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Oraciones
de cada dia para los
pequeños de la tierra
Textos: Mariateresa Crescini Dibujos: Sergio De Simone
NIÑOS
AYUDANDO A LOS NIÑOS
En el 160° aniversario de la Fundación de la Infancia Misionera proponemos a los niños la semana de la oración.
La Iglesia tiene confianza en los niños y les pide la oración, el sacrificio, los gestos de solidaridad para que todos los niños del mundo tengan la Vida.
En la primera mitad del 1800 los Misioneros de China pedían ayuda al Obispo de Nancy para salvar a los niños.
Las familias eran pobres y los niños, recién nacidos, con frecuencia venían eliminados, sin recibir siquiera la gracia del Bautismo.
En 1843 Mons. Charles de Forbin-Janson pidió a los niños franceses de ayudarlo a salvar los niños de China.
Como primer empeño el obispo pidió a los niños “Un Ave María al día”.
Desde entonces los niños están asociados a la acción evangelizadora de la Iglesia, rezando por los niños del mundo y los ponen en la luz de la salvación realizada por Jesús.
P. Patricio Byrne, SVD
PADRE NUESTRO
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal.
“Yo te alabo, Padre, porque has escondido estas cosas a los grandes y a los sabios, y se las
has manifestado a los pequeños”
Jesús, nuestro gozo,
Tu has sido y eres
el más grande amigo de los niños. Tu te fías de nosotros
abres para nosotros los secretos del Reino nos consideras los mejores.
Nosotros te agradecemos. Tu ves, Señor, cuanto es difícil, en nuestro mundo,
comprender tu mensaje y vivirlo.
Ayúdanos a acoger el amor de Dios Padre
que Tu has revelado a la humanidad: Haznos, como Tu,
misioneros de la paz, del perdón de la fraternidad y del amor gratuito. Abre nuestro corazón
a los problemas de la gente. Nosotros queremos ayudarte a construir un mundo nuevo. Amen
Compromiso
Hoy rezo por todos los bautizados para que vivan su fe
con alegría y gratitud.
“Cuando recéis, no hagáis como los paganos que dicen muchas palabras, porque vuestro Padre conoce las necesidades que tenéis
antes de que vosotros le pidáis”
María, Madre nuestra,
Tú has tenido siempre confianza en los niños y los has hecho mensajeros
del amor de Jesús para la humanidad. Acoge las alegrías, los dolores, las esperanzas de los niños del mundo:
Abre sus corazones a los sentimientos de amor, de paz, de fraternidad.
Acompaña la vida de los pequeños, de los débiles, de los marginados con tu ternura de Madre.
Conduce a todos los niños del mundo sobre los senderos de la esperanza donde brilla la luz del Evangelio. Amén
Compromiso
Hoy recito un misterio del rosario para confiar a María
los niños del mundo.
“Pues si vosotros, que sois malos, sabéis dar a vuestros hijos cosas buenas, ¿cúanto más el Padre
del cielo dará el Espíritu Santo a
Jesús, hermano universal,
tu amor por los pequeños es infinito, por esto hoy te confío:
los niños alegres y los niños tristes, los niños felices y aquellos angustiados, los niños sacios y aquellos hambrientos, los niños sanos y aquellos enfermos,
los niños que juegan y aquellos que disparan, los niños que estudian y aquellos que trabajan, los niños obedientes y aquellos caprichosos. Mira con amor a los niños que rezan y a aquello que no te conocen, a los niños que van a escuela y a los niños analfabetos,
a los niños que tienen una familia unida
y a aquellos que sufren por los padres separados, a los niños que tienen una bella casa
y a aquellos que viven en la calle, a todos los niños de buena voluntad que quieren ayudarte
a construir un mundo nuevo. Amen
Compromiso
Hoy dedico mi tiempo a alguna persona que es sola
o enferma, o anciana.
Cuando estaré en el cielo, haré descender sobre la tierra una
lluvia de rosas.
Jesús, amigo de los pequeños,
te agradezco porque
has encendido en el corazón de la pequeña Teresa
un amor grande como el de
los apóstoles y el de los misioneros. Te pido de repetir
en cada niño y niña el milagro de este amor
que lleva a Dios y que salva el mundo. Llena cada joven vida
de viva fe, de amor sincero, de esperanza luminosa.
Haznos misioneros como la pequeña Teresa: también nosotros queremos hablar de Ti a tantos niños que no te conocen.
Mientras tanto nos comprometemos a amarlos como los amas tu. Amén
Compromiso
Como la pequeña Teresa hoy haré todo con gran amor
para salvar el mundo.
“Y lo que pidáis en mi nombre, yo lo haré, para que el Padre sea
glorificado”.
Jesús, nuestro Salvador,
la cruz que tu has aceptado para nosotros
llevaba el peso de todos los dolores del mundo. Haz que cada niño misionero sepa caminar junto a ti para compartir las fatigas,
los dolores, las preocupaciones de los hermanos grandes y pequeños.
Haznos samaritanos de esperanza en este mundo
que todavía no conoce tu amor.
Acepta el dolor de los pequeños y abre a la humanidad
nuevas vías de fraternidad de paz y de acogida. Amén
Compromiso
Hoy acepto con alegría los pequeños sufrimientos que
la vida me presenta.
“Pues bien, yo os digo: Pedid y se os dará; buscad y encontraréis;
llamad y se os abrirá”
Madre de Dios
El mundo tiene necesidad de Jesús Haz que no falte a ninguno la luz de su Evangelio, la fuerza de su perdón, la certeza de su amor, la esperanza de su paz, el pan de la Palabra,
el agua que da la vida eterna. Te pedimos
un suplemento de amor
para todos los niños del mundo y una mirada de ternura para esta humanidad que tu Hijo ha amado tanto y por la cual
ha dado su vida. Amén
Compromiso
Hoy recito un misterio del rosario para confiar a María
los niños del mundo.
“Ahora, Señor, concede a tus siervos predicar tu palabra, y extiende tu mano para curar y obrar
señales y prodigios en el nombre de
Jesús
tu resurrección
es la definitiva victoria sobre las tinieblas del mal.
Haz que todos los niños del mundo puedan conocer
a Jesús que ha vencido la muerte y participar a la alegría
de tu Pascua. Libera el mundo
de cualquier zona de sombra y haz resplandecer tu luz
de resurrección en cada rincón de la tierra. Haznos apóstoles nuevos
llenos de coraje,
portadores de esperanza, disponibles a anunciar a todos la Buena Nueva de tu amor.
Compromiso
Hoy visitaré a una persona anciana o enferma y le hablaré
de alegría y resurrección.
CHARLES DE FORBIN - JANSON
El Padre de la Infancia Misionera
Amaba las Misiones y pidió al Santo Padre de poder partir hacia China para llevar la luz del Evangelio.
Pío VII lo invitó a quedarse como misionero en Francia, su patria.
Charles de Forbin-Janson nació en Francia en 1785, de una familia noble, en plena revolución. Creció con una buena educación cristiana y escogió la vía del sacerdocio.
Encontró Paulina Jaricot y le presentó las necesidades de los niños chinos: - Debemos salvar a estos niños que mueren sin el don del bautismo!
Los niños aceptaron la propuesta y desde entonces comenzó la Obra de la Infancia Misionera. Hoy está presente en 110 países y ayuda a la Iglesia a hacer conocer Jesús a los más pequeños. Se convierte en un gran
predicador y recorre toda la Francia como
anunciador del Evangelio. Es nombrado Obispo de Nancy, pero nunca pudo quedarse en su diócesis por motivos políticos.
En 1843 llamó a los niños y les dijo: - “¿Quieren ayudarme a salvar a los niños de China?”
- “¿Cómo?”
- “Si me prometen un Ave María al día y una moneda al mes, yo con Uds. salvaré a todos los niños.”
Era el 19 de Mayo: en París nacía la
Obra de la Infancia Misionera
Reina del mundo
mira con ternura de Madre
AVE MARÍA
Dios te salve María, llena eres de gracia el Señor es contigo Bendita eres entre las mujeres
y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Santa María, madre de Dios ruega por nosotros, pecadores
ahora y en la hora
