El inmunofenotipaje celular (IFC) mediante un panel de anticuerpos monoclonales (AcMo) es de amplio uso y utilidad en nuestro medio. Por esta razón se realizó este estudio, con el objetivo de caracterizar el inmunofenotipo de los pacientes con LMA estudiados en el Departamento de Inmunología del Instituto de Hematología e Inmunología (IHI).
La incidencia de la mutación FLT3-ITD se correlaciona con la edad de los pacientes con leucemiamieloideaguda; en pacientes pediátricos menores de 10 años ocurre en 5 a 16% de los casos, con aumento significativo en pacientes mayores de 10 años. En pacientes adultos se reporta una incidencia de 25 a 35%, sin incremento con la edad. El efecto más signi- ficativo de esta mutación es su asociación con altas cuentas blásticas, incremento del riesgo de recaída y disminución de la supervivencia. Diversos grupos reportaron que FLT3-ITD es uno de los principales marcadores de riesgo debido a que predice un resultado adverso. Las mutaciones FLT3-ITD se han correlacionado con ciertos subgrupos citogenéticos; son especial- mente frecuentes en pacientes con un cariotipo normal. Se ha reportado que 30 a 50% de los pacientes con leucemiaaguda promielocítica con t(15;17) (q22;q12) [PML-RARA] también tienen alguna mutación en FLT3. Asimismo, se ha reportado una asociación frecuente con la t(6;9)(p23;q34) [DEK-NUP214] (~90%). Otras mutaciones asociadas con FLT3-ITD ocurren en NPM1 y DNMT3a. Estudios retrospectivos sugieren que la existencia de mutaciones en NPM1 pueden disminuir el pronóstico negativo de FLT3-ITD, sólo si la relación alélica de este último es baja. 9,15,20,23
Material y métodos. Se realizó un estudio citogenético a 35 pacientes con diagnóstico de leucemiamieloideaguda (LMA) de novo atendidos en el Servicio de Hematología del Hospital Juárez de México entre 2007 y 2010. Resultados. El 29% tenía cariotipo normal y 71%, clonas anormales; de éstos, 80% era de tipo estructural y 20%, numérico. El 48% de los casos presentó alteraciones adicionales, tanto numéricas como estructurales; la correlación del estudio citogenético con los datos hematológicos reveló que la cuenta de leucocitos se incrementó significativamente en aquellos pacientes con cariotipo anormal, pero no en la hb y Pt. No se pudo establecer el pronóstico según los hallazgos citogenéticos, debido a que los pacientes llegan en etapas terminales de la enfermedad y además abandonan el tratamiento en la fase de inducción a la remisión.
En el año 2005 se reportó por primera vez que en la leucemiamieloideaguda (LMA) se detectan frecuentemente mutaciones en el gen de la nucleofosmina (NPM1). Actualmente, estas mutaciones representan la alteración genética más frecuente en dicha entidad y han mostrado tener significado pronóstico. La mutación más común de las descritas es la NPM1-A, que aparece entre el 75 y el 80 % de los enfermos. Mediante un ensayo de RT-PCR alelo específico, se estudió la NPM1-A en 32 pacientes cubanos con LMA, cuyas muestras de ARN estaban conservadas a -20°C. Once pacientes (34,4 %) fueron positivos a la mutación. Entre los pacientes positivos a NPM1-A, uno portaba dos alteraciones moleculares más, el gen de fusión AML1-ETO y la duplicación interna en tándem del gen FLT3 (FLT3-ITD, siglas en inglés). En dos pacientes concomitó la mutación NPM1-A con la FLT3-ITD y en otro, se encontró la mutación junto con el gen de fusión AML1-ETO. Un estudio más amplio permitirá correlacionar la NPM1-A con la evolución de la enfermedad, así como conocer su interacción con otros marcadores moleculares.
Introducción. La leucemiamieloideaguda (LMA) es un grupo de enfermedades con diferentes características biológicas entre sí; a pesar de los avances en su conocimiento, éstos aún no impactan en la supervivencia a largo plazo. Objetivo. Describir las caracte- rísticas de la población de adultos con LMA en un hospital de la ciudad de México, la respuesta a tratamiento, las complicaciones y evaluar posibles factores relacionados con supervivencia. Méto- dos. Estudio de cohorte. Pacientes con diagnóstico de LMA (no promielocítica) en el periodo de enero de 2003 a julio de 2008. Es- quemas de tratamiento utilizados: protocolo 7+3, dosis altas de ci- tarabina y trasplante de células hematopoyéticas autólogo como consolidación. Resultados. Se registraron 53 pacientes. Mediana de edad: 44 años (15-79). Al diagnóstico: síndrome de lisis tumoral en 4/53 (7.5%), 3/51 (5.9%) con alteración de las pruebas de fun- ción hepáticas e hiperleucocitosis en 8/53 (15.1%). Se realizó cito- genética (CG) en 46 casos y ésta fue exitosa en 28/46 (60.8%), de las cuales fueron de riesgo citogenético adverso 12/28 (42.8%); de riesgo citogenético intermedio 16/28 (57.1%) y ninguna de ries- go citogenético favorable. Hubo dos pérdidas de seguimiento, siete pacientes no recibieron quimioterapia con fines curativos y uno murió al diagnóstico. De los 43 pacientes a los que se les trató con 7+3, 13.9% falleció en aplasia, se logró remisión completa en 27/43 (62.7%) y 10/43 (23.2%) fueron refractarios al tratamiento. Se re- quirió segunda inducción en 39.5% (17/43). La supervivencia libre de enfermedad (SLE) fue de 491 días (366-615), con una me- diana de seguimiento de 993 días (105-1744). La supervivencia global (SG) fue de 531 días (312-749). Al comparar las tasas de muerte en aplasia, se encontró una tendencia (p = 0.09) a la dis- minución de ésta, entre la cohorte actual (13.9%) y la cohorte his- tórica (37%). Conclusiones. En pacientes con LMA las tasas de supervivencia a largo plazo continúan siendo pobres, a pesar de los avances en los métodos de diagnóstico, clasificación y trata- miento. En nuestra institución, es necesario mejorar los esquemas de inducción y la estrategia de análisis citogenético, con el fin de poder elegir correctamente al grupo de pacientes que se beneficia con trasplante de células troncales hematopoyéticas (TCH).
Revista Científica Mundo de la Investigación y el Conocimiento. 3 (2). pp. 998-1020 1011 aportados por Sociedad de lucha contra el cáncer del Ecuador (SOLCA), en este caso se presentan uns datos de la provincia de Cuenca. En este caso la imagen N° 2 representa el total de casos clasificados por tipo de cancer infantil entre los años 2012 – 2016, en donde el 42,6% (129 pacientes entre masculinos y femeninos) del total de casos (303) de esos 5 años son de leucemias. De este porcentaje el 18% (23 pacientes) representa la leucemiamieloideaguda. Continuando con el estudio la supervivencia total en Ecuador ha mejorado, situandose en un 62% esta incidencia pudiera ser mayor si no hubiera abandono del tratamiento y retraso en el diagnostico del mismo.
En este estudio se encontró que la frecuencia de la mutación FLT3 ITD (9.4%) en los pacientes con leu- cemia mieloideaguda fue más baja que la reportada en la bibliografía (20-35%) y no se halló en ningún caso la mutación FLT3 TK. Además, se confirmó que la mutación FLT3 ITD se asocia con recuentos altos de leucocitos en pacientes con leucemiamieloideaguda y que no hay diferencia significativa en el número de plaquetas y porcentaje de blastos entre los individuos con la mutación y negativos para FLT3 ITD. Debido a la baja frecuencia de la mutación FLT3 ITD en este estudio, no se pudo determinar la relación de ésta con la clasificación FAB. Además, se plantea la necesidad de estudiar otros genes involucrados en la patología molecular de la leucemiamieloideaguda, como CEBPA, EVI1, BAALC, KIT, MLL y valorar la importancia de estos genes en nuestros pacientes. Por último, es prio- ritaria la realización de estudios multicéntricos con el fin de confirmar la frecuencia de mutaciones en FLT3 y evaluar este gen en el algoritmo diagnóstico de los pacientes con leucemiamieloideaguda en nuestro país, con el propósito de brindarles un tratamiento adecuado, oportuno e incrementar la supervivencia.
La dificultad para obtener mayor sobrevida en los pacientes con leucemiamieloideaguda (LMA), a pesar de la mejora en el manejo de las complicacio- nes y el mayor conocimiento de las alteraciones mo- leculares, nos obliga a poner nuestra atención en sus características y tratamiento. El objetivo fue evaluar aspectos citogenéticos, moleculares y supervivencia global de pacientes con LMA tratados en un hospital de tercer nivel de la provincia de Mendoza. Se rea- lizó un estudio observacional, comparativo y retros-
La interpretación morfológica es muy susceptible a la apreciación del investigador. La presencia de bastones de Auer junto con otros elementos morfológicos y clínicos son típicos de la leucemia promielocítica aguda (LPA) variante M3 de la FAB, lo que pudiera justificar la interpretación inicial del medulograma en un grupo de estos pacientes al debut de la enfermedad; sin embargo, el resultado negativo de la traslocación t(15;17) a punto de partida del gen de fusión PML-RARα, que se describe en el 95 % de estos casos, descarta en buena medida esta variante de LMA.
Clínicamente, la crisis blástica puede presentarse con la aparición de sudoraciones nocturnas, pérdida de peso, fiebre, dolores óseo-articulares y esplenomegalia. Además, se observa un incremento del riesgo de padecer infecciones. En el hemograma de estos pacientes se encuentran conteos de leucocitos y blastos elevados, disminución de los valores de hemoglobina y del número de plaquetas. 11
Luego de estas discrepancias en los diagnósticos fue necesaria una revaluación morfológica (Fig. 1B). Hay que destacar que 42 pacientes que al debut impresionaron tener desde el punto de vista morfológico las características de una leucemia promielocítica, en esta segunda clasificación y gracias al diagnóstico molecular fueron clasificados como LMA no M3. Por otra parte, del total de pacientes identificados como LMA M2, el 72,4 % fueron positivos al RUNX1-RUNX1T1. En la tabla 4 se muestra la correlación entre los diagnósticos morfológicos al inicio de la LMA y luego del estudio molecular. De todas las discrepancias, la mayor diferencia, con un
Pacientes con leucemiamieloideaguda durante la inducción a la remisión y aquellos sometidos a células madre hematopoyéticas alogénicas TPL con acondicionamiento previo quimioterapia están en riesgo de hongos invasivos infecciones (a saber, aspergilosis) debido a la neutropenia profunda y prolongada.Si se sospecha de Aspergilosis invasiva , se debe obtener imágenes de TAC buscando lesiones típicas , como lo son nódulos con halos o cambio de vidrio esmerilado además de obtener muestra de galactomanano serico. Si se encuentra algún infiltrado, broncoalveolar el lavado debe realizarse si es posible.
siete días después del inicio de la quimioterapia y con una duración de varios días, caracterizada por el eritema en el paladar blando, mucosa yu- gal, vientre de la lengua y piso bucal, seguido de edema, ulceración con posible sangramiento o exudado. Se debe indicar a los pacientes la supresión de bebidas alcohólicas y tabaco pues- to que causan irritación y sequedad de las mu- cosas y en cambio estimular el consumo de una dieta saludable, blanda y no irritante, rica en frutas frescas, vegetales, huevos, cereales y abundantes líquidos. La prescripción de coluto- rios de manzanilla tres veces diarias por catorce días, aporta efectos antinflamatorio, antibacte- riano y antimicótico, otra opción eficaz la cons- tituye el empleo de buchadas de agua bicarbo- natada o clorhexidina acuosa al 0,12 %. Todo enjuagatorio que contenga alcohol o fenol está contraindicado, pues provoca descamación e irritación de la mucosa. Entre las alternativas de tratamiento para la mucositis está la aplicación del láser de baja intensidad. 22
Métodos: se trataron 46 pacientes con leucemiamieloideaguda, se excluyeron los casos con leucemia promielocítica, diagnosticados a partir del año 2000 en las provincias occidentales, Sancti Spíritus y Villa Clara. Se aplicaron dos esquemas de tratamiento tipo BFM en dos períodos: en el primero (2000 -2003) se incluyeron 27 enfermos y en el segundo (2004-2008), 19. La diferencia fundamental entre los dos períodos consistió en la consolidación que en la segunda etapa fue de ciclos más intensos y cortos.
El trasplante de células progenitoras hematopoyéticas se ha realizado como tratamiento de la leucemiamieloideaguda, en sus diferentes vertientes y en pacientes con recaídas o en riesgo alto. Las pruebas moleculares y citogenéticas han permitido realizar una correcta L]HS\HJP}U`]LYX\tWHJPLU[LZLILULÄJPHYxHTmZJVUSHHKPJP}UKL un trasplante como parte de su estrategia terapéutica. Individualizar el tratamiento para cada paciente de acuerdo con su riesgo, edad, condición clínica y la disponibilidad de un donante permite escoger el mejor tratamiento de inducción, consolidación y la adición o no de un trasplante. En nuestro medio incorporar un trasplante ofrece la combinación de citotoxicidad y efecto de injerto versus leucemia, lo que se traduce en una opción curativa para los pacientes. Hoy día la incorporación del trasplante haploidéntico permite que los paciente que no cuentan con donante compatible sean susceptibles de ser rescatados con resultados favorables. En ausencia de fármacos nove- dosos, efectivos y accesibles para curar la leucemiamieloideaguda, el trasplante tiene un papel preponderante para dar oportunidad a los pacientes que estaban destinados a fracasar.
cantidades semejantes de casos de leucemia lin- foblástica aguda y leucemiamieloideaguda (51 y 49%, respectivamente), equitativas entre sexos, respecto a la leucemiamieloideaguda la edad de aparición fue notoriamente menor a lo reporta- do en la bibliografía internacional con 43 años, las variedades más frecuentes fueron leucemiamieloideaguda M3 con 35.5% y M2 con 20%. En otro estudio publicado en 2012 con datos del Hospital General de México, se analizaron 282 pacientes, 111 durante 1990-1992 y 171 durante 2008-2009, la media de edad fue de 31 años. De ellos se descartaron 32 del primer periodo por no haberse identificado el subtipo de leucemia. Al considerar los 250 restantes, 38% fueron ca- sos de leucemiamieloideaguda (95 pacientes), con mayor frecuencia en los subtipos leucemiamieloideaguda M4 con 13.2% y los subtipos M3 y M2, ambos con 10.4%. 36
El trasplante de células hematopoyéticos en sus diversas modalidades se ha utilizado como tratamiento de la leucemiamieloideaguda, sobre todo en pacientes en recaída leucémica. Hoy en día diferentes marcadores citogenéticos y moleculares han permitido orientar el tratamiento de cada paciente en forma individualizada. De esta manera es posible evaluar el riesgo y con ello el pronóstico de dicho paciente. La supervivencia a largo plazo sigue siendo un reto para el clínico con números no muy alentadores para países como el nuestro. La adición de medicamentos, como el ácido holo-transretinoico a esquemas de quimioterapia ha demostrado una excelente respuesta y tasas de curación en la leucemia promielocítica. La combinación de citotoxicidad y efecto de injerto versus leucemia han permitido al trasplante de células hematopoyéticas consolidarse como un recurso terapéutico importante, siempre orientado por variables como la edad y condición clínica del paciente, grupo de riesgo y disponibilidad de donador compatible.
tempranos en el proceso hacia carcinogenicidad. Una correcta interpretación del monitoreo biológico de los efectos debería basarse más en el control longitudinal de valores del mismo individuo, teniendo en cuenta los posibles factores de interferencia, en lugar de comparación transversal de valores de diferentes sujetos con varios niveles de exposición. El nivel de exposición también puede ayudar en la interpretación de los biomarcadores, de hecho, en pacientes que desarrollan LeucemiaMieloideAguda secundaria a exposición a BZ o agentes alquilantes, la citopenia persistente y otros trastornos sanguíneos con frecuencia preceden el inicio de la leucemia, así como lo trabajadores que están expuestos por largos periodos al envenenamiento por benceno tiene un mayor riesgo de desarrollar leucemia.
Nuestra experiencia con la monoterapia con vinblastina y en combinación fue alentadora, con respuestas en la mayoría de los pacientes con enfermedad multitratada en grados variables. Sobresalen dos casos: el de un paciente con recaída temprana que recibió dos esquemas de rescate HOVHJXQGRFRQJHPWX]XPDER]RJDPLFLQD\XQSDFLHQWH con leucemiamieloideaguda secundaria resistente, con respuestas parciales importantes desde la primera dosis de vinblastina y con aplicaciones subsecuentes, que mejora- ron notablemente aunque en forma temporal, la calidad de su vida. No se observaron efectos adversos importantes con la aplicación. Es importante que su costo sea accesible GyODUHV\TXHVXDFFLyQHVUiSLGD(VWRQRVOOHYDD considerar que la actividad observada podría deberse, no necesariamente, a su acción principal en la mitosis, sino
La estratificación citogenética en tres grupos de riesgo es una de las herramientas que más se utiliza en la toma de decisiones para elegir el tratamiento de consolidación después de que se logra la remisión de la leucemiamieloideaguda. De acuerdo con la clasificación citogenética, los pacientes del grupo de riesgo bajo se distinguen por inversión del cromosoma 16 o translocación 8;21; en este grupo las dosis altas de citarabina posremisión son el tratamiento de elección, con supervivencia libre de enfermedad a tres años en 30 a 60% de los pacientes. En el grupo de riesgo intermedio, que se distingue por tener cariotipo normal y comprende 50% de todos los pacientes con leucemiamieloideaguda, tam- bién se utiliza frecuentemente la consolidación con dosis altas de citarabina; sin embargo, en este grupo los resultados son menos favorables,