MANIFESTACIÓN DE LA GLORIA DE DIOS
“Este principio de señales hizo Jesús en Caná de Galilea, y manifestó su gloria; y sus discípulos creyeron en él”. (Juan 2:11)
TUPOS Y SEMEION
1.1 1 Jesús manifestó su gloria por medio de señales. Así lo expresa el apóstol Juan en su evangelio, al concluir la narración de la transformación del agua en vino en Cana de Galilea.
1.2 2 La versión Reina –Valera de la Biblia traduce como “señal” dos palabras del griego original en que fue escrito el Nuevo Testamento. Semeion y Tupos son los dos vocablos griegos que en nuestra Biblia en español se leen como señal. Para los efectos de nuestro estudio resulta interesante e instructivo auxiliarnos en la etimología.
La palabra tupos se traduce como señal en Juan 20:25. “Le dijeron, pues, los otros discípulos: Al Señor hemos visto. El les dijo: Si no viere en sus manos la señal de los clavos, y metiere mi dedo en el lugar de los clavos, y metiere mi mano en su costado, no creeré”.
La reacción de Tomás, exigiendo ver la “señal” (tupos) de los clavos en las manos y los pies de Jesús nos indica que tupos se refiere a una evidencia, demostración o huella que identifica algo. Tupos es el equivalente, por ejemplo, a una señal de transito. Tupos es una señal que identifica algo. La palabra traducida señal en Juan 2:11 para referirse al “principio de señales” que hizo Jesús en Cana de Galilea es SEMEION. Al contrario de tupos, semeion se refiere a un portento, una maravilla, un prodigio, semeion es la suspensión temporal de las leyes naturales en una situación específica, por la intervención divina para cumplir propósitos divinos. Semeion es lo que conocemos comúnmente como milagro. Juan es el evangelio de las señales. Según Juan Jesús manifestó su gloria por medio de señales. Así que para conocer las manifestaciones de la gloria de Dioses necesario escudriñar las señales registradas en el Evangelio de Juan. Juan 4:46-54 nos habla del segundo semeion de Jesús. Esta “segunda señal” es la fuente de nuestro estudio. “Vino, pues, Jesús otra vez a Caná de Galilea, donde había convertido el agua en vino.Y había en Capernaum un oficial del rey, cuyo hijo estaba enfermo. Este, cuando oyó que Jesús había llegado de Judea a Galilea, vino a él y le rogó que descendiese y sanase a su hijo, que estaba a punto de morir. Entonces Jesús le dijo: Si no viereis señales y prodigios, no creeréis. El oficial del rey le dijo: Señor, desciende antes que mi hijo muera. Jesús le dijo: Ve, tu hijo vive. Y el
hombre creyó la palabra que Jesús le dijo, y se fue. Cuando ya él descendía, sus siervos salieron a recibirle, y le dieron nuevas, diciendo: Tu hijo vive. Entonces él les preguntó a qué hora había comenzado a estar mejor. Y le dijeron: Ayer a las siete le dejó la fiebre. El padre entonces entendió que aquella era la hora en que Jesús le había dicho: Tu hijo vive; y creyó él con toda su casa. Esta segunda señal hizo Jesús, cuando fue de Judea a Galilea”. Juan 4:46-54.
HONRAR AL PROFETA
2.1 3 Juan introduce la narración de la “segunda señal” de Jesús de esta manera. “Dos días después, salió de allí y fue a Galilea. Porque Jesús mismo dio testimonio de que el profeta no tiene honra en su propia tierra. Cuando vino a Galilea, los galileos le recibieron, habiendo visto todas las cosas que había hecho en Jerusalén, en la fiesta; porque también ellos habían ido a la fiesta”. (Juan 4:43-45).
Observar la geografía del Israel del tiempo del Nuevo Testamento contribuye a darnos una mejor compresión de lo escrito por Juan. Israel se dividia en los territorios de Judea, Perea, y Galilea, Decápolis y Samaria. Jesús dedicó la mayor parte de su ministerio a Galilea, región a la que pertenece Cana. De Cana Jesús subió a Jerusalén, perteneciente a Judea, donde realizó la primera purificación del templo. Al ser rechazado en la capital religiosa y política de su pueblo, Jesús retorna a Galilea. Juan es enfático al indicar la causa por la que Jesús desciende nuevamente a Galilea: “El profeta no es honrado en su propia tierra”.
2.2 4 El detalle anotado es de significativa importancia para recibir la revelación de esta lección veamos pasajes similares que narran el rechazo de Jesús. ¿No es éste el hijo del carpintero? ¿No se llama su madre María, y sus hermanos, Jacobo, José, Simón y Judas? ¿No están todas sus hermanas con nosotros? ¿De dónde, pues, tiene éste todas estas cosas? Y se escandalizaban de él. Pero Jesús les dijo: No hay profeta sin honra, sino en su propia tierra y en su casa. Y no hizo allí muchos milagros, a causa de la incredulidad de ellos”. (Mateo 13:55-58) “Y añadió: De cierto os digo, que ningún profeta es acepto en su propia tierra”. (Lucas 4:24) “Mas Jesús les decía: No hay profeta sin honra sino en su propia tierra, y entre sus parientes, y en su casa. Y no pudo hacer allí ningún milagro, salvo que sanó a unos pocos enfermos, poniendo sobre ellos las manos”. (Marcos 6:4-5)
2.3 5 Un semeion requiere la concordancia entre quien busca el milagro y el instrumento de Dios para realizarlo. Si no se honra al profeta, que para nosotros sería, por ejemplo el pastor o el líder, la unción no fluye y la gloria de Dios no se manifiesta. Jesús mismo “no pudo” hacer los milagros que hubiera deseado, por causa del rechazo del pueblo. Aunque exista la
intención divina de manifestar su gloria, deshonrar al profeta inhibe el semeion.
La actitud contrastante del oficial del rey es lo que concita la atención de Juan. Mientras que en Judea y en Nazaret, el pueblo donde se crio, Jesús fue rechazado, este hombre influyente rompió el paradigma y acudió a Jesús por causa de su necesidad. Los paisanos de Nazaret y los religiosos de Jerusalén rechazaron a Jesús, sin embargo, el oficial del rey lo reconoció como enviado de Dios.
Amado(a): ¡Rompe los paradigmas! Quiebra los estereotipos, aniquila los impedimentos, destruye las barreras. ¡Atrévete a creer por tu milagro! Amén 2.4 6 No se puede recibir la bendición de Dios cuestionando al instrumento. No se acepta un mensaje rechazando al mensajero. Jesús no fue rechazado por su moral o su teología. Jesús fue rechazado por su procedencia, su mensaje renovador y por su relación con los pecadores. Rechazar a Jesús privó a Nazaret y a Jerusalén de las manifestaciones de la gloria de Dios. Si el mensajero vive consagrado a Dios y proclama un mensaje bíblico, honra su ministerio y recibirás tu semeion.
DESARROLLAR FE
3.1 7 Dios manifiesta su gloria en una atmosfera de fe. Quien busca un semeion de Dio precisa desarrollar fe. El hombre de nuestra historia era un alto oficial de Herodes Antipas. El Herodes de Juan era hijo de Herodes El Grande, quien reinaba en los días del nacimiento de Jesús y quien ordenó la muerte de los niños de Belén. Muerto Herodes el Grande, el reino se dividió entre sus cuatro hijos, uno de los cuales fue Herodes Antipa, a quien le correspondió gobernar en Galilea.
Es lógico pensar que el oficial de Juan4 tenía acceso a los médicos, a la medicina, a la farmacología y los tratamientos terapéuticos como pocas personas pudieran tenerlos. El oficial del rey era un hombre de posición y posesiones. Empero, a él, como a todos, le llegó el momento cuando ni la posición ni las posesiones podían resolver su necesidad. Su hijo moriría sin que su nobleza pudiera evitarlo. Allí se inicia el desarrollo de su fe. Cuando nada ni nadie puede, ¡Jesús puede!
3.2 8 La fe es Activa.
La fe que no hace nada, nada obtiene. Santiago lo condensa así: ¿Mas quieres saber, hombre vano, que la fe sin obras es muerta? (Santiago 2.:20)
Ya sabemos que: “Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan”. (Hebreos 11:06)
A las hermanas del difunto Lázaro Jesús les dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios? (Juan 11:40). Ver la gloria de Dios requiere fe.
3.2 9 La fe se desarrolla en la acción. La acción tiene un componente de esfuerzo. El noble era de Capernaum, pero Jesús se encontraba en Cana. Juan especifica que el noble “fue a Jesús”. “Vino, pues, Jesús otra vez a Caná de Galilea, donde había convertido el agua en vino.Y había en Capernaum un oficial del rey, cuyo hijo estaba enfermo. Este, cuando oyó que Jesús había llegado de Judea a Galilea, vino a él y le rogó que descendiese y sanase a su hijo, que estaba a punto de morir”. (Juan 4:46-47)
32 Kilómetros separan a Cana de Capernaum. El noble viajó 32 kilómetros para encontrar a Jesús. Esto es esfuerzo. Esto es acción. Esto es fe.
¿Queremos ver la gloria de Dios? ¿Necesitamos un semeion? Activemos la fe, pongámosla en movimiento, hagamos algo, ejercitémonos en base a las promesas de Dios.
3.3 10 La fe se desarrolla en la acción personal. La fe es intrínsecamente personal. El noble tenía siervos, trabajadores a su servicio, a nivel oficial y en el plano familiar, pero él no envió a ninguno de ellos. El noble fue él personalmente, a encontrarse con Jesús. En cierta manera, el noble se humilló a buscar a un profeta cuestionado y rechazado.
Es cierto que podemos solicitar y esperar que los hermanos oren por nosotros. Empero también es cierto que el semeion se recibe en persona. Así lo hizo Jairo, la sirofenicia, Bartimeo el leproso, por citar algunos ejemplos.
Amado(a): No dependas de la oración de otros. Es bueno que otros oren por ti, pero tu semeion vendrá por tu propia oración. Amén.
3.4 11 La fe no se detiene ni se distrae. El noble demostró su fe manteniéndose enfocado en su objetivo. Notemos este detalle en el primer intercambio de palabras entre el noble y Jesús. “Este, cuando oyó que Jesús había llegado de Judea a Galilea, vino a él y le rogó que descendiese y sanase a su hijo, que estaba a punto de morir. Entonces Jesús le dijo: Si no viereis señales y
prodigios, no creeréis. El oficial del rey le dijo: Señor, desciende antes que mi hijo muera”. (4:47-49)
Ante la rogativa del noble para que descendiera a Capernaum, Jesús replica: “Si no viereis señales y prodigios, no creeréis”
El noble, entonces, obvia la respuesta de Jesús, e insiste en su petición: “Señor, desciende antes que mi hijo muera”.
El noble le dio a Jesús un titulo divino: Señor (Kunios). Actuando en consecuencia con su enfoque, no se detuvo, ni se desvió a discutir, sencillamente, insistió en su petición. Fe es decisión, firmeza y avance.
Amado(a): no te detengas ni te desvíes. No discutas ni te defiendas. Enfócate en tu objetivo y verás tu semeion.
3.5 12 La fe le cree a Dios. La fe se desarrolla creyendo la palabra. “Jesús le dijo: Ve, tu hijo vive. Y el hombre creyó la palabra que Jesús le dijo, y se fue”. (4:50)
Así como la fe actúa para ir a Jesús, actúa también para confiar plenamente en lo que Jesús dice. “El noble creyó la palabra que Jesús le dijo, y se fue”. El noble salió confiado en su milagro. El pidió que Jesús descendiera a Capernaúm, pero en realidad lo que él deseaba era que su hijo fuera sano. El noble no logró que Jesús fuera a su casa, pero sí logró que Jesús proclamar la sanidad de su hijo. Por esa palabra, se fue creyendo en su semeion. La fe se desarrolla cuando le crees a Dios. Sanar al hijo del noble sin visitarlo fue un semeion mayor que el buscado por el noble. “Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros, a él sea gloria en la iglesia en Cristo Jesús por todas las edades, por los siglos de los siglos. Amén”. (Efesios 3:20-21).
3.6 13 ¿Necesitas que Dios interrumpa las leyes naturales o el desarrollo normal de los eventos, para ver la gloria de Dios? Recuerda que Jesús manifiesta su gloria por medio de señales, mismas que son la respuesta divina a nuestras necesidades.
Evita cuestionar o rechazar al mensajero portador de tu bendición. Si tu líder camina en santidad y temor de Dios y anuncia la palabra con sustento biblico, abre tu corazón a las promesas de Dios.
Desarrolla tu fe. La fe sin obras está muerta. Activa tu fe sin depender de otros. No te detengas ni te distraigas. Enfócate en Jesús y en tu milagro. Desarrolla tu fe hasta creer plenamente en lo que Dios te ha dicho.
Nos corresponde ver ahora como la fe vence las barreras. Un semeion es el triunfo sobre los límites naturales. Este tema lo abordaremos en la próxima lección. Hoy nos enfocamos en activar nuestra fe. Jesús nos espera para manifestar su gloria por medio del semeion que necesitamos. Amén.
