Facultad de Ciencias Médicas de Artemisa
Policlínico Docente “Dr. Tomás Romay Chacón”
INTERVENCION EDUCATIVA EN EL RIESGO PRECONCEPCIONAL.
Autor: Dra. Eulimir Carolina Velásquez Marcano Residente de 2do año en MGI
Tutor: Dr. Fernando Ibáñez Cayón
Especialista en 2do grado en Ginecobstetricia
Ms. En atención integral a la mujer
Profesor Auxiliar
Tesis para optar por el Título de Especialista en primer grado en Medicina General Integral
Agradecimientos
…A mis padres por apoyarme siempre.
…A esposo por ayudarme cuando más lo necesito.
RESUMEN
Se realizó un estudio experimental de intervención, con el objetivo de diseñar
una estrategia de intervención educativa en mujeres en edad fértil en el CMF
# 12 del Policlínico Dr. Tomás Romay Chacón de Artemisa, en el periodo
comprendido de agosto 2015 a abril 2016, para para disminuir el riesgo
preconcepcional en la población femenina en edad fértil. El universo lo
constituyeron 251 pacientes que representaron a todas las mujeres en edad
fértil, la muestra seleccionada mediante un muestreo aleatorio simple
representada por 85 pacientes. Para el procesamiento de la información se
aplicaron métodos de estadística descriptiva. Los resultados fueron
procesados en una base de datos estadísticos de Microsoft Excel, para
determinar el comportamiento de la variable nivel de conocimiento sobre
riesgo se empleó el test de entrada y salida Anova de Freidman. Los
resultados muestran que con la aplicación de la estrategia de intervencion
aumentó considerablemente el nivel de conocimientos en el grupo de estudio
y se elaboraron recomendaciones para incrementar el trabajo de orientación
y consejería por parte del personal de salud, dándole participación a la
comunidad, a la pareja y a la familia, con el objetivo de promover
comportamientos saludables y concebir el embarazo en el momento más
Tabla de Contenidos:
INTRODUCCION ... Pág. 5 PROBLEMA CIENTIFICO………Pág. 11
OBJETIVOS ... Pág. 12
MARCO TEORICO… ... Pág. 13
DISEÑO METODOLOGICO… ... Pág. 31
RESULTADOS ... Pág. 35
CONCLUSIONES ... Pág. 48
RECOMENDACIONES ... Pág. 49
BIBIOGRAFIA REFERENCIADA ... Pág. 50
INTRODUCCIÓN
La salud reproductiva es considerada como la posibilidad del individuo de tener una
vida sexual plena, con capacidad para reproducirse y a la vez, decidir cuántos hijos
tener y cuando; a través de esta salud reproductiva y las diferentes aristas que ella
incluye, les da la posibilidad de seleccionar el anticonceptivo más adecuado, o/a
tener acceso a otros métodos de regulación de la fecundidad que no estén fuera de
la ley , así como a los servicios adecuados de atención en salud que permitan a la
mujer un embarazo y un parto seguro, y a la pareja la posibilidad de tener hijos
saludables(1) .
El médico de la familia, tiene entre las funciones más importantes: la promoción y
prevención de la salud; por lo que es de gran importancia además de otros
programas, el de planificación familiar; este debe lograrse con la participación libre,
consiente y voluntaria de las parejas, por lo cual los individuos deben tener una
adecuada educación sexual.
La salud materna infantil es uno de los indicadores que se utilizan para medir el nivel
de desarrollo de un país. Tiene como objetivo conseguir el óptimo estado para las
madres y los niños (2). El comportamiento de este indicador varía en dependencia
del nivel de desarrollo. Cuando se analiza la mortalidad materno infantil podemos
darnos cuenta que es mayor en países menos desarrollados, zonas rurales, mujeres
con bajo nivel educacional y económico, edades tempranas o tardías. Esto deja
claro que existe un conjunto de elementos o circunstancias que predisponen o
condicionan la aparición de estos eventos. Son los llamados factores de riesgo, los
que pueden y deben ser identificados en la medicina preventiva para que se pueda
ejercer acciones de salud que tienden a disminuir la probabilidad de enfermar (3,2).
Se considera riesgo reproductivo preconcepcional todo aquel factor predisponente
de provocar daño en ella, o en el producto de la concepción, de involucrarse en el
proceso reproductivo (3).
Esta probabilidad está dada por factores condicionantes, bien sea enfermedades o
circunstancias que interfieren durante el embarazo, parto o puerperio. Esta
probabilidad no es igual para todas las mujeres, aun cuando el mismo factor esté
presente en varias mujeres, es decir que la magnitud del riesgo es individual por lo
que es necesario aplicar un enfoque integral, analítico e individualizado, del mismo (4,5).
Todo lo antes expuesto hizo necesario la creación de un programa de atención a
estas pacientes, surgiendo así el programa de profilaxis del riesgo materno
preconcepcional, el cual constituye, sin lugar a dudas de manera ostensible, a la
disminución de las tasas de mortalidad materna, peri natal e infantil (6,7), el mismo a
través del tiempo ha ido sufriendo transformaciones como por ejemplo: creación del
programa materno- infantil, que comenzó a desarrollarse en la década del 70 (7).
A continuación en el 1974 se crea la atención sectorizada en el nivel primario donde
la Ginecobstetricia recibe un lugar especial y en 1979 queda establecida la
metodología de la consulta de profilaxis de riesgo materno preconcepcional(8).En
1980 se determinaron metas precisas para el año 2000, que constituyeron
directrices a seguir, para el logro de un mejor manejo y control de la salud
materno-infantil, entre otras, pudiendo citarse por ejemplo: La Dispensarización en cada área
de salud del 15 al 30 % del total de las mujeres con riesgo reproductivo. Los médicos
de familia al conocer la población, están en posición privilegiada, lo que les permite,
detectar, tratar y modificar, los factores de riesgos que aparezcan en la población
femenina de sus áreas, no solo de las gestantes, sino de toda la población femenina
en edad reproductiva. Se estima que en el país existen entre el 15 y el 25 % de
permite clasificarlas como mujer con riesgo reproductivo preconcepcional,
refiriéndose en específico al riesgo real modificable (9,10).
Dichas mujeres deben seguirse en consulta de riesgo preconcepcional, y
planificación familiar, pero es conocido que no se ha logrado diagnosticar ni seguir
adecuadamente al total de ellas, solo se sigue a las de alto riesgo, y no lográndose
modificar del todo los mismos.
El Ministerio de Salud Pública como sistema único de salud en la sociedad ejerce la
función de aplicar programas que favorezcan la salud de la población. En Cuba uno
de estos programas priorizados es el de Atención Materno Infantil, que tiene entre
las múltiples responsabilidades la profilaxis de la morbi-mortalidad materna infantil,
razón que determina al Programa de atención materno infantil (PAMI), como
eslabón fundamental en la cadena de la salud social. Desde sus inicios el PAMI, en
aras de ir perfeccionando el trabajo, basado en las experiencias crecientes a partir
de errores de otros tiempos y realidades de tiempos actuales, instituye el control del
riesgo preconcepcional desde 1991, los resultados cada vez más optimistas de
nuestro país con relación a la salud materno infantil han hecho que se acuda al
detalle más exquisito, por lo que se desprende que los principales promotores y
ejecutores sean precisamente las personas responsables con el programa de
Medicina General Integral (3).
El médico de la familia tiene a su cargo el protagonismo de esta tarea siendo
prácticamente imposible en otras latitudes resolver adecuadamente problemas de
salud relacionados con el bienestar de la madre y el niño, lo que es muy necesario
en todo el continente americano que exhibe tasas muy elevadas de mortalidad
materno-infantil (2).
La salud Materno Infantil es uno de los indicadores que se utilizan para medir el
nivel de desarrollo de un país, debido a que persigue como objetivo el óptimo estado
complicaciones del embarazo, el parto y el puerperio. En el caso del riesgo
preconcepcional o más bien de su control, obviamente las mayores opciones
preventivas están en la vía educativa. Este es el caso en que debemos centrar
mayores esfuerzos, ya que teniendo este riesgo controlado, tendremos el 95% de
los factores que inciden en la salud reproductiva controlados también, y con ello
podremos abortar algunas de las insuficiencias del programa materno-infantil (3).
Corresponde al médico de la familia, verdadero "vigilante de la salud en su máxima
expresión", por su posición privilegiada de contacto directo con la comunidad,
desarrollar a plenitud acciones educativas de promoción y prevención de salud
frente a los factores de riesgo. En el caso de la salud materno - infantil este objetivo
se materializa en la identificación de factores psicológicos, sociológicos,
económicos, demográficos y biológicos que desempeñan un papel determinante en
el comportamiento de la morbi-mortalidad infantil para desarrollar acciones de
modificación o disminución de los factores de riesgo (6).
Es decir, para emprender cualquier estudio enfilado a la prevención del riesgo, es
preciso ante todo evaluar el grado de información o conocimiento que tienen las
personas acerca de los eventos que hacen probable el trastorno del fenómeno
salud/enfermedad, porque a partir de lo que conozca el individuo, portara
determinados sentimientos y asumirá conductas favorecedoras o no de su salud.
La salud física y mental de la futura madre, sus antecedentes patológicos, el medio
social y cultural en que se ha educado, su actitud y comportamiento influyen en la
procreación y por tanto en el producto de la concepción, y por ende en su salud
reproductiva la cual a su vez está influenciada por los factores de riesgos
preconcepcional genéticos o no.
Las enfermedades cardiovasculares, la hipertensión arterial y los problemas
un indicador de morbi-mortalidad para el producto, constituyendo además una de
las principales causas de riesgo preconcepcional y obstétricos (8).
Los métodos anticonceptivos son muy utilizados para controlar o ayudar a ello, los
más utilizados son, el DIU y las tabletas anticonceptivas. Master y Johnson,
consideran que un número elevado de jóvenes no hacen uso de los métodos
anticonceptivos por temor a ser descubiertos (11). No se puede dejar de mencionar
que para estas edades es conveniente indicar el preservativo como método eficaz
para la pareja, toda vez que está al alcance de todos, es más económico y evita la
adquisición de las temibles Infecciones de Transmisión Sexual.
La rotura prematura de membranas, la anemia ferropénica, la malnutrición materna
por defecto y el período intergenésico corto, así como la amenaza de parto
pretérmino, constituyen otros de los factores que determinan la morbi/mortalidad
materno/infantil; mientras que es de todos conocidos que la enfermedad
hipertensiva gravídica, entre otras, constituyen sin llegar a ser un riesgo en sí, una
de las causas más graves de muerte en el feto y en ocasiones en las madres, de no
ser bien controlada y/o detectada. Otros factores importantes en cuanto a riesgo y
que determinan la aparición del bajo peso al nacer, entre otras son la infección
cérvico vaginal, todo esto sugiere la necesidad de aportar un programa de
intervención educativa que modifique el conocimiento de las mujeres en edad fértil
y dispensarizadas como alto riego, para que modifiquen sus estilos de vidas de
manera tal que lleguen al proceso reproductivo desde la etapa preconcepcional en
mejores condiciones (4).
Con excepción de Cuba, en el resto de Latinoamérica, a pesar de los esfuerzos
realizados en materia de salud comunitaria, la atención médica no es integral y está
limitada en un gran por ciento a la labor asistencial. Se han comenzado a dar
grandes pasos en las labores de promoción y prevención pero aún queda mucho
por hacer para dar un enfoque de riesgo a un problema tan serio y urgente como el
riesgos. Según un informe de la Instancia Coordinadora de Acciones Políticas por
la Salud y Desarrollo de la Mujer, cada año se presentan víctimas, por causas
relacionadas con la maternidad en mujeres que presentaban factores de riesgo, lo
cual coincidentemente ubica estos como principales causas de muerte en mujeres
en edad reproductiva (5). Esta problemática se agudiza en las zonas rurales,
pequeñas comunidades o aldeas, donde la natalidad es muy elevada pues la pareja
desconoce la importancia de la planificación familiar, sobre todo en los casos en
que en la mujer está presente algún riesgo de tipo biológico, psicológico o
socioeconómico para la reproducción, los cuales deben ser puestos en
conocimiento de la pareja para planificar adecuadamente sus embarazos y poder
eliminar o atenuar las consecuencias de los mismos (6).
La experiencia en la práctica médica y docente, el diagnóstico efectuado, la revisión
de otras investigaciones relacionadas con el tema, así como la observación
sistemática, han permitido comprobar que aún existe desconocimiento en la
mayoría de las mujeres , por lo que mantienen una conducta sexual riesgosa que
favorece la incidencia de embarazos no deseados, lo que demuestra que se hace
imprescindible incrementar el desarrollo de programas educativos en aras de elevar
el nivel de conocimiento. La principal inquietud cognoscitiva aparece debido a que
estos factores son ignorados muchas veces, y no se cuenta con una definición
exacta del problema (7,8).
Se estima que en el país existen entre el 15 y el 25 % de mujeres entre 15 y 49 años
que tienen algunas condiciones que permite clasificarlas como mujer con riesgo
reproductivo preconcepcional, refiriéndose en específico al riesgo real modificable
(9,10).
En el policlínico Tomás Romay existen un total de 1121 mujeres de riesgo
reproductivo preconcepcional de total de la población en edad fértil, en particular el
GBT # 1 existen un total de 238 mujeres de riesgo reproductivo del total de las
Estas mujeres deben seguirse en consulta de riesgo materno preconcepcional, y
planificación familiar, pero es conocido que no se ha logrado diagnosticar ni seguir
adecuadamente al total de ellas, solo se sigue a las de alto riesgo, y no lográndose
modificar del todo los mismos.
Conociendo la importancia que tiene esta definición (riesgo preconcepcional) y que
la medicina en la comunidad tiene como objetivo fundamental la prevención, se hace
necesario brindarle a la población en edad fértil y con algún riesgo, el modo de
controlar la fecundidad. Se crea así la actividad de planeamiento familiar y de
anticoncepción, como un instrumento de trabajo en el riesgo preconcepcional y que
con la participación del médico de la familia adquiere su mayor dimensión, para
convertirse en una estrategia de salud, ya que tiene como fin proteger y mejorar la
salud de la familia y de la comunidad.
Problema científico:
¿Cómo contribuir a la disminución del riesgo preconcepcional en las mujeres en
edad fértil en el consultorio médico de familia #12 del Policlínico Dr. Tomás Romay
Chacón de Artemisa?
Como es conocido, en toda sociedad hay individuos, familias y grupos sociales,
cuya probabilidad de enfermar o morir son mayores; estos grupos, conocidos como
vulnerables, pueden y deben ser identificados en la medicina preventiva, para que
al conocer el riesgo, se puedan ejercer acciones de salud que tiendan a disminuir la
probabilidad de enfermarse. A pesar de no ser significativamente estadístico
queremos insistir en el valor real de esta investigación, pues estando asociado
directamente al riesgo preconcepcional, todo trabajo realizado para disminuir estas
tasas contribuye a elevar la calidad de vida de los individuos. En otras partes del
Tercer Mundo pero con un sistema de salud diferente al nuestro estos parámetros
OBJETIVOS:
Objetivo General: Diseñar una estrategia de intervención educativa para disminuir el riesgo preconcepcional en mujeres en edad fértil en el CMF #12 del Policlínico
Dr. Tomás Romay Chacón de Artemisa.
Objetivos específicos:
1. Distribuir la muestra según variables sociodemográficas como: edad, nivel
de escolaridad, estado civil y ocupación.
2. Identificar las patologías asociadas en mujeres en edad fértil de la muestra
estudiada.
3. Determinar el nivel de conocimiento sobre el riesgo preconcepcional en
mujeres de la edad fértil de la muestra seleccionada.
4. Elaborar una estrategia de intervención educativa para disminuir el riesgo
preconcepcional en mujeres en edad fértil.
5. Aplicar y evaluar la estrategia de intervención educativa para disminuir el
MARCO TEÓRICO
Inicio del movimiento APS
El término Movimiento de APS sólo es posible atribuirlo a los inicios de la década del
60 del siglo XX, cuando la Revolución democrática, popular, agraria y antiimperialista
toma el poder político e inicia profundas transformaciones políticas, económicas y
sociales, que en breve tiempo dan a la Revolución misma el carácter de socialista. En
este contexto, un mes después del triunfo revolucionario, en febrero de 1959, se crea
el Departamento de Asistencia Técnica, Material y Cultural al Campesinado del Ejército
Rebelde, y entre sus funciones se incluyen la atención a la salud de la población
campesina (11).
Esto no era cuantitativamente suficiente para la necesidad de la población, y en enero
de 1960 se aprueba la Ley 723, creando el Servicio Médico Social Rural (SMSR), que
ofrece a todos los recién graduados de medicina, contrato con salario muy atractivo y
estimulante para su tiempo y para un recién graduado. A este estímulo se añadió la
cláusula de ser obligatorio por un período mínimo de 6 meses, para acceder
posteriormente a cargos médicos estatales.
En 1973 el servicio registró 1 265 profesionales trabajando en el mismo. Cada uno por
un período de 2 años. En ese momento el 100 % se unía al servicio, ya se había hecho
tradición proclamar en el juramento de los graduados, desde 1965, la renuncia al
ejercicio privado de la profesión (12,13).
Según palabras del Comandante en Jefe: "... Hay mucho que hacer. Después del triunfo
será mayor el trabajo a realizar. No podemos defraudar la confianza que el pueblo de
Cuba ha puesto en nosotros. Hay que establecer, y tú de eso sabes más que yo, porque
eres médico, medidas a fondo para darle más bienestar y salud al pueblo. No hay que
esperar que las enfermedades lleguen con su amenaza tétrica, hay que prevenirlas,
hay que evitarlas. Desde ahora hay que ir elaborando los planes sanitarios, como los
económicos, los sociales y educacionales, y coordinarlos todos con eficacia funcional y
reivindicadora." (14).
Rural, fueron desde sus primeros momentos: la asistencia médica, la vigilancia
epidemiológica, la vacunación, la inspección sanitaria, la educación sanitaria y las
actuaciones forenses (12).
El Servicio Médico Rural fue el primer programa de impacto en lo relativo a APS y a la
salud pública en general, como prioridad por el abandono que a lo largo de nuestra
historia tenía la población rural; el compromiso político de la Revolución con el
campesino que había nutrido de combatientes a su ejército; el complemento que los
servicios de salud (y educación) representaban para la Reforma Agraria, eje principal
de la política revolucionaria en sus primeros años y motor del desarrollo económico (15).
Coincidiendo con la implantación del SMSR en las pequeñas ciudades, cabeceras de
municipios, se crearon las Unidades Sanitarias. Estas realizaban exclusivamente tareas
de APS: atención ambulatoria a pacientes bajo control de los programas contra
tuberculosis, lepra, enfermedades venéreas, embarazadas, diarreas agudas infantiles
y niños desnutridos. Ejecutaban los planes de vacunación, administraban los servicios
de disposición de residuales sólidos y líquidos, y ejercían la inspección sanitaria.
En estas unidades se integraron algunos programas verticales como: los de Profilaxis
de la Lepra, Enfermedades Cutáneas y Sífilis (PLECS), y el de control de la
Tuberculosis. Posteriormente estas Unidades Sanitarias asumieron todas las funciones
propias de la APS en las zonas urbanas de su municipio, dirigiendo las Casas de
Socorro que continuaban funcionando y los dispensarios infantiles de la Organización
Nacional de Dispensarios Infantiles ONDI.
Otro tipo de unidad de APS creada en 1962 fue el hogar materno, que se ha evaluado
como útil por su contribución a los resultados del programa materno infantil.
En 1964 se creó el Policlínico Integral., pues existían ya unidades con el nombre de
policlínico, pero se limitaban a la prestación de consultas a pacientes ambulatorios. El
nuevo policlínico se le asigna una población de 45 000 habitantes, la adopción de la
carpeta familiar, la sectorización de la población; la implantación de programas
orientados según daño o enfermedad (tuberculosis, enfermedades venéreas,
programa de inmunizaciones y la educación para la salud (16).
Luego aparece el Policlínico Integral, que se realizó en el denominado "Aleyda
Fernández Chardiet", bajo la dirección del doctor Roberto Fernández Elías, que tenía
como principios (17):
1 Es una institución médica que desarrolla actividades de promoción, protección y
recuperación de salud sobre la población de un área geográfica determinada,
mediante servicios que irradian al ámbito familiar.
2 Su propósito es la prestación de servicios básicos de salud con un sentido
dinámico, proyectándose e irradiándose hacia las comunidades que sirven a
través de personal de terreno, dentro de determinados límites geográficos que
reciben el nombre de áreas de salud.
Otro incuestionable aporte al mejoramiento de los indicadores de salud, lo constituyó la
campaña de alfabetización, que erradicó el analfabetismo como fenómeno social,
seguida de la campaña por el 6to grado.
El policlínico integral, generalizado a partir de 1964 y todo lo relativo a la APS fue
revisado 10 años después, encontrándose que:
1 el policlínico mantenía cierta integridad en su conjunto, pero las acciones se
desarrollaban de modo compartimentado
2 predominaban las acciones curativas
3 no se trabajaba en equipo
4 inestabilidad en el personal profesional
5 excesivas remisiones de pacientes al nivel secundario
6 influencia negativa para la APS de la formación médica en el escenario
hospitalario
Hecho el diagnóstico surgió un nuevo modelo de APS, que llamamos de medicina en
la comunidad y a su unidad base Policlínico Comunitario.
Las tareas fundamentales a desarrollar por estas unidades van encaminadas a
cumplimentar los Programas Básicos del Área, agrupados de forma coherente para la
atención a las personas y al medio, y se clasifican de la forma siguiente:
2 Programa de Atención Integral al Niño.
3 Programa de Atención Integral a la Mujer.
4 Programa de Atención Integral al Adulto.
5 Programa de Atención Integral Estomatológica.
6 Control Epidemiológico.
7 Programa de Atención al Medio Ambiente.
8 Higiene Urbana y Rural.
9 Higiene de los Alimentos.
10 Medicina del Trabajo.
11 Programa de Optimización de los Servicios.
12 Programa Administrativo.
13 Programa Docente y de Investigación.
Otra innovación fue la introducción del concepto de equipo de salud y la búsqueda de
una actitud de equipo. Según el documento programático del policlínico comunitario
(MINSAP. Fundamentación de un nuevo enfoque de la Medicina en la Comunidad. La
Habana: S/F.) "En el policlínico, todo su personal integra el equipo de salud del área
Los conceptos que se definieron como elementos esenciales del modelo de APS del
Policlínico Comunitario: integral sectorizado, regionalizado, continuo, dispensarizado,
en equipo y con participación activa de la comunidad.
Este modelo de atención representa un avance en la cantidad y calidad de la APS a
nuestra población, pero transcurridos alrededor de 15 años, se hicieron evidentes
ciertas limitaciones: déficit de recursos humanos calificados para la atención primaria;
dinámica organizativa que dificultaba la atención continua y oportuna de las personas;
inoperante relación con los hospitales de referencia, en especial en cuanto a
información cruzada sobre los pacientes; inadecuada sectorización de la población;
acentuado desbalance entre el desarrollo de los hospitales y la atención primaria en el
policlínico; creciente número de especialistas para la atención secundaria, frente a
indefinición del tipo de médico para atención primaria e insatisfacción de la población.
Estas circunstancias motivaron una nueva evaluación integral de la situación de la APS
vigente que llamamos de Medicina Familiar, o del Médico y Enfermera de la Familia, el
que se ha enriquecido con la creación de las Sedes Universitarias en los denominados
Policlínicos Universitarios, en los que, además de la labor de prevención, promoción,
tratamiento y rehabilitación, se desarrollan programas de formación y desarrollo de
recursos humanos e investigaciones científicas.
Un poco de historia.
Como se conoce, en toda sociedad hay individuos, familias y hasta grupos, cuya
probabilidad de enfermar o morir son mayores que la de otros. Estos grupos, conocidos
como vulnerables, pueden y deben ser identificados en la medicina preventiva, para
que al conocer el riesgo, se puedan ejercer acciones de salud que tiendan a disminuir
la probabilidad de enfermarse (2).
El ministerio de salud pública como sistema único de salud en la sociedad ejerce la
función de aplicar programas que favorezcan la salud de la población. En nuestro país
al responder al sistema político, no entra en contradicciones con la prioridad que para
nuestro gobierno él constituye, (además de él está entre otros importantes el de
educación). Uno de estos programas priorizados es el de Atención Materno Infantil (3),
que tiene entre las múltiples responsabilidades la profilaxis de la morbi-mortalidad
materna infantil, razón está que determina al PAMI como eslabón fundamental en la
cadena de la salud social (18).
Desde sus inicios el ( Programa de atención materno infantil) PAMI, en aras de ir
perfeccionando el trabajo, basado en las experiencias crecientes a partir de errores de
otros tiempos y realidades de tiempos actuales, instituye el control del riesgo
preconcepcional desde 1991, los resultados cada vez más optimistas de nuestro país
con relación a la salud materno infantil han hecho que se acuda al detalle más exquisito,
por lo que se desprende que los principales promotores y ejecutores sean precisamente
las personas responsables con el programa de Medicina General Integral( EBS) (3).
El médico de la familia tiene a su cargo el protagonismo de esta tarea siendo
salud relacionados con el bienestar de la madre y el niño, lo que es muy necesario en
todo el continente americano que exhibe tasas muy elevadas de mortalidad materno-
infantil.
La salud Materno Infantil es uno de los indicadores que se utilizan para medir el nivel
de desarrollo de un país, debido a que persigue como objetivo el óptimo estado de la
madre, así como el del producto de la gestación evitando las posibles complicaciones
del embarazo, el parto y el puerperio. En el caso del riesgo preconcepcional o más bien
de su control, obviamente las mayores opciones preventivas están en la vía educativa
(18). Este es el caso en que debemos centrar nuestros mayores esfuerzos, toda vez que
teniendo este riesgo controlado, tendremos el 95% de los factores que inciden en la
salud reproductiva controlados también, y con ello podremos abortar algunos de las
insuficiencias del programa materno-infantil. Corresponde al médico de la familia,
verdadero "vigilante de la salud en su máxima expresión", por su posición privilegiada
de contacto directo con la comunidad, desarrollar a plenitud acciones educativas de
promoción y prevención de salud frente a los factores de riesgo. En el caso de la salud
materno - infantil este objetivo se materializa en la identificación de factores
psicológicos, sociológicos, económicos, demográficos y biológicos que desempeñan un
papel determinante en el comportamiento de la morbi-mortalidad
infantil para desarrollar acciones de modificación o disminución de los factores de riesgo (18-19).
En disímiles ocasiones ha sido cuestionado la idea que sobre educación para la salud
han mantenido las ciencias biomédicas, porque se dice que solo se ha reducido a
informar y no a otras vertientes de la misma, si bien es cierto que la información es una
condición necesaria, también lo es el conocimiento, que resulta insuficiente para que se dé un proceso de configuración de conductas efectivas desde los procesos de salud
materno - infantil y desde la perspectiva del riesgo preconcepcional (20).
Es decir, para emprender cualquier estudio enfilado a la prevención del riesgo, es
preciso ante todo evaluar el grado de información o conocimiento que tienen las
salud/enfermedad, porque a partir de lo que conozca el individuo, portara determinados
sentimientos y asumirá conductas favorecedoras o no de su salud (19,21) .
La salud física y mental de la futura madre, sus antecedentes patológicos, el medio
social y cultural en que se ha educado, su actitud y comportamiento influyen en la
procreación y por tanto en el producto de la concepción, y por ende en su salud
reproductiva la cual a su vez está influenciada por los factores de riesgos
preconcepcionales genéticos o no (22).
Las enfermedades cardiovasculares La hipertensión arterial y los problemas
nutricionales, son causa de muerte durante el periodo grávido-puerperil, así como un
indicador de morbi-mortalidad para el producto (Rn) (8), constituyendo además una de
las principales causas de riesgo preconcepcional y obstétricos (23,24).
Los métodos anticonceptivos son muy utilizados para controlar o ayudar a ello, los más
utilizados son, el DIU y las tabletas anticonceptivas (25,26). Master y Jonson, consideran
que un número elevado de jóvenes no hacen uso de los métodos anticonceptivos por
temor a ser descubiertos. No podemos dejar de mencionar que para estas edades es
conveniente indicar el preservativo como método eficaz para la pareja, toda vez que
está al alcance de todos, es más económico y evita la adquisición de las temibles
infecciones de transmisión sexual (ITS) (27).
La rotura prematura de membranas, la anemia ferropénica, la malnutrición materna por
defecto y el período intergenésico corto, así como la amenaza de parto pretérmino,
constituyen otros de los factores que determinan la morbi/mortalidad materno/infantil;
mientras que es de todos conocidos que la enfermedad hipertensiva gravídica, entre
otras, constituyen sin llegar a ser un riesgo en sí, una de las causas más graves de
muerte en el feto y en ocasiones en las madres, de no ser bien controlada y/o detectada.
Otros factores importantes en cuanto a riesgo y que determinan la aparición del BPN
entre otras son la infección cérvico vaginal, todo esto apoya nuestro deseo de aportar
un programa de intervención educativa que modifique el conocimiento de las mujeres
que modifiquen sus estilos de vidas de manera tal que lleguen al proceso reproductivo
desde la etapa preconcepcional en mejores condiciones. La mala nutrición de la madre
antes de la concepción, es un estado desfavorable de la nutrición materna, donde el
índice de masa corporal para la talla es inferior a 19.8 kg/m2 (12). Este estado se
establece cuando se produce un desequilibrio entre las necesidades y los aportes de
energía y nutrientes al organismo que impiden el buen desarrollo de las funciones
biológicas (28).
Según un informe de una comisión mixta de expertos OMS/FAO alrededor del 30 % de
la humanidad sufre de una o más formas de malnutrición donde se señalan
consecuencias lamentables para los humanos, entre ellas podemos relacionar la
muerte, discapacidades, retraso del desarrollo mental y física. Las personas que viven
en estas sociedades viciadas que ven a las personas y sus necesidades fuera de la
esfera del estado, exhiben entre otras afecciones secundarias a la malnutrición la
anemia ferropénica, la mortalidad infantil elevada, mayor posibilidad de nacimientos con
retraso del crecimiento intrauterino, partos pretérminos e incremento del riesgo de
adquirir enfermedades infecciosas por parte del binomio materno fetal (29).
Del mismo modo, el informe del subcomité sobre nutrición en el 4to reporte sobre la
situación mundial de la nutrición (30), informa valida la malnutrición frecuentemente
desde el útero, continua en la edad pediátrica y afecta a varias generaciones.
A pesar de no ser significativamente estadístico queremos insistir en el valor real de
esta investigación, pues estando asociado directamente al riesgo preconcepcional, todo
trabajo realizado para disminuir estas tasas aumenta la calidad de la salud. En otras
partes del Tercer Mundo, pero con un sistema de salud diferente al nuestro este
parámetro distan de la realidad cubana (31,32,33).
Conociendo la importancia que tiene esta definición (riesgo preconcepcional) y que la
medicina en la comunidad tiene como objetivo fundamental la prevención, se hace
necesario brindarle a la población en edad fértil y con algún riesgo, el modo de controlar
anticoncepción, como un instrumento de trabajo en el riesgo preconcepcional y que con
la participación del médico de la familia adquiere su mayor dimensión, para convertirse
en una estrategia de salud, ya que tiene como fin proteger y mejorar la salud de la
familia y de la comunidad.
El médico de la familia como primera puerta de entrada de la población a los servicios
de salud debe en cuanto al riesgo reproductivo tener en cuenta:
MAYOR CONTROL DEL RIESGO REPRODUCTIVO: Esto lo efectuara a través de una serie de actividades y/o parámetros de trabajo tales como.
1. Identificar el factor de riesgo y reflejarlo en la historia clínica familiar.
2. Determinar la medición del riesgo, brindando atención en orden de
prioridades en su plan de acción.
3. Atención cada seis meses en los consultorios médicos de familia de los
riesgos reproductivos bajos, por el EBS e interconsulta con el profesor.
4. Atención del alto riesgo reproductivo, en consulta de Planificación
Familiar, cada 3 meses y según el riesgo se evaluará mensual, luego de
confeccionada su historia clínica general modificando el riesgo de ser
posible.
5. Si requiere de una anticoncepción definitiva se enviará al nivel secundario.
Las consultas de planificación familiar y de riesgo preconcepcional se deben realizar
mensualmente, no obstante, puede escogerse otra frecuencia si se considera más
apropiado, dado las características particulares del lugar en el que se trabaje o en los
casos específicos que lo requieran. Igualmente, si surge algún problema, puede citarse
a la mujer antes del mes o para cuando se considere necesario hacer la nueva
valoración. El dinamismo debe imperar, en relación con este aspecto (2).
CLASIFICACIÓN DE LOS FACTORES DE RIESGO PRECONCEPCIONAL
1. Antecedentes biológicos:
Menor de 18 años, mayor de 35 años.
Talla inferior a 150 cm.
2. Antecedente obstétrico:
Aborto a repetición
Multípara
Periodo ínter genésico corto
Defunciones neonatales y/o fetales,
Bajo peso al nacer,
Rh sensibilizado,
Cesárea anterior.
3. Afecciones asociadas:
Asma bronquial
Endocrinopatías
Cardiopatías
Nefropatías
HTA
Epilepsia
Anemia de células falciformes y otras.
4. Antecedentes socio ambientales:
Bajo nivel de escolaridad
Madre soltera
Relaciones sexuales inestables,
Hábitos tóxicos por alcoholismo,
Hábitos tóxicos por tabaquismo,
Condiciones de vida o de trabajo adversas
OBJETIVOS DE LA CONSULTA RIESGO MATERNO PRECONCEPCIONAL
Tiene tres objetivos fundamentales:
que puedan agravarse durante el embarazo.
• Recomendar una anticoncepción adecuada hasta que pueda aconsejarse el
embarazo.
Otros objetivos pueden ser:
• Brindar educación, educación sexual a la paciente, su pareja y familiares • Detectar y/o controlar enfermedades crónicas que pudieran coexistir • Diagnosticar y tratar las alteraciones ginecológicas que pudieran estar
presentes.
• Detectar y tratar la infertilidad de la pareja, si fuera necesario.
• Diagnosticar precozmente el embarazo (antes de las 14 semanas de
gestación).
Orientación anticonceptiva
La recomendación de una anticoncepción adecuada durante el período de espera de la
decisión del embarazo en la mujer en edad fértil, que puede ser en ocasiones algo
prolongado, es otro de los 3 objetivos fundamentales de la consulta de Riesgo Materno
Preconcepcional y tiene una gran importancia cuando se pretende garantizar una
atención integral de calidad a este grupo poblacional. El método hormonal de
anticoncepción no debe establecerse como un método a largo plazo, sino de forma
temporal durante esta fase especial de la vida de la mujer, que representa el período
de preparación para enfrentar una gestación, o para espaciar los embarazos. No debe
olvidarse nunca que una adecuada anticoncepción resulta especialmente útil para
conseguir el embarazo en las condiciones de un buen control (34).
Detección y/o control de otras enfermedades crónicas coexistentes
Se recomienda que se haga un cuidadoso control de la tensión arterial (TA) durante el
período preconceptivo, con el objetivo de detectar la presencia de la hipertensión
arterial o para precisar el estado de compensación, si la enfermedad ya había sido
diagnosticada. Si la enfermedad está presente, se considera que está bien controlada
como recomienda la ALAD y la ADA.44 También se indica evitar los inhibidores de la
enzima convertidora de angiotensina II (IECA), los beta bloqueadores y los diuréticos
en estas pacientes que desean embarazarse y prescribir preferentemente la metildopa.
Otra de las enfermedades que conllevan al control especifico y esmerado en la consulta
de riesgo es la Diabetes mellitus, pues ella es capaz de incidir en todos los sistemas y
órganos así como en el producto de la concepción, determinando incluso el término del
embarazo, por lo que el seguimiento de una mujer con este factor de riesgo es muy
importante y de su manejo adecuado por la multidisciplinariedad, quedará constituido
el momento idóneo para el embarazo de una mujer que este afectada por ella.
Condiciones ideales para enfrentar un embarazo:
• Edad entre 20 y 35 años • Adecuado control metabólico
• Ausencia de complicaciones y crónicas
• Existencia de disciplina y responsabilidad, en relación con su enfermedad
crónica
• Presencia de un estado psicológico que le permita asimilar las orientaciones
dinámicas que conlleva su tratamiento específico.
Situaciones ante las que debe contraindicarse el embarazo:
• Edad>40años,
• RDP evolutiva o preproliferativa cercana a la mácula • Insuficiencia renal
• Neuropatía autonómica digestiva y/o cardiovascular. • Cardiopatía isquémica.
• Hipertensión arterial severa o maligna.
psíquica que la condicione o por irresponsabilidad de la paciente.
No obstante, puede ser fácil apreciar cuando se trabaja diariamente en este campo,
que casi nunca se encuentran todas las condiciones ideales referidas y que tampoco
son frecuentes los casos en los que se requiere aconsejar definitivamente a la paciente
la no posibilidad de tener un hijo, por ello el profesional encargado de la atención de
estas mujeres durante el período en el que desean procrear, debe ser flexible y
comprensivo y lejos de imponer, debe conversar con la paciente cualquier consejo o
decisión, que estime pueda ser de ayuda para esta.
La Organización Mundial de la Salud ha estimulado la utilización de criterios de riesgo
en la atención de las embarazadas, como vía para su seguimiento obstétrico y con el
objetivo de disminuir la morbilidad, y la mortalidad materno infantil
En el período 1986 a 1992 en Cuba aumento la captación precoz del embarazo que se
mantiene en el 98 % desde el año 1989; éste es un elemento que refleja un salto
cualitativo en la atención obstétrica.
Tendencia del problema que se investiga a nivel mundial
Al analizar estas circunstancias se encuentra correlación entre el nivel de desarrollo del
área o país estudiado y el comportamiento del indicador de salud Materno Infantil, de
esta forma encontramos que se registran altas cifras de muertes de mujeres en edad
fértil en los países subdesarrollados y con compleja situación económico social, cuyas
causas de muertes estuvieron relacionadas con el proceso de gestación (35, 36). Así se
recogen las siguientes estadísticas, en África: 1 de cada 21 mujeres tienen riesgo de
muerte materna, en Asia 1 de cada 56 y en Norteamérica: 1 de cada 6366. En
correspondencia con ello se comportan los indicadores referentes a la mortalidad
infantil, así como los parámetros de crecimiento y desarrollo durante la vida infantil (37).
Debido a las políticas de salud establecidas por la Revolución en nuestro país, Cuba
muestra hoy indicadores de salud comparables con países desarrollados, por lo cual
considero más útil enfocar este estudio hacia la situación que actualmente acontece en
naciones con difícil situación de salud, para brindar una panorámica general del
La situación de salud en América Latina no ha mejorado sustancialmente en los últimos
5 años. El análisis epidemiológico del estado de salud de la población revela que uno
de los grupos más vulnerables continúa siendo el de la mujer en especial en edad fértil,
en quienes se considera existe mayor riesgo de enfermar y morir por causas
relacionadas con la gestación. La tasa global de fecundidad es alrededor de
3.5 hijos por mujer al final de los años 90, pero en países como Bolivia, Nicaragua,
Guatemala, Honduras y Haití sigue siendo más de 4.8. Los problemas de salud
materno-infantil se ven acentuados por el rápido crecimiento urbano en las regiones
marginales, pues se estima que más del 93 millones de latinoamericanos viven en la
pobreza. De la población rural 200 millones, el 70% viven en la pobreza y el 30% en la
indigencia, sin acceso a los servicios de salud ni a una adecuada orientación para esta
problemática, lo cual deriva en que las complicaciones del embarazo, parto y puerperio
aparecen entre las principales causas de muerte de la mujer en edad fértil (37, 38, 39, 40).
Con excepción de Cuba, donde contamos con un programa integral de salud con
enfoque preventivo comunitario, en el resto de Latinoamérica, a pesar de los esfuerzos
realizados en materia de salud comunitaria, la atención médica no es integral y está
limitada en un gran por ciento a la labor asistencial. Se han comenzado a dar grandes
pasos en las labores de promoción y prevención pero aún queda mucho por hacer para
dar un enfoque de riesgo a un problema tan serio y urgente como el Riesgo
Reproductivo Preconcepcional y garantizar así una maternidad sin riesgos. Según un
informe de la Instancia Coordinadora de Acciones Políticas por la Salud y Desarrollo de
la Mujer, cada año se presentan víctimas, por causas relacionadas con la maternidad
en mujeres que presentaban factores de riesgo, lo cual coincidentemente ubica estos
como principales causas de muerte en mujeres en edad reproductiva (41, 42, 43). Esta
problemática se agudiza en las zonas rurales, pequeñas comunidades o aldeas, donde
la natalidad es muy elevada pues la pareja desconoce la importancia de la planificación
familiar, sobre todo en los casos en que en la mujer está presente algún riesgo de tipo
biológico, psicológico o socioeconómico para la reproducción, los cuales deben ser
planificar adecuadamente sus embarazos y poder eliminar o atenuar las consecuencias
de los mismos.
En este sentido el Riesgo Reproductivo Preconcepcional es definido como la
probabilidad que tiene una gestante de sufrir daño, ella o su producto, de involucrarse
en el proceso reproductivo (44).
Lugones B y colaboradores, plantean que en toda sociedad existen individuos con vidas
evaluadas como vulnerables, cuya probabilidad de enfermar o morir es mayor que
otros. Esto sucede debido a que existen un conjunto de elementos o circunstancias
llamados Factores de Riesgo. Estos factores pueden ser: biológicos, antecedentes
obstétricos, enfermedades asociadas o factores socio ambientales (27). Estos a su vez
no intervienen de la misma forma en cada paciente, es decir la magnitud del riesgo es
individual y así debemos considerarlo (1).
Conociendo la importancia que tiene la medicina en la comunidad para la prevención
de estos grupos vulnerables, se hace necesario brindarle a la población con algún factor
de riesgo el método para controlar la fecundidad hasta que sea solucionado atenuada
la condición que motivó dicho factor de riesgo (45, 46).
Surge así la actividad de planificación familiar y de anticoncepción como instrumentos
fundamentales de trabajo en el programa de atención al riesgo preconcepcional (47).
En el Programa de planificación de la Familia, la OMS señala el derecho de la pareja
de decidir cuándo tener los hijos y cuantos quiere, de manera que la gestación ocurra
en el momento más favorable para la madre, el niño y la familia, lo que proporcionará
que existan las condiciones apropiadas para su desarrollo integral (48,49,50).
La principal inquietud cognoscitiva aparece debido a que estos factores son ignorados
muchas veces, y no se cuenta con una definición exacta del problema.
La revisión de este tema se justifica por la información que brindará sobre la percepción
más amplia del comportamiento del riesgo reproductivo preconcepcional, el aporte de
una base de información para futuras investigaciones sobre el tema con impacto
materno-infantil de causas relacionadas con estos factores, si se implementaran en un
futuro las intervenciones pertinentes, por último, queremos hacer mención a la
dimensión humana por abordar un tema tan sensible como lo es la maternidad.
En este sentido se estima la mala situación socioeconómica, como factor condicionante
al riesgo. Las dificultades en la situación socioeconómica que determina las condiciones
de vida, se reflejan también en los indicadores de salud de la población, pues está muy
relacionado con el nivel cultural, estilo de vida, así como accesibilidad a los recursos
médicos (49). Por tales motivos constituye este un grupo de riesgo por presentar mayor
probabilidad de morbimortalidad materno-fetal. En este sentido se le atribuye un gran
peso a la influencia de los factores sociales, especialmente a las condiciones de vida,
siendo estas, las condiciones objetivas en las que los hombres reproducen su
existencia social e individual (50). En América Latina específicamente, el deterioro de las
condiciones de vida vinculadas con las políticas neoliberales mantiene sumidas en una
permanente crisis económica a la mayoría de la población, agudizándose esta situación
en las áreas rurales.
Para la mujer la disminución del poder adquisitivo influye negativamente en las
condiciones de vida, sobre la cual recae además la responsabilidad del trabajo
doméstico, la crianza de los hijos y el colaborar en las actividades agrícolas.
Al disminuir, eliminar, atenuar o compensar el riesgo preconcepcional con un enfoque
clínico epidemiológico, se promueve la salud reproductiva, ya que se reduce el número
de veces que la mujer y su producto se exponen al peligro que conlleva estar
embarazada en circunstancias desfavorables.
Mucho se ha escrito acerca de los efectos desfavorables del embarazo temprano y
tardío, ambas edades extremas de la vida reproductiva constituyen factores de riesgo
preconcepcional reconocidos.
En las últimas décadas, el incremento de nacimientos habidos en mujeres muy jóvenes
en países en vías de desarrollo e incluso en países desarrollados como Inglaterra, Suiza
y EE.UU. es materia de creciente preocupación social, por constituir un evidente factor
relacionado con lo anterior se ubica la problemática de la inestabilidad sexual con el
consiguiente riesgo hacia las ITS/VIH (48).
Nuestras evidencias empíricas y las experiencias acumuladas nos hacen pensar que
en la práctica médica resulta frecuente confundir los términos de protección y control
del RRPC, y muchas veces consideramos "controlada" a una paciente, cuando en
realidad solo está "protegida" por algún contraceptivo, sin tener un verdadero dominio
epidemiológico de la situación de riesgo, por la cual se encuentra dispensarizada. A la
hora de la indicación o no de la anticoncepción en la adolescente debemos tener en
cuenta los peligros médicos del embarazo, así como las ventajas y desventajas, efectos
secundarios, y peligros de los métodos de anticoncepción en esta etapa de la vida.
Los DIU no se recomiendan como primera opción en las adolescentes, dadas las
conductas sexuales que caracterizan a este grupo y que lo predisponen a las ITS/VIH
y otras complicaciones. De ser elegido, debe ir asociado al uso del condón, el que
continúa siendo reconocido como más idóneo en los jóvenes por lo anteriormente
planteado. Igual actitud se adoptaría con las píldoras, a las cuales se le atribuyen
efectos beneficiosos en esta etapa de la vida, como, por ejemplo: la regulación del ciclo
menstrual, la disminución de enfermedad inflamatoria pélvica, la anemia ferripriva y el
acné, pero siempre de ser posible, asociadas al condón, en lo que se conoce
actualmente como métodos dobles de seguridad (50).
Los factores de riesgo no solo influyen en la morbilidad y la mortalidad materna, fetal,
neonatal e infantil, sino que pueden dejar secuelas en el desarrollo ulterior del infante.
El tratamiento y control del RRPC preconcepcional constituye un importante propósito
de la salud materno infantil, al contribuir en el comportamiento de los indicadores de
salud en una sociedad... Las condiciones biológicas y sociales, así como ciertos hábitos
y enfermedades influyen en el crecimiento y desarrollo fetal, ciertos factores maternos
hacen que el embarazo sea de alto riesgo para el feto (1). Se señala la relación de niños
con evolución desfavorable del crecimiento con riesgos biomédicos (peso al nacer y
la madre y del recién nacido) y de incompetencia familiar (ocupación de los padres,
instrucción de la madre, calidad y condiciones sanitarias de la vivienda y grado de uso
de los servicios de salud).
Fortalecimiento de las redes sociales articuladas a los servicios de salud.
El movimiento de APS desde los primeros años y en estrecha coordinación con los
servicios de salud e impulsado por la actividad de educación para la salud, generó la
aparición de acciones comunitarias, populares, que se expresaron primero en Postas
Sanitarias Rurales, luego en Colaboradores Voluntarios del Servicio Nacional de
Erradicación del Paludismo (SNEP), y algo más tarde, en los Responsables de Salud
de los Comités de Defensa de la Revolución y las Brigadas Sanitarias de la Federación
de Mujeres Cubanas. Un apoyo a los servicios de APS en el área rural lo dieron los
Agentes Comunales (trabajadores sociales), del Ministerio de Bienestar Social, durante
el período de vigencia de este organismo.
En la actualidad como hemos hecho alusión anteriormente, el EBS, médico y
enfermeras de la familia, convertido ahora en consultorio modelo o de nuevo tipo donde
se encuentran todas las vertientes, y carreras de las Ciencias médicas, son las
encargadas de promover y prever salud, así como también de formar a los promotores
que comienzan en la propia familia, de ahí que todos estamos llamados a formar hábitos
y conductas sanitarias por la salud, donde todos los factores de la sociedad tiene un
papel preponderante en la continuidad de lo alcanzado en los resultados de la salud
pública cubana.
Principales dificultades que inciden en las estrategias del PAMI. 1. Insuficiente capacidad de los hogares maternos.
2. Dificultad en el suministro de frutas y vegetales a los hogares maternos y
hospitales, así como es insuficiente el suministro de la ANAP.
3. Dificultad en el transporte de los especialistas hacia los consultorios Médicos
de la Familia para la evaluación de gestantes y niños.
4. Pobre funcionamiento de los consejos populares por la salud y la
DISEÑO METODOLÓGICO
Se realizó un estudio Experimental de Intervención Educativa en las mujeres que
constituyen riesgo preconcepcional del Consultorio de Médico de la Familia No. 12
perteneciente al policlínico Dr. Tomás Romay Chacón en Artemisa, del municipio
Artemisa en el periodo comprendido de agosto 2015 a abril 2016.
El Universo estuvo constituido por 251 pacientes que representan a todas las mujeres en edad fértil (15 – 49 años) del CMF#12
La muestra seleccionada mediante un muestreo aleatorio simple representada por
50 pacientes que cumplieron los criterios de inclusión y exclusión.
Criterios de inclusión:
- Mujeres entre 15 – 49 años de edad.
- Que tengan capacidad mental normal.
- Que estuvieran dispuestas a colaborar con la investigación.
Criterios de exclusión:
- Mujeres que no tengan capacidad mental normal.
- Mujeres que no quisieran colaborar con la investigación.
Criterios de salida
- Que las pacientes no quisieran continuar colaborando con la investigación.
- Que durante el periodo de investigación presentaron algún inconveniente ya
sea por salud u otro motivo que le imposibilitara continuar en el estudio.
Aspectos Bioéticos: Para realizar esta investigación se tuvieron en cuenta los principios básicos de la ética, de respeto, dando autonomía a las personas,
sobretodo aplicando la justicia en la investigación. Para el cumplimiento de estos
principios se contó con el consentimiento informado de las autoridades del
municipio, así como del director de la institución donde se realizó el estudio, a los
cuales se le explicó en qué consiste la misma, los objetivos que percibe los
beneficios que se podrán esperar de ellas. Las técnicas empleadas tuvieron un
carácter anónimo con el consentimiento informado necesario para garantizar la
confidencialidad y privacidad en la información manejada.
Para la recogida de la información se aplicó una encuesta garantizando el
anonimato y la privacidad de las encuestadas. Se confeccionó una planilla
(consentimiento informado) donde se les informó a las encuestadas sobre el
estudio, obteniéndose su aprobación para participar en el mismo. Fueron
estudiadas las principales patologías y principales factores de riesgo asociados al
embarazo en mujeres en edad fértil y otras variables como edad, escolaridad,
estado civil, ocupación, grado de conocimiento sobre la sexualidad entre otras.
Operacionalización de las Variables:
Variable Tipo Operacionalización
Escala de Clasificación Definición Operacional
Edad Cuantitativa
Continua
-15 y 19
-20 y 34
-Mayores de 35
Se considera la edad
en años cumplidos en
el momento de la
investigación.
Ocupación Cualitativa
Nominal
Politómica
-Estudiante
-Trabajadoras
-Ama de casa
Corresponde a la
actividad que realizan
Escolaridad Cualitativa Ordinal -Primaria
-Secundaria
-Preuniversitario
-Técnico Medio
-Universitario
Teniendo en cuenta el
grado terminado.
Estado Civil Cualitativa
Nominal
politómica
-Casada
-Soltera
-Unión estable
En dependencia de la
condición del estado
civil de la muestra en
estudio. Enfermedades asociadas Cualitativa Nominal Politómica. -Anemia -infecciones vaginales -Infecciones urinarias
-Hipertensión arterial crónica
-Diabetes Mellitus
- Asma Bronquial
-Epilepsia
En dependencia de la
patología que
presenten en el
momento le la
investigación.
Factores de
riesgo social
Cualitativa Nominal
Politómica.
-Sobrepeso u obesidad
-Tabaquismo
-Alcoholismo
-Hacinamiento
-Bajos ingresos económicos
-Viviendas en malas
condiciones
En dependencia de los
factores de riesgo
social que presenten en
el momento le la
investigación.
Utilización de
métodos anticonceptivos Cuantitativo Nominal Politómica. -Condón -DIU -Hormonal -Coito interruptor
- Esterilización Quirúrgica
En dependencia del
método anticonceptivo
utilizado en el momento
-Ninguno
-Otros
Nivel de Cualitativa -Adecuado ˃70% Es la variable que mide
conocimiento Ordinal -Escaso entre 50 y 70% el nivel de
sobre Riesgo -Ninguno ˂ 40% conocimiento que tiene
preconcepciona la muestra sobre la
l. importancia del riesgo
preconcepcional.
Técnicas de Procesamiento de la información:
Para llevar a cabo esta investigación se recogió la información a través de historias
clínicas individual, datos estadísticos del Departamento de Estadística del
Policlínico Dr. Tomás Romay Chacón en Artemisa, bibliografía que se recopilará
mediante libros, trabajos realizados e información actualizada extraída de Infomed.
Para el procesamiento de la información se aplicaron métodos cuantitativos
sencillos (número y porciento). Los resultados fueron procesados en una base de
datos estadísticos de Microsoft Excel y llevados a tablas para una mejor
comprensión del estudio. Como editor de texto se utilizó el Microsoft Word. Se utilizó
el métodos observacional, clínico, estadístico, con técnicas de participación grupal,
lluvia de ideas, entrevistas individuales. Con el objetivo de determinar el
comportamiento de la variable Nivel de conocimiento sobre Riesgo preconcepcional
antes y después de la intervención educativa, se empleó el test de entrada y salida
RESULTADOS
Conocemos que no es una tarea fácil el influir en algunas conductas, estilos de vida,
comportamiento de las personas, pero si podemos desarrollar programas
educativos y capacitantes que contribuyan a disminuir y hasta erradicar los efectos
a los que nos dirige el desconocimiento y la desinformación además de prejuicios y
tabúes que se presentan en la sociedad.
Tabla #1. Distribución del riesgo reproductivo preconcepcional según edad.
Edad No %
15 - 19 20,00 23,53
20 - 34 50,00 58,82
Mayores de 35 15,00 17,65
Total 85,00 100,00
Fuente: Cuestionario
Para el análisis del comportamiento de las mujeres con alto riesgo reproductivo
preconcepcional según la edad en esta tabla # 1, se puede observar que en la
muestra existe un predominio de las mujeres con edades comprendidas entre 20 y
34 años, seguidas de las 15-19 años.
Como se puede observar estos datos están asociados a los factores que determinan
la calidad de los nacimientos como por ejemplo los identificados por Ticona Rendon
y colaboradores (28), donde la edad materna influye directamente sobre la
prematuridad, el bajo peso al nacer, el crecimiento intrauterino retardado, la
membrana hialina y el incremento de la morbilidad.
Es meritorio señalar que las edades de mayor número de mujeres en nuestro
estudio las aportan las que por lógica ya deben prepararse para la procreación o
sea que se encuentran en un período de edad adecuado, con sus funciones sociales
y familiares bien constituidas o al menos enfrentadas, pero que además
biológicamente están preparadas; nos causa satisfacción encontrar que en la
número, aun cuando 20 mujeres se encuentran en él, creemos que aunque no es
todavía suficiente el trabajo desplegado para con este antes mencionado grupo, si
se realiza una actividad encaminada a reforzar los conocimientos en cuanto a
sexualidad, y así mejoramos todos los parámetros que podrían intervenir
desfavorablemente en la reproducción.
Estudios realizados por Lugones Botell, Bingote Romero, Hernández García, Torres
Silot (27, 24,2,42,), encontraron resultados similares.
Otros estudios realizados muestran resultados diferentes al nuestro, pero no en
relación con el alto riesgo reproductivo, sino con el riesgo reproductivo en general (56).
La edad constituye un factor de riesgo a tener en consideración cuando se trata de
enfrentar un evento relacionado con la salud reproductiva en mujeres con un alto
riesgo, específicamente si se presenta en edades muy tempranas o muy tardías
para la maternidad.
En casi todas las bibliografías es frecuente encontrar que las edades para la
procreación más coincidentes son las entre 15 y 45 años. Dentro de este espacio
de tiempo, la fertilidad o capacidad reproductiva, es relativamente alta, no así para
la adolescencia que se muestra baja, alcanza esta capacidad su cumbre entre los
20 y 25 años, se mantiene alta hasta los 35 años y de ahí en adelante disminuye
rápidamente hasta llegar a cero para la edad de 50 años.
Tabla #2. Distribución del riesgo reproductivo preconcepcional según la Escolaridad
Escolaridad No %
Primaria 2,00 2,35
Secundaria 10,00 11,76
Preuniversitario 24,00 28,24
Técnico Medio 29,00 34,12
Universitaria 20,00 23,53
Total 85,00 100,00
En cuanto a la escolaridad predominaron las féminas con estudios técnico medio,
representadas por el 34 %, correspondiéndose esto con el nivel de escolaridad
alcanzado en el país, lo que no determina directamente el riesgo, pero si el grado
de percepción del mismo, por lo que creemos que esta variable en el caso de
nuestra muestra de estudio, mejora la apropiación de los conocimientos y la
modificación de los factores.
En estudios realizados por Hernández García, Rodríguez Fernández, Romero,
Velásquez López, entre otros, también se recogen resultados similares (2, 43, 44,45).
Botero en su estudio encuentra resultados que no coincide con nuestro trabajo y
plantea que el riesgo pre concepcional es mayor en las mujeres con bajo nivel
escolar.
A diferencia de otros informes donde el bajo nivel escolar, el trabajo materno durante
el embarazo y las situaciones socioeconómicas adversas influyen notablemente
sobre las complicaciones del embarazo y el parto, en este estudio no se observó
esta relación debido al acceso universal que tienen las mujeres cubanas a los
servicios de salud y las leyes que protegen al binomio materno fetal. En el caso de
esta investigación las variables antes analizadas, así como las que a continuación
se verán, nos permiten valorar la población e implementar la intervención sobre la
misma, conociendo donde se debe enfatizar y donde no, como expresamos antes,
el riesgo se modificará desde la misma característica poblacional y adaptada al
medio de las mujeres y su familia, por lo que se hará más fácil, extenderla al resto