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Análisis del sprint de jugadores de fútbol de élite durante partidos de la Champions League Europea y de la Copa UEFA

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Análisis del sprint de jugadores de fútbol de

élite durante partidos de la Champions League

Europea y de la Copa UEFA

Durante las últimas tres décadas, el interés en el análisis de partidos de fútbol ha aumentado, con objetivos primarios que son el registrar y analizar las demandas físicas de los jugadores (Bangsbo, 1994; Mayhew y Wenger, 1985; Reilly y Thomas, 1976). Durante un partido, los jugadores de fútbol de élite cubren la mayoría de la distancia a baja intensidad (Rienzi, Drust, Reilly, Carter, y Martin, 2000). La distancia cubierta promedio a alta intensidad es un 10% (Carling, Bloomfield, Nelsen, y Reilly, 2008).

La actividad de alta intensidad frecuentemente se ha estudiado en el fútbol (Bangsbo, Norregaard, y Thorso, 1991; Reilly, 1990), ya que es representativo de las demandas físicas de las actividades específicas en este deporte (Mohr, Krustrup, y Bangsbo, 2003) y la distancia cubierta por la carrera de alta intensidad en los partidos se relaciona estrechamente al estado de entrenamiento (Krustrup y cols., 2003). Varios autores han observado que los jugadores cubren distancias diferentes a alta intensidad durante un partido, dependiendo de la posición de juego (Bangsbo y cols., 1991; Di Salvo, Gregson, Atkinson, Tordoff, y Drust, 2009; Ekblom, 1986; Rampinini, Coutts, Castagna, Sassi, y Impellizzeri, 2007). Las diferencias en la actividad de alta intensidad durante un partido también son observadas por el sexo (Ekblom, 1986; Krustrup, Mohr, Ellingsgaard, y Bangsbo, 2005), nivel de entrenamiento (Krustrup y Bangsbo, 2001), período de competición (Mohr y cols., 2003; Rampinini y cols., 2007), nivel de competición, estilo de juego, y factores medioambientales (Reilly, 1996).

El sprint constituye una de las actividades más importantes en el fútbol, aún cuando sólo representa entre 1-12% de la distancia cubierta total en un partido (Rienzi y cols., 2000; Van Gool, Van Gerven, y Boutmans, 1988; Withers, Maricic, Wasilewski, y Kelly, 1982). Recientemente, el sprint ha sido dividido en dos diferentes tipos, sprints explosivos y sprints 'lanzados', como es estudiado durante los partidos de la Liga de Primer inglesa (Di Salvo y cols., 2009).

Los investigadores han enfocado su atención sobre las actividades de alta intensidad durante los partidos en diferentes ligas nacionales, en particular la Premier League inglesa (Bradley y cols., 2009; Di Salvo y cols., 2009), la Liga española (Di Salvo y cols., 2007), la Liga italiana y Liga dinamarquesa (Mohr y cols., 2003). Alguna investigación sobre las ligas nacionales ha incluido partidos de la Champions League en el mismo análisis de datos (Di Salvo y cols., 2007; Mohr y cols., 2003; Rampinini y cols., 2007).

El alto nivel de los equipos que compiten en la Champions League y en la Copa UEFA representa lo mejor de cada liga nacional. En suma, las reglas diferentes de estas competiciones (es decir, los goles de visitante se cuentan doble en caso de un empate global) ofrece importante información a los técnicos, puesto que los datos cubren una amplia muestra con varios juegos, con jugadores y equipos de distintas nacionalidades.

Para tal fin, podemos citar un estudio muy reciente del italiano Valter Di Salvo (foto) y colaboradores (Journal of Sports Sciences, 2010; 1 September 2010), donde se propusieron desarrollar un análisis detallado de las actividades de sprint de jugadores de fútbol de élite durante partidos de la Champions League europea y de la Copa UEFA, con particular atención al tipo de actividades de sprint entre las diferentes posiciones de juego.

Desarrollo del estudio

Los datos del rendimiento físico fueron reunidos de 67 partidos europeos (Champions League europea y Copa UEFA) a lo largo de cuatro temporadas, desde el 2002 al 2006 (16.8±1.7 partidos por temporada). El conjunto de datos incluyó 20 países diferentes y 717 jugadores de campo (1325 conjuntos de datos de jugadores en total) de 58 equipos: Inglaterra (n = 9), Francia (n = 6), Alemania (n = 4), Grecia (n = 2), Países Bajos (n = 2), Hungría (n = 2), Israel (n = 1), Italia (n = 4), Noruega (n = 1), Portugal (n = 3), Rumania (n = 2), Rusia (n = 4), Escocia (n = 2), España (n = 5), Suiza (n = 3), Turquía (n = 2), Ucrania (n = 2), República Checa (n = 2), Bulgaria (n = 1), y Austria (n = 1). Los datos se analizaron para todos los jugadores que tomaron parte en cada partido,

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excepto los arqueros. Sólo los datos para aquellos jugadores que completaron los partidos enteros (es decir, 90 minutos) fueron incluidos para el análisis.

La actividad de sprint se analizó para cada posición de juego: defensores centrales, defensores laterales, mediocampistas centrales, mediocampistas laterales, y atacantes. El perfil de las diferentes posiciones de juego era en base a las actividades realizadas en el terreno de juego y el área primaria en la que estas actividades se llevaron a cabo, como en Di Salvo y cols. (2007). Los datos usados para este estudio fueron hechos posibles por el ProZone Sports Ltd.® (Leeds, Reino Unido), que ofreció toda la información necesaria para el análisis estadístico, manteniendo el anonimato de los jugadores y de los equipos.

Recolección de datos y análisis

El rendimiento físico de los jugadores durante los partidos se estudió por medio de un sistema computarizado, semi-automatizado, multi-cámara de reconocimiento de imágenes, ofrecido por ProZone® (Version 3.0, Pro-Zone Sports Ltd.®, Leeds, Reino Unido). Ocho cámaras (Vicon Surveyor 23 x cameras dome/SV FT-W23) se instalaron en la cima de cada estadio. Este sistema ha sido validado para verificar el proceso de captura y exactitud subsecuente de los datos en forma independientemente (Di Salvo, Collins, McNeill, y Cardinale, 2006) y se ha demostrado que tiene una confiabilidad intra-observador alta (Di Salvo y cols., 2009). El sistema de ProZone® permite la clasificación y análisis de las intensidades de velocidad diferentes. Para los propósitos del estudio de Di Salvo, se consideró sólo la actividad de sprint (> 25.2 km·h-1), evaluando el número total de sprints, la distancia total del sprint cubierta, así como el porcentaje de cada tipo de sprint. Los tipos de actividad de sprint eran el sprint explosivo y el sprint 'lanzado'. Un sprint explosivo (caracterizado por una aceleración rápida) era definido como el logro de la velocidad de sprint desde parado, caminando, trotando o corriendo sin entrar en la categoría de carrera de alta velocidad durante los previos 0.5 segundos. Un sprint 'lanzado' (caracterizado por una aceleración gradual) era definido como el logro de la velocidad de sprint desde parado, caminando, trotando o corriendo, entrando en la categoría de carrera de alta velocidad durante el período de tiempo previo de 0.5 segundos. En suma, estos sprints eran clasificados por la categoría de distancia: 0-5 m, 5.1- 10.0 m, 10.1-15.0 m, 15.1-20.0 m, y > 20 m.

Para determinar las características de sprint relacionadas a la posición de juego, este análisis agrupó a los jugadores dentro de una de las cinco posiciones de campo: defensores centrales (n=286), defensores laterales (n=255), medio-campistas centrales (n=319), mediocampistas laterales (n=222), y atacantes (n = 243).

Todos los análisis estadísticos fueron conducidos usando el SPSS versión 15.0 para Windows (SPSS Inc., Chicago, IL).

Resultados

Sprints explosivos y sprints 'lanzados'

La Tabla I muestra el número total de sprints, sprints explosivo y 'lanzado' realizados por posiciones diferentes.

Tabla I. Número de sprints por posición de juego (promedios ±sd).

Defensores Centrales Defensores Laterales Mediocampistas Centrales Mediocampistas Laterales Atacantes Total Sprints 17.3 + 8.7 29.5 + 11.7* 23.5 + 12.2 35.8 + 13.4 30.0 + 12.0* Sprints Explosivos 4.5 + 4.2 7.2 + 5.5 6.3 + 5.8 8.4 + 6.3 7.2 + 5.7 Sprints ‘Lanzados’ 12.8 + 6.0 22.4 + 8.5 17.3 + 8.2 27.4 + 9.5 22.8 + 8.8

* El número total de sprints difiere entre todas las posiciones con la excepción de los atacantes vs los defensores laterales: mediocampistas laterales > (atacantes = defensores laterales) > mediocampistas centrales > defensores centrales (P <0.001, d = 0.46-1.64). Se encontraron diferencias para los sprints explosivos: (mediocampistas laterales = atacantes = defensores laterales) > defensores centrales (P <0.001, d=0.34-0.72), mediocampistas centrales < mediocampistas laterales (P <0.001, d = 0.35), y sprints 'lanzado': mediocampistas laterales > (atacantes = defensores laterales) > mediocampistas centrales > defensores centrales (P <0.001, d = 0.51-1.34).

Se encontraron diferencias en el número total de sprints entre todas las posiciones (P <0.001) con la excepción de los atacantes vs los defensores laterales. Los mediocampistas laterales llevaron a cabo significativamente más sprints, seguidos por los atacantes y los defensores laterales. Los mediocampistas centrales realizaron menos sprints que los mediocampistas laterales, atacantes, y defensores laterales (P <0.001). Los defensores centrales realizaron menos sprints. El número de

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sprints explosivos hechos por los defensores centrales fue inferior que para todas las otras posiciones (P <0.001). Los mediocampistas centrales realizaron menos sprints sólo comparado con los mediocampistas laterales (P <0.001). En cuanto al número total de sprints, hubo diferencias en los sprints 'lanzados' entre todas las posiciones (P <0.001), con la excepción de los atacantes vs los defensores laterales. Los mediocampistas laterales realizaron la mayor parte de los sprints 'lanzados', seguidos por los atacantes, defensores laterales, mediocampistas centrales, y defensores centrales (Tabla I). Sin embargo, la proporción de sprints explosivos respecto a los sprints 'lanzados' no difirió entre las posiciones de juego (Figura 1).

Figura 1. Proporción de sprints explosivos a 'lanzados' por posición de juego. Distancia total de sprint

La distancia total de sprint promedio cubierta fue de 205±108 m. Se encontraron diferencias entre todas las posiciones con la excepción de los atacantes vs los defensores laterales (P <0.001, d = 0.40-1.69). Específicamente, los mediocampistas laterales cubrieron una distancia total de sprint superior, seguidos por los atacantes, los defensores laterales, y los mediocampistas centrales (285±111 m, 242±106 m, 233±98 m, y 163±85 m, respectivamente). Los defensores centrales tuvieron la distancia total de sprint más baja de todas las posiciones de juego (131±66 m).

Número de sprints en las categorías de distancia

La Figura 2 ilustra las diferencias posicionales para cada una de las cinco categorías de distancia consideradas (0-5 m, 5.1-10.0 m, 10.1-15.0 m, 15.1-20.0 m, y > 20 m). En la categoría 0-5 m, los mediocampistas laterales realizaron más sprints (18.4±9.4) y los defensores centrales menos sprints (9.2±6.0) que todas las otras posiciones (defensores laterales 15.1±7.9, atacantes 15.1±7.9, y mediocampistas centrales 13.7±8.6; P <0.001). En la categoría 5.1-10.0 m, los defensores centrales y los mediocampistas centrales realizaron menos sprints (4.1±2.6 y 5.3±3.3, respectivamente) que todas las otras posiciones (atacantes 7.1±3.6, defensores laterales 7.3±3.7, y mediocampistas laterales 8.4±3.8; P <0.001). En la categoría 10.1-15.0 m, los defensores centrales y los mediocampistas centrales realizaron menos sprints (1.8±1.5 y 2.2±1.8, respectivamente) que todas las otras posiciones (defensores laterales 3.0±1.8, atacantes 3.2±2.1, y mediocampistas laterales 3.8±2.4; P <0.001). Similarmente, en la categoría 15.1-20.0 m, los defensores centrales y los mediocampistas centrales realizaron menos sprints que todas las otras posiciones, con los mediocampistas laterales realizando más sprints que los defensores laterales y que los atacantes (defensores centrales 1.1±1.2, mediocampistas centrales 1.1±1.2, atacantes 1.9±1.6, defensores laterales 1.9±1.7, y mediocampistas laterales 2.5±1.8; P <0.001). Para los sprints > 20 m, los defensores centrales y los mediocampistas centrales realizaron menos sprints (0.9±1.0 y 0.9±1. 1, respectivamente) que todas las otras posiciones (defensores laterales 1.7±1.7, atacantes 2.0±2.0, y mediocampistas laterales 2.2±1.9; P <0.001). En esta categoría como también la categoría de 10.1-15.0 m, los defensores laterales realizaron menos sprints que los mediocampistas laterales (P = 0.01).

Para los porcentajes de sprints en las categorías de distancia, sólo los mediocampistas centrales difirieron de las otras posiciones. Ellos realizaron un porcentaje superior de sprints más cortos de 0-5 m (56.7±16.2%, P <0.001, d = 0.33-0.48) y un porcentaje inferior de sprints más largos de

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15.1-20.0 m (4.8±5.8%, P <_ 0.03, d = 0.32-0.42) y de > 20 m (4.1±5.2%, P <0.001, d = 0.34-0.47) que todas las otras posiciones.

Figura 2. Diferencias posicionales para cada una de las cinco categorías de distancia. Discusión y conclusiones

Este estudio fue en base a la actividad de sprint dentro de una amplia muestra de jugadores de fútbol durante las competiciones de clubes europeos. El análisis de partido ha indicado que las acciones de alta intensidad son las más importantes en el fútbol (Bangsbo y cols., 1991; Bradley y cols., 2009; Reilly, 1990). No obstante, pocos estudios se han enfocado específicamente en acciones de alta intensidad relacionadas a los roles posicionales. Esta investigación es la primera en enfocarse en actividades de sprint específicas (> 25.2 km·hs-1) en jugadores de fútbol de élite durante niveles más altos de competiciones de clubes europeos.

Los resultados de este estudio de Di Salvo demuestran que los mediocampistas laterales, los atacantes, y los defensores laterales cubrieron una distancia total de sprint superior que los defensores centrales y los mediocampistas centrales. Estos resultados están de acuerdo con los estudios previos en los que se evaluaron similarmente a jugadores de élite (Bradley y cols., 2009; Di Salvo y cols., 2007, 2009). Sin embargo, los resultados de Di Salvo en el presente estudio son desiguales con aquellos de Mohr y cols. (2003) y Rampinini y cols. (2007), quienes observaron que los defensores laterales y los atacantes cubrieron significativamente una distancia y tiempo de sprint mayores que los mediocampistas. Esta diferencia podría explicarse por el hecho de que Mohr y cols. (2003) y Rampinini y cols. (2007) combinaron todos los mediocampistas (centrales y laterales) en la misma categoría. La necesidad de dividir a los mediocampistas en mediocampistas centrales y laterales está de acuerdo con recientes estudios (Bradley y cols., 2009; Di Salvo y cols., 2007, 2009), donde se observaron diferencias significativas entre las dos posiciones.

Hay dificultades al hacer las comparaciones entre los estudios sobre el análisis de partido porque en el fútbol, se han usado sistemas de análisis diferentes (la posición de las cámaras, la tecnología aplicada), intensidades diferentes han sido medidas (las velocidades de umbral y criterio tiempo de 0.5-1.0 segundos, para la clasificación de la actividad), diferentes magnitudes se han usado para analizar la actividad (tiempo o distancia), y el criterio para clasificar las posiciones de los jugadores ha diferido a través de los estudios (Bangsbo y cols., 1991; Ekblom, 1986; Mohr y cols., 2003; Rienzi y cols., 2000).

El número total de sprints es otra variable común usada en los estudios en jugadores de fútbol de élite (Ekblom, 1986; Tumilty, 1993; Withers y cols., 1982). El número total de sprints en el presente estudio fue similar al de la investigación previa, con mediocampistas laterales que realizan muchos más sprints, seguidos por los atacantes y los defensores laterales. Los defensores centrales realizaron menos sprints, seguidos por los mediocampistas centrales (Tabla I). Estos resultados

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están de acuerdo con los números de sprint de jugadores en la Liga española y de la Premier League inglesa recientemente reportados (Di Salvo y cols., 2007, 2009).

El presente estudio evaluó tipos de actividad de sprint que sólo se han introducido recientemente en la literatura del análisis de partidos (Di Salvo y cols., 2009). En el presente estudio, ninguna diferencia significativa se observó en los porcentajes de sprints explosivo y 'lanzado' (23% y 77%, respectivamente) entre las distintas posiciones estudiadas. Estos porcentajes son similares a los observados por Di Salvo y cols. (2009) (30.5% y 69.5%, respectivamente) en un estudio que fue el primero en examinar el número de sprints explosivo y 'lanzado'. Los defensores centrales realizaron significativamente menos sprints explosivos y 'lanzados' que todas las otras posiciones. En suma, los mediocampistas laterales completaron el número más alto de sprints en ambas categorías (Tabla I).

En la literatura científica se ha indicado que las demandas físicas en los jugadores de fútbol durante un partido dependen de variables como el triunfo del equipo (Di Salvo y cols., 2009), las tácticas utilizadas, normas de la competición (Rampinini y cols., 2007), y posiciones de juego (Bangsbo y cols., 1991; Rienzi y cols., 2000; Stølen, Chamari, Castagna, y Wisløff, 2005; Withers y cols., 1982). Se ha indicado que el perfil de capacidad de sprint de los jugadores se influencia directamente por su rol posicional en el equipo (Reilly, 2003). Es evidente que las mayores demandas de sprint son realizadas por los mediocampistas laterales y los atacantes (Di Salvo y cols., 2009). El presente estudio muestra tendencias similares con los defensores laterales que también realizan actividades de sprint elevadas. Esto podría relacionarse a los roles tácticos de los defensores laterales que son exigidos a menudo para realizar sprints en las fases defensivas y de ataque del juego. Entre los jugadores de la Premier League inglesa, Di Salvo y cols. (2009) observó que las posiciones centrales (los defensores centrales y los mediocampistas centrales) realizaban un porcentaje superior de sprints explosivos, pero esta tendencia no se observó en el presente estudio. Estas diferencias podrían relacionarse a los tipos de competiciones estudiadas (Liga Nacional vs competiciones entre clubes europeos). Durante la Champions League y la Copa UEFA, las diferentes reglas (es decir, el gol de visitante vale doble en caso de empate en goles, etc.) podría afectar las tácticas usadas y, por lo tanto, las demandas físicas del juego. Se necesitan más investigaciones sobre las diferencias en las demandas físicas entre las Ligas Nacionales europeas para confirmar esta hipótesis.

Este estudio reveló que los mediocampistas laterales, seguidos por los atacantes y los defensores laterales, realizaron el mayor número de sprints cortos (> 10 m). Los defensores Centrales, por otro lado, realizaron menos sprints en cada una de las categorías de distancia comparadas con todas las otras posiciones (Figura 2). Es más, este estudio demostró que el porcentaje de sprints en las categorías de distancia es una variable estable entre las diferentes posiciones de juego, salvo los mediocampistas centrales que variaron entre un porcentaje superior (0-5 m) y un porcentaje inferior (15.1-20.0 m y > 20 m). En general, los resultados de este estudio de Di Salvo, están de acuerdo con la investigación previa (Di Salvo y cols., 2009), demostrando que los jugadores de fútbol de élite realizan más sprints sobre distancias cortas (0-10 m) que sobre distancias más largas (> 10 m). Estas diferencias físicas generan la necesidad de diseñar programas de entrenamiento específico para cada posición de juego, como se ha indicado previamente (Di Salvo y Pigozzi, 1998; Svensson y Drust, 2005)

En conclusión, los resultados de este estudio de Di Salvo, proveen una visión útil sobre la actividad de sprint durante partidos de la Champions League y de la Copa UEFA, y también muestra que las características de los sprints son influenciadas por la posición de juego. Este estudio demuestra aún más que las demandas físicas de las diferentes posiciones de juego son bastante variadas y también pueden ayudar al cuerpo técnico en la mejora de las metodologías de entrenamiento.

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