Claudio Colomer Marqués y la Escuela Oficial de Periodismo en Barcelona

ENTREVISTi\S

INSTITUCIONES Y PERSONAJES

Claudia Colomer Marqués

y

la Escuela Oficial de Periodismo

en Barcelona

En el medio ambiente de las altas especulaciones espirituales, .y, aun, bajando un ,escalón considerable, 1en ,el de _cualquiera de las m1.,ltiformes actividad,es int,el,ectua1es, suele sier mirado el perio-dista como un divulgador de menor cuantía a quien, no ,pbstanre, se envidia por su agilidad expositiva así como ,por su .audacia ,en abordar los más dispares t,emas a la vista de t9dos. ,Sin ,embarg,o, penodistas y de los buenos ban sido y son la mayoría de 101s filósofos de nuestro siglo, y no digamos de los novelistas con-sagrados, muchos de los cuales deben su fama al habitual retazo periodístico.

Muchos son, por otra parte, los periodistas que pos,een altos estudios universitarios y un considerable bagaje cultural tanto en 1ext,ensión como 1e:n profundidad. Destaca ,entre ellos D. Clau-dia Colomer Marqués, Director de «El Correo Catalán» desde

1 g46, Doctor en Derecho y ganador del p11emio ''García Y guren en los ej,ercidos del doctorado, Pr;emio Nacional «Fra¡ncisco1

Franco » de Periodismo ( año 1 9 5 2), qui,en estudió en el Instituto de ~studios Políticos de Madrid, y ,en la «Escuela Oficial :de Pe-riodismo» ,en Madrid (curso 1943)¡ y ha publicado varios ,foI1etos y, pronunciado conferencias tratando ,especialmenne t,emas sociales y políticos.

A él nos hemos 11egado, como Director de la Escuela ,Oficial de Periodismo en Barcelona, -la nueva institución docente cuya fundación ya supone un credito y un prestigio para nuestra ciu-dad- y pluma ,en ristr,e fué pI'eguntado d alumno y 11espondien-do el Profosor.

-La fundación de la Escuela Oficial de Periodismo en Bar-oelona, ¿ responde a UiI1 anhelo de los medios periodísticos

bar-oelones,eis o a u~ plan del nuevo Ministerio ?

-Hay una sola Escuela de Pieriodismo que dirige su

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dador D. Juan Aparicio; ésta ha llevado sus cursos a Baroe1on:a, quedando ,estructurada de la siguiente forma: D. Juan Aparicio como Director, D. Juan Beneyto subdirector de los cursos en M1adrid y D. Claudio Colomer subdirector de los cursos ,en Bar-celona. Fué su creación iniciativa del Minist,erio respondiendo al .anhelo de la Prensa barcelonesa. V,eníase apreciando que, en los

cursos de Madrid, apenas asistían estudiantes catalanes, tal vez por el excesivo apego que los hijos .de estas tiierras solemos tener a nuestra ciudad; de seguir así nos hubiéramos encontrado con una división de hecho en la prensa ,española : la de Cataluña y regiones próximas con un periüdismo que, de acuerdo con la 1egislación vigente, no podría cubrir la plantilla de sus periódi-cos, plantillas que vendrían a ser cq.biertas por periodistas de gran formación pero desconocedores de la región para la cual escribían. Afortunadamente fué estudiado a tiiempo tal problema y hoy nos hacen a todos el honor de situar:nos en ,el .mismo1 ,plano que en Madrid.

- ¿ Es un órgano puramente oficial o cuenta con ,el apoyo y la consigui,entJe int,erv,ención de las corporadones provinciales? -El Ministerio de quien dependemos •está r,egido, afortuna-damente, por ur:. hombre que tiene un concepto del patriotismo -distinto del afranoesado centralismo oficial y administra¡tivo, y que r,esponde a una manera más nuestra, más española y tra-dicional de ver las cosas. Por esto el carácter oficial de la Es-cuela no implica una separación de •esta Escuela y sus órga;nos rector,es de la sociedad a la que quiere s·ervir. Aquí concretia-rnente, por no estar prevista la consigna a:e estas •ensieñanzaJS en: el presupuesto anual del Minist,erio, la Escuela tiene que cubrir los ,gastos de su primer año de ,ej,ercicio con las aportaciones de entidades, corporacionies y aun particulares, y debo decir que

·con gran éxito hasta el present·e. Desde ,el punto de vista ádmi-nistrativo Sáldrá próximament•e un decreto orgánico que dará a la Escuela una cierta autonomía ,en ,el ejercicio de su función, pues se creará un Patronato nacional en el que estarán ~pre-sentadas las personalidades más destacadas de la Pr;ensa , espa-ñola, el cual será el sup11emo órgano rector ele la Escuela Oficial de Periodismo ; de esta manera, la sociedad y los periódicos t,endrán la máxima intervención ,en la Escuela, intervención compatible con su calificativo de «oficial».

-¿ Qué criterio s:e ha s·eguido para la sielección del prO!-fiesor.a!do?

-El profesorado será designado, de acuerdo con el Deé11eto die rieferencia, por concurso de méritos entre los profosiona1,e,s -del pedodisrno y 1el profesorado oficial de las Escuelas especiales y de la Universidad. Habrá pro:6eso11es y ,encargados de curso, y también se crearán asignaturas no incluidas hoy en el plan ,oficial, de tipo informativo y documental, que permitan calibrar

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no sólo la erudición de última hora adquirida en el silencio de: un despacho y al margen de los problemas de la cal1e, sino la verdadera sabiduría humana que requ1ere más tiempo y a la que no es ajena la ,experiencia la propia experiencia personal. Por otro lado en la Escuela se hace indispensable este critieri0, de concurso y, por eso, se procuró que las cátedras fuesen otor-gadas como pr,emio a éxitos reales obtenidos, ya en el profeso-rado, ya en el ejercicio del _periodismo.

-Las djsciplinas que se cursan, ¿ van encaminadas a la formad6n o a la mera información de los alumnos ?

_:Hay asignaturas técnicas de tipo informativo como la Tipo-grafía, Titulación y confección, y otras formativas como la Teo-logía dogmática, Teoría del poder, en la cual se vuelve a centrar el Derecho Político. Adem·ás la Escuela es formativa en cuanto se lleva la asistencia a sus élases con un rigor superior al qu~ se exige en. las aulas universitarias, haciendo del sacrificio que supone esta disciplina rigurosa un control para la voluntad y µn entrenam1ento al sacrificio para el ,ejercido responsable de nues-tra proliesí6n.

_:Siendo los treinta años la edad máxima para el iIJ,greso,. en la Esuoela, es de suponer que con tal edad se presenten

alum-!µOS con algún título universitario superior, por ejemplo unp.

liceuiciatura. En tal caso, ¿ se guarda alguna consideración para. estos alumno5, como conmutación de asignaturas, dispensas de escolaridad.., ,etc., o reciben el mismo trato que los simples ba-: chille11es ?

- La ,disciplina en la asistencia es fundamental para la for-mación aun en los casos en que el alumno pres,ente .una superio-ridad notoria. No obstante, en el Decreto orgánico de la Es-cuela al que me he reforido, se pI1eviee el hecho de la dispensa de escolaridad concedida a los licenciados mayores de 30 años que sea'1 además periodistas ,en activo. En tal caso puede dispensarse la asistencia a det,erminadas asignaturas en las que por sus es-tudios .=;,ea evidenve la suficiencia en tales materias. Por ejemplo,. tenemos en Barcelona el ca.=;o del sacerdote D. Plácido Armengol,, titular de una parroquia y Doctor en Teo1ogí.a y Derecho Canó-nica, a qui,en se dispensará la asistencia a las clases de T,eología Dogmática y alguna otra en la que puede ,estar tan documentado, cerno los propios profosores.

-Tenemos ent,endido que, pese al Cursillo del verano pasado, existen aun varias personas que se dedican al periodismo activo -sin el correspondiente carnet. ¿ Figuran entre los planes de la Escuela la convocatoria de nuevos cursillos ?

-Los cursillos para profesionales se han terminado, pues. serían incompatib1es con :el __prestigio de la Escuela y el normal des-envolvimiento de sus actividades. Los profesiona1es del

LA ESCUELA OFICIAL DE PERIODISMO

para que cursen sus estudios normales pero con asignatura¡s

re-ducidas y d,e ,esta manera l,egalioen su situación en la Prens(a. española.

- ¿ Puede hoy colaborar ,en la Priensa diaria cualquier persona de solvencia probada, aunque no posea el carnet de ,periodista ? - Puede colaborar, pues de acuerdo con un Decreto, se ha cr,eado ,el 11egistro oficial de colaboradores, y para la obtención

del carnet de colaborador no es pr,eciso cursar estudios ~n la.

Escuela; ,este registro sólo es neceisario para quienes cola-,

boran en secciones fijas, no para los que escriben el artículo.

esporádico, campo d,e acción de las personas documentadas,

aun-que no sean ,periodistas.

- ¿ Entra la Filosofía ,en el terreno de lo periodístico ? O ,de otro modo, ¿ cabe la especula:eión filosófica en ,el artículo de un periódico?

-Creemos que la Filosofía, como todas las ramas ,_del ,saber,.. puede ser obj,eto de artículos periodísticos. En un orden filosó- -fico se han desarrollado importantes publicaciones esp.añola:s;, el artículo filosófico no hac,e vender más periódicos pero influye

en determina'dos sector,es de tipo minoritario y, a su vez, tat

artículo es frecuentemente germen de otros, pues da sangre con-oeptual a nuevos reportajes e informaciones más concretamente

periodísticos. En los periódicos ,escribi,eron Unamuno, Ort,ega,

MaJeztu, Eugenio D'Ors, Font y Puig, Roig Gironella, Lain En-tralgo, González Alvárez, muchos de los cuales siguen

escribiendo-con verdadera asiduidad. Concretamente d,e un filósofo tan

re-pi,esentante en la ,escolástica como Gonzá1ez Alvárez he visto, artículos publicados en 'los periódicos argentinos y yo desearía algún artículo suyo para «El Correo».

-¿ Qué clase de publicación riecomendaría ust,éd a un di-vulgador científico, el enis.ayo o una serial de artículos perio- -dísticos?

-Desde luego t,endría mucho más influjo ,e irradiación una·

s1erial de artículos periodísticos, con la ventaja de que luego pueden necogers,e en un libro y así aumentar su _interés. En el artículo periodístico, para ser leído, r,equiéres·e que flote la idea;

sobre la anécdota y

rr.a

actualidad, por lo que Jos ,ensayos ,escritos en forma de artículos son de fácil y amena ,I,ectura.

- Y para terminar, ¿ quier,e decirme algo sobne nuestra

l'e-vista?

-Conozco el equipo redactor de ESPIRITU. En realidad, s,e trata de un int,ento de revista intelectual y _filosófica .sometido a un criterio sist·emático pese a sus variadas firmas. Las r;evistas-.

de •esta naturaleza en España no acostumbran a mantener .otra.

unidad que le:. unidad ofrecida por la encuadernación. Cforta

uni-dad existía en revistas desde el punto de vista rdigioso

M. DE GUZMAN

·existía ,en la propia Acción Española; ahora 'Arbor ,es µn fat,ento para baoer una revista de ,equipo y otro ·intento ,es ESPIRITU. Mi opinión como Director de p11ensa diaria ha de _s,er la si-guiiente : a la revista ESPIRITU le convi,er¡.en secciones que in-teresen a los 1ectores no técnicos, crónicas cultural-es de actua-lidad, ,ensayos sobre temas curiosos, información del ,extranj·ero sobre cuestiornes algo aj,enas al contenido específico de la revista, interpretación literaria y filosófica de lo que preocupa al hom-br,e de la calle y, en tal sentido, tanto

el

futhol como la .política deben ser objeto de r,evisión filosófica, etc ... Las revistas fran-cesas saben hacer ,esto; así, Esprit, que es un modelo de agilidad ·en su sección informativa; agilidad que -salvando las

distan-.das- también sería de desear existiera •en su homólogo ,espa-ñol, dentro del contenido inte1ectual y del superior rigor filosó-fico que caracterizan a ,esta 11evista.

¡Y ya no preguntamos má.3 al Sr. Colomer; sus palabras han sido para nosotros una verdadera lección de periodismo ; lección que procuraremos aprender según nuestras posibilidades, pues hoy la vida puede serlo todo menos el yo personal ,escastillado

·,en sus pensamientos. Quizás convenga a los filósofos de hoy un poco de esa savia joven que como perfumada brisa del campo trc .. iga a sus mentes :absortas en secas especulaciones sobre el

espíritu o la materia, el aliento fecundo de las realidades actua-les; un poco de aire de la cal1e con sus pro Memas, que pueden s·er los de siempre pero v,estidos de una angustiosa novedad, lo cual les comunicará esa agilidad mental y 1expositiva, único medio

de conseguir que nos ,entendamos, pues nadie escribe doctrinas para su propio uso sino para el uso de esa sociedad de hoy en

el

imperativ~ momento que algunos par,eoen empeñados en

,<lesconooer.