CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

6.1. Conclusiones.

• En el Colegio “Eloy Alfaro de Santo Domingo de los Tsáchilas se presentan los siguientes nudos críticos: inexistencia de programas de capacitación y de autoevaluación

permanentes, no trabajan en comunidad para lograr aprendizajes y existencia de liderazgo administrativo antes que pedagógico, alejado de los aprendizajes de los estudiantes. La calificación buena no logra sustentarse.

• Es decir, actual desempeño profesional docente en las Instituciones de educación básica y bachillerato del Ecuador y del Colegio “Eloy Alfaro de Santo Domingo de los Tsáchilas, tiene la característica de deficiente, en función de los estándares de calidad. El supuesto tiene su asidero en que en las instituciones educativas el concepto de calidad educativa se desconoce y no se trabaja institucionalmente (desde el PEI, POA y Planes de Área y Clase) para lograrlo.

• Además, hace falta entender los estándares de calidad y trabajar con ellos para lograr aprendizajes tanto de docentes, directivos y de hecho de los estudiantes. Esto sólo es posible democratizando todos los espacios donde se hace educación. Tenemos indicadores, hay predisposición de maestros, estudiantes y directivos, hay que construir la calidad en los entornos institucionales del Colegio “Eloy Alfaro” de Santo Domingo de los Tsáchilas

• La evaluación realizada con pruebas estandarizadas no gozan de credibilidad entre las y los educadores, existe un marcado espíritu de cuerpo para calificarse con notas altas las encuestas de opinión aplicadas a pares. Algo de eso se nota en las respuestas casi exactas de los miembros del Consejo Ejecutivo. En tanto que los estudiantes, madres y padres de familia no tienen la experticia para contestar con objetividad porque no se ha trabajado en la veeduría ciudadana ni el control que deben ejercer .

• Se hace necesario un apoyo y seguimiento diario en el aula por personas que por su experiencia guíen a los neo docentes y en general a todos para superar los problemas diarios. Por ello, la observación de una hora de clase (aparte de avisada y programada minuciosamente) no es el medio idóneo para poner una calificación.

• El éxito de esta tarea investigativa está, en buena medida, en la aceptación gustosa y colaboradora de los evaluados; pero, además de considerarla justa, se percaten de que puede realmente ayudarle a mejorar el desempeño profesional y directivo aplicando la propuesta realizada a continuación. Propuesta que deberá ser tomada en ese sentido y, como toda propuesta, admitir aportes y reconstrucciones.

• La evaluación debe ser asumida como una oportunidad de auto-conocimiento, crecimiento y de resolución colectiva de nudos críticos. Sólo una universidad comprometida con la educación ayuda a que sus estudiantes aporten para romper

esquemas mentales que la anquilosan y la atan: dio elementos teóricos, guía la investigación e inspira las propuestas.

• La calificación de padres y estudiantes a la hora de la verdad es baja –y aunque no debe vedársele su alto contenido de subjetividad, de la cual no está exento cualquier acto humano-, no es menos cierto que se trabaja muy poco en los consensos, valores, afectividad y que se sigue priorizando contenidos y no procesos.

6.2. Recomendaciones.

• Al considerar que la evaluación toma como primer ente al docente y al directivo que debía permitir a través de ellos mejorar la calidad educativa y más aún, capacitar a los profesores y no sancionar. Es necesario emprender casa adentro en por lo menos tres capacitaciones que ejerciten a conseguirla. Se valorará la evaluación formativa y el desarrollo profesional continuo y sobre todo completar esta evaluación con la evaluación externa

• La observación de clase debe ser procesual, sin condicionamientos, ni preparaciones previas para ver falencias y corregir verdaderamente prácticas que no deben darse en el aula. Se encargará la actividad al equipo técnico

• El sistema de autoevaluación debe estar documentado con evidencias. Además, se la debería complementar con evaluaciones del mismo Colegio, la asistencia a la asignatura, niveles de bajo rendimiento, y acciones remediales a situaciones de problemas de aprendizaje, las interacciones sociales del docente en su entorno inmediato Por último, todos los procesos de autoevaluación deben estar documentados con evidencias.

• A los Consejos Escolares les corresponde estar en función de los alumnos y padres, quienes son los directos recibidores del servicio por lo que su formación, funcionamiento y políticas deben ser consensuadas y no como vienen trabajando: desde la visión e intereses de la persona que lo direcciona.

• La calidad educativa no sólo depende del docente y del directivo, por lo que las políticas públicas deben guiarlo y complementarlo para facilitar la labor del maestro: Mejorar la infraestructura, que en este caso data de más de 35 años, sólo hay 6 aulas nuevas, disminuir el número de alumnos por curso.

• La Institución se responsabilizará en controlar para que la redistribución de la carga horaria (65%-35%) se efectivice, de manera que el maestro disponga de horas para: clase, atención de apoderados, perfeccionamiento constante, trabajo en la relación familia-alumno y escuela, preparación y revisión de material, con el control y registros adecuados. Situación que se la ha dejado al libre albedrío

• No diferenciar a los docentes entre titulares y a contrato, entre los que trabajan en el día con los de la noche, sino como funcionarios de una sola institución, indispensable para conseguir metas de aprendizaje y objetivos institucionales y nacionales.

• Evaluaciones periódicas, de al menos una clase: teórica práctica, de aplicación en su entorno, donde se observe la forma de evaluar, y se muestren las acciones remediales a los problemas de aprendizaje individuales y colectivos. Es necesario adaptaciones curriculares para un grupo de más de diez estudiantes que pertenecen a los chachis

• El docente necesita preparación constante para la enseñanza que supone un trato adecuado con los alumnos, dominio de los contenidos impartidos y metodologías innovadoras, no la rutina que vemos. Además, la creación de un ambiente propicio para el aprendizaje, apunta a la capacidad del profesor o de la profesora para establecer un clima positivo, de respeto, de normas y empatía dentro del aula, establecer metas y procedimientos claros, motivar constantemente, evaluar

adecuadamente y de aprovechar el tiempo de manera efectiva, con actividades relevantes y significativas para los educandos. No se ven y no existen por escrito esos acuerdos

• Convertir a la institución en una comunidad de aprendizajes, en la que se practique el aprendizaje cooperativo-colaborativo con todas sus ventajas motivacionales, académicas y actitudinales tanto en grupos de maestros como de estudiantes. Para esto, en la jornada correspondiente al 35% del tiempo adicional realizar Jornadas de sensibilización continua sobre el tema.

• Realizar cursos de capacitación referidos a elaboración de talleres, material didáctico propio, contextualizado; y, en el manejo de técnicas activas de enseñanza y de evaluación; al mismo tiempo se debe trabajar en equipo

• Practicar: Evaluación diagnóstica (con informes personales, observación, listas de verificación) para obtener conocimientos previos como base de la planificación didáctica no sólo diaria, sino en la de asignatura, al principio del año, porque hasta ahora se la hace sólo desde el punto de vista del profesor.

• Efectuar Evaluación Formativa (con regulación interactiva, regulación retroactiva, diarios del profesor, bitácoras estudiantiles y Auto- y co- evaluación), para: Averiguar si los objetivos de la enseñanza están siendo alcanzados o no, y lo que es preciso hacer para mejorarlos; dosificar y regular adecuadamente el ritmo del aprendizaje, retroalimentar; e, informar a cada estudiante acerca de su proceso.

• Realizar la Evaluación sumativa (con pruebas o exámenes, mapas conceptuales, mediante desempeños, con contenidos que incluyan actitudinales y procedimentales, elaboración de pequeños proyectos –incluidos con la comunidad- y solución de problemas y casos) con la finalidad de: Juzgar el aprendizaje con el fin de certificarlo, asignar calificaciones totales, determinar promociones, etc. y sobre todo verificar el alcance de los objetivos.