Sobre la naturaleza
y el medio
Jiddu Krishnamurti
SOBRE LA
NATURALEZA Y
EL MEDIO
editorial ,^rós
Numancia, 117-121
08029 Barcelona
Si
uno
pierde contacto con lanaturaleza, pierde contactocon lahumanidad. Sino hay
relacióncon
la naturaleza, nos convertimosen asesinos; entoncesmatamos
aloscachorros defoca,a
lasballenas, alos delfinesyalhombre
-yaseapor provecho
propio,por
«deporte»,
por comida o
en arasdelconocimiento Entonceslanaturalezaseasustadenosotros y repliega su belleza.Podremos
hacerlargascaminataspor
los bosques oacampar
en lugares encantadores,perosomos
asesinosy asíhemos
perdido laamistad de lanaturaleza.Es
probable que no estemos relacionadosconnada, nisiquiera con nuestraesposao
nuestromarido.«Diario II»deKrishnamurti,
4
deabrilde1975
PROLOGO
JidduKrishnamurtinacióenlaIndia
en
1895 y, alaedad detreceaños, lotomó
bajo su protecciónlaSociedad Teoso-fica; los directores de la
misma
consideraronque
él era elvehículoparael«instructor del
mundo», cuyo
advenimiento habían estadoproclamando, Krishnamurtihabríadeemerger prontocomo un
maestro poderoso, inflexible einclasifica- ble; sus pláticas y escritosno
teníanconexión conninguna
religiónespecíficay
no
pertenecían a Orienteni aOcciden-te, sino
que
eran para todo elmundo. Repudiando
firme-mente
laimagen
mesiánica,en 1929disolviódemanera
dra- máticalavastay acaudaladaorganizaciónquesehabíacons- tituidoentornodeélydeclaróquelaverdadera«una
tierra sinsenderos»a lacual resultabaimposible aproximarseme-
dianteningunareligión, filosofíao secta convencional.Durante el resto de su vida rechazó insistentemente la
condición de gurú
que
otrostratarondeimponerle.Continuó atrayendograndesauditoriosentodoelmundo,
peronegando
toda autoridad,no
queriendo discípulos yhablando siemprecomo un
individuo habla aotro.En
elnúcleode suenseñan- za estabalacomprensión
deque
loscambios
fundamentales delasociedadpodíantener lugar sóloconlatransformación delaconcienciaindividual.Se
acentuaba constantementelanecesidaddel conocimiento propio, así
como
la inteligente captaciónde lasinfluencias restrictivasyseparativas origi- nadas en los condicionamientos religiosos ynacionalistas.Sobrelanaturalezayelmedio
Krishnarnurti señalaba siempre la urgente necesidad de una aperturapara ese «vasto espaciodelcerebroquecontieneensí
unaenergía inimaginable». Ésta parecehabersidolafuentede su propia creatividad y la clave parael impacto catalizador queejerció sobretan ampliavariedaddepersonas.
Krishnarnurticontinuóhablando portodoel
mundo
hasta su muerte, a losnoventa años. Sus pláticas y diálogos, sus diariosy sus cartashan sido reunidos enmás
de sesenta vo- lúmenes. Estaseriede libros dedicados a temas específicos seha
recopilado apartirdeese vasto cuerpo deenseñanzas.Cada
libro se concentra sobreuna
cuestiónque
tieneparti- cular importancia y urgencia en nuestras vidas cotidianas.POONA, 17 DE OCTUBRE DE 1948
Interlocutor: ¿Cuál esel significadode lacorrecta relación conlanaturaleza?
Krishnamurti:
No
sé siustedha
descubierto su relaciónconla naturaleza.
No hay
relación «correcta», sólo existe lacomprensión delarelación.
La
relacióncorrectaimplicalamera
aceptación deuna
fórmula,talcomo
ocurreconelpen- samientocorrecto.Elpensamientocorrecto yelrectopensar son dos cosas diferentes. El pensamiento correcto consiste enamoldarsemeramente
aloquees correcto,aloquees res- petable,mientrasque
elrectopensaresmovimiento;es pro- ducto de la comprensión, y lacomprensión
experimenta constantes modificaciones, cambios.De
igualmodo,
hay unadiferencia entre larelación correctaylaacciónque
im- plicacomprender
nuestra relacióncon
lanaturaleza. ¿Cuál essu relacióncon
lanaturaleza(siendolanaturalezalosríos, losárboles, lospájarosderápidovuelo,elpezenel agua,los minerales bajo la tierra, las cascadasy
los estanquespoco
profundos)? ¿Cuáles su relacióncon todo ello?La mayoría
de nosotrosnoesconscientede esarelación.Jamás miramos
unárbolo,silohacemos,esconvistasautilizareseárbol,ya seaparasentamos
a susombra o
con elfinde cortarlopara obtenermadera.En
otras palabras,miramos
los árbolescon propósitosutilitarios;jamásmiramos un
árbol sinproyectar- nosnosotrosmismos
y sinutilizarlopara nuestra propia con-Sobrelanaturalezayelmedio
veniencia.Del
mismo modo
tratamoslatierray sus produc-tos.
No
hayamor
porla tierra, sólohay
utilizaciónde latie- rra. Siamáramos
realmentela tierra,habría frugalidaden elusodelascosasquela tierraproduce.
O
seaque sicompren-
diéramosnuestra relación conla tierra,seríamosmuy
cuida- dosos eneluso quehacemos
delascosas dela tierra.Com-
prendernuestra relaciónconlanaturalezaestandifícil
como comprender
larelacióncon nuestro vecino, con nuestraes- posa y nuestroshijos. Perono hemos
concedidoaello niun solopensamiento,jamás
noshemos
sentado acontemplarlas estrellas,lalunaolos árboles.Estamos demasiado
ocupadoscon
las actividades sociales o políticas. Obviamente, estas actividades son formas de escapar de nosotrosmismos, y
rendir culto ala naturaleza estambién escapar de nosotrosmismos. Siempre
estamos utilizando alanaturaleza,ya
seacomo
escape ocon
propósitosutilitarios;jamás
nosdetene-mos
aamar
alatierraylascosasdela tierra.Jamás
disfruta-mos
delos espléndidos campos,aunque
losutilizamos para alimentarnos y vestimos.Jamás
nosgustalabrarla tierracon
nuestras manos, nos avergüenza trabajarcon
nuestrasma-
nos. Ocurrealgo extraordinario
cuando uno
trabajala tierracon lasmanos. Peroeste trabajo es realizado solamente por
lascastas inferiores; ¡nosotros, las clasessuperiores,
somos
aparentementedemasiado
importantes parautilizar nuestras propiasmanos! De
esemodo hemos
perdido nuestra relación conlanaturaleza.Una
vezcomprendamos
esarelación,suverdaderosigni- ficado,no
dividiremoslapropiedad en «suya» y «mía»; aun-que uno pueda
poseerun pedazo
de tierray
construir enéluna
casa,éstano
sería«mía» o
«suya»enun
sentido exclu- sivo; sería,más
bien,un medio
para obtener albergue.A
causade que
no amamos
la tierray
lascosas dela tierra,sinoque meramente
las utilizamos,somos
insensibles alabelle- za deuna
cascada,hemos
perdidoelcontactocon
la vida, ja-más
nos sentamos conlaespaldaapoyada
contrael troncodePoona, 17deoctubrede1948
unárbol.
Y
puestoque
noamamos
lanaturaleza,nosabemos cómo amar
alos seroshumanos
y alos animales. Bajen pol-lacalleyobserven
cómo
tratan alosbueyes, veansuslomos
completamente deformados. Ustedesmenean
lacabezaydi cen:«Muy
triste». Perohemos
perdido el sentido de la ter-nura, esa sensibilidad, esarespuestaalascosasdelabelleza, y sóloenlarenovaciónde esasensibilidad
podemos compren-
derquéeslaverdaderarelación. Esasensibilidad no adviene colgandomeramente
unos cuantos cuadros en la pared, o pintandoun árbolo
poniéndose unascuantas floresen elca- bello; la sensibilidad surge solamentecuando desechamos
esta perspectiva utilitaria.
Eso
no quiere decirque nopoda-mos
haceruso de la tierra; perodebemos
hacerlo según eluso a que estádestinada. I.a tierraestá ahí para ser
amada,
parasercuidada,no
paraserdivididacomo
la tierramía
y la tierrade ustedes.Es
tonto plantarun
árbol enun
cercado y llamarlo «mío».Únicamente cuando uno
está libredel espí-rituexclusivo,
puede
tener sensibilidad,no
sólohacialana- turaleza, sino hacialos sereshumanos
y hacialos retos ince- santesdelavida.NUEVA DELHI,
14 DE NOVIEMBRE DE 1948
Vemos
en elmundo
que nos rodeaconfusión, desdicha y deseos en conflicto; al darse cuenta de este caos mundial, casitodaslaspersonasreflexivasyserias-no
las quepracti- can el.juego de la simulación, sino las que se interesan de verdad- verán naturalmente laimportancia de considerarelproblema
delaacción.Están laaccióndemasas y
laacciónindividual; y la acción de
masas
se ha vueltouna
abstrac- ción,un
escape conveniente paraelindividuo.Al
pensar que este caos, esta desdicha, este desastreque estámanifestán- dose constantemente,puede
de algúnmodo
sertransforma-do
o puestoen orden poruna
acciónde masas, elindividuo se vuelve irresponsable.La masa
es, ciertamente,una
enti-dad
ficticia; lamasa somos
ustedes y yo. Sólocuando
uste- des y yono comprendemos
nuestra relación con la acción verdadera, nos inclinamoshacialaabstracciónllamada «lamasa»;
en consecuencia, nosvolvemos
irresponsables en nuestra acción. Paralareforma en laacciónacudimos
aun
lídero a
una
acción organizada, colectiva que, nuevamente, esuna
acción de masas.Cuando acudimos
a un líder paraque
dirija la acción, invariablementeescogemos
auna
per- sona que, según pensamos, nos ayudará a superar nuestros propiosproblemas,nuestrapropiadesdicha. Pero, acausa de queescogemos
allíderdesdenuestra confusión,ellídermis-NuevaDelhi, 14elenoviembre de1948
rno está también confuso.
No
elegimos a un líderdiferente de nosotros;no podemos.
Sólopodemos
elegir a un líder que,como
nosotros,estáconfundido; porlotanto,tales líde- res, tales guías y los así llamados gurúes espirituales, nos conducen invariablemente amás
confusión, a una desdicha mayor. Puestoque
lo que elegimos tieneque
provenir de nuestra propia confusión,cuando
seguimos aun
líder sólo estamos siguiendo nuestrapropia proyección confusa. Porlo tanto,
aunque
unaacciónsemejantepueda
producirun re-sultado inmediato, invariablemente
conduce
a un desastre ulterior.Vemos,
pues,que
la acción de masas, si bien es útil en ciertos casos, porfuerza tieneque conducir al desastre, ala confusión, y genera irresponsabilidad porparte del indivi- duo;vemos asimismo
que seguir a un líder también tiene que incrementar la confusión.No
obstante, tenemos que vi- vir. Vivires actuar; ser es estar relacionado.No
hay acción sinrelación, yno podemos
viviren el aislamiento.No
exis-te talcosa
como
el aislamiento;lavidaesactuar yestarrela- cionados. Porconsiguiente, paracomprender
cuál es la ac- ciónqueno
creacada vezmás
desdicha,más
confusión, te-nemos
quecomprendernos
a nosotrosmismos, con
todas nuestras contradicciones, contodos nuestros elementos an- tagónicos y nuestras múltiples facetas constantemente enpugna
lasunascon
las otras.Hastaque noscomprendamos
a nosotrosmismos,
la accióndebe
inevitablemente llevar a crecientesconflictosydesdichas.Nuestroproblema,entonces, es actuarcon comprensión, y esa
comprensión
sólopuede
originarseenelconocimiento propio.Después
de todo, elmundo
es laproyección demí
mismo. Elmundo
esloqueyo
soy;elmundo no
esdiferen- tedemí,no
es loopuesto aloquesoy. Elmundo
yyo no
so-mos
entidades separadas.La
sociedad soy yo;no hay
dos procesosdiferentes.Elmundo
esmi
propia extensión,y
paracomprender
elmundo
tengoquecomprenderme
amí mismo.
Sobrelanaturaleza y elmedio
El individuo
no
eslo opuesto alamasa, alasociedad, por-que
lasociedades elindividuo.La
sociedad es larelación entre usted yyo
yotro.Hay
oposición entreelindividuo y la sociedadsólocuando
el individuo se vuelve irresponsa- ble. Porlo tanto,estamosanteun
gran problema.Cada
país, cadagrupo,cada persona se estáenfrentandocon una
crisis extraordinaria.¿Qué
relación tenemos, ustedes y yo, con esacrisisycómo hemos
deactuar?¿Dónde comenzaremos,
afinde produciruna
transformación?Como
dije, siacudi-mos
alamasa,no hay
salida, porquelamasa
implicaun
lí-der,yla
masa
es siempre explotada porelpolítico, elsacer- doteyelexperto.Y
puestoque
ustedesyyo componemos
lamasa,
tenemos
que asumirlaresponsabilidadconrespecto a nuestra acción, o seaque tenemos que comprender
nuestra propia naturaleza,tenemos que comprendernos
a nosotrosmismos. Comprendernos
anosotrosmismos no
es apartar- nos delmundo,
porqueel apartarnos implica aislamiento, y nopodemos
viviren el aislamiento. Porlo tanto,hemos
decomprender
la acción enlarelación, yellodepende
deque
nos percatemos claramente de nuestra propia naturaleza conflictiva y contradictoria. Pienso que es tonto imaginarun
estadoenelque
reinalapaz ycon
elcualpodamos
con-tar. Sólo
puede
haberpaz y
tranquilidadcuando compren- demos
nuestrapropia naturaleza yno hacemos
presuposi- cionescon
respecto aun
estadoque no conocemos. Puede que haya un
estado de paz, pero es inútil especular mera-mente
sobreél.A
findeactuar rectamente, tieneque haberun
rectopen- sar; para pensar rectamente, tieneque
haber conocimiento propio; yelconocimientopropio sólopuede
tener existencia a través de la relación, no del aislamiento. El rectopensar surgede lacomprensión
de nosotrosmismos, y
en ese recto pensarseoriginalarecta acción.La
rectaacciónes laque
se revelacuando
noscomprendemos
a nosotrosmismos, no
una
parte sino el contenido total de nosotrosmismos,
deNuevaDelhi, 14 denoviembrede1948
nuestras naturalezas contradictorias, de lodo ío que somos.
Cuando
noscomprendemos
anosotrosmismos
hayrecta ac- cíón,ydesdeesa acción surgeel estado defelicidad.Después
de todo, es felicidad lo que queremos, lo cual casi todosbuscamos
dediversas formas,mediantemúltiples escapes: losescapes delaactividad social,delmundo
buro- crático, del entretenimiento, del culto y de la repeticiónde frases, del sexo y de otros innumerables escapes. Pero ve-mos
que estosescapes no traen felicidadduradera, que sólo producen unaliviomomentáneo. Fundamentalmente no
hay nada verdadero en ellos, no hay deleite perdurable. Pienso queese deleite, eseéxtasis,ese verdaderojúbilo del ser crea- tivo loencontraremos solamente alcomprendernos
a noso-tros mismos. Esta
comprensión no
es fácil, necesita cierto estado de alerta, cierta percepción sensible.Ese
estado dealerta, depercepciónsensible,sólopuedetenerlugar
cuando
nocondenamos, cuando
nojustificamos, porque en elmo- mento
en que hay justificación o condena,ponemos
fin alproceso decomprensión.
Cuando condenamos
aalguien, de- jamosdecomprender
aesa persona,ycuando
nosidentifica-mos
con esa persona,nuevamente dejamos
de comprender-la. Igual ocurre con nosotros mismos. Observar, estarpasi-
vamente
alerta a lo que somos, essumamente
difícil, pero desde esa pasiva percepción alertasurge una comprensión, una transformación de«lo quees». Sóloesa transformación abrelapuerta alarealidad.Nuestro problema,entonces, eslaacción, lacomprensión yla felicidad.
No
hayfundamento
paraun verdaderopensar, amenos que
nosconozcamos
a nosotrosmismos.
.Sin cono-cerme
amí mismo,
no tengo base para pensar rectamente, sólopuedo
vivirenunestadode contradicción, corno ocurre con lamayoría
de nosotros. Para producir una transforma- ciónenelmundo,
queeselmundo
de mi relación,tengoqueempezar conmigo mismo.
Ustedes podrándecir: «Producir una transformación enelmundo
llevará untiempo infinita-Sobrelanaturalezayelmedio
mente
largo». Si estamos buscando resultados inmediatos,pensaremos
naturalmente que ello exigirádemasiado
tiem- po.Son
los políticos los queprometen
resultados inmedia-tos,pero
me temo
queparaelhombre
que buscala verdadno
hay un resultado inmediato.Es
laverdadlaque transforma, no laacciónenloinmediato;essóloeldescubrimiento delaverdad por cada
uno
de nosotros, loque traerápaz yfelici-dad
almundo.
Vivirenelmundo
y,sinembargo,no
pertene- cei almundo,
ése es nuestroproblema; yesun problema
alque debemos
dedicarnosmuy
seriamente,porqueno
pode-mos
retirarnos delmundo, no podemos
renunciar aélsino quetenemos que comprendemos
a nosotrosmismos. La comprensión
propia es el principio de la sabiduría.Com-
prendernos a nosotros
mismos
escomprender
nuestrarela- ciónconlascosas,con
lagentey conlas ideas. Mientrasno comprendamos
laplenasignificaciónyelsentidodenuestra relaciónconlascosas,conlagentey conlasideas,laacción-que
es relación- generará inevitablemente conflicto ylu- cha.Porlo tanto,un hombre
verdaderamenteserio tienequecomenzar
consigomismo; ha
de estarpasivamenteatento a todos suspensamientos ysentimientos, atodas sus acciones.Otravez,
tampoco
esto esuna
cuestióndetiempo;no
hay unfinalparaelconocimientopropio. Elconocimientopropio es sólodeinstanteeninstante;porlotanto,es
una
felicidad cre- ativadeinstanteeninstante.Cuando
abordolaspreguntasde ustedes,porfavor,no
es- peren unarespuesta;porqueustedes y yovamos
aconsiderar elproblema
juntos y encontraremos larespuestaen el pro-blema mismo.
Si tan sólo esperanuna
respuesta,me temo que
quedarán decepcionados.La
vidano
tiene «sí» y«no»
categóricos,
aunque
eso es loque
nos gustaría.La
vida esmás
complejaque
eso,más
sutil.De modo que
paraencon-trar la respuesta
debemos
estudiarelproblema,locual im- plicaquedebemos
tenerlapaciencia ylainteligenciareque- ridasparainvestigarlo.NuevaDelhi, 14 denoviembre de 1948
Interlocutor:
¿Que
lugar tiene, en la sociedad moderna, la religiónorganizada?Krishnamurti:
Veamos
quéentendemos
porreligión y quéentendemos
por sociedadmoderna. ¿Qué
es loque
enten-demos
porreligión?¿Qué
significa la religión para usted?Significa un conjunto decreencias, ¿noes cierto?;rituales,
dogmas,
muchas
supersticiones, puja, repetición de pala- bras, esperanzas vagasno
satisfechas, frustradas, la lectura deciertoslibros, el seguimientode gurúes, laasistenciaoca- sional al templo, etc. Ciertamente, todo eso es la religión parala mayoría de nuestragente. ¿Pero esreligióneso?¿Esla religión una costumbre, un hábito, una tradición?
No
hay duda de que la religión es algoque
estámucho más
alláde todoeso. ¿verdad?La
religión implicalabúsqueda
dela re- alidad, locual nadatienequeverenabsolutocon lacreencia organizada, conlostemplos,dogmas
o rituales;no
obstante, nuestro pensar,el tejidomismo
denuestro ser,estáenreda- do, atrapado en lascreencias, en lassupersticiones y demás.Obviamente, el
hombre moderno no
es religioso;en conse- cuencia, su sociedadnoesunasociedad cuerda,equilibrada.Podemos
seguirciertasdoctrinas, venerar ciertaspinturas o crearuna nueva religión delEstado,peroesobvioque todas estas cosas no son religión. Dijeque
la religión es la bús- queda delarealidad,pero esa realidades desconocida;no es la realidad delos libros, no es laexperienciade otros. Para quepodamos
encontrar esarealidad, descubrirla, invitarla, loconocidodebecesar;el significadodetodaslastradicionesy creencias debe ser examinado,
comprendido
y descartado.Para esto
no
tiene sentido la repetición de rituales. Por lo tanto, es evidente que unhombre
religioso no pertenece a ningunareligión, aningunaorganización;no
eshindúnimu-
sulmán;no
perteneceaningunaclasesocial.Ahora
bien, ¿qué es elmundo moderno?
Elmundo mo-
derno estácompuesto
de tónica y eficienciaen organizacio-Sobrelanaturalezayelmedio
nesde masas.
Hay un
avanceextraordinarioenlatecnología yuna
distribucióninadecuadadelas necesidadesdelasma-
yorías; los
medios
deproducciónsehallanenmanos
deunos pocos.Las
nacionalidades están en conflicto y constante-mente
se reiteran lasguerras a causade los gobiernos sobe- ranos ydemás.Ése
eselmundo
moderno, ¿noes así?Hay un
avance técnico sinun
avanceequivalente enla psicológicovital, yasíseorigina
un
estadodedesequilibrio;tenemos
lo- groscientíficosextraordinariosy,alpropio tiempo,desdichahumana,
corazones vacíos y mentes desprovistasde signifi- cación.Muchas
delas técnicasquehemos
aprendidotienen queverconlaconstruccióndeaviones paramatarnosunos
a otrosycosasasí.Ésees, entonces, elmundo
moderno,y esemundo
esuno mismo.
Elmundo no
es diferente de uno.Nuestro
mundo, que somos
cadauno
de nosotros, esun mundo
queha
cultivadoelintelectoyha
vaciado elcorazón.Simirandentrodeustedes,verán
que
sonelproductomismo
de la civilizaciónmoderna.Saben cómo
hacerunos
cuantos trucos, trucos técnicos, físicos, perono
son sereshumanos
creativos.
Engendran
hijos,pero esono es creativo.Parapo- der crearuno
necesitaposeeruna
extraordinaria riquezain- terna,y
esa riqueza solamentepuede
surgircuando com- prendemos
la verdad,cuando somos
capaces de recibir la verdad.Así,lareligiónorganizada yel
mundo moderno marchan
juntos;ambos
cultivan el corazón vacío, y ésa es la parte desdichada denuestraexistencia.Somos
superficiales,inte- lectualmentebrillantes,capaces de grandesinvenciones yde producirlosmedios más
destructivospara liquidamos unos aotrosypara crearmás
ymás
división entrelos sereshuma-
nos. Perono sabemos
qué significa amar;no tenemos una
canción en nuestros corazones.Tocamos
música, escucha-mos
laradio,peroelcantoestáausente,porquenuestros co- razones sehallanvacíos.Hemos
creadoun mundo
absoluta-mente
confuso, desdichado, y nuestras relacionesson ende-NuevaDelhi, 14de noviembre de 1948
bles, superficiales. Sí,lareligiónorganizada yel
mundo mo-
dernomarchan
juntos,porqueambos
nosconducen
alacon- fusión,yestaconfusióndelareligiónorganizadaydelmun-
domoderno
es el resultado de nosotrosmismos. Son
nues-traspropias expresiones, proyectadas.Porlo tanto,no puede haber transformación enel
mundo
exterior amenos
que haya unatransformaciónmuy
profundadentrode cadauno
de no- sotros; generar esta transformación no esproblema
de ex- pertos, deespecialistas,delíderesode sacerdotes.Es
elpro- blema de cadauno
de nosotros. Si lodejamos
enmanos
de otros, nosvolvemos
irresponsables; por lo tanto, nuestros corazonesquedan
vacíos.Un
corazón vacío con unamente
técnica no es un ser
humano
creativo, y acausa de que he-mos
perdido el estado creativo,hemos
producido unmundo
totalmente desdichado, confuso, desgarrado porlasguerras y por lasdiferenciasraciales y de clase. Es responsabilidad nuestra dar origen a
una
transformación radical dentro de nosotrosmismos.
DE «DE LA OSCURIDAD A LA LUZ»
¡Escucha!
La
Vidaesuna.No
tienecomienzo
nifinal.El origenyel propósitoviven entu corazón.
Estás preso
enlaoscuridad de su vasto abismo.
La
Vidacarecedecredos, decreencias,no
pertenece aningunanación, aningúnsantuario.No
estáatadaporelnacimientoniporlamuerte.No
esvarónni mujer.¿Puedes acaso«vestirlasaguas»
o
«recogerelvientoen tuspuños»?
Responde, ¡oh, amigo!
Bebe
enlafuentedelaVida.Ven,
temostraréelcamino.
El
manto
delaVidacubre todaslascosas.del «DIARIO II»
|jl§E KRISHNAMURTI,
6 DE ABRIL DE 1975
No
esese extraordinario azuldel Mediterráneo; elPacífi- cotiene unazuletéreo, especialmentecuando
soplauna
bri- sasuave desdeeloeste mientrasuno conduce
elcochehaciael norte por la carreterade la costa. ¡Es un azul tan tierno, tandeslumbrante,puroypleno dejúbilo!
En
ocasiones, pue- denverse lasballenasresoplando ensu viajehaciaelnortey, raramente, sedivisan susenormes
cabezascuando
se lanzan fuera delagua. 1labiatodoun grupo deellas resoplando; de- ben seranimalesmuy
poderosos. Esedía, elmar
era unlago silencioso ycompletamente
inmóvil, sin una sola onda.No
tenía ese claro azul danzante, estaba
dormido
y uno lo con- templaba con asombro.Ea
casateníavista al mar. |Éstaeslacasa
donde
estuvohospedado
en Malibú.] Es una casaher-mosa
con un tranquilojardín, césped verde y flores.Es
es- paciosa y está iluminada por el sol de California.También
lasliebres gustaban de ella; venían temprano porla madru- gada y al anochecer para
comerse
las flores: pensamientos recién plantados, caléndulas y pequeñas plantitas en flora- ción.Uno
no podía mantenerlas fuerapese aque
rodeando todoeljardín habíaunacercadealambre, y matarlas hubie- rasidouncrimen. Pero ungato y una lechuza bodeguerapu-Sobrelanaturaleza yelmedio
sieronordenen eljardín; elgato
deambulaba
porahíy
la le- chuzaseposabaduranteeldíaentreloscorpulentos eucalip- tos.Uno
podíaverla,inmóvil, losojos cerrados,grandeyre-donda. Lasliebresdesaparecieron yeljardínfloreció;elPa- cífico azulfluíasuavemente.
Sólo el
hombre
trae desordenaluniverso.Es
cruely ex-tremadamente
violento.Dondequiera
que se encuentrepro- duce desdichay confusiónensímismo
y enelmundo
quele rodea.Lo
devasta y destruyetodo; no conocelacompasión.Carece de orden internamentey,poreso, loquetocasevuel- vecorrupto
y
caótico.Su
políticaha
llegado a serun
refina-do
gangsterismo de poder, de fraude personal o nacional,con un
grupo contraotrogrupo.Su economía
esrestringida y,por lotanto,no
es universal.Su
sociedades inmoral,tan- tobajoun régimen
librecomo
tiránico.No
esreligioso,aun- que tengacreencias, practiquecultos y pase por intermina- bles rituales sin sentido. ¿Por qué se ha vuelto así, cruel, irresponsableytancompletamente
egoísta? ¿Por qué?Hay un
centenardeexplicaciones, y aquellos que loexplicanin-geniosamentecon palabras
que
brotan del conocimiento demuchos
libros yde experimentos sobre animales están ellosmismos
atrapados enlareddelaambición, laarrogancia,la angustiayeldolorhumanos. La
descripciónno
es lo descri- to, lapalabrano
es lacosa. ¿Ocurre ello porque elhombre
buscalascausasenlo externo,enelmedio
quelocondicio- na, esperandoque
elcambio
exteriortransforme alhombre
interno?¿Esporque se hallatan
apegado
a sussentidos, do-minado
por sus requerimientos inmediatos? ¿Es debido a que vivetanenteramenteen elmovimiento
del pensar y del conocer? ¿Esporque,siendo tanrománticoy
sentimental,se vuelvecruelensusideales, engañosy
pretensiones?¿O
por- que siempre es conducidocomo
seguidoro
se convierteenlíder, en gurú?
Estadivisión
como
loexterno ylointemo
eselcomienzo
de suconflictoy su desdicha; elhombre
seencuentrapresoDel«DiarioII»deKrishnamurti, 6 deabrilde 1975
enesta contradicción, enesta tradición sempiterna. Atrapa- do enesta división insensata, estáperdido y se convierte en un esclavodeotros.
Lo
externo y lointerno son imaginación e invención del pensamiento;como
el pensamiento es frag- mentario, contribuyeal desorden yal conflicto, locual im- plica división. El pensamiento nopuede
producir orden, unfluirsinesfuerzodela virtud.
La
virtudno
eslacontinuare- peticióndelamemoria, delapráctica. Elconocimiento-pen- samientoestáatado altiempo. Porsumisma
naturaleza yes- tructura,el pensamiento no puedecaptare!fluir íntegrodela vidacomo
unmovimiento
total. El pensamiento-conoci- miento nopuede
penetrar inteligentemente en esta totalidad;no puede percibirlaen
modo
alguno mientras sigasiendo el percibidor, el observadorexternoque mira hacia lo interno.El pensamiento-conocimiento
no
tiene cabidaen la percep- ción. Elpensadores elpensamiento, elpercibidores lo per- cibido. Sólo entonces hayun
movimiento, un fluir sin es- fuerzoalguno en nuestravidacotidiana.NUEVA DELHI,
28 DE NOVIEMBRE DE 1948
Me
parece importantecomprender que
un conflicto de cualquier claseno produce un
pensar creativo.Mientras no comprendamos
elconflicto, lanaturaleza del conflicto ycon qué estamos
en conflicto, escompletamente
inútil elmero
lucharcon un problema
ocon un
trasfondo oam-
bienteen
particular.Así como
todaslas guerras crean de- terioro yproducen
inevitablementemás
guerras,más
des- dicha,también
la luchacon
el conflictoconduce
amás
confusión.
De
esemodo,
nuestro conflicto interno, alpro- yectarse externamente, creaconfusiónenelmundo.
Porlo tanto esnecesario, ¿verdad?,comprender
elconflicto y verque
elconflicto, decualquier claseque sea,no produce un
pensarcreativo,no da
origena sereshumanos
cuerdos,ra- zonables.No
obstante, toda nuestravida segasta enlalu- cha,y pensamos que
esa luchaesuna
partenecesariade la existencia.Hay
conflictocon uno mismo
ycon
el medio, siendo elmedio
la sociedad, la cual, a su vez, es nuestra relacióncon
la gente,con
las cosas ycon
las ideas. Esta lucha se considerainevitable, ypensamos que
es esencial para el proceso de la existencia.Y
bien, ¿es así? ¿Existealgún
modo
de vivirque
excluyalalucha, enel cualhaya una
posibilidad decomprensión
sin elhabitual conflicto?No
sé sihan
advertidoque
cuantomás
luchancon un
pro-NuevaDelhi, 28 de noviembre deJ9J8
blema psicológico,
más
confusos y enredados quedan, y que sólocuando hay
cesaciónde la lucha, de todo el pro ceso del pensamiento, llega la comprensión.Tendremos
que investigar, entonces, si el conflicto es esencial y si es beneficioso.Ahora
bien, estamos hablando acerca del conflicto en nosotrosmismos
y del conflicto con elmedio que
nos ro- dea.Elmedio
es loqueuno
esen lointerno:uno
yelmedio
no sondosprocesosdiferentes;uno
eselmedio
yelmedio
esuno
mismo,
locual esunhecho
obvio.Uno
naceen un gru- poparticularde gente,ya sea enlaIndia, enAmérica, Rusia o Inglaterra, y escmismo medio
con sus influencias de cli-ma, tradición, costumbres sociales y religiosas, le crea a uno. y
uno
es ese medio. Raradescubrirsi existe algomás
que elmero
resultado del medio,tenemos
que estar libres del medio, libresdesucondicionamiento.Eso
es obvio,¿no es así? Simiran
conmucha
atención dentro de símismos,
verán que, habiendo nacido eneste país, son ustedes climá-tica. social, religiosa y
económicamente,
el producto o re- sultado delmismo. O
sea, que están condicionados. Para descubrirsi hay algo más, algomás
grandeque elmero
re- sultado de una condición, uno tieneque
estar libre de esa condición.Estando
condicionadono
tiene sentido preguntarse si existe algo más, algo
más
grande que elmero
pro- ductodelmedio.Obviamente tenemos que
estar libresde loque nos condiciona, del medio, y sólo entonces
podremos
descubrir si existe algo más. Afirmar que existe oque
no existealgo más,es ciertamente unamanera
errónea de pen-sar. linotieneque descubrir, y para descubrir tiene
que
ex- perimentar.* >Ji
Al considerar,pues,estascuestiones, porfavor,tengamos presenteque estamos
emprendiendo
un viajejuntos a findeSobrelanaturaleza yelmedio
descubrir cosas juntos; por lotanto, noexiste el riesgodela
relación «discípulo y maestro».Ustedes
no
están aquícomo
espectadores para
mirarme
actuar;uno
y otros estamos ac- tuando; por consiguiente, ninguno de nosotros está explo- tandoalotro.VARANASI, 22 DE NOVIEMBRE SUS® 1964
Sii|IÍ;
P
Siuno
no estáencomunión
con nada,esun
serhumano
murrio. Tenemos,
que
estarencomunión con
el río, con los pájaros,conlosárboles,con
laextraordinarialuz del atarde- cer,conlaluzdelamañana
sobreelagua;tenemos
queestarcomunión
connuestro vecino,con
nuestraesposao nues-troesposo,
con
nuestroshijos. Porcomunión
entiendo lano
interferencia del pasado, de
manera
quepodamos
mirarlo todocomo
sifueranuevo,como
si loviéramos por vez pri-mera: ése eselúnico
modo
deestarencomunión
con algo, muriendoatodo lode ayer. ¿Es posibleeso?Uno
tiene que descubrirlo,no
preguntar:«¿cómo
he dehacerlo?», ¡esuna
i|||;preguntatan tonta!La
gentesiemprepregunta:«¿cómo
tengo|ll:«que haceresto?», lo cual demuestrasu mentalidad; no
han
vcomprendido, loúnicoque deseaneslograr
un
resultado.De modo que
lespreguntosialguna vezestánen contactoalo°- s* alguna vez están en contacto consigo
mismos;
nocon el
yo
superior yelyo
inferiory todaslas innumera- blesdivisionesque
elhombre ha
creadoparaescapardel he- cho.Y
eso tienenque
descubrirloustedes,no
esperarque
al-guien les diga
cómo
llegar a esta acción total.No hay
un«cómo»,
nohay
método,no
haysistema;nadiepuede
decir- lescómo
hacerlo. Ustedes tienenque
trabajar paraello.Lo
siento,
no
quiero usar esapalabra, trabajar, alagentelegusSobrelanaturaleza yelmedio
tatrabajar,ésa es unade nuestras fantasías: que
debemos
tra-bajar para lograralgo.
No
es así;cuando
sebailanenun
es-tadode comunión,
no
hayun
trabajar, esoestáahí, elperfu-me
estáahí, noesnecesariotrabajar.Porlo tanto,pregúntenseasí
mismos,
sime
permitenque se lo pida,descubran porustedesmismos
si están encomu-
nión con algo-siestánencomunión
con un árbol. ¿Alguna vezhan
estado encomunión
conun
árbol?¿Saben
lo que significamirarun
árbol sin que ningún pensamiento, ningún recuerdointerfieraenlaobservación, conloquesienten,cor lasensibilidadyelestado nervioso deatención que experi- mentan, demodo
talque sóloexistaelárbol,no
alguienque estámirando
el árbol?Probablementenunca
hanhecho
esto,porquepara ustedesel árbolno significanada.
La
bellezadeun
árbolno
tiene significación alguna, porque paraustedes labellezaimplicasexualidad.Poresohanexcluidoelárbol,la naturaleza,elríoy alagente.No
estánencontactoconnada, ni siquieracon
ustedesmismos.
Estánen
contactocon
sus propiasideas,consus propiaspalabras,como
sereshumanos
encontactoconcenizas.¿Saben
qué ocurrecuando
están en contactocon
cenizas?Están muertos, sehan
extinguido.Por consiguiente, loprimero quehay
que comprender
es que tenemos quedescubrir cuáles laaccióntotalqueno
crea- rácontradicción enningúnnivel denuestraexistencia; des- cubrirqué
esestaren comunión, encomunión con
nosotrosmismos, no con
elyo
superior, nocon
elatman, con Dios y todoeso,sinoestarrealmenteencontactoconnosotros mis- mos, connuestracodicia,nuestraenvidia,nuestraambición, nuestrabrutalidad, nuestros engaños,yentoncesmovernos
a partir de ahí. Así descubriremos por nosotrosmismos
-lo descubriremos,no
noslo dirán,locualno
tienesentido-que sólo existeuna
acción totalcuando hay un
silenciocomple- todelamente
ylaacción surgedeese silencio.Ustedessaben,en cuantoala
mayoría
denosotros,quelamente
es ruidosa, está perpetuamente charlando consigoVaranasi, 22 de noviembre de
1%
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misma,
sumida
en soliloquios oparloteos acerca dealguna cosa, tratando de hablarse a símisma,
de convencerse de algo; estásiempre moviéndose, haciendo ruido.Y
desdeese ruido actuamos. Cualquieracciónque
nazca del ruido pro- ducemás
ruido,más
confusión. Pero si han observado y aprendido lo que significa comunicarse, la dificultad de la comunicación,la no verbalizaciónde la mente-que
esesolo que secomunica
y recibe lacomunicación-, entonces,como
lavidaes un movimiento, al actuarse
moverán
ustedes na- turalmente, libremente, con facilidadysin esfuerzo alguno, hacia eseestadodecomunión.Y
en ese estadodecomunión
-si investigan
más
afondo-encontraránque nosólo están encomunión
con la naturaleza, conelmundo,
con todocuantolesrodea, sinotambién en
comunión
consigo mismos.Estaren
comunión
conuno mismo
implica silenciocom-
pleto, de
modo
quelamentepueda
estarencomunión
silen- ciosa consigomisma
acerca de todo.Y
desde ahí existeuna acción total. Sólo graciasa ese vacío hay una acción total y creativa.VARANASI, 28 DE NOVIEMBRE DE 1964
Según
recientesdescubrimientos delos antropólogos, elhombre
parecehaber estado viviendoen estatierradurante unos dosmillonesdeaños.Ha
dejadoencuevas,desde hace alrededordediecisietemil años,registrosdeluchas,comba-
tes,del interminable dolor delaexistencia: labatalla entreel bien y el mal, entre la brutalidad y aquello
que
elhombre
busca eternamente: el amor. Y, alparecer, elhombre no
ha resuelto susproblemas;no
problemas matemáticosni cientí- ficos ni de ingeniería, sino losproblemas
de la relación:cómo
vivirpacíficamente enestemundo, cómo
estarenínti-mo
contactoconlanaturalezayverlabellezadeun
pájaroo deuna rama
desnuda.Descendiendo
a los tiemposmodernos,
nuestros proble- mas, losproblemas humanos, aumentan
cada vez más; tra-tamos
de resolver estosproblemas
de acuerdocon
ciertos patronesde moralidad, de conducta y segúndiversoscom- promisos que hemos asumido
mentalmente.Conforme
a nuestroscompromisos,
a los patrones de conducta, a fór-mulas y
sancionesreligiosas, tratamos deresolver nuestros problemas, nuestras angustias, nuestra desesperación, nuestra inconstancia ylas contradicciones de nuestras vi- das.Adoptamos
cierta actitudcomo
comunistas, socialis- tas,esto oaquello; y desde esaactitud, desde esaplatafor-Varanasi, 28denoviembre de.1964
mfu por decirlo así, tratamos de resolver nuestros proble-
mas
poco apoco,uno
tras otro. Estoes loquehacemos
en nuestras vidas.Uno
puede serun
grancientífico, pero esemismo
científi-ca
en su laboratorio, esporcompletodiferentedel científico enel hogar;ésteesnacionalista, amargo, iracundo, envidio- so,compite consus colegascientíficosporun renombre ma-
yor,por
una mayor
popularidad y pormás
dinero.No
se in- teresaen absolutoporlosproblemas humanos;
estáintere- sadoeneldescubrimiento dedistintasformas delamateria yenlaverdad de todo eso.V Y
nosotros, siendo sereshumanos
corrientes,no
exper-tos, noespecialistas en
una rama
particular delconocimien-to. también estamos
comprometidos con
cierto patrón de conducta, con ciertos conceptosreligiosos o con elveneno
nacionalista, y desde esabase nos esforzamos porresolver
¡josproblemas
que aumentan
y se multiplicanpermanente-rnente.
¿Saben?, elhablaryelleer
no
terminan nunca.Podemos
amontonarpalabras sobrepalabras, y laexpresiónverbal, la belleza dellenguaje, lasensatezofaltadelógicadeloque
se dice, nos persuade o nosdisuade. Pero loimportanteno
es acumularpalabras, escucharconferencias ydiscursos, leer, sino resolver elproblema
-elproblema humano,
nuestro problema-,no poco
a poco,no
amedida
quesurge,no segúnlascircunstancias, las presionesy tensiones de laexistencia moderna, sino a partirde una actividad por completo dife- rente. Estánlos problemas
humanos
de lacodicia, de laen- vidia, del carácterembotado
de lamente, del corazón dolo- rido,de laespantosa insensibilidad del hombre, dela bruta- lidad y la violencia, de la desesperación y la angustia humanas.Y
durantelosdos millonesde años quehemos
vi- vido,hemos
tratadoderesolverestosproblemas valiéndonos de diferentes fórmulas, sistemas y métodos, con diferentes gurúes, con distintasmaneras
de mirar, de averiguar, deSobrelanaturalezayelmedio
cuestionarlas cosas.
No
obstante, estamosdonde
estamos, presasdeesteinterminableprocesodeangustia y confusión, dedesesperacóninfinita.¿Existe
una manera
de resolver los problemas entera- mente, completamente, demodo que nunca
surjan?Y
si aun asísurgen,¿podemos
abordarlos instantáneamente yresol- verlos, disiparlos, eliminarlos?¿Hay una manera
totaldevi- virdonde
losproblemasnopuedan
arraigar?¿Hay un modo
de vivir
-no
elpatróndeun modo,
deun
método, deun
sis-tema, sino
un modo
total devivir- enel queno
surjan pro- blemas en ningúnmomento,
ysisurgenpuedan
ser resueltos instantáneamente?Una mente que
arrastra la carga de losproblemas se vuelve torpe, pesada, estúpida.
No
sé si han observado supropiamente
ylas mentes de sus esposas,es-posos yvecinos.
Cuando
lamente
tiene problemas de cual- quierclase,esosmismos
problemas-aun
losproblemasma-
temáticos, por complejos, arduos, fascinantes, intelectualesque
sean-embotan
la mente. Entiendo por la palabra pro-blema una
cuestióndifícil,una
relación difícil,un
puntodi- fícil quepermanece
sinresolversey quearrastramos díatras día. Por esonospreguntamos
siexiste unamanera
de vivir,un
estadodelamente
que, acausade quecomprendemos
la totalidad delaexistencia, notieneproblemasy
que, cuando aun asísurgeun
problema,lamente puede
resolverloinme- diatamente.Porque
en elmomento
enque un problema
es diferidoun
solodía, aunun
minuto,embota
lamente,la tor-na
pesaday laprivadelasensibilidadnecesaria paramirar, para observar.¿Existe
una
acción total,un
estado de lamente que
re- suelva todoproblema
apenas surgey
queno
albergue pro-blema
algunoen símismo,
aningunaprofundidad, nicons- ciente niinconsciente?No
sésialguna vezsehan
planteado estapregunta.Probablementeno,porquecasitodos nosotros estamostansumergidos enlosproblemascotidianos,tanab- sorbidos por ellos-ganándonos
la subsistencia y respon-Varanasi, 28 denoviembre,de 1964
dicndo a ios requerimientos de una.sociedad
que
psicológi- camenteconstruyeunaestructuradeambición, codicia, afán adquisitivo-, queno tenemos
tiempo parainquirir. Estama-
ñanavamos
a investigar esto, y de ustedesdepende
ia pro fundidada la que investiguen, el nivel de seriedad con que exijanlainvestigación y laclaridade intensidaddelaobser- vaciónque realicen.Al parecer,
hemos
vivido durantedos millonesde años,¡unaidea terrible!
Y
probablemente, talcomo
sonlos seres humanos, viviremosotrosdos millonesde años atrapados eneldolordela existencia. ¿Existe una manera, algoque pue- da liberar ai
hombre
de esto enteramente, demodo que
no vivam
siquiera un segundo en la angustia, que no invente unafilosofíaquele satisfagaen suangustia,que notengauna fórmula para aplicar a todos los problemas que surgen, in-crementandoasíesosproblemas? ¡Existe!
Hay un
estado delamente que
puede
resolverlos problemas inmediatamente;por lotanto, la
mente misma
no tieneproblema
alguno, ni conscienteni inconsciente.Eso
es loquevamos
a investigar.Y aunque
quienles ha- blavaa usar palabraspenetrando tan lejoscomo
seaposible, ustedes tienen que escuchar ycomprender
mediante la co- municación de las palabras.Cada uno
de ustedes esun
serhumano, no
un individuo, porque todavía son elmundo,
lamasa;
forman
partedeestaterrible estructuradelasociedad.La individualidad sólo existe
cuando hay
un estado de lamenteen el
que
ésta notiene problemas, en elque se hade- sembarazado por completo delaestructura social decodicia, ambicióny espíritu adquisitivo.Decimos que
existe un estado en elque
lamente puede
vivir sin
problema
alguno yenelquepuede
resolverdema-
nera instantánea cualquier
problema que
se presente. Uste- des tienenque
verlo importante queesno
diferirunproble-ma
ni undíaoun segundo. Porque cuantomás
retenemos un problemasinresolverlo,cuantomás
terrenoledamos donde
Sobrelanaturalezayelmedio
pueda
echarraíces,más
sedestruyenlamente,elcorazón,la sensibilidadnerviosa. Porlo tanto esimperativoque
el pro-blema
seresuelvainm
ediatamente.¿Es posible
-después
de haber vivido dos millones de años con losconflictos, la desdicha,elrecuerdodemuchos
ayeres-, es posible
que
lamente
se libere a símisma
de todo esoafindeque
sea completa, total,no
fragmentada?Para averiguar eso
tenemos que
investigarel tiempo, por-que
losproblemas
yeltiempoestánestrechamenterelacio- nados.Vamos,
pues,a investigareltiempo.O
sea que,después de habervivido dos millones de años,¿tenemos que
seguir viviendootrosdos millones de años eneldolor, enlaaflic- ción,en
la ansiedad, en la perpetua lucha, en la muerte?¿Eso
esinevitable?La
sociedad progresa,evolucionadeesemodo:
evolucionaa travésde lasguerras, delas presiones, delabatallaentre Oriente y Occidente,delasmúltiplesdis- putas de la nacionalidad, delMercado Común,
de los blo- quesque forman
este poder y aquel poder.La
sociedad avanza, avanza, avanzalentamente, enciertomodo
dormi- da,pero avanza.Pues
bien, talvez en dosmillonesde años lasociedadllegaráaalgunaclasedeestadoenelcuallos se- reshumanos
podrán existirsincompetirentresí,con
amor, con bondad,con
quietud,con un sentido exquisitodelabe- lleza. ¿Perodebe uno
esperardos millonesde años paralle-gara eso?
¿No debe uno
serimpaciente?Estoyempleando
lapalabra impaciente en su sentido correcto: ser impacien-
te,
no
tenerpacienciacon
eltiempo.O
sea,¿nopodemos
re- solverlo todo,no
en términos de tiempo, sino inmediata-mente?
Piensenbien acercadeesto.
No
diganque
esimposibleoque
es posible.¿Qué
eseltiempo? Estáeltiempocronológi- co, eltiempo delreloj.Ese
tiempo, obviamente, es necesa- rio;cuando vamos
a construirun puentetenemos
quedispo- nerdetiempo. Perotodaotraforma
detiempo,talcomo
«yoVaranasi, 28denoviembre de 1964
seré», «yo haré»,
«no debo
hacerlo», no es auténtica,es tan sólo la invención de unamente
quedice:«Yo
haré eso». Si nohay unmañana ~y
nolohay-, entonces toda nuestraacti- tud es diferente. Y.de hecho, noexisteun
tiemposemejante;cuando sentimos
hambre
o deseo sexual o ansiasdelujo,no tenemos tiempo,queremos
esa cosa inmediatamente.La
comprensión del tiempo es, entonces, la resolución de los problemas.Porfavor,veanlaíntima relaciónque existeentreel pro- blema y el tiempo. Por ejemplo, hay dolor. Ustedes saben quéeseldolor;
no
el dolor supremo,sino eldolorde sentir- sesolo, eldolordeno lograrloque queremos,eldolorde no vercon claridad,el dolordelafrustración,eldolordehaber perdido a alguien a quienamábamos,
el dolor de ver algomuy
nítidamentedesde el punto de vista intelectual yno
ser capaces de realizarlo. Y.más
allá este dolor, hayun
dolor aúnmás
grande: el dolordel tiempo. Porqueesel tiempo elque engendra el dolor. Por favor, escuchen esto.
Hemos
aceptado el tiempo,el cual esel proceso gradual dela vida, la
manera
gradual de evolucionar,elcambio
gradual de esto aaquello,cambiar gradualmente dela ira a unestadoexento deira.Hemos
aceptadoel procesogradual deiaevolucióny decimosqueforma
parte dela existencia, quees parte de la vida,queesel plan deDiosoel plancomunista o algúnotro plan.Hemos
aceptado eso y vivirnos con eso,no como
una idea sinodehecho.Puesbien, para
mí
ése es elmayor
dolor: permitirque eltiempodicteelcambio, lamutación.
¿Acaso
tengoqueespe- rardiez milaños y más, tengoque
pasarporesta desdicha, poreste conflictoduranteotrosdiezmil años, y lentamente, gradualmente, cambiar poquito a poquito,tomándome
mi tiempo,avanzando muy
despacio? Aceptareso y vivirenese estadoeselmás
grande de losdolores.* * *