AISTHESIS
N"31,
1998.RECEPCIÓN
DE
FIDEL
SEPÚLVEDA
EN LA
ACADEMIA
CHILENA
DE LA LENGUA
Ernesto Livacic
Gazzano
Con Fidel Sepúlveda llegan
ala Academia los
aires marinosde Cobquecura
natal.En íntima
simbiosis conellos,
ingresan,
através
de
supersona,
los hombres
y
mujeresdel
pueblo,
sencillosy
ladinos,
ala
vez resignadosy
empeñosos,
entretímidos
y floridos
en sudecir.
Prorrumpe
entre nosotros su cultura ancestral:revelación, voz, creación,
axiología,
ética y
estéticacoherentes,
acabade
explicarnos através-del
bello
regalode
palabras.Cultura
superficialmente mirada por algunos como cansina en su apego a unatradición,
pero nomonótona,
sinodinámica
en sus módulosexpresivos,
según nosha dicho:
multiforme,
rica en ritosy
ensímbolos,
enlos
cuales se embebiótempra
namente el
Fidel
niño,
asírecordó en sudiscurso
conunelocuenteejemplo.Cultura de la
soledady
eldolor,
de
la
celebracióny de la
solidaridad comorespuesta
de la
esperanzay la ilusión
comohorizontes.
Trae,
porque esingrediente
constitutivode
susfibras
másíntimas,
unainsobornable
adhesión,
quedeviene
en una radicalidentificación,
con el entorno enelcual comenzó a
ser,
sentido comoinseparable
del
propioser,
asumido con una sintoníafransciscana de
confraternidad,
que penetra enla belleza de
todo
lo
creadoy
selo
apropiadándosele.
Se
nosacerca,
entreintrínsecamente
inevitable y
conscientementeasumido,
un paradigma
de
fusión,
de
con-fusión,
entre el propio sery
el espíritucomunitario,
no sólo maderade individualidad
diferenciadora,
sino vividorade la
múltiplefron
da de
unárbol
al que se pertenece en una pertenencia marcada porla
raízcomúnde
su
follaje. Con
ese pueblo generadorde
peculiares creacionescolectivas,
de
un selloemperono masificado sino cardinalmente
humanizado,
conviveinsobornablemente,
estrecha afectos
inextricables,
coprotagoniza anhelos -quepuede significartambién
enarbolarbanderas-en prode
sujusta integración.
Para
unaCorporación
que certeramente entiende que su misión esinsepara
ble de
unlatir
conla
realidadde
una comunidad miscelánea en quelas
variantescontribuyena conformar como otras
tantas teselas
unúnico
mosaico,
esto que portaconsigo
y
quele
aportaFidel
Sepúlveda
es materia primade
primera necesidad einsumo de
impostergable
constante atención.Nuestro
compañero oficialdesde
hoy
enella,
no seha
encerrado orefugiado,
AISTHESIS
N'31,1998.
nienelespontaneísmo
de
unaindiosincracia,
ni en unvernaculismoreacio orefractario
ala
universalidad.Hijo fiel de
unpueblo,
confidelidad
que marca en su nombre mismo un proyectode
vida,
hace de
su crecimiento comunicativoy
de
suinteracción
dialógica
contodo
lo humano de la
méduladel
proyecto.Desde
joven,
Sepúlveda
-sinromper niatemperar sus vinculaciones originarias a uncontexto,
a un modode
ser,
a unacultura-,
ensancha sushorizontes,
estudiafilosofía,
sehace
profesorde
castellano,
recorre
todas
las
etapasde la
carrerade
Derecho,
alcanza eldoctorado
enEuropa,
va construyendoen símismo,
disciplina y
convergentemente,
unasíntesisde
vertientes espiritualescon proyecciónde fecundidad.
No
es suyo un ejerciciotan
sólo especulativo oque selimite
ala
satisfacciónautocomplaciente a
través
del
puro equilibrio conceptual.Se
proyecta enla
expre sióncreativay
enla
acción rupturalde
marginalidadesy de frontera
para alzar en su vez prediosde
encuentro.Expresión
creativa:Fidel Sepúlveda
escribe.Escribe
sentires,
pensares,
quereres.
Escribe
conperseverancia,
publicade
tanto
entanto,
cada vez a mayor ritmo.Toda
semillademora
engerminar, todo
fruto
requiere untiempo
para madurar,
ellicor
que secompartaenla fiesta habrá debido
antes alcanzar sumejorpuntode
sazón.Acciones de
encuentro:junto
al valor activode la
palabra,
Fidel Sepúlveda
sabe ser abrigador
y
caminantede
caminosnuevos,
fructuosos,
eficiente -comodirían
algunoshoy-.
En
unay
otraesfera,
el campo visualde
su espíritu vaampliándose,
haciendo
síntesis
y
ofrendandomayoramplitudy
propuestasde
armonía.Pero
esos círculos que va progresivamente construyendo sonconcéntricos,
sostenidosinclaudicablemente
sobre su centroinicial.
No lo
desplaza,
nolo
sustituye,
lo
enriquece,
lo
pueblade
más contenidosindesvitalizarlo.
De
algunosde
sus escritos yahablaremos. De
susquehaceres operativosdan
buena
cuenta,
así sea poco más queapenasmencionándolos,
varios señeroshitos.
Destaquemos
su participacióndesde
susinicios
en elequipo que con visiónencabezara nuestro recordado ex académico
correspondiente
enCroacia,
P. Rai
mundoKupareo,
queinaugura
enChile las
investigaciones
y
estudios superiores en el campode
la
Estética,
con connotacionesinnovadoras
necesariamente
inter
disciplinarias,
razónde
serdel
respectivoInstituto de la
Universidad
Católica de
Chile y de
su revistaAisthesis,
ambosdirigidos
por elProf.
Sepúlveda
actualmentey
en anteriores períodosde
unatrayectoria
que seacercaaenterarlas
cuatrodécadas.
A
esasinstancias
universitariashan interesado y
sigueninteresando
porigual las
expresionesimpropiamente llamadas
cultas comolas
popularesde las letras
y la
música,
la
arquitecturay la
arqueología,
la
antropología
y las
artesvisuales,
rastreando entodos
esos predios -cual otradimensión
de
Diógenes-la huella del
hombre,
a vecesde
cercaníasy
coincidencias soterradas.
AISTHESIS
N"31,
1998.
Junto
conformar
enla
universidad a nuevas generacionesde jóvenes
parauna
diferente
apreciaciónde la
cultura,
Fidel
Sepúlveda,
desde
aquellasfraguas y
desde
otras queha
encendido,
animala
realización,
con rigurosaperiodicidad,
de
encuentros anuales que reúnen en
diálogo y
convivenciaacreadores,
estudiantesy
sobre
todo
profesores enejercicio,
y
que constituyenunade las
vías máscerteras através
de las
cuales nuestro colega quehoy
seincorpora
promueve una más realconsideración
de
nuestraidentidad
en el quehacerde la
educación nacional.En
unatreintena
yade
encuentros,
seha
calado enlas
vinculaciones entre culturatradicio
nal
y
una ancha gamade
otrasáreas,
como religiosidadpopular, valores,
reformaeducativa,
desarrollo
obuen
gobierno.Siempre,
la búsqueda de la
armonía,
de la
síntesis,
de la
recomposiciónde la
unidad.De
susescritos,
el primero que meimpresionó,
siendoél
aún alumnode
micurso
de Literatura Española Medieval
enla Universidad Católica
-estamoshablan
do de la década de los
'50-,
fue,
en un penetrantey
original ejercicio enclase,
susingular abordaje
de
La
Celestina
de Fernando de
Rojas,
enfocada comofono
análisisde la
marginalidad.Ya
se veía pordónde
iban,
afincadas enlas
propias experienciasde
supueblo,
sus penasy
esperanzas.Las
palabras con que valoricé aquelbreve
pero enjundiosotrabajo
lo hicieron
sentir una cercanía que
lo
animó a confiarmela lectura de
algunos poemas celosamente guardados
hasta
entonces.En
ellos captéfácilmente
sufibra de
auténticacalidad,
y
a raízde
tal
apreciaciónauguré,
no yasólo privada sinopúblicamente,
sufuturo
como poeta.Repito
estatarde, de
vivavoz,
algunosde
misjuicios,
que entonces acogió en sus columnas una revista capitalina: refulge
"la
actitudde
profunda admiración que surge en elinterior
de Fidel Sepúlveda
antetodo
aquello quela
vida,
la
naturaleza,
la
realidad ofrecen...la
necesidadde
sensaciones que abranhorizontes,
la búsqueda de
una expresión personal auténtica sontemas
sobrelos
que vay
vuelve...Por
sus versos se pasea undominio
señorildel
idioma,
que sabe mostrarfacetas
nuevas enlas
palabrasde
másgastadasaristas"
Para
graduarse como profesorde
Castellano,
me solicitólo
guiaraen sutesis.
Su
tema
era por sí mismo untestimonio
de
susintereses:
"Seis
cuentostelúricos.
Análisis
estilísticoy
estético"
En
ella se aproxima coninédito
prisma a relatosambientados en el
campo,
enla
montaña,
en elmar,
enla
mina, nuestros,
entrelos
que,
porcierto,
nohabría
podidofaltar
unode
su coterráneoMariano Latorre.
Su
desarrollo dio
pie a una magnífica muestrade
su perspectivaintegradora
entrelo
originario
inolvidable
y lo
adquirido enla
universidad vitaüzado.En
1974,
salió ala luz
su primerlibro,
conlos
poemas"Geografías"
y
el autosacramental"Por Navidad". Las
composicionesdel
primergénero,
39
en sunúmero,
ratificaban su arraigoindisoluble
ala
tierra:
la
nataly las
aledañas.Imbui
das
enla
compenetración conlo
íntimo
y lo
potencialde
pequeños pueblosy de
ciudades provincianas -Cobquecura,
San Javier
de
Loncomilla, Curepto, Chillán-,
sugerentemente contraopuestos con elSantiago
agresivo eimpersonal
en quelo
laceran
eldesarraigo y la
nostalgia,
noconstituyensólo una credencialdel
autor pornues-AISTHESIS
N"31,
1998.
tra poesía,
contodo
el sabordel habla
nativa,
con unainteracción
muy
suya entrelo
fonético
y lo
significativo,
con una socarrona corrientey
subterráneade
ludismo
grato
y
de
reivindicaciónprofunda.Escuchemos
elfragmento
de
unade
eUas:De
Curepto,
mire, amigo,
yo no acepto
que
diga bellaquerías
Es Curepto
en mi concepto
una
muy digna
personapersonacon
dignidad
¿me entiende?
Eso
estodo
y
nadamenosmiconcepto
de Curepto.
¿Queahoraestáarruinado?
¡Por
honrado!
¿Que
le
venenvejecido? ¡Losañosy lo
sufrido!Pero
le
quedasucasay
suplazay le
quedadignidad
y
por esoyo no acepto no aceptoaningún
inepto
que
diga bellaquerías
de Curepto.
En la
segunda seccióndel
libro,
nos entrega un singulartexto
de
un géneroliterario
apenas ensayado en el país.Su
autosacramental,
queporesenciaincursiona
en
lo
numinoso,
sedesarrolla
al abrigode
nuestrapropia antropología realy
auténtica.
Quienes buscan
aCristo
reciénnacidoy
se encuentranen elrecorridotras
eseafán común-vale
decir,
los
nuevosMagos-no son reyesde
oriente,
pero no por ellovalen menos.
Son
un minerodel
norte,
uncampesinode
nuestra zonacentral,
un pescadordel
sury
unlolo de la
ciudad.Se
plantea, pues,
un clamar por queDios
nazca entre nosotros: no sólo por el espacioterritorial
y
porlos
personajes autóctonos
elegidos,
sino porlas
realidades quehacen
necesaria.Su
presenciay
por elregistro verbal
paladino,
en el cualsuele elpueblohablar
a suvecino,
enque selo
reclama.AISTHESIS
N°31,
1998.
Dirá
el minero:busco
unpoquitode
agua,
busco
un
poquitode luz.
¡Ah,
siencontrara
elfilón
que
llenara
elcorazón!Y
elpescador:Abriendo la
marsaladaremo en
la
nochecerrada,
esquivando
la borrasca
esperoque una
luz
nazca,
que
la
mar setranquilice,
que el mar que me
da
elsustentome
dé
también
elcontentoen
lo
hondo
del
corazón.El
campesino:Muchos
medeben la
vida,
vida
del
vinoy del
pan,
¿y
quiénmeda
a míla
vida?Mi
arado marca unaherida,
herida del
corazónA
suvez,
el muchacho:Me
marchito porlas
calles.Sólo
hay
vallesde
cemento.¿Dónde encontrar un rincón
que refresque el corazón?
Y,
yallegados
alpesebre,
la
respuestaquelos
cuatro escuchan es:Vosotros
los
quebuscáis,
lo
quebuscáis lo
tenéis.
No lo busquéis
porfuera,
buscadlo
pordentro.
No
lo
pidáis alos
otros,
dadlo
alos
otros.No
pidáis.Ofreced.
Vosotros,
lo
quebuscáis,
AISTHESIS
N"31,
1998.
Diecisiete
añosdespués,
siempre enla
vertientede
unalírica de
raigambrey
selloprovenientes
de la
tradición popular,
entregaA
lo divino y lo
humano,
poemarioal que nuestra
Corporación
otorga el premio"Academia",
con quedistingue
ala
mejor creación
literaria
chilena.Desde
su engañosotítulo
binario,
la
obra es unapropuesta
de
restauraciónde la
unidad,
afincada enla
compenetraciónde
ambosplanos,
tan
connatural a nuestra culturatradicional.
Aparece
en momentosdifíciles
de la
vida nacionalde
unpaís,
que parece condenado -ahora entero- ala
margi-nalidad,
ala
división,
ala desconfianza. Por
algo, significativamente,
su primertexto
seintitula
"Pasión",
al modode la de Cristo
-o,quizás,
mejordicho de
otromodo-
la
pasión
de Cristo
reencarnadaen nuestro pueblo.Un
tiempo
de
perplejidades,
de
incomunicaciones,
de
recelos,
de
muchasfor
zadasresignaciones:
Me
preguntaron que cuándoyo
le dije
quedónde
me
dijeron
que era comoy
medije
que así era pero enllegando
a aqueldonde
no vi
tan
claro por qué...Sobre la
tierra
endurecida poraplastada,
no abandonala
esperanza,
nola
cómoda por puramente
receptiva,
sinola
queimplica
conscientemente un compromiso
de lucha:
que aunque
los hombres los dioses y los
astrosla
tengan
olvidaday
piensen olvidarlaaquella
tierra
estierra
y
aquella gente es gentees gentesiempre gente aunqueellano
lo
sepaaunque ella no
lo
crea aunque ella nolo
entiendagente a pesar
de
todo
a pesarde
ellosmismosa pesar
de
mímismoquesoy
unode
ellos.Más
recientemente,
en1995,
la inquietud y la
esperanza,
sindesnaturalizarse
-como ya
hemos
precisado- seamplían,
enAmérica,
un viaje ala
esperanza,
gavillade
poemas que es cantatade la
geografíay la historia de
un continente -valedecir,
de
sutierra
y de
su gente-.No le
ruboriza en modo alguno -ala
inversa,
le
place inmensamente- exaltarla dignidad de lo
pequeñoy
entretejerla conla
grandeza prestigiosa.
A
través
de
sus páginasCobquecura
se codea conEl Do
rado
y
conla
Amazonia,
y
a su madrinaErna Cándida dedica
un poema ala
par que otro a
Bolívar.
En
estelibro,
sus conviccioneslo llevan
adirigir,
en unode
sustextos,
una "Epístola" al mismísimorey de España. De
ella,
sin mayorglosa personal
(ustedes la
elaborarán en suinterior),
repetiré, simplemente,
algunosversos:
AISTHESIS
N"31,
1998.
SU MAJESTAD
Habiendo
sabidoqueUd.
anda preocupado(así lo han
propaladolos
mediosde
comunicación)
de los destinos de
estastierras
que
fueron
alguna vezde la
corona,
nopuedo menos
de
agradecerlela
atenciónenminombre
y
en elde
misoberanopueblo,
porque
harta falta hace
queunsoberanoseacuerdede
aquelloslejanos
reinostan
dejados de
Dios
cuantomás
de la de los
hombres,
y
porqueestoesasí,
asíescomonossentimosmenoscabados,
depauperados,
ninguneadosporquesiguen siendo
de
palolas
campanasde los
pobresy
noseoyenperoestono es
noticia,
y
porquela
pobreza,
además esde
malgustopor esto es queaquello
de
quesuMajestad
se preocupede
estacomunidadquele habla
aDios
en españolme
ha
parecido una cosa peregrinay
tanto
que
hago
votosporqueUd.
dure y
sigadonde
estáy
nosotros empecemosamovernos paraestardonde
debemos,
que paramayorescosas nos
hizo
Dios,
que a
Su Majestad
guarde.Más
cerca aúnde
hoy,
en año reciénpasado,
escribela letra de "Misa de
Chilenía",
feliz
expresión,
al margende
heterodoxias,
de
la
ricay
vital piedadde
nuestro pueblo.
Estos
eslabonesde
unasostenida creación poética serían suficientes para sostener
unatrayectoria
literaria
másque meritoria.Pero
son apenas partede
su queha cercomoescritor.Entretanto,
ha
cultivado no menos abundantey llamativamente la literatura
de
ideas,
con ensayosde diversa densidad y
extensión,
pero siempreluminosos
eiluminadores.
Sus
análisisde
grandestítulos
muy
enlazados con el almapopular,
como aquelen que ordena
la
cronologíade Hijo
de ladrón
por entrela
marañade
susmontajes
temporales,
o aquel otro en quedeslinda
-hastadonde
puedendeslindar
sin rompersusincretismo-el mundo
de
los
vivosy de los
muertos enla Cómala de
Pedro
Páramo,
soninolvidables
porlo
magistralmentelogrados. Y
side
obras másvoluminosas
setrata, basta
recordarque su"Teoría
de América
enla
novelaactual"
mereció en
1981
elPremio
del Instituto de Cooperación Iberoamericana
ala
mejorAISTHESIS
N°31,1998.
Ha
seleccionadoy
publicado,
con apropiadas orientaciones para sulectura
y
disfrute,
Cuentos
chilenos,
Cuentos
chilenos para niñosy Cuentos
folclóricos
paraniños,
todos
ellosconacogidaque se refleja en múltiples reediciones.Y ha
plasmadotambién,
con sussueños,
la
gestaciónde
unmundomejor enuna
novela,
Aventuras
de Zoo
elaveser.Novela,
por esomismoy
porsubello
estilo,
traspasada
de
poesía.Según
ella,
hubo
una vezuna ciudadllamada Avellano's
City,
bautizada
conestenombre"porque
el avellano nacey
crece confidelidad
ala
vida".Y
ella, precisamente,
"tenía
todos
los días del
año aireoxigenado,
luz
exuberante,
panavisión
de
todos
los horizontes". Quienes la
visitaban,
quedaban vacunados contra el virusde la infelicidad y
se radicaban para siempre allí.Había
otraciudad,
cuyoshabitantes,
aparentemente,
lo
tenían
todo,
porobrade
susadelantostecnológicos.
Pero
eltener
no estodo:
ciudad sinespacios,
tediosa,
sus moradores padecían
de
unmalánimo
que secretaba esmog.Todo
era allí me cánico:los
quellamaban
aviones erande
vuelorígido, uniforme,
dependiente,
sin reflejos.Su
vuelo erala
negacióndel
verdadero vuelo.Por
eso sushabitantes
eraninvolátiles,
los
quehabían
perdidola
capacidadde
elevarse.Uno de
ellos,
por cierto sinalas,
llegó
undía
aAvellano's
City
con unhacha y
motosierra,
y destruyó la
ciudaddesde
sus cimientos.Si
queremos saber porqué,
escuchemossu explicación:"Lo
que se eleva molestay lo
abate.Cree
que abatiendolo
elevadodespeja
suhorizonte".
Todo
esto selo
contó aFidel
Sepúlveda
unaerobio,
un ser auténticamentevolador
de los
aires,
quelleva
el epítetode
"el
aveser",
esdecir,
fiel
a suidentidad
de
ave,
y
que,
a mayorabundamiento,
tiene
el nombrede Zoom
-conz,o,o,m-,
quenos suena
Sum
-cons,u,m-,
como ellatino
soy.Frente
alos
involátiles,
atodos
los
agentesde
destrucción,
Zoom
pasa arepresentar
la
fuerza de los
que amanla
vida.Y
en mediode
sus aventurasy de
susreflexiones,
se nos proponela bella definición de
que"Vivir
es conjugar el verbojugar
con el verbobuscar".
Esta
alegoría con alcances más alláde
cualquier espacio otiempo
específicos,
es,
ala
vez,
no menosrigurosamente,
unasimbolización reivindicadorade
nuestra culturapopular, prístina,
lozana, incontaminada,
fiel
ala
vida,
alegrey
ala
vez abierta ala trascendencia,
una culturadel
ser.Nuestra Corporación jamás la ha
miradodesde la
perspectivade
los
invo
látiles. Ella ha
invitado
invariablemente
atrabajar
en suseno,
através
de
su más quecentenario
historial,
alos
aveseres que conocimos comoManuel Antonio
Román,
Román
Laval,
Julio
Vicuña
Cifuentes,
Eugenio Pereira
Salas,
Yolando Pino
Saavedra,
Oreste Plath y
otros,
quecontribuyeron a quedesarrollara
sufunción
en sintonía con elautordel idioma. En
palabrasdel
exDirector de la Real Academia
Española,
don Antonio Maura
Gamazo,
este autor nopuedeser"otro
que elpueblo,
de
quien es alientoy
semblante".Hoy
estaAcademia Chilena
abre susbrazos
para acoger a un nuevoaveser,
fiel
a suidentidad.
Amigo
Fidel
Sepúlveda:
en sunombre,
bienvenido
comosunuevomiembro