La Hipertensión Arterial, HTA, constituye una de las patologías más comunes en el quehacer médico, estimándose que afecta una fracción importante de la población adulta. Sin embargo, a pesar de esta alta incidencia, la mayor parte de los pacientes desconoce su enfermedad, motivos por los cuales se ha llamado a esta enfermedad “El asesino silencioso”.
En los Estados Unidos se estima que 50 millones de norteamericanos son hipertensos, pero sólo un 50% saben que tienen la enfermedad.
La importancia de la HTA como
HIPERTENSIÓN ARTERIAL 2006: “EL CAMINO INVERSO: DE LA PRÁCTICA CLÍNICA A LA FISIOPATOLOGÍA DE LA HIPERTENSIÓN
ARTERIAL.”
Dr. Rodrigo Tagle V.
(1)problema de salud pública radica en su rol causal de morbilidad y mortalidad cardiovascular. La HTA es uno de los factores de riesgo de mayor importancia para la enfermedad coronaria y se ubica en el primer lugar entre los factores de riesgo para el desarrollo de enfermedad cerebrovascular.
En Chile, desde 1969, las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de mortalidad. Recientemente, en el año 2003, la Encuesta Nacional de Salud (1) mostró que la prevalencia de hipertensión arterial en mayores de 20 años es de un
33 %, cifra significativamente mayor a la encontrada en estudios previos efectuados en poblaciones chilenas. (Figura N° 1).
CONCEPTO DE PRESIÓN ARTERIAL
La presión arterial, PA, corresponde a la tensión que genera la sangre dentro del sistema arterial, que corresponde al producto de las resistencias vasculares multiplicado por el gasto cardíaco. El gasto cardíaco depende de la contractibilidad miocárdica y del volumen circulante intratorácico. A su vez, la resistencia vascular periférica depende del tono del árbol arterial y de las características estructurales de la pared vascular. (Figuras Nº 2 y 3).
DEFINICIÓN DE HIPERTENSIÓN ARTERIAL
Debido a que la PA en la población adulta presenta una distribución normal y dado que no se ha podido precisar de manera exacta un determinado nivel de PA sobre el cual comienza el riesgo cardiovascular y renal, los puntos de corte para definir HTA han sido, desde hace años, determinados arbitrariamente.
En este sentido, debe enfatizarse que la definición de normalidad para variables biológicas como la presión arterial, sólo puede determinarse después de años de seguimiento observando si se producen complicaciones (también llamados
Figura 1 : Prevalencia de Hipertensión Arterial según sexo y edad.
Encuesta Nacional de Salud 2003
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“eventos”)..
Múltiples estudios poblacionales prospectivos tales como el “Multiple Risk Factor Intervention Trial” (MRFIT) y el “Framingham Heart Study”, han demostrado que la morbilidad y mortalidad cardiovascular aumenta con el aumento de las presiones arteriales tanto diastólicas como sistólicas (2,3).
Basado en diversos estudios prospectivos, se considera hipertenso a todo individuo de 18 años o más que tenga cifras de PA sistólicas iguales o superiores a los 140 mmHg y/o diastólicas iguales o superiores a 90 mmHg, basadas en el promedio de 2 o más lecturas de PA efectuadas en 2 días diferentes en determinadas condiciones.
A través de los estudios de hipertensos a lo largo del tiempo puede constatarse como se ha modificado el límite que define a la HTA desde 160/100 mmHg a la cifra actual de 140/90 mmHg.
FACTORES QUE PARTICIPAN EN EL DESARROLLO DE HIPERTENSIÓN ARTERIAL
CONTRACTIBILIDAD MIOCÁRDICA
El aumento de la actividad del sistema nervioso autonómico simpático y disminución de la actividad del sistema nervioso autonómico parasimpático son los principales contribuyentes del aumento de la contractibilidad miocárdica, observado en las etapas iniciales de la HTA. Este hecho, observado en jóvenes hipertensos que presentaban un estado hiperdinámico con elevación del débito cardíaco, fue descrito inicialmente por Julius en 1971 (4). En su estudio, él comparó la respuesta en la frecuencia cardíaca frente a propanolol, y frente a un bloqueador muscarínico entre grupos de hipertensos y normotensos, observando que presentaban un claro desbalance del sistema autonómico. (Figura N° 4).
Figura 2 : Concepto de presión arterial y gasto cardíaco
Figura 3 : Concepto de presión arterial y resistencia vascular
El aumento de la actividad del sistema simpático puede deberse a la estimulación desde el centro vasomotor en el sistema nervioso central, estimulación hormonal (tiroxina, angiotensina II) y/o una liberación excesiva de catecolaminas desde las glándulas suprarrenales. El aumento de la actividad simpática en los hipertensos se fundamenta en el análisis espectral del intervalo de la frecuencia cardíaca, la medición de la descarga simpática cuantificada por marcadores radioactivos preferentemente a nivel cardíaco y renal, la presencia de niveles plasmáticos mayores de noradrenalina, menor respuesta bradicárdica en presencia de beta bloqueadores, y por una mayor actividad periférica o muscular de los nervios simpáticos medida por microneurografía al comparar hipertensos con normotensos (5). En el estudio Tecumseh, Julius et al demostraron que aquellos sujetos jóvenes hipertensos con estado hiperdinámico presentaban niveles más elevados de catecolaminas plasmáticas que los normotensos.
En la mayoría de los modelos experimentales de HTA, el aumento de la actividad simpática cardíaca participa en el desarrollo, pero no en la mantención de la HTA, ya que en las fases crónicas, el débito cardíaco se encuentra normal o disminuido. Las razones propuestas para explicar estos cambios en el débito cardíaco han sido: la disminución de los receptores ß adrenérgicos cardíacos, la disminución de la distensibilidad miocárdica y el aumento de la post- carga. (Figura Nº 5)
VOLUMEN CIRCULANTE El aumento del volumen circulante dentro del sistema arterial, puede deberse a una redistribución de la volemia y/o
a un aumento real de la volemia. El primer mecanismo se produce por un aumento del retorno venoso mediado por la actividad alfa adrenérgica, que ocasiona venoconstricción y así, aumenta el volumen sanguíneo intratorácico, determinante de la precarga cardíaca.
En este sentido no debe de olvidarse de que en condiciones normales, la mayoría del volumen sanguíneo, un 90 % se encuentra en el sistema venoso, y sólo un 10 % en el sistema arterial.
El aumento real de la volemia se debe a un desbalance a nivel renal entre los mecanismos de retención y excreción de agua y sodio. Así, puede deberse a una excesiva retención renal de sodio, sea por angiotensina II, aldosterona u otros mineralocorticoides, insulina, aumento de la actividad de los nervios simpáticos renales y/o aumento de la actividad de cualquiera de los diversos canales de sodio. Así mismo, puede deberse a una disminución de los mecanismos renales de excreción de sodio tales como una disminución del número de nefrones,
una disminución de la actividad de los péptidos natriuréticos o de la acción del óxido nítrico intrarrenal. (6)
Aún hasta ahora, el planteamiento de Guyton en la década del 70 persiste siendo verdadero, ya que en la mayoría de los hipertensos crónicos, la mantención de
Figura 4 : Desbalance sistema autonómico 2005
Figura 5 : Evolución de las características hemodinámicas de los hipertensos
*Adaptado de www.Incirculation.net
la HTA es dependiente de una disfunción renal primaria o secundaria de origen genético o adquirido, que resulta en una excesiva o inapropiada retención de sal y agua respecto a la magnitud de la presión arterial. Este fenómeno se conoce también como un trastorno de la relación presión-natriuresis, que es necesario para la mantención de la HTA. En los modelos experimentales de Guyton y Hall (7,8) queda de manifiesto, que para que la PA se mantenga elevada en el largo plazo, no basta con el fenómeno de vasoconstricción periférica, sino que se requiere de una alteración de la relación presión-natriuresis. (Figura N° 6). En la clínica, a diferencia de los modelos experimentales, no es posible separar los estímulos y/o mecanismos que generan vasoconstricción periférica de las alteraciones de la curva presión- natriuresis, ya que habitualmente estos mismos estímulos y/o mecanismos afectan también la curva presión-natriuresis.
RESISTENCIA VASCULAR Los principales mecanismos que participan en la regulación del tono arteriolar son: la actividad del sistema renina-angiotensina-aldosterona, el funcionamiento del sistema calicreína- cinina, la actividad del sistema simpático, los factores derivados del endotelio tales como óxido nítrico y endotelina, y las alteraciones de la membrana celular de la célula muscular lisa arterial ya sea de los canales de sodio, calcio y/o potasio. Son estos mecanismos los que determinan la resistencia vascular periférica, que se encuentra elevada en diversa magnitud en todos los pacientes hipertensos en su fase crónica.
El rol de la disfunción endotelial como generadora de HTA está en plena discusión, aunque sí se sabe que está claramente presente en las etapas
crónicas de la HTA y en aquellos que han presentado eventos cardiovasculares.
Panza y col. (9) demostraron que hipertensos esenciales tienen claramente una disfunción endotelial tanto a nivel coronario como a nivel sistémico (Figura Nº 7). Por lo tanto, la disfunción endotelial pudiese ser causa o consecuencia de la HTA, ya sea por una disminución de la síntesis de vasodilatadores como óxido nítrico, o por un aumento de la liberación de vasoconstrictores tales como endotelina o angiotensina II.
En los últimos 20 años, surgido de las investigaciones del grupo del Dr. Safar (10), se ha comenzado relacionar los cambios en la rigidez arterial de los grandes vasos (vascular stiffening) a la hipertensión arterial de tipo sistólico.
En condiciones normales, los grandes vasos deben distenderse al recibir el débito sistólico, y luego en el diástole,
contraerse, lo que ocasiona una presión sistólica no muy elevada, y posteriormente una presión diastólica no muy reducida. Estos fenómenos pueden compararse a lo que ocurre con las presiones dentro en un sistema de cañerías con líquidos expelidos por una bomba, entre una manguera de plástico y un tubo de acero. En consecuencia, en presencia de grandes vasos rígidos tales como en la aortoesclerosis, la resistencia vascular central se encuentra elevada y puede originar elevación de la presión arterial sistólica. (Figura Nº 8) En relación al aumento de la resistencia vascular arterial central han aparecido los conceptos físicos relacionados con la transmisión de la onda de pulso tales como: velocidad de la onda de pulso, onda retrógrada e índice de incremento, que permiten entender las razones de la elevación aislada de la PA sistólica.
Figura 6 : Concepto de la relación presión natriuresis
CLASIFICACIONES FISIOPATOLÓGICAS DE LA HTA Desde un punto de vista fisiopatológico, la HTA se puede clasificar de diversas maneras, no existiendo pleno consenso sobre qué clasificación utilizar en la práctica clínica.
Tradicionalmente, debe mencionarse la clasificación basada en el nivel de actividad de renina en el plasma, ya que tiene una connotación etiopatogénica y eventualmente terapéutica. La mayoría de las poblaciones de hipertensos estudiadas se distribuye de la siguiente manera: 30 % presenta renina baja, 50 a 60 % renina normal y 10 a 20 % renina alta. Esta clasificación propuesta por Laragh (11) tiene proyecciones clínicas, ya que la medición de la actividad de renina plasmática se ha hecho cada vez más accesible, y ya existen métodos tales como la técnica de renina directa, que permiten tener su resultado en 1 o 2 horas. Los hipertensos con renina baja son aquellos que tienen fundamentalmente activados los mecanismos de retención
renal de sodio y en consecuencia serían del tipo dependientes de volumen y sal sensibles. En cambio, los hipertensos con renina alta tienen activados el sistema renina angiotensina y/o el sistema simpático, y serían aquellos del tipo vasoconstricción y sal resistentes. Esta clasificación tiene un cierto correlato clínico, ya que los hipertensos jóvenes son preponderantemente hiperreninémicos, en cambio los hipertensos adultos
mayores son mayoritariamente hiporreninémicos.
También, se puede clasificar a la HTA en relación al cambio de PA al modificar la ingesta de sal. Así se pueden distinguir aquellas llamadas HTA sal sensible, en las cuales desciende la PA en una dieta pobre en sal y/o aumenta la PA en presencia de una dieta rica en sodio; y aquellas llamadas HTA sal resistente, en que la PA no cambia al disminuir o aumentar el contenido de sal en la dieta. En la HTA sal sensible, los mecanismos de retención de sal y agua se encuentran participando en la mantención de la HTA. Sin embargo, en la literatura no existe un consenso sobre cómo definir sal sensible y sal resistente.
No obstante lo anterior, es interesante mencionar que aquellos sujetos sal sensibles presentan una tendencia de mayor riesgo cardiovascular (12). Por otro lado, esta división de los hipertensos en sal sensibles o sal resistentes, tiene ciertas características fenotípicas de utilidad clínica, ya que los primeros son habitualmente obesos y/o adultos mayores y con excelente respuesta antihipertensiva a los diuréticos.
Aunque más conocida como una
Figura 7 : Disfunción endotelial en hipertensos esenciales
Figura 8 : Relación entre hipertensión y cambios vasculares.