Mantenimiento: clave de la seguridad en un
hotel
Abarca todos los medios materiales y humanos que se destinan a
garantizar el correcto
funcionamiento del establecimiento
Un mal estado de las instalaciones conduce a accidentes
El mantenimiento óptimo de un hotel se traduce en seguridad industrial, condiciones de confort idóneas para los clientes y, sobre todo, en alargar la vida útil de las instalaciones, reduciendo los costes de reparación o “mantenimientos correctivos”. Lo contrario puede provocar accidentes y daños, materiales y personales, a clientes y trabajadores.
El concepto de mantenimiento de un hotel abarca el conjunto de medios materiales y humanos que se destinan a garantizar en todo momento el correcto funcionamiento del establecimiento, tanto en la parte de ingeniería como los equipos de operación, de los cuales dependen todos los departamentos y áreas de la instalación.
Un hotel cuenta con una diversidad de equipos e instalaciones que hacen que el respaldo que se da a la venta del servicio se complete con la estadía confortable del cliente o huésped. El mantenimiento de hoteles y alojamientos turísticos es de vital importancia, ya que, el
cuidar y proteger las instalaciones garantiza unas buenas prestaciones en los servicios que demandan sus huéspedes y la seguridad de usuarios y empleados.
Aplicar criterios preventivos
Los expertos de la empresa We Resolve, especializada en el mantenimiento integral de hoteles, destacan que la seguridad industrial de un establecimiento solo es posible
de vista de ejecución, puesta en marcha y mantenimiento.
“Lo que supone llevar a cabo un mantenimiento óptimo, incluidas las inspecciones y
revisiones reglamentarias que prescribe la normativa vigente aplicable a cada instalación, y también tener personal cualificado con formación específica en instalaciones industriales y en prevención de riesgos laborales”.
La necesidad de mantener en perfectas condiciones las instalaciones hoteleras afecta a todo tipo de establecimientos. Y ese mantenimiento óptimo
se logra mediante la
combinación equilibrada de recursos económicos, recursos personales,
cualificación de los recursos personales, compromiso de la propiedad y dirección del hotel, cumplimiento de normativa industrial y
Prevención de Riesgos Laborales (PRL).
De acuerdo con su
experiencia, los factores que más tienen que ver con los accidentes que se producen están relacionados con la falta de inversión en un presupuesto preventivo que redunda en la mala
conservación y estado de las instalaciones,
comprometiendo la seguridad industrial, la vida útil de las instalaciones y, por ende, la probabilidad de accidentes.
“La relación con la estadía confortable del huésped es directa: cuanto mejor mantenimiento tienen unas instalaciones, mayores son sus prestaciones y mayor es el grado de confort para
los clientes”, dicen en We Resolve
En tal sentido, puntualizan que la filosofía de seguridad industrial de un hotel debe traducirse en apostar por el mantenimiento preventivo y sostenible de todas las instalaciones y con el compromiso de la propiedad/dirección del hotel y de los trabajadores cualificados.
Oportunidades para la empresa
Para Guiem Sintes Garriga, director de Procesos de Artiem Hotels, un buen mantenimiento de las instalaciones supone para las empresas varias oportunidades.
“Realizar un buen mantenimiento no sólo es necesario sino de interés para la calidad de los servicios ofrecidos por el establecimiento.
El departamento de Servicios Técnicos tiene mucho que aportar: confort térmico del ambiente, calidad del ACS, iluminación tanto de zonas comunes como de habitaciones, equipos de restauración, instalaciones de spa…”.
Coincide en que el mantenimiento alarga la vida útil de las instalaciones y reduce las incidencias que en estas se puedan producir durante los años de funcionamiento y, en consecuencia, tener un impacto importante en las inversiones del establecimiento.
Más inversión, menos accidentes
En el caso de Artiem Hotels, el director de Procesos precisa que la proporción del
presupuesto de gastos destinada a mantenimiento se sitúa entre un 4-5% y asegura que “el porcentaje de accidentes atribuidos a falta de seguridad industrial o de mantenimiento son nulos”.
Afirma que el poder realizar un buen mantenimiento, tener un gran conocimiento y, en consecuencia, gestionar las instalaciones de forma eficiente, tiene un impacto importante en los resultados económicos a través de los ahorros que se generan.
Sintes puntualiza que la seguridad en las instalaciones es crítica en cuanto a las incidencias que se puedan producir durante la prestación del servicio del establecimiento, hasta el punto de poder generar quejas o demandas “que pueden llegar a ser muy costosas tanto a nivel de imagen o a causa de las posibles compensaciones a realizar a clientes”.
Protocolos, pautas y experiencia
Para Jordi González, director de Servicios Técnicos de la cadena AquaHotel, es fundamental para garantizar modelos de seguridad muy elevada el seguimiento del protocolo de
mantenimiento establecido para cada instalación, seguir las pautas de fabricantes e instaladores, así como la experiencia acumulada.
“Es lógico pensar que un mantenimiento mal realizado produce un mayor número de ave-rías y por tanto un mayor riesgo frente a la seguridad. Ambas cosas repercutirán, necesariamente y de forma negativa, en la calidad del servicio dado a los clientes y en su percepción de una estancia perfecta”. Un buen mantenimiento contribuye a la seguridad y satisfacción del huésped. En el caso de AquaHotel, el gasto de mantenimiento viene a ser en torno a 3%-4% de los ingresos; desde la perspectiva del gasto se correspondería con un 5% del total de gastos. En cuanto al gasto en mantenimiento y reparaciones, explica que tiene mucho que ver con la edad de los activos.
“A mayor edad del activo, normalmente se incrementan los gastos de reparaciones, a pesar de llevar un
mantenimiento preventivo adecuado. En nuestro caso, en torno al 3% del gasto de mantenimiento es de
reparaciones y el 2% restante (siempre hablando sobre el total de gastos) se
corresponde con
Señala que los factores que más tienen que ver con los accidentes que se producen
relacionados con las instalaciones, normalmente detrás está la falta de seguimiento de los protocolos establecidos por parte de los trabajadores a la par que la no utilización de los EPI (equipo de protección individual) correspondientes.
“En nuestro caso, podemos decir que nuestro nivel de accidentalidad es muy bajo; de hecho, en los últimos seis años, no hemos tenido ningún accidente relacionado con la seguridad industrial a nivel de trabajadores y tampo-co que haya afectado al cliente, imputable a falta de mantenimiento”.
Mantenimiento = -reparaciones + ahorro
En el sector hotelero, el mantenimiento de las instalaciones es vital para ofrecer servicios de calidad supone un ahorro en infraestructura y en gastos de reparación. El mantenimiento correctivo es el que se realiza debido a una falla de un equipo o maquinaria que se suscita de un momento a otro.
En otra spalabras, es el mantenimiento o reparación que se hace cuando el equipo ha dejado de operar. Este mantenimiento no es planificado y se puede dar por causas inesperadas o por falta de mantenimiento preventivo. El mantenimiento también se encuentra ligado a la optimización de recursos mediante la optimización de los sistemas y procesos.
Cinco claves para garantizar la seguridad
Los expertos en mantenimiento de Artiem Hotel proponen tener en cuenta cinco aspectos para garantizar la seguridad de las instalaciones de un establecimiento hotelero.
1.- Tener un conocimiento de las mismas, cuanto más mejor, para poder así en cualquier momento poder realizar un rápido diagnóstico de las posibles
incidencias.
2.- Realizar un correcto mantenimiento preventivo, definiendo tareas,
periodicidades y responsables. Es importante que este documento sea interno y nos basemos en las recomendaciones de los diferentes fabricantes e instaladores 3.- Cumplir con los requisitos legales a nivel de inspecciones realizadas por
organismos de control externo.
4.- Todo este realizado por un equipo humano de SSTT (servicios técnicos) con conocimientos suficientes, conscientes de sus responsabilidades y con actitud
proactiva a la hora de realizar formación continua.
5.- Realizando la formación necesaria, a ser posible por el propio personal interno de SSTT, a los diferentes usuarios de las instalaciones del hotel, para de esta forma conseguir un óptimo uso de las mismas y poder alcanzar los niveles requeridos de eficiencia.