar a su puerta,

XXXIV

diziendo: "Buen caballero, dexad el mundo engañoso e su halago;

vuestro corazón d'azero muestre su esfuerço famoso en este trago;

e pues de vida e salud fezistes tan poca cuenta por la fama;

esfuércese la virtud para sofrir esta afruenta que vos llama."

XXXV

"Non se vos haga tan amarga la batalla temerosa

qu'esperáis,

pues otra vida más larga de la fama glorïosa acá dexáis.

Aunqu'esta vida d'honor tampoco no es eternal ni verdadera;

mas, con todo, es muy mejor que la otra temporal,

peresçedera."

XXXVI

"El vivir qu'es perdurable non se gana con estados mundanales,

ni con vida delectable donde moran los pecados infernales;

mas los buenos religiosos gánanlo con oraciones e con lloros;

los caballeros famosos, con trabajos e aflicciones contra moros."

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XXXVII

"E pues vos, claro varón, tanta sangre derramastes de paganos,

esperad el galardón

que en este mundo ganastes por las manos;

e con esta confiança e con la fe tan entera que tenéis,

partid con buena esperança, qu'estotra vida tercera ganaréis."

[Responde el Maestre:] XXXVIII

"Non tengamos tiempo ya en esta vida mesquina por tal modo,

que mi voluntad está conforme con la divina para todo;

e consiento en mi morir con voluntad plazentera, clara e pura,

que querer hombre vivir

cuando Dios quiere que muera,

[Del maestre a Jesús] XXXIX

"Tú que, por nuestra maldad, tomaste forma servil

e baxo nombre; tú, que a tu divinidad juntaste cosa tan vil como es el hombre;

tú, que tan grandes tormentos sofriste sin resistencia

en tu persona,

non por mis merescimientos, mas por tu sola clemencia me perdona".

FIN XL

Assí, con tal entender, todos sentidos humanos conservados,

cercado de su mujer y de sus hijos e hermanos e criados,

dio el alma a quien gela dio (el cual la ponga en el cielo en su gloria),

que aunque la vida perdió, dexónos harto consuelo

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Vocabulario

abajarse: tr. bajarse. De basseu.

acordado: participio adjetivo, recordado. Del b. lat. accordre. acorrer: tr. socorrer, auxiliar. Del lat. accurrre.

achacoso: adj. rigoroso, excesivo en la acusación. De achaque. aforrado: participio adjetivo, forrado. De aforrar, poner forro. afrenta: f., apuro, aprieto, peligro que puede atraer deshonra. Del lat. frontem.

ahumada: participio adjetivo, señal hecha con humo. Usase frecuentemente con el verbo hacer. De ahumar.

al: sustantivo neutro, otra cosa. Del lat. aliud.

albarrana (cebolla): adj., planta medicinal cuyo bulbo, muy amargo, es semejante al de la cebolla común. Voz árabe que significa silvestre, montés.

alcatifa: f., alfombra. Voz árabe. alcrebite: m., azufre. Del ár. alquibrit. aleve: f., alevosía. Del gót. levjan, traicionar.

amatado: participio en función verbal, apagado, extinguido. De amatar.

apriesa: adv., aprisa. De a + priesa.

arcaduz: m., cangilón de noria. Del ár., caduç, y este del gr. vaso.

arreo: m., atavío, adorno. De arrear, adornar y también equipar, proveer.

arte: amb., habilidad, maña // artería, fraude. Del lat. artem. artero: adj., mañoso, astuto (sin el matiz peyorativo de hoy). De arte.

asentar: intr., sentarse. De a + sentar.

atacar: tr., atar, abrochar; atacarse; ser atadas. Úsase hoy en Andalucía con la significación de atarse o abrocharse los calzones. Del lat. attacare.

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aterrar: tr., echar por tierra, derribar, postrar. De a + tierra. alandrán: m., vestidura talar con mangas. Del b. lat. balandrna. ando: m., bandería, partido. Del lat. bandum.

arrera: f., parapeto. De barra.

ienquerencia: f., buena voluntad, cariño. De bienquerer.

rial: m., especie de túnica usada por hombres y mujeres. Del ant. fr. y prov. blialt.

cabo: m., lado, parte extrema // fin // en cabo de: al extremo de. Del lat. caput.

calzas: f. Las calzas eran una prenda de vestir que cubría la

-pierna y el muslo; las calzas atacadas (como las que nombra Manrique) se unían a la cintura por medio de agujetas; las medias calzas, (llamadas después medias) ceñían solamente la pierna. Del lat. calcum.

candela: f., vela // lumbre. Estar con la candela en la mano: hallarse próximo a morir el enfermo. Del latín candlam.

casquete: m., pieza de la armadura que defendía el casco de la cabeza. De casco.

caudal: adj., caudaloso, principal. Díjose también cabdalero. Del lat. capitlem.

cava: f., foso. Del lat. cavam.

cierto: adv., ciertamente. Del lat. certum. claro (de): m. adv., de parte a parte.

cobrar: tr., adquirir, ganar // recuperar, volver a poseer // tratándose de afectos, empezar a sentirlos. Del lat. cuperre.

cobro: m., remedio. De cobrar.

cometer: intr., empezar. Del lat. committre.

comportar: tr., soportar, tolerar. Del lat. comportre. cumplido: participio adjetivo, cabal, perfecto. De cumplir. condestable (aquel gran): Don Álvaro de Luna, célebre favorito de don Juan II, decapitado en Valladolid en 1453.

consintiente: p. a., quien consiente. De consentir.

coro (estar de): m. adv., ser muy sabido. Del lat. cr, ánimo. corredor: m., batidor, explorador, centinela avanzado. De

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cuento: m., cómputo, cuenta, cálculo; alto sin cuento incalculablemente alto. De contar.

cuero: m., piel. Del lat. corium.

cumplir: intr., convenir, corresponder. Del lat. complre. curar: intr., cuidar, preocuparse. Del lat. curre, cuidar. cuyo so: aquel a quien pertenezco.

chapado: participio adjetivo, adornado, guarnecido // recubierto, defendido. De chapar.

de: véase tener de.

defensar: tr., defender. Del lat. defensre.

deliberar: tr., resolver, determinar. Del lat. deliberre. demandar: tr., pedir, rogar. Del lat. demandre.

deporte: m., solaz, recreación, esparcimiento. De deportar. desgrado: m., desagrado, disgusto. De desgradar, desagradar. desigual: adj., excesivo, extremado. De des (negación) + igual. desque: adv., desde que // cuando. Contrac. de la prep. desde y

dudanza: f., duda. Del lat. dubitanta. dueña: f., mujer. Del lat. dominam.

el: art. fem., la. En la Edad Meda el artículo femenino era ela. Si el sustantivo siguiente comenzaba por vocal, dicho artículo -140-

perdía la a: el(a) alcándara, el(la) espada; así se ve aún en Garcilaso (el altura, Egl. I, v. 44); si empezaba por consonante, perdía la e: (a) la villa. Hoy pierde la a sólo ante nombres que empiezan por vocal tónica, los cuales conservan su género femenino: el(a) alma.

embebecido: participio adjetivo, enajenado, embelesado. De embebecer.

empecer: tr., impedir, dificultar, obstar. De empedecer y este del b. lat. impedescre.

enamorada: participio sustantivo, amor, enamoramiento. De enamorar.

engorrarse: intr., detenerse, retardarse. De en + gorra.

Enrique (don): Enrique IV de Castilla (1454-1474), hijo de Juan II.

enrique: m., moneda de oro acuñado por Enrique IV. ensomo: adv., encima. De en + somo. Véase somo.

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entender: tr., tener intención de hacer algo // advertir, darse cuenta // pensar, figurarse. Del lat. intendre.

escala vista (a): m. adv., hacer el escalamiento de día y o la vista de los enemigos.

escote: m., cantidad que le corresponde pagar proporcionalmente a cada uno. De esotar.

esmerado: participio adjetivo, puro, limpio. De esmerar. espingarda: f., cierta escopeta muy larga. Del árabe springan. estado: m., clase o jerarquía social. En la Edad Media la sociedad se jerarquizaba en estados, como puede verse por la significación colectiva de los personajes que actúan en la Danza de la Muerte, y aun en obras posteriores como Lazarillo de Tormes.

estrena: f., obsequio, recompensa. Del lat. strenam. excusación: f., excusa, disculpa. Del lat. excusatinem. fabrido: adj., bruñido, resplandeciente. Del lat. fabritus. fallescer: intr., faltar, acabarse. Del lat. fallescre.

fuerte (lo más): adj., lo más resguardado del castillo. Del lat. fortem.

grado: m., gusto, agrado // voluntad. Del lat. gratum. grado: m., lugar, estado. Del lat. gradum.

graveza: f., pesadez que obsta. De grave.

guardar: tr., custodiar. Del sustantivo guarda y este del germ. warda.

guarecer: intr., sanar. De quarir y este del germ. warjan. guarido: participio adjetivo, sano, restablecido. De guarir. guarir: intr., salvarse // tr., proteger, del germ. warjan. guisa: f., modo, manera. Del germ. wisa.

haber: tr., tener // intr., hallarse, encontrarse. Del latín habre. hadado: participio adjetivo, hadado, predestinado. De hadar. halaquero: adj., halagüeño, halagador. De halago.

hermandad: f., La Santa Hermandad, tribunal con jurisdicción propia, entendía en los delitos que se cometían fuera de poblado.

hermano el inocente (su): Don Alfonso, hermano de Enrique IV, que fue proclamado rey por los enemigos del monarca; pero murió poco después a los catorce años de edad, en 1468. Los Manriques se

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hermanos (los otros dos): El maestre de Santiago, don Juan de Pacheco, y su hermano el maestre de Calatrava, don Pedro Girón (tan prosperadas como reyes). Dice los otros dos porque antes ha recordado a los tres infantes de Aragón (estrofa XVIII) y a su hermano el príncipe Alfonso (XX).

hermanos (sus): Hermanos de don Rodrigo eran el poeta Gómez Manrique (le sobrevivió catorce años), Diego Manrique, Pedro Manrique y Garcí Fernández Manrique. El Maestre hizo testamento en su palacio maestral el 21 de octubre de 1476, ante su secretario Gómez de Merodio, y estuvieron presentes su hermano Garci Fernández Manrique, su sobrino Luis Manrique, el doctor Francisco Núñez, el bachiller Pedro de Toledo, el mayordomo Garnica y otros familiares. El 4 de noviembre agregó un codicilo a la vista de su hermano Garci, de su camarero Francisco Sandoval, del contador Pedro de Mórida y del ya antes mencionado Garnica.

hijos (sus): Hijos de don Rodrigo Manrique eran: don Rodrigo (muerto en 1477), don Pedro, segundo conde de Paredes (poeta) y don Jorge (autor de las célebre Coplas).

igualdad: f., justicia, equidad. Del lat. aequalittem. Véase voluntad.

imos: intr., vamos. Del lat. imus.

impugnable: adj., inexpugnable, invencible. De impugnar y este del lat. impugnre.

Infantes de Aragón (los): don Enrique, don Juan y don Pedro, hijos de don Fernando I el de Antequera, castellano que fue rey de Aragón entre 1412 y 1416.

jaez: m., cualquier adorno que se pone a las caballerías // jaez o medio jaez: el atavío de cintas con que se trenza la crin o la mitad de la crin. Del ár. chachez, aparato.

Juan (el rey don): don Juan I de Castilla (1406-1454). jura: f., promesa solemne. De jurar.

juzgador: m., juez. De juzgar.

lanzado: participio adjetivo, lanceado, alanceado. De lanzar. librado (ser): tr., recibir libranza u orden de pago. De librar. lucio: adj., luciente, brillante. Dícese de los animales gordos y

-de buen pelo. Del lat., lucidum.

lorar de los ojos: frase pleonástica usada ya en la epopeya francesa y en la española.

maestre: m., jefe de una orden de caballería (Santiago, Alcántara, Calatrava, Montesa, Malta). Del latín magistrum.

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Martín (San): Este, como los otros beatos y santos que aparecen en las Coplas a una beoda... San Martín de Valdeiglesias (Madrid), Madrigal de las Altas Torres (Ávila), Villarreal (Castellón), Yepes (Toledo), Coca (Segovia), Luque (Córdoba), Baeza y Úbeda (Jaén), son lugares célebres por sus buenos vinos.

mas: conj. advers., pero, sino. De maes y este del lat. magis. matar (la luz o el fuego): tr., apagar. Del lat. mactre.

membrar: tr., recordar. Del lat. memorre.

mesura: f., discreción, cortesía. Del lat. mensram. mote: m., lema caballeresco. Del fr. mot.

mover: intr., ponerse en marcha, irse // tr., proponer. mudarse: ref., cambiar. Del lat. mutre.

mujer (su): Doña Elvira de Castañeda, que acompaña a don Rodrigo en el momento de su muerte, era su tercera mujer y había casado con el Maestre en 1469. A. de Palencia, en la Crónica de Enrique IV (II, 215): dice que ya anciano, pero con vigor y robustez juveniles, casó. Insiste fuego en la avanzada edad de don Rodrigo (III, 272): ya viejo, volvió a casar. La segunda esposa del Conde de Paredes, doña Beatriz de Guzmán, casó con él antes de 1446 y se tienen noticias de ella hasta 1452. La primera, doña Mencía de Figueroa, madre de don Jorge, había muerto antes de 1465.

oramala: adv. de m., enhoramala. Aféresis y contracción de en hora mala.

ocasión: f., daño grave. Del lat. ocassinem. olvidanza: f., olvido. De olvidar.

ar Dios: loc. interj., por Dios. De par, apócope de para y Dios. Por eufemismo dícese pardiez. Del lat. per Deum.

aramento: m., adorno con que se recubre algo. Del lat. paramntum.

ararse: intr., ponerse, volverse, quedarse, convertirse. ¿Cuál se para? ¿Cómo queda? ¿En qué se convierte? Del lat. parre.

parescer: intr., aparecer, mostrarse. Del lat. parescre. artido: m., trato, convenio, concierto. De partir.

assión: f., padecimiento // ardor, vehemencia // amor. Del lat. passinem.

echar: tr., pagar pecho o tributo. Del lat. pactre.

enado: participio adjetivo, penoso, lleno de penas. De penar. eña: f., piel. Del lat. penna, pluma, y pinna, almena. Manrique: conceptista, juega con las dos acepciones del vocablo. // peña, f.,

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errochano: parroquiano. Del lat. parochiam.

ostura: f., pacto, convenio, compromiso. Del lat. positram. oyo: m., banco de piedra, ladrillo u otra sustancia semejante, generalmente intransportable y construido junto a un muro. Del lat. podium.

render: tr., tomar, recibir. Del lat. prehendre. risiones: f., cadenas, grillos. Del lat. prehensinem.

rivado: m., quien priva o disfruta de privanza (primer lugar cerca de alguien). Del lat. privtum.

rosperado: particip., adj., rico, poderoso. De prosperar. unto: m., instante. Del lat. punctum.

queda: adj., quieta. Del lat. quitam.

razón: f., palabra con que se expresa el pensamiento. Del lat. ratinem.

remontado: participio adjetivo, alto, sublime. De remontar. repollo: m., brazado de ramas. De repollar y este de repullulre, echar hojas, pimpollos, ramas.

resolver: intr., tornar, retornar // cambiar, mudar. Del lat. resolvere.

revuelto: adj., mezclado // intrincado. Del lat. revoltum.

rey (natural, verdadero): don Rodrigo sirvió como reyes naturales y verdaderos al infante Alfonso y a los Reyes Católicos.

rocegante: adj., rozagante, que roza, que arrastra. De rocegar. ecreto: adj., reservado. Del lat. secrtum.

eñoríos: La Crónica General, conocida de Manrique según puede verse en el canon de emperadores a que se ajustan las estancias XXVII y XXVIII de las Coplas, estudia los seis diferentes señoríos que tuvo España.

ervil: adj., humilde, bajo. Sinónimo de incivil en su acepción de grosero, vil. Del lat. servilem.

eso: m., sentido // discreción. Del lat. sensum.

obrado: participio adjetivo, rico, excelente. Del latín superre. obrar: tr., exceder, sobrepujar. Del lat. superare.

obre: prep., en prenda de // después de. De sobrar.

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omo: m., encima. Del lat. summum.

on: m., manera, modo; en tal son: adv., de tal manera. Del lat. sonum.

tablero (poner la vida al): frase proverbial, jugarla, arriesgarla. tajada: participio adjetivo: «Dícese de la costa, roca o peña cortada verticalmente y que forma como una pared» (Academia). De tajar, dividir con instrumento cortante.

tan: adv. c., tanto. Apócope de tanto y este del latín tamtum. temeroso: adj., que causa temor, temible. De temer.

tener (tiempo): tr., emplearlo, gastarlo.

tener de (seguido de infinitivo): haber de, con sentido de resolución o necesidad irrecusables. Tener que significa obligación.

tocar: tr., probar, experimentar. Acaso de la raíz onomatopéyica toch. Véase toque.

tondido: participio adjetivo, golpeado, aporreado, azotado // tundido, pelado, trasquilado. De tondir y este del lat. tundre, trasquilar.

toque: m., prueba, experiencia. Postverbal de tocar. Véase tocar.

tornada: participio adjetivo, vuelta, regreso. De tornar.

torrontés: m., vino hecho con uva torrontés. Refrán: La uva torrontés / ni la comas ni la des: / para vino buena es.

trago: infortunio, adversidad. De tragar.

trasponer: tr., esconder, ocultar. Del lat. transponre. tristura: f., tristeza. De triste.

trovar: tr., componer trovas o versos. En otras lenguas romances (provenzal y catalán): trobar; en francés: trouver.

usado: participio adjetivo, acostumbrado, habituado. De usar. valer: tr., amparar, proteger. Del lat. valre.

vedija: f., vellón de lana o pelo. Del lat. viticlam.

vela: m., centinela nocturno. De velar y este del latín vigilre. vencida: participio sustantivo, vencimiento, derrota. De vencer. Usase hoy en la expresión a la tercera va la vencida.

vida tercera: Manrique considera tres vidas: 1ª, la temporal y perecedera; 2ª, la de la fama (mejor que la otra, aunque tampoco es eternal ni verdadera); 3ª, la perdurable, eterna, de la fama, concepción grecolatina, recrudeció en el Renacimiento. Recuérdense

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visión: f., imagen visual // objeto cuya vista causa espanto. Del lat. visinem. Manrique, conceptista, juega con las dos aceptaciones del vocablo. Véase peña.

vista (una): f., una simple mirada. De visto. voluntad: f., una simple mirada. De visto.

voluntad: f., arbitrariedad, capricho. Manrique contrapone voluntad e igualdad. Véase igualdad.

volverse: r., cambiar, trocarse. Del lat. volvre. vuelo (a chico): fr. adv., prontamente.

vuelto: participio adjetivo, revuelto, mezclado. De volver. yerbas secretas: veneno oculto.

Antología de poesía española de Fred F. Jehle. GLOSA - Antonio Machado

EL POETA Y LA MUERTE - Juan Luis Panero NUESTRAS VIDAS SON LOS RÍOS - Luis G. Urbina

Así que cuando morimos, descansamos - Luis Antonio de Villena

Efraín Huerta - Nuestras vidas son los ríos Recitado y cantado. Rafael Alberti y Paco Ibáñez

Una página de las Coplas (Biblioteca Nacional)

Incluido en Poesía. Jorge Manrique. Edición de Jesús-Manuel Alda Tesán. Colección Letras Hispánicas 38, decimotercera edición de 1989. Ediciones Cátedra, S.A. Calle de Juan Ignacio Luca de Tena, 15. 28027 Madrid (Spain).

Referencias

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