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Aparato Locomotor COMUNICACIÓN MÉDICO-PACIENTE EN... El paciente con osteoporosis COORDINADORA: MARISA LÓPEZ GIRONÉS AUTORES: JUAN JOSÉ RAMOS ÁLVAREZ

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COMUNICACIÓN

MÉDICO-PACIENTE EN....

Independientemente del tratamiento farmacológico recomendado

en cada paciente con osteoporosis, es importante en su abordaje

que el profesional sanitario insista sobre la necesidad de

comen-zar o mantener unas pautas de vida adecuadas para la

preven-ción y la evolupreven-ción de esta enfermedad. Estas medidas deben

co-menzar antes de la menopausia o de establecerse el diagnóstico.

Hay que tener en cuenta también que, como en cualquier enfermo

crónico, se da una tendencia al incumplimiento terapéutico,

máxi-me cuando los resultados no son visibles a corto plazo.

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Aparato Locomotor

El paciente con

osteoporosis

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Definición

La osteoporosis ha sido definida como una enfermedad que se caracteriza por un bajo nivel de masa ósea y consecuentemente por un deterioro de la microarquitec-tura del tejido óseo, conduciendo ambas situaciones a un aumento de la fragilidad del hueso y secundaria-mente a un incremento del riesgo de fractura.

Esta enfermedad tiene una alta prevalencia en nuestro medio, más del 40 por ciento de las mujeres y el 10 por ciento de los hombres mayores de 60 años pre-sentan disminución de la densidad de su masa ósea (DMO) en sus distintos grados, osteopenia y osteopo-rosis.

Macroscópicamente el tejido óseo se organiza en los huesos de dos formas diferentes: esponjoso o trabecu-lar, y compacto o cortical. Ambos tipos de tejido se en-cuentran presentes en todos los huesos aunque con distintas proporciones dependiendo de su localización. En los huesos del esqueleto periférico, el hueso cortical representa el 80 por ciento, mientras que en el esquele-to axial tan sólo alcanza el 30, siendo el hueso trabe-cular el porcentaje restante en cada caso. En los hue-sos largos del esqueleto periférico (Ej. Fémur), la diáfisis está constituida principalmente por tejido óseo compacto, mientras que la epífisis presenta una mayor proporción de hueso trabecular, tal como sucede en las vértebras del esqueleto axial.

Existe una relación entre la disminución de la masa ósea y el riesgo de fractura. Además, independiente-mente de la densidad de masa ósea, se reconoce una asociación entre los índices de turnover óseo (el hueso está en continua remodelación) y la fractura osteopo-rótica.

Como el hueso trabecular es el que presenta un mayor metabolismo, la mayoría de las modificaciones osteopo-róticas afectan en especial a este tejido y a huesos que lo presentan en mayor porcentaje (esqueleto axial y

epí-fisis de huesos periféricos), lugares donde asientan más frecuentemente las fracturas de origen osteoporótico. Diferentes patologías están asociadas a un incremento del riesgo de osteoporosis (Tabla 1).

Diagnóstico

Existen varios métodos para el diagnóstico de la osteo-porosis. Desde la radiografía convencional que presenta una baja sensibilidad y especificidad, hasta la tomogra-fía computarizada y los ultrasonidos periféricos. Por el momento, la prueba más estandarizada y utilizada es la densitometría ósea. Estableciendóse el diagnostico según la densidad de masa ósea (DMO) medida en el cuello del fémur y en las vertebras lumbares (Tabla 2).

Tratamiento

El tratamiento y la prevención de la osteoporosis consis-te en medidas farmacológicas (Tabla 3) y no farmacoló-gicas (Tabla 4). En la practica clínica el tratamiento

far-secundariamente a un incremento del riesgo de fractura. Por ello es importante las pautas que tiendan a evitar dichas fracturas y a mejorar la calidad de vida de estos pacientes. En ellos, además, se han registrado mayores índices de depresión como consecuencia de la incapacidad y el dolor que puede traer aparejada la enfermedad.

TABLA 1. Enfermedades asociadas a un incremento del riesgo de osteoporosis

– Estados hipogonadales – Trastornos endocrinos

– Trastornos nutricionales y gastrointestinales – Trastornos reumatológicos

– Enfermedades hematológicas malignas – Trastornos hereditarios

– Otros trastornos y situaciones clínicas: – Inmovilización – Embarazo y lactancia – Escoliosis – Esclerosis múltiple – Sarcoidosis – Amiloidosis

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COMUNICACIÓN

MÉDICO-PACIENTE EN....

macológico de elección depende de diversos factores como la edad, las enfermedades concomitantes, la tole-rancia del paciente al fármaco en cuestión y la eficacia del mismo, debiendóse conocer la respuesta al trata-miento de cada paciente para elegir o modificar el fár-maco utilizado. Por otro lado, es imprescindible en el manejo de la prevención y el tratamiento de esta enfer-medad, la aplicación de las medidas no farmacológicas.

Manejo del paciente con osteoporosis

Independientemente del tratamiento farmacológico reco-mendado en cada paciente determinado, es importante que el profesional sanitario insista sobre la necesidad de comenzar o mantener unas pautas de vida adecua-das para la prevención y el tratamiento de la osteopo-rosis. Estas medidas, expuestas en la Tabla 4, deben comenzar antes de la menopausia o de establecerse el diagnóstico. Se ha comprobado que la DMO durante el crecimiento determina el pico de masa ósea en la edad adulta. La actividad física regular durante la juventud y sobre todo en los periodos de crecimiento puede contri-buir a aumentar la DMO y prevenir el riesgo de osteo-porosis en la edad adulta, siempre que la alimentación en dichos periodos sea correcta, con dosis adecuadas de calcio y vitamina D.

Existen otros factores de riesgo a tener en cuenta en la susceptibilidad a las fracturas vertebrales osteoporóti-cas, como son las alteraciones estructurales de la co-lumna, principalmente el grado de cifosis dorsal. El profesional sanitario debe establecer pautas de rehabili-tación y tratamiento de tales alteraciones para prevenir las posibles fracturas.

Es importante recomendar unas pautas de ejercicio adecuadas para prevenir las fracturas osteoporóticas. En dichos pacientes establecemos algunas limitaciones en el tipo de ejercicio. No son recomendables todos aquellos deportes que aumenten el riesgo de caídas (esquí, equitación, ciclismo en carretera) y deportes de

TABLA 3. Tratamiento farmacológico

– Terapia hormonal sustitotoria (THS)

– Moduladores selectivos receptores estrogénicos (tamoxifeno, raloxifeno...)

– Bifosfonatos (etidronato, alendronato, risendronato...) – Calcitonina

– Floruro sódico – Tibolona

– Hormona paratiroidea recombinante humana – Sales de estroncio

TABLA 2. Diagnóstico de la osteoporosis

Normal:DMO menor o igual a ISD con respecto a la población joven adulta de referencia

Osteopenia: DMO menor o igual a ISD con respecto a la población joven adulta de referencia (T score -1 a -2,5)

Osteoporosis: DMO mayor de 2,5 SD (T score > -2,5)

Osteoporosis severa: DMO mayor de 2,5 SD más la presencia de una o más fracturas por fragilidad ósea

TABLA 4. Tratamiento no farmacológico

– No fumar

– Evitar el consumo de alcohol – Realizar ejercicio físico

– Llevar una alimentación equilibrada – 1.000-1.200 mg de calcio al día

– Ingesta suficiente de proteínas en ancianos – Evitar déficit de vitamina D

– Aporte de 400 unidades al día – Tomar el sol

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dinación y equilibrio, para favorecer esta cualidad y evi-tar el riesgo de caídas en nuestros pacientes. Por otro lado, evitaremos los ejercicios que favorezcan la cifosis dorsal.

Hay que tener en cuenta en el manejo de la osteoporo-sis, como en cualquier enfermedad crónica, que el pa-ciente tiende a abandonar el tratamiento, ya que los re-sultados nunca son a corto plazo. Las medidas terapéuticas deberán seguirse toda la vida, por lo que su cumplimiento será más factible si el paciente toma conciencia del problema. El profesional sanitario debe sostener al paciente durante todo el proceso. Por otro lado, se ha asociado la osteoporosis a una mayor inci-dencia de depresión, como consecuencia de la incapa-cidad y el dolor que el paciente debe soportar crónica-mente. El profesional sanitario deberá detectar estos síntomas y derivarlo, en caso necesario, al profesional de la salud que puede ser de ayuda para el cumpli-miento del tratacumpli-miento y a sobrellevar el proceso.

– Diaz Curiel M, García JJ, Carrasco JL, Honorato J, Pérez Cano R, Rapado A, Álvarez Sanz C. Prevalencia de osteoporosis determinada por densitometría en la po-blación femenina española. Med Clin 2001;116:86-88. – Finn, G. Histología. Ed. Panamericana, 3ª ed. Monte-video (Uruguay), 2003.

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COMUNICACIÓN

MÉDICO-PACIENTE EN....

Pautas para el paciente y sus familiares

Texto disponible en Internet para ofrecerlo a sus pacientes. Consultar y descargar en: www.elmedicointeractivo.com o www.elperiodicodelafarmacia.com

Evite el consumo de alcohol y tabaco.

Realice ejercicio físico. Camine de 30 a 60 minutos al día. También son buenos los ejer-cicios de coordinación y equilibrio. Tenga en cuen-ta que ha de evicuen-tar la práctica de deportes como el esquí, el ciclismo o la equitación, por el riego de caídas y de fracturas añadido.

Lleve a cabo una alimentación equilibrada que incluya la ingesta de calcio y vitamina D. Su médico le indicará qué cantidades ha de to-mar y cómo ha de hacerlo.

Recuerde que la consecuencia mayor de pa-decer osteoporosis son las fracturas, evite situaciones de riesgo.

Si le han diagnosticado osteoporosis, sea constante con su tratamiento, que será para toda la vida. Su cumplimiento es funda-mental para la evolución favorable de su enfer-medad.

Consulte con su médico cualquier duda sobre su tratamiento, sea farmacológico o no.

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