convertirse en enojo, y con el tiempo volvemos el enojo contra nosotros mismos, dando así lugar a la depresión. Estos sentimientos pueden asumir muchas formas: odiarnos a nosotros mismos, ataque de ansiedad repentinos, cambios de humor, culpas, reacciones exageradas, hipersensibilidad, encontrar el lado negativo en situaciones positivas o sentirse impotentes y autodestructivos. Cuando una persona no logra ser autentica se le originan los mayores sufrimientos, tales como enfermedades psicológicas, la depresión, las neurosis y ciertos rasgos que pueden no llegar a ser patológicos, pero crean una serie de insatisfacciones y situaciones de dolor, como por ejemplo timidez, vergüenza, temores, trastornos psicosomáticos.
Estos resultados son consistentes con los hallados en otros estudios so- bre el papel que desempeñan variables como la bajaautoestima (Beato et al., 2004; Ghaderi y Scott, 2001; Kim y Lennon, 2007), la falta de expresión emocional en general (Casper, 1990; Casper et al., 1992; Ioannou y Fox, 2009), la ansiedad (Buckner et al., 2010; Davey y Chapman, 2009; Holtkamp et al., 2005) y la alexitimia (Iancu et al., 2006; Kiyotaki y Yokoyama, 2006; Ridout et al., 2010; Speranza et al., 2007) en el desarrollo de los trastornos de la conducta alimentaria. Pero, además, cobran especial relevancia porque por primera vez –que tengamos constancia– aportan evidencia empírica so- bre el importante papel que desempeñan dos variables como la in uencia de la alimentación, el peso y la gura corporal en el estado de ánimo y la acción impulsiva –la tendencia a reaccionar de forma impulsiva, sin tener un control sobre las propias acciones, como forma de afrontar la ansiedad– en el desarrollo de los trastornos de la conducta alimentaria. Sea como fuere, lo fundamental es que los resultados encontrados indican que convendría pres- tar atención a las mujeres que presentan estas tendencias emocionales a n de evitar que nalmente acaben desarrollando un trastorno de este tipo.
esto se le reforzará negativamente, en cuanto a las deficiencias en la competencia, la bajaautoestima predispone a al fracaso ya que no ha aprendido las habilidades para poder alcanzar el éxito. Por todo esto, el individuo con bajaautoestima tiende a centrarse más en los problemas que en las soluciones. Tratan de evitar las situaciones en las cuales pueden ser consideradas competentes o merecedoras, ya que estas implican un gran cambio de patrón y para ellas suele ser más fácil evitarlas que afrontarlas. Muchas veces no pueden mantener por un largo tiempo un empleo o una relación positiva y enriquecedora, pues esto representa un esfuerzo el cual no están dispuestos. Un acenso, un nuevo trabajo, iniciar una relación de pareja son hechos que comportan cambios no siempre se es fácil de aceptar o afrontar. Los sujetos con un bajo nivel de autoestima tendrán a evitar situaciones de este tipo negado, muchas veces, la evidencia en el caso de ascenso, puede rechazarlo o no hacer nada para conseguirlo por lo que respecta al nuevo trabajo, nunca será tan seguro como el que ya tiene. Y por último la relación de pareja puede suponer compromisos afectivos que comparten sentimientos de inseguridad. (41)
Los sentimientos de inseguridad e inferioridad que sufren las personas con autoestimabaja pueden generar sentimientos de envidia y celos de lo que otros poseen, lo que difícilmente aceptan, manifestándose con actitudes de tristeza, de presión, renuncia y aparente abnegación o bien con actitudes de ansiedad, miedo, agresividad y rencor. Puedo objetar como la autoestima alta hace que un joven actúe con intuición y percepción, es libre, nadie lo amenaza, ni amenaza a los demás. Dirige su vida hacia donde cree conveniente, desarrollando habilidades y recibiendo consejos de las personas mayores que hagan posible ésto. Es consciente de su constante cambio de vida y acepta nuevos valores y rectifica caminos, aprende y se actualiza para satisfacer las necesidades del presente. Acepta su sexo y todo lo relacionado con él, mientras que un joven con una autoestimabaja usa sus prejuicios, se siente acorralado, amenazado, se defiende constantemente y amenaza a los demás. Dirige su vida hacia donde otros quieren que vaya, sintiéndose frustrado, enojado y agresivo. Inconsciente del cambio, es rígido, adapta valores y se empeña en permanecer estático en todas sus actividades, se estanca y no acepta la evolución, no ve las necesidades del presente, no acepta su sexo, ni lo relaciona con él. como dice el psicólogo Walter Rizzo: “Un aspecto interesante para señalar es que las personas con problemas de autoaceptación son demasiado “duras con la auténtica y blandas”, cuando critican a otra gente. En cambio, los sujetos que muestran una buena autoestima se protegen siendo más bien suaves a la hora de autoevaluarse” 29 .
El consumo de alcohol en los adolescentes se corresponde con algunas situaciones como problemas de identidad, bajaautoestima, tendencia al aislamiento y a la depresión, ansiedad y otros problemas de salud mental, lo que hace de este grupo etario uno de los sectores más proclives a implicarse en comportamientos adictivos diversos y en particular a esta sustancia. (4)
Este tema tiene gran importancia, tomando en cuenta que en los actuales momentos el Ecuador está brindando interés hacia el desarrollo y educación de los niños y niñas, basándonos en el objetivo N° 4 del plan Nacional para el Buen Vivir que es fortalecer las capacidades y potencialidades de la ciudadanía. Por lo cual es necesario que desde pequeños se deba fortalecer y desarrollar una buena autoestima en los niños y niñas, así estimular un óptimo desarrollo del aprendizaje y favoreciendo un adecuado rendimiento escolar. De ahí la necesidad de dar el impulso a lograr elevar la autoestima en los niños y niñas para la superación personal consolidando el proceso escolar en base de métodos educativos que eleven la calidad humana en los niños y niñas y padres de familia.
(citado por Hammond, 1990), donde se le pide al paciente que imagine un lugar donde hay muchos árboles y que observe un gran árbol a un lado del camino, que es muy alto y frondoso, el árbol ha soportado los embates de la naturaleza pero está firmemente sujeto al suelo por sus fuertes raíces, lo que lo hace fuerte y resistente. Este tipo de metáfora es útil en pacientes que han pasado por situaciones difíciles en la vida, y hace una analogía entre la persona que vive circunstancias difíciles y un árbol que crece de una semilla, que aprende a enfrentarse a las inclemencias del tiempo, a crecer rodeado de obstáculos y a desarrolla una corteza dura por fuera para proteger todo lo que tiene dentro, esto permite al paciente fortalecer su autoestima y su concepto de autovalía. Después de aplicar la técnica, Pedro reporta sentirse muy relajado, con más energía, expresando “siento muchas ga nas de ser yo”.
Otros autores identifican y resaltan el término Autoestima, entre ellos BRANDEN (1990) quien expresa que la manera en que nos sentimos con respecto a nosotros mismos, afecta de modo determinante todos los aspectos de nuestra experiencia: cómo nos relacionamos con los padres, hermanos, pareja, amigos, y cómo también funcionamos en el campo académico laboral. Es así que, de la Autoestima se desprenden las posibilidades que se tienen para progresar y constituir la clave del éxito o fracaso en la vida. Este autor considera que la Autoestima es la suma de la confianza y respeto por uno mismo, reflejando un juicio implícito que cada uno hace de su habilidad para enfrentar los desafíos, para comprender y superar sus problemas, defender sus intereses y necesidades, es decir, posibilita el derecho a ser feliz.
En la Tabla y Gráfico 8 se muestra la influencia de la severidad del acné en la dimensión social de la autoestima; se observa la tendencia a tener niveles más bajos de autoestima con niveles más severos de acné; pasó de 44.44% en el acné grado I a 50% en el grado II, y a 27.27% en el acné grado III y llegó a 66.67% en el acné grado IV, aunque las diferencias no resultaron significativas (p > 0.05) pero la influencia fue de baja intensidad (r > 0.10). Aquí se produce mayor compromiso de la autoestima, que en la esfera social contempla las actividades que comprenden la interacción con sus pares y con personas del sexo opuesto, en el entorno laboral o académico, y es donde se aprecia una mayor relación con la severidad del acné, aspecto que ya fue reconocido por los especialistas en acné (3).
31 Desarrollaron un extenso estudio en 5852 estudiantes de diversos planteles educativos privados y públicos de la región; verificando la confiabilidad del inventario de Coopersmith, encontrando correlaciones altas en coherencia interna 0.75; test - retest de 0.99, concluyendo en que el inventario de autoestima de Coopersmith, es consistente y que está libre de errores aleatorios. La validez de construcción empírica y validez factorial del mismo, fue determinada al encontrar coeficientes de correlación de .88 en varones y .82 en damas, por tanto la prueba cumple con los cometidos establecidos para ella. Finalmente encontraron que el 99% de las preguntas o ítems son de dificultad moderada, ubicándose entre los límites de 0.20 a 0.74. Determinando que las escalas percentilares, puntajes T y Eneatipos de los baremos, medidas o estándares elaborados para la interpretación de los puntajes directos, pueden ser utilizados para medir diversos grupos poblacionales.
Cuando escuchemos la opinión de nuestros estudiantes (aunque no pueda gustarnos o discreparnos de ella), cuando nos interesamos de su vida como personas, si el clima de convivencia en el colegio es democrático, entonces estaremos favoreciendo que se valoren a sí mismo, y que hagan lo propio con los demás. Solamente de este modo, las actividades destinadas a promover la autoestima tendrán un afecto en ellos, que los acompañara durante y más allá de su paso por el colegio.
Por autoestima entendemos la autoevaluación que el individuo hace y mantiene en forma persistente sobre sí mismo; se expresa en una actitud de aprobación o reprobación e indica hasta donde él se siente capaz, significativo, exitoso y valioso. La autoestima es un juicio personal de valor que se expresa en las actitudes que el individuo tiene de sí mismo. Es el grado relativo de valoración o aceptación con que las personas perciben su autoimagen. Estas percepciones incluyen la imagen de sí mismo en comparación con otros (percepción de sí), la imagen que percibe que los otros tienen de él (percepción del otro), y la imagen de como quisiera ser (si mismo ideal). A mayor discrepancia entre el autoconcepto ideal y la percepción que tiene de sí o de la respuesta a las expectativas del otro, hay mayor alteración en la autoestima. 8, 9
Sugerimos a los padres de familia que fomenten la autoestima de sus niños y niñas ya que es el amor y aprecio que tiene cada niño y niña consigo mismo, sabemos que cuando un niño o niña está en su etapa de desarrollo, se está formando su autoestima, y la autoestima en los niños y niñas es especialmente vulnerable, ya que tiene pocas experiencias con las que formarse una idea sobre sí mismo. Si el niño forma una bajaautoestima, le perjudicaría en la formación de su personalidad. Las inseguridades propias de la edad o los temores a fracasar ante lo desconocido, hacen que la autoestima pueda sufrir especialmente durante esta edad. Para aliviar esos episodios y lograr que el niño se convierta en una persona más feliz, existen algunos consejos que los padres pueden llevar a cabo.
El concepto de sí mismo se va formando gradualmente a través del tiempo y de las experiencias vividas por el sujeto, hay algunos que por su intensidad o significación tienen más valor de programación que otras, son las experiencias positivas o negativas que los adultos recuerdan de su infancia, ellos explican en forma importante lo que las personas se dicen de sí misma, del amor por uno mismo se resume en una palabra, autoestima. La autoestima es una capacidad forma a su vez parte de la actitud intrapersonal, la incluyen también habilidades como la autoconciencia emocional, asertividad, autorrealización e independencia. (Vasquez, 2003)
atendidos en los Servicios de Salud Públicos de Valdivia”, cuyo objetivo fue determinar la prevalencia de ansiedad dental (AD) en niños de entre 6 a 10 años de edad atendidos en los servicios de salud públicos (SSP) de la ciudad de Valdivia, Chile. Este estudio de tipo observacional de corte transversal, midió la prevalencia de AD previa a la atención odontológica utilizando la Escala de Imagen Facial (FIS) en niños de 6 a 10 años que fueron atendidos en los SSP, durante los meses de marzo a junio de 2015. Obtuvieron como resultado: de los 200 niños(as) encuestados el 22,5% presentó ansiedad dental; 51% eran niñas (n=102); edad promedio de 7,9 ± 1,45 años. Concluyendo que la prevalencia de AD en Valdivia es mayor a la observada en otro estudio similar realizado en Santiago de Chile. Recomendamos implementar FIS, dentro de la atención odontológica pediátrica, para facilitar una mejor adaptación y adherencia al tratamiento. En Ecuador (2017), Auquilla 15 realizó un estudio sobre “Niveles de
La AN fue descrita por primera vez por Richard Morton en 1694 y posteriormente, 2 siglos después, Gull en Inglaterra y Lassegue en Francia describieron otros casos que correspondían a la enfermedad tal como se reconoce actualmente. La etiología de la AN aún no se conoce con certeza, pero se piensa que es multifactorial, existiendo componentes de tipo genético, sociales, metabólicos, de personalidad, hormonales, sexuales, de modo de expresar las emociones, de aprendizaje, de historia de abuso, maltrato o perfeccionismo y la coexistencia con otros trastornos psiquiátricos, como el componente depresivo, obsesivo-compulsivo, los trastornos de ansiedad y la pérdida del control del impulso. (16) La cuarta edición del Manual Diagnóstico de los Trastornos Mentales (DSM-IV), define a ésta entidad como un trastorno en el que la persona se niega a mantener un peso mínimo dentro de la normalidad, tiene un miedo intenso a ganar peso y una significativa mala interpretación de su cuerpo
INEI (2002) en su investigación ―Factores asociados a la presencia de violencia hacía la mujer‖, cuyo objetivo fue Identificar, describir y analizar los factores individuales, familiares y contextuales asociados a la presencia de violencia física y psicológica contra la mujer en el contexto familiar, con la finalidad de ofrecer información a los organismos públicos y privados para la fundamentación de sus modelos de prevención e intervención social. Tipo de estudio mixto: descriptivo y analítico, de nivel ex-post facto, y de corte transversal, basado en la data disponible sobre el tema en la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar, (ENDES, 2000). La muestra consta de 28900 entrevistas de hogares y 27843 entrevistas individuales a mujeres en edad fértil. Se utilizó la base de datos (ENDES, 2000), cuyo procedimiento muestral aleatorio permite un alto nivel de representatividad, a partir de lo cual es posible generalizar los resultados a la población. Como conclusiones se obtuvo que en las regiones Sierra Sur, Sierra Centro y Selva hay más violencia física y menos expresión de afecto, además existe baja asociación entre el tiempo de relación marital y la violencia conyugal, cuya tendencia es mayor entre violencia psicológica y mayor tiempo de relación.
... la autoestima es igual a los éxitos partido por las pretensiones: lo he logrado casi todo, pero mis pretensiones eran tan grandes que aunque tenga mil éxitos, es igual a cero, todavía me quedan otros más. Nos es muy difícil ser el segundo y saber que hay alguien que ocupa el primer lugar.
de la RSES fue exactamente la misma que la de la puntuación total de la RJFFIS con la RSES. Esto se explica porque en ese primer factor de la RJFFIS se recogen las valoraciones más globales que realiza la persona sobre sí misma. Esta situación se distancia de lo que sucede entre los demás factores de la RJFFIS y la RSES, pues las correlaciones (aunque significativas todas) van de bajas a moderadas, algo que cabría esperar al referirse estos factores a cuestiones más específicas de la autoestima. Estos hallazgos ponen de relieve que la elección de cualquiera de estas escalas (RJFFIS o RSES) estaría indicada para evaluar la autoestima, pero que el clínico (o investigador) podría optar por una u otra según el propósito que persiga. Partiendo de que ambas medidas son satisfactorias en lo que respecta a sus propiedades psicométricas (p. ej., Fleming y Courtney, 1984; Rosenberg, 1965), si se quiere tener una referencia más clara respecto a las distintas “facetas” de la autoestima, una mejor elección sería la RJFFIS, mientras que la RSES daría una perspectiva más general sobre la forma en que el individuo se valora a sí mismo.
En la Tabla 2 y la Figura 2 hemos agrupado todas las malposiciones dentales que nos dan una presentación de 160 casos (100%), de los cuales, 59 casos (37%) corresponden a autoestimabaja, 51 casos (32%) a autoestima promedio, 24 casos (15%) a autoestima alta, 19 casos(12%) a autoestima muy baja y 7 casos(4%) a autoestima muy alta.