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1. El interés común
Los Objetivos del Milenio (ODM) representan una plataforma política promovida por las Naciones Unidas y adoptada por todos los países del mundo, para reducir la brecha entre riqueza y pobreza y promover el desarrollo humano.
Alcanzar estos objetivos es un desafío que interesa e implica no solo a los gobiernos nacionales sino también a todos los ámbitos y sectores de la sociedad: desde los gobiernos locales hasta el sector privado, desde los sindicatos hasta los emprendedores, desde la sociedad civil y las
Organizaciones No Gubernamentales (ONG) hasta los partidos políticos, desde las Universidades hasta los medios de comunicación, desde los gremios laborales hasta los bancos.
EN DEFINITIVA, LOS ODM CONCIERNEN AL CONJUNTO DE LA COMUNIDAD, LA FAMILIA Y LAS PERSONAS
Es siempre más evidente, directo y tangible el “interés común” entre los ciudadanos del norte y del sur del mundo en torno a temáticas tales como las migraciones económicas o el desplazamiento por causa de conflictos armados o desastres naturales, el cambio climático, el uso racional del agua y de las fuentes energéticas, la alternativas a la economía ilegal, la lucha contra las enfermedades transmisibles, etc., solo por citar algunos ejemplos.
Éstas son temáticas cuyas características traspasan los límites geográficos municipales, regionales y nacionales y que tienen repercusiones en el cotidiano de los ciudadanos y ciudadanas del planeta de diferentes culturas, religiones y etnias, con efectos positivos o negativos dependiendo múltiples factores: de las tendencias predominantes en la economía mundial, de cómo la información las presenta, de cómo la televisión las muestra, de cómo la ciencia y la tecnología las valorizan…
EN PARTICULAR, ES FUNDAMENTAL HACER POSIBLE UN DIALOGO
PERMANENTE ENTRE LAS COMUNIDADES LOCALES, QUE LES PERMITA OPERAR SIMULTÁNEAMENTE SOBRE LAS CAUSAS Y LOS EFECTOS DE ESTAS
2. El nuevo paradigma
Es importante subrayar que la Plataforma ODM no es una estrategia de cooperación “para ayudar los países del sur” sino que se trata de una estrategia que opera tanto en los países del norte como del sur, para reducir el desequilibrio que en el ámbito social, económico y ambiental, pone en peligro la paz y la convivencia de los pueblos.
Este “nuevo paradigma” consiste en un enfoque muy diferente de la cooperación, tradicionalmente basado en la relación entre “donantes y beneficiarios” en la cual el norte, supuestamente desarrollado, “enseña a pescar” a los países del sur ( dicho sea de paso quien ha dicho que los paise del norte saben pescar a priori?).
Hasta ahora, el instrumento que ha traducido esta relación en la acción de cooperación siempre ha sido el “proyecto”. Se necesita pues pensar y poner a disposición de la comunidad internacional nuevos instrumentos de cooperación, que permitan a los ciudadanos del norte y del sur operar bajo una lógica de alianazas, como expresión de un paradigma de cooperación basado en la lógica de “socios y colegas” que permita enfrentarse al desafío común de la aplicación de los ODM.
ESTAS ALIANZAS Y EL TRABAJO EN REDES SON LA FORMA
ORGANIZATIVA, OPERACIONAL Y ESTRATÉGICA QUE EN LA ACCIÓN DE COOPERACIÓN, REFLEJAN EL NUEVO PARADIGMA DEL “INTERÉS COMÚN” Considerar las alianzas con las redes de cooperacion descentralizadas tan solo como una nueve fuente de financiación es una visión miope y pasiva porque no toma en cuenta el valor estratégico de estas alianzas, que en realidad puede superar con creces la contribución financiera que puedan aportar.
CONCRETAMENTE, SU POTENCIAL ES EL DE INTERCAMBIAR SOLUCIONES TÉCNICAS Y TECNOLÓGICAS, MODELOS ORGANIZATIVOS Y
GERENCIALES Y PRACTICAS INNOVADORAS,EN RELACIÓNADESAFÍOS COMUNESCOMOLA CREACIÓN DE EMPLEO, VALORIZACIÓN DE LAS POTENCIALIDADES DE UN TERRITORIO, Y MEJORA DE LA COBERTURA,
CUALIDAD Y SOSTENIBILIDAD DE LOS SERVICIOS SOCIALES, AMBIENTALES Y ENERGÉTICOS,ENTRE OTROS.
Las alianzas con las redes de cooperacion descentralizadas son seguramente también una oportunidad, en la medida que representan un potencial para operar en la logica de planes territoriales en lugar que de projectos especificos, forjar alianzas programáticas, técnicas , operativas y financieras entre diferentes actores de la cooperación internacional comprometidos con la aplicación de los ODM, y más específicamente con actores locales (sociales, económicos, públicos y privados) del norte y del sur que aunque en contextos políticos, culturales, económicos y religiosos diferentes, comparten el gran desafío de enfrentarse a la complejidad de los procesos de desarrollo local y gobernabilidad.
El rol político, técnico y estratégico de estos actores locales en los programas que abordan las estrategias de gobernanza, co- desarrollo, cambio climático y de aplicación de los ODM es evidente y primordial, y habría mas bien que cuestionarse sobre la razón tras su ausencia en la acción de cooperación internacional en el pasado.
Pero veamos, más específicamente, cuales son las oportunidades que representan las alianzas con las redes de cooperacion descentralizada :
9 es una modalidad efectiva para sensibilizar la opinión pública y las comunidades locales del norte y del sur sobre diferentes temáticas de común interés.
9 es un instrumento de dialogo y discusión conjunta sobre temas de común interés, que genera naturalmente intercambios de ideas y experiencias de forma muy directa y pragmática que en muchos casos ponen en segundo lugar las diferencias políticas, culturales , religiosas y étnicas
9 es un tipo de relación que alimenta un contexto pragmático y de confianza
que difícilmente el mejor “experto” de cooperación internacional puede generar por sí solo.
9 contribuye a generar innovación movilizando recursos muy importantes y frecuentemente olvidado por la cooepracion como son las buenas prácticas de los territorios en los campos básicos del desarrollo local: gestión de servicios sociales y básicos, estrategias económicas locales en el campo ambiental y energético, políticas de género, etc., solo para avanzar algunos ejemplos.
9 hace más participativa, trasparente y dinámica una cooperación tradicionalmente enjaulada en los procedimientos que aseguran más los requerimientos administrativos del donante que la posibilidad de enfrentarse a complejidades como la concertación y articulación de actores.
9 permite pasar de la lógica del “cuanto me das” al planteamiento de “cómo lo
articulamos juntos” en apoyo a los procesos nacionales y locales de
3. ¿Qué significa considerar las alianzas con las redes de
cooepracion descentralizada un factor estratégico para el
mejor impacto de la cooperación?
Si imaginamos una foto de la cooperación de hace 15 o 20 años, los actores, a grosso modo, eran tres: las ONG, la cooperación bilateral y la multilateral. Hoy la misma foto, además de ser en digital, muestra decenas y decenas, para no decir centenares, de otros actores de cooperación.
Mas allá de analizar este fenómeno y sus efectos, tanto positivos como negativos, ésta multiplicidad de actores significa sin lugar a duda, una complejidad adicional.
El escenario típico en los países del sur se caracteriza cada vez más por una multitud de actores que operan en el mismo país, sobre objetivos comunes, pero con cronogramas, formatos, métodos y modalidades técnicas y mecanismos administrativos diferentes.
Iniciativas que sin embargo “se conocerán” en el terreno solo en fase de implementación cuando ya los documentos de proyectos han definido hasta al centavito cuantas plumas y cuanto tiempo hay disponible para alcanzar los famosos “resultados esperados”. Si por un lado está claro que no se puede “uniformar todo”, también es cierto que es intelectualmente honesto ser concientes que mucho se puede hacer para mejorar esta situación.
Desarrollar el enorme potencial de la articulacion entre diferentes actores de cooepracion internacional impone a quien gestiona y opera en la cooperación, en muchos casos entidades públicas, la necesidad de pensar
Ejemplo: Un poco como decir que si valoramos el mejor camino para llegar en coche hacia un destino determinado, cada uno de nosotros valora desde su casa según su sensibilidad el camino más adecuado, en primer lugar el más directo. En la realidad ocurre que, una vez en la calle, nos damos cuenta que miles y miles de otros han identificado el mejor camino para llegar a un lugar determinado y de allí trabazones, trafico, atrasos, pérdida de tiempo y de recursos, peleas y cuantos más.
Algo parecido ocurre en la cooperación internacional y en los escenarios caracterizados por múltiples actores donde evidentemente el objetivo no debería ser la disminución del número de actores o limar las
especificidades propias, sino más bien el de facilitar la articulación y harmonización de la respectivas acciones.
en nuevos diseños de programas, instrumentos de programación y procedimientos administrativos que:
9 ofrezcan un marco de referencia legal, programático, operacional y
administrativo que represente una alternativa a la fragmentación de la acción
y a la a la mera sumatoria de proyectos.
9 prevean y promuevan el rol de las redes de cooperacion descentralizada y su
articulacion a los marcos multilaterales , de su naturaleza, de su potencial.
9 creen el espacio para una posibilidad real de dialogo y encuentro entre los actores sociales y económicos de las comunidades locales del norte y del sur
9 faciliten y estimulen la complementariedad de actores entre diferentes socios interesados en alcanzar objetivos cuya portada es superior de la posibilidad de cada uno por separado.
9 predispongan mecanismos de programación local a realizarse en el país y en los territorios del mismo, rigurosos en el método y flexibles en la posibilidad de articulación
9 acuerden procedimientos administrativos ágiles y que se “hablen” para hacer posible la coordinación entre los diferentes actores y la acción de las partnerships.
9 proporcionen a las partnerships la posibilidad de incidir en temas específicos pero en el ámbito de un marco programático integral en el territorio donde se opera y de esta manera generar sostenibilidad, articulando con los procesos de gobernanza y de desarrollo local existentes en un país determinado.
4. ¿Qué programas e instrumentos existentes reúnen estos
elementos capaces de dar vida a una cooperación entre
territorios, relacionada a las respectivas estrategias
nacionales?
No muchos en realidad, o en todo caso, muy pocos con un enfoque territorial. Su gran mayoría preconiza la relación entre dos partners, para realizar un proyecto en un país determinado.
EN DEFINITIVA, ESTA LA INICIATIVA ART NO ES “UN PROYECTO MÁS”
SINO MÁS BIEN UN MARCO PROGRAMÁTICO PENSADO, ESTUDIADO EN EL PAÍS INTERESADO CON LOS DIFERENTES ACTORES Y ESTÁ A DISPOSICIÓN DE
LAS REDES TERRITORIALES Y TEMÁTICAS INTERESADAS EN OPERAR PARA:
9 aplicar un enfoque territorial capaz de apoyar efectivamente a los procesos de desarrollo en los países, en lugar de la “centralidad del proyecto” y de un enfoque puramente sectorial
9 estimular la complementariedad y alianzas entre la acción de diferentes actores y programas de cooperación en apoyo a estrategias comunes y complejas como los ODM.
9 articular con la responsabilidad pública y la capacidad prepositiva de la sociedad civil
9 ofrecer la posibilidad de operar en el ámbito de la cooperación sobre las causas y efectos de temáticas de común interés que se manifiestan y producen efectos negativos o positivos en la vida cotidiana de los ciudadanos del norte y del sur
9 contar con ciclos de programación local organizados en los países por los actores locales para alcanzar mayor complementariedad de actores y
representar una alternativa real a la fragmentación de la cooperación en un
sin numero de proyectos.
9 asegurar la continuidad de la acción puntual de la cooperación con los procesos de desarrollo local del país.
9 optimizar los recursos compartiendo servicios comunes, diagnósticos, datos,
y asistencia técnica.
9 ofrecer mecanismos administrativos ágiles
Por supuesto ésta es una operación compleja que necesita del esfuerzo y de la reflexión de todos y por esto aprovecho para agradecer al Observatorio su insustituible labor de análisis y de reflexión sobre la cooperación descentralizada.
Consideramos que no se trata de una complejidad que estamos agregando artificialmente, sino más bien de una complejidad que existe en los procesos de descentralización y aun más en la cooperación al desarrollo que quiere apoyar dichos procesos en los países, y que durante mucho tiempo la cooperación internacional no ha asumido, privilegiando enfoques aparentemente más simples y lineares del tipo: nutrición = envío de alimentos, salud=envío de fármacos, desarrollo local =proyecto en un municipio.
SE TRATA MÁS BIEN DE CAPITALIZAR EXPERIENCIAS DE TERRENO Y UNA AMPLIA Y VIVA COLABORACIÓN RESPETUOSA Y ABIERTA LLEVADA A CABO
ACTUALMENTE EN MÁS DE 15 PAÍSES CON LAS REDES DE COOPERACION DESCENTRALIZADA DEL NORTE Y DEL SUR.
En esto también creo que el Observatorio podrá ser un interlocutor determinante para generar los resultados esperados.
