Indice de un punto
respecto de un
camino cerrado
5.1 INTRODUCCI ´ON
El n´umero de vueltas que da un camino cerrado alrededor de ciertos puntos (el ´ındice, the winding number de los textos en ingl´es) juega un papel insospechado en la teor´ıa de funciones de variable compleja, como se ir´a desvelando a lo largo del desarrollo de la misma; ello es debido a que tal n´umero puede expresarse como una integral, ligada con la variaci´on del logaritmo y, por ende, del argumento.
Tenemos aqu´ı un punto m´as en el que el an´alisis complejo presenta una fuerte componente geom´etrica, que va a hacer de los esquemas gr´aficos un elemento auxiliar muy ´util.
En la primera parte del cap´ıtulo definimos anal´ıticamente el concepto de ´ındice y probamos sus propiedades b´asicas. En la segunda parte, vemos que el ´ındice se corresponde efectivamente con el ‘n´umero de vueltas’, estudiando variaciones del argumento tras introducir los importantes conceptos de argumentos continuos y logaritmos continuos a lo largo de un camino, emparentados (pero no equiparables) con las determinaciones del argumento y del logaritmo.
Un excelente libro de referencia, con abundantes comentarios y figuras, es Palka, B. P.: An Introduction to Complex Function Theory. Springer, New York (1991); un enfoque muy geom´etrico se encuentra en Needham, T.: Visual Complex Analysis. Clarendon Press, Oxford (1997). A un nivel m´as elevado, Burckel, R. B.: An Introduction to Classical Complex Analysis,Vol. 1. Birkh¨auser, Basel (1979).
5.2 DEFINICI ´ON Y PRIMERAS PROPIEDADES
Definici´on. Sea γ un camino cerrado. Para z ∈/ sopγ,
Indγ(z) = 1 2πi
γ
dw w−z
se llama ´ındice de z respecto de γ.
Propiedades.
1. La funci´on Ind : C\sopγ −→ Ces anal´ıtica.
Es un caso particular del teorema de analiticidad de funciones definidas me-diante integrales.
2. Indγ(z) ∈ Z, ∀z ∈ C\sopγ.
En efecto, sea γ : [a,b] −→ C, a = t0 < t1 < . . . < tn = b tal que la restricci´on deγ a cada [tj−1,tj] tenga derivada continua. Entonces,
Indγ(z) = 1 2πi
b
a
γ(t)
γ (t)−z dt = 1 2πi
n
j=1 tj
tj−1
γ(t)
γ (t)−z dt. (1)
Para cada j = 1,2, . . . ,n, definimos las funciones
gj : s ∈ [tj−1,tj] −→ gj(s) =
s
tj−1
γ(t)
γ (t)−z dt ∈ C. Por el teorema fundamental del c´alculo, las gj son derivables, siendo
gj(s) = γ
(s)
γ (s)−z.
De aqu´ı,
d ds
egj(s)
γ (s)−z
= egj(s)
g
j(s) γ (s)−z −
γ(s)
(γ (s)−z)2
= 0,
por tanto,
egj(s)
γ (s)−z =Cte =
egj(tj−1)
γ (tj−1)−z =
e0 γ (tj−1)−z (la constante es, por ejemplo, el valor en s = tj−1). As´ı,
egj(tj) = γ (tj)−z
γ (tj−1)−z. (
2)
De la ecuaci´on (1), con las notaciones que hemos introducido, tenemos:
Indγ(z) = 1 2πi
n
j=1
Entonces, por (2),
e
n
j=1gj(tj) =
n
j=1
γ (tj)−z γ (tj−1)−z =
γ (b)−z
γ (a)−z = 1,
pues el camino es cerrado. Por ´ultimo, esto implica que existe k ∈Z tal que n
j=1
gj(tj) = 2kπi ⇒ Indγ(z) = k ∈Z.
3. La funci´on Indγ es constante en cada componente conexa de C\sopγ. Esto es claro, por ser continua y tomar valores enteros.
4. Indγ = 0en la componente no acotada de C\ sopγ. En efecto, basta observar que
|Indγ(z)| ≤ 1
2π longγ ·w∈supsopγ 1
|w−z|.
Como sopγ es acotado, podemos tomar z en la componente no acotada con m´odulo suficientemente grande para que |Indγ(z)| < 1. Como debe ser un entero, no queda otra posibilidad que Indγ(z) = 0.
Ejemplos. 1. Seaγ = ∂D(a;r)la circunferencia de centro a y radio r (orientada
positivamente). Entonces Indγ(z) = 1 si|z −a| <r , Indγ(z) =0 si |z −a| >r . En efecto: puesto que D(a;r) es conexo, para todo z ∈ D(a;r) ser´a
Indγ(z) = Indγ(a) = 1 2πi
2π
0
r i ei t
r ei t dt =1.
Por otra parte, {z ∈ C : |z −a| > r} es la componente no acotada de C \ sopγ, luego para estos z el ´ındice es 0.
2. De manera an´aloga, siγ es la circunferencia de centro a y radio r recorrida k veces en sentido positivo (k ∈ N), es decir,
γ : t ∈ [0,2π] → γ (t) = a +r ei kt ∈C,
se obtendr´ıa Indγ(z) = k si|z −a| < r , Indγ(z) = 0 si|z −a| > r . Y siγ es la circunferencia de centro a y radio r recorrida k veces en sentido negativo (k ∈ N), es decir,
γ
1γ
2γ
30
se obtendr´ıa Indγ(z) = −k cuando |z −a| < r , Indγ(z) = 0 cuando|z −a| >r . 3. El c´alculo directo del ´ındice se complica incluso en situaciones aparente-mente muy sencillas. Por ejemplo, seaγ “el cuadrado de v´ertices±1±i ”, es decir, la poligonal [1+i,−1+i ]∪[−1+i,−1−i ]∪[−1−i,1−i ]∪[1−i,1+i ].
Entonces
Indγ(0) = 1 2πi
γ
d z z
= 1
2πi
[1+i,−1+i ] d z
z +
[−1+i,−1−i ] d z
z +
[−1−i,1−i ] d z
z +
[1−i,1+i ] d z
z
= 1
2πi
[−1−i,1−i ]∪[1−i,1+i ]∪[1+i,−1+i ] d z
z + 1 2πi
[−1+i,−1−i ] d z
z
= 1
2πi
Log(−1+i)−Log(−1−i)
+ 1
2πi
Log[0,2π)(−1−i)−Log[0,2π)(−1+i)
= 1
2πi
3πi
4 −
−3πi
4
+ 1
2πi
5πi
4 −
3πi 4
= 1
puesto que Log z es una primitiva de 1/z en C\(−∞,0] (que contiene al soporte de [−1−i,1−i ]∪[1−i,1+i ]∪[1+i,−1+i ]) y Log[0,2π)(z)lo es en C\[0,+∞), que contiene al soporte de [−1+i,−1−i ].
En este ejemplo concreto, es posible sustituir en el c´alculo el camino por otro m´as c´omodo, concretamente por la circunferencia unidad∂D(0;1). En efecto:
Seanγ1 = [1,1+i ],γ2 =[1+i,i ] yγ3el primer cuadrante de la circunferencia orientado negativa-mente, como se indica en la figura. Puesto que 0 queda (“a ojo”) en la componente conexa no aco-tada del complementario del soporte del camino cerradoγ1∪ γ2 ∪γ3, tendr´a ´ındice 0 respecto del mismo. Por tanto
1 2πi
γ1∪γ2∪γ3
d z
z = 0,
con lo cual
γ1∪γ2
d z z = −
γ3
d z z =
−γ3
d z z .
Repitiendo el proceso en los dem´as cuadrantes y sumando convenientemente, sin perder de vista las orientaciones, llegamos a
1 2πi
γ
d z z =
1 2πi
∂D(0;1)
Con “ayudas visuales” como ´esta podremos ir ampliando la complejidad de las situaciones con las que nos enfrentemos. No obstante, nos serviremos mejor todav´ıa de la intuici´on geom´etrica viendo que el ´ındice corresponde, como se˜nal´abamos en la introducci´on, al n´umero de vueltas (suma de vueltas positivas y negativas) que da el camino alrededor del punto. La manera m´as obvia de medir estas vueltas es seguir la variaci´on del ´angulo que va formando el segmento [z0, γ (t)] con el segmento [z0, γ (a)] cuando t va recorriendo el intervalo [a,b] en el que est´a definida γ.
En C, hablar de ´angulos es hablar de argumentos, y los argumentos son la parte imaginaria de los logaritmos. Si repasamos los c´alculos efectuados anteriormente, se comienza a vislumbrar un enfoque del problema: la conveniencia de “empalmar adecuadamente logaritmos sobre trozos del camino” para poder calcular el ´ındice, que relacionaremos con los argumentos correspondientes. La formalizaci´on de estos procedimientos es el objeto de la secci´on siguiente.
5.3 INTERPRETACI ´ON GEOM ´ETRICA DEL ´INDICE
Comenzamos con las definiciones de los conceptos que recogen las ideas que acabamos de apuntar.
Definici´on. Sea γ : [a,b] −→ C un camino tal que γ (t) = 0, ∀t ∈ [a,b]. Diremos que:
1. f : [a,b] −→ Ces un logaritmo continuo a lo largo deγ, si f es continua en [a,b], y f(t) ∈logγ (t),∀t ∈ [a,b].
2. h : [a,b] −→ Res un argumento continuo a lo largo deγ, si h es continua en [a,b], y h(t) ∈argγ (t),∀t ∈ [a,b].
Estos conceptos son, a primera vista, muy parecidos a los ya tratados (deter-minaciones en regiones), pero existe una gran diferencia: aqu´ı, la variable es real, no atendemos prioritariamente al puntoγ (t)del soporte camino sino que ponemos ´enfasis en el “instante” t en el que el punto se alcanza. As´ı, puede suceder que sea γ (t1) = γ (t2) sin que f(t1) = f(t2) o h(t1) = h(t2), con las notaciones de la
definici´on.
Sin dificultad se prueba:
i) Si f1, f2 son dos logaritmos continuos a lo largo deγ, entonces
∃k ∈ Z f1(t) = f2(t)+2kπi, ∀t ∈ [a,b].
-2x 0 2 4
-4 -2 0 2 4
y
iii) Si f es un logaritmo continuo a lo largo de γ, entonces h(t) = m f(t) es un argumento continuo a lo largo de γ.
iv) Si h es un argumento continuo a lo largo deγ, entonces f(t) = ln|γ (t)| +i h(t) es un logaritmo continuo a lo largo deγ.
Ejemplos.
1. Para cualquier camino γ tal que sopγ ∩(−∞,0] = ∅, Argγ (t)es un argu-mento continuo a lo largo de γ. (¿Por qu´e?)
2. Para cualquier camino γ tal que sopγ ∩[0,+∞) = ∅, Arg[0,2π)γ (t) es un argumento continuo a lo largo de γ. (¿Por qu´e?)
3. Sean k ∈ Z, r > 0 y
γ : t ∈[0,2π] →γ (t) = r ei kt ∈C.
Entonces
h : t ∈ [0,2π] → h(t) =k t ∈C es un argumento continuo a lo largo deγ. (¿Por qu´e?)
4. Si se conocen argumentos continuos h1y h2de dos caminosγ1 : [a,b] → C, γ2 : [a,b] → C, y se define mediante su producto un nuevo camino
γ : t ∈ [a,b] →γ (t) = γ1(t)γ2(t) ∈C,
entonces h1+h2 es un argumento continuo a lo largo deγ. (¿Por qu´e?)
Esta observaci´on es m´as ´util de lo que pudiera pensarse. Por ejemplo, sea
γ : t ∈[0,2π] →γ (t) =e3i t +3 e2i t ∈ C.
(en la figura se tiene su representaci´on gr´afica).
Como e3i t +3 e2i t = e2i t(3+ei t), h(t) = 2t +Arg(3+ei t)ser´a un argu-mento continuo a lo largo de γ (n´otese que e(3 + ei t) > 0 para todo t ∈ [0,2π]).
Teorema. Sea γ : [a,b] −→ Cun camino tal que 0∈/ sopγ. Entonces, existe f : [a,b] −→ Clogaritmo continuo a lo largo deγ. Adem´as, f es derivable donde lo seaγ.
Demostraci´on. Con las mismas notaciones que en la demostraci´on de la propiedad 2 del ´ındice, consideremos como entonces la partici´on a =t0 < t1 < . . . < tn = b y, para cada j = 1,2, . . . ,n,
gj : s ∈ [tj−1,tj] −→ gj(s) =
s
tj−1
γ(t)
γ (t) dt ∈ C.
Nuevamente, cada gj es derivable en [tj−1,tj] y egj(s) = γ (s)
γ (tj−1)
. Por tanto, en
cada trozo,
egj(s)+Logγ (tj−1) = γ (s), s ∈[t
j−1,tj]
Llamemos fj(s) = gj(s)+Logγ (tj−1)y tendremos que efj(s) = γ (s). Esto quiere
decir que hemos demostrado el teorema por trozos. Ahora, tendremos que ajustar bien los empalmes, pero esto no es ninguna dificultad, pues, por ejemplo, en t1,
f1(t1) y f2(t1) son logaritmos de γ (t1), luego se diferencian en un 2kπi , con k ∈ Z. Digamos que los saltos en los extremos de los intervalos son del tama˜no 2kπi , con determinados k ∈ Z. Entonces, al modificar las funciones sumando el correspondiente 2kπi , arreglamos la continuidad sin perder el hecho de ser logaritmos. En otras palabras, la soluci´on a nuestro problema ser´a la funci´on
f(t) =
f1(t) (t0 ≤ t ≤ t1) f2(t)+2k1πi (t1 ≤ t ≤ t2) f3(t)+2k2πi (t2 ≤ t ≤ t3) . . . . . . . fn(t)+2kn−1πi (tn−1 ≤ t ≤ tn)
donde los k1,k2, . . . ,kn−1 son los enteros adecuados para que f sea continua sin excepci´on en [a,b]. Es claro que
ef(t) = γ (t), ∀t ∈[a,b]
y f es derivable salvo en los puntos ti, es decir, donde lo es γ.
Corolario. Sea γ : [a,b] −→ Cun camino cerrado tal que 0 ∈/ sopγ. Sea h un argumento continuo cualquiera a lo largo de γ. Entonces
Indγ(0) = h(b)−h(a)
γ
γ
(t)
arg
γ
(t)
“1 vuelta”
La cantidad h(b)−h(a)se suele represen-tar por ARG
a≤t≤b γ (t), argγ o alguna no-taci´on similar, y se lee variaci´on de un ar-gumento continuo a lo largo del camino. Indγ(0)es as´ı la suma algebraica del n´ume-ro de veces que el argumento var´ıa en 2π. Gr´aficamente, pues, Indγ(0) corresponde al n ´umero de vueltas que da la curva alrededor del 0.
Demostraci´on. Usamos las mismas notaciones que en la demostraci´on del teorema, y sea h(t) = m f(t)(que es un argumento continuo). Tenemos
2πi Indγ(0) =
γ
dw w =
n
j=1 tj
tj−1
γ(s)
γ (s)ds = n
j=1
(gj(tj)−gj(tj−1))
=
n
j=1
(fj(tj)− fj(tj−1)) = f(b)− f(a) = i(h(b)−h(a)).
Notemos para la ´ultima igualdad que f(b), f(a)son logaritmos del mismo n´umero γ (a) = γ (b), y por tanto, tienen la misma parte real. Por ´ultimo, esta variaci´on no depende del argumento continuo que tomemos, porque todos ellos se diferencian en una constante 2kπ.
Observaciones.
1. Quede claro una vez m´as que no se debe confundir ‘argumento continuo a lo largo de una curva’ (que siempre existe) con ‘argumento continuo sobre el soporte de la curva’ (que puede no existir). Por ejemplo, para la curva
γ : [0,2π] −→C γ (t) = ei t
no existe H : sopγ −→C continua tal que H(z) ∈ arg z, ∀z ∈ sopγ. Sin embargo, insistimos en que si para una curva γ existe H : sopγ −→ C continua, tal que H(z) ∈ arg z, ∀z ∈ sopγ, entonces H ◦γ es un argumento continuo a lo largo de la curva.
2. Para otro punto, distinto de 0, que no est´e en sopγ tenemos lo siguiente: Siγ : [a,b] −→ C, y z0 ∈/ sopγ, trasladamos el camino mediante
z0
γ(t) γ
arg(γ(t)-z0)
Indice 1
Indice 2
Indice 3 Indice 0
00
0
0
EEntonces es claro que
Indγ(z0) = Indγ−z0(0)
= 1
2πarg(γ −z0),
es decir, el ´ındice respecto de γ del punto z0 es la variaci´on de un
argu-mento continuo a lo largo de la curva γ − z0 y esto, geom´etricamente, sig-nifica el n ´umero de vueltas que da la curva γ alrededor del punto z0. Por ejemplo, sobre esta idea, es f´acil para la curva dibujada a continuaci´on ver cu´al
es el ´ındice de cualquier punto del plano que no est´e sobre su soporte. Fi-jado un punto z0 ∈/ sopγ, seguimos gr´aficamente la variaci´on del ´angulo que forma el radio vector que une z0 con un punto que vaya recorriendo la curva, medida esta variaci´on res-pecto de la semirrecta de origen z0que pasa por el
punto inicial (y final) E . Por supuesto, el ´ındice se mantiene constante en cada componente conexa. 3. El ´ındice de caminos va a aparecer constantemente en el manejo de integrales.
La raz´on de fondo es la siguiente: dado un camino cerrado γ y a ∈/ sopγ,
γ(
z −a)nd z = 0, ∀n = −1, n ∈Z,
ya que las funciones(z−a)n tienen primitiva(z −a)n+1/(n+1)en C\ {a}, abierto que contiene a sopγ. S´olo queda saber que ocurre con n = −1, y de aqu´ı la noci´on de ´ındice.
As´ı por ejemplo, para integrar una funci´on racional sobre un camino cerrado,
γ
(P/Q irreducible), descomponiendo en fracciones simples s´olo har´a falta conocer los ´ındices respecto de γ de los ceros del denominador. En efecto: supongamos, para fijar ideas, que Q tiene una ra´ız doble z1, una ra´ız simple z2 y una ra´ız triple z3, y que el grado de P es dos unidades mayor que el de
Q. Entonces
P(z)
Q(z) =az
2+bz +c+ A
(z −z1) +
A
(z −z1)2 +
B (z −z2)
+ C
(z −z3) +
C
(z −z3)2 +
C (z −z3)3,
de donde
γ
P(z)
Q(z) d z = A
γ
d z
z −z1 + B
γ
d z
z −z2 +C
γ
d z z −z3
(los t´erminos que no hemos escrito son todos nulos por el comentario previo), y as´ı
γ
P(z)
Q(z) d z =2πi
A Indγ(z1)+ B Indγ(z2)+C Indγ(z3).
M´as adelante veremos una important´ısima generalizaci´on de este resultado, el teorema de los residuos.
4. La existencia de logaritmo y argumento continuo es cierta, m´as en general, para curvas, como se prueba sustituyendo en la demostraci´on anterior la construcci´on del logaritmo mediante integrales por una construcci´on directa (m´as delicada). Esto hace que se pueda extender la noci´on de ´ındice para curvas cerradas mediante la variaci´on de un argumento continuo. Las propiedades b´asicas que acabamos de obtener siguen siendo v´alidas en esta situaci´on m´as general. (Ver Burckel, loc. cit., Chap. IV.)
5. Curvas de Jordan e ´ındice. Recordemos que un espacio topol´ogico se de-nomina curva de Jordan si es homeomorfo a la circunferencia unidad T. El c´elebre teorema de la curva de Jordan establece:
sentido usual. Se demuestra (cf. Burckel, loc. cit., Th. 4.42, p´ag. 103) que para todos los puntos del interior de J el valor constante del ´ındice respecto deγ es 1 o−1. En el primer caso,se dice positivamente orientado, y negativamente orientado en el segundo.
Dada una curva cerrada simple, i.e., una aplicaci´on continua γ : [a,b] → C tal que γ (a) = γ (b) y γ|[a,b) inyectiva, su soporte sopγ es una curva de Jordan. Para todos los puntos del interior de sopγ, el ´ındice respecto de γ es, pues, constantemente 1 o −1. En el primer caso,γ se dice positivamente orientada, y negativamente orientada en el segundo. Si G es el interior de sopγ, se pone a veces γ = ∂G cuando γ est´a positivamente orientada para indicar esta relaci´on.
5.4 EJEMPLOS Y EJERCICIOS Ejemplos.
1. En los caso m´as sencillos examinados antes (circunferencias, cuadrado) queda a la vista que An´alisis y Geometr´ıa encajan perfectamente.
2. Es interesante observar que si el soporte de un camino cerrado γ : [a,b] → C no corta al semieje real negativo (−∞,0], entonces Indγ(0) = 0, pues 0 est´a en la componente no acotada de C\ sopγ. Por la misma raz´on, Indγ(0) = 0 para todo camino que no corte a una curva cualquiera que una 0 con∞ en la esfera de Riemann.
3. Para el camino
γ : t ∈ [0,2π] → γ (t) = e3i t +3 e2i t ∈C,
el argumento continuo anteriormente obtenido muestra que Indγ(0) = 2, y el mismo valor tendr´a Indγ(a)para todos los a en la componente conexa de C\sopγ que contiene al origen. En la componente conexa no acotada sabemos que el ´ındice vale 0.
En la otra componente conexa acotada de C\sopγ, observamos gr´aficamente que el ´ındice vale 1. Puede justificarse anal´ıticamente, por ejemplo, hallando su valor en z =3; para ello escribimos
γ (t)−3 = ei t(e2i t +6i sen t)
y comprobamos que m(e2i t + 6i sen t) = 2 sen t(cos t + 3) s´olo se anula si sen t = 0, en cuyo caso e(e2i t + 6i sen t) = cos(2t) = 1. En consecuencia e2i t +6i sen t ∈/ (−∞,0] para ning´un t ∈[0,2π], y por tanto,
t +Arg(e2i t +6i sen t), t ∈[0,2π],
Ejercicio. Para valores “muy grandes” de R > 0 (luego precisaremos m´as), sea γ : t ∈[−R, R] → t3−(1+2i)t2−(3−7i)t +8−4i ∈ C.
Hallar la variaci´on de un argumento continuo a lo largo deγ.
Respuesta.
Para situar γ (t)seg´un los valores de t, estudiemos la variaci´on de signos de
x(t) := eγ (t) = t3−t2−3t +8,
y(t) := mγ (t) = −2t2+7t −4,
extendidas a todo t ∈R.
Como x(t) = 3t2−2t−3 se anula para t = 1−
√
10
3 < 0 y t
= 1+
√
10 3 > 0, mantendr´a su signo en los intervalos (−∞,t), (t,t), (t,+∞). Y puesto que limt→−∞x(t) = limt→+∞x(t) = +∞; x(t) > 1−(6/3)2 −(1+4) +8 = 0 y x(0) = −3 < 0, siendo 0 ∈ (t,t), podemos resumir esta informaci´on en el cuadro siguiente:
t → −∞ ∈ (−∞,t) = t ∈(t,0) =0 ∈ (0,t) =t ∈ (t,+∞) → +∞ x(t) → +∞ > 0 =0 < 0 = −3 < 0 = 0 > 0 → +∞
x(t) → −∞ =8 > 0 → +∞
del que se deduce que x(t) > 0, y por tanto existe un t0 ∈ (−∞,t) y uno s´olo
con x(t0) = 0, mientras que x(t) ≥ x(t) > 0 para todo t ∈[0,+∞). Por otra parte y(t) = −2t2+7t −4 = −2(t−t1)(t −t2)con t1 = 7−
√
17
4 ,
t2 = 7+
√
17
4 , de modo que t0 <t
< 0 < t
1 < t2 y, en consecuencia, obtenemos
la siguiente evoluci´on de signos para x(t), y(t), con la ubicaci´on de γ (t) = x(t)+i y(t):
t → −∞ ∈ (−∞,t0) =t0 ∈ (t0,t1) = t1 ∈ (t1,t2) = t2 ∈(t2,+∞) → +∞
x(t) → −∞ <0 =0 > 0 > 0 > 0 > 0 > 0 → +∞
y(t) → −∞ <0 <0 < 0 = 0 > 0 = 0 < 0 → −∞ γ (t) ∈C3 ∈ −i P ∈ C4 ∈P ∈ C1 ∈ P ∈C4
donde hemos puesto P = (0,+∞), C1 = {z ∈ C : e z > 0, m z > 0},
C3 = {z ∈C : e z < 0, m z <0}, C4 = {z ∈C : e z > 0, m z <0}.
Vemos as´ı que el soporte deγ no corta al semieje real negativo (−∞,0] (en particular, que 0 ∈/ sopγ), por lo que Argγ (t)es un argumento continuo a lo largo de γ, y, puesto que−R <t0 < t2 < R, podemos concluir que
ARG
−R≤t≤Rγ (t) = Argγ (R)−Argγ (−R)
= arc tg y(R) x(R) −
arc tg y(−R) x(−R) −π
= π +α(R),
donde
α(R) =arc tg y(R)
x(R) −arc tg
y(−R) x(−R),
que tiene l´ımite 0 cuando R → +∞ (este tipo de informaci´on nos ser´a ´util poste-riormente).
-20 -10 0 10 20 30
-40 -20 0 20
-4 -2 0 2 4 6
-10 -5 0 5 10
Gr´afica de γ (t) Gr´aficas de x(t)e y(t)
Ejercicio. Sea P(z) = zk +a1zk−1 + · · · + ak un polinomio de grado k ≥ 1, y para cada R > 0, sea
γR : t ∈[0, π] → γR(t) = P(R ei t) ∈ C.
Probar que lim
R→+∞0≤ARGt≤π γR(t) = kπ.
(Nos encontraremos m´as adelante en la necesidad de estudiar l´ımites de este tipo.)
Respuesta.
Notemos que
P(z) = zk g(z),
donde
lim
z→∞g(z) = zlim→∞
1+ a1
z + · · · + ak zk
0
1
Existir´a por tanto un R0 > 0 tal
que si |z| > R0 |g(z)−1| <1,
y, en particular, g(z) /∈ (−∞,0]. Toman-do, pues, R > R0,
γR(t) = Rkei kt g(R ei t),
con g(R ei t) /∈ (−∞,0] para todo t ∈ [0, π], por lo cual
t ∈ [0, π] →kt +Arg g(R ei t) ∈R es un argumento continuo a lo largo deγR. En consecuencia
ARG
0≤t≤π γR(t) = kπ +Arg g(−R)−Arg g(R) si R > R0. Pero entonces
lim
R→+∞0≤ARGt≤π γR(t) =kπ + R→+∞lim
Arg g(−R)−Arg g(R)
=kπ +Arg 1−Arg 1 = kπ.
5.5 AP ´ENDICE: SUPERFICIES DE RIEMANN
NOTA. Lo que a continuaci´on se expone es s´olo una descripci´on intuitiva, sin ninguna pretensi´on de rigor. Nos permitimos, por ello, algunas expresiones m´as desenfadadas que las habituales en un texto de Matem´aticas, que esperamos sirvan para un mejor entendimiento de las (profundas) ideas que se quieren reflejar.
Una y otra vez venimos chocando con los problemas que nos crea el hecho de que el logaritmo complejo es una funci´on multivaluada, que para cada complejo z no nulo nos obsequia con infinitos valores. Evidentemente, demasiados para poder actuar sobre ellos con las t´ecnicas habituales del An´alisis matem´atico.
logaritmo, de modo que podamos enfrentarnos a ´el trat´andolo como a una “funci´on verdadera”: cuando volvemos a un mismo punto con un valor distinto del loga-ritmo tras una variaci´on continua del mismo, podemos interpretar que este punto est´a situado en una copia del plano de partida, superpuesta al plano original pero distinta (“por eso” aparece un valor distinto del logaritmo). La cuesti´on entonces es c´omo pegar las infinitas copias necesarias, de manera que mantengan una estructura razonable.
Para lograrlo, Riemann imagin´o infinitas copias de C, llam´emosles [C,n] por ejemplo(n ∈Z), cortadas a lo largo del semieje real [0,+∞); partiendo de [C,0], le unimos [C,1] enganchando el borde inferior del corte de [C,0] con el borde superior del corte de [C,1]; luego seguimos el proceso uniendo [C,1] con [C,2] enganchando el borde inferior del corte de [C,1] con el borde superior del corte de [C,2], y as´ı sucesivamente. De forma similar se va uniendo [C,0] con [C,−1] (recordemos que [C,0] a´un tiene libre el borde superior), [C,−1] con [C,−2], etc.
Se obtiene as´ı un ‘objeto imposible’, una especie de h´elice infinita completa-mente aplastada, que se denomina la superficie de Riemann del logaritmo. Cada una de las copias de C es una hoja de la superficie, y es posible considerar el logaritmo como una funci´on genuina con dominio en su superficie de Riemann, que va adjudicando valores seg´un la hoja en la que est´e situado el punto (tal como el logaritmo continuo a lo largo de una curva va dando valores seg´un el par´ametro). La misma idea puede emplearse para adecentar otras funciones. El ejemplo m´as sencillo es la ra´ız cuadrada: una ra´ız cuadrada continua a lo largo de la cir-cunferencia unidad (definici´on obvia) que parta, por ejemplo, del valor 1 en 1, nos devolver´ıa a este punto tras completar la vuelta con el valor −1 (si continu´asemos girando, tras la siguiente vuelta recuperar´ıamos el valor 1). Ahora ser´ıa suficiente contar con dos copias [C,−1], [C,−2] de C, cortadas otra vez a lo largo del semieje real no negativo, pegadas uniendo el borde inferior del corte de [C,1] con el borde superior del corte de [C,2], y despu´es el borde inferior del corte de [C,2] con el borde superior del corte de [C,1], dej´andolo todo de una sola pieza.
La descripci´on del propio Riemann en su obra sobre funciones abelianas dice as´ı:
funci´on. Alrededor de un punto de ramificaci´on de la funci´on una hoja de la super-ficie contin´ua en otra, de manera que en el entorno de tal punto la supersuper-ficie puede mirarse como una superficie helicoidal con eje a trav´es del punto y perpendicular al plano(x, y), y pendiente infinitesimal. Cuando la funci´on retorna a su valor previo tras un n´umero de vueltas de z alrededor del punto de ramificaci´on (como, por ejemplo, con (z −a)m/n, cuando m, n son primos relativos, despu´es de n vueltas de z alrededor de a), entonces naturalmente hay que suponer que la hoja de m´as arriba baja a trav´es de las otras a unirse con la inferior.
La funci´on multivaluada tiene s´olo un valor para cada punto de esta superficie que representa su ramificaci´on, y por tanto puede ser vista como una funci´on completamente determinada sobre la superficie.”
Puede darse una definici´on satisfactoria de las superficies de Riemann de las “inversas multiformes” que nos han ido apareciendo, incluidas en la definici´on general de superficie de Riemann abstracta que introdujeron b´asicamente Weyl y Rad´o. T´ecnicamente, una superficie de Riemann es una variedad compleja conexa de dimensi´on 1 (por tanto, de dimensi´on real 2) dotada de una estructura anal´ıtica. Esto ´ultimo significa que si dos cartas (U, ϕ), (V, ψ) se cortan, los cambios de coordenadas ϕ ◦ψ−1 y ψ ◦ϕ−1 son funciones (complejas de variable compleja) anal´ıticas.