biblikka
Estudio y respuestas de la Palabra de Dios
Carta a los Filipenses:
“La cenicienta del Nuevo Testamento”
Enseñanza 035: Filipenses 11: Estado de situación (3:12-16)
Ha sido mucho lo que ha dejado Pablo en su deseo de conocer a Cristo. Las palabras del párrafo pudieran dar la impresión de que Pablo ha “terminado su carrera”, que ya ha logrado su propósito de conocer a Cristo totalmente. Para despejar esas dudas, escribe lo que sigue.
Este breve párrafo cumple dos propósitos importantes. Por un lado, deja claro que, a pesar de su empeño y logros en su vida de cristiano, Pablo no ha “logrado”
el final de su meta. En segundo lugar, y en la misma línea, contradice a los que influenciaban la iglesia diciendo que ellos sí “habían llegado”, esto es, que su estado de vida cristiana era uno de perfección “en el aquí y en el ahora.”
Este no era un problema único en Filipos. Varias veces surgió de manera parecida en la iglesia del primer siglo. La expectativa del regreso de Cristo (parousía) por momentos ralló en estos extremos.
El hecho de que Pablo no hubiera “llegado”, sin embargo, no le impedía seguir persiguiendo su meta, porque para esto había sido “asido por Cristo” y “llamado de Dios.”
Veamos cómo conecta nuestro párrafo con el anterior;
8 Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo, 9 y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe; 10 a fin de conocerle, y el poder de su resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte, 11 si en alguna manera llegase a la
resurrección de entre los muertos.
12 No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo...
(Explicar)
Y ahora, nuestro pasaje:
12 No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús.
13 Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa
hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, 14 prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. 15 Así que, todos los que somos perfectos, esto
mismo sintamos; y si otra cosa sentís, esto también os lo revelará Dios. 16 Pero en aquello a que hemos llegado, sigamos una misma regla, sintamos una misma cosa.
12-14 Es un poco difícil determinar el objeto al que se hace referencia (“no que lo haya alcanzado”) y sobre esto hay variedad de opiniones entre los
comentaristas. Pero con toda probabilidad es una referencia a lo que Pablo acaba de expresar en vv. 9-11: Su conocimiento “pleno” de Cristo.
Coemencemos por aclarar lo que Pablo NO quiso decir. Sus aseveraciones no eran un indicio de que había arribado a un estado de perfección en su conocimiento de Cristo o que había alcanzado la resurrección de los muertos. (Ambas alternativas son posibles en el contexto. Lo importante, me parece, es el carácter escatológico de ambos que es obvio en vv. 9-11 y que armoniza con las ideas de al menos algunos de los falsos maestros con influencia en Filipo.)
Aquí Pablo se vale, como en otras ocasiones, de una imagen que toma prestada del atletismo, específicamente de una carrera. El esfuerzo, la mira en la meta, el premio y la llamada a recibirlo son imágenes claras de los juegos panhelénicos.
Pablo, en su determinación por seguir adelante y conseguir su meta, ha decidido olvidar completamente lo que queda atrás, seguramente refiriéndose a lo que de sí mismo ha narrado en los primeros versos de este capítulo. Pablo “olvida
mientras corre” (OB, 429). Errores y éxitos tienen que dejarse atrás cuando se desea seguir adelante. El objetivo se encuentra adelante. Pablo está en la carrera
- porque ha sido puesto (“asido”) en ella por el Señor
- y continúa en ella por el llamado que a él se le ha hecho de arriba (por Dios en Cristo).
- se esfuerza grandemente hasta lo último, y, como un corredor en la recta final, tensa cada músculo y, con mirada fija en la meta, “hecha el resto”.
(epekteinomenow - estirarse hacia el frente, como el corredor que se acerca
—viendo— la meta.
Aplicación: Una cosa...
Hay gente muy hábil y capaz. Pueden enfrentar tareas diferentes de manera simultánea, dividiendo su mente para poder atender diferentes asuntos al mismo tiempo. Ésta es una destreza apreciada en un mundo de velocidad vertiginosa y de interés absoluto en capitalizar cada minuto.
Todos queremos “sacar el máximo” de la vida, aprovecharlo todo. Y a veces pensamos que, para lograrlo, la clave es una vida de actividad frenética.
Asumimos que mientras más hagamos más disfrutaremos. La carrera por la autorealización y el éxito se convierte en una en la que nuestra mente y corazón tiene que ocuparse de muchas cosas a la vez.
Para Pablo, el objetivo de su vida era más sencillo. Ya nos ha dicho cual es su meta (conocer a Cristo). Ahora nos dice cómo lo hace. Y su respuesta nos sorprende: “Una cosa hago...”
Esta frase nos obliga a recordar a María, la hermana de Lázaro. Sentada a los pies del Maestro y recriminada por su hermana por causa su inactividad, es alabado por el Maestro. ¿Sus palabras? “Sólo una cosa es necesaria... María escogió la mejor parte, la cual no le será quitada.”
De los cientos o miles de oportunidades disponibles para él, Pablo se contentaba con una. Seguro de adonde quería llegar, escoge el camino más directo: “Una cosa hago...”
La multitud de objetivos disipan el esfuerzo disponible. No es inusual intentar tantas cosas que ninguna se logra. Pero el que intenta “sólo una” tiene buenas probabilidades de conseguirla.
Volvamos al texto.
14 prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. 15 Así que, todos los que somos perfectos, esto mismo sintamos; y si otra cosa sentís, esto también os lo revelará Dios. 16Pero en aquello a que hemos llegado, sigamos una misma regla, sintamos una misma cosa.
brabeion - el premio para el vencedor en una competencia (ver I Co. 9:24)
¿No sabéis que los que corren en el estadio, todos a la verdad corren, pero uno solo se lleva el premio? Corred de tal manera que lo
obtengáis.
15 Lo que Pablo dice de sí mismo (y de otros) en este verso parece contradecir lo que ha dicho ya sobre su carrera incompleta en los versos anteriores. Por esto, se nos presentan dos posibilidades interpretativas.
En la primera, en una probable referencia marcada por la ironía, Pablo se dirige a aquellos que piensan que ya son “perfectos” (maduros, teleiow - Perfecto,
maduro) pero que continúan con un punto de vista diferente al de Pablo y los hermanos en la iglesia.
En la segunda, la que yo prefiero, Pablo habla de la madurez cristiana (no perfección escatológica como en vv. 12-14). Es ésta la que permitirá continuar juntos (ver el v. 16) estando de acuerdo en las cosas más importantes, pero no necesariamente en todo. Esta segunda opción parece enmarcarse mejor en el contexto general de la carta.
Aquí, de nuevo, Pablo aboga por una unidad aún sin unanimidad, mientras el mismo Señor “revela” lo que falta en los aspectos menos críticos de las
diferencias de opinión. Esto no representa una puerta abierta para que todo el mundo “crea lo que quiera” sino un nuevo llamado a la unidad que nace de la humildad y del modo de pensar de Cristo (ver 2:5 en el que aparece la misma fórmula: toyto froneite — “haya en vosotros el mismo sentir” 2:5, y toyto fronumen, — esto mismo sintamos 3:15).
Es importante, para aquellos que usamos la Versión Reina Valera, entender que lo que se persigue aquí no es una unidad de “sentimiento” sino de actitud. La
palabra usada (fronumen - de froneu), es importante en esta carta (1:7; 2:2 [X2]; 2:5; 3:19; 4:2, 10 [X2]) y tiene que ver con una disposición o dirección general en la vida (OB). Todo parece indicar, entonces, que en lo principal se había logrado una “unanimidad”. Lo que Pablo pide es que siga buscando en esa dirección y que Dios, en su momento, revelará lo que haga falta para completarla.
Las etapas en que los diferentes corredores se encuentran son diferentes entre sí, pero eso no debe ser impedimento para que, con la luz que cada uno haya
recibido, se mantenga un espíritu de unidad esperando que, en lo que no hay unanimidad, un día nos sea aclarado.
16 El verso lee literalmente: “Sin embargo, debemos caminar de acuerdo con aquello que ya hemos conseguido.” El significado es un llamado (de nuevo) a la unidad consensuada.
stoixein - caminar en línea, marchar en orden de batalla. (Gal.
6:16)
Y a todos los que anden conforme a esta regla, paz y misericordia sea a ellos, y al Israel de Dios.
12 marzo 2012
San Juan, Puerto Rico
Jose R. Martinez-Villamil MD. MDiv.
