• No se han encontrado resultados

3. ESTADO DEL ARTE

3.4. Aportaciones de autores

Desarrollado el Método del Valor Ganado junto a su evolución histórica, se completa el presente estado del arte con las aportaciones de autores al método. Tal y como se indicó en el apartado 2, las principales fuentes de información se corresponden con Trabajos Fin de Máster, tesis doctorales y artículos de investigación publicados en los últimos años. Desde la aprobación del Máster Interuniversitario en Dirección de Proyectos de las Universidades de Oviedo, La Rioja y Navarra en el año 2012, la aplicación del Método del Valor Ganado en distintos tipos de proyectos y su posterior valoración, ha sido uno de los temas más populares para la realización del Trabajo Fin de Máster.

De hecho, en el mismo año se estudió la posibilidad de aplicar el método a proyectos industriales, tomando un proyecto real como base para la comparación con el análisis por separado de costes y plazos, apreciando que la estimación final del coste del proyecto se obtuvo con precisión cuando el proyecto se encontraba al 50% de avance y no al 20% como se suele presuponer, quizás debido a que las tareas del cronograma no coincidían exactamente con los capítulos del presupuesto (Granda, 2012).

Un curso después, se presentó una metodología para la aplicación del E.V.M. en la industria alimentaria, diseñando una plantilla para la implementación del método y destacando para el éxito del mismo la participación de todos los stakeholders en la planificación (Valgañón, 2013).

En el año 2014, se presentaron dos trabajos relacionados con el Método del Valor Ganado. En el primero de ellos se aplicó el método a proyectos de infraestructuras hidráulicas, detectando un valor fiable de estimación a partir del 25% de avance de la obra, siendo necesario para ello un control mínimo cada 2 meses. Además, se observó la existencia de inconvenientes, como el desconocimiento de la procedencia de los sobrecostes o retrasos, es decir, de los aspectos cualitativos (Cuervo, 2014).

En el segundo trabajo, se realizó una valoración de la aplicación del Método de Valor Ganado en proyectos de urbanización, demostrando la estabilidad en la estimación del coste final del índice compuesto con coeficientes 0,2 y 0,8.

MEMORIA + ANEXOS 24/195

Sin embargo, no se considera válido para proyectos de larga duración. También se demostró el carácter de suelo y techo de los índices C.P.I. y S.C.I. para el cálculo del E.A.C. (Díaz, 2014).

Por último, durante el pasado año se presentaron nuevamente dos trabajos. El primero de ellos basado en el análisis de la construcción de una vivienda unifamiliar de autopromoción mediante el Método del Valor Ganado, recomendando realizar el seguimiento cada dos semanas en proyectos de poca envergadura y siempre capítulo a capítulo. Además, el director de proyecto no tiene una posición de fuerza suficiente para contener los cambios del promotor u obligar al contratista de la obra a realizar un trabajo determinado, por lo que no tiene sentido aplicar el método salvo que se considere un punto de apoyo (Ferrao, 2016). Por su parte, el segundo trabajo desarrolla una metodología del E.V.M. de aplicación al ámbito aeroportuario, dotando a los gestores de proyectos de las herramientas necesarias para que las incidencias de costes no se transformen en un problema durante la realización del mismo (Aparisi, 2016).

El Método del Valor Ganado también ha sido objeto de estudio en los distintos programas de doctorado del país, por ejemplo, con la intención de dar respuesta a la problemática detectada en España sobre la gestión en los proyectos de edificación de viviendas, se desarrolló una metodología específica para la aplicación del método, implantándose en dos proyectos reales de edificación con resultados satisfactorios (Fuentes, 2016). Al mismo tiempo, se desarrolló una metodología para la aplicación del método en proyectos de instalaciones ferroviarias de alta velocidad, definiendo nuevos índices de rendimiento para la toma de decisiones de gestión, implantándose con éxito nuevamente en un proyecto real (Fernández, 2015).

Además, se pueden encontrar distintos artículos de investigación acerca de la aplicación del método EVM, por ejemplo, los presentados en los congresos y conferencias de ingeniería durante los últimos años. En 2007, se abordan las limitaciones del método de cara al tratamiento del riesgo y al efecto aprendizaje, concluyendo en la necesidad de desarrollar un método unificado que integre plazo, coste, alcance, calidad y riesgo (Pajares et al, 2007).

MEMORIA + ANEXOS 25/195

Los mismos autores completarían su artículo un año después, desarrollando nuevos indicadores para incluir el riesgo en el E.V.M., demostrando que no tiene sentido aplicar acciones correctivas para reducir sobrecostes o retrasos si eso supone comprometer el éxito del proyecto (Pajares et al, 2008).

En el año 2009 se compara la teoría del método con la implementación del mismo, observando los problemas que aparecen cuando se modifica la planificación o el presupuesto inicial que se toma como referencia para el cálculo de los indicadores (Roca, 2009).

Durante el año 2010 se publicarían dos modelos diferentes desarrollados en Presto destinados al encargado de ejecutar las obras y a las pequeñas empresas constructoras. Cada modelo se adapta a los distintos datos de entrada de los que dispone, simplificando la aplicación del método de cara a adoptar una estrategia activa por los responsables (Valderrama et al, 2010).

Para finalizar, se puede demostrar el carácter internacional del método mediante artículos procedentes de otros países, como los resultados obtenidos en la aplicación real del método a un proyecto de infraestructuras en Colombia, concluyendo que el éxito del E.V.M. depende del grado de definición del proyecto y de la experiencia del gestor del mismo, siendo una herramienta de gran utilidad para las empresas (Lacouture, 2014).

MEMORIA + ANEXOS 26/195

Documento similar