Seis días trabajarás y harás toda tu obra, 10

(1)

Los Diez Mandamientos, Las Leyes Gobernando

la Obligación del Hombre Hacia Dios (Parte 4):

El Cuarto Mandamiento

: Concerniendo el Día de

Dios---Nunca Falle de Guardar el día de reposo, o de Santificarlo,

Éxodo 20:8-11

.

2. (Éxodo 20:9-10) Los Diez Mandamientos---Obediencia---El

Día de Reposo ---Domingo---Trabajo---Adoración: ¿Cuál es

el encargo del cuarto mandamiento?

Éxodo 20:9-10 (LBLA)

9

“Seis días trabajarás y harás toda tu obra,

10

más el séptimo día es día de reposo para el SEÑOR tu Dios; no harás en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu ganado, ni el extranjero que está contigo”.

“Acuérdate del día de reposo para santificarlo”.

B. No trabajaras el séptimo día, de ninguna manera (Éxodo 20:10).

Éxodo 20:10 (LBLA)

10

“Mas el séptimo día es día de reposo para el SEÑOR tu Dios; no harás en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu ganado, ni el extranjero que está contigo”.

Note que fuertemente Dios espera que este mandamiento sea obedecido: ninguna persona debe trabajar siete días a la semana...

1. usted (hombre o mujer)

2. su hijo o hija

3. ni sus empleados

4. ni sus animales

5. ni aun los extranjeros

Pensamiento 1. El cuarto mandamiento fue dado para nuestro bienestar. Sin el descanso del día de reposo, nosotros muy pronto acabaríamos con nuestro cuerpo. Nosotros estaríamos constantemente cansados, acabados, y quemados. La

productividad pronto declinaría. Esto ha sido comprobado una y otra vez en naciones regidas por dictadores y en los mercados de esclavitud que han demandado la fuerza laboral constante y sin descanso. La productividad cayó fuertemente, tanto como la riqueza, y la fuerza física, y también la alerta mental y habilidad.

(2)

El descanso una vez a la semana es un absoluto esencial para el cuerpo humano. Los negocios y la labor, individuos o grupos---todos debemos de proteger nuestros cuerpos y la producción de nuestra sociedad y su economía.

Pero, ¿Cómo? Obedeciendo el cuarto mandamiento de Dios: Acuérdate del día de reposo; para santificarlo---no trabajes el día de reposo. Permite que tu mente y cuerpo descansen un día a la semana.

11

“Porque en seis días hizo el SEÑOR los cielos y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto, el SEÑOR bendijo el día de reposo y lo santificó”.

12

“Seis días trabajarás, pero el séptimo día dejarás de trabajar, para que descansen tu buey y tu asno, y para que el hijo de tu sierva, así como el extranjero renueven sus fuerzas”.

14

“Por tanto, habéis de guardar el día de reposo porque es santo para vosotros. Todo el que lo profane morirá irremisiblemente; porque cualquiera que haga obra alguna en él, esa persona será cortada de entre su pueblo”.

3. (Éxodo 21:11) Los Diez Mandamientos---El Día de

Reposo---Domingo: ¿Por qué dio Dios este mandamiento?

11

Dios da dos razones fuertes del porque el día de reposo debe ser guardado.

1. El hombre necesita un día para descansar: el necesita descansar y relajarse un día de los siete (Éxodo 20:11a).

11

El SEÑOR mismo creo los cielos y la tierra en seis días y después descanso el séptimo día (Génesis 2:1-3).

Génesis 2:1-3 (LBLA)

1

“Así fueron acabados los cielos y la tierra y todas sus huestes.

2

Y en el séptimo día completó Dios la obra que había hecho, y reposó en el día séptimo de toda la obra que había hecho.

(3)

3

Y bendijo Dios el séptimo día y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que Él había creado y hecho”.

El Señor le mostro al hombre que existe un fluir natural de la vida. Por ejemplo, existe un fluir natural desde el nacimiento hasta el crecimiento, envejecer y morir, inhalar y exhalar aire. Y la lista de ejemplos sigue y sigue.

Pero para el punto presente, existe el fluir natural del día y la noche y del trabajo al dormir. Dios sabe esto; El creo el fluir natural de la vida. Por lo tanto, Él sabe que el hombre debe por naturaleza descansar tanto como trabajar. Él sabe que una persona no puede simplemente seguir trabajando de día en día y semana tras semana sin un descanso de la rutina. El cuerpo humano nunca podría sostenerse en medio de tal presión. Esta es una de las mayores razones del día de reposo, para que el hombre pueda tener un

descanso de su trabajo normal rutinario, para que él pueda tener un día dado para descansar y relajarse.

2. Ahora note por que el séptimo día debe ser un día para adorar (Éxodo 20:11b):

porque el SEÑOR mismo bendijo el día de reposo y lo santifico.

11

El Mismo lo separo como un día especial, como un día cuando el hombre traería su enfoque sobre el adorar y honrar a Dios.

Pensamiento 1. El día de reposo es solo una sombra---un cuadro, un tipo, un símbolo---del Señor Jesucristo. Esto es exactamente lo que la Escritura dice:

Colosenses 2:16-17 (LBLA)

16

“Por tanto, que nadie se constituya en vuestro juez con respecto a comida o bebida, o en cuanto a día de fiesta, o luna nueva, o día de reposo;

17

cosas que sólo son sombra de lo que ha de venir, pero el cuerpo pertenece a Cristo”.

El descanso y adoración el día de reposo nos apuntan hacia el Señor Jesucristo; el día de reposo es un cuadro del perfecto descanso y de adoración que Jesucristo le trae al hombre. El día de reposo le da al hombre un día para descansar, pero Jesucristo le da al hombre el descanso, un completo y perfecto descanso y una adoración perfecta, la perfecta seguridad de que somos aceptables a Dios.

1) Jesucristo nos da el descanso de la salvación y del rescate, descanso de la carga del pecado.

(4)

Mateo 11:28 (LBLA)

28

“Venid a mí, todos los que estáis cansados y cargados, y yo os haré descansar”.

2) Jesucristo nos da el descanso de la libertad, descanso de las ataduras y de la esclavitud del pecado.

1 Pedro 2:24 (LBLA)

24

“Y El mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre la cruz, a fin de que muramos al pecado y vivamos a la justicia, porque por sus heridas fuisteis sanados”.

3) Jesucristo nos da descanso de la condenación.

Romanos 8:1 (LBLA)

1

“Por consiguiente, no hay ahora condenación para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne sino conforme al Espíritu”.

3

“Pues lo que la ley no pudo hacer, ya que era débil por causa de la carne, Dios lo hizo: enviando a su propio Hijo en semejanza de carne de pecado y como ofrenda por el pecado, condenó al pecado en la carne”.

4) Jesucristo nos da el descanso de la conquista y la victoria, la gloriosa libertad de vivir una vida sobre las terribles pruebas y sufrimientos de este mundo.

2 Corintios 2:14 (LBLA)

14

“Pero gracias a Dios, que en Cristo siempre nos lleva en triunfo, y que por medio de nosotros manifiesta en todo lugar la fragancia de su conocimiento”.

1 Juan 5:4-5 (LBLA)

4

“Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo: nuestra fe.

5

¿Y quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?”

5) Jesucristo nos da el descanso de su guianza.

20

“Enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado; y he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”.

Juan 16:13 (LBLA)

13

“Pero cuando El, el Espíritu de verdad, venga, os guiará a toda la verdad, porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará

(5)

todo lo que oiga, y os hará saber lo que habrá de venir”.

1 Corintios 10:13 (LBLA)

13

“No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea común a los hombres; y fiel es Dios, que no permitirá que vosotros seáis tentados más allá de lo que podéis soportar, sino que con la tentación proveerá también la vía de escape, a fin de que podáis resistirla”.

6) Jesucristo nos da el descanso de la provisión.

33

“Pero buscad primero su reino y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas”.

Salmo 23:1-6 (LBLA)

1

“Salmo de David. El SEÑOR es mi pastor, nada me faltará.

2

En lugares de verdes pastos me hace descansar; junto a aguas de reposo me conduce.

3

El restaura mi alma; me guía por senderos de justicia por amor de su nombre.

4

Aunque pase por el valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estás conmigo; tu vara y tu cayado me infunden aliento.

5

Tú preparas mesa delante de mí en presencia de mis enemigos; has ungido mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando.

6

Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa del SEÑOR moraré por largos días”.

7) Jesucristo nos da el descanso de la seguridad, la seguridad de la seguridad y la protección.

35

“¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?”

Romanos 8:37-39 (LBLA)

37

“Pero en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.

38

Porque estoy convencido de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni lo presente, ni lo por venir, ni los poderes,

39

ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios que es en Cristo Jesús Señor nuestro”.