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EDICION DE LA TARDE.

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N.15

BARCELONA:—SABADO 15 DE ENERO DE 1876^

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J

DIARIO DE

A V I S O S .

NOTICIAS Y DECUETOS.

EDICION DE L A TARDE.

U S DELICIAS OEL CLAUSTRO, tercera parta de LAS RUIBAS OE MI COBVEBTO, 4 10 n.—EL GIL BLAS. A « rs.—EL MANSUETO, 4 2 rs. y LA CRUZ OE PIEDRA, 4 2 re»ie3. Gimo aljtunos •oirespwiialeg oes Caá ptdiio q a « prir*(fa»mo3 el p azo para « d q u i -rir estas obras 4 l«s preco j exprasad «, y alguacs s*Auras snssritores han manifes-Udo dáseos da oblanarlas cao al r a u b s da enars qua no obrara en su podar hasta la sígunda quinoeon del a i i m a , sa proraga basta al 2 dal próximo febrera el olazo que se habla fijado. E l d í a de la C a a d ^ l a ñ a s a r i , paes, el último en q a « los s e ñ o r e s t u s -critorei da dentro y faera de esta capital podrán adquirir ambis obras 4 los precios dichos.

CRONICA LOCAL.

Cualquiera que vea hoy al pisee da Cracia c r e a r á que Barralsna está hoérfana da Ayanuaiiento é que ningan ceacajil ba pasada por aquel asqueroso sodazal 4 pe-lar da qu3 alguno de elloe vive aere» del mismo; porque « o s a comprende que ni i una sola brigada de importancia haya ido n i ayer ni hoy a retirar el barro que cubre

una vía tan aonourrid»; no sa comprendo que vs« equeilo quien pueda mejorarlo y no ¡ la h i g i .

—Algo mas mirado d e b i ó ser qmen confió el cargo da recolector da limosnas para la casa da refugio de la calla de la Riereta á un sugeto que andaha ayer serpenteando por Us calles, con la caja ó cepillo en la mano, hasta obligar á los munleipale» á que le recogieran y la condujeran á la Casa Consistorial, en cuyos calabozos ha dormido la mona la noche última. ¿Cómo es posible que las personas caritativus quieran depo-sitar su óbolo en manos de un sugeto qua da traspiés y huele á aguardiente á la legu??

—Una mujer qua habita un tercer viso de una casa de la calle del Arco del Teatro, con lnt»nto sin duda da acabar sus dias, se propinó anoche la exorbitante cantidad de un cuartillo de ácido clorhídrica {sal futnant.) Se dió parto del suceso A la autoridad y la infeliz suicida, después de haber sido auxiliada convenientemento per un faculta-tivo, fué trasladada al hospital de Santa Cruz en nn estado grave.

—El tribunal francés de Lot ha condenado á cineo aAos de reclusión á los espaAolas Es'.éban Agolo y los llamados Ardenoni, acatados de falsificar en Barcelona billetes jdel L •.neo francés, m a n d á n d o l a s d e s p u é s a l Mediodía de la v.°cina nación.

I —A pasar del tiempo llu"ioso que, como de costumbre, había paesto intransitables I as calles, el primer baile da m á s c a r a s dado anteanoche en los salones de ta calle de |la Canuda por la Sociedad de los Catorce, so vió favorecido por una animad? concur-1 'encía. El local estaba adornado con bastante propiedad y no menos elegancia y la

or-Uesta, bajo la dirección del seAor Nesrevarnis, ejecutó con acierto las piezas del pro-I grama.

—Parece que se trata do construir un teatro en los jardines de casa Gibert en la Ipiszí de Catalula con cabida para seis m i l espeetadares. Ccn este y o n el que se l e -vanta en el solar del que fué de la Estrella, serian ocho los teatros que habría en el ¡raseode Grecia.

—Hoy deben principiar en el teatro Principal los ensayos de «La m á g i a nuevas con decoraciones, orquesta, baile y todo lo necesario.

I ~~La compañía de declamación del teatro del Olimpo está animada, por lo visto, Ida muy buen deseo para i m p r i m i r variedad á Isa funcicnes, dando á conocer (bras icuBvas que haa sido acogidas con satitfaotorio éxito. En poco tiempo ha estrenado,

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«Dtuda de 8«ngre,i t A dos rals la entrada,» € Hermenegildo,» y tEa el oufto del bis*

loU» y para m»n«ti« está fijada la repFesentacioa del cuadro d r a m á t i c o «La mnorte de Viri»to,» producción debida á In pluma do «ion Angel de S-IÍOVÍ» y estrenada con •plauao en Msdrld por el ínn->r E-cnbano. No es de estrenar que esta temporada se halle siempre muy concurrido el mencionado coliseo.

—Un cabo del batallón municipal rifió ayer con otro hombro en cuya compañía vive en una habitación de Igi calle de Tarascó, y le di6 dos ó tres merdisecs.

—Del iMoniior de 1.' enseñanza» tomamos los siguientes sueltos:

«Cumpltis? la lar.—Según se nos ha dicho, parece que la Jupta de Instrucción pública de e«ta pro*tocia mandó a últimos de diciembre el pliego de cargos á una maestra que ejerce tu profe-ion en el partido da VillacaeTa y Geit ú, la cusí fue declarada suspensa de empleo y media suelda ea is sesión celebrada por la Junta al 30 da setiembre, cuyo acuerdo fu6 toma-da aio oír á la interesatoma-da. Macho estrañamoa el preceder de la Juata, pues jamás en estt previncia, como en laa demSs, se habla suspendido a aiagtrn maestro sin haberlo oído, y mas eztraBo es que hayan dejado transcurrir «tras meses* para mandar el püego de caigos a la Ínteres» da.

Sin ánimo de dar ningún consejo á la Junta, pero si son si de no perjudicar á ios maestros, victimas, muchas vnees. de malevolencias y apasionamientos, hemos da hacer constar que

en el psriodo de 18V7 á es decir, ea tiempo que rigió la misma ley que la que rige

actual-mente, soí-meate se suspendió á ua maestro y,se sepai ó á otro.

Si la Junta actual imitase el proceder de sus predecesores, en dicho periodo, quizi no

ha-bría tenido de suspender á ningún Maestro, pues ántaa de llagar á tan extrema resolución,

por la Secretaria, cumpliendo ios acuerdos de ta Corporaeion, se mandaba a buscar al

acusa-do y CSP. medios amistosos se resolvían expedientes qua bubieran teniacusa-do mala termiracisn, si

hubiera atendido eóio ti las atusaciones da los AyunUmieotoa y Juntas locales. Desearia-mos ver atendida nuestra iodieacion.»

«Tribunales de oposiciones.—Ea preciso que los Tribunales de oposiciones no se sepsren nn ápice de lo que e.u prevenido en la R. O. dt> 3 de febrero de 1855; pues el oo hacerlo sel, el pretender, como »„ ha pretendido eu las penúltimas j últimas oposiciones venticadaa en esta provincis, que las contastaciones dadaa por loa ejercitantes fuesen como si axp loaran á los niños, os desconocer lo qua son ejercicios do tal naturulesa, y nos extraña que, figurando el señor Inspector entre lea individuos del Tribunal, no haya hecho valer su autoridad para ha-cer cumplir lo que esta prevenido en didenes superiores.»

BOLSIN.—El S por 100 consolidado interior qa«est>« i U l 11 li2 4* la « l i a » ! á tTOi) diuero y á 17 07 li2 papel.

BOLSIN BARCELONES.—Qaedi i las 11 d« U m f i u » si 3 106 «onaoIitUde á 17*07 IjS operaciones.

NOTA de los fallecidos desdo las 18 del dia 14 de enero b i s l s las 13 del dia 15 dsl

mismo da 1876.

Casados 5. Viudos 1. Solteros 2. Niños 2 Abortes 1.

Cssadas 3 Viadas 5. Solteras ». Niñas 3.

Nacidos.—Varonas 8 Hembras 14.

La primera novedad que aos han ofrecido los Bufos en esta aparición invernal, ha sido una zurzuela fantástica representada ayer con el pomposo titulo de «Cuento de Hadas». E l tal «Cuento de Hadas» por lo desabrido parecióle al público, durante tres horas, el verdadero cuento de nunca acabar.

¡Qué sopor! T r á t a s e en suma de una baronesa rabiosa y de un zapatero de mal ge-nio que pasan el santo día en desahogos biliosos ó midiendo las costillas de sus res-pectivas mitades. Una bruja, luego bada, compadecida de la zapatera facilita les efec-tos decorativos y cómicos apetecidos por el empresario, cenvirtiendo á la mansa za-patera en baronesa, y á la iracunda baronesa eu zaza-patera.

Este infantil quid pro quo no pedia dar mucho do sf, pero ba sido desarrollado, sin embargo, de una manera U n poco festiva, y la acompaBa un enredo U n ténne.que elespecUdor, por mucho que se afane, no sabe á q u é ni á quién interesarse. Aguanta «1 espectáculo en atención á las decoraciones que el título le promete, en Unto qoe oye también la música por mera complacencia.

¿Compensa el vacío de la letra la i n ' p i r í c i o n del compositor? Nada de eso. ¿Es es-plendente el decoraoo, rico el vestuario,numerosa la figuración? Ni por pienso. Enior-ces ¿qué les queda á las hsdas para contar? Vamos á verlo. Primeramente, las coplas

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decir, que son propias y acogidas con é x i t o muy ruidoso por el público, hasta conse-guir su repetición por tres veces. En órden de preferencia siguen á estas cupbs otras de sabor picaresca que canta la s e ñ o r a G fuentes en el 2.° acto con una fina ó insupe-rable dicción, cual no se oye mejor en la escena francesa. ¡Qué Uslima que la s o ñ e r a Cifaentes ande perdida en el abrojal de los Bafos, donde fuera de Arderius, nadie es aoter n i cantante!

Ea ambas coplas no anduvo mal inspirado el compositor señor Rogtl, pero confe-semos inter nos, que t do lo tienen menos corte español: e m é r i t a s sor uniiadas si no arrancadas de las oanoplias del vaudp.ville francés.

Hallamos tambioo recomendable ol coro narrativo del principio del tercer acto, con letra y m ú s i c a escritas á imitación de su c é . e b r c hermano de !< zirzuala • 1 «Ju -ramento:» seRursmen ei es inferior á esta, psro como decimos, se recomienda. El cuer-po de ceros bufos lo ejecutó casi i la perfección. Consignamos con gu to que las tres piezas citadas obtuvieron los honores de la repetición, cesa tanto mas notabla Cado el letargo en que el público yacía durante el reato de la función.

Ni los d e m á s artistas n i las otras piezas merecen especial mención, p e r q u é si bien en unas y otros p u d i é r a m o s s e ñ a l a r algunas cualidades, también en coDipensncicn hace-nos oa*o omise de crasísimos defecios. Y cuent* que no censurar aquel bailoteo final y otras menudencias es guardar una abstinencia, que bien se nos paed^ agra-decer.

Ki decorado es de pura fantasía, n i extraordinario n i mediano, y en punto á pers-pectiva, en la pnmsra escena de la abra aparad) u n telón notable.

A cCuente de badas» le falta que le despojen da la parta dicha f á n t ' s t i c a , y reda-ciéndole ealoiices á un acto, resultaría ana pieza agradable y sufic eatememe bufa. Tal cual se presenta ahora, no e« mas que una pesadez.

D I S C U R S O

pronunciada pnr el Exsmo. señor dnn Eugenio Montero Rloe, praside&te da la Academia n a -trítensa de JiiriEpraileoeia y Lrgislicion, en la sesión inaugural del curso de WiS i , 1876, celebrada el 30 de nonembre de t875.

(Conclusión.)

Yo e n sinrciidad reconc-zco f 1 g n n hencScio qas 4 la civüiz>cion biiirMOa prestó la lyle-»ía como int-liluciDD politice en nque!io> remotos siglos, cirvieauo de úlluencia Hiode'adors del Piidor resl cuando un h - b i i iré los clemactos de «qupila aociedtü, cuya orgau zicion era acu (aa iP.i>>Mfec(a, aiaguar- bastante fuerte qu* pudiera imfieá.r tns exc^soii, obligia-dole í. respetar loa derechos d-l iudíriduo. sin la supremt intf-rvT-cion de la Iglesia, estes derech'>B habrían corrido grave ricaK'). 4 t>jsar dei asilo qna du c f on en l.i p n r d e g i s á i oí -g'nizacioa de cUscs suciales Kern es Jo cierto que la iostitncion e.teccixiniDLtd tempo-ral del Estado no ptd a refiguurse i vt'ir bajo la perpetua tíllela de la in Uli.cion esercuU menta aspirituisl tie la U-leaia. .m eratncipacioo te hacia inevitaUlu, y habiib de ^ar princi-pio tas pronta nomo «dquirieae, por el de. arrollo de su proprinci-pio orgnoiEmo, la libertid de ac-ción y la tueiza nec l a r ú a para accmeter U empresa.

Asi io hizo: i reconozcamos cen dolor que la reivindicación de BU darecho tomó en algu-nas OCÍÍÍOOPS la forma reongnante da la vonganza. A l a liumiligcion de Cenosa corresponde ea la liistoiia el sagnieg'O de «nagni. El podnr civil, deshonrado en la persona ite Eon-Gue VI, toma atroz 'opres»lia por laa m-noa do los satélites de Felipe el Hermoso, en la

sagra-da persona de U -n.-f-cif.- Vill Ved a ¡ui un ejemplo mas de eea ley pr..v.deacul, cuyas

sertee-cias registra eu todas sus pigioas la historia y que se cumple siempre mexoratile, aun por medio de los crímenes de los hombres.

Mas no sa crea que al ultramoatanismo fe dio por vencido ea U coatienda. Va transigien-do con su r i v i l , como en los concordatos de Conatanza y en los ctúebrtdaa posteriormente basta nuestros días, ya formando t-aoMtivi-*. paro nunca cincer^s aUacziS con el principio democr&iico que, ante el trlsta eacectsculo que ofrecieron aio^ pueblos del t-iglo XI7 tas lacha» entre el «aceid cío y el Imperio, comenzó a gíroi'rar en la uociedad JA entcnce*, lo cierto es que. a p n í t de la procaria situación en qua v i 7 i ó dorante les cuatro últimos slg'ea,

aupo canaervar eo lo mas recóndito ds su pensamiaoto el fuego stgrado <e sus aspiraciones para volver á la Masada grandeza. Alejandro VI se conaideraba ti davi'a en autltud dn d'stn-buir como eos* auya el nuevo mundo ectro ios reyes ds KapaSa y Portugal. Sisio V. si Anali-zar el aigla XVI, r.-nev ba las doctrina» de Itonifacio para depon'"r al rey Enricjue de Nivarra

y priiane da «ua derechos de sucesioa a la corona de Francia, » qua estab» lUmado por

h»-rencia. En el siglo XVll loocencio X daba a luz au constitución t&eio domus I)ei> declarando les tratidr.>i de Weafalía Duli a, invalid- s. inicuos, injustos, comlenadoa y reprobado'y sin vaL.f ni efecto por entocce» y para siempre, y absolviendo i todos da t u observancia, par mas que u h. biesi<n pruaaatido conjuramento.

Y eato. porque la nece iJad da la paz de Koropa y el d(-b;-r de poner término i las eccar-nizaa luchas de religión que veoiaa inútilmente desangrando á los pueblos de AlemanU, habla

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hecho imprascicdible ia secularización de algunos territorios y bienes de U Iglesia y respetar lo» cuites disiaemeg del Imperio. En et siglo XVlir, Clemente XITI oabllc-bj contra el duque da Psruia el «Uooitorloi qu« tanto aiarmd i las pnncipilos potenei» europeas, porque creye-ron ver en aquel acto Pontificio el deliberado propósito de raorcdocir una política que ya U Apoc* co podía toler-r. Y, en l o , en el oustno siitlo continuó premaliríindose auuulmente cna tjda 8<iemDidad en Uoraa la célebre Bola de la Cena, en cuyo 7.° capitulo ae fuluuuaba la ex-comunión c.mt- a les poderes públicos que se atreviesen í establecer nuevoa impuestos sin el bcnrptauita de 11 Santa Sede.

(•«ro donde no hitlan m u numerases y mas ciertos slntomaa de la persistencia del alira-monl mamo en sos aatigaos propósitos, es en los t abajos cieatiñeos de los publicistas eclc-aUaucoa de esta escuela, ó ai quereia mvjor de e *1o partido, al cual vino á dar «tía mas Tígo-rosos campeones ja Cumpa&ia de Jesús, alejandro BJZÍB an su trotado de finmauitato ecete-aiketiO et de poteslate regia» s¡sluvo que el Pepa era p i r derecha divino aefter de lodo el muDio. puilieado hacer y deshacer l u leyes civiles, raiiAcar y anular lo* etlatatosdaloi Piiacipsa. disponer de las coronas y traafenr los Impeiioa a quienes fuesen da an agrado- Ex-cf-po oo bech* de 1* obra de Gil ^e ¡í-ma, quizi oo ss hubiess escrito hasta el siglo XVI Lbio sKuno an q>.a se hubiesen llevado ,*, tanta ex-eeracion las docl'inss oltramontaais.

Otro jesniu pubiiaaha baje e! pseudónime ae iS:rtba:iae> e» 1605 el fAnfit*atru« heno-riB" defsadioade asi mlsme al «adsr politice de les PoatUlets j fv dareche da dapesleisn da los Beyes. Le mismo hacia Leaaardd Lassiu-tea »u trata** tOa petaetate Pepa > qae publi-caba en Flandas taaabioBen Ies pnaasrea aQaa del sijle XVII. Alajandr» Carrertaa, jeanlla como los anteriores, daba k la estamp* per el mismo tiempo « • Pá<aa au ebra a Da petastate rtniaci l'oatiflcU adriu-sos impíos políticas > » • al eaal decía que al Papa cerreapeBdía toda la rtarra v que lea Rtves so e'aa mis que sua servidores naíaiaterules.

N a d a d l e da laa ob.-as de Uaaaal S* del Ría, Halsiiss, Taicacit, Toledo, Taaner. Baein, Groizer y Manas» (imoa je>Bitat), en las que, «xpanitnde las teorías ultra mentanss y com-binkndolas cun IBS mas jparversaa aspiraoicaes da la domagcgla d^ aquel tisrapo, legilioaabja la doct i m d n r s ; cidio que kabia resucitado an la Eur*pa da la Edad Madía Jase do Sa i ^ -burv, el amigo querido d» Ti mis Uscliet, iiastre pitsocificacian del último grite de dolor y de^n e ación «ne 'Naaliba la de graciada y noble reza aa^lo-sajona al espirar an el siglo XII bajo la tiranía d» loa f' a 'tageoat.

Uanaua. «n su osra «Di Rege et regís in«t.tatiooe,» i U m a b a « a t e r n u m Galiw decost al f-•ite aiesinM da V. rique 111. No oneda desconocerte laicllucacia que eato ees tuvieron so-brii las'Jia xas estas funeit-iS teoiiis, al observarla rapidox o «pan ios a conque en aquella ep ic-» se sucedieron l>s tentativas de regicidio. Ki grau Enrique IV, gloría de so siglo y ho-nor del nombre frai có). peroá quien no supieron perdonar j i m i a t u primitivo

«calvinis-mo,* k paaar de la aiucoritiad d* au posterior cnaveriion loaafi iado^ en el teocrático

par-tido da ia Liga, fué objeto en menis de diez aSoa, ó soadesde to9( 11603, ds diet teotabvu de asea'.oaio, ba<ta que al fio cayó bajo el pnBal del fao&ti^n Raraíllac,

Vo i o ech-ió »'í.r,;o deUi-tr montañismo esto* abomiutbles crimenea; mas es lo cierto que i-us dectrin sin uud'» contra la voluufd de sus autores; sirvieron ptra dar nn colorido r-litioso 6 las pisioata demagógicas de la L g>, encendtoudo en l^s solinactxdaa masas el mis feri z y mas implacable do todos los fio»ti-m ».

Cero los trábalos cientificos de esta secta, que estaban deatioadoa i conservar ana gran influencia en el porvenir, no só'o por la inteligencia poderoea da ÍUS autores como por las ra distas fjrmns con qu> b bian sabido velar sis aspiraciones, fueron la obrado «legibooda Soarcz y las «De snmni Pontiüoi potsstatea> y «Da potestate Pontihcis in temporalibue» de Be-l«i mino. Suarez reconocía contra las exageraciones del miyor número de sus correligionario* que el Romano Ponlidc» no era por derecho divino el Soberano del nnivereO, y que t n podar

lemporal oo alcanzaba fuera da li-a Estados que había obtenido pordanaciondel Imperio. Paro

des ues de haner tan rotundas afirmaciones, decía que, en el ej- rcicio de su potestad espiri-11 »1, podía uqu9! llegar, si bien «íad>rectamente,» h u t a al orden temporal, abrogando las le-yes civi es que fuesen contrarias > los intereses relíeíosos de los paeblos, pero sin imponer olraien su rd*mplaio. E p.der de los Principes ictlcles estaba fn^ra de la acción de la Igle-sia. Esta, no obs'-ante, poiia declararles la guerra cuando persiguiesen por razón de religión a sus propios súblitos ciiatiaocs. R specto a loa Piiocipas herejes, la Iglesia tenia el derecho de deponerlos.

lie ai mino, en las dos obra»! que hocitsdi también cegaba, cerno Booret, la potestad tea-p iral y directa de U l¿l'.>sia. declarando que loe textos sagrados cree la escuela ul^rnnoalana uitaba en sn d-i •« a lenian un aeoiid^ mrrasiectnaapiriical. yua el Ha,a DO era el Vicario de Jesucristo Dios, Ssoor dal oíslo y de la tierra, sicú de Jesucristo hombro, que había reep^tado «ttórden civi.; cuyo poder, per otra parte, aquel no habia&dqDindo por uncesion, por elección, por cooquisia, ni mucho menna por t u don especial de Dita; roenitando do aqd el caricter ruammeotn espirí'uil de la noteatad qai le correspioüe en la Iglesia.

Has, ne<ido esta polo-t-d el poder del alm«, tenia el derecho de lofroni r y cor tunera! Po-der temporal, qu^ es ol pod«r dsl cuerpo. Por eaio el Papa vaiua á ser «;Ddíreet>imenle> Se-bor dol poder tampor >i en cuarto pciiia esto serle in^iapaotaMe para el ejercicio de sn cotes-tod «eapirtaala- &^í q u i . *ia embargo d^ qae na e a t » b a en aue atribudoues. por regli co*

D U J , la deonaicion Os loa Reyes, le aorta licito bsm»U ao coa^qifieretso parlkiola' en q i *

aai lo exigiere la aalud de las almas. Aquí teueia la celebre taorla del Poder político «indirec-to de io« PoaliUces* quetsnt* «indirec-tonga slcaoaó ea los aigloa XVIl y X V I I I . Bajo las tefflpl»da<

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tormu con qn« u p r e s « n h eslt rfoclrio», conduce v i * rectm i laa mUmes consacuetciai del u'.iramontatUmo da la Edad Media. Si al ^ p a tiene dominio sabrá lo temporal en cuar-to pueda convenir k la sVmd de 1 » alm^s, es avldeate >\ni cuar-todoa ios accuar-toa de la vida politic- j cini estarán sometido» a so polesiad. porqua mcíruno de elloa pueda ser iadií>.r¿ata para 1* Hladdal espirita en alardea religioso, con cuyo crilerío se ap.-ecii la bondad T malicia da {.i- acciones humanos.

Estas miimas doctrina? SDI las quemas ó mete? emb-'ztdamsate s^cun las circanstan-rias,prorasaa T rasteataa las u',>r>iBuDUBCs de nuestros dias. Ttmbiea hoy fe proclama el P.der •directivo» del Papa subte la sociedad civil. También hoy se afirma qne ia independen-cía del Poder tem poral roSpaoto M i autoridad religiosa e* incompatible con U libertad de la llf'esiar con lo» d^b^rss da i» co:ciencia criatuna. Tambiea boy sa s^a'icus coa uxa

i anqufz' qa* "lebea tener muy en cuenta laa pan.d irios qira t .d^via conserva el tislema lia los Concardatns, qua na pusds subsistir la alianz» entra la lgi«,«ia y el EsUdo sino ácondición la, qu asta racenozci U sapremacla de aiaella en el Arden temporal.

Tamuien n >« 4e condaoa la libertad po idea da conciencia y se coaspira contra ella en I nombra del daraobo y da ia libertad déla Iglesia. Coa i n t e D c i o n , cuyo terrible alcance salta a

lia vista, se aspira maa A mecos encubiertamente á establecer el carácter dogmilico de la iroostilncion «Onam S&nclam,» cuyas doctrinas yacoaoceis, y que fué la mas violenta de to-ldas laa publicadas por Bonifacio VIII. Y en fio, bajo ia espaciosa fórmula de la «Soberanía Itocial de Jesucristo,* ta oculta la monarquía ó siquiera la supremacía poiitica dal Sumo IPoctlSce para reconstituir aa U Edad presente el régimen ieocrlfc»da la E ¡;d i/ípji», en el I s e g ú n las frases del órgano oficial del altramontanisma en Europa, «la InquísicIoD

(oíd-| l : bien) ba de ofrecer Alas futuras generaciones el espectáculo sublimo de laperfeccioa

so-Icul.»

t i Código "ctad de! altramontaoismo, es el cSyllabus,» como el primero lo fuá el irDicta¡liist de Gr'golo VII. Pódala leer y eiludiar aqual documento, no como un almboio de fé r a l i -gota, (exiepcion hecha da alganaa proposiciones fi;o«óllcas que contiene) sino como el

for-IBUUIÍO da ana u-j i . pj-ítica que pidemos discutjr fin fallar a p«-»tra ccncieocia de

católi-Icja, aunque guardando siempre el filial respeto que deben inspirarnos los Pastures cciesiia-llcoique la profedan. Kl •Srllabusa carece csiensiblemante de los requisitos" indispensables

P'ra qaa nudiera ti'.órsaie c^mo an nuevo símbolo de fé. Es un znsro extracto .le doenmen-|tos pontificios qua por encargo da Su Santidad bizo la Cuiía Koníana, se^un noblemente

con-lesiel Cirdan«i A. iton».lli ol remitirlo S los Obiapns del orbe católico; piro ácuyo tr;.b»jo no

i H p e r s i post rioimente el Sumo Pontífice so exjlicita y solemne »probscíi.n. Los documen-.s áque e (S/llabusa ss refiere, tampoco tuvieron en su origen, m adquirieron desoues, al ^iricler c tióiiieo d e solemnes definiciones dogm-tica«. ¿Cómo su «-xtracto ó sumario ba d.i :-Dírljboy? v l..s declaracíun>'< doctrin ilea de la lylaaía u da «u Jefe visible q u i r.-i •• ni i a tiesa COMO d^cUracijOTS da fé. ó lo qoaes lo mismo, da rerdade» divinóme te reveladas, Mbrán de s e r en todo tiempo tratadas con respeto por los catóiicns; pero 9'n quo esto llegue Apunto de ro ser licito discutir as y aaallzarl^s coa la racional y decorosa libertad que es

icstl' d".lacia: cia humana.

l u a l , pu's, CID vu.etro crit'riosobre Icstirmipos m que el n'trutrcnlacicmo tena I:.:.iu»ia t u t i siglo actual el pr ibltma religioso en frente d e ios Poii> í e s temporales, qoa Por su puta ttmblen persisten e n «n artigue em:euo d» liiler»eclr e n la vida de la l . l c s i . ,

F^relejírcicio de aquellas preroptvas que, ai tuvieron n z - a d e ser en el Estado católico, Ma una odlO'a tir.n.ii psr parte del Estado Uico.

Perm'.H Ime que c. mo té mino y fia de esto discurso comigEe aquí sin orden n i conder-r 2l¿aao8 pensómicntcs s ,1conder-ra este pavoconder-roso pconder-roblema, dei que entiendo dependa el poconder-rve- porve-nir del mundo.

Lis ce adiciones de la Edid prpaente son condiciones de libertad para tedas las i o s ü -I-cíonea y para t i de» los Intereses legítimos. La I,-Ie>la y el Eat.do deflerden la integridad l ' l s q u j respectivamectal.scorresponde, áun cuando mülu>imeote se reclamen la oon-P<rnc.ou de sus pnviiegioa de otro tiempo. L t antigua alianza (coya lealtad puso

consun-lEea'Hf.Q d ú d a l a hUtoria) es imposible. Si fues-p^eib e se.-u funesta. La Iglesia, enmo

"iLcue,,!" msr.to decía el mi;mor;itld abato LiBimeusia ai tss do su fxtrivic/, ba sufrido

^•S'iesn» pioteciures coronados qu© de sus persf.guidrri a, y lo qns hry necesita es qua

| ' » fr< t-]a meoca y se '3 tolere tnaa. Per cira parle, ya no puede cortar con ta anttiu» Vttb l i 1 y permanencia de loa poderes d-1 Estado. La tamoestai revolocii naris, tzu-( ndo'cs eir cesar, los ha cudrt lado ft todos en sos cimientos. La» insiliacionen de «übíer-f^ s« ti-jr f jrmon o se suced-ia con vertiginoca rapidez en el seco de eeta iccicdtd meder, car* condición da vidaestaaglUciun y el morimierto. Ce nocemeder, ademásmeder, p o i L c t ' K e n -l>eies.í i'.u de la damofracia que impera en nnauro siglo, loa peligros de muerta qua T'na la tendría la sntigut al'arzada ios des r oderes; y por etto no l a consentirá j a m í s .

« oresl;ri sumisa (ojaiS que a<i suceda) á entregar su conciencia al divino miDlstnio da ••üesi ;-^oro crotestará sir-mpra contra su dcmin<c<ca polfiiéa. ¿Cómo, tusf, ba de cou^ i r b a y & i a Iglesia U renovación de pactos irremisiblemente condenada! á perecer m a -• can efsc'-o. ID aoei-'did r'yil, aliándose an las e>f,ra& d * la poiitica ccn !a eclesiástica, [ íoaei irMpeo<i>so.'is<B ia llert>d del cred»d»no. ta la IgUs'a nua ínautucion

esencial-'Ma aa-.ont.rla qne no pUé<ía 'ni d»bs Ualasiglr en la* esferas da la rerelícion con la libar • 'de Uctncieacia.Ce&stitnida por Dios en única depositaria de ta verdad leligiosa, á ella

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tiene qne «cadir y someterse bumildemeate el alma bamana para recibir da sus labios eits medio nec3Bario de santificación. Este carácter autoritario, tan legitimo e n suórdao, ydtl cual la Iglesia no pueda dasprendetss, cnando descienda ésta de su aerado E ó j j para con-fundirse con las demás inslimcioaes humanas en el campo de la política, habrá de ser fonet-to para la libertad dal ciudadano, porque su naturaleza n i aun allí le p-rmltlrá transigir coa ella y reconocer su leginmiiad y su derecho.

Asi se explica que ios ministros eclesiásticos qne tanto ccnlrlbajeron al progreso hunu-no, no hayan favorecido nuaja ooa deiibet-ado propósito los intereses de U libertad. Cnando los Barones lagiesas, aprovechardose de la critica sitnacioo en que habían puesto á Juan m Tierra los rigores da I.ioc.mcio I I I , arrancaron al tirano la mngoa caria de sus liberladea, lo-msdiatam-inia el Pontífice lanzó sus r«yoa mas formidables anulando ia concesión, ex.mttu. do al Rey de su cumplimiento y prohibiendo á lea Btraces el oxigirselo bajo peas de tai-tsica.

Esa antigna alisnzs no puede realizarse sisó elevindoas el Estt do á I ' s esferas da la Igle-sia cumo eu !oa tiempos dei Baju Imperio que después reí ovó el regalismo, 6 descfindiesdo I ésta á las regíales da aquel como en los siglos da los Gregorios é Inocencios. Si lo priuiero, corre peligro de muerta ia liberial da loa líales, y ai lo segando, estará siempre amenazult la libertad d« los ciudadanos. Viva, pues, cala institución su propia vida y goce sin trab3sdi su oroni» y leg.lim» libsrud.

Asi la Iglesia podrá desempeñar m s s digea y eficazmente la noble, la necesaria ccisioi

que la incumba e n el sc-uo de li>s sociedades democráticas ce nuestra siglo. Vo esto? profaa-1

uamenta convencido de que, á la vez quo no hay salracion para la demo;r<icia si uo se recoa-1

ciliu cau el espíritu cnsuano, también corre paMicros gravlsimcs U Iglesia en medio de luí

fímpett •dss df s encadenadss soma los punblcs de la Europa, si no se apresura á romper loi I l-izos que la untan coa podares • a otro tiempo llenos de robus:» vida, mas boy caducos y I nuribuniJos. Permitidme coocluir con >ss palabras de nn eminente pub icisla. que debe qui-1 zis su renombre, ia s que á ia profundidad de pensamiento, á las clarísimas iuspinciones di su buen saotido. La autoridad da sus frases suplirá la de que mi podar y fría palabra bubien I carecido. Hálaa aquí:

sTo veo ent e no.otros á hombres que han cesado de crecer en el cristianismo sin sdbe-1 srirsa á niogauaotra religión.»

«Veo á olios qua s e bao deUnido sn la duda y fingen qoe ya no creen.» aMaa lejos hallo á cristiasos que creen todavía y no se atreven á decirlo.»

«En ni' ¿i j de estos t i r o s amigos y de estos ardientes «dversaríos descubra, en fia, á I pei|aeño LÚmero de lisies prestos a vencer lodos los obstáculos y á despreciar lodos los pati-l icrua par* sas creencias. Ettoa bao viol»ul»dü la debilidad hum. na prra levanUrse sobre Ul común opinión. Arrastrados prr rste esf jerzo, n o saben prrciiamente dónde deben detacerse.F Como olios han vis a que e i su patria el primer uso que el hambre ha hecho do la IndepeD-l dencia ha - J > par.i atacar la religión, tiecea miedo de sus contemporáneos y s i apartan cml tarr< r de lalíbcrtml qua estos buscan con empaño.»

«Parrciéoso ra la iccadaii'Wd una cosa nueva, envuelven en un mismo ód-.o tedo loqul ea nuevo. Estás, pues, e n guerra con su siglo y can su país, y en cada una de 1 » cplnioMI Huí «a él se nrofesau ven un eunmigo necesario de la fé.»

«Etta no debiera ser en nuettrea días el estalo natural da loa hombres en materia de

rtli-gio».» L «Existe, oue«, entre nosotros una c«us« eccidental y p rticuUr, qne implie al espíritu bo-l

•mano seguir se pendiente, y lo arrastra mas allá de los Heniles dentro de ios cuales debltnl

• nat'valiuen!* detenerle.» I «Yo e«»;.-y profundiments cn^encldo de que que esta csusa psrficulsr y accidental es lil

» U P i o n Intim* leí ia oolltic» y de U r-ligion.» • i

I

• Los incrédulos de Europ» pe.'siguíti á los cristhnrs como ennmigps poiili-,oa mas Ufíl atiue eómo adveriarlcs reiigioeos. Odian la fé como la opiuion de un pai tido, mis que cniol kttiia crponcia nrrooei, y r e c h - z m en el Sioerdote msnos al representante de Dios ( U a U v f

»go del Poder.» I «En Europa el Cr^stianistno ha permitido que se le unisrc iitimameote 4 les P-íiores m ^ l

i l i srra. Hoy es'cs Pederé^ ca^n, y él estl como aepulicdo bsjo sus escombros. Fsuavivjil «quien se quiso unir á auertoS. Cortid las ligaduras que le retienen, y sa levantará » r

. Unoro lo que seria necesario hacer para devolver al Cristisn'smo ds Europa 'a eE"rgi« íN ala inventad. Dioa solo podrá hacerla; mas á lo manos depende de los hombres dej >r á la soto de todas l i s fuerraa que coeserva todavía »—He dicho.

CRONICA CeMERCIAL.

Embarcaciones entradas en este puerto desde el anochecer de ayer al medio dia de boj-Da Marsella en 40 horas, v«por Andalucía, de 191 t»., c. don Enrique Leal, con 150 sacost cu'a á los saftores Garrig», Mn't ñ» y Tny, 21)5 id. azufra á don Amadeo Cros, 200 id. id. 1/ barricas CÍO. uro á don Pedri Ariia, SpO sacas azufra á los señores Camp hermanes, 50 o*;*' a lo.) sañorea Mart gnole, 100 sacos habicttuelas á do^ Raldtmero Luis, LOO id. i i . i U sen" viuda de García, 50 ojas azúcar á don Jum Sanpere, 200 steos úiaiz á la órden, 7 otros efe a varios señores.

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351

Inglesa.—Oe Cardil'f en 8 ár., vapor Regalía, de 607 ta., o. Furíls, con 992 toneladas carbón

i oa neHores Brfill é hijo.

Itillan». - De fiénova y eacalcS en 2B ds., bergantín Cíam Baltlata, de 380 ts., c. Peragallo, aa mioeral d.; transito.

Frantest.—be Uraa eu 19 df., bergantín Hathien, da 153 ta., c. Fournier, con '2K) ts. trigo i la órden.

SRONIGA RELIGIOSA.

Don Jaime Castells y Mas

ha fallecido á la una y inedia de esta madrugada.

(E.

P.

D.)

Su esposa, hijos, hermana, hermana política, sobrinos, primos y d e m á s parientes, suplican á sus amigos y conocidos le tengan presente en sus ora-ciones y se sirvan asistir hoy sobado & las tres de la tarde, á Is casa mor-tuoria, sita en San Gervasio, ca le del Colegio, n ú m e r o 39, para trasladar el cadáver al cementerio general de esta Ciudad.

NO SE INVITA PARTIG D L A R M K N T I .

ORONICA 6 F I 6 I A L I

—Ayuntamiento eonatítucionad ds Barcelona.—MATADERO.—Relación d é l a s resss m o s i -I üi. :u peao é importa de los derechos que han adeudado los dita 22 v 2S diciembre, k saben I KATADKBO PBBUCO.-Dla 23.—Bueyes, 27.—Vacas, 45.-Terneraa, 32.-Carneroa, 739 — Ijuehoa cabrios, íS.-Gahritoa, 94.—Corderos, 16.—Total da cabezas, 979.—Peao total de l l u mismas, 21,74') ks. —Derecho, 24 cént.—Recandacion, 5,097 paaeiaa 60 cíotlasca

—Deapi-ll«s 516 ret-el»a (<0 oéniimria.—Total, 5,014 pesetas V) cóntimos.

MATADERO DE CERDOS.—Di» 22 - P o r 196 Cerdos & 20 pesetas uno, 3,920. Total gnneral, 9,531 pesetas 40 céntimos.

—Alea d<a constitucional de Barcelona.—Don Sebastian Ramogoaa, propietario de Nuel-|va«. s< servirá presentirse en la secretarla de esta Alcaldía, donde se lo enterará de cierto

lunntoque con urgencia lo interesa conocer. —Raí celosa 31 diciembre 1875.—P. O.—El

srcre-Itario, José do Toda. d I ""AdmlLiatricion principal ds Correos de Barcelona.—Un paquete de correspondencia

loetpar.iiado por l i A4minlatracion da Marsella para esta el dia 28 de julio último por el vapor

I «Guadal. 1 , ui^'u b.a sufrido ex ¡lavo, sido hall do en la Aduana de esta capital, á cuya lonclni, lúa a parar, >¡a duda por au mala rotulación,

I i-o quo so anuncia en loa periCdicos para conocimiecto de laa personas á quienes pueda i n •

Iteresir. Barcelona 13 de enero de 1870.—El admibiatradcr, Antonio Blanco. c

I —Sociedad Económica Barcelonesa de Amigos del Pais.—Enta Corprracion ce'ebrari se-¡•Wa oretnaria el sfbado 15 del corriants S laa 8 de !a nochs , en el lecal accatumb'sdo. Lo que ••«aaancia ae conformidad a lo prevenido ea el articulo 32 del Reglamento. —Barcelona 14 de Muero da 1876.—El socio secretario, Francisco Víla y Lleljós. g

I —Anminiatracíon Económica de I * provincia de Barcelona.—Sección administrativa.—Diez-P ^ . - D J U Jo.'é Sifont, Ó sus herederos, cesionario del saáor conde de Santa Coloma, y el

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apoderado del Eximo. aeEor duque de Alba, se servirán presentarse en esta Adninistracioe Ecosómica para entregarles el traslado de una RÍ»! Arden remitida por la Dirección genetil de la Deuda pub'.ioa.—Bavaolona 14 enero de 187C. —El jete económico, Antonio Lak. t

—Academia de TaquigriDa de Barcelona.—Habiendo acordado esta Academia inaugurar», lunes 17 deleorzienta el cursillo anual de Taquigrafía, se participa al público que dicho acto tendrá lugar á las ocho j media de ia noche, en el local de la misma, calle de Brosoli, número 3, piso 1.*, Colegio Mercantil, en dondfl queda abierta la matricula corresoondiante hasta di-cho dia. Barcelona 11 de enero de 1876.—P. A. d3 la A. de T.—El Secretario, Emilio Sayé. a

SQRREO NACIONAL:

Madrid 13 de enero.—De la • Correapondencia de EspafiaJ.

Por el rainiatsrio de la Guerra de Francia ge ha diapuesto que los soldados puedan salndir I ft S'js superiores con la mano Izquierda. Antes no podían hacerlo mis que con la derecha. Mo Bira extraSo qae en vista de asta coacesion haya algunos qus saluden con laü dos manos.

—Se han establecido eo París comisiones loca ea de vigilancia sobre el trabajo de Ion ni' fio» en las man^facluras. Es un cargo gratuito impuesto & los vecinos heneados que deslgca el prefecto. Los niños emoleados en 237 industmias de Parí», «soierdeo fc 25,510, y el núrsero | da establecimiento? cometido á la vigilaacia es de nnos 10,000. L« joyería, lea pipetes pinta-dos, la costura, la impraota, la ebanistería y zapatería sen las que mas niños emplean.

—He aquí algunos datos curioíoa acerca de los presupuastoa militaros d* varios o»lfes da I Eorpp»: Austria Hungría, qna tisna 35 «il'OBes da habitaoto? y na territorio de 11 000 mil1»! cuadradas «rar^ei on e! rio»» de gnnrre 270 mi loaos da fran«*«", Alemania, 41 miUonn* de h». bitatitm y S.OOOmi'las cuaiírodas, •mplea 565 Bmlaaecj Ra»»», 70 millenea de habitantes f

103,000 millas cuadradas, emplea ?67 nillioaag; Italia 26 millones do bíaktHntM ]1 5,006 mili i

cuadradas, gasta 2*5 m'üloiWí; Francia, 36 millones de habllas-tos y 9 000 millss. consame 4Si inm*06s; IdgUtarrai 31 millonea de h»bi»¿Bte« y e.^iO millas ««adnida*, gMta 628 millones, f Turqoii», 9 millones de lubitaates y 608 millas cuadradas, emplea 125 mlLcnes.

Eo el astado q í a reoroduc raos no i g u r a Esosñ», Bélgica y Porlagal. SI tol-1 de miUon=i empleadoa per las siote meacionadas nacionaa con medios de destrucción «síieade á 3 OS. La poblasioa toial es de 254 miUuBog de habitantes, cjrreaponditndo, por lo tanto, & cadi «no 12 francos y 'H céntimas.

—Comobakiamos aunociado, anoche sereunUroo an cisa del sefior Mirtos algunos hom-bres importantes del oarlido radical citados por dicho saQor, para o i r í a lectura del

docu-mento qu? ha radjetado y recojer Qrmia.

Después de una breva disen-loa, el documento en cuestión fué aprobado por nnanim aii, siendo, pues, falso lo que asegura eata m s ñ a n a el «Popular,» de que ofrecí ó alguna* ditiinil-1 tadesii v í r i r s que no eítabnn conformes con el fondo que entr»ñ»ban, nnos por pocoavan-redo y por demasiado loa otros.

El documento pai-íce, frejun nnestras noticias, que no v e r i la lu? pública hasta tanto que | llevo todas las firmas IJOP oe ha propuesto su autor.

AUuiios da los quT h* bion sido citados no pudieren asistir por falta de salud.

—La «Ibertat dica qae c i n la protesta qne hace el psrtido constllncional ante el | p a í s , q u e d a r á n completa y abaolutameate á cubierto de toda responsabilidad antee! porvenir y aute la h í s t - T i a .

—Eo el congojo desyer q u a d ó aprobado el decreto que hemos anunciado del «enor I ministro de firacia y Justicia para restablecer los registros que han sido devoridcM por el incendio en Barcelona y Sevilla. - - J I

—Un marinnro francés que da resultas de un naufragio se refugió en unaisiadel Oseanía y ha parmanesido 18 afioa entre salvajes, ha regresado á Fraania y ha sido re-1 cibido en su pu'iblá con grandes demostracioDes de j ú b i l o . E i infeliz había olvidado I su idioma y poco á paco va raoordSndolo y contando aventuras vorprendentes. VaeV\ criter pnrisleose ha ido á pasar con é l una temporada y se propone referir l a historl« | extraordinaria do este salvsje de ocasicn.

T e l é g r a m a s comerciales comunicados por los senores Canadell y Villavechia. Liverpool 14 de pn^ro.—Ventas de algodón, 8,000 balas—M-srcído enealmada^ Orlesns, 7 l i l 6 . — U p i a n d . 6 3|4.—ParBanibuco, 7 3iS.—Arribos de la semana, 4S,0W|

bilns.—Ventas para el consumo, 63,060 i d . I Nueva York 13 de enero.—Algodón, 13 li8.—Oro, 12 7i8.—Arribos, 135,000 baiu

en 6 dias.

Barcelona.—Redacción y Administración de LA IMPRENTA, plaza Real, 7, bajo.

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