Las Infecciones de Transmisión Sexual son causadas por más de 30 virus, bacterias y parásitos que se transmiten principalmente por contacto sexual, vía hematógena o perinatal, de las cuales el sector salud presta mayor atención al VIH y la sífilis, porque producen efectos profundos en la salud y generan un costo alto en su tratamiento. La presente investigación tuvo como finalidad la caracterización del accionar de enfermería en el Distrito de Salud Guano - Penipe, para la estrategia de prevención y control del VIH y Sífilis. Se realizó un estudio descriptivo – transversal y observacional con enfoque mixto, con una población de 35 enfermeros/as, en quienes se aplicaron 2 instrumentos: un cuestionario y guía de observación. En relación a las variables sociodemográficas, el rango de edad se encontró entre los 20 a 29 años, el 94% es femenino, el 94% son mestizos y 6% indígenas, predomina el rango de 1-3 años para el tiempo de graduación con el 54%, el tiempo de servicio de más de un año es un 49%, el 89% son enfermeros/as rurales y ese mismo porcentaje ha brindado atención a pacientes con VIH o sífilis. Con respecto al conocimiento sobre la estrategia, es deficiente en cuanto a los principios, técnicas de comunicación en la asesoría pre-post prueba, además los profesionales respondieron de manera errónea varias preguntas del inserto de las pruebas rápidas. En base a estos resultados se elaboró una guía educativa con el fin de reforzar la estrategia.
La “profilaxis pre-exposición (PrEP)” ha sido recientemente de- sarrollada como una estrategia de prevención que consiste en la administración de medicamentos a los individuos no infec- tados que presentan una alta exposición y susceptibilidad al VIH. Aunque este uso no está aprobado en nuestro país, varias guías recomiendan la PrEP como una opción de prevención en HSH adultos, hombres y mujeres heterosexuales, y los usuarios de drogas parenterales en riesgo de adquirir la infección. Este artículo presenta las características que un agente ideal para ser utilizado como profilaxis pre-exposición debe cumplir, los datos de eficacia recientemente publicados y las barreras para la implementación de esta nueva estrategia. Por otra parte, se discute el papel de los farmacéuticos del hospital en la posible implantación de esta estrategia en el futuro.
La intervención consistió de cinco sesiones de aproximadamen- te tres horas cada una. La intervención tenía los siguientes objetivos: (a) aumentar la percepción de riesgo a la infección con el VIH; (b) con- cienciar sobre las normas sociales y cómo éstas afectan o dificultan la prevención del VIH; (c) aumentar el nivel de conocimiento y la adqui- sición de destrezas para usar el condón masculino y practicar la mas- turbación mutua; (d) aumentar el nivel de auto-eficacia en el uso del condón masculino y la práctica de la masturbación mutua; (e) desarro- llar actitudes positivas hacia el uso del condón masculino y la práctica de la masturbación mutua; y (f) aumentar la frecuencia del uso del con- dón masculino y la práctica de la masturbación mutua y reducir la fre- cuencia de penetración anal y vaginal sin protección.
en el momento de diseñar los mensajes preventivos; muchos jóvenes, incluso adultos, no lo son por distintas razones –opciones personales, culturales, credos religio- sos, estructura de valores– y resulta agresivo e irrespe- tuoso no considerar su autonomía e individualidad. Adicionalmente, en las campañas no se debe continuar con mensajes parcializados, que sólo contribuyen a que las personas sigan asociando la prevención del VIH solamente a la idea del uso del preservativo, descono- ciendo su propia vulnerabilidad y situando el riesgo en grupos específicos. El esfuerzo debe apuntar a conocer a los receptores de la información que queremos entre- gar y a iniciar un diálogo que continúe más allá de un slogan publicitario aislado en el tiempo y entregado por un medio de comunicación a una masa entendida como homogénea. Frente a una temática compleja se requiere entregar no sólo información estadística y técnica, sino también vivencias, sentimientos y procesos personales de maduración. Esto exige un acercamiento a las co- munidades desde personas capacitadas, siendo funda- mental entrenar a los trabajadores de la salud y a los profesores de colegios en esta área, hoy deficitaria en sus currículum de formación. En resumen, el mensaje masivo sólo sirve para introducir a la población al tema y es insuficiente por sí mismo. Debe ser complementado por un acompañamiento cercano desde el trabajo par- ticipativo en las diferentes comunidades afectadas por esta epidemia, es decir, todos los chilenos y chilenas. Chile necesita un cambio en las estrategias de preven- ción de VIH, los números y las personas lo corroboran. Se requiere mayor innovación, integración, pluralismo, autocrítica, mejor calidad en los procesos, coordinación entre diferentes actores de la sociedad, pero por sobre- todo, mayor apertura y humanización en la atención ofrecida en relación a un problema social como es la epi- demia del VIH en Chile. Todos somos responsables del momento en el que estamos hoy y podemos contribuir a generar un cambio.
En un estudio de corte transversal, realizado en Nicaragua, sobre una población carcelaria donde se busco conocer el tipo de conocimiento de esta población sobre transmisión y prevención de VIH, así como el uso del preservativo como un método para la prevención del mismo. 18 Se encontró que entre un 82% y 85% de la población carcelaria tenia un conocimiento adecuado sobre mecanismos de transmisión y uso del condón como método de prevención. Sin embargo las prácticas reflejan diferencias importantes entre lo que saben, lo que creen y lo que hacen, encontrándose poco uso del condón y múltiples parejas sexuales. 18
El presente artículo presenta concepciones respecto a los alcances y utilidades para el cambio de conducta que ofrece la información, interés que ha caracterizado al campo de la comunicación y la salud, sobre todo en materia de prevención y promoción de la salud. Se presentan dimensiones exploradas en el marco de una investigación acerca de las prácticas comunicacionales desarrolladas por el equipo de salud que implementa un dispositivo en el marco del testeo voluntario del VIH en la red de salud pública de la Ciudad de Buenos Aires (Argentina). Los Centros de Prevención, Asesoramiento y Diagnóstico (CePAD), surgen como consultorías de VIH/sida y promueven una relación entre equipo de salud y usuarios basada en principios de autonomía y derechos ciudadanos. El estudio realizado es de carácter cualitativo, exploratorio y descriptivo; las unidades de muestreo fueron 5 (cinco) CePAD de la red asistencial pública de la Ciudad de Buenos Aires. Las unidades de análisis fueron integrantes del equipo de salud que participan en la instancia de Asesoramiento (entrevistas de pretest y postest) de los CePAD. La realización de este trabajo presenta resultados del análisis de datos primarios obtenidos a partir de la realización de 22 (veintidós) entrevistas semiestructuradas a integrantes del
El comportamiento sexual y reproductivo de las personas recibe históricamente influencias sociales, políticas y religiosas. Recientemente, se propuso la circuncisión masculina como estrategia de salud pública para disminuir la transmisión del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH). El objetivo del presente artículo es revisar en un contexto histórico las implicaciones de la circuncisión masculina y el impacto en la prevención de la transmisión del VIH. Se realizó una revisión no sistemática de la bibliografía disponible sobre el tema hasta la fecha, en las bases de datos Pubmed y Bireme. Los primeros registros de la circuncisión masculina datan de hace más de 4000 años. El uso se dio mayoritariamente en el contexto religioso. Tradicionalmente, se cuestiona la práctica de la circuncisión femenina, más no así la masculina. La indicación terapéutica de circuncisión incluye fimosis, parafimosis e infecciones repetitivas del glande; no obstante, la recomendación profiláctica es cuestionada. Es frecuente la aparición de complicaciones médicas y psicológicas asociadas a la circuncisión masculina. La evidencia disponible muestra disminución consistente de la transmisión del Virus de Papiloma Humano (VPH) y la Clamidia tracomatis, pero no del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH). Existen cuestionamientos éticos y médicos asociados a la práctica sistemática de la circuncisión masculina, sobre todo en menores de edad. La circuncisión masculina es una práctica milenaria, efectiva para disminuir la transmisión del VPH y la Clamidia tracomatis, pero no del VIH. Se requiere de un mayor debate acerca de las implicaciones médicas y éticas de la práctica de la circuncisión masculina. (DUAZARY 2013 No. 1, 33 - 40)
Los logros conseguidos en 30 años de activismo del Movimiento Antisida se hunden bajo la escusa de la crisis en un maquiavélico plan con estructura perfecta. Lo primero fue la eliminación de la Secretaría del Plan Nacional sobre el Sida que dejó de ser un órgano independiente perdiendo peso dentro del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y redujo su presupuesto para e cuatro a un millón de euros y su personal de más de 30 a sólo 4 personas. El reparto de esos fondos, no resuelto hasta noviembre de 2012, ha sido también llamativo dejando sin dinero público proyectos pioneros, de larga trayectoria y resultados demostrados, coincidiendo además la retirada de fondos en entidades como la REDVIH, que actúa como motor de comunicación entre las distintas organizaciones a nivel nacional o el apoyo a la revista “Lo + positivo”, de la GTT (Grupo de Trabajo sobre Tratamientos del VIH) que publicó su último número esta primavera, tras 16 años de historia siendo un espacio para la reflexión y la afectadas y las entidades que trabajan en VIH. Una coincidencia interesante puesto que ambos proyectos proporcionaban un altavoz nacional para las personas seropositivas y las entidades que les apoyan. A la vez se retiraron las partidas finalistas a las C para la prevención del VIH/SIDA, quedando al margen el Ministerio de Sanidad. Ahora depende del gobierno de cada comunidad autónoma la respuesta a la prevención y el apoyo a las entidades que lo llevan a cabo. Los recortes han sido evidentes en todos los territorios del Estado.
A nivel mundial el tema de las ITS/ VIH-sida y su prevención es de gran polémica; va más allá del uso del preservativo, siendo esta la barrera más eficaz para evitar el contagio. Los adolescentes ante esta problemática constituyen un grupo alto de riesgo, por no tener una percepción del mismo, ser vulnerables y desconocer el tema. La investigación: “La prevención de las ITS/VIH-sida, en los adolescentes”; es el resultado de la práctica laboral de la autora Beatriz Rosales Fuentes, en la ESBU “Julio Antonio Mella”, del municipio de Caibarién. Se trabaja con un grupo de 8vo grado, dirigido a proponer talleres de orientación que contribuyan a la prevención. Son utilizados métodos y técnicas para el diagnóstico de las potencialidades y necesidades de los adolescentes. En los talleres de orientación se utilizan materiales impresos y en digital, recortes de periódicos, libros, canciones, videos y juegos didácticos; en función del cumplimiento de objetivo, encaminadas al autoconocimiento y el crecimiento personal y social mediante el diagnóstico y la intervención psicopedagógica en interés de la formación integral del individuo. Como resultados de la aplicación de los talleres se obtiene que los adolescentes identifican qué es la prevención y asimilan paulatinamente la necesidad de la prevención de las ITS/VIH-sida, y las conductas a seguir para tener una vida sexual responsable. Así como la comprensión de la importancia de este tema para su desarrollo en la vida. Los especialistas consultados manifiestan la pertinencia de la propuesta.
Entre las fortalezas de esta investigación podemos decir que es el primer y más grande estudio en Espa ˜ na que ha evaluado las necesidades relacionadas con la aceptabilidad de los pro- gramas de prevención del VIH/ITS dirigidos a los hombres que tienen sexo con hombres a través de Internet. Con la detección de estas necesidades pueden incorporarse sus intereses en la ela- boración de intervenciones específicas para este colectivo, como lo viene haciendo Stop Sida en Espa ˜ na con su programa Navega Seguro (http://www.navegaseguro.es). Asimismo, este estudio ha abierto una línea de investigación respecto a los perfiles de usuarios de Internet que podrían acoger en mayor o menor medida las intervenciones sobre la prevención del VIH/ITS en el colectivo de los hombres que tienen sexo con hombres. Sería interesante que otros estudios similares pudieran validar estos perfiles.
Con respecto al segundo objetivo, no será hasta la segunda mitad de los años noventa cuando aparecen en el mercado los primeros antirretrovirales realmente efectivos (inhibidores de la proteasa) que tuvo como consecuencia directa el descenso en el número de de- funciones por el VIH en 2/3 partes durante los 2 años siguientes a su implementación. Fue exactamente en 1996 cuando comienzan a utilizarse la terapia antirre- troviral de gran actividad (HAART) y a partir de ese mo- mento la carrera por obtener fármacos mejor tolera- dos, con menor cantidad de efectos secundarios y de mayor calidad creció a un ritmo sin precedentes. El recorrido hasta el momento presente abarca gran can- tidad de estudios encaminados a la prevención y pro- moción de la salud sexual, marcando la XIX Conferen- cia Internacional del Sida (AIDS) en 2012 un punto de inflexión al establecer las bases de lo que a partir de entonces se denominará “estrategias de prevención combinada”. Bajo este epígrafe se engloban hasta 6 estrategias encaminadas a cumplir los objetivos que ONUSIDA publicará como objetivos del milenio (90- 90-90, cero discriminación). En este sentido no pode- mos pasar por alto hitos fundamentales como la De- claración de Suiza en 2008, la publicación de diferentes estudios mostrando los excelentes resultados de la PrEP con el objetivo de disminuir las nuevas infeccio- nes por VIH y la publicación en 2016 del estudio Part- ner, que desempeñará un papel clave al cimentar las bases del mensaje “Indetectable=Intransmisible” y por tanto en la lucha contra el estigma y la discriminación.
85.15% de casos fueron varones, con 14.85% de mujeres, edades que en 48.51% de casos estuvieron entre los 20 y 29 años; la edad promedio de los varones fue de 30.59 ± 11.42 años y para las mujeres fue de 32.53 ± 10.62 años. El 86.14% de casos fueron solteros, 22.77% con educación secundaria y 18.81% con educación superior. El 23.76% se manifestó como heterosexual, 72.28% como homosexual y un caso (0.99%) dijo ser bisexual. La vía de transmisión de la infección fue sexual en 97.03%, y vertical en 2.97% de casos. El estadío de la infección en fase SIDA 47.52% y sólo como infección VIH en 52.48%. El conteo de linfocitos T CD4+ con el tratamiento mostró una elevación sostenida desde 229.4 cel/mm 3 en el inicio y alcanzó a 411.5 cel/mm 3 en el quinto control (p < 0.05). Hubo una drástica disminución de la carga viral de 402.59 x 10 3 copias/mL en el basal, disminuye a 38.53 x 10 3 copias/mL en el primer control, aunque con un posterior incremento hacia el cuarto control, llegando a 134.76 copias/mL, para volver a disminuir posteriormente (p< 0.05).
Puesto que los datos obtenidos en relación a la transmisión actual, muestran que se encuentra en el rango de edad 25 - 49 años, optamos por realizar el estudio en la empresa para acceder a la población diana, debido a que por el rango de edad, en este ámbito es donde vamos a encontrar a la población relevante. Vamos a tratar de influir positivamente en los mecanismos de transmisión y las medidas de prevención existentes para lograr acercarnos lo más posible al riesgo de infección presente tanto a nivel propio como colectivo, tratando a la vez que se identifiquen con las conductas y el dicho riesgo. (5)
clínicas de atención prenatal habían recibido formación para dar consejo antes y después del test; pero debido a la alta rotación de profesionales, la experiencia entre unos y otros era muy variable, lo que puede haber influido negativamente en la captación de las mujeres. Si analizamos nuestros resultados desglosados por años, existen diferencias importantes entre el primer año, el 2006, cuando solo un 21% de las mujeres fueron registradas en el programa, el 2007 con 96% registradas y el 2008 con un 88% de mujeres registradas. A principios del año 2007 fue cuando se consiguió la plena integración de los servicios de PTMI en las consultas de atención prenatal. Hasta ese momento, las embarazadas VIH positivas eran atendidas en consultas específicas y en días concretos de la semana, lo que podía ser muy estigmatizante para ellas, además de dificultar la accesibilidad. Ya existía en aquel momento literatura que apoyaba la integración de los servicios de atención a mujeres VIH positivas en las clínicas prenatales 182 , pero la organización de los centros sanitarios no lo favorecía y debieron
En la atención a las PVVIH no hay que olvidar la ex- ploración física como algo consustancial a la activi- dad médica y como medida de diagnóstico precoz en 2 de los tumores más relacionados con el VIH: el SK y los linfomas, tanto Hodgkin como no Hodgkin. En ambos casos no existe ninguna medida preventiva específica y sólo la detección precoz de una pequeña adenopatía o una lesión cutánea pueden contribuir al diagnóstico temprano 12 .
Pérez ( 10 ) plantea que el sida sigue siendo hoy en día uno de los más graves problemas de salud pública en el mundo, El sida es el conjunto de enfermedades de muy diverso tipo que resultan de la infección por el virus de la inmunodeficiencia humana. Es una penosa enfermedad que lleva millones de muertes debido a las condiciones en que se dieron y su falta de prevención, y hoy en día sigue siendo uno de los más graves problemas de salud pública en el mundo. La persona con sida puede pensar que su vida ya no tiene sentido y significar una lacra para su familia o pareja; y por ello incrementar sus sentimientos relacionados con el duelo. En esa situación, la persona afectada puede sentir ansiedad, depresión, agresión, y rehuir a todo contacto humano, así como no querer escuchar razones por miedo a la muerte. Esto puede repercutir en su modo de vida y transformarla. El temor de contagiar a su pareja o a su entorno más cercano es más visible; le invaden sentimientos de abandono y rechazo; y en cierta forma puede dañar su autoestima y evitar establecer nuevas amistades o relaciones, aislándolo por completo.
mismas de la infección. Mejorar la condición de la mujer y sus habilidades de negociación son, por lo tanto, áreas clave para cualquier estrategia de prevención”. (Sinding, 2004) Nuestra investigación además pone en consideración un tema muy preocupante que se refiere a que la mayor parte de mujeres embarazadas no tienen una buena consejería por parte del personal de salud, lo que se evidencia en el hecho de que el 21% no conocen que el VIH se puede transmitir de madre a hijo. Además, parece haber desigualdades en la información brindada en el embarazo sobre estas dos infecciones, pues mientras que el 74% refirió haber recibido información sobre la infección por VIH durante el embarazo, solo el 25% recordó haber recibido información sobre sífilis. En el estudio nacional de embarazadas se encontraron resultados similares, en menos de la mitad de las mujeres testeadas se realizó la prueba en el primer trimestre (42% en el caso de VIH y 39% en el caso de sífilis). (MSP, 2012). Es importante que la consejería y oferta de prueba oportuna sea igual para VIH y para sífilis, ya que en los dos casos es fundamental la oportunidad y precocidad del abordaje.
mo parte de una estrategia combinada de prevención, donde se ha estimado que el número necesario a tratar para preve- nir una nueva infección puede ser tan baja como 13 cuando se administra profilaxis antes de la exposición a un grupo de alto riesgo de contraer vih . 47 Existe evidencia experimental
Aunque las cifras de personas infectadas con el Virus de Inmunodefi ciencia Humana (VIH) y Síndrome de Inmunodefi ciencia Adquirida (SIDA) se han estabilizado en el último año, la población adolescente sigue siendo foco de atención debido a la vulnerabilidad y frecuencia de conductas de riesgo en salud sexual y reproductiva que presentan. Esta situación también se evidencia en Colombia, por lo cual se da la necesidad de conocer la situación actual de los adolescentes en esta área, con el fi n de generar estrategias de promoción y prevención, que disminuyan los riesgos frente a la infección por VIH/Sida, enfocadas a las características propias de la población. El propósito del siguiente estudio fue determinar los conocimientos, actitudes, susceptibilidad y autoefi cacia en adolescentes y jóvenes ente los 10 y 23 años de instituciones educativas públicas de diferentes ciudades de Colombia. Se evaluó una muestra de 978 adolescentes de 6 a 11 grados de educación básica secundaria. El estudio es de carácter no experimental descriptivo transversal. Se les aplicó la Escala VIH/Sida-65 y la Escala de Autoefi cacia (SEA- 27). De los adolescentes encuestados, más del 50% había recibido información sobre transmisión y prevención del VIH/Sida, sin embargo los conocimientos adquiridos no se refl ejaban en las prácticas y continuaban presentando ideas erróneas sobre el tema; también se encontró que a medida en que aumenta la edad, disminuyen los conocimientos, actitudes, susceptibilidad y autoefi cacia frente al VIH/Sida. Es necesario que en los adolescentes se desarrollen intervenciones orientadas hacia el cambio de comportamiento y que sean específi cas de acuerdo con la edad, género, nivel de escolaridad y nivel socioeconómico. Palabras clave: conocimientos, actitudes, susceptibilidad, autoefi cacia, adolescentes, VIH/Sida.
que experimentan las poblaciones más vulnerables en relación a la transmisión del virus de VIH-sida y otras infecciones de transmisión sexual, es decir, las per- sonas gays, bisexuales, transexuales, travestis y otros “hombres que tienen sexo con hombres” (HSH), quienes registran las mayores tasas de prevalencia desde el inicio de la epidemia. Si bien se realizaron investigaciones sobre el estigma y la discriminación hacia varones seropositivos, tales como las de Miguel García Murcia et al. (2009) y de Méndez Tapia (2011); o acerca de los crímenes de odio y la homofobia, como las de Luis Ortiz (2004), Candelas (1999), Pichardo (1999) o de Efraín Rodríguez (2010); la mayoría de los trabajos constituyen reflexiones teóricas sobre los términos, los efectos y las distintas formas de la violencia ejer- cida hacia las minorías sexuales, o se centran en los aspectos jurídicos de la dis- criminación hacia las transexuales (Flores Ramírez, 2008), los trabajadores del sexo y personas con VIH (Peláez Gálvez, 2008). La metodología adoptada suele ser cualitativa y los análisis se centran en un objeto o sector preciso de la pobla- ción. Además de algunos resultados cuantitativos recabados en estudios sobre prevención de VIH o encuestas de seroprevalencia (entre otros, la investigación de Gayet, Magis et al., 2007), en las Encuestas Nacionales sobre Discriminación (ENADIS) de 2005 y 2010, del CONAPRED, así como los resultados de la en- cuesta realizada en la Marcha de la Diversidad Sexual de la ciudad de México en 2008 (AA VV, 2012), las únicas investigaciones cuantitativas sobre discrimi- nación hacia bisexuales, gays y lesbianas fueron llevadas a cabo por Luis Ortiz Hernández, junto con Granados Cosme (2003), y con García Torres (2005), en la ciudad de México, y no hemos encontrado resultados de análisis cuantitati- vos con muestras representativas acerca de las personas travestis y transexuales. La muestra de 200 “homosexuales” de la ENADIS de 2005, como lo advierte CONAPRED (2005b) en su “Nota metodológica”, está totalmente ajena a toda técnica de muestreo y por ello se definió como “estudio de caso”. En cuanto a la ENADIS de 2010, la ausencia de explicación sobre los dispositivos de selección de los “homosexuales” encuestados y la falta de consideración y cálculo de los efectos de estructura son problemáticos.