El Ballet
Fidel
Sepúlveda
La danza
es un artedel
movimiento.El
movimiento es una evidenciadel
ser,
del
sercontingente, inserto
enlas
categorías espacio-temporales.Es
sudespliegue,
su consolidacióny
su epifanía.La
nada eslo
inmóvil,
por ausenciade
ser.El Ser
(con
mayúscula)
esla
plenituddel dinamismo.
La
abundanciade
serlleva
consigola dinámica
de
cada una
de
suspartes,
potenciada al máximo.A
lo
mejor parece o apareceinmóvil,
pero ello no es sinola
resultantedel despliegue
en armoníade las
fuerzas
quelo
imponen
como existenciay
como existencia plena.El
ser
contingente sedesarrolla y
crece por su movimiento.Es
un movimiento que
busca
suplenitud,
una plenitud que se vadesenvolviendo hacia
una asimilación cada vez másintensa y
extensadel
tiempo
y
del
espacio,En
estadirección
se proyecta alinfinito
espacialy temporal.
Este
infinito
no es sóloexterno,
un colocarse en un espacio cada vez más amplioy
untiempo
cada vez más
durable;
es uninfinito
cada vez más exigidoy
exigente cualitativamente.
Los
seres se mueven en el espacioy
en eltiempo.
Aparentemente
estoes nivelador.
Se
desplazan
en elespacio,
en eltiempo y
por eltiempo,
en un presente que notiene
otra realidad que elinstante
que esy
ya no es.Sin
embargo,
podemosdiferenciar
lo
que se mueve simplemente por sermovido,
que no es sujetode
sumovimiento,
que notiene
una proyecciónhacia
atrás ohacia
adelante,
sino que está en movimiento sin ser ni conciencia ni consistencia
histórica;
el ser que seinstala
y
asumeinconscientemente
su pasadoy
desde
éste
sufuturo;
y
aquél que seproyecta,
conociéndose,
en unpresente,
integrándolo ónticamente
con el pasadoy
desde
aquí proyectándolo alfuturo.
En
otrostérminos,
entre el ser movidoy
el moversehay
la
diferencia del
ser por otroy
para otroy
el ser valóricamente por síy
para sí.Conscientes,
además,
de
que entre ambos estados o situacioneshay
múltiples gradosdiferenciales.
Todo
ser está en movimiento porque no puede serde
otro modo.Lo
conlleva
a su manera.No
hay
dos
movimientosiguales
como nohay
dos
seresiguales.
Importa
darse
cuentade
esta modalidaddel
ser paratomar
notade
susimplicancias
diferenciadoras.
En
la
medida en que el ser es en virtudde
otro
y
paraotro,
se mueve por otroy
para otro.Es
movidodesde
afuera, para más o paramenos,
en unadirección
quelo
perfecciona odefecciona.
En
tal
sentido,
más que moversesiendo,
está sufriendo o padeciendo el movimientoy,
comotal,
noimporta
ni perfección ni proyección.Esto
que es evidente en ciertasrealidades,
pareciera no serlotanto
enotras
instancias
del
ser.Cuando
estamos en presenciade
ciertas realidades que obedecen a un principiointerno,
estamostambién
frente
a ciertasformas de
automovimiento
quebuscan
asimilary
metabolizar su situación espacio-tempo ral.La
escala ontológica gráfica estadimensión del
ser.Es
así que el movimiento autodirigido setraduce
en un operardiferen-ciable
de
acuerdo ala
estructuray
las
necesidadesinternas
de
esta estructura.
De
aquí que podamosdistinguir
movimientos que sedespliegan
enlo
materialy
paralo
material,
buscando
formas de
ser plenificadorasde
lo
material
quelas
define
y
circunscribe, y
movimientos que no se agotan enlo
material,
al parecerciegos,
por no ser clara su orientación ofinalidad,
pero,
queónticamente
muestran una realidad más complejay
no siempre cuantifi-cable.Dentro
de
esta perspectivahay
esferas o nivelesde la
realidad que se movilizandesde
adentro,
por mociones otensiones
ofinalidades
que sondife
rentes ala
materialidad,
que no sedirigen
ni satisfacen nitienen
sutérmino
en
ésta.
De
algún modo estamosfrente
a una realidadinasible y,
sinembargo,
eficiente,
tanto
que esdefinitoria,
por serdistintiva.
En
virtudde
esto,
nohay
otra alternativa que aceptarla
existenciade
tal
realidady
procurar asirla aun que sea en su condiciónde
inasible,
inasible
peroinobjetable.
El
hombre
se mueve.Su
dinamismo,
sinembargo,
no essimple,
sinoaltamente complejo.
No
esdel
casodetallar
susdiversas
escalasde
movimientoespacial o
temporal,
Pero
sí expresar que cada unode
ellos,
en cuantohuma
nos,
están vertebrados por una gamade factores
quelos diferencian de
los
otros movimientos circundantes.Uno
de
estos elementosdiferenciantes
esla
imprevisibilidad;
imprevisibilidad
que no es sino consecuenciade la
multipli cidadde
polos que solicitany
tironean
su ser.Esta imprevisibilidad
no es caótica
olo
es sólo aparentemente.Si
sela
consideradesde
un puntode
vistahistórico,
es posible percibir ciertas constantes quele
otorgan un carácter másdefinido.
Una
de
ellas es el arte.Y
en elarte,
desde
la
más remotaantigüedad,
las
expresionesdancísticas.
La
danza
esfundamentalmente
movimiento.Movi
miento cambiante en el espacioy
en eltiempo.
Movimiento diferenciable
cuantitativa
pero sobretodo
cualitativamente,
Movimiento
constante. ¿Por qué?Diacrónicamente
se puedendetectar
causas,
pero asaltala duda
en cuanto asu condición
de
tales
o,
almenos,
a su carácterúltimo.
Se
alude alerotismo,
al entusiasmo
bélico,
ala
magia,
alconvencionalismo,
allujo,
ala
evasión;
y
todo
esverdad,
pero a medias.Pensamos
quehay
tendencias
y
raíces profundas
que afloran pordiversos
cauces,
pero que no autorizan a confundir continente
y
contenido.Otra
cosa es que esta realidad profundami-metice
históricamente
ciertas manerasde
expresión que pongande
relieve ciertas características,
pero ellas son circunstanciales einsuficientes
paradar
razónde
ser al ser quelas
exterioriza.Se
puede pensar en el afánlúdico
que asimila alos individuos
y
alos
pueblos
jóvenes. En
la
danza
hay
unjuego
válido porél
mismo,
más que porotra estimación extraña.
Pero
esto nola
explica;
explicaría sólo una partede
su complacencia en un movimiento reglado.
Se
podría pensar en el sentidode
inmolación
como un medio para obtenerde la divinidad
unbeneficio:
dádiva
o perdón.
Se
pudiera pensar enla
incorporación de
fuerzas
telúricas
o cósmicaspara
hacer
frente
alos desafíos del
medio.Se
pudiera pensar en máscaras osubterfugios para
la
satisfacciónde
ciertas necesidadesbiológicas.
Pero
siendotodas razones,
parecierahaber
undesajuste
entre elfin
queridoy
el medio arbitrado para obtenerlo.¿En qué consiste
la
danza?
¿Quéla define?
¿Su velocidad?
Pareciera
que no, ¿Sudespliegue de fuerza
o energía?Tampoco.
¿Su estilizaciónkinética? No
siempre. ¿Su ceñimiento a un códigofijo?
No
necesariamente.Pareciera
quelo
distintivo de la danza
está enla
expresiónhumana
através
del
movimientoy
del
movimientodel
propiocuerpo,
del
movimiento en síy
no simple réplicade
otrasexpresiones, y en,
através
del
movimientocorporal, ir irradiando
la
totalidad
del
ser.Pareciera
que enla
medida en que este movimiento seaidóneo
para encarnar alser,
la danza
es másdanza
y
poresta vía podemos
ir
a una axiologíade la danza
que permita establecer sucarácter ancilar o
ensimismado,
su condición periférica osustancial,
su entidad
cuantitativa o cualitativa.A
través
de la danza
elhombre
seha
expresadoy
sigueexpresándose,
pero no siempre conigual
aciertoy
excelencia.¿Cómo
distinguir
entredanza,
ballet
o coreografía?Podríamos
decir
que
todo
ballet
esdanza,
pero notoda
danza
esballet. La danza
es el géneroy
elballet
esla
especie.Se diferencian
en quela danza
es un proceso mássimple.
El
ballet,
más complejo.Para la danza basta
un cuerpohumano
quebaila.
Para
elballet
es necesario estoy
varios elementos más.Al
referirnos alballet
comprendemosla
coreografía enla
quevestuario,
escenografía, ilumi
nación,
música,
libreto,
tienen
una participaciónintegrada
profundamente alas
evolucionesdel
cuerpohumano. Cualitativamente
hay
unadiferencia
quedice
relación a una mayor urgenciade
depuración,
a uninterés
por graficarcon mayor
hondura
y
sutilezalos
sentimientos,
las
emociones más profundasy
vertebralesde lo
humano.
Hay
una mayor concienciade
obligar al serhu
manointegral
adar lo
más ricoy
entrañable quehay
enél. La danza
en suversión primitiva es una
irrupción
de lo
violento einstintivo
que se exteriorizaen pasos
danzables. Es
espontánea eirreprimible. Es
lanzar
afueralo subjetivo,
inanalizable,
misteriosoy
mágico.El
ballet
es unintento
por proponery
modelar unespacio,
y
con elespacio,
untiempo.
Al intento de
liberación
y
desahogo de
la danza
se opone el propósitode
construcción que seda
en elballet.
El
coreógrafo partede
la
estructurahumana
y
sufacultad
dinámica
y
con ella
diseña,
arquitectura,
corporiza rítmicamente unaemoción,
un sentimiento,
unaidea,
unasituación,
unproblema,
un acontecer.A
partirde
estaintención
y
enfunción de
ella eligela
música,
si esnecesaria,
la
iluminación,
la
escenografía,
etc.Es
un procesointegrador
de lo
materialinconsciente
alo
inmaterial
y
consciente.Polarizador
en su vocaciónde
mundo que exigecohesión,
dialéctica interna
generadorade
relacionesinéditas
y
enla
medidaen que es generadora
de
relacionesnuevas,
creadorade
un ser nuevo.Como
ser nuevo se opone a
lo
que no esél,
y
oponiéndose sedefine.
Lo
extraño,
di
fícil
y
misterioso es este afán por construir partiendode
lo
imposible.
Se
trata
de
encarnarlo
inmaterial
conlo
más rebelde a estamodulación,
como es elcuerpo
humano.
Se
trata
de
aprehenderlo
permanente conlo
máscambiante,
como es
la
materia;
de
objetivarlo
más sutil conlo
másopaco;
de
poner enel espacio
y
darle
unafijeza
a unafisonomía
espacial conlo
másfugaz,
comoes el movimiento corporal
humano;
de
conformar sub specie aeternitatislo
que seda
comofluencia
en eltiempo.
Es
necesariodistinguir
entre gimnasiay
danza.
En
ambashay
unim
perativo
de
controlde
la
parte corporalhumana. Podríamos llamarla
técnica.
El
gimnasta,
enla
medida que avanza en suoficio,
va ejerciendo un mayorcontrol
y
dominio. El
bailarín
también.
Son
condiciones sine qua non paraser.
Por
esta vía el gimnasta puedellegar
ala
acrobacia,
donde
se visualizacomo meta el récord: suma acumulativa
de
controly
dominio.
¿Es estala
mira
del
bailarín? Parece
que no.Hay
unadiferencia fundamental.
El
movi miento coreográficobusca
una meta cualitativa(no
cuantitativa)
quehace
de
su ejercicio algo radicalmentediverso
del
movimiento gimnástico.La
gimnasia rítmica entiende el movimiento en
función de
un ritmo en que repetición,
coordinacióny
variación sejuegan
porsí,
se agotan ensí,
en el ritmo porel ritmo.
Es
mecánica einmanencia.
En
coreografíahay
ritmo,
pero es un ritmo queirradia
dinámica y
trascendencia.
Es
unritmo
que modela espacioy
fisonomiza tiempo,
quebal
bucea
y,
aveces,
enuncialo
inefable. Es
la
carne que sehace
espírituy
elespíritu que se
hace
carne.Que
sehace
cadavez,
venciendo eldesafío de la
inercia
que se opone aldinamismo,
de
lo
amorfo que se opone ala
forma,
de
lo
indeterminado
que se opone alo
definido,
de
lo
opaco que se opone alo
radiante,
de lo falible
que se atreve alo
cierto,
de
lo
ponderable que se obligaa
lo
imponderable.
Entre baile
y
coreografíahay
la
diferencia
que vade lo
colectivo casiindiferenciado
alo
individualizadamente
estructurado.
Cada baile
tiene
unacoreografía,
osea,
un sistemade
pasosdiferencia
dos
y
diferenciantes,
pero es un esquema genérico para verter enél
todas
y
ninguna
de las
vivenciasindividuales
de los
ejecutantes.No
hay
unaintegra
ción
de
elementos acordes en afinar unaforma
única,
irrepetible. En
lugar de
ir
a unadimensión
interiorizadora,
elbaile
es unfactor
masificante,
apto pararecoger el epifenómeno
de época
y
de
moda,
restringido alo
circunstancial.Es
indicio,
síntoma, signo,
recolectorde lo
periférico;
no adensador acosantey
acuciante
de lo
interno.
No
esexigente;
esevasivo,
desgastador de
energíafísica,
a
veces;
no reconcentradorde
inquietud,
de
energía espiritual.El
arte coreográficobusca
crear unalínea,
unalínea
plástico-dinámica,
sugestiva.
A
estefin
se ordenanlos
pasosdanzables. Busca
eny
através
de lo
fugaz
eternizar eltiempo;
untiempo
interior,
humano,
Poniendo
en eltiempo
una
línea,
pone en eltiempo
un espacio.Es
unalínea
que sólo existe en unpresente
y
presentefugaz
por cambiantey
con ellabusca dejar
en el espacioy
en eltiempo
lo
permanente.Esto
explica sudifícil
aprehensión por elpúblico,
sudifícil
fijación
enescritura,
sudifícil
reedición en el escenario.Fugaz
como el movimiento quelo
origina es atrayente precisamente por esoy
por el misterio quelo
nutre.Per
manece a
través
del
tiempo
asediado pordiversos
enemigos:la
necesidadde
subsistir,
de
inquirir
por el secretocósmico,
de deslumhrarse
lúdicamente,
de
evadirse a
lo
feérico,
de liberarse
de la
angustiay
de
lo
absurdo.A
pesarde
ello
y
testimoniándolo,
la
danza ha
subsistido con una vocaciónde
romperla
sola necesidad
de
subsistencia,
de
avanzar enla
penumbrade la
magia,
de
horadar la frivolidad
cortesana,
de
atisbar eltrasfondo
del
cuentofantástico,
de
explorarla
marañade la
crisis contemporánea.El
arte coreográfico pudieradecirse
que es el arte másdesnudamente
humano.
No
hay
recurso alo
extraño(color,
sonido,
palabra,
imagen)
parafijar
su esfinge.Es
elhombre
el que sejuega
con su cuerpoy
con sualma,
selanza
al espacioy
altiempo,
y
con sucuerpo,
concrecióny
gravidez, intenta
alcanzar
la
abstracción eingravidez.
Este
es su valor educativo.Es
elímpetu
aventureroy
creador sin apoyatura ni ulterior
recurso,
sininstrumental
como no seaél
mismo en sulimi
tación
y
contingencia.Así
vive expuesto ala
incomprensión.
Para
muchos esun sucedáneo
de
pornografía.Para
otros es undeleite
kinético. Para
no pocossólo agrado sensorial.
Para
buena
parte,
escape ala
frivolidad
social.Para
pocoses encarnación
de la
interioridad
humana,
misteriode
origen,
presenciay
per manencia.Desde
esta perspectiva es cuestionablehablar
de
educaciónfísica
comosi realmente se pudiera educar al
hombre
sectorizándolo.Posiblemente
de
ahíderive la
falta de
interés
y
la
falta de
coherencia estructuralhumana
quetienen
los
programasde la
llamada
educaciónfísica. No
setrata
de
agilizarlos
mecanismos corporales como se
hace
el rodajede
un vehículo.Si
seenfocara,
encambio,
con unadimensión
simplementey
nada menos quehumana,
los
resultados
seríandiferentes. El desprecio
porla
materia,
porlo
corporal,
que ahorase
acuna
contal
política sería sustituido porla
comprensión,
el respetoy
elentusiasmo.
La
aspiración expresivade la
coreografía nodebe
llevar
a confundirla conla
pantomima.
La
coreografíatiene
su códigopropio,
sus medios expre sivos específicos conlos
cuales ser autónomamente.La
pantomima no es porsí.
Vive
del
reflejode
estructuras ajenas.Se
trata
de
unatransposición
agesto,
de
signosy
símbolos que se sustentan en otros sistemas.Cuando
la
coreografíaincluye
la
posey
el gesto entre sus elementos vitalizanteslo hace
a condiciónde
que seintegren
y
metabolizen a un ritmodancístico
que genera unalínea
dinámica
sugestiva,
creadora.Son
un elementomás;
no el elemento específico.También
seincorpora
pinturay
escultura enla
escenografía, pero,
igualmente,
a condición
de
relacionarseíntimamente
conla
estructuradancística
como contagio
del
espaciofísico
apremiado por el espacio móvil sugerido porlos
pasosdanzables.
Igual
rol corresponde ala
música como elemento rítmico-temporalque aclara o
densifica
la
temperatura
ideativa
de la
estructura coreográfica.La
coreografía,
con ellenguaje
másindirecto,
mássutil,
se proponey
realiza
la
puesta en existenciade lo
más profundoy
complejodel
serhumano.
Produce,
como ninguna clasede
arte,
la
simbiosis cuerpo-espírituy
estoim
porta un
desafío
que obliga alintérprete
adar lo
mejorde
sí para materiali zarloy
al espectador a recoger einteriorizar
la
idea
poniendo en acciónlos
más variados registros aprehensores quedetenta la
naturalezahumana.
Un
coreógrafo,
parafraseando elEvangelio
de San Juan
expresa:En
elprincipio era el ritmo.
Antes,
Goethe
había
caído enla
mismatentación
al expresar: