Sistema de grupo sanguíneo ABO – Biología
O Sistema de grupo sanguíneo ABO es la forma más común de clasificar la sangre humana en función de las propiedades de los glóbulos rojos (glóbulos rojos), determinando la presencia o ausencia de antígenos A y B, que se transportan en la superficie de estas células. Hay 4 tipos de sangre en este sistema: A, B, AB y O.
La presencia de estos antígenos en los glóbulos rojos fue descubierta en 1901 por el biólogo Karl Landsteiner. Notó que al mezclar células sanguíneas de diferentes tipos se producían fuertes reacciones de aglutinación. Los glóbulos rojos clasificados como “A” reaccionaron a los del grupo “B” y viceversa, mientras que los del grupo “O” no mostraron reacción a ningún tipo. Al año siguiente, más estudios revelaron la existencia del grupo “AB”, que reacciona tanto a A como a B. Estos descubrimientos revolucionaron la medicina, permitiendo practicar la transfusión de sangre sin las consecuencias del rechazo, que puede ser fatal.
De esta manera, una persona con sangre tipo A puede recibir sangre tipo A y O y alguien con tipo B recibe sangre tipo B y O. El tipo AB puede recibir sangre que cualquier otro tipo de sangre, lo que se denomina receptor universal. Las personas con sangre tipo O, por otro lado, solo pueden recibir sangre O, ya que todos los demás tipos portan antígenos específicos.
El tipo O se conoce como donante universal.
Quién puede donar a quién, según el sistema de tipo d e s a n g r e A B O . I l u s t r a c i ó n : D e s i g n u a / Shutterstock.com
El sistema ABO se consolida en el organismo durante el desarrollo embrionario, permaneciendo inalterado durante toda la vida. El bebé adquiere pasivamente anticuerpos de su madre a través del torrente sanguíneo, comenzando a producirlos solo después de los 3 meses de vida. En casos raros, los anticuerpos maternos pueden atacar los glóbulos rojos del feto, de forma similar a lo que ocurre en las reacciones inmunológicas. Las afecciones más graves están relacionadas con las madres de tipo O que están embarazadas de fetos de tipo A o B. En esta situación, los glóbulos rojos del bebé son
atacados por el sistema inmunológico materno, lo que puede causar eritroblastosis fetal o enfermedad hemofílica del recién nacido.
El sistema ABO muestra grandes diferencias de ocurrencia entre las regiones del mundo. El tipo O se considera común en el continente americano (ocurre en el 45% de la población brasileña), siendo raro en Asia, donde el tipo B es más común.
El tipo A es más común en Europa y Australia, mientras que el tipo AB se considera raro en todo el mundo. Cuando se analiza junto con el factor Rh (positivo o negativo), se estima que el tipo de sangre AB–, la más rara de todas, ocurre en menos del 0,5% de la población mundial. El tipo O+ es el más común, se observa en ± 36% de la población, seguido por los tipos A+ (±
28%), B+ (± 20%) y AB+ (± 5%).
Además del sistema ABO, existen otras clasificaciones para la sangre basadas en otros antígenos o moléculas presentes en los glóbulos rojos y la sangre. El factor Rh, descrito en 1940, terminó incorporándose a los análisis de sangre y se expresa comúnmente junto con la tipificación ABO. Otros sistemas de clasificación menos conocidos incluyen Lutheran, Lewis, Duffy, Kell, MNS, Xg y Dombrock.
Referencias:
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