Políticas públicas de investigación, desarrollo e innovación
Estudio sobre su evolución
Secretaría Confederal de I+D+i
Febrero 2012
POLÍTICA DE INVESTIGACIÓN, DESARROLLO E INNOVACIÓN
Situación y evolución de la I+D en España
Históricamente, España ha presentado uno de sus principales desequilibrios productivos y económicos en el reducido esfuerzo que dedicaba a las actividades de investigación científica y desarrollo tecnológico. Durante los últimos 30 años ha aumentado su gasto en I+D a un ritmo mayor que su Producto Interior Bruto, lo que ha permitido que el gasto en I+D creciera del 0,43% del PIB en 1981 al 1,39% en 2010.
El problema es que el resto de países igualmente han incrementado su apuesta por la investigación y el desarrollo y la brecha que los separa de España no ha disminuido con suficiente rapidez, ni se prevé su convergencia a medio plazo, a pesar de que ya ha sido anunciada varias veces como un objetivo con fecha concreta al presentar cada uno de los últimos Plan de investigación científica técnica. En 2009, los países de la Unión Europea (UE15) destinaban en promedio el 2,07% de su PIB a I+D.
El gasto en investigación y desarrollo en España alcanzó en 2008 su máximo con 14.701 millones, se redujo un 1% en 2009 y ha repuntado mínimamente en 2010 hasta 14.588 millones. No obstante, el gasto en I+D en relación al PIB ha disminuido levemente (del 1,392% en 2009 al 1,388%
en 2010) debido a que el repunte del PIB ha sido superior al del gasto en I+D, por lo que dicho gasto pierde peso en relación al PIB (muy ligeramente) por primera vez desde los años noventa del siglo veinte, tras la anterior crisis económica.
La estrategia de Lisboa fijó en 2000 unos objetivos a alcanzar por la Unión Europea en 2010.
Entre otros, planteaba alcanzar el 3% del PIB de la UE destinado a I+D (rebajado al 2% del PIB en el caso de España) y que el sector privado financiara el 66,7% de este gasto en I+D. A pesar de ser estos los objetivos que han guiado los sucesivos planes de I+D diseñados e implementados por los gobiernos del PP y PSOE durante estos años, hemos de subrayar que se han incumplido sistemáticamente.
Gasto en I+D (en % del PIB)
0,60 0,65 0,70 0,75 0,80 0,85 0,90 0,95 1,00 1,05 1,10 1,15 1,20 1,25 1,30 1,35 1,40
1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010
Como ocurrió durante la crisis de los años noventa del siglo pasado, se está reduciendo el gasto en I+D, especialmente en el sector empresarial. Entonces se necesitó casi una década para recuperar el esfuerzo de I+D en relación al PIB previo a la crisis. Es necesario que ahora la respuesta sea diferente y no cercene el incipiente esfuerzo realizado durante los años anteriores, pero los datos no apuntan en esa dirección. Los últimos años de crisis no han contribuido a reforzar las políticas de I+D en nuestro país como España, donde se están debilitando los avances conseguidos, por el contrario, otros países redoblan su apuesta por la I+D+i y aumentan los recursos públicos dedicados a esta política, como es el caso de Estados Unidos, Alemania o Francia.
Para acortar la brecha negativa que separa a España de la UE en esfuerzo en I+D+i que supone el 0,68% del PIB en el 2009, España debería haber destinado adicionalmente unos 7.000 millones de Euros, simplemente para converger con el esfuerzo actual de la UE15, sin tener en cuenta el “déficit en I+D” acumulado durante décadas y la desigual situación competitiva que ese déficit ha generado. Si en 14 años la brecha se ha reducido del 1,06% al 0,68% del PIB, a este ritmo serán necesarios 30 años para converger con Europa en esfuerzo relativo en I+D. Es evidente, que a pesar del esfuerzo realizado, éste es claramente insuficiente.
¿Cuáles son los sectores responsables de este déficit inversor en I+D?
En España, el gasto en I+D es ejecutado principalmente por el sector empresarial, seguido por la educación superior (universidades) y por el sector público. Al comparar con los datos europeos se constata que la mayor parte del déficit español en materia de I+D se debe al reducido esfuerzo del sector empresarial: 6 de las 7 décimas del PIB que nos separan con la UE proceden del sector empresarial (el 82% del diferencial) y la otra 1 décima del PIB de la educación superior, mientras que el sector público supera ligeramente el promedio europeo.
2
Al analizar el gasto en I+D es necesario diferenciar entre el organismo que financia el gasto y aquel que lo ejecuta, que no tienen por qué coincidir. En España es el sector público quien sostiene y financia en gran medida la investigación, tanto pública como privada, superando la media europea en gasto público destinado a I+D.
En 2010 el sector empresarial ejecutó el 51,5% del gasto total en I+D, pero solo financió el 43% de dicho gasto, un porcentaje que se ha venido reduciendo en la última década y que se aleja cada vez más del objetivo fijado por la UE (66,7%). El gasto público en I+D ha aumentado en los últimos años a una tasa superior, ganando relevancia a un sector privado que no ha sido capaz de incrementar su apuesta en I+D al mismo ritmo que lo hacía el sector público, y eso teniendo en cuenta que el sector empresarial computa como recursos propios los abundantes créditos públicos reembolsables concedidos en los últimos años a actividades de I+D.
Gasto interno en I+D distribuido por origen de los fondos (% )
0,0 5,0 10,0 15,0 20,0 25,0 30,0 35,0 40,0 45,0 50,0 55,0
1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010
AAPP y Educación Superior % Empresas %
Extranjero % IPSFL %
Total AAPP Empresas IPSFL Extranjero AAPP: % Empresas: % IPSFL: % Extranjero: %
1981 438 245 187 0 5 56,0 42,8 0,1 1,1
1982 577 305 265 0 7 52,8 45,8 0,1 1,3
1983 647 342 297 1 7 52,8 46,0 0,1 1,2
1984 758 382 371 0 6 50,4 48,9 0,0 0,7
1985 934 446 441 2 45 47,7 47,2 0,2 4,8
1986 1.188 572 585 10 20 48,2 49,3 0,9 1,7
1987 1.385 701 649 15 21 50,6 46,8 1,1 1,5
1988 1.729 844 822 20 44 48,8 47,5 1,1 2,5
1989 2.039 952 974 17 96 46,7 47,8 0,8 4,7
1990 2.559 1.152 1.213 20 174 45,0 47,4 0,8 6,8
1991 2.881 1.317 1.386 18 160 45,7 48,1 0,6 5,6
1992 3.245 1.629 1.418 20 178 50,2 43,7 0,6 5,5
1993 3.350 1.728 1.374 33 215 51,6 41,0 1,0 6,4
1994 3.294 1.726 1.327 32 209 52,4 40,3 1,0 6,3
1995 3.550 1.704 1.581 28 237 48,0 44,5 0,8 6,7
1996 3.853 1.848 1.752 38 214 48,0 45,5 1,0 5,5
1997 4.039 1.932 1.806 29 272 47,8 44,7 0,7 6,8
1998 4.715 2.015 2.348 36 316 42,7 49,8 0,8 6,7
1999 4.995 2.235 2.440 39 281 44,7 48,9 0,8 5,6
2000 5.719 2.480 2.844 117 279 43,4 49,7 2,0 4,9
2001 6.496 2.797 3.161 53 485 43,1 48,7 0,8 7,5
2002 7.194 3.138 3.515 50 491 43,6 48,9 0,7 6,8
2003 8.213 3.734 3.971 37 471 45,5 48,4 0,5 5,7
2004 8.946 4.039 4.298 59 551 45,1 48,0 0,7 6,2
2005 10.197 4.804 4.720 87 586 47,1 46,3 0,9 5,7
2006 11.815 5.486 5.562 66 701 46,4 47,1 0,6 5,9
2007 13.342 6.269 6.065 73 936 47,0 45,5 0,5 7,0
2008 14.701 7.173 6.609 81 838 48,8 45,5 0,6 5,7
2009 14.582 7.372 6.323 91 796 50,6 43,4 0,6 5,5
2010 14.588 7.380 6.272 100 837 50,6 43,0 0,7 5,7
IPSFL: Instituciones privadas sin fines de lucro
Los años 1994, 1996, 1998 son estimaciones. Desde 2001 los datos incluyen I+D continua y ocasional.
Los datos de AAPP (Administración Pública) incluye el sector Enseñanza superior.
Gasto en I+D por origen de los fondos
Unidades:millones de euros y porcentaje. Fuente: Instituto Nacional de Estadística
Principales rasgos de la política pública de I+D+i
Como se ha indicado, el sector público ha realizado un esfuerzo importante en política de investigación, desarrollo e innovación durante los últimos años. El aumento nominal de los fondos destinados a esta política se ha multiplicado por 8 en términos nominales entre 1995 y 2009. Sin embargo, cuando se analizan en detalle las cifras, la positiva imagen inicial se difumina bastante y se relativiza la apuesta decidida por el I+D+i que se ha publicitado por parte de los sucesivos gobiernos.
Los presupuestos públicos de I+D+i de 2010 y 2011 han sufrido ya un brusco recorte de sus fondos: el presupuesto inicial ha bajado de 9.662 millones en 2009 a 8.586 millones en 2011. El anuncio del Gobierno del PP de reducir el presupuesto de la política pública de I+D+i en 2012 inicialmente en otros 600 millones empeora aun más la situación de la I+D+i de este país, al recortar aun más los recursos públicos, cuando es precisamente el sector público el que sustenta en gran medida la labor de investigación y desarrollo que se realiza en España.
4
Política de I+D+i(millones de euros presupuestados)
0 1.000 2.000 3.000 4.000 5.000 6.000 7.000 8.000 9.000 10.000
1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011
GASTO TOTAL activos financieros gasto real
Durante años se han ido desarrollando sucesivos planes para impulsar el esfuerzo en I+D+i.
Hasta 2011 se han publicado seis ediciones del Plan Nacional de Investigación Científica, Desarrollo e Innovación Tecnológica, que cubren desde el periodo 1988-1991 hasta el 2008-2011. Dentro de cada plan se incluían acciones de choque para impulsar la I+D+i, tanto la pública como la privada.
Los resultados alcanzados han sido claramente inferiores a los objetivos planteados. Sucesivamente se han ido incumpliendo las metas que se marcaban en los Planes y cuando se alcanzaban, era con bastantes años de retraso.
En junio de 2011 se ha aprobado la Ley de la Ciencia la Tecnología y la Innovación, (L 14/2011) que sustituye a la anterior de 1986, que ha gobernado el sistema público de investigación en los últimos 25 años, estando pendiente del desarrollo normativo correspondiente.
Recordemos que la política pública de I+D+i depende de diversos organismos y administraciones, no siempre con los mismos intereses: los ministerios más implicados en esta política (Ministerio de Ciencia e Innovación, Ministerio de Industria, Ministerio de Educación, Ministerio de Defensa), así como el CSIC y los diferentes OPI estatales, la mayoría dependientes del MICINN, las Universidades y otros organismos públicos de investigación que dependen de las Comunidades Autónomas.
Política de investigación, desarrollo e innovación (presupuesto)
año
GASTO TOTAL
gasto real
activos financieros
gasto total
gasto real
activos financieros
gasto total
gasto real
activos financieros
1995 1.244 1.182 63 953 n/d n/d 291 n/d n/d n/d
1996 1.151 1.089 63 n/d n/d n/d n/d n/d n/d n/d
1997 1.415 1.139 277 915 n/d n/d 501 n/d n/d n/d
1998 1.885 1.213 672 1.004 n/d n/d 881 323 558 n/d
1999 2.765 1.361 1.403 1.271 n/d n/d 1.493 n/d n/d n/d
2000 3.048 1.449 1.599 1.791 1.156 635 1.258 293 964 n/d
2001 3.523 1.708 1.815 2.193 1.388 804 1.330 320 1.010 1.423
2002 3.792 1.802 1.990 2.301 1.488 813 1.491 314 1.177 1.589
2003 4.045 1.997 2.049 2.673 1.674 999 1.373 323 1.050 1.462
2004 4.277 2.083 2.193 2.904 1.780 1.124 1.373 303 1.070 1.546 2005 5.018 2.313 2.705 3.688 1.998 1.690 1.330 316 1.015 1.511 2006 6.549 2.914 3.635 4.869 2.592 2.277 1.680 322 1.358 2.399 2007 8.123 3.783 4.339 6.541 3.426 3.114 1.582 357 1.225 2.732 2008 9.428 4.148 5.189 7.768 3.796 3.881 1.660 352 1.309 2.955 2009 9.662 4.176 5.486 8.203 3.867 4.336 1.459 309 1.150 2.690
2010 9.271 3.572 5.699 8.088 3.340 4.748 1.183 232 951 2.479
2011 8.586 3.390 5.196 7.577 3.185 4.392 1.009 205 804 1.944
innovación civil y militar (*)
I+D+i civil I+D+i militar
Total I+D+i
(*) El gasto en innovación recoge solamente el gasto de innovación en telecomunicaciones, sociedad de la información y armamento militar
Fuente: Presupuestos Generales del Estado. Datos en millones de euros. De 1995 a 2000 datos de presupuesto inicial. De 2001 a 2011 datos de presupuesto aprobado
El aumento de los recursos asignados a la política de I+D+i se ha producido a base de incrementar los fondos dotados como activos financieros (préstamos reembolsables y aportaciones patrimoniales) en mucha mayor medida que el gasto real en investigación y desarrollo (salarios y gasto corriente, transferencias, inversión). Los activos financieros no constituyen un gasto público, al menos teóricamente, ya que son aportaciones patrimoniales o préstamos reembolsables realizados por el sector público. Otra cuestión es que son un instrumento del que han abusado los últimos gobiernos para enmascarar el gasto y que no tuviera su impacto en el cálculo del déficit público. Pero estos activos financieros sí ha habido que financiarlos y han tenido su reflejo en el aumento de la emisión de deuda pública durante estos años.
La mayoría de los fondos de I+D+i (casi dos tercios) corresponden a activos financieros, no ha gasto real. Durante los años de bonanza, el grueso del aumento de los fondos de esta política se ha basado en los activos financieros. Cuando ha llegado la crisis, el ajuste ha sido mayor en el gasto real de investigación y desarrollo y ha afectado en menor medida a los préstamos y aportaciones patrimoniales, al menos de momento.
Otro problema de los activos financieros destinados a investigación, desarrollo e innovación es que un porcentaje elevado de los presupuestados no llega a ser ejecutado, lo que provoca una seria distorsión de los datos. En 2010, por ejemplo, solo se ejecutó el 69% del presupuesto de I+D+i por el bajo nivel de ejecución de los activos financieros (del 61% en el caso del Ministerio de Industria y del 56% en el del MCINN). Por tanto, es necesario abordar los problemas estructurales que determinan esos bajos porcentajes de ejecución del gasto público en I+D+i, ya que reducen el apoyo efectivo a esta política y distorsionan su imagen, al mostrar un esfuerzo presupuestado muy superior al finalmente ejecutado.
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Política de investigación, desarrollo e innovación (presupuesto)
año
GASTO TOTAL
gasto real
activos financieros
gasto total
gasto real
activos financieros
gasto total
gasto real
activos financieros
1995 100% 95% 5% 77% . . 23% . . .
1996 100% 95% 5% . . . . . . .
1997 100% 80% 20% 65% . . 35% . . .
1998 100% 64% 36% 53% . . 47% . . .
1999 100% 49% 51% 46% . . 54% . . .
2000 100% 48% 52% 59% 38% 21% 41% 10% 32% .
2001 100% 48% 52% 62% 39% 23% 38% 9% 29% 40%
2002 100% 48% 52% 61% 39% 21% 39% 8% 31% 42%
2003 100% 49% 51% 66% 41% 25% 34% 8% 26% 36%
2004 100% 49% 51% 68% 42% 26% 32% 7% 25% 36%
2005 100% 46% 54% 73% 40% 34% 27% 6% 20% 30%
2006 100% 44% 56% 74% 40% 35% 26% 5% 21% 37%
2007 100% 47% 53% 81% 42% 38% 19% 4% 15% 34%
2008 100% 44% 55% 82% 40% 41% 18% 4% 14% 31%
2009 100% 43% 57% 85% 40% 45% 15% 3% 12% 28%
2010 100% 39% 61% 87% 36% 51% 13% 3% 10% 27%
2011 100% 39% 61% 88% 37% 51% 12% 2% 9% 23%
(*) El gasto en innovación recoge solamente el gasto de innovación en telecomunicaciones, sociedad de la información y armamento militar
Fuente: Presupuestos Generales del Estado. Datos en porcentaje. De 1995 a 2000 datos de presupuesto inicial.
De 2001 a 2011 datos de presupuesto aprobado
Total I+D+i I+D+i civil I+D+i militar innovación
civil y militar (*)
Fueron los gobiernos del Partido Popular los que generalizaron el uso de los activos financieros para financiar la expansión del gasto en I+D+i, en su caso para financiar la fabricación y adquisición de armamento pesado haciéndolo pasar por gasto en I+D+i. El PSOE que denunció el mal uso de ese instrumento cuando estaba en la oposición, no solo lo mantuvo sino que lo generalizó igualmente a la investigación civil. El abuso de este instrumento ha provocado la actual y abultada deuda por parte del Ministerio de Defensa1, generada a partir de los activos financieros (préstamos) que sirvieron para financiar la fabricación y adquisición de dicho armamento camuflado como I+D+i y que ahora el Ministerio de Defensa tiene grandes dificultades para pagar.
El gasto militar tuvo un gran peso en la política de I+D+i bajo los gobiernos del PP, debido a la inclusión como gasto en esta política de los fondos destinados a financiar la compra y fabricación de los grandes proyectos de armamento militar2 al tiempo que la política civil de I+D+i se mantenía en esa etapa, en niveles ridículos en relación al PIB. Durante los gobiernos posteriores del PSOE, el mayor impulso de la investigación civil ha reducido el peso del gasto militar (que además ha caído al finalizarse los proyectos o ser renegociados para reducir los pagos anuales a costa de alargar el plazo de devolución). No obstante, todavía hoy concentra un volumen muy elevado de recursos: se siguen dotando activos financieros para financiar las compras pendientes de armamento.
Otro mecanismo que han usado los gobiernos para inflar las cifras de investigación y desarrollo ha sido la de mezclar los datos junto con los de innovación tecnológica, un destino que si bien es necesario fomentar igualmente para la mejora de nuestro sistema productivo es diferente de la I+D y no deberían ofrecerse los datos de forma conjunta.
Además, dentro de las partidas de innovación tecnológica y de investigación para la sociedad de la información se han introducido programas que ni siquiera tenían la consideración de
1 El coste de estos proyectos se sitúa ya en los 27.000 millones, con una previsión final muy superior.
2 Avión de combate EuroFighter2000, carros de combate Leopard y Pizarro, fragatas F-100, avión de
gasto en innovación tecnológica, pero el objetivo era que las cifras agregadas de investigación, desarrollo e innovación lucieran lo mejor posible. Durante estos años, el gasto en innovación asociado a la fabricación de armamento, a telecomunicaciones y a la sociedad de la información (implantación de telefonía móvil, plan AVANZA y extensión de la administración electrónica, implantación de la televisión digital terrestre) ha concentrado más de un tercio del presupuesto de la política de I+D+i.
Según han ido disminuyendo los activos financieros ligados a la compra de armamento han ido aumentando los destinados a financiar las actuaciones de innovación en telecomunicaciones y sociedad de la información y en general los préstamos y aportaciones al I+D empresarial.
El gasto real (salarios, transferencias, inversión,…) destinado a la investigación civil supone menos de la mitad (oscila en torno al 40%) del presupuesto total de la política de I+D+i. Con estos recursos se sostiene principalmente el sistema público de ciencia e investigación, al CSIC y a los diferentes organismos públicos de investigación (OPI), se otorgan las diferentes becas de investigación, las transferencias corrientes y de capital que financian diferentes proyectos de investigación, tanto públicos como privados, las transferencias del Centro para el Desarrollo tecnológico Industrial (CDTI),…
Presupuesto inicial de los Organismos Públicos de Investigación y Experimentación
Datos en millones de euros CSIC
(1)
CSIC (2)
CIEMAT INIA lEO IGME IAC CEHlPAR CEDEX (3)
INTA ISCIII TOTAL
1996 208,2 42,7 31,6 19,8 17,4 7,4 4,8 36,4 91,8 50,4 510,3
1997 204,5 47,7 29,6 19,7 17,8 7,4 4,5 34,1 84,1 80,3 529,8
1998 215,7 42,3 31,2 22,7 17,9 7,9 4,5 33,6 86,0 86,8 548,6
1999 238,7 41,3 33,2 26,9 21,0 8,2 4,6 33,7 87,3 97,9 592,7
2000 261,8 51,9 45,2 29,7 22,4 8,6 4,7 33,1 88,3 113,1 658,8
2001 279,4 56,5 47,3 32,1 23,3 10,1 4,7 36,2 107,7 120,5 717,8
2002 306,6 61,4 51,2 35,8 25,3 10,0 4,8 37,7 92,7 128,1 753,5
2003 334,3 66,8 52,2 36,5 26,7 11,5 5,2 39,1 91,8 217,0 881,1
2004 370,7 73,0 54,5 38,2 28,6 12,3 5,1 39,9 101,9 220,9 945,0
2005 411,7 81,3 58,0 42,2 31,2 12,3 5,1 39,1 105,9 242,0 1.028,8
2006 483,4 94,1 64,2 49,4 34,1 15,1 5,4 6,6 116,7 287,1 1.155,9
2007 580,6 123,9 71,2 52,1 36,8 16,8 6,0 9,8 124,6 328,8 1.350,5
2008 622,7 622,7 111,1 83,2 68,0 40,1 20,1 6,4 3,5 133,6 367,3 1.455,9
2009 835,8 615,0 116,4 83,4 65,8 43,9 22,3 6,4 4,8 129,4 369,7 1.457,1
2010 728,6 514,0 91,6 82,8 61,3 31,1 20,9 6,5 4,6 120,4 332,4 1.265,6
2011 681,9 499,9 86,2 81,3 60,5 26,4 17,5 6,1 4,4 103,1 300,1 1.185,4
Variación % desde
máximos -18,4% -19,7% -30,4% -2,5% -11,1% -39,9% -21,3% -5,9% n.c. -22,8% -18,8% -18,6%
Fuente: Presupuestos Generales del Estado. Incluye todos los capítulos de gasto (del 1 al 9, pasivos financieros)
(2) Presupuesto del CSIC desde 2009 sin incluir sus recursos propios (autofinanciación) (3) Desde 2006 no se recogen los capítulos I a IV
(1) Los PGE del CSIC desde 2009 integran las operaciones comerciales (autofinanciación) que se estiman en 215 M€, 198 M€ y 182 M€ de modo que no puede compararse con los PGE de los años anteriores
El presupuesto del CSIC y de los distintos organismos públicos de investigación aumentó de forma sostenida entre 1996 y 2008 y casi se triplicó en términos nominales. En 2009 el presupuesto apenas aumentó nominalmente (disminuyó descontada la inflación) y el descenso se ha agudizado en 2010 y 2011. La reducción del presupuesto del CSIC y los OPI entre 2009 y 2011 ha sido del 18,6% de media, con descensos muy superiores en el IGME o en el CIEMAT y recortes más moderados en otros como el INIA o el CEHIPAR. El CSIC, desde su conversión en Agencia Estatal ha visto como sus recursos presupuestarios se reducían un 19,7% entre 2008 y 2011.
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Durante estos años previos a la crisis, el impulso del presupuesto público de I+D+i ha aumentado los fondos destinados a la investigación básica (desarrollada sobre todo desde centros públicos) pero el aumento ha sido aun mayor en los fondos y recursos destinados a la investigación y el desarrollo realizado por las empresas. Y ahora que ha llegado la crisis y se están reduciendo los fondos, el ajuste se está cebando especialmente con la investigación pública y en los organismos públicos de investigación.
Entre 2009 y 2011 el presupuesto público asignado a los centros públicos de investigación ha caído de 1.457,1 a 1.185,4 millones (excluyendo la autofinanciación del CSIC). Es decir, por ahorrar 271,7 millones anuales (poco más del 10% de lo recaudado con el derogado Impuesto sobre el Patrimonio, o una nimiedad comparado con los miles de millones despilfarrados con el Plan E y similares) se está poniendo en serio peligro la continuidad de todos los OPI, condenándolos a la inactividad y obligando a que se despida y no renueven los contratos y becas de cientos de trabajadores ligados a la investigación. Este ajuste del gasto público no tiene ninguna trascendencia a corto plazo en la reducción del déficit público, pero lastrará de forma permanente la recuperación de la crisis y la superación de un modelo socioeconómico profundamente desigual y desequilibrado.
A pesar de la apuesta realizada desde los presupuestos públicos, no se ha conseguido que el sector empresarial de el “salto adelante” requerido en materia de I+D+i. Esa sigue siendo la gran tarea pendiente y deben analizarse críticamente las políticas y decisiones adoptadas hasta la fecha que no han logrado que el sector privado apueste de verdad por la I+D+i y siga basando su estrategia competitiva en el abaratamiento de los costes laborales, con las limitaciones y perjuicios que dicha estrategia implica.
Febrero 2012
