El esquema a elegir depende de la edad gestacional: si es mayor de 34 semanas, debe utilizarse penicilina cristalina endovenosa a 4 millones de UI cada 4 horas durante diez a catorce días. Si existe amenaza de parto pre término se remitirá por alto riesgo. Debe intentarse el diagnóstico del compromiso fetal. Si la edad gestacional es menor de 34 semanas, el esquema se seleccionará según el estadio, así:
Objetivo: Determinar la adherencia de los profesionales médicos y de enfermería al protocolo de sífiliscongénita y gestacional implementado por el Ministerio de la Protección Social. Materiales y Métodos: Estudio descriptivo longitudinal con una población de 215 gestantes y una muestra de 11 gestantes diagnosticadas con sífilisgestacional en 10 municipios de un departamento en Colombia entre febrero y abril de 2013. Se utilizaron como instrumentos el Familiograma, Faces III (Olson), Lista de chequeo protocolo. Medidas de tendencia central. Participación voluntaria bajo consentimiento informado. Resultados: la media poblacional es de 20 años, baja escolaridad, amas de casa, en unión libre, todas afiliadas a seguridad social. El 60% corresponde a familias nucleares, faces III: 50% familias equilibradas, 30% moderadas y 20% extremas. Protocolo: Una gestante no tuvo control prenatal, el 54,5% no registran factores de riesgo, 60,3% diagnosticadas en tercer trimestre, 36,3% de recién nacidos con sífiliscongénita, no se registra seguimiento serológico, no hay registro educativo a la paciente ni a la pareja, no hay valoración de genitales ni piel en examen físico de las gestantes, atención a RN incompleta, tratamiento suministrado adecuado. Conclusiones: Predominio de las familias nucleares y equilibradas, con capacidad de aprender de las crisis. No hay adherencia total al protocolo, no hay seguimiento por parte de los profesionales que brindan atención y cuidado a la usuaria. Se evidencia falta de educación continua en el tema al profesional de enfermería como líder del proceso en la región.
La salud materno-infantil incluye eventos de interés en salud pública como son la Mortalidad Materna y la sífilisgestacional- Congénita, por ende el panorama descrito con la información de la vigilancia epidemiológica de mortalidad materna se puede incluir en SG-SC. De acuerdo a lo anterior se anexa en esta investigación, El Informe Observatorio Nacional de Salud, en el cual se exalta la importancia de superar las desigualdades en territorios en cuanto a servicios maternos asequibles, de calidad y culturalmente apropiados, que tienen distintos efectos en las mujeres dependiendo de la edad, ingresos, grupo étnico, nivel de educación y zona geográfica de residencia. La población indígena y afro-descendiente presenta mayor riesgo de morbi-mortalidad considerando su afectación por condicionantes culturales y socioeconómicos y dificultades para el acceso a servicios de salud.(10)
Se definió como caso de sífilisgestacional a toda mujer embarazada, puérpera o con aborto recien- te con evidencia clínica (úlcera genital o lesiones compatibles con sífilis secundaria) o prueba tre- ponémica (incluidas pruebas treponémicas rápidas) o no treponémica positiva o reactiva, que no había recibido tratamiento adecuado (antes de la semana 20 de gestación y como mínimo 30 días antes del parto) para sífilis durante la presente gestación. Se consideró como infección actual a todas aquellas madres que presentaron prueba VDRL positiva 1 en 8 diluciones, y prueba confirmatoria treponémica positiva (FTA BS). Se definió como caso de sífiliscongénita a todo niño, aborto o mortinato cuya madre tuviera evidencia clínica (úlcera genital o
La sífilis, enfermedad legendaria, tiene formas asinto- máticas y sintomáticas; sus formas de presentación son diversas y dependen de la localización y la extensión de las lesiones. Cuando se presenta en la mujer embarazada se clasifica como sífilisgestacional, con alto impacto en salud pública y con consecuencias graves, como aborto, mortinato o parto prematuro con producto enfermo. La recomendación actual del tratamiento en gestantes es la penicilina G benzatínica, 2,4 millones de unidades en dosis única o hasta 7,2 millones de unidades en tres dosis con intervalos de una semana. La evidencia hasta el momento en mujeres gestantes que presentan sífilis latente con neurosífilis o sin ella, tratadas con penicilina, ha mostrado falla terapéutica sin importar qué esquema se prescriba, esto debido a múltiples eventos tanto técnicos como de acceso.
Sencillez: según las medidas dadas por el CDC, el programa de vigilancia de sífiliscongénita y gestacional, cumple con este atributo; debido a en el protocolo de Vigilancia Epidemiológica de Sífilisgestacional y congénita se pueden encontrar la definición operativa de caso (caso confirmado por laboratorio para sífilisgestacional y caso confirmado por Nexo epidemiológico para sífiliscongénita), además de contar con fichas de notificación para sífilisgestacional y congénita que deben ser reportados semanalmente por las UPGD; en las que se documenta la información general sobre el evento, identificación del paciente, información demográfica, y el comportamiento y exposición al evento de sífilisgestacional y congénita, . En la ficha de notificación con Código 740 correspondiente al evento de sífiliscongénita, se encuentra algunos de los criterios de inclusión, como hepatomegalia, esplenomegalia, sordera, y alteraciones oculares, alteraciones hematológicas.
Este for mu la rio so bre au di to ría de sí fi lis nos per mi te ex traer re sul ta dos no so lo con res pec to a la in ci den cia de SG y SC, si no tam bién con as pec tos vin cu la dos a las ca - rac te rís ti cas de la po bla ción y su ma ne jo. Es po si ble eva - luar as pec tos co mo el mo men to del diag nós ti co, el tra ta - mien to ins tau ra do, la iden ti fi ca ción y el tra ta mien to de los con tac tos y del RN. Su apli ca ción a ni vel na cio nal per mi ti rá, a los res pon sa bles de las po lí ti cas pú bli cas, ge ne rar es tra te gias ten dien tes a in ter ve nir en la prevención, el diagnóstico oportuno y el tratamiento de la sífilis en nuestro país.
La Organización Mundial de la Salud - OMS estima que cada año la sífilis materna es responsable de 460.000 abortos o mortinatos, 270.000 casos de sífiliscongénita y el nacimiento de igual número de recién nacidos con bajo peso al nacer o prematuros, esta cifra supera fácilmente otras infecciones neonatales, como el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) y el tétanos, que han sido el objetivo de atención mundial (4). Se calcula que cada año hay más de 12 millones de nuevas infecciones por Treponema pallidum, de las cuales más de 2 millones se producen en mujeres embarazadas (5). América Latina tiene una tasa de sífilis materna más alta que cualquier otra región, estimada por la OMS entre 1997 y 2003 en 3,9%. Con dicha tasa se calcula que puede haber aproximadamente 459.108 casos de sífilisGestacional en la Región de las Américas (exceptuando EE.UU. y Canadá), originando cada año de 164,222 a 344,331 casos de sífiliscongénita (SC)(6). En la mayor parte de estos casos, la infección es transmitida al feto, en general entre las semanas 16 y 28 de embarazo y con lleva un pronóstico fatal en el 30-50% de casos (7,8). Colombia no es ajena a esta situación según los datos SIVIGILA - INS entre el periodo de tiempo observado entre el año 2000 al 2008, muestran un número de casos de sífiliscongénita que paso de generar una tasa de 1,3 a otra de 2,6 por cada 1000 nacidos vivos, superior a la meta de eliminación para Colombia que es tener una tasa menor a 0.5 casos x 1000 nacidos vivos debido a que es un compromiso internacional, tendencia que muestra un incremento sostenido en el tiempo. Desde que se inició el registro de la sífilisGestacional, se observa un número incrementado sostenido y lineal con una marcada pendiente entre 2003 y 2008, pasando de 1,3 a 5,4 por 1000 nacidos vivos. La presencia de casos de sífilisGestacional, va de la mano con el comportamiento del aumento en el ingreso a control prenatal y a su vez con el incremento en la detección de casos de sífiliscongénita. Sin embargo la presencia de sífiliscongénita, habla de un problema de calidad de la atención en salud dentro de los programas de control prenatal existentes (9).
sífilis materna y congénita entre los formuladores de políticas, gestores de programas y proveedores de salud; los obstáculos para el acceso a los servicios de control prenatal; la escasa demanda de las pruebas de detección de sífilis entre los usuarios de los servicios de salud 6 ; la falta de seguimiento del personal de salud a los casos de sífilisgestacional; el bajo nivel educativo, sin dejar de lado la promiscuidad y falta de educación en prevención de infecciones de transmisión sexual [ITS]. Aunque existe una normativa de tamizaje de sífilis en embarazadas, esta no se aplica de forma sistemática pese a disponer de pruebas diagnósticas, simples y rápidas que se pueden utilizar en la consulta externa y que requieren únicamente una capacitación y apoyo logístico básico 7 .
En este estudio, de las 152 mujeres gestantes diagnosticadas con sífilisgestacional, 33 dieron a luz bebes con sífiliscongénita, de los cuales uno falleció a causa de la enfermedad, lo que resulta alarmante, sobre todo si consideramos que un factor importante en la prevención de la transmisión vertical (madre a hijo) es la detección y tratamiento de la infección en la gestante. De hecho, se estima que hasta 90% de los recién nacidos de madres con sífilis no tratada adquirirán la sífiliscongénita y muchos no desarrollan síntomas hasta dos semanas a tres meses después de nacidos (13). Además, las manifestaciones clínicas de la sífiliscongénita comprenden un espectro que va desde el aborto espontáneo, el mortinato, el bajo peso al nacer, el parto pretérmino, alteraciones hematológicas, hepáticas, renales y oculares, hasta la muerte perinatal.
En la actualidad, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) ha implementado intervenciones accesibles y eficaces para prevenir la SífilisCongénita; sin embargo, no han logrado influir de manera efectiva en la reducción de la incidencia de dicha enfermedad. Esta situación se refleja en la región Chorotega, donde se registró para el 2015 una tasa de incidencia de 1,3 por 1.000 nacidos, dato por encima de la meta internacional planteada por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) de 0,5 casos o menos, aspecto que constituye un referente importante de la situación epidemiológica de la sífiliscongénita y que justifica el análisis de la cadena de eventos que se suceden en la red de servicios de salud de la región. Considerando lo mencionado, se efectuó un estudio, con el fin de describir de manera retrospectiva el funcionamiento del sistema de notificación de casos entre niveles, así como las dificultades que incidieron durante el 2015 en el diagnóstico, tratamiento y seguimiento de la sífilisgestacional y la sífiliscongénita. Los datos descriptivos se basaron en las acciones realizadas a la madre en el primer nivel de atención y las realizadas al recién nacido en el centro hospitalario, documentadas en las notas médicas y/o de enfermería, la epicrisis de egreso y la hoja de historia clínica perinatal del Centro Latinoamericano de Perinatología (CLAP). Los resultados muestran que el actual sistema de notificación entre los diferentes niveles de atención de la región Chorotega, se fundamenta en el uso del CLAP y la epicrisis, mediante mecanismos que no necesariamente garantizan el diagnóstico, registro y seguimiento de la sífiliscongénita en la región. Ante esta situación, se recomienda la ejecución de estrategias sustentadas en la organización de los servicios y el uso de un sistema de información que fortalezca la gestión en la red de servicios de salud institucional y en consecuencia, disminuir la incidencia de esta patología en la región.
Es pertinente que se analicen los puntos de falla de los programas involucrados en la eliminación de la sífilisgestacional y congénita para formular estrategias destinadas al control de la sífilis como ITS y como agente de mortalidad perinatal. Así mismo los profesionales de la salud encargados o contratados mediante tercerización para desarrollar las actividades, deberán mostrar un mayor compromiso que permita cumplir aunque sea fuera de los tiempos a la meta internacional de eliminación de la transmisión de la sífiliscongénita; es pertinente resaltar la importancia del diagnóstico precoz, el cual debería de manera ideal darse previo a la gestación o a inicio de ésta; lo anterior requerirá fortalecer el tipo de estrategias focalizando la atención en el grupo de adolescentes y mujeres adultas jóvenes en el sector sur del municipio.
La sífiliscongénita es la transmisión de la sífilis de la madre al feto, por medio de dos vías, la transmisión vertical hematógeno transplacentaria o por la contaminación del feto en el momento del parto al pasar por el canal vaginal. Las afecciones fetales dependen de la etapa en la que se encuentre la sífilis y de la edad gestacional en que la madre adquirió la infección. La enfermedad se transmite en la fase primaria hasta en un 70% de los casos, en la secundaria del 90 al 100%, en la latente temprana un 30% y en la latente tardía alrededor del 20% de los casos La infección provoca una respuesta inmunitaria celular y humoral; que en casos primarios predominan los linfocitos T CD4+ y macrófagos, mientras que en lesiones secundarias existe gran cantidad de linfocitos T CD8+; en ambas fases hay un aumento en la expresión de citocinas Th1, IL-2 e IFN-g. En el embarazo existe una respuesta inflamatoria intensa, prostaglandinas inducidas por la infección fetal, lo que propicia muerte fetal, nacimientos prematuros, bajo peso al nacer y severo retardo en el crecimiento intrauterino simétrico. (Pérez, Cedillos,Bahena y Valencia, 2014) Las lesiones asociadas a la sífilis en el feto muestran un desarrollo de la patología multiorgánico, producto de la extensa respuesta inflamatoria. Las manifestaciones se presentan en parte, debido a la inmadurez inmunológica del feto.
Asistencia durante el parto.- Siempre que se espere el nacimiento de un niño prematuro deberá estar presente en la sala de partos un equipo especializado entrenado en reanimación neonatal. Respecto a la viabilidad del neonato, para una edad gestacional < 24 semanas es ético no iniciar medidas de reanimación, Se evitará siempre el “trauma químico” por dosis elevadas de vitamina K, oxitócicos, analgésicos, anestesia general y cualquier fármaco con algún peligro para el RN. Se disminuirá al máximo posible el “trauma físico” del parto (cesárea electiva en las presentaciones podálicas o de nalgas, evitar partos instrumentados) y se recibirá al niño con suavidad, envuelto en una bolsa de polietileno si es un prematuro de extremado bajo peso, o en toalla seca, caliente y estéril, para disminuir el “trauma térmico”. (43)
La sífilis es una enfermedad infectocontagiosa producida por el Treponema pallidum y se divide en fase primaria, secun- daria, latente y terciaria. La neurosífilis y la sífiliscongénita se consideran de manera individual. Esta última se transmite de la madre al producto por circulación transplacentaria con una mortalidad de 40% del total de los productos infectados, ocurriendo in utero en un 75% y el 25% en la vida posnatal. Las manifestaciones clínicas son variadas desde una enfer- medad asintomática hasta la muerte in utero o neonatal. Las manifestaciones clínicas son consideradas tempranas si se presentan antes de los dos años de edad y tardías si lo hacen después de esta edad. Se describe un caso de sífilis con- génita en un recién nacido del sexo masculino de presentación temprana, con afección multisistémica, diagnosticado por historia clínica, manifestaciones clínicas y confirmado por pruebas no treponémicas positivas en sangre y líquido cefalo- rraquídeo, en este último además se observó incremento del número de células. Se manejó con penicilina G a 100,000 UI/kg/día dividido en dos dosis durante 21 días con adecuada respuesta y remisión de la enfermedad.
La frecuencia con que se presenta recién nacidos con hipoglicemia e ictericia, sepsis neonatal, malformación congénita, bajo peso al nacer o prematuridad ,sífilis, en la práctica diaria motiva a realizar la presente monografía con la finalidad de que el presente estudio constituya un aporte teórico para los profesionales de la salud que están al cuidado de los recién nacidos a identificar factores de riesgo aplicar medidas preventivas y realizar seguimiento a los neonato que presenta alguna patología para identificar cualquier complicación que pueda conllevar al recién nacido a perder la vida.
El trabajo se distribuye de la siguiente manera: En la sección I se muestra introducción así también el obje- tivo de esta investigación en la sección II el desarrollo de la investigación se aprecian contextos teóricos en documentas publicados sobre la coriorretinitis congé- nita, los agentes causales, los riesgos y lesiones causa- dos a nivel gestacional, en la sección III se presentan los resultados de lo observado en relación distribución de las coriorretinitis congénita, según agente causal pri- mordialmente el toxoplasma gondii, edad gestacional y manifestaciones clínica oculares la sección IV demues- tra las conclusiones sobre el objeto en estudio que es la coriorretinitis congénita a causa del toxoplasma y en la sección V las Referencias Bibliográficas.
Resumen : Se buscó en ese artículo debatir sobre los saberes y prácticas médicas referentes la sífilis, en especial a la sífilisgestacional, a principios del siglo XX. El objetivo central fue pre- sentar el debate médico desarrollado en una de las principales facultades de medicina del país acerca de las consecuencias de la sífilis para la mujer gestante y para el feto o niño. La natali- dad fue ampliamente defendida por médicos que acababan por condenar algunas prácticas de mujeres que llevarían a comprometer el embarazo. La metodología de análisis fue establecida a partir de un estudio de caso sobre la tesis defendida en junio de 1913, en la cátedra de clíni- ca obstétrica, por el médico recién graduado Arnaldo Cavalcanti de Albuquerque. Se constató por la documentación que los tratamientos del período para sífilisgestacional eran todavía bastantes precarios y las anotaciones médicas extrapolaban los límites clínicos adentrando muchas veces en la dimensión de cobranza de valores morales.
La edad gestacional entre las mujeres con segui- miento fue de 38,7±3,9 semanas en aquellas con MG y de 39,1±2,7 en quienes no tuvieron MG (p= 0,540358). Hubo una intensa asociación signi- ficativa entre el tiempo de gestación y la ocurrencia de MG, que aumentó en grado intenso a medida que se incrementó la edad gestacional (X2= 31,10; gl= 2; p= 0,00000018), ver tabla 2. Hasta la sema- na 20 de gestación, la frecuencia de MG fue menos de 1%, entre la semana 20,1 y la 32 la frecuencia subió a 7,1% y después de la semana 32 la frecuencia se elevó a 92,3%. En otras palabras: 92,3% de los casos de MG sucedieron en mujeres con más de 32 semanas de embarazo y sólo 7,7% acontecieron en gestantes con 1 a 32 semanas.
Las pruebas no treponémicas tienen la desventaja de que no son específicas para sífilis y pueden arrojar resultados falsos positivos ocasionado por enfermedad febril aguda, por enfermedad viral (E.-Barr, hepatitis), protozoarios y micoplasmas etc. y/o posterior a la apli- cación de alguna vacuna, pero esta reacción dura me- nos de 6 meses. Los resultados falsos positivos con duración de más de 6 meses se pueden deber a enfer- medades crónicas como enfermedades autoinmunita- rias, cáncer, hepatitis crónica, y abuso de drogas. Las titulaciones positivas en el neonato pueden ser un re- flejo de anticuerpos transferidos de la madre al feto y no tener una verdadera infección congénita. 1,4,10