XIX, las tortugas marinas

,

UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA UNIDAD IZTAPALAPA

D I V I S I ~ N CIENCIAS BIOLOGICAS Y DE LA SALUD DEPARTAMENTO DE BIOLOGIA

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TITULO DEL TRABAJO:

TÉCNICAS DE COLECTA Y CUIDADO DE NIDOS DE LA TORTUGA GOLFINA ( Lepidochel3,s olivacen ), E,N LAS PLAYAS DE NUEVO VA4LLARTA, NAYARIT.

TESIS QUE PRESENTA EL ALUMNO CECILIA CHATRES M A R T ~ N E Z

MATRICULA: 95332175

PARA LA OBTENCION DEL GRADO

DE:

LICENCIADO EN BIOLOGÍA

NOMBRE DEL ASESOR :

D R MIGUEL ANGEL ARMELLA \.‘ILLALPANDO

PROFESOR TITULAR C AREA DE ECOLOGÍA

FECHA:

Introducción

Como grupo las tortugas marinas representan un primitivo y singular componente de la diversidad biológica mundial.

Sus

primeros ancestros aparecieron

hace mas de 100 millones de años. Hasta los siglos XVII y XIX, las tortugas marinas fueron muy abundantes en sus áreas de distribucion alrededor del mundo en los mares tropicales y subtropicales. El tamaño de algunas poblaciones llegó a

conformarse por millones de individuos. Hoy en cambio, son escasas las poblaciones de tortugas libres del menoscabo antropogénico. Una combinación particular de

factores como la sobre pesca comercial, la captura incidental, l a destrucción de hábitats críticos de alimentación, de anidación y de reposo y, más recientemente, la contaminación de los mares han determinado la condición actual de las tortugas marinas. En los últimos doscientos años, hemos diezmado drásticamente la capacidad de estas especies para mantener su viabilidad. La mayoría se encuentran en declinación, frecuentemente a niveles críticos, y muchas poblaciones ya se extinguieron.

La historia de vida de estos animales es fascinante, son especies longevas, de maduración sexual tardía y de naturaleza itinerante. Excelentes navegadoras, durante sus migraciones recorren cientos o hasta miles de kilómetros al trasladarse entre sus sitios de alimentación y de anidación. Pasan la mayor parte de su vida en el mar y, durante la temporada de reproducción, regresan a las playas para desovar. Los ciclos de anidamiento son anules, las hembras arriban a la playa varias veces durante cada temporada para depositar cientos de huevos. Las nidadas permanecen en incubación unos 45 a 60 días. Al emerger, las crías se dirigen hacia el mar abierto, incorporándose a comunidades pelágicas a la deriva, durante periodos variables, según la especie mientras alcanzan la madurez, lo que puede tomar algunas décadas, entran y salen de una amplia variedad de hábitats oceánicos y costeros. Este modo de vida,

obstaculiza nuestros esfuerzos para estudiarlas y conservarlas. Sin embargo, se tiene la certeza de que la sobrevivencia a la fase adulta es baja. En el presente, miles de personas en todo el mundo, de manera voluntaria o apoyados por instituciones gubernamentales, están trabajando para conservar a las tortugas marinas en programas de manejo y conservación. Sin embargo, los programas se orientan fundamentalmente a la conservación de habitat de anidamiento, no obstante que las tortugas marinas permanecen la mayor parte de su vida en el mar; énfasis que ha tenido vacíos sustanciales en nuestro conocimiento sobre estas especies.

Aunado a lo anterior, el análisis de modelos poblaciones desarrollados

recientemente, sugiere que la conservación de huevos y crías, sin una conservación, es la falta de coordinación sobre una base internacional. Esto es grave, considerando que las amenazas a las tortugas marinas están presentes durante todo el ciclo de su vida y mientras se desplazan entre mares territoriales de diferentes naciones.

i

La necesidad de evaluar y cuantificar los efectos de la explotación de tortugas marinas, así como los resultados de la aplicación de normas para conservar y

proteger a las especies y regular sus capturas, ha sido preocupación constante del Instituto Nacional de la Pesca el cual ha mantenido programas para su investigación, protección y fomento. En principio, los objetivos generales establecidos se enfocaron a la obtención de datos biológicos y pesqueros de ías especies de tortugas para

determinar su mejor manejo y administración, y después la protección de hembras

anidadoras, huevos y crías, la incubación de huevos para obtener y liberar crías y el marcado de ejemplares de tortugas marinas para el estudio de sus migraciones, crecimiento y mortalidad ( Marquez, 1990).

En los diversos campamentos tortugueros, durante la temporada de arribación de las diferentes especies de tortugas se desarrollan diversas actividades y técnicas

de coleta entre las que destacan:

-

Recorrido diario de las playas de anidación para localización y protección de hembras anidadoras.

-

Obtención de datos biométricos, conteo de las hembras anidadoras,

determinación de las características de los nidos, numero de huevos, llegadas masivas a las playas, ubicación de las anidaciones y evaluación del tamaño de las arribaciones.

-

Colecta y trasplante de los huevos a zonas de incubación protegidas, en

particular de nidos con posibilidad de ser destruidos por fenómenos naturales o depredación.

-

Determinación de datos meteorológicos relacionados con la salida de las hembras a la playa, tales como temperatura del aire, precipitación, dirección y velocidad del viento, fases de la luna, mareas, etc.

- Marcado y recaptura de machos y hembras para el estudio de migraciones y

mortalidad.

- Obtención de fecundidad por individuo y frecuencia de anidación. - lncubación de huevos, cuidado y observación de las crías y tasas de mortalidad

-

natal Liberación de las crías en el mar.

Gracias a que la Universidad Autónoma Metropolitana unidad Iztapalapa

acepto el proyecto divisional de Servicio social C O I ~ I O apoyo al desarrollo de

programas de evaluación y protección de tortugas marinas mexicanas en la temporada 2000 y que diversos campamentos tortugueros abrieron convocatorias,

existió la posibilidad de que varios alumnos de la licenciatura en Biología, realizáramos nuestro Servicio Social en este proyecto, en mi caso en el Campamento Tortuguero de Nuevo Vallarta, Nayarit.

Objetivo general

Contribuir al desarrollo de los programas oficiales de protección

y

conservación de la tortuga marina, Lepidochelys olivuceu que arriba en las playas donde se encuentra ubicado el campamento tortuguero de Nuevo Vallarta, Nayarit, a través de l a prestación del Servicio Social.

Objetivos particulares

Caracterización de áreas preferenciales para el desove en relación a indicadores de hábitat

y

comportamiento.

Conocer cuales son las técnicas de colecta utilizadas en los campamentos tortugueros para l a protección de los nidos de l a tortuga golfina.

Proteger a las tortugas durante el desove de los diversos depredadores. Proteger a los huevos en los nidos de incubación hasta que eclosionen. Liberar

y

vigilar que las crías ingresen al mar.

Promover

y

ejecutar actividades de educación ambiental, a l a sociedad en general, inspección

y

vigilancia en conjunto con el personal adscrito a los campamentos

y

los pobladores de la región.

Realizar investigación bibliográfica referente a las técnicas de colecta que se usan comúnmente en los campamentos para salvaguardar este recurso,

y

comportamiento de l a tortuga Golfina.

Metodología

1. - Se realizaron recorridos nocturnos y diurnos, en el brea correspondiente para la localizacibn y rescate de los nidos, incluyendo la medición de ejenqdares.

Se detectaron todos los rastros posibles de anidación; se ubicaron los nidos

y

se rescataron los huevesillos, los cuales, previamente etiquetados en bolsas de plástico fueron debidamente transportados a las áreas de incubación; las mediciones de los ejemplares se realizaron con los datos y parámetros establecidos en las fichas tecnicas de control ( Formulario 1).

I

2.

-

Incubación, y registros de nidos en el corral.

Los nidos del corral se acondicionaron según la especie siguiendo los criterios establecidos, procurando ajustar l a mayor estabilidad posible en cuanto a

temperatura y humedad en la arena, llevando un registro diario para su monitoreo durante el periodo de incubación ( Formulario 2).

4. - Limpieza de nidos y registro de resultados.

Al concluir el periodo de incubación se llevo a cabo la limpieza de los nidos, la cual consistió en el conteo de huevos ( cascarones) eclosionados y no

eclosionados, registrando los datos.

5.

- Liberación de crías

Una vez que se inicio el nacimiento de las crías estas fueron liberadas lo más rápido posible al en la orilla del mar y con diez individuos escogidos al azar de cada nido se realizaron las mediciones morfometrícas para la determinación de sexo (Formulario 3).

6. - Difusión e información

Se dio información a todas las personas que llegaron a visitar al campamento, y a través de esta información se manejo la problemática para la conservación de las tortugas, promoviendo la importancia de la conservación de las tortugas marinas y de nuestros recursos naturales en general.

7. - Investigación bibliografica

Se realizo una investigación bibliográfica referente al tema de proyecto, el cual fue ” Técnicas de colecta cuidado de nidos y Etología de la tortuga golfina”.

Actividades realizadas

Primera etapa.

Se llevo a cabo en el Campamento Tortuguero de Nuevo Vallarta,

Nayarit, del 05 de agosto al 16 de septiembre del 2000, realizando el trabajo de campo de la siguiente manera:

Concluido el patrullaje, comienza el sembrado de los nidos recolectados,

cavamos un hoyo con una profundidad de 50 cm aproximadamente y aquí son colocados los huevos respectivamente.

Después de esto los nidos son vigilados periódicamente hasta la fecha de

eclosión, y una vez que emergen las tortugas bebes de los nidos son contadas y se toman 10 tortuguitas a l azar de cada nido las cuales son separadas para más tarde tomar medidas morfometrícas, las demás son transportadas a una tina la cual contiene agua de mar, después de que han sido medidas son transportadas a la tina con las demás tortuguitas y son liberadas a l anochecer del mismo día entre las nueve y las diez de la noche.

Durante los siguientes días siguen naciendo las tortuguitas faltantes de cada nido siguen siendo vigilados durante una semana más, concluido este lapso de

tiempo los nidos son destapados con l a finalidad de contar los cascarones, los huevos podridos, los infértiles y las crías eclosionadas muertas dentro del nido esto también es anotado.

Debido a que las playas de Nuevo Vallarta cuentan con una alta concentración turística el campamento proporciona información a todas las personas que lleguen a visitarlo, y a través de esta información donde se maneja la problemática para l a conservación de las tortugas se trata de recapacitar y así crear una mejor visión sobre todo en los niños de lo importante que son nuestros recursos naturales, en este caso las tortugas y de cuales son algunas maneras de protegerlos.

El tiempo restante de Servicio Social se llevo a cabo con investigación de

gabinete ( Bibliográfica), en l a Universidad, para la elaboración del informe final l a cual se describe en los resultados y conclusiones.

Objetivos y metas alcanzadas

El objetivo de conservación y protección de la tortuga marina Lepidochelys olivacea en las playas de Nuevo Vallarta, Nayarit, fue en gran parte cumplido, ya que en cada recorrido se trato de localizar todos los nidos posibles, incluyendo la protección de las hembras desde su salida del mar hasta su reingreso, así como el cuidado de estos nidos en el traslado hasta el campamento, después, su cuidado hasta el momento de eclosión, y por último se vigiló que cada neonato ingresara a l mar de manera satisfactoria.

Durante todo este tiempo además de realizar este gran trabajo, se daba

información a todas las personas nacionales y extranjeras interesadas, o que solo observaban con atención y admiración nuestra labor.

También se llevo a cabo el registro de los datos tomados en cada recorrido para l a evaluación del trabajo realizado durante toda l a temporada.

Las metas alcanzadas fueron muchas, en primer lugar éI _{haber concluido con}

el tiempo reglamentado aunque no haya sido toda la temporada completa, ya que cabe mencionar que tuvimos que adaptarnos, y aclimatarnos a las condiciones del campamento, pero todo esto valió la pena superarlo desde el momento en que encontramos el primer nido o la primer hembra, hasta que liberamos l a ultima cría o sembramos el último nido.

Otra de las metas que se alcanzo fue que el número de nidos recuperados y sembrados en el corral del campamento rebaso los limites establecidos dando como resultado que en esta temporada el número de nidos sembrados fuera más grande que el de las temporadas pasadas (Tabla 1 ).

Una meta mas que fue realizada es l a que respecta a la información que sé dió a toda l a sociedad en general que visito el campamento, ya que consientizamos a l a mayor parte de los adultos y enseñamos a los niños a cuidar este recurso.

Resultados y Conclusiones

I.

-

Diagnosis de la tortuga golf ina

Nombre científico: Lepidochelys olivacea

Distribución geogr$cu:

Se encuentra a lo largo del litoral del Pacifico Mexicano. H a sido observada en flotillas frente a las costas de Sinaloa, Nayarit, Jalisco, Colima, Guerrero, Oaxaca y Chiapas.

Playas de anidacicin:

Sinaloa: El Quelite, El Mármol, Chametla, Teacapan, El Verde Camacho y Playa Ceuta.

Nayarit: Bahía de Banderas, Chacala, Platanitos.

Jalisco: Mismaloya, L a Gloria, Teopa, Cuitzmala y el Tecuan. Colima: Playa Tepalcate, Cuyutlan y playa Campos.

Michoacan: Colola y Maruata, Boca de Apiza, Mexiquillo, Nexpa, Playa Azul, Chucutitan, Calabazas y Chuquiapan.

Guerrero: Piedra de Tlacoyunque, San Valentín, Petatillo, Petatalco, Playa Potosí, Petatlan y Tierra Colorada.

Oaxaca: San Juan Chacahua, La escobilla, Barra dela Cruz, Playa Larga y Morro Ayuta.

Chiapas: Puerto Arista.

Tenzporada de anidacicin: De Junio a Noviembre

L a cabeza tiene de ancho de 11 a 14 cm, con dos pares de escudos

prefontrales; el caparazón en su parte dorsal tiene de largo de 50 a 78 cm., y un ancho que va de 45 a 70 cm., cuenta con 5 a 9 pares de escudos laterales, por lo general 7 pares y en algunos casos se pueden presentar asimetría, comúnmente es de color verde olivo, parte ventral ( plastron o peto) 3 pares de escudos inframarginales, cada uno de estos con un poro en la parte inferior. También en este lado del caparazón se puede presentar asimetría en el numero de escudos del peto, sus aletas de color amarillo o blanco, cada aleta con una uña. Sus huevesillos son de color blanco de forma esférica, diámetro de 3.8-4.5 cm. desovan un promedio de 100 huevos (fig. 1).

11.

-

Area de Trabajo

El Campamento tortuguero Nuevo Vallarta Nayarit, se localiza en las playas del Pueblo de Nuevo Vallarta, en Bahía de Banderas el cual se encuentra al Suroeste del Estado de Nayarit y al Noroeste del estado de Jalisco, limitando al Norte con el Pueblo de Bucerias, Nay. al Sureste con Puerto Vallarta, Jal. , colindando al Oeste con el Océano Pacifico, y al Este con el pueblo de Mezcales , con una altura de 40

metros sobre el nivel del mar ( mapa 1 y 2).

111.

-

Técnicas de Colecta

y

Cuidado de nidos.

Las actividades de los campamentos son muy variables entre uno y otro,

aunque se enmarcan en un esquema global, parten de las actividades de conservación y se complementan con l a observación y medición de algunos parámetros, que dan sustento a los proyectos de investigación.

Enseguida se enmarcan los pasos principales y generales para la recolecci6n y protección de huevos de las tortugas marinas en este caso específicamente de la tortuga golfina ( Lepidochelys olivcmcl ).

1.

-

Selección de la zona de trabajo

Dependiendo de la importancia del campamento, la zona de trabajo se limita a las áreas de reproducción o incluye las áreas cercanas de captura ( sobre todo, cuando se intenta hacer un marcado extensivo que incluya hembras

y

machos). También se utilizan esteros

y

lagunas costeras, para confinar temporalmente las crías recién nacidas, que después son liberadas en lugares próximos a la costa

y

a l a zona de reproducción (Márquez, 1977).

En este caso fueron seleccionados aproximadamente 20km. de playa que abarcaba de Bucerias hasta la desembocadura del rió Ameca, aquí se presento la mayor afluencia de tortugas

y

no existe ningún obstáculo natural para realizar los recorridos.

2.

-

Corrales de incubación y construcción de nidos

Es recomendable que el área de trasplante de huevos se localice alejada de las barras, ya que en temporada de lluvias éstas se pueden abrir excesivamente

y

arrastrar parte de los nidos. Por razones obvias de humedad, los nidos no deben de estar en posición demasiado alta con respecto a la máxima marea, ni por debajo de ella.

Los corrales de incubación tienen que ser suficientemente amplios para dar cabida a l a cantidad de nidos esperada; así como debidamente protegidos con tela de alambre

y

alambre de púas. Esto obedece a que en algunas zonas el ganado invade las playas por l a noche, estropeando los nidos con las patas, o abundan perros

y

otro tipo de depredadores que escarban la arena en busca de alimento. Al cercar es necesario enterrar el borde inferior de la tela de alambre por lo menos 30 cm. para evitar que pasen animales por debajo ( Márquez, 1990).

El área que se escoja para l a construcción de los nidos debe estar libre de piedras, troncos, raíces

y

vegetación, ya que cualquier obstáculo puede ocasionar que las crías a l nacer se queden atoradas

y

mueran ( fig. 2). Por otra parte, la arena no debe ser demasiado gruesa o tener por lo menos un 60- 70% de arena fina ( grano de menos de O. 5 mm. de diámetro)

y

muy poca materia orgánica ( Márquez, 1990).

Para construir los nidos se utiliza una gafa ( pala cava-hoyos) con la se logra una profundidad deseada, luego se termina a mano el nido para darle forma de cántaro, con objeto de evitar que se derrumben las paredes

y

se dañen los huevos. Tales nidos no deben ser muy grandes porque se aplastan los huevos con el peso de la arena, ni demasiado chicos por que no caben todos ( fig. 3). Una cantidad cercana a cien huevos es l a adecuada para cada nido; se recomienda no revolver los huevos de

suceder que toda la nidada sea infértil por falta de fecunclaci6n, lo que origina que al corromperse unos huevos echen a perder los otros( Márquez, 1977).

También se recomienda en nidadas excesivamente grandes, más de 120 huevos dividir el nido en dos porciones para lograr mayor avivamiento ( Márquez, 1990).

Los nidos deben ordenarse a lo ancho del corral y cada uno será marcado con una vara numerada, además de protegerlo con un bastidor circular de tela de alambre de criba de 50-60 cm de diámetro por 20 a 25 cm. de altura (Márquez, 1977).

Cada nido necesita estar separado del vecino por una distancia mínima de un metro, medida desde su centro, con objeto de evitar que haya contaminación entre ellos; deben estar ordenados en forma escalonada para dar cabida a mayor numero de nidos en el corral. Cada año se instalara el corral en diferente zona con objeto de evitar el acumulamiento de materia orgánica ( cascarones, huevos y tortugas

muertas), que altera el medio y puede echar a perder los nidos nuevos ( Márquez,

1977).

Para facilitar el registro y control del numero de crías nacidas en cada uno de los nidos, estos deben ser rodeados con bastidores de tela de alambre, a fin de que cuando broten las crías queden encerradas dentro de ellos, no se dispersen en la playa y por tanto estén a salvo de cangrejos, aves, perros, etc. ( fig.4).

En el Campamento tortuguero de Nuevo Vallarta, Nayarit, se construyó un corral de 50m x 20m aproximadamente, con todas las características ya mencionadas, pero más tarde se construyeron cuatro corrales más de

aproximadamente 7m x 12m, debido a la sobrepoblación de nidos que se tuvo en esa temporada.

3.

-

Identificación de huellas y nidos

El tipo de playa en que prefiere anidar la tortuga golfina es variable; casi siempre en playas tropicales continentales del Océano Pacífico con poca vegetación en la parte alta de la playa comúnmente asociada con lagunas costeras o vegetación arbustiva ( Márquez, 1990).

El ancho de la huella de la tortuga golfina generalmente es de 80 cm. aprox, el tipo de huella es muy superficial, con marcas diagonales alternas ( asimétricas) hechas con las aletas interiores. Anida durante la noche, excepto durante las

arribadas masivas cuando el anidamiento puede continuar durante el día (fig.5).

4.

-

Huellas frescas y viejas

Para los fines de reconocimiento, es deseable distinguir entre huellas frescas y viejas; se define como fresca, una huella hecha durante las 12 hrs. previas al reconocimiento. Si se efectúa un reconocimiento temprano, las huellas frescas de la noche anterior se identifican como tales, las marcas S& claras y se extienden hasta la

línea de marea.

Después del anidamiento, una marea alta o un viento fuerte borrara parte de la huella, después de 1 o 2 días se vuelven borrosas (en el caso de que sea una playa solitaria) a las que se pueden denominar huellas viejas después de este tiempo

desaparecen (Márquez 1990).

La posición típica de anidamiento de la tortuga golfina, es cavando una fosa corporal superficial 6 somera, la forma tamaño y profundidad del nido varía con las diferentes especies y se relaciona directamente con la talla de los animales, el nido esta formado por una amplia oquedad llamada “cama” que aloja el cuerpo del animal; cerca de su parte posterior excava un hoyo más profundo, con forma de cántaro donde son depositados los huevos, después del desove la tortuga cubre la cama de anidamiento dejando una gran área de arena removida ( Márquez, 1996).

5.

-

Nidos falsos y nidos auténticos

Generalmente, una huella de nido de tortugas marinas es el resultado de la excavación y desove, es decir, un “nido autentico”. Algunas veces, la tortuga

deambula sin anidar; excava un nido cubriéndolo posteriormente o dejándolo sin cubrir pero sin haber desovado, esto se denomina ” nido falso” y se puede deber a que la tortuga no consiguió las condiciones adecuadas para desovar como por

ejemplo arena fina sin piedras o tal vez fue perturbada por algún animal. Para

reconocer y determinar esto, es importante, distinguir entre ambos. En ocasiones, una misma tortuga durante su recorrido hace varias excavaciones y puede desovar en la ultima o regresar al mar sin haber desovado ( Márquez, 1990).

6.

-

Identificación de hembras anidadoras

Por la facilidad con que se pueden capturar en las playas, debe tenerse

especial cuidado en la protección de las hembras anidadoras, de ellas depende principalmente el futuro de la especie.

El tiempo que transcurre desde que la tortuga sale del mar hasta que regresa a

éI, es de aproximadamente una hora. En los reconocimientos se pueden encontrar

hembras emergiendo del mar así que alguien del personal puede cuidarla hasta que desove y así evitar el robo de los huevos o algún otro altercado.

Debido a las características de cada especie es fácil distinguirlas unas de otras y poder notificar si esta emergiendo alguna especie diferente a las comunes en es lugar, los machos nunca salen a la playa así que se tiene la seguridad de que las tortugas que se encuentran en tierra son hembras.

7.

-

Medición de las tortugas

Los procedimientos para medir a las tortugas marinas son similares para todas las especies, pero las técnicas para efectuar estas medidas pueden variar,

dependiendo del tamaño de la tortuga y de la disponibilidad de equipo ( fig. 6).

Medidas rectas y curvas

Es recomendable la medida recta para longitud del caparacho. Para esta medida recta se usa un calibrador ajustable, aunque una cinta métrica o una regla sostenida paralela y cuidadosamente alineada al caparacho es también una alternativa aunque no recomendable.

Otra medida común es la medida curva, en la cual se usa cinta flexible de metal o de tela que se coloca a lo largo del caparacho.

El registrar ambas medidas, longitudinales y anchos con las técnicas en línea recta y la medida curva, permite obtener un índice potencial del grosor del cuerpo, junto a las medidas registradas debe especificarse cuál técnica se ha empleado (Márquez, 1990).

Medidas estarzdar

Se describen cuatro medidas estándar en general para las tortugas marinas:

a) longitud del caparacho b) ancho del caparacho c) medidas de l a cola d) peso

reducirse a lo estrictamente necesario l a manipulación de los individuos (Márquez, 1990).

Longitud del capnrnclzo

Se recomienda tomar l a longitud total del caparacho que va del margen

anterior de los escudos precentrales a l margen posterior de los escudos poscentrales

y

se define como la máxima distancia en línea recta a través de los escudos entre el margen anterior de las poscentrales (Márquez, 1990).

Ancho del Capamclto

El ancho del caparacho es l a distancia de l a parte más ancha del caparacho, perpendicular al eje longitudinal del cuerpo. Se recomiendan las medidas en línea recta del caparacho si se obtiene alguna medida usando una cinta flexible debe ser especificado claramente(Márquez, 1990).

Peso

El tipo de balanza que se use dependerá del peso de l a tortuga. Las hembras anidadoras pueden pesarse después de desovar con una bascula de reloj colocada sobre u n poste horizontal (Márquez, 1990).

En este campamento se realizaron medidas curvas de ancho caparacho

y

largo caparacho con una cinta métrica fIexibIe,

y

no se peso a l los individuos debido a la carencia del equipo necesario para hacerlo, todas estas observaciones son anotadas.

8.

-

Identificación de las crías

Se encuentran en las playas de anidación, usualmente emergen del nido durante la noche, casi simultáneamente

y

se desplazan rápidamente hacia el mar. A

veces quedan muertas en el nido o mueren antes de llegar al mar, por lo que al efectuar reconocimientos de las playas durante el día, es posible colectar especímenes muertos.

L a identificación de las crías puede hacerse según las claves para identificar adultos, ya que el numero de escudos

y

escamas coincide con el de los adultos. Las crías de l a tortuga golfina son de color gris oscuro o negro dorsal y ventralmente. Se diferencian en base a l conteo de los escudos laterales de

5

a 9 ( Márquez, 1977).

Las crías que fueron encontradas emergiendo de algún nido no identificado anteriormente fueron trasladadas inmediatamente al campamento

y

fueron

colocadas en una tina con agua de mar para su posterior liberación, esto se hizo para garantizar que absolutamente todas las crías vivas nacidas ingresaran al mar a una hora más favorable.

9.

-

Marcaje de los adultos

La finalidad principal de estos trabajos es obtener una parte de la información necesaria para el estudio de las poblaciones y migraciones de las especies y completar así los datos útiles para l a reglamentación de la pesquería, en base a la abundancia, distribución y comportamiento reproductor y, a veces, de cada población dentro de una misma especie. Ya que obtener esta información presenta una serie de problemas aún sin resolver y es difícil efectuar suficientes mediciones, se han ideado dos hojas de registro: una para muestre0 masivo y otra para biológico, con la información mínima necesaria.

El marcado lo realiza el personal técnico, principalmente en las playas durante la temporada de reproducción y casi exclusivamente sobre hembras.

Las marcas que se utilizan son de acero inoxidable o de plástico y tiene inscrito un número de serie alfa numérico, el nombre y dirección de la institución marcadora, y se colocan en la axila de la aleta anterior derecha.

Las marcas tiene tamaños adecuados para marcar tortugas marinas adultas y juveniles. Las marcas más grandes están hechas con una cinta de metal inoxidable de 0.9 cm de ancho y aproximadamente 8.5 cm de largo, que al doblarse tienen una longitud de 4.2 cm. Los fabricantes de las marcas suministran aplicadores adecuados; algunos parecen un simple alicate con las superficies adaptadas para apretar y

contener la marca, mientras que otras son uíias dispuestas de tal manera que la marca puede apretarse con la mano, sin ejercer mucha presión.

Las marcas pueden ser devueltas muchos años después de su aplicación; en algunos casos, se ofrece en la marca una recompensa para quien encuentre las

La mayoría de los que trabajan marcando tortugas lo hacen en el borde posterior de una de las aletas delanteras, ya sea cerca de, entre o a través de las escamas grandes que franjean la parte central de la aleta, debe tenerse cuidado de no meter demasiado o muy poco la marca, ya que se lastima el animal o se pierde fácilmente l a marca.

La decisión de cuando se debe marcar depende si las condiciones particulares de la cada reconocimiento. Si las tortugas son muy abundantes y el área debe patrullarse es muy extensa y no hay suficientes trabajadores, las tortugas pueden marcarse en cualquier momento.

Pero es recomendable marcar a las hembras después que se haya completado el proceso de anidamiento y desove.

Algunas veces, una marca , permanece en la tortuga por mas de una década

sin embargo, el número significativo de marcas se pierde rápidamente a menudo en unas pocas semanas. Las perdidas pueden ocurrir cuando una marca rompe la piel de la aleta de la tortuga, cuando la marca o toda la marca se oxida.

Actualmente se ha experimentado con la utilización de marcas electrónicas de diversos tipos: como las que se sujetan al caparacho o las que se insertan debajo de la piel de la aleta; para identificarlas se usa un detector manual o se siguen por satélite ( Márquez 1990).

Desafortunadamente en el campamento no contamos en esta temporada con el equipo necesario para el marcaje de los adultos así que solo se procedió a medir a las hembras y anotar alguna característica relevante en ella ( fig. 7).

10.

-

Recolección y cuidado de huevos

La recolección de huevos se efectúa durante el día o durante la noche, dependiendo de la especie en el caso de la tortuga golfina es durante la noche, y solo cuando hay arribadas también es durante el día. Cuando se encuentra a una hembra anidando, o solamente el nido, se marca el lugar o se extrae la nidada para trasladarla inmediatamente a la zona de protección.

Con objeto de disminuir al mínimo posible la alteración y en consecuencia la pérdida de los huevos, es imprescindible evitar golpearlos, asolearlos o dejarlos desenterrados mas de tres horas, la variación disminuye marcadamente la

sobrevivencia.

Para el traslado generalmente se usan bolsas de plástico o cubetas; en todo caso no deben acumularse más de dos nidos por bolsa ni encimarlas, nunca se deben amontonar los huevos. Cuando se descubra un nido se evitará romper algún huevo al presionar la arena con la vara puntiaguda que se usa en la búsqueda

y

si alguno se rompe conviene separarlo del resto, limpiando los huevos que estén manchados

y

anotarlo en el registro. Las maniobras innecesarias tienen que ser evitadas al máximo.

Durante la recolección de los huevos deberá contarse con el auxilio de suficiente personal, ya que mientras unas personas están extrayendo

y

transportando huevos, otras se encargarán de sembrarlos conforme lleguen al campamento ( procurando una distribución ordenada ),

y

otra más tomará notas tales como: fecha, número del nido, número de huevos, procedencia, etc.

Es necesario que el manejo de los huevos se realice con el máximo cuidado rapidez

y

limpieza teniendo las manos libres de grasa o de cualquier agente químico.

Del cuidado que se tenga durante esta etapa del trabajo, dependerá la mayor parte de los resultados que se logren en el campamento ( fig. 8).

Cuando el área de reproducción sea muy extensa

y

no exista peligro de que los nidos sean robados, solamente deberán transplantarse a la zona de protección aquellas nidadas con pocas posibilidades de éxito, por ejemplo las que fueron enterradas en zonas que se inundan a l subir la marea o en partes muy altas de los médanos; las que pueden ser arrastradas por la apertura de barras, bocas esteros

y

lagunas costeras; las que se encuentren alejadas de la zona normal de vigilancia. Se considera necesario llevar además el control de los nidos donde haya sido mayor la incidencia de anidación fuera del área controlada, e impedir la entrada a los mismos, a personas que cumplen ninguna misión especifica en el campamento

y

hay que tener especial cuidado con los animales domésticos

y

silvestres.

11.

-

Incubación de los huevos y cuidado de las crías

Las características de los nidos dependen de la especie, el caso de la golfina la profundidad máxima es de 45-50 cm. con una amplitud de 20-25 cm.,

y

el diámetro de la boca de 15- 20 cm.

La incubación de los huevos comienza cavando u n hoyo con la gafa en la arena, con las medidas ya mencionadas

y

se deja un metro de separación entre cada nido. Los huevesillos se introducen en el nido de tres en tres, e.7" ndo golpearlos

y

apretarlos procurando que llenen toda la cavidad del nidc ' d e principia el cuello. Se procurara que cada nido contenga un prop- 'S.

Las maniobras de acarreo y siembra de huevos deben hacerse en forma

ordenada y cada nido quedara marcado con la fecha y el número progresivo en que fueron sembrados ( fig. 9).

La aviación de las crías tarda entre 45 - 50 días, dependiendo de la localidad y lugar donde fueron puestos los huevos. No todas rompen los cascarones al mismo tiempo; así que la eclosión se prolonga de uno a tres días, aveces más.

Casi todos los nidos son abandonados por las crías en el transcurso de la noche y las primeras horas del día. En cuanto empieza a calentarse la arena se suspende

generalmente la salida, empero las que alcanzaron a llegar Jasta la boca del nido como no pueden regresar a la zona inferior del mismo menos caliente, lo abandonan y perecen por la temperatura elevada o por insolación. A veces también los nidos son abandonados durante el día, pero entonces la mayoría de las crías perecen debido al calor o son devoradas por cangrejos, gaviotas, zopilotes, etc., antes de llegar al mar (

fig.10).

Debido a los problemas que tienen que vencer las crías para sobrevivir su liberación nunca debe hacerse al mediodía, ya que la posición alta del sol las desorienta y además, a esa hora las aves marinas y los peces tienen gran actividad. Es recomendable liberarlas entre las 4 y 6 de la mañana, cerca de la hora del amanecer; o entre las 10-12 de la noche, o bien durante las noches de luna, siempre y cuando esta se observe en el horizonte del lado del mar abierto, ya que si esta por el lado de la tierra las crías se desorientan y es fácil que el oleaje las regrese a la playa.

Cuando se van a mantener las crías en estanques, estas podrán ser

alimentadas a base de pescado, camarón o diferentes mariscos picados. Debe

tenerse especial cuidado con la higiene, cambiándoles agua todos los días, después de la alimentación. Las crías recién nacidas generalmente comen hasta el segundo o tercer día, es decir, hasta que han reabsorbido completamente los restos de la yema del huevo.

Las crías se pueden mantener en corrales fabricados con redes de malla fina (mosquitero) dentro del agua del estero, o bien en estanques con 20 a 30 cm. de agua de mar. En estos últimos es necesario tener mucho cuidado con la limpieza,

pues fácil que las tortuguitas se enfermen por hongos (Márquez, 1990).

12.

-

Actividades de vigilancia

Vigilancia civil

Un inspector comisionado por la oficina de pesca de la entidad para colaborar con el campamento, ejerce la vigilancia civil, es la persona autorizada oficialmente para revisar lo que llevan consigo las personas sorprendidas en la playa en actitud sospechosa, así como para decomisar huevos, carne o piel de tortugas marinas, que en forma ilegal se hayan obtenido; la vigilancia civil implica efectuar recorridos por la playa, en los sectores de anidación durante el tiempo considerado de mayor

probabilidad para encontrar a las tortugas anidando, ya que también será escogido por las personas interesadas en saquear sus nidos y/o matarlas para extraerles la piel, carne, y huevos.

La vigilancia se efectúa ininterrumpidamente desde el inicio hasta tres días posteriores a la ocurrencia de las arribadas masivas de tortugas a la playa, evitando así el saqueo de huevos y hembras anidadoras por el hombre y animales

depredadores cuando no hay arribadas masivas se procede a efectuar recorridos rutinarios a todo lo lago del área de anidación, con el fin de trasplantar los nidos que se vayan encontrando.

En el caso de la tortuga golfina (Lepidochelp olivacea), la anidación ocurre en la noche y en ocasiones al atardecer por lo que la vigilancia se efectúa apartír de las 19 hr. en caso de las arribadas masivas las tortugas salen a anidas día y noche sin interrupción aunque el número disminuye durante el día. Es conveniente efectuar dos recorridos diarios en el área de anidación( Márquez, 1977).

Vigilatzcia militar

La vigilancia de las playas, por ser zona federal, corresponde a la Fuerza Naval y al Ejercito Nacional, aunque en algunas playas se cuanta también con la ayuda de la policía turística que es por parte de los hoteles. Por otra parte, la presencia de Fuerzas Armadas en los campamentos confiere mayor formalidad ante los ojos de la gente y garantiza la seguridad para el personal de los campamentos y el equipo, (

Márquez, 1977).

Recomendaciones en caso de encontrar una tortuga

Estas indicaciones sirven para toda la sociedad en general, que no están familiarizadas con la protección de las tortugas marinas.

Evite encender cualquier tipo de lámpara o linterna y menos aún, iluminar directamente l a cara de l a tortuga, ya que esto podría suspender el proceso de desove.

No tome fotografías con flash, ya que la luz de alta intensidad puede perturbar a las tortugas aún más que las linternas.

Permanezca lejos o fuera del alcance de l a vista de l a tortuga en lo que comienza a depositar sus huevos, pues si ésta se asusta, puede dar media vuelta y regresar a l mar.

Por su seguridad, no se acerque, no se acerque a l a cabeza del animal. Las tortugas marinas, tienen mandíbulas muy fuertes y pueden reaccionar en forma agresiva si se sienten atacadas.

No toque los huevos, ya que podría contaminarlos o dafiarlos, por lo mismo tampoco ponga objetos extraños en el nido, además de que es ilegal en México. No levante ni regrese la tortuga al mar, pues podría lastimarla.

No borre las huellas que deje l a tortuga en l a arena, ya que éstas sirven a los investigadores para identificar las diferentes especies que visitan l a playa.

Avise a las autoridades más cercanas si ve una tortuga, encuentra un nido, o si encuentra a alguien sin autorización sacando los huevesillos.

IV.

-

Etología de las tortugas marinas

En el medio acuático las tortugas marinas adultas pueden comportarse como individuos solitarios o gregarios y esto responde como en otras especies a la facultad de reconocer a los individuos de su propia especie, incluso de l a misma edad, sexo, o a la pareja temporal o definitiva a través de colores, formas, olores, sonidos, etc. y para esto utilizan su olfato y a la liberación de feromonas.

Este olor característico se reconoce de manera inconfundible en las playas de anidación, sobre todo en arrebaciones masivas. Un hábito interesante, que se observa solo en algunas especies,en las que se encuentra la tortuga Golfina y que quizá esté íntimamente relacionado con la necesidad de encontrar un lugar óptimo para anidar, es la interesante costumbre de hincar el pico en la arena, durante el recorrido que efectúan desde que salen del mar hasta que llegan a l sitio donde habrán de efectuar l a anidación.

Durante el cortejo, cuando la hembra acepta al macho dominante, del cual recibe mordiscos en el cuello y extremidades anteriores, toma una pose horizontal pasiva y el macho, por enzima, la retiene con las uñas curvadas de las aletas anteriores ( una o dos en cada aleta, según la especie), auxiliándose con las aletas

posteriores de la hembra, iniciando el apareamiento. Cuando la hembra no esta interesada se vuelve más activa, agresiva haciendo frente a los machos, evita la cópula y se retira.

La actividad sexual por lo general se presenta con mayor intensidad en las primeras horas del día, no es común después del medio día; esto ha sido observado con mayor regularidad en las poblaciones de golfina en las cuales, aunque frente a la playa no se observa l a misma abundancia de machos que en caso de otras especies, si es durante las mañanas cuando las parejas despliegan mayor actividad. En este caso la unión parejas de tortugas es conocida por los pescadores como "mancuernas". El apareamiento generalmente es más intenso antes de iniciarse las anidaciones ( Márquez, 1996 ).

Anidncio'n

Poco después de la fecundación ( 15 a 20 días) se inicia la anidación en las playas, en forma esporádica primero, y masiva después, concentrándose las tortugas en las llamadas arribadas, donde salen cientos de tortugas a desovar al mismo tiempo.

Este espectacular fenómeno ha generado interés y asombro entre el pueblo y en general y en la comunidad científica como uno de los ejemplos más impresionantes de actividad reproductiva en masa del reino animal.

Esta conducta de anidamiento en masa ( arribada) ocurre en unos cuantos lugares de México, Costa Rica, Nicaragua, Panamá y l a India; sin embargo, se han hecho estudios en algunas playas y se ha encontrado que los nacimientos parecen estar por debajo del potencial de reproducción, ya que muchos nidos son destruidos por las propias tortugas madres que anidan o tratan de anidar sobre otros nidos por falta de espacio ( Robinson, 1997).

Existe la hipótesis de que las tortugas regresan a anidar a la misma playa donde nacieron y las hembras que anidan por primera vez aprovechan la experiencia ganada por las hembras de mayor edad y se les unen durante sus migraciones al área donde habrán de reproducirse.

Esta es una de las incógnitas que siempre ha inquietado a los investigadores de es la capacidad de las hembras para regresar a anidar a las playas donde

nacieron. A la fecha no se sabe con certeza si el fenómeno ocurre siempre y cuál es mecanismo por el que las tortugas consiguen hacerlo. Recientemente, se ha intentado utilizar este vinculo posible de las tortugas con su lugar de nacimiento llamado tradicionalmente ”impronta”, como base de un programa para la protección y conservación de las tortugas marinas (Morales, 1981).

Los experimentos encaminados a probar esta nueva estrategia de conservaron son conocidos como ”impronta artificial”. La hipótesis más pausible para explicar el fenómeno propone que las tortugas recién nacidas aprenden los olores característicos de la playa de anidación y de las aguas que la bañan (Morales, 1981).

Una parte del experimento consistió en conservar algunas tortugas jóvenes de la especie Lepydochelys Kempi de 9 a 12 meses de edad con el fin de probar la impronta con las características de la Isla del Padre, Texas. Se propuso que las

tortugas tendrían distintas respuestas ante las soluciones preparadas en laboratorio con la arena y agua de l a playa en que se incubaron, a las que tendrían ante las de otras playas. Se observaron estas reacciones en cierto número de tortugas en un

estanque con las soluciones preparadas (Morales, 1981).

Hasta ahora, los resultados del experimento parecen señalar que las crías de cuatro meses de edad que se incubaron en la Isla del Padre de manera artificial, muestran preferencia por las soluciones con las características de este lugar. A parecer las tortugas pueden captar diferencias en l a composición de las corrientes de agua por medio de quimioreceptores situados en sus vías olfatorias, y esto afecta su comportamiento de orientación. La hipótesis central se vio apoyada de este modo

pero es necesario continuar con este tipo de experimentos y hacer otros para corroborarla (Morales, 1981).

Desove

Contemplar el complicado ritual por medio del cual las tortugas marinas realizan el desove es algo impresionante e inolvidable.

El proceso dura aproximadamente entre 50 y 60 minutos y se inicia cuando la madre abandona el mar. Ella avanza lentamente hasta aclentrarse 30 metros en la playa. Enseguida explora el terreno hasta que encuentre alguna zona que le resulte idónea para el deposito de sus huevos. Ayudada por sus aletas, l a hembra comienza a escabar su nido con tal fuerza, que arroja parte de la arena a varios metros de distancia, si bien a su alrededor acumula la suficiente para recubrir más tarde el agujero( Garcia, 1983).

La habilidad cavadora del reptil es sorprendente. El nido llega a tener unos treinta centímetros de profundidad y ahí comienza a desovar, un huevesillo tras otro, hasta completar en promedio una centena.

Es

importante que nada perturbe a la tortuga

antes de comenzar a anidar, ya que cualquier distracción provoca que esta se asuste y

que regrese al mar sin haber desovado.

Al

terminar el desove, la golfina comienza a acarrear con sus aletas traseras toda

la arena que previamente había sacado. Para ello efectúa movimientos inversos a los realizados mientras construía el nido. No tarda mucho en cubrirlo con ese cálido y húmedo manto protector. Luego, para disimular que ahí debajo se hallan un centenar de nuevas tortuguitas, se da ha la tarea de aplanar y apisonar la pequeña área, para lo cual golpea sobre el suelo con todo su cuerpo, en un balanceo cuyo ritmo es marcado por un sonoro sonido, repetido por otros miles de tortugas cuando hay arribadas ( Garcia, 1983).

Migracicin y Navegacitin

Las bebes tortugas, ninguna de las cuales sobrepasa la mano de un niño, vienen a un mundo preñado de peligros, per seguidas por cangrejos, zorros y mapaches, se afanan por la playa obscurecida camino del océano, para zambullirse en la resaca. Establecen enseguida el rumbo que las aleja de la costa y las adentra en alta mar. Soportando los embates de olas y corrientes, atacadas por peces y aves marinas, mantienen día y noche sus marcaciones mar dentro, al tiempo que nadan hacia el abrigo relativo que les ofrece la corriente del Golfo. Allí entre 30 y 60 millas de la costa, encuentran refugio en los sargazos flotantes, así como alimento en forma de pequeños invertebrados ( Kenneth ,1992) .

Años después, las que lleguen a la edad adulta ( quizás una de cada 1000)

navegarán de vuelta, camino, frecuentemente, de la misma playa donde vieron la luz por primera vez, y esto se repetirá cada estación. La facultad de orientación de que hacen gala parece bastante refinada y fiable. Para algunas poblaciones, la migración inicial hacia mar abierto constituye el primer paso de un periplo transoceánico que durara varios años( Kenneth, 1992).

El primer paso lógico para describir que mecanismos emplean las tortugas marinas en la navegación consiste en determinar las señales de orientación que utilizan los animales recién salidos del cascaron. Su migración costera inicial se parece a la migración de larga distancia, ya adulta, en cuanto ambas precisan de un movimiento orientado a través de un océano desprovisto de puntos de referencia manifiestos. Crías

y adultos poseen, probablemente, la misma finura sensorial.

Al

parecer estos mecanismos tienen que ver con el magnetismo que proviene del oleaje, las olas que penetran en aguas someras cerca de la playa se refractan hasta que se mueven en dirección a la línea de costa, el movimiento del oleaje constituye normalmente un indicador fiable de la dirección hacia alta mar, nadar hacia las olas suele resultar en un movimiento hacia mar abierto ( Kenneth, 1992).

AI parecer estos mecanismos tienen que ver con el magnetismo que proviene del oleaje, las olas que penetran en aguas someras cerca de la playa se refractan hasta que se mueven en dirección a la línea de costa, el movimiento del oleaje constituye normalmente un indicador fiable de l a dirección hacia alta mar, nadar hacia las olas

suele resultar en un movimiento hacia mar abierto ( Kenneth, 1992).

Aunque la dirección del oleaje es por lo que se ve, l a señal principal de l a que se ayudan durante las primeras fases de migraci6n a mar abierto, pueden atender a otras sefiales, de manera simultanea o subsecuente. En este contexto y llegado el caso, el sentido magnético podría remplazar la orientación del oleaje cuando las tortugas se adentran en aguas mas profundas, donde las olas son indicador menos fiable de la dirección hacia el mar abierto. Tampoco puede descartarse que encuentren apoyo

parcial en otros mecanismos, incluidas las señales quimioscnsoriales, visuales u otras todavía no identificadas( Kenneth, 1992).

Esto confirma que las crías se apoyan realmente en l a dirección de propagación de las olas para guiar su migración oceánica.

Una diferencia importante entre las crías y los adultos estriba en l a verosímil capacidad de los segundos para fijar su posición con respecto al destino. Tal

orientación puede con un sentido de la brújula interna para guiar el regreso de la tortuga adulta hacia su playa especifica de nidificación; tiene que saber, además, donde se encuentra los etólogos llaman ""sentido de mapa" a esa capacidad de algunos animales( Kenneth, 1992).

Se sabe poco del sentido del mapa de los animales l a capacidad de detectar campos magnéticos es la idónea en teoría, para determinar la posición. Aun se ignora si las tortugas adultas utilizan las olas corno señal ( Kenneth, 1992).

Otras señales que utilizan la tortugas bebes para ingresar al mar es la intensidad luminosa del horizonte marino y el sonido del mar que debe estimularlas.

Conclusiones

Es importante conocer cuales son las formas básicas o correctas para la protección no solo de los habitats de anidamiento de las tortugas marinas, si no también de sus hevesillos y de las crías ya que las amenazas a la tortuga están presentes durante todo el ciclo de su vida. Conociendo cuales son algunas de las técnicas de colecta que se utlizann generalmente en los campamentos tortugueros para la protección de estas especies; y como se realiza el cuidado de sus nidos hasta el momento de su eclosión podemos hacer una mejor labor en l a conservación de este recurso.

Bibliografía

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0 Morales J. 1981 ” Defendiendo a las Tortugas” Técnica Pesquera. México pp.17-20.

Márquez R. 1996 /’ Las Tortugas Marinas y nuestro tiempo” Fondo de Cultura

Económica. México pag. 197.

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0 Garcia

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1983.” Vuelve la tortuga ” Técnica Pesquera. México. pp 19-20

Kenneth J. 1992.” La navegación de las tortugas Marinas” Investigación y Ciencia. Méx. PP. 56-93

La Cruz dc Huanacastlc. NaJmit; a 4 dc Scpticrnbrc dcl 2000

Tabla

l.

Comparación entre temporadas en el campamento Tot-tuguero Nuevo

Vallarta, Nayarit.

Vo.

de nidos colectados y

sembrados

No.

de huevos sembrados

Nidos Robados

Crías liberadas

Inicio de nacimientos

Días trabajados

~~

Temporada 1999

429

40 582

28

34 972

9/08/99

70

Se tienen 562 nidos más que en la temporada 1999 o sea el 45.44% más

Temporada 2000

99

1

94 989

60

6 700

24/08/00

55

l " & & m y - & e

Mapa l . Localización del Nuevo Vallarta, Nayarit

Mapa 2. Area de Trabajo dividida en zonas

Punta de Mita

Bucerias

Nuevo Vallarta

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Fig. 3. Construcci611 de nidos

Prinlero se Iinnpia el área de escacacibn y con l a yafa se hace e l nozo principal. hasta l a profundidad deseada ( 45 - 55 cm. ). Despues se termina el hoyo a mano, dandole la forma

coma se indica en l a figura. L a forma de los nidos :~~tiGciales debe ser lo más próxima a la de los nidos naturales. Observe las medidas Y procure clue los huecos queden ocupando el espacio amplio. sin rebasar el cuello.

Fig. 4

y fecha y así poder prevenir el tiempo en que habrán de salir las crías

Para obtener mayor rendimiento en el espacio del corral los nidos se deben distribuir en forma escalonada, como se muestra en el esquema, deben numerarse para llevar el control de la fecha en que saldrán las crías y el nilmero que se lograra por cada nido.

Fig. 6 Tipos de mediciones en las tortugas. A) nlidiendo l a longitud del caparacho, medida en línea recta; B) medida cuma; C) midiendo el ancho, medida en línea recta

Fig. 7 blétodos para marcar el borde posterior de 1:)s aletas delaoteras tipos de Inarca que se utiliza.

j. * 't