Sinopsis
Felices para siempre es más fácil decirlo que hacerlo....
Sarah Matamoros no puede quejarse. Después de emigrar desde México cuando tenía nueve años de edad, está contenta con la vida que ha hecho por sí misma en la soleada San Diego. Ella trabaja duro para su madre en el servicio de limpieza durante el día y pasa las noches con su peculiar hija de ocho años de edad, Grace.
Desde una edad muy temprana, Emory Owen tenía varios conceptos perforados en la cabeza. El éxito lo es todo. Ser la mejor.
Luchar su camino a la cima. Las expectativas eran altas en el hogar Owen y el mundo estaba al acecho. Nacida en una familia de la alta sociedad, Emory nunca deseo nada... al menos nada que el dinero pudiera comprar. Cuando conoce a Sarah, contratada para ordenar la casa de su madre, su vida estéril repentinamente se llena de color.
Pero cuando la emocional logística combinación de dos mundos muy diferentes resulta ser demasiado, un giro terrible de los acontecimientos estimula la pregunta: ¿Si el amor existe, puede realmente encontrar un camino?
Capítulo uno
Lavar la ropa sucia nunca había sido divertido. Sarah agarró la cesta de ropa a su lado con su mano derecha y liberó su cabello de la cola de caballo con su izquierda. Dando a su pelo rizado una sacudida efectiva por lo que caía en ondas al azar sobre su espalda, ella procedió a bailar por el pasillo de su apartamento de dos habitaciones por todo lo que valía la pena. Era media mañana y tenía el lugar para sí misma, y vaya si ella no iba a trabajar por la duración de la canción. Se pavoneo agresivamente al compas del estribillo de "Brick House" y oscilo hacia adelante y luego hacia atrás a través de la segunda estrofa, añadiendo su propio sabor latino. Ella se sacudió por completo en la distancia restante antes de saltar en el sofá, desechando el cesto de la ropa, y cayendo de rodillas, terminando el número como la campeona que sabía que era. Internamente se aplaudió a sí misma, no necesariamente por la destreza, pero por su compromiso serio. Por último, recogió el cesto de la ropa y con calma completó su camino hasta la lavadora.
Era un buen día y Sarah estaba disfrutando el ritmo pausado que se había establecido para completar las tareas mundanas en su lista de tareas pendientes. A las afueras de la pequeña sala de lavandería, se enderezó al ver la foto de Grace de la escuela primaria en la pared y sonrió mientras la imagen de su hija, dos años más joven entonces, le devolvió la sonrisa.
Sarah hizo una lista mental de todas las cosas que necesitaba para llevar a cabo antes de que terminara el día y gimió por dentro cuando reconoció el tap-tap-tap de pequeñas gotas de lluvia sobre la ventana de la sala de lavandería. De acuerdo, tendría que hacer algunos ajustes en su día. Por suerte, todavía había varias tareas más alrededor de las casas que podía desprender de la lista, seguido de un corto viaje a la tienda de
comestibles. Suspiró profundamente, decidiendo que con el fin de ser práctica, probablemente debería coger el ritmo un poco. Menos baile, más trabajo.
Ella golpeó el botón de inicio en la lavadora, balanceándose en su camino a la cocina, y vertió su segunda taza de café esa mañana. Jamás podría ser demasiado café. En algún lugar en el fondo de su mente, registro que el teléfono estaba sonando. Se volvió ausente en su dirección, interrumpiendo su disfrute de la cálida y estimulante cafeína.
"Hola", respondió ella alegremente. Siempre fue una persona mañanera. "Sí. Hola. ¿Puedo hablar con Sarah Matamoros por favor? "
"Esta es Sarah." Miró el nombre en el identificador de llamadas. Era una llamada de la escuela de Grace, lo cual la hizo hacer una pausa. Ella le había dejado en la escuela hace cerca de dos horas. "¿Está todo bien con Grace?"
La tranquila voz femenina vaciló. "Eso es lo por la que la llamo Señora Matamoros. Grace tuvo un incidente en su clase esta mañana y perdió el conocimiento durante varios
Sarah se enderezó, su mano ondeo a su corazón y su estómago cayendo como si fuera una señal. "¿Qué pasó?"
"No estamos exactamente seguros. Su maestra mencionó que había estado más tranquila de lo habitual la mayor parte de la mañana, pero ella asumió que Grace solo estaba
cansada. Del mismo modo los estudiantes comenzaron a trabajar en su asignación de ciencia, Grace se levantó para afilar el lápiz y se desplomó frente al afilador. Ella no golpeó nada mientras caía, pero tardó un par de minutos para despertarla y EMS fue llamado. Ella está ahora alerta y comunicativa, pero todavía un poco confundida acerca de lo sucedido. Los paramédicos han expresado su preocupación y les gustaría
transportarla a Mercy General para su posterior evaluación. ¿Puede encontrarse con ellos allí? "
"Por supuesto." Sarah miró a su alrededor violentamente por su bolso. "Me voy ahora. Gracias. "Ella colgó el teléfono justo cuando su mundo una vez estable parecía inclinarse sobre su eje. Se agarró fuertemente de la encimera para sostenerse contra el ataque, su corazón listo para saltar de su pecho. Después de unas cuantas respiraciones profundas, su visión se aclaró una vez más y la habitación se enderezó.
Mientras se abría camino a través de la puerta de su apartamento, pensó de nuevo a principio del día, escudriñando cada movimiento de Grace con una nueva perspectiva. Había estado muy bien unas horas antes en el coche de camino a la escuela. Habían hablado de sus planes para el verano y la posibilidad de que Grace asistiera a un
campamento de la YMCA ahora que ella estaría en cuarto grado y mostrando signos de responsabilidad. Había estado tan emocionada. La imagen de la cara de Grace
encenderse con la noticia jugaba como una película en la mente de Sarah. Entonces, ¿qué había salido mal? Su lado racional entendía que Grace podría haberse desmayado por algo tan simple como no haber comido un desayuno decente. Habían estado en un apuro y ella no había examinado si Grace en realidad había comido el cereal y el jugo que había establecido para ella. Pero la madre en Sarah temió lo peor, evocando todo tipo de escenarios aterradores. Llevó la llave en el contacto y aceleró el motor, haciendo
fácilmente ochenta y cinco por la autopista.
*
Estaba lloviendo afuera. Difícil. Emory Owen pudo escuchar sin piedad el golpeteo en el techo y ver las gruesas gotas mientras corrían delante de la ventana un poco manchada mientras miraba. Era el tipo de lluvia que le daba ganas de permanecer en el interior, se acurrucó bajo la comodidad de su manta de chenilla favorito, una taza de té de menta caliente en la mano. En su lugar, se sentó en medio de las incómodas sillas de plástico azul, la fuerte iluminación de las fluorescentes y unas viejas revistas en la sala de espera de la Mercy General.
Ella lo hizo y no lo hizo. Emory se había girado completamente a la mujer mayor de bata blanca que había dicho su nombre. Ella parpadeó, tratando en vano de aclarar su cabeza. "Lo siento. ¿Le importaría repetir eso? "Entumecida. Con muy buena razón, se sentía entumecida.
El tono de la mujer se suavizó. "Mi nombre es Dra. Turner y yo estoy a cargo del caso de su madre." Emory aceptó la mano extendida y se quedó mirando a la mujer, al ver al azar los parches de gris en las sienes. "¿Por qué no nos sentamos?" Emory asintió en
acuerdo, tratando de leer el rostro de la doctora. "Hemos llevado a cabo algunas pruebas en su madre. Fue un derrame cerebral masivo, del mismo modo que se pensaba
originalmente. Por desgracia, Sra Owen, su pronóstico en este punto no es muy prometedor y hay algunas cosas que tenemos que discutir”.
Emory asintió comprendiendo, de repente muy consciente de los sonidos de la habitación---el zumbido de las luces del techo, el pitido constante de una máquina no identificada detrás de la estación de enfermería, el chirrido de la zapatilla de deporte del custodio en el suelo de vinilo a sólo unos metros. Todo parecía mucho más fuerte.
¿Por qué?
"El golpe ha causado en su cerebro una gran cantidad de trauma. Lo que esto se reduce Sra Owen, es en una profunda pérdida de la función cerebral ".
" ¿Ella tiene muerte cerebral? ¿Es eso lo que estás diciendo? "
La doctora asintió. "Lo es. Su corazón y los pulmones actualmente están sostenidos por medios artificiales, pero- "
"Entiendo. ¿Puedo verla? ", Preguntó Emory.
"Por supuesto. ¿Hay alguien a quien podemos llamar por usted? " "No, no hay nadie. Voy a manejarlo. "Y lo haría.
*
"¿Un bloqueo cardíaco?" Repitió Sarah. "No estoy segura de entender. ¿Qué significa eso doctora ...? "
"Turner," la mujer suministro. Tenía unos ojos amables. "Un bloqueo cardíaco se produce cuando los impulsos eléctricos que indican que el corazón lata no transmiten
adecuadamente. El electrocardiograma mostró que el bloqueo cardíaco en el caso de Grace está produciendo una bradicardia o ritmo muy lento, que creemos que fue la causa de su pérdida de la conciencia de esta mañana".
Sarah se inclino en la pared para apoyarse. No le gustaba las implicaciones de lo que estaba oyendo. "¿Es esta una condición que amenaza su vida?"
"No, no lo es por lo general. Grace tiene suerte. Ella no trata con un bloqueo completo, sino más bien un bloqueo de segundo grado. Los impulsos de su corazón se retardan, desacelerando su ritmo, pero ellos no están bloqueados por completo. "
Sarah sacudió la cabeza lentamente. "¿Por qué no recojo de que algo estaba mal?" La Dra. Turner puso una mano tranquilizadora sobre el hombro de Sarah, sumergiendo la cabeza para mirarla a los ojos. "No te rindas. Sin un episodio como éste para solicitar un electrocardiograma, el bloqueo no se habría presentado en un chequeo normal. Lo más probable, es que Grace nació con esta condición. Muchas veces con síntomas como fatiga, falta de aliento, sensación de un aleteo en el pecho, los niños no saben cómo describir lo que sienten y asumen que están simplemente cansados".
Tenía sentido, pero Sarah todavía se sentía como si la intuición de madre le había fallado de alguna manera. Debería haber sabido que algo estaba mal, debería haber captado el problema. "¿Que hacemos ahora?"
"Bueno, el primer paso es conseguir que te establezcas con un cardiólogo pediátrico, que me imagino desee realizar algunas pruebas más. Hay una posibilidad de que Grace pueda requerir un marcapasos en algún momento, pero eso podría ser algo que el médico querrá esperar a realizar, como Grace no ha exhibido muchos síntomas hasta este punto". "¿Qué necesita ella mientras tanto? ¿Medicación? ¿Cómo podemos evitar que esto
suceda de nuevo? "
"Por ahora, seguirá de cerca su actividad física. Loa niños con bloqueos del corazón aún pueden llevar una vida físicamente activos, pero su resistencia es generalmente más débil. Grace me informó de que había estado corriendo en el patio de recreo antes de la escuela, y eso podría haber contribuido al colapso durante la clase. Ella puede tener que echarse un poco hacia atrás".
"No has pasado mucho tiempo con mi hija."
"Voy a dejar el trabajo duro para usted entonces." La Dra. Turner palmeó el hombro de Sarah y comenzó a caminar por el pasillo. "La enfermera le traerá un poco de literatura, junto con sus papeles del alta, y yo voy a conseguir una lista de los cardiólogos de referencia. Vuelvo en un rato. Y ¿señora Matamoros? "
Sarah se enderezó. "Sí." "Trate de no preocuparse".
Sarah tragó saliva y asintió cortésmente, conociendo la imposibilidad de esa petición. Una vez sola, se tomó un momento en el pasillo y exhalo lentamente antes de empujar la pequeña puerta de la sala del hospital. Grace giró la cabeza sobre la almohada y le sonrió. Ella había llevado el cabello recogido en una cola de caballo a la escuela ese día, pero estaba abajo ahora y enmarcando su delicado rostro con suaves ondas. "Entonces, ¿qué está pasando aquí, monstruo? ¿Ya has corrido a las enfermeras desde la última vez que te vi? "
"Nop. Un perfecto ángel. "Pero la sonrisa no llegó a sus ojos.
Sarah se sentó junto a Grace y se inclinó sobre el espacio entre ellas, besándola en la frente y alisando su cabello. "Dio miedo hoy, ¿verdad?¿ Cuando los paramédicos llegaron? "
Grace la miró a los ojos. "Un poco. No sabía lo que había pasado y yo estaba confundida. Pero…"
"¿Pero qué, mija?"
"Es sólo que no quiero que estés molesta nunca más. Llorabas cuando entraste antes, y no me gusta cuando te hago sentir triste".
El corazón de Sarah dolía justo en el pensamiento de Grace pensando más en sus sentimientos en este escenario. Siempre había sido una sensible y cuidadosa niña, y por eso, Sarah estaba agradecida. Ella no sabía lo que haría sin Grace. La idea le pasó por encima como un camión Mack. Empujó la emoción reunida a un lado sin embargo, y se centró en poner buena cara. Ella era la adulta, y fue a ella para obtener a través de lo que pudiera estar por delante. "Bueno, no estoy molesta más. ¿Ves? "Ella cruzó los ojos juguetonamente y Grace se rió. "Hablé con la doctora Turner y dice que vas a estar bien. Sólo hay que tomarlo con calma hasta que resolvamos todo esto. ¿Trato? "Sarah
extendió la mano.
"Trato." Grace aceptó el apretón de manos, su sonrisa genuina esta vez. Sarah se puso de pie. "¿Hambrienta?"
"Sedienta. ¿Puedo tener un Sprite? "
"Veré lo que puedo desenterrar. Creo que vi una máquina expendedora en la siguiente sala. "Mientras caminaba, se recordó de las palabras reconfortantes de la doctora Turner. Este diagnóstico no significa Grace no podrá vivir una vida normal y saludable. Ellas simplemente van a tener que ser un poco más cautelosas y seguir lo que ordena el cardiólogo trazado para ellas.
Se detuvo en la máquina expendedora, esperando su turno detrás de una mujer bien vestida intentando conseguir que la máquina aceptara su billete de un dólar. En su quinto intento sin éxito, la mujer juró en voz baja. En su sexto, se puso en marcha un asalto físico contra la máquina, golpeándolo repetidamente con la mano abierta y patadas al
mismo tiempo. Sarah observó con sorpresa antes de entrar tentativamente. "¿Disculpe?"
Si la mujer no la oyó sobre los golpes o estaba eligiendo no reconocerla era poco claro, pero Sarah siguió adelante. Dio un paso hacia adelante, ahora de pie junto a la máquina y su atacante. "Hey, hey, tómalo con calma", y finalmente, "¡DETENGASE!"
La mujer se volvió y miró a Sarah, parpadeando por la sorpresa. Ella echó un vistazo a su alrededor, pareciendo hacer un balance. Sus manos cayeron abatidas a su lado y dio un intencionado paso hacia atrás de la máquina, moviendo la cabeza una vez. "Lo siento," dijo en voz baja. "Ha sido un día muy duro."
Ella se volvió para irse, pero Sarah puso una mano en su antebrazo, deteniéndola. La expresión de los sorprendentes ojos azules de la mujer era inquietantemente vacía. Ello registró profundamente en Sarah, y se preguntó lo que la mujer debe estar pasando. "Espera," dijo suavemente. "Tengo algunos sectores adicionales." Ella se acercó a la máquina y deposito tres monedas en la ranura. "¿Qué te gustaría?"
"Una Coca-Cola Light sería magnífico."
"Ya viene." La mujer aceptó la bebida fría y la levantó débilmente. "Gracias". Luego extendió su billete de un dólar a Sarah por el pago.
"No es necesario", respondió Sarah, compro el Sprite que Grace había pedido. "Espero que su día se ponga mejor."
Sarah pensó en la mujer y la mirada de profunda pérdida en sus ojos cuando se dirigía a la habitación de Grace y se dio cuenta de lo afortunada que era. Ella prometió en ese momento que iba a atesorar todos los momentos que tuvo con sus seres queridos y contar cada una de sus bendiciones desde este momento en adelante. La vida era demasiado valiosa como para no hacerlo.
Capitulo dos
"Trevor, ¿tienes el paquete de la agencia listo para mi presentación con 3M?", Preguntó Emory. Debería haber estado en su escritorio hace horas.
"Creo que su cita con 3M fue la próxima semana", dijo su asistente. Se parecía mucho a Bambi en los faros, pero a ella no le importaba.
"Ellos se trasladaron hasta el día de hoy. Lo puse en mi calendario de Outlook. ¿No lo ves? "Emory dejó caer el archivo de 3M en su escritorio con un ruido sordo. "Te necesito para mantenerte al día."
El alcanzó el archivo. "Puedo tenerlo listo para usted en treinta minutos."
"No permitas que esto suceda de nuevo. No tengo tiempo para tus errores. "Con eso, hizo su camino de regreso a su oficina y cerró la puerta con fuerza. Sintió una punzada de culpa por morder a Trevor. Tenía unos estándares elevados para sus empleados, sí, pero no era su naturaleza nivelarlos tan abiertamente. Ella resto importancia a su
comportamiento como un síntoma de la tensión por la que estaba bajo y se volvió de nuevo a su monitor para elaborar las estrategias para su presentación inminente.
Lucy Danaher entró en su oficina a un cuarto después de las doce y se sentó a un lado de su escritorio. "Hola. ¿Cómo va esa presentación? "
"Va a llegar allí."
"Em. ¿Em? Hola, estoy aquí. ¿Podemos hablar un momento? "
Emory hizo una pausa, odiando matar el flujo de su energía creativa, pero se volvió hacia su amiga y vicepresidente de su empresa. "¿Qué puedo hacer por ti, Luce?
"Puedes decirme cómo lo está haciendo, para empezar."
Emory se encogió de hombros con indiferencia y sonrió. "Estoy bien. Si tan sólo pudiera cerrar este acuerdo, sería mejor".
Lucy entrecerró los ojos y se levantó, cruzando los brazos y yendo alrededor de la mesa. "Sabes que no es de lo que estoy hablando. Emory, acabas de perder a tu madre.
¿Seguro de que debes volver al trabajo tan pronto, blandiendo tus armas? Estas han sido unas difíciles dos semanas para ti, y sé que nadie podría pensar menos de ti por alejarte por un tiempo. Puedo manejar el acuerdo de 3M y podemos filtrar algunos de sus clientes más pequeños para los ejecutivos de alto nivel de la cuenta".
"Gracias, pero en realidad, estoy bien. Volver al ritmo regular de las cosas es lo que necesito. Sé que eres más que capaz, pero esto es mío. "Emory se relajó en su silla en ese momento, un pensamiento se le ocurrió. "Hay una cosa. ¿Me puede recomendar una empresa para ayudarme en la casa? Ya sabes, ¡ir a través de todo, sacar las cajas, y enviarlas, ese tipo de cosas? Va a ser una especie de gran compromiso, y no estoy para ello".
"No hay problema. Vamos a ver... "pensó Lucy por un minuto, mordiéndose el labio inferior de una forma que Emory usualmente encontraba muy atractiva cuando estaban juntas. "Mi madre utiliza una empresa para limpiar su casa dos veces por semana, y sé que ofrecen una gran cantidad de diferentes servicios alrededor de las casa. Ella piensa que son increíbles. Voy a dar tu número a Trevor y él puede arreglar algo".
"Eres un salvavidas, Luce," Emory murmuro con aire ausente. Ya se había girado de nuevo a su monitor de la computadora, sin perder tiempo en su reorientación del proyecto. Lucy suspiró derrotada. "No lo sé."
*
Eran las ocho a.m del martes por la mañana, y Sarah logró empujar para abrir la puerta de cristal de la oficina con el pie, frustrada al escuchar el timbre del teléfono y ver la zona de recepción vacía una vez más. "Clarice, el teléfono está sonando!" En una mano, Sarah equilibraba una caja de productos de limpieza y en la otra una aspiradora recién reparada para volver al armario de suministros. "Clarice! Mis manos están llenas. ¿Puedes
responder el teléfono, por favor? "Al darse cuenta de que Clarice estaba por ningún lado, Sara acomodo la aspiradora abajo, saltó por encima del mostrador, y contestó el teléfono sin aliento. "Inmaculada Home. ¿En qué puedo ayudarle? "El tono de marcar. Suspiró profundamente al pensamiento de la oportunidad perdida. Fue entonces cuando vio a Clarice entretenida desde la cocina al lado del mostrador de recepción, llevaba una pinta de helado, y lamiendo la cuchara.
"Buenos días, Sarah, ¿cómo estás hoy?"
"Estoy muy bien, Clarice, pero lo estaría haciendo mejor si no hubiéramos perdido una llamada. Trata de no alejarte demasiado, ¿de acuerdo? "Sonrió a la anciana
recepcionista, quien no parecía demasiada preocupada. "Mija, ¿eres tú?"
Sarah sonrió al oír la voz de su madre mientras se abría camino por el corto pasillo a su oficina. "Hola, mamá." Ella le dio un beso en la mejilla antes de sentarse en la silla vacía
frente a la mesa. "He recogido los suministros adicionales y la aspiradora tiene el pulverización catódica reparado. ¿Cómo están las cosas hoy? "
"Inundadas". Yolanda Matamoros señaló el libro de citas en frente de ella y suspiró. "Estamos completamente lleno, pero no puedo soportar la idea de alejar los negocios. Creo que podría salir de la señora Jeffries yo misma y hacer su limpieza el Jueves ". Sarah asintió, en absoluto sorprendida por la dedicación de su madre. Es lo que había hecho el negocio de lo que era hoy, con éxito. Esta era la compañía de su madre y ella estaba a cargo, pero eso no impedía que se rodara las mangas y fuera a trabajar en el campo siempre que fuera necesario. Sarah había trabajado para la casa inmaculada desde que tenía dieciséis años de edad y se enorgullecía de la empresa y la dirección de su madre de ella. "¿Qué puedo hacer?"
"Vamos a ver." Ella examinó la hoja de cálculo en su computadora. "Nos hicieron llegar una solicitud para una organización y limpieza de una casa. Podrías tomar éste, mija. Eres muy buena organizando. Puede tomar varios días, sin embargo. "
"Está bien. Grace tiene un campamento de verano durante toda la semana. mi agenda está libre ".
"Supuse que irías, Clarice tendrá que cubrir la oficina sola. El Señor nos ayude. Aquí está la dirección. "Ella la escribió en un post-it. "La casa se encuentra sobre Banning Street en La Jolla. La cita está programada para las cuatro de la tarde ".
Sarah levantó las cejas y silbó bajo cuando estudió la dirección. "Agradable vecindario".
*
Emory se detuvo en la calzada de la casa de su madre a las 04:17 y contemplo la casa antes de su expansión. Ella no había vuelto a la casa desde el día del funeral, y entonces había estado llena de gente. Se sentía extraño sabiendo que cuando entró en la casa esta vez, no habría ninguna Catalina Owen para saludarla con un beso al aire en cada mejilla o charlar con ella sobre la última subasta de caridad o almuerzo de las mujeres llenas de acontecimientos. La realización dejó su piso. Ella nunca había sido cercana con su madre, lo cual era cierto, pero nunca se imaginó un mundo sin ella tampoco.
Más arriba en el camino de entrada, Emory vio un Volkswagen escarabajo rojo y asumió que debía pertenecer al a trabajadora del servicio que había enviado para evaluar el trabajo. Mientras se acercaba, una mujer hispana salió del coche y esperó expectante por ella en la parte superior de la unidad. Ella tenía el pelo recogido en una coleta y llevaba pantalones vaqueros y una camiseta brillante azul de algodón. "¿Srta Owen?"
La mujer extendió su mano y sonrió. "Sarah Matamoros. Siento mucho lo de su madre. Espero que seamos capaces de ayudar ".
"Gracias. Yo también lo espero."
Mientras caminaban a largo de la acera que conducía a la puerta principal, Emory trató de conseguir una idea por el tipo de servicio que la compañía podría ofrecer, y lo más
importante, su nivel de competencia. Ella tenía unos altos estandartes. "Entonces, ¿Tu tomas este tipo de cosas a menudo?"
"De vez en cuando," contestó Sarah. "Ciertamente es algo que somos capaces de manejar, pero tengo que ser honesta con usted, Sra. Owen, esto parece ser una casa bastante grande. No había anticipad- "
"¿De dónde eres?" Emory la interrumpió. "Um, Logan Heights."
"No, quiero decir tienes un ligero acento. ¿De dónde eres originalmente? "
" Oh. Mi familia emigró de Guadalajara cuando tenía nueve años. El Inglés es mi segunda lengua ".
"Bueno, lo habla maravillosamente. No quiero dar a entender lo contrario. Vayamos adentro."
Cuando entraron en la casa, los ojos de Sarah se agrandaron por la sorpresa. La casa estaba más allá de lujosa. La puerta de entrada se elevaba como un cuento de historias en el aire, y una gran escalera se abrió ante ellas sinuosas lánguidamente hacia arriba y lejos. Una amplia sala de estar tenía por delante, decorado impecablemente con telas, tapices, y muebles de aspecto muy caros. Había lámparas, puertas francesas, y todo tipo de cosas que ella le diría a Grace que estaban en la lista de no tocar.
"No estoy segura de lo mucho que su agencia le dijo, pero me gustaría tener la casa vacía y en el mercado el próximo mes. Eso significa que hay una gran cantidad de trabajo que hacer aquí ".
"Tendría que pasar algún tiempo mirando al alrededor antes de que pudiera darle una cita, Sra Owen. Esto parece que podría tomar algún tiempo. Un mes es- "
"Una vez más, por favor llámeme Emory y el dinero no es un problema. Envíame la factura cuando haya terminado. ¿Cómo es este tipo de cosas que por lo general maneja de todos modos? "Ella se acercó aún más en la casa. "¿Tu solo puedes embalar las cajas y enviarlas a la basura?"
Sarah no pudo evitar fijarse en el aspecto eliminado en los ojos de Emory cuando se dio la vuelta para mirarla. Caray, ¿no le importaba en absoluto? "Los artículos de los que planea deshacerse, sí, pero las cosas que decida guardar, disponemos de ordenar y recoger y luego se le entrega a una unidad de almacenamiento o su casa."
"No me puedo imaginar que haya mucho de eso. Fotos familiares y ocasionalmente una pieza de arte, tal vez. El resto tengo la intención de donar. Voy a tratar de pasar todos los días después del trabajo para el proceso de revisión con usted. "Ella echó un vistazo a su reloj. "No me gusta cortar esto tan breve, pero tengo una llamada de conferencia a las cinco. ¿Cuándo puedes empezar?"
Sarah se encogió de hombros. "¿Ahora?"
"Perfecto. Aquí esta una llave. Voy a tener un repartidor para las cajas mañana. Hasta pronto. "Y con eso, la rubia atractiva en el traje de negocios perfectamente adaptado había desaparecido. Sarah se encontró sola en lo que sólo podría describir como una mansión francamente magnifica. Su primera impresión fue el frío que sentía en
comparación con la pequeña casa de sus padres. Se preguntó si Emory Owen había crecido aquí y si tal vez eso representaba el personaje fresco, distante que parecía coincidir con el de la casa a la perfección. Triste, si ese fuera el caso. Ella se arremangó, sonrió, y se dedicó a explorar su nuevo proyecto. Ella amaba a un desafío.
*
Después de trabajar al día siguiente, Emory abrió la puerta de la casa de su madre y fue recibida por un sonido que nunca había oído allí antes- música rock. ¿Era eso U2? ¿Hola? Um? "Maldita sea, ¿cuál era el nombre de la mujer? Sarah. "¿Hola, Sarah?" Emory llamo por encima de la cacofonía. "¿Hola?" Cuando no fue respondida a cambio, dejó caer su maletín en la puerta y siguió a los sonidos de Bono a la cocina, donde se encontró con todos los armarios abiertos y los suministros de embalaje por todo del piso. En medio de todo esto, estaba Sarah, bailando alrededor violentamente con la libertad que sólo se tiene cuando están solos. Tenía los ojos cerrados mientras saltaba arriba y abajo, sacudió sus caderas, y articuló la letra de la canción junto con la radio. Emory estaba sorprendida por la escena y lo único que podía hacer era mirar, insegura de cómo proceder. Eventualmente, mientras el baile continuó, una pequeña sonrisa apareció en sus labios. La primera sonrisa en bastante tiempo.
Sarah abrió los ojos y casi cayó muerta al verla ante ella. La Sra
Owen-Emory-mentalmente se corrigió a sí misma, estaba de pie allí mismo, en la cocina, un testigo perfecto para su botín Poppin '. Si ella podría haber pagado para que el suelo se la tragara, habría hipotecado su vida lejos en un latido del corazón. Su primera acción fue correr al equipo de sonido portátil que había traído con ella y silenciar la música a todo volumen. A continuación, ella pensó que era mejor encontrar una manera de explicar su comportamiento a su apariencia cliente divertida. Espera, divertida era bueno. Así que jugaría esa carta, mostró su sonrisa más encantadora. "Siento que tuviera que ver eso. A veces, después de un largo día, me suelto por un minuto. Un descanso en el baile,
supongo que algunos podrían llamarlo".
"No es un problema," respondió Emory. La sonrisa aún tocaba las comisuras de su boca. "Creo que necesitaba eso, en realidad. ¿Cómo van las cosas aquí? "
Sarah tomó esta oportunidad para desempolvarse la ropa y se movió rápidamente hacia el lavabo para lavarse las manos. De alguna manera, la visión de esta mujer
perfectamente planchada le recordó el hecho de que probablemente se veía como una persona salvaje después de su día. No era tanto que le diera vergüenza. Ella se mostró satisfecha con su trabajo y el progreso que había hecho, pero al menos podía ir y tener la molestia de hacer el esfuerzo. "Ha sido un día muy productivo. Su madre debe haber sido una mujer muy fascinante. Me he encontrado con algunas piezas exóticas de China pensé que deberías echar un vistazo a, y hay un cuenco de cristal aquí que pensé también le gustaría al igual que a mi así que lo hice a un lado para usted".
Emory se frotó la parte posterior de su cuello. "No, uh-uh. Todo eso se puede ir. Te lo dije, a menos que parezca que tenga alguna relación familiar, puede deshacerte de él. No importa cómo exóticos o caros. Toda esta casa es exótica y cara. Si jugamos ese juego, nunca terminaríamos ".
La frustración de Emory era evidente y Sarah sintió la sonrisa caer a directo de su cara. "Lo siento. Sólo pensé cuando I- "
" Está bien. Yo soy la que debería disculparse. Acabo de tener un mal día. "Se volvió entonces y fue directo hacia el gabinete que no estaba abierto. La que contenía el licor. "Voy a tomar una copa. ¿Te unes a mi?"
"Oh, no, gracias. No lo creo. " " Como quieras. "
Mientras Emory mezclaba para sí misma una bebida, Sarah captó las arrugas de su frente y se dio cuenta de que Emory estaba en efecto molesta, lo cual era comprensible dado el mes que había tenido. "¿Hay algo que pueda, um ... hacer? ¿Quieres hablar de ello? "Fue increíblemente delante de ella y no en todo su lugar, pero Emory era un ser humano que estaba tratando con una pérdida significativa, y ella debe estar sensible a eso.
"Perdí una cuenta en el trabajo hoy. Fue un proyecto que había estado trabajando día y noche durante semanas, y no se concreto. Es sólo.... frustrante como el infierno ". Sarah inclinó la cabeza hacia un lado, entendiendo que curiosamente Emory no estaba molesta por la pérdida de su madre, pero en su lugar sobre un tema del trabajo. No lo estimo, pero siguió adelante. "¿Qué es lo que haces para ganarte la vida, si no te importa que pregunte?"
Emory apoyó la cadera contra el mostrador y tomó un sorbo de su martini seco. "Soy dueña de una agencia de noticias."
"¿Al igual que la Associated Press, quieres decir?"
"Más o menos. Somos más de un cable de alquiler. Las empresas utilizan nuestros servicios para enviar sus comunicados de prensa. Además, la Comisión de Bolsa y Valores exige que todas las empresas públicas para lograr algo que se llama «la
comunicación simultánea", que significa cualquiera y todos los anuncios inversor debe ser enviado a una variedad de fuentes de noticias en el mismo momento exacto. Somos
capaces de satisfacer esa necesidad en Global Newswire con una flota de satélites de alta potencia ".
Sarah estaba intrigada. "Así que si AT & T despide a dos mil empleados ..."
"Están obligados por ley a informar de ello al público, y lo más importante, sus inversores, todo al mismo momento exacto. Hacemos que esto suceda ".
"No tenía idea de que una empresa como esa existía."
"La mayoría de las personas no lo hacen, pero sin nosotros, el mercado de valores sería un lugar muy diferente."
"Guau. Impresionante. Tal vez tu me puedas decir más sobre él en algún momento. "Ella inclinó la cabeza hacia la puerta. "Por ahora, mejor salgo. Es hora de recoger a mi hija ". "Oh, tienes una niña?"
"Una niña de ocho años de edad, sí. Ella está en un campamento de verano y mi padre le recoge por mí cuando estoy trabajando ".
"Tú no mencionaste esto cuando te contraté."
"¿Es un problema? Puedo hacer que envíen a otra persona si- "
"No claro que no. Lo siento. "Emory enderezó. "No fue mi intención para mantenerlo." "No, no me importa."
Ella casualmente tocó el brazo de Emory, mientras hacia su camino de salida de la cocina. "Me gustó mucho escuchar acerca de tu trabajo. Suena emocionante. "Y ella realmente lo dijo en serio. A ella le gusta conocer gente nueva y tenía la costumbre de hacerse amiga con los clientes para los que trabajaba. Era otro rasgo que había heredado de su sociable madre, una extremadamente amistosa disposición. Emory Owen, sin
embargo, era un interesante punto de partida de las familias de clase media alta que normalmente contratan la agencia. Su estilo de vida corporativa de alta potencia era fascinante, si no un poco intimidante.
Sarah se quitó el pensamientos de Emory mientras abría la puerta de su apartamento en la parte sur de San Diego. Es hora de dejar el trabajo en el trabajo.
"Mama!" Grace doblo la esquina llevando con ella un pequeño recipiente azul brillante. "Hoy en el campo hicimos cerámica y ¿adivina qué?"
"¿Qué?" Sarah la envolvió en un cálido saludo y un beso en la mejilla unas tres docenas de veces antes de examinar el recipiente con apreciación exagerada.
"Nosotros horneamos en el horno para que sea duro como una roca."
"Wow, pequeño monstruo, eso es una locura buena. Desde el aspecto de esta obra maestra, podrías ser una posible artista en la vida real. "Sarah sostuvo el cuenco en apreciación y vio que los ojos de Grace brillaron ante la idea.
"¿Tú piensas que yo podría ser un artista, Papi?" Grace corrió de regreso a la cocina para obtener la opinión de su abuelo. Sarah la siguió justo a tiempo para escuchar la respuesta de su padre cuando él bajo el periódico en contemplación.
"No hay duda, Graciela. Tu puedes hacerlo, si alguien pudiera. Estás destinada a hacer grandes cosas ".
Sarah le dio un beso en su mejilla expectante. "Estoy de acuerdo. Ahora, si podemos conseguir a que la aspirante a artista mantenga su habitación limpia, vamos a estar en el negocio. Gracias por recogerla hoy. Este trabajo va a tomar un poco más de lo que Mama pensaba inicialmente. No creerás este lugar si te dijera. Es descomunal ".
"Tal vez tu madre te deba enviar un poco de ayuda", dijo.
"No, puedo hacerlo. Mama está sobrecargada como es. Lo que realmente necesita es contratar más trabajadores, pero ella es tan particular acerca de quién es lo
suficientemente bueno. Es una batalla perdida con ella ".
"Ella es una mujer obstinada. Al igual que su propia madre y al igual que alguien que conozco, carita. Hasta mañana. "Él la golpeo en la cabeza con su periódico a su paso.
*
Emory se sentó en la oscuridad de la cocina de su madre, cuidando su segundo Martini seco. El alcohol le había aflojado los pensamientos reprimidos en su cabeza. Sola en la casa, podía sentir los recuerdos, o irónicamente, la falta de ella, girando a su alrededor, y estaba resultando demasiado difícil de empujar a un lado.
Ella no se había permitido pensar mucho acerca de su madre, no del todo, y eso había sido una buena decisión. Lo mejor era simplemente seguir adelante. Si su madre
estuviera aquí, eso es lo que le diría a ella, al igual que ella le había dicho eso cuando su padre murió dieciséis años antes. Toda la emoción debe ser controlada, administrada, reducirla al mínimo. Pero se sentía cada vez más mientras la noche se acercaba a ella, y Emory finalmente cedió.
Su mente se dirigió a las Navidades que su familia compartía juntos cuando ella y Vanessa volvían a casa del internado. Ella pensó en los suéteres de diseño que había recibido a los siete años en lugar de los temas frívolos como pinturas y pinceles que había rogado a sus padres. Luego estaban las vacaciones de la "familia" de la que ella en su lugar las niñeras aparecían en más fotos que sus padres. Sacudió la cabeza ante la desesperación con que había querido ser notada por sus padres, y cómo habría dado cualquier cosa para que estuvieran felices, orgullosos de ella sólo un poco.
Emory se paró y se dirigió a uno de los sofás impecables en la sala de estar, la intención de dormir algo del ganso gris antes de conducir. Y luego la golpeó. Allí estaba ella, treinta y dos años, y nunca tendría esa oportunidad ahora. Se habían ido. Se terminó. Ella cerró
los ojos, la plena comprensión de que siempre seguirá siendo una decepción. El pensamiento fue aleccionador.
Capítulo tres
"Sabes, no creo que haya una bebida en todo el mundo que me gustaría mejor que el té helado de frambuesa. Es lo que el cielo debe ser. "Sarah miró el vaso alto, brillando en su mano y se volvió hacia Carmen. "Realmente es la bebida más notable."
Su amiga de la infancia sacudió la cabeza divertida. "No se necesita mucho para hacerte feliz, ¿lo sabes?"
"No es verdad. Me pondré en contacto contigo cuando me toque la lotería y me mude a Hawaii. "Ella acentuó la última palabra con una elevación de sus cejas y una profunda atracción sobre la pajita mientras miraba distraídamente hacia el cielo. Era sábado y Grace iba a pasar la noche con sus primos. Sarah dio la bienvenida a la oportunidad de una pequeña niña hablando con Carmen en Sabro, la pequeña cafetería al aire libre que frecuentaban.
"¿Cualquier otra cosa que pueda hacer por ustedes, señoras?" Preguntó la camarera mientras retiraba los platos de la cena de su mesa.
"Creo que vamos a necesitar otra ronda, si conozco a mi sedienta amiga aquí." Carmen inclino su pulgar a Sara, quien asintió alegremente.
"Entonces, ¿qué más hay de nuevo contigo?" Preguntó Carmen, volviendo su atención de nuevo a Sarah totalmente. "No hemos hablado en más de una semana. Se siente raro no ver a mi mejor amiga durante días y días. Estoy descuidada ".
"Lo sé, y lo siento. Recogimos una especie de gran trabajo y Mama estaba corta de personal, así que lo tome. "Carmen Alcocer había sido la mejor amiga de Sarah desde que se había trasladado a San Diego cuando era niña. Habían vivido a dos puertas más abajo de una al otro, a través de la totalidad de sus años de crecimiento, y no había nadie más cercana ella en el mundo. "¿Sabes una cosa, en realidad es de alguna manera agradable estar fuera en el sector. Debes ver este lugar, Carmen. Moririas ".
"¿Está en mal estado?" Ella jugaba con su paja.
"Ni siquiera cerca. Es una mansión, por lo menos, y en condiciones absolutamente
prístinas. Es como si nunca nadie realmente hubiera vivido allí. Ellos sólo vinieron a tomar tours y tomar fotos. El calor está totalmente ausente. No hay fotografías de la familia en la pared, sin tarjetas de felicitaciones o mensajes escondidos en el refrigerador. Es
completamente de presentación. "Sarah se encogió de hombros, desconcertada. "No creo que puedas estar a gusto en un lugar como ese. No me importa lo lujoso que fuera ".
"Yo tampoco. No veo el atractivo de tener cosas agradables si nunca los usas. Yo como que siento pena por la mujer de alguna manera y sus hijas también ".
"¿Sus hijas?"
"Sí, ella tiene al parecer dos. Su hija más joven es la que me contrató ". "¿Cómo es ella?"
"Bella, exitosa, rica, y ella lo sabe. Fuera de eso, no puedo decir mucho. Debe haber sido un lugar frío al crecer sin embargo. No te puedes quejar de ella por la forma en que resultó ".
"Bueno," Carmen comenzó, arrojando la servilleta sobre la mesa, "por mucho que me gustaría quedarme y hablar contigo durante otra hora o cinco, Roman, señor de la casa, pronto estará en casa y quejándose terriblemente acerca del paradero de su cena. Si yo no lo quisiera, lo mataría ".
Sara se rió. "Caray, otra de las razones que anhelo desesperadamente por estar casada de nuevo."
"Oh, llegara tu turno. De hecho, he estado esperando el momento adecuado para hablar de esto. Tengo a alguien que creo que sería perfecto para ti. Antes de decir nada,
escúchame ".
Sarah se quejó en voz alta y empujó el hombro de Carmen con el suyo mientras
caminaban por la acera a sus coches. "No, Carmen, no más arreglos. Absolutamente no. Ellos nunca funcionan, y siempre terminan sintiéndose como un fracaso. "Así que sonaba como un niño caprichoso, eso es lo que sentía. Ella tenía a su hija para tener en cuenta, y tal vez eso hizo sus estándares demasiados altos. En cualquier caso, ella estaba agotada por un sinfín de arreglos de Carmen y estaba llegando a la conclusión de que estaba mejor por su cuenta.
Ella y Grace contra el mundo. Así es como debería ser. Fin de la historia.
"Antes de colgar tu pequeño vestido negro de cóctel para toda la vida, sólo tienes que salir con este último. Su nombre es James y él es un arquitecto que trabaja en el mismo lugar donde trabaja Roman ".
"¿Un arquitecto?" Sarah no pudo evitar animarse un poco. Un arquitecto sonaba prometedor: un trabajo estable, una educación- tal vez una cita no vendría mal. "Bien, bien. Puedo llegar detrás de una cita, pero no te hagas ilusiones. "Ella suspiró. "¿Esta libre el viernes?"
"Voy a comprobar," Carmen prácticamente cantó. "¿He mencionado que es un arquitecto?" Sus ojos brillaban en la victoria celestina.
Emory no llegó a la casa de su madre al día siguiente o dos días después de eso. Tuvo reuniones hasta altas horas cada noche y todavía estaba tratando de alcanzar los días en que había estado fuera las dos semanas anteriores.
Ella decidió comprobar con Lucy en su salida para el día, sabiendo que estaría trabajando hasta tarde en el rediseño kit de ventas y repasando las maquetas con un peine de finos dientes. Metió la cabeza en el despacho de Lucy y sonrió. "Creo que ganaste esta noche. Estoy fuera."
Lucy giró en su silla y se dio unas palmaditas en broma a sí misma en su hombro. "Es raro que durara más que la jefa. Acepto la victoria con orgullo. Me gustaría dar las gracias a Dios y Red Bull. "Su cabello castaño claro estaba recogido libremente en un broche en la parte posterior de su cuello, y ya se había quitado la chaqueta de diseñador y zapatos de tacón que había llevado a trabajar ese día. Emory la conocía lo suficiente como para decir que ella estaba acomodando. "Tengo al menos otra hora, tal vez dos,
probablemente tres. Estoy orgullosa de ti por romper sin embargo. Has estado trabajando como una loca ".
Emory disparó a Lucy una mirada irónica, sonriendo internamente en la ironía. "Dice la chica que tiene al menos otra hora, probablemente tres."
"Hey, eso es por eso por lo que me pagas grandes sumas de dinero. ¿Planes para esta noche? cita caliente?
Por favor, decime que no. No he tenido una cita en meses y voy a morir ".
"Nop. Estás destinada a sobrevivir. Necesito que te dirijas a la casa de mi madre y ver cómo está yendo. Creo que voy a recoger una pizza en primer lugar. Muero de hambre. Hoy se me escapo y nunca he atrapado. "Se frotó la parte posterior de su cuello en la derrota.
"¿Has utilizado el servicio que te sugerí?"
"Sí. Me mandaron a alguien más. Ella parece bastante competente. Ella baila. "Emory sonrió al pensar de nuevo en la escena que había interrumpido a principios de la semana. "Lo siento. ¿Ella Baila?"
"No importa." Ella hizo caso omiso del comentario. "Te veré en la mañana."
Cuando llegó a la casa esta vez, considero golpear a fin de no asustar a Sarah. El
agotamiento excluye esos planes, sin embargo, y Emory abrió la puerta con un propósito. El hambre prevalece sobre los modales, pensó. Todos saben eso.
Estaba impresionada en realidad, al ver el coche de Sarah todavía estacionado en el frente. Ella pensaba que había una gran posibilidad de que lo hubiera dejado por el resto día. Al parecer, Sarah compartía una fuerte ética de trabajo con Emory. No estaba en lo más mínimo preparada, sin embargo, para la visualización de la montaña de cajas que la saludaron en la entrada. Emory contempló con asombro a casi un centenar de cajas muy juntas, apiladas de forma sistemática a lo largo de cada pared. Un examen más detallado
de Emory pudo ver que, colocada en cada caja había una etiqueta mecanografiada que detallaba todos y cada elemento que la caja contenía. Mientras estudiaba una de las etiquetas, todavía con asombro por la organización que estaba presenciando, Sarah apareció con otra caja etiquetada.
"Oh, hey, Emory," dijo alegremente. "¿Mejor día en el trabajo hoy?"
"Un poco, gracias", respondió ella con aire ausente. Su mente aún estaba enfocada en el progreso abrumador que Sarah había hecho en tan sólo los pocos días desde que había estado en la casa. "¿La agencia te envió ayuda?" Dejó la pizza en la mesa pequeña. Sarah echó un vistazo a las cajas y luego de vuelta a Emory. "No, aún soy solo yo. Pero no te preocupes, lo estoy logrando poco a poco ".
"Te diré. No puedo creer que hayas hecho todo esto. Estoy totalmente sorprendida ". Sara, quien ahora parecía entender que Emory estaba impresionada y preocupada, sonrió. Y era una sonrisa agradable. Cálida. "Sólo trato de estar sistemática con mi enfoque a fin de no abrumarme a mí misma. Una habitación a la vez ".
"¿Y las etiquetas?"
"Correcto. Espero que estuviera bien he utilizado la PC en la oficina para imprimirlos. Pensé que sería más fácil si cada elemento fuera catalogado para usted, por si acaso. Hay una lista maestra de todo lo que he empacado y eso puede ser una referencia cruzada con los números de los buzones ubicados en la esquina superior derecha de cada etiqueta. Las cajas están apiladas en orden, así que si había un artículo o recuerdo que no sabía lo puede poner a un lado para usted, podría ser fácilmente localizado y recuperado. "
Emory no sabía qué decir. "Lo siento. ¿Debería haber revisado primero contigo? " "No no. Esto es sólo más de lo que había imaginado. Tengo que admitir, estoy más allá de impresionada. "Y lo estaba. A ella le gustaba la forma en que Sarah había entrado y tomado sobre sí misma para organizar un sistema tan detallado. Esta mujer era un buscavidas.
Sarah sonrió aún más brillante a Emory. "Gracias." Y luego apareció a relajarse un poco. "Estaba preocupada de que estaría molesta. Pareces alguien que le gusta hacer las cosas de cierta manera. "Luego se volvió trasladándose de nuevo a la sala y comenzó a grabar encima de otra caja.
Emory estaba intrigada por el comentario y no pudo resistir seguir a Sarah a la habitación contigua. "¿Qué te hace decir eso?"
Sarah hizo un gesto a juego del traje de diseñador de Emory. "Ejecuta una empresa muy exitosa y no llegaste hay por accidente."
"Cierto. Pero nunca podría haber implementado todo esto. Soy la persona menos organizada que jamás hayan conocido. Eso es por lo que tengo ayudantes. "A medida
que el comentario salía de su boca, oyó lo arrogante que sonaba. Por alguna razón, la idea de herir los sentimientos de Sarah no se sentía bien con ella y se apresuro a retirar sus palabras. "Lo que quiero decir es-"
Sarah levantó la vista y ofreció una inclinación de su cabeza, acompañado de una suave sonrisa. "Está bien tener ayudantes que hacen cosas para ti. Si no lo hicieras, nunca serías capaz de concentrarte en tu trabajo y de gestionar tu empresa ".
Emory asintió una vez, y se quedó mirando sus zapatos, un poco descentrada de una manera muy extraña. Se sentía como si había dibujado una línea en la arena entre ella y Sarah, y a ella no le gustó. ¿Por qué diablos le importaba lo que pensara Sarah de ella?, no tenía idea. Sacudiendo fuera, levantó la caja en una ofrenda de paz. "¿Pizza?"
Sarah vaciló, pero sus ojos la delataban. Se moría de hambre, Emory podía decirlo. "Adelante por favor. Estás obligada a tener hambre. Es cerca de las siete. "Sarah todavía parecía reacia. "Le diré qué. Voy a sentarme en el patio y disfrutar de la vista hasta que haya comido. ¿Por qué no busca un plato y se une a mí? De esa manera me puedes contar con tu progreso y yo pueda responderte a cualquier pregunta que tengas. Va a ser una cena de trabajo ".
"Está bien. Gracias. " " Perfecto ".
Emory hizo su salida a la cubierta de su madre y observaba los exuberantes prados verdes que mantuvieron durante décadas por el servicio de jardinería contratados por la familia. En la porción más alejado del patio había un arroyo que rebosaba, hecho por el hombre, por supuesto, culminó con una cascada perezosa. Ella siempre había disfrutado de pasar tiempo en el patio trasero al crecer. Era su lugar favorito en la propiedad.
Sarah se unió a ella en la cubierta a continuación, tirando de ella de sus pensamientos. Se había quitado la cola de caballo y su pelo espeso y oscuro ahora caía sobre los hombros en ondas generosas. Cogiendo su mirada curiosa, Sarah miró hacia arriba, lo que indica su nuevo peinado. "Lo siento si es una locura. Lo recojo hacia atrás mientras trabajo ".
Emory asintió, pero era muy consciente del hecho de que ella no había tomado realmente el tiempo para mirar a Sarah, o al menos realmente observarla. Hasta ahora.
De repente, eso era todo lo que quería hacer. La piel de Sara era aceitunada muy suave, y sus pestañas eran largas y oscuras y en realidad sólo inútilmente atractivo. ¿Y estaba ella equivocada, o sus ojos eran una combinación de brillante avellana y, posiblemente, un poco de verde? Inusual ... bonita. ¿Cómo se había perdido esto antes?
"¿Qué?", Preguntó Sarah. "¿Tengo la salsa en la cara?" "De ningún modo. Lo siento, sólo estaba ... nada ".
Comieron la pizza en silencio durante unos momentos, Emory saboreando la mozzarella caliente y fundiéndose en la boca la corteza mientras el cansancio del día parecía caer lejos con el proceso de re-alimentación.
"Es hermoso aquí", Sarah finalmente dijo. "¿Pasó mucho tiempo aquí cuando eras joven?"
Emory asintió. "Lo hice. Era uno de mis lugares favoritos en realidad. Solía pintar. "Antes de que incluso las palabras salieron de su boca, Emory se sorprendió de lo que había dicho. ¿De dónde había salido eso exactamente? No había hablado con nadie acerca de su pintura en años.
"¿En serio?" Sarah se enderezó. "Eso es genial. ¿Estás bien? "
Emory rió de la pregunta y la tenacidad de la mujer preguntándole. "Algunos de mis instructores usualmente pensarían que sí. Me dijeron que tenía un talento poco común. No estoy segura de si eso es cierto o no. Pero eso no importa. No pinto más ".
"¿Y por qué es eso?"Preguntó Sarah.
Emory se inclinó hacia delante y se quitó la chaqueta del traje gris, dejándola vestida en sus pantalones grises y camisa de manga corta blanca. Ella se quitó los zapatos de tacón y tiró de sus piernas debajo de ella. Utilizando el movimiento para detener, dándose
cuenta de que esto no era un tema del que quería ahondar. El pasado era el pasado. Sin embargo, de alguna manera Sarah se lo ponía facilidad. Su presencia no era
amenazante. "No era práctico. Tienes que entender, vengo de una familia donde el éxito se mide en muestras de dólar dentro de los confines de un mundo en el que la percepción social lo es todo. El arte es para gente como nosotros para admirar, no crear. Eso es una cita directa de mi madre, por cierto. No importaba lo mucho que quería ser artista. Fue un no-tema. Así que después de algunos lagrimas, un examen de conciencia, y unas cuantas respiraciones profundas, crecí y me uní al mundo real. He aplicado a Stanford la semana siguiente y nunca mire hacia atrás. No he tomado un pincel ya ".
Sarah la miró con tristeza y tal vez un poco de shock. "Debe haberte importado mucho sobre lo que tus padres pensaron para renunciar a algo a lo que eras tan apasionada." Emory sonrió irónicamente y tomó otro bocado de su pizza. "Por desgracia, lo hice. Mi padre murió de un ataque al corazón cuando era una adolescente, así que mi enfoque cayó de lleno en la atención de mi madre. Creo que se puede decir que he fracasado rotundamente desde su punto de vista en casi todo. En realidad, nunca nos vimos a los ojos ".
"Estoy segura de que no es verdad." Sarah llegó a través del espacio entre ellas y puso una mano tranquilizadora en el brazo de Emory. Emory estudió la mano y sonrió, de nuevo sorprendida por sí misma por no alejarse de alguien ofreciendo comodidad. No había sido tanto de eso últimamente. Tal vez, razonó, era porque Sarah no estaba conectada directamente a su vida cotidiana. Ella era una virtual desconocida. Y algo en ella hablaba de bondad.
"Gracias por decir eso, pero lo es. Yo conocía muy bien a mi madre y soy muy consciente de las deficiencias que percibía en mí. Mi hermana mayor, Vanessa, era la niña de oro, no yo. Es un hecho de la vida que he aprendido a tratar. Así que la respuesta a tu pregunta, Sarah, "dijo ella, de pie y tomando ambos platos," es que sí, pasé una gran cantidad de tiempo aquí y recordaré con cariño este punto de vista cuando se venda. Con suerte, muy, muy pronto. "Ella se movió rápidamente en la casa, entonces, sacando su cabeza por la puerta con cansancio por última vez. "¿Tal vez podemos hablar de la casa
mañana? No creo que estoy hasta hoy, después de todo ". "Por supuesto", respondió Sarah. "Lo que funcione mejor."
*
Emory solamente había estado en casa hace una hora, pero estaba inquieta. Su mente estaba corriendo, y por mucho que trató de concentrarse en el informe de ventas frente a ella, simplemente no podía concentrarse. La conversación que había tenido con Sarah volvió a ella una y otra vez. Ella no se había abierto a cualquier persona acerca de sus padres en un largo tiempo. Ahora que la tapa había sido sacado de la caja, era como si no podía recuperarlo en su lugar. Hizo una impulsiva, aunque decisión ejecutiva. Iba a salir. Necesitaba tener a su mente fuera de todo lo que la preocupaba, y bastaría una oscura, discoteca demasiado ruidosa. Sin permitirse a darse tiempo para pensar, se cambió a sus descoloridos jeans bajos y camiseta sin mangas de color púrpura, agarró sus llaves y condujo su FX Jaguar al borde.
El club estaba lleno de gente, especialmente para un martes por la noche. Las luces estaban bajas, la música estaba muy alta, y podía sentir los habituales ojos en ella cuando casualmente se abrió paso por delante de ellos a la barra. Emory era muy consciente del hecho de que había sido colocada en la parte superior de la lista de elegibilidad en la única escena de San Diego. Si ella escuchó una "maldita", mientras caminaba por el frente de algunos de los admiradores más agresivos, no dejó que le afectara y no le importaba. Hace años, los comentarios como esos eran lo que le daba de comer, mantenía su ego a flote, pero hoy en día hacían poco más que molestarla. Desde la ruptura con Lucy, había tenido prácticamente ningún interés en las citas, dándose cuenta de que no había espacio en su vida para otra persona, y ella estaba perfectamente bien con eso. Ella estaba mejor por su cuenta, más fuerte y más eficaz.
Estaba en otro espacio esta noche, sin embargo. Ella ordenó una mula Kentucky y se dirigió a la mesa familiar a la izquierda de la barra donde había pasado muchas noches en sus días más despreocupados. Del mismo modo que se imaginaba que sería, varios amigos de ella charlaban animadamente sobre el retumbar de la música. Las mujeres en su conjunto no eran su típica boleto del Club. Cada uno de ellas era inteligente, exitosa, y de montones y montones de dinero. La mayoría de las chicas se conocían desde la escuela preparatoria, con algunas conexiones realizadas en el extraño evento de caridad o de los negocios de almuerzo. Este era un poderoso grupo de mujeres y ellas lo sabían.
"¿Estoy alucinando, o es Emory Owen haciendo una aparición en el mundo fuera de su oficina?" Mía fingió sorpresa cuando Emory cerró la brecha a su mesa. Mia Parsons era una prometedora y capaz abogada en Taylor y Fulbright y de la alta sociedad consumada. Ella trabajó duro y jugaba duro y a todo el mundo le gustaba y era temida por igual.
Emory se trasladó a los brazos abiertos de Mia. "Eres una histérica, Mia. Entonces, ¿cómo está todo el mundo esta noche? "Emory considero la mesa con las tres mujeres, dos de las cuales no había visto en varios meses.
"Mejor ahora que estás aquí," dijo Barrett. "Todos lamentamos mucho lo de tu madre, Em. Te Hemos extrañado. Me gustaría que vinieras al rededor con más frecuencia y déjanos cuidar de ti. Ya sabes, ser tus amigas ".
Emory sonrió en dirección a Barrett. Los bondadosos ojos de Barrett penetraron en la burbuja que se había colocado a su alrededor, y ella estaba realmente feliz de verla. De todas sus amigos, Barrett era la que más tenía los pies en la tierra, y siempre podía contar con ella. Ella hizo una nota mental para no dejar mucho tiempo sin llamarla la próxima vez. "Recibí tus mensajes, Barrett, gracias. Simplemente ha sido un tiempo muy ocupado".
"Bueno, si hay algo que pueda hacer, házmelo saber. Cuando perdí a mi padre, me tomó un buen tiempo antes de volver al ritmo de las cosas ".
"Lo tendré en mente."
"Ídem" Christi Ann intervino. Emory suprimió el impulso de poner los ojos. No podía
pensar en una sola instancia cuando la insulsa Christi Ann había estado allí para cualquier persona. Ella estaba más interesada en quien podría chupar y en quien podría derribar detrás de las escenas. Había conocido a Christi Ann desde el segundo grado y tenía el número de la chica.
"Una vez más, gracias, chicas, pero creo que lo que necesito ahora es un baile, por lo que si me disculpan." Emory notó a la joven rubia apoyada contra la barra. La que había
estado comprobando con claridad a sacar desde que había entrado en el lugar. Sin pensarlo dos veces, tomó un trago de su bebida apaciguadora y lo dejó sobre la mesa, con intención de una cosa, la distracción sin sentido. Ella hizo contacto visual con la rubia brevemente e inclino la cabeza hacia la pista de baile en silenciosa invitación.
Manteniendo un ritmo constante, confiada en todos los sentidos de que la chica estaba detrás de ella. Sintió un movimiento de una mano por la espalda y sonrió mientras se giraba, tirando de la chica con fuerza contra su cuerpo.
Bailaron, caderas presionadas entre si, cuerpos que se movían al sonido del tecno a todo volumen de los altavoces del club, manos moviéndose libremente a través de los
hombros, el estómago, los muslos. Dos canciones y Emory comenzó lentamente a dejar a la deriva la conexión sin pretensiones que había creado con un individuo sin nombre, sin rostro en una pista de baile, alguien quien le debía nada y que esperaba muy poco. "Soy Aimee," susurró la mujer seductora en su oído una vez que la música cambió a una
balada más lenta, más sensual. Pero a Emory no le importaba y, de hecho, preferiría no saber.
"Emory," ella respondió de regreso nada más que un sentido de obligación educado. "Sé exactamente quién eres." Pues bien, tanto por un interludio en el anonimato. La canción terminó, pero Emory no había terminado con lo que había empezado. Ella permitió que la rubia tirara de ella suavemente en un rincón oscuro del club donde
pudieran conocerse mejor. Aimee presionó su espalda contra la pared de ladrillo y tiró de Emory lentamente a ella. Emory le sonrió a su posible conquista con el calor suficiente para hacer que la chica la agarrara con fuerza en apoyo. Era consciente del poder que
ejercía y no pudo evitar que le gustara.Su atractivo sexual siempre había sido una valiosa
herramienta en su arsenal, y ella no tenía miedo de usarlo cuando era el momento adecuado. Esta noche, tenía un objetivo y un solo objetivo. Total y completa diversion y Allie-o era Aimee- encajaría muy bien en ese proyecto de ley. Ella bajó la cabeza
lentamente y capturó el labio inferior de Aimee entre los suyas y la besó suavemente, de manera constante y luego aceleró el ritmo. Aimee correspondida con facilidad, aunque era evidente que estaba a cargo. A pesar de que los labios de Emory estaban ocupados, el resto de ella estaba teniendo dificultades para hacer lo mismo. Se esforzó para liberar su mente y permitir a su cuerpo reaccionar ante las sensaciones que deberían estar
asaltándola en los brazos de esta perfecta y lista veinteañera , pero simplemente no estaba allí. Finalmente, arrancó su boca lejos y se quedó mirando fijamente a la pared de ladrillo. "Lo siento. Tengo que irme."
"¿Está todo bien? ¿He hecho algo mal? ", Preguntó Aimee. Sus grandes ojos buscaron en Emory en la penumbra del club.
Emory hizo todo lo posible para sonreír tranquilizadoramente. "Totalmente yo. Creo que necesito un poco de sueño. "Ella dio un paso atrás y se volvió a ir.
"¿Puedo obtener tu número, entonces?" Emory se congeló y penso cuidadosamente acerca de cómo manejar esta situación. No tenía ninguna intención de ver a Aimee de nuevo, pero también no sentía ningún deseo de herir sus sentimientos. "¿Por qué no me das la tuya?" Ella sacó su BlackBerry de su bolsillo trasero y obediente, escribió Aimee-con-dos-e el número en su teléfono, y con un rápido adiós a sus amigos, se dirigía a su casa, escuchando al jazz suave, y pensando fugazmente en un par de comprensivos ojos color avellana.
Capítulo cuatro
Así que resultó que era lindo, guapo, incluso, y bien vestido. Sarah tomó un sorbo de sangría y observó con cautela como James inspeccionó el menú de postres. La cena había ido bien. Habían charlado con facilidad sobre su trabajo, familias, e incluso el fútbol, un deporte que Sarah se sentía más allá de apasionada. Sonrió para sí misma y se
maravilló por el hecho de que una de las arreglos de Carmen en realidad podría ser un éxito.
"¿Por qué no se decide por nosotros?", Dijo James. Le entregó el pequeño menú a Sarah y sonrió. "Todos suenan de maravilla conmigo."
Sarah ciertamente no tenía ningún problema de elegir y se concentró en la cálida crema del pastel de nuez y vainilla, la boca haciéndosele agua ya. Ellos pusieron su orden con el camarero y se prepararon para más conversación.
James se relajó fácilmente en la silla de felpa. "Háblame de tu hija." Él parecía realmente interesado, y eso obtenía puntos principales con Sarah. No muchos de los hombres con los que había salido mencionaban a Grace por su propia cuenta. Esto era prometedor, de hecho muy prometedor. Mientras él no vivía con su madre, ellos podrían estar en el negocio.
"Bueno, ella tiene ocho años de edad y casi tan precoz como vienen, interesada en todo. Ayer, ella me preguntó si podía empezar a beber café, porque eso es lo que los italianos hacían. La amo en pedazos, pero voy a tener las manos llenas cuando sea más grande. "Ella sonrió ampliamente sólo de pensar en Grace y luego reproducir la forma en que debe haber sonado. Tal vez no debería señalar que su hija era extraña.
"Suena como un montón de diversión."
"Oh, ella es sin duda eso y más, una risa un minuto, esa niña."
El viaje en coche a su apartamento fue tranquilo, con la excepción de la radio tocando suavemente. Sarah no pudo evitar preguntarse si James esperaba ser invitado a entrar, y si es así, cómo iba a ir sobre explicarle que ella sólo, bueno, no iban a ir allí en la primera cita. Grace iba a pasar la noche con sus padres, y eso dejaba el apartamento vacío. Ella no quería que él consiguiera una idea equivocada.
Mientras la seguía a su puerta, su ansiedad sólo creció, y ella ya estaba formulando su explicación educada. Pero para su sorpresa, se detuvo en el escalón de la entrada y tomó su mano entre las suyas. "Me lo pasé de maravilla contigo esta noche, Sarah. Eres todo lo que Carmen dijo que sería. Me encantaría verte de nuevo, es decir, si lo deseas ".
Sarah parpadeó una vez, de nuevo sorprendida por lo encantadora que su cita estaba resultando ser. En realidad parecía nervioso. "Um ... Me encantaría verte de nuevo. ¿El próximo fin de semana?"
"Suena perfecto. Te llamaré más tarde esta semana para concretar los planes. "Se inclinó y le dio un suave beso en los labios de Sarah. Era simple. Era dulce. Y la fiebre la dejó sonriendo mientras lo veía caminar a lo largo de la acera hacia su coche. Había sido una noche agradable, se dijo mientras se abría camino en el apartamento. Estaba contenta de que había ido.
*
Al día siguiente era sábado, y aunque por lo general Sarah tomaba el día libre, haciéndolo a un lado para pasar tiempo con Grace y el resto de su familia, hoy no había podido
hacerlo. La casa en la calle Banning exigía su atención, y si tenía alguna esperanza de acabar antes de que las vacas vinieran vagando otra vez, tendría que trabajar horas extras. Eso la perturbaba, sin embargo, no tener el tiempo con Grace. Ellas por lo general, pasaban el día en algún tipo de actividad juntas, lo que les permitía conectar mutuamente después de sus ocupadas semanas. Ella decidió comprometerse, y después preparar una bolsa de las actividades favoritas "estar ocupado" de Grace, recogió a Grace y se dirigió a trabajar.
"¿Es este lugar realmente una mansión?", Preguntó Grace cuando dieron la vuelta a la Banning . "¿Al igual que en las películas?"
"Al igual que en las películas", Sara le aseguró. "Lo cual significa que adentro todo es muy caro y no puede ser tocado, mija. ¿Lo entiendes?"
"Sí mamá. No voy a tocar nada. Voy a fingir que todo es mío y que yo soy una huérfana adoptada por un hombre rico sin pelo ".
Sarah se tomó un momento. "¿Tu y Papi vieron Annie de nuevo anoche?" "¿Cómo lo sabes?"
"Suertuda conjetura."
Cuando se detuvieron en el camino de entrada, la boca de Grace se abrió por la casa expansiva que se extendía ante ellas. "Guau. Me gustaría que pudiéramos vivir aquí ". "Me gusta el lugar donde vivimos muy bien. ¿verdad? Es nuestra casa tuya y mía ". Grace le devolvió la sonrisa. "Yo también."
Después de acomodarle a Grace un poco de papel y lápices de colores en la mesa de la cocina, Sarah hizo su camino de regreso a la habitación principal para empacar los
contenidos finales del armario.
Había una tristeza que la alcanzo a su alrededor en la vacía, desmantelada sala y
comprendiendo que esto había sido el santuario de Catherine Owen durante tantos años. Estaba en medio de empaquetar los libros y ropa casual que estaban doblados de forma ordenada en los múltiples cajoneras cuando allí estaban, un grupo de cuatro libros de lona azul. Tres de los libros estaban atados fuertemente desde cada lado con una cuerda. Un
cuarto se sentó en la parte superior, no unido. Sarah hojeó el libro, evaluando su hallazgo, y tomo un respiró en la delicada, escritura cursiva y las entradas de fecha que se
alineaban en las páginas. Esta era su diario, el diario personal de la señora Owen. Y la última entrada fue fechado hace poco más de un mes, poco antes de su muerte. Los diarios eran gruesos y la escritura bastante pequeña. Los cuatro libros juntos podrían fácilmente ser la crónica de una buena parte de la vida adulta de la mujer mayor.
Desató lentamente la cuerda que sujetaba el paquete y abrió el libro. Por un lado, sentía una enorme cantidad de culpa por la intrusión en los pensamientos personales de la mujer, pero al mismo tiempo, algo estaba presionando para que hiciera precisamente eso. Se sentó en la cama y empezó a hojear las palabras escritas en la muy distintiva formal escritura. Con cada frase, Sarah cayó más y más en el mundo de Catalina Owen. Se encontró intercambiando de un libro a otro cuando las entradas se volvieron a meses y los meses se movieron en años.
*
Emory salió a la calle Banning maldiciéndose por no tener aún el correo reenviado de su madre. No había cuidado de la casa tanto como debería hacer y se dio cuenta de que todavía había cuestiones muy urgentes que requerían de su atención. Las facturas necesarias para ser pagadas, y había obligaciones de caridad que aún necesitaban ser cumplidas en nombre de su madre. Se sorprendió al ver el escarabajo rojo en el
estacionamiento mientras se detenía. No había esperado que Sarah trabajara el sábado. Emory ordenaba el correo en el camino a la casa, categorizando cada sobre en
suscripciones para cancelar, la correspondencia para continuar, y los cheques para escribir. Decidió en el futuro para tener a sus asistentes ayudando en este proceso. No había ningún punto en el cuidado personal en estos asuntos mundanos. De hecho, probablemente era mejor para ella distanciarse del proceso tanto como fuera posible. Se detuvo bruscamente al entrar en la cocina, sorprendida cuando ella levantó la vista del recibo de la luz en la mano. Se quedó mirando con curiosidad a la extraña niña sentada en la mesa de la cocina. "¿Hola?"
"Hola", la niña respondió alegremente. "Um ... ¿Y quién eres tú?"
"Graciela. Pero todo el mundo me llama Grace. Es muy agradable conocerte. ¿Quién es usted? "
"Emory. Owen. Esta es mi casa. "Estaba todavía fuera de balance por esta visita inesperada y no sabía muy bien por dónde ir. Maldita sea, nunca supo muy bien cómo hablar con los niños. "Así que lo tomo a que perteneces a Sarah."
" Sarah es mi madre. ¿Usted vive aquí? ", Preguntó. "Sí. Es decir, solía. No lo hago más. Mi madre vivía aquí ".
