Boletín de la Familia Marianista de Argentina - m a r z o 2 0 1 9
Casa Grande
Pinceladas de Casa Grande
Convivencia
También desde Junín…
Hitos de Adela (4)
Retiro vocacional
Hermosa despedida
Tiempo de misiones
Gracias a Dios hemos terminado una bella y profunda misión de verano
Ir a misionar y volver “misionados”
Volver con el corazón misionado
Caminantes
Dos sillas vacías
Caminando la meseta patagónica
Esperanza
Escuela de Misión 2019
Escuela de misión desde 9 de Julio
26º Proyecto Servir
La FMM se fue a misionar…
Navegando mar adentro
Grupo Andino Marianista
90 años
Noche de la caridad
En Villa Traful
Hasta siempre Ventura
Calendario Regional
Como todos los años nos encontramos en nuestra querida Colonia de Córdoba los últimos diez días de enero, iniciando la convivencia con la fiesta de nuestro Fundador el Beato Guillermo José Chaminade. Nos dimos cita los religiosos
marianistas de Argentina, la Hermana Blanca fmi, Adriana Gutierrez que comenzó su segundo año de formación inicial en la Alianza Marial, los tres diáconos marianistas Miguel, Vicente y Miguel con sus esposas Andrea y Stella (extrañamos a Adriana) y algunos laicos marianistas que nos ayudan codo a codo en nuestra vida cotidiana como nuestro jefe médico Carlos Beneitez y su señora Ana, nuestro administrador Jorge Guereño, nuestro amigos y hermanos Gustavo Magdalena y Mirta Mangas sin olvidar a nuestro ángel de la guarda, Nilda que cuidó con esmero y cariño a Venturita en sus últimos días. Tuvimos varios días de discernimiento compartido del documento del capítulo general
llamado "El hombre que no muere: en misión con la Familia Marianista", que desembocaron en nuestro capítulo Regional que celebramos cada tres años.
Allí tomamos decisiones importantes para nuestra vida y misión, pero sobre todo, reafirmamos lo que vivimos en esos diez días juntos: ¡somos Familia Carismática, y nuestra vida y misión la hacemos juntos o no será! Por supuesto que abundaron los momentos de oración, de juego, de pileta, de largas mateadas, de cine y disfrutamos de algunas
"golosinas caseras" hechas por las manos expertas de Blanca y las juveniles de Matías, quien fue admitido al noviciado de Chile. Por él, ¡damos gracias a Dios también! Una palabra final para agradecer a Carlos, Liliana y su hermosa familia que hace que nos sintamos "en casa". Hicimos realidad el sueño de nuestros fundadores marianistas:
"juntos".
P. Javier de Aguirre sm
B o le tí n d e l a F a m il ia M a r ia n is ta d e A r g e n ti n a
Desde hace muchos años, un grupo de personas vinculadas o no al Colegio Marianista, viajamos a Casa Grande a vacacionar.
Pero no son unas vacaciones cualesquiera.
Estas tienen un no se qué….que da el lugar, el compartir, las caminatas, la pileta, la cocina.
Y por supuesto un capitulo especial son las charlas del Padre Manolo, llenas de
sabiduría que da el contacto con Dios.
Las charlas en la mesa con el Padre Manuel Gonzalo, que con su actitud de escucha y su alegría de vivir, nos transmite su fuerza interior.
La Capilla, lugar privilegiado, que nos hace sentir a todos hijos del mismo Padre, compartiendo experiencias, vivencias, emociones.
Ir a Casa Grande, es como volver a casa...
porque así se siente y así se vive en familia.
¡Como me gustaría que muchos más compartieran esta experiencia!
Desde preparar el viaje, organizarnos y a disfrutar de las bellezas y la paz que da un ambiente y paisaje especial.
Y algo se me olvida nombrar: la cocina: el reino de Carlos y Liliana, dos seres humanos magníficos y serviciales. Jamás una
respuesta de fastidio, jamás un gesto que moleste. . .
Todo se conjuga para disfrutar y pasarla bien en un ambiente de sana alegría.
¡ Vamos a Casa Grande !
Mirta Mangas Alianza Marial - Junín
e l a F a m il ia M a r ia n is ta d e A r g e n ti n a
Como cada dos años, la primera semana de Febrero, las actividades de orden social de la Parroquia, tienen su encuentro-convivencia . El Hogar San Cayetano, la Residencia, los talleres de Frutos de Nuestra Tierra y algunos referentes de las comunidades de las chacras y del campo, comparten una semana de
vacaciones. Dejamos todas nuestras
obligaciones, compromisos, responsabilidades, y trabajos, y nos damos tiempo para el
esparcimiento, las charlas, los infaltables mates, los juegos en la pileta, y las caminatas por el río, los juegos de mesa, y claro, el comienzo de la jornada con la Eucaristía, que nos invitaba a centrarnos en Dios.
Momentos propicios para el conocimiento interpersonal, y también, para la intimidad con Dios.
Pudimos conocer algunas localidades vecinas, llegar hasta Alta Gracia, donde visitamos la casa museo del escritor Manuel Mujica Lainez y la localidad de San Marcos Sierra, último asentamiento hippie en el país.
Este año, compartimos 30 personas. Fuimos recibidos por Carlos y Lili, grandes caseros, que
pusieron todo su empeño en hacernos sentir como en casa.
Y como no destacar el aporte de Miguelito, siempre entre las ollas, pensando en darnos todos los gustos culinarios. Y Matías que nos preparó unas riquísimas medias lunas, mientras todos dormíamos.
Una linda experiencia que me tocó compartir por primera vez, y que aliento a otros a vivirla.
Raúl La Frossia
Equipo de Trabajo Pquia. Cristo Resucitado
B o le tí n d e l a F a m il ia M a r ia n is ta d e A r g e n ti n a
Los primeros días de febrero, vivimos una semana en la Colonia de Casa Grande como comunidad, como familia.
Fue un verdadero regalo todo el tiempo compartido, en un lugar tan bello y con el cálido recibimiento de Lili y Carlitos. Me asombró que éramos personas con edades, experiencias, actividades tan diversas, y que todos hayamos disfrutado los paseos, las riquísimas comidas, las tardes en la pileta, los juegos, los mates, rezar juntos. Fueron días para conocernos más, conversar, aprender unos de otros, proyectar y soñar el año, trabajando por el Reino.
Hace un año que formo parte de la comunidad parroquial, y me siento tan en casa. Gracias a todos y a cada uno por compartir sus dones.
Belén Tinetti Voluntaria de 9 de Julio en Gral. Roca
Queremos comentar que en la primera semana de enero, recién comenzado este nuevo año, junto con mi esposa, Soledad, organizamos una excursión a Casa Grande, con un grupo de familias Marianistas de Junín, algunas de 9 de Julio y de Buenos Aires.
Hermoso grupo familiar con varios menores, donde también pudimos compartir con
nuestros religiosos Manuel Gonzalo y Manolo Prieto. Fueron hermosos días compartidos en comunidad, disfrutando de nuestro carisma y muy buena comunión. Algunos pudimos participar de las excelentes charlas de Manolo. Luego de nuestro grupo y desde el día 9 de enero, también viajo otro grupo organizado por Mirta Mangas y que también pudieron disfrutar de tan hermoso y mágico lugar que nos brindan nuestros marianistas.
Gracias a Dios y con la presencia de Maria, disfrutamos en familia. Muy agradecidos a todas las familias que hicieron posible este viaje a Córdoba, a nuestros religiosos y un especial agradecimiento a Liliana y Carlos por su excelente atención de siempre, y sus exquisitas comidas. ¡Dios los bendiga a todos y nuestros deseos, de Soledad y mío, de un buen año!
Beto Perchante Familia marianista Junín
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B o le tí n d e l a F a m il ia M a r ia n is ta d e A r g e n ti n a
Corría el año 1804. Adela había cumplidosus quince años y hacía más de uno que había recibido el espaldarazo apostólico, el día memorable de su Confirmación. Desde entonces mantenía una entrañable amistad con Juana Diché, confirmada el mismo día, y cuatro años mayor que ella. Invitada por Adela, Juana pasaba temporadas en
Trenquelléon en las que las dos disfrutaban con su amistad y compartían sus vivencias de jóvenes cristianas y el fuego apostólico que ardía en sus corazones. El Sr.
Ducourneau, preceptor de Carlos, hermano de Adela, que vivía con ellos, estaba impresionado de la calidad humana y espiritual de ambas jóvenes. Estas,
aceptaron con entusiasmo, su propuesta de fundar los tres una Pequeña Asociación, que nació el 5 de agosto de 1804. Esta
Asociación tenía como objetivo prepararse a la buena muerte (tan prematura en aquel tiempo), ayudarse mutuamente, mediante la oración y el estímulo, en la práctica de las virtudes cristianas y ser apóstoles entre las jóvenes procurando atraerlas para la Asociación. Adela se convirtió en el alma animadora de las asociadas y con su especial don de gentes acrecentaba su número no sólo en su región sino en varias otras.
Los suyos eran otros tiempos. Los viajes y las comunicaciones de hace doscientos años qué distintas a las de nuestro siglo XXI. Con todo, Adela supo servirse de la
correspondencia, enviada con personas que viajaban, para hacerla llegar a su destino. En su primera carta, escrita el 2 de febrero de
1805, a sus 16 años, a Agueda Diché, hermana de Juana, le presenta cuál es la amistad que van a tratar de mantener con sus cartas. (Carta I,5).. Dios es el único principio de toda amistad cristiana y el vínculo durable; cuando se quiere en Dios, por Dios y con vistas a Dios, se está seguro de amarse para siempre. En cambio, una amistad que no esté fundada en él no puede durar mucho tiempo, al menos de ordinario.
La menor cusa la enfría. Mientras que al amarse en Dios, suceda lo que suceda, permanecen para siempre los motivos del amor. Espero y deseo que, fundadas en estos motivos, comencemos una amistad que dure para siempre.
Transcribo literalmente algunos de sus párrafos: …Compartiremos nuestros buenos pensamientos… Nada de rebuscar el estilo:
decir muy sencillamente lo que uno cree que le conviene a la persona a la que escribe.
Nunca tenemos que dejar de inculcarnos el amor a Dios. El día que recibas mi carta será el día en que el Espíritu Santo bajó sobre nosotras. Guardemos la memoria de ese día (la confirmación) tan dichoso.
Hna Blanca Jamar fmi
Fue del 26 al 30 de diciembre con jóvenes de General Roca y uno de Junín...
combinamos oración personal como momentos comunitarios de compartir y dos horas diarias de trabajo solidario ordenando el galpón del Taller de Nazaret.
e l a F a m il ia M a r ia n is ta d e A r g e n ti n a
B o le tí n d e l a F a m il ia M a r ia n is ta d e A r g e n ti n a
El sábado 23 y domingo 24 de febrero le hemos hecho la despedida parroquial, marianistay familiar a Matías Caamaño que el miércoles parte para el noviciado en Chile. Justamente hoy hablé con su maestro Jair y con Pepe Pascual y están muy entusiasmados. Ayer improvisamos un asadito (fuimos unas 75 personas) con toda la familia de Mati y la gente más allegada de la parroquia. Hubo un regalo comunitario: la funda para su guitarra, una pequeña obrita de teatro, tortas, guitarreada y mucho compartir. Hoy celebramos la misa dominical y Matías dijo unas hermosas palabras. Comparto algunas fotos y la obrita de teatro...
P. Javier de Aguirre sm
e l a F a m il ia M a r ia n is ta d e A r g e n ti n a
Llévame en tu mochila, misionero
para que no me olvides, para que no me olvide de la grandeza de lo pequeño,
de lo sagrado de lo sencillo.
Llévame en tu mochila, amigo,
para que en tus largas jornadas misionando se cuele mi sonrisa para aprender a ser
agradecido, para desaprender todo lo que me sobra para de algún modo estar presente cuando matees con una hermana, cuando te reciban con un abrazo solo tan sincero como el que tu portas para que mis soledades de la gran ciudad adquieran un sentido,
Llévame en tu mochila, llévame
a lugares en los que no estuve pero habito
a aquellos puestos donde no llegué pero aun así me quedé ellos ya saben que el Padre les mira, a mí recuérdamelo
Llévame en tu mochila, hermano,
para que mi acento gallego te haga recordar bajo los caminos calurosos que hay otras culturas, tan humanas, tan lejanas mas tan cercanas al tiempo. para que de algún modo pueda orar contigo.
Yo estaré aquí cerca, en una esquina del corazón,
en algún rincón de la Patagonia madrileña.
Llévame en tu mochila…
German Contreras Acción Marianista - España para los misioneros marianistas de la
Patagonia
Escuela de misión en Paso Córdoba, Misión de adultos en Naupa Huen, un pequeño grupo de misioneros de Córdoba en la zona de Aguada Guzmán, Michihuau y Lonco Vaca, y los
misioneros de la parroquia (con algunas "nuevas presencias" muy significativas) en Mencué, Mencué Viejo, Cerro Bayo, Blancura Centro, Chillaniyeu, Rincón del Manzano, Kakel Huincul y Quilimahuida. Pudimos colocar dos pantallas solares más en la zona de Michi y de Trapalco, celebrar misas en varias casas, cierre de misión en Mencué con bautismos, lo mismo que en
Aguada, Reyes en varias partes, especialmente en Paso Córdoba y en Naupa... y un cierre general de misión muy especial con el
casamiento de Laura y Oscar, Cuidadores de la Casa Común y del Proyecto Taller de Nazaret.
Todo un tiempo de gracia lleno de experiencias de Dios y de encuentro fraterno, pregustando que "otro mundo es posible", como nos dice el papa Francisco con el evangelio en la mano y en el corazón...
P. Javier de Aguirre sm
B o le tí n d e l a F a m il ia M a r ia n is ta d e A r g e n ti n a
A principios de enero, y repitiendo lamovilizante experiencia inaugural del año anterior, un grupo de adultos de las
comunidades de Nueve de Julio, Junín, Gral.
Roca y Caballito nos encontramos en el Taller de Nazareth de Naupa Huén (meseta
rionegrina a 250 km. al sur de Gral. Roca), a compartir una semana de trabajo, oración, esparcimiento y vida comunitaria.
Así, en típica “compartida de familia”, los días transcurrieron en una armoniosa rutina de la que nadie “se quería bajar”. Desayunar
temprano, dividirse en grupos y hacer trabajos de pintura, electricidad o limpieza de yuyos hasta el mediodía. El almuerzo comunitario seguido de la siesta y de un tiempo de esparcimiento que incluía “mojar las patas en el Limay”, nos preparaban para que, más tarde y de dos en dos, visitáramos y compartiéramos la vida con la gente del
pueblo.
A la caída del sol, la lectura comunitaria del Evangelio nos ayudaba a comprender cómo se nos había presentado Jesús durante el día.
La oración agradecida a María y al Padre, era el alimento espiritual previo a la cena y al descanso con el que nos recomponíamos de los dolores atípicos para “los viejitos de ciudad”.
“Feliz de la experiencia”, “Venís a misionar y te vas misionado”, “Super positivo todo. La Misión es un Espacio Sagrado”, “Disfruté mucho de conectar con lo misionero. También de sentirme parte, y no el último responsable”,
“Muy agradecido con todo y con todos.”,
“Siempre es hermosa la Misión, el reencuentro con la gente…” “Excelente acogida. Calidez y espíritu de familia.”
Resonancias de una hermosa experiencia vital. Deseos de que lo vivido ilumine nuestras rutinas en casa.
Gustavo Sanchez CLM
e l a F a m il ia M a r ia n is ta d e A r g e n ti n a
Estoy de vuelta en casa y repaso estos días en misión, cuánta riqueza queda en el corazón. No es nueva esta sensación de un corazón
misionado. Fui a misionar por primera vez en 1998, hace ya 20 años y esta sensación no deja de ser una caricia para el alma.
Llegamos al puesto de Irene y Robinson, donde se termina el camino, muy temprano en la
mañana. Ellos aún dormían y el sol comenzaba a dejarse ver en el horizonte. Que maravilloso paisaje, de un solo vistazo se puede ver mesetas, cerros y los picos nevados de la cordillera. Cómo no pensar en Dios creando cada rincón,
colocando cada piedra, cómo no sentir su presencia habitando la creación, cómo no dejarnos maravillar.
En esa abstracción estaba cuando Irene salió a nuestro encuentro. Su cuerpo pequeño y encorvado, marcado por el tiempo y el clima patagónico nos recibió e invitó a entrar en su hogar. Preparo mate y charlamos. Si describiera la conversación tal vez no habría en ella nada espectacular, son las miradas, las sonrisas, el mate yendo y viniendo, el escuchar y la compañía lo que llena aquel encuentro de la presencia de Dios.
Casi a media mañana y luego de dos pavas de mate, salimos con Irene a hacer diferentes tareas cotidianas de la casa, alimentamos gallinas y pavos, acarreamos agua y justo a tiempo hachamos leña, pues la que tenían ya se había acabado y ellos no pueden hacerlo.
Luego volvimos a la casa donde Robinson nos esperaba otra vez con mate, para seguir conversando mientras amasábamos pan y
preparábamos el almuerzo.
Nos cuentan que ya hace tiempo solo crían pavos y gallinas pues ya no tienen edad ni fuerza para criar chicos u ovejas así como para muchas otras cosas, pero su vida está allí, al final del camino, allí bien alto en los cerros, cerquita de Tata Dios . La vida en el campo no es fácil pero tiene su encanto, sus ritos y de vez en cuando alguna visita que alegra el corazón.
Por la tarde rezamos y nos preparamos para partir. Irene, sin decir nada, se colocó su abrigo y nos acompañó por el camino, cerro arriba, hasta que se puedo ver, aún lejos, el próximo puesto.
Nos señalo el camino y nos envió a seguir caminando, nos despedimos agradecidos por el tiempo compartido, se dio media vuelta y se fue caminando despacio.
La vemos alejarse camino abajo, los tres en silencio, yo rezo para mí "¡Qué hermosos son sobre las montañas los pasos del que trae la buena noticia, del que proclama la paz, del que anuncia la felicidad, del que proclama la salvación, y dice a Sión: «¡Tu Dios reina!».”
Diego Flores Mencue Viejo
B o le tí n d e l a F a m il ia M a r ia n is ta d e A r g e n ti n a
"Nosotros no caminamos porque tenemos ganas. Caminamos porque llevamos a Jesús", nos dijo Ramón Epulef cuando lo visitamos en 2018. Fue una gran lección: en dónde está nuestra esperanza, nuestra fuerza, por qué nuestra misión. En cada reunión durante el año recordamos esa frase. Y en esta misión me resonó aún más.
Nos pusimos en camino con una certeza: las ganas de compartir a Jesús, sabiendo que
"donde dos o tres se reúnen en mi nombre ahí estoy yo en medio de ellos". Cada familia nos enseñó de Jesús con sus gestos de amor, con su esperanza, con su fortaleza, con su alegría.
Y la oración compartida fue un encuentro profundo, un verdadero aprendizaje.
Cada camino tuvo su razón en la inmensidad de la meseta. Las caminatas fueron tiempo para rumiar lo vivido, para contemplar la naturaleza, para entender las distancias y las dificultades de comunicación de los pobladores del campo. Algunos días el viento nos
complicó. Y todo eso le dio el mejor sabor a los mates de bienvenida.
Un día nos preguntaron si nos gustan más las partidas o las llegadas. A mí me gustan más las llegadas. Porque el cansancio encontró sentido en el afecto y la alegría con que nos recibieron. Porque fue emocionante
reencontrarme con cada familia que conocí el año pasado. En cambio, en las partidas sentí ganas de quedarme mirando esos ojos, en comunión. Sentí que la palabra gracias me quedaba muy, muy pequeña frente a tanto compartido y que sólo podía rezar "Hasta tanto volvamos a encontrarnos Dios los guarde en la palma de su mano".
María Belén Tinetti
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Empezó y terminó con dos sillas vacías. El primer día la de Sebastián Torres, un abuelo solitario de Kakel Huincúl, su bastón apoyado al lado de su asiento habitual mientras nos recalentaba de su estofado para darnos de almorzar. Todos los días sentado en el mismo lugar, viendo la ida de las horas, esperando a su yerno que le cuida a sus animales y le trae agua del pozo, ya que le queda lejos y las rodillas no dan más. La silla lleva la memoria de su cuerpo, es parte de él, y él de ella.
El último día en lo de Maruca, una grande dama de 76 años, cruelmente lisiada de artrosis, ya no camina más y depende de sus hijos, dos masas de buen humor. Hasta el año pasado Maruca mantenía con orgullo su hermoso invernáculo dónde, en plena meseta, cultivaba rosas, malva loca, amapola y suculentas. Al fondo todavía está su asiento, una cajón de madera dado vuelta con un almohadón tejido casero lleno de cariño y tierra. Pero la silla no se volverá a usar, parece, y a los muchachos nos les da el tiempo para dedicarse al invernáculo. De a poquito se está desarmando.
Entre estos dos apoya libros una enciclopedia de experiencias compartidas. Gente feliz, triste, sola, acompañada, alegre o desesperada. Gente con poco de lo material pero una abundancia de lo humano, siempre dispuesta a compartir, invitar,
brindar y cuidar.
Caminando por los mallines o siguiendo un sendero borrado por los vientos; aspirando ceniza y tierra, y atajando las amenazas de los tábanos;
el silencio puntuado por los latidos de tu corazón y los gorjeos de los pajaritos; llegando al próximo puesto y saludando, primero a los perros que salen a las corridas, después al dueño; entrando con un “Permiso” y tomando asiento alrededor de la cocina; unos mates con tortas fritas, pan casero, galletitas; se carnea un cordero o a la chivita que saludabas hace poco. Se come bien y se toma de agua clara y dulce. Se duerme como un tronco, arrullado por el eterno viento.
Ofrecieron llevarnos en auto a lo de Maruca, un generoso gesto ocasionado por preocupación por el sendero, a ver si nos perdíamos o no.
Agradecimos, pero quisimos terminar la misión a pie; el camino es el destino, llegar es el premio.
Nos acompañaron a caballo hasta la tranquera y ahí bajamos, mudos, a lo de Maruca, cruzando el inmenso mallín hacia Mencué, hacia el pueblo, hacia el fin.
Nick Parker Misionero Pquia. Cristo Resucitado
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Entre mates y silencios, entre palabras y miradas, llenamos nuestro espíritu de un Jesús que vive entre los más humildes, allí, en ranchos y casas que amanecen entre cerros de la
Patagonia, y se hace visible en la sonrisa de un Painel, en la mirada de algún Caruso en las lágrimas de Susana y doña Dina...
Allí, donde el trabajo y el sacrificio conviven a diario con la ESPERANZA, fuimos recibidos con el mayor de los afectos y las más ricas tortas fritas...
Allí, en Mencué, donde el frio y el viento pueden
ser crudos y desafiantes, encontramos las puertas abiertas de cálidos hogares enteramente dispuestos a recibir a Cristo en nosotros,
misioneros, a veces sin saber, que él habita sus miradas y sus vidas, y que somos nosotros quienes lo encontramos en cada visita.
Florencia Capuano Como cada año nuevamente salimos hacia la
meseta Rionegrina… Este año con la
particularidad que nos tocó visitar dos zonas;
Cerro Bayo y Blancura…Las familias que visitamos nos recibieron con mucha alegría, contándonos sobre lo que fue su año; los animales, cuestiones familiares, anécdotas, vivencias que el campo trae. Creemos como Discípulos misioneros, que la Buena Noticia tiene que estar llena de vida, vivida en abundancia, como Jesús nos recuerda. Cada rostro, cada mate, cada comida, nos recuerda que Dios se hizo pequeño entre lo más humildes, y es el lugar donde lo podemos encontrar; en la belleza de un paisaje, en un atardecer, en una caminata con los
compañeros hasta el puesto siguiente, rezando en el silencio de tanta inmensidad… Al fin y al cabo creemos que el camino que nos lleva a conocer el rostro de Dios entre nuestros hermanos del campo, no es ni más ni menos el amor y la sensación de sentirnos amados por un Dios que se encarna en la fe del pueblo al que todos somos invitados a caminar.
Emiliano Guaragna sm Blancura Centro- Cerro Bayo.
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En pocas líneas queremos contarles sobre lo vivido por un grupo de chicas y chicos de los colegios Marianistas de Argentina que se animaron a ir hasta Paso Córdoba (Gral Roca, Río Negro). Allí se desarrolló la Escuela de Misión que desde la REM llevamos a cabo en verano, y que busca vivir una experiencia de anuncio explícito de Jesús compartiendo con la gente del lugar: visitas, charlas, celebraciones litúrgicas, y tiempos de entretención.
Allí los chicos con quienes los acompañamos tenemos momentos de preparación, de reflexión y de prepararnos a ser Misioneros Marianistas.
Es el mejor broche final que podemos dar a
nuestros alumnos que transitaron a través de distintas experiencias nuestras aulas, vivieron campamentos, fueron solidarios en distintas actividades, participaron de la catequesis y se animaron a transitar la pastoral… y en la Escuela de Misión salieron de sus lugares para compartir su fe en Jesús con los vecinos de Paso Córdoba.
Un abrazo a cada uno de los que hicieron posible esta experiencia. Les dejamos unas fotos que resumen lo vivido.
Hna. Susana Romero fmi
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Desde el 2 hasta el 10 de enero tres alumnos de 6º año del colegio, asistieron a la Escuela de Misión que se desarrolló en Paso Córdoba, Gral. Roca. Río Negro. Los jóvenes fueron
acompañados por la ex directora del Nivel Primario, Laura Ruggeri. A continuación compartimos testimonios…
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“La escuela de misión de Paso Córdoba es una experiencia maravillosa en la que conoces un monto de personas que viven una realidad diferente a la tuya lo cual hace que sea una experiencia única. También te permite reflexionar sobre algunos aspectos de tu vida y poder aprender a valorar las cosas que tenemos y no nos damos cuenta de la importancia que tienen. Por otro lado nos permitió conocer gente nueva que se
encontraba en la misma posición que nosotros, dispuesta ayudar y a crear relaciones nuevas.
Queremos agradecer a toda la comunidad Marianista por brindarnos esta posibilidad y en gran parte a Leo, que nos incentivó a animarnos a estas actividades y a vivir de otra forma”.
Marco, 9 de Julio.
“La experiencia no fue lo que me esperaba y resultó ser mejor de lo que imaginé.
Además de conocer un lugar hermoso también forme una relación con el grupo de misioneros y hasta podría decir que una amistad con los más cercanos y mejoré la que ya tenía con mis compañeros.
Lo más importante fue la sensación que te hace sentir saber que estás haciendo pasar un buen momento a la gente de allá.
Me gustaría volver en la próxima oportunidad y que más chicos lo hagan también”.
Iñaki, 9 de Julio.
“La escuela de misión fue una posibilidad única que nos brindó la escuela para poder conocer a la maravillosas comunidad de Paso Córdoba que nos recibió con los brazos abiertos y nos permitieron entrar a sus casas para compartir un mate o una charla. Una
experiencia única y que recomendamos, porque te permite conocer gente nueva que vive de una manera muy diferente a la nuestra”.
Valentín, 9 de Julio
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Decía el Papa Francisco en las JMJ, “Las nuevas generaciones, desde su alegría y entusiasmo, desde su libertad, sensibilidad y capacidad crítica nos reclaman a los
adultos…testimonio”, esta fue la invitación a participar, acompañar y vivir la escuela de misión, desde el 1 al 10 de enero de 2019.
El propósito de la misión es el anuncio de Jesús hacia dentro del grupo y hacia la comunidad visitada. Fortalecer la identidad Marianista y el compromiso misionero. Fue vivenciado y quedó el interés de los participantes por continuar.
El grupo de alumnos, exalumnos,
acompañantes vivió una convivencia saludable, fraterna de integración, pocos se conocían de antemano. La animación de adultos, especial Caro y H. Susana, Manuel y Flavio muy valiosa, flexible adaptando y encarnando las actividades con el grupo y la comunidad.
Tiempos de oración, celebraciones, es valioso que hubo rutinas para dar sentido y ubicar a Jesús en el centro. Poder vivir la oración como actitud de sentirnos necesitados de Dios,
creciendo en la oración comunitaria, en contacto con la Palabra. Otros aportes, música, videos, enriquecieron la propuesta.
El lugar está atentamente asistido por la naturaleza, en la Pcia. De Río Negro, la infraestructura austera, la comunidad de
personas de la capilla San Ceferino, la
asistencia del P. Manolo Madueño, del diácono, el equipo de apoyo valorable e imprescindible.
Cronograma, se va optimizando y adaptando cada año . Los temas de animación “Jesús- misión- religiosidad popular-Opción Preferencial
…-María…”cumplen con el propósito inicial. Fue valiosa el paseo a la Virgen Misionera. Día de retiro en el río”.
Aporte, es valioso el sistema de sostenimiento del proyecto con aportes de cada comunidad, colecta de alimentos, aportes de las familias de los chicos, luego alimentos compartidos con Misión Naupa y Cáritas Roca. Es un formato comunitario y vale la pena que se conozca como experiencia cristiana de economía de comunión.
Cada momento vivido fue un ejercicio de crecer en la fe encarnada, Marianista. Siguiendo con la invitación del Santo Padre a los jóvenes, les dijo ” Pueden creer en ese amor silencioso de la mano tendida, en el servicio y la entrega.”
¿Uds.? La misma pregunta que le hizo Dios a María (Lc. 1, 38). María sin dudarlo dijo “SÍ”.
Eso dijeron nuestros alumnos, se animaron a dar vida al sueño de Dios en Paso Córdoba.
Puedo concluir expresando, fui a acompañar y salí misionada. Gracias por la invitación!!
Laura Ruggeri Coordinadora 9 de Julio.
Como desde hace más de 20 años, este verano se realizó el Proyecto Servir. Del 4 al 10 de febrero, 39 chicos (32 alumnos que pasaron a Vº año y 7 exalumnos promoción 2018) participaron de la experiencia que, esta vez, tuvo por sede a nuestra casa en Castelar:
Pinitos.
Realizamos trabajos de albañilería en la parroquia “Santa Rosa de Lima”, en la capilla
“San Juan Bautista” y en el jardín de infantes
“Nuestra Señora de Luján”. Las tareas fueron de limpieza, pintura y barnizado; la realización de contrapisos y la extensión de una
medianera.
Estas actividades cobraron un sentido más profundo en el encuentro con las
comunidades de ambas parroquias, quienes nos acompañaron durante toda la semana, mostrándose sumamente agradecidos y cercanos. La última noche nos agasajaron con una cena, en la cual, con mucha alegría, brindamos por la tarea compartida.
Fueron siete días de de trabajo, de reflexión y
de oración; y también de juegos, deportes, pileta, música, y el disfrute de la vida en comunidad.
El proyecto pudo llevarse a cabo gracias al compromiso de docentes, tutores, directivos y otros agentes institucionales, y a la
colaboración de la familia Marianista mediante la Asociación de Padres, de Exalumnos y el aporte a las colectas en las misas. A todos, les agradecemos por hacer posible esta valiosa experiencia.
Celeste Zaccaria Tutora de Iº año Colegio de Caballito
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En el transcurso de noviembre y diciembre en conjunto con las señoras que forman parte de Acción Social, hemos trabajado para formar parte de la misión de verano y llegar a nuestros hermanos más necesitados en diferentes puntos del país. Se recibieron, acondicionaron y enviaron los alimentos recibidos en la Campaña del alimento.Gracias a los que participaron en la campaña y la generosidad de los asistentes a la muestra de Teatro de adultos y niños.
Los alimentos se repartieron para los asistentes a la Escuela de Misión, la Misión de Mencué y misioneros itinerantes, entre otros. Caritas Sauzalito, Caritas Miraflores, Caritas Roca, Caritas Fátima, Copa de Leche.
DETALLE CANTIDAD
Aceite 79
Arroz 239
Atún 3
Azúcar 49
Café 2
Chocolatada 1
Fideos 207
Galletitas 7
Gelatina 3
Harina 38
Lata tomate 17
Latas 84
Leche 93
Lentejas 17 Mate cocido 7
Mayonesa 1
Pate 3
Polenta 33
Sopa 6
Torta preparación 3
Yerba 91
Pañales 123
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B o le tí n d e l a F a m il ia M a r ia n is ta d e A r g e n ti n a
El 13 de febrero nos reunimos todo el personalde la escuela de Fátima para dar comienzo a nuestro año laboral. Fue un comienzo distinto, en donde nos encontramos para vivir una experiencia renovadora.
Como dijo Jesús a Simón: “Navega mar adentro y echa redes”.... Pensando en este mensaje salimos a recorrer el barrio de la escuela. Más de cien personas caminamos las calles de Soldati, en especial las calles del barrio Fátima o Villa 3 y el Barrio Los Piletones. Llenos de entusiasmo y
expectantes por ver y conocer el lugar donde viven, juegan y duermen nuestros alumnos.
Tuvimos la suerte de escuchar y conversar con personas que agradecen la labor que se realiza en nuestra escuela. Ellos pudieron contarnos su realidad, sus esfuerzos por hacer que el barrio mejore y las adaptaciones a sus rutinas frente a la inseguridad, la droga y la violencia.
La Capilla San José fue otro de los lugares que conocimos en el andar.
De regreso, compartimos un desayuno y el Padre Andrés nos contó un poco sobre la historia del barrio, su religiosidad y nos invitó a
seguir escuchando a nuestros alumnos y a sus familias con más libertad desde el lugar donde estemos.
Mañana de mucho conocimiento, ya que también tuvimos la oportunidad de conocer, pensar y reflexionar sobre la realidad
económica de nuestra querida escuela, de la mano de Santiago nuestro Representante Legal.
Así iniciamos nuestro año, teniendo en la mira las palabras de Jesús para que las redes se extiendan y llegue a toda nuestra comunidad.
Sabiendo que todos tenemos una misión, recordando siempre los valores fuertes que el Padre Leoncio nos inculcó: Ser “Agradecidos, Pacíficos y Solidarios”.
Andrea Polverari Directivo Fátima
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Hace unas semanas se realizó la 23º travesíade montaña del Grupo Andino Marianista en el Parque Nacional Nahuel Huapi. Más de 130 integrantes, entre alumnos, exalumnos, docentes, médicos y guías, participaron de una profunda experiencia de encuentro consigo mismo y con Dios en el marco de la vida comunitaria en un contexto maravilloso.
Este año tuvimos la novedad de que, a los grupos de Iº y IIIº y Vº año, se sumó una propuesta especialmente pensada para exalumnos que combinara cierta autonomía con tiempo compartido con los estudiantes del
colegio.
El día 10 de febrero los tres grupos de travesía se reencontraron luego de una semana en Pampa Linda donde el abrazo de cierre selló la alegría por el camino
compartido.
Juan Lanza Tutor de IIIº año Colegio Caballito
El miércoles 20 acompañamos al Hno Eliseo González sm con los festejos de sus 90 años de vida.
Compartimos una hermosa misa llena de testimonios y agradecimientos por su trayectoria y luego un rico asado.
Terminamos con brindis y torta con velita.
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Todos los viernes, a las ocho de la noche nos juntamos en el colegio para realizar los preparativos necesarios para salir hacia la plaza Primera Junta, donde nos reunimos para compartir un plato de comida con quien no lo tiene. Sin embargo, lo más importante es escuchar a la gente, sus alegrías, sus tristezas y sus necesidades. El viernes 21 de diciembre, por tercera vez, invitamos a ellos a que se acerquen al colegio para una cena navideña, para la cual todos colaboramos llevando una comida que esté presente en nuestras cenas
familiares navideñas. Los preparativos llevaron varios días, pero todo valió la pena, las mesas estaban llenas, la gente feliz y nosotros también. Incluso algunos se animaron ser protagonistas en el evento ya que cantaron, tocaron algún instrumento o dijeron unas palabras, lo cual animó la cena. Tanto ellos como nosotros terminamos la semana con una sonrisa en la cara.
Agustina Iudica Colegio Caballito
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Uno de los grupos de matrimonios de la Parroquia Cristo Resucitado vivimos este verano una hermosa experiencia de fin de semana acampando en Villa Traful. Con los corazones abiertos dispuestos a compartir en el marco de una naturaleza bellísima
transcurrimos días plenos de alegría, risas, y felicidad. No faltaron los desayunos
compartidos, mates, fogones a cargo de experimentados asadores, surtidas picadas, exquisitas tortas fritas, dulces caseros, etc…y lo mejor: la sonrisa y el cariño de todos. Estamos
agradecidos al Señor por habernos reunido en este camino del amor a Jesús y al prójimo. Con energías recargadas iniciamos así un año que esperamos sea pleno de servicio comunitario y crecimiento espiritual.
Ines Bauman y Oscar Castro CLM Gral. Roca
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El día 8 de febrero de 2019 nos dejó, parapartir hacia el encuentro definitivo con su Señor, nuestro querido hermano Ventura.
Don Ventura, obviamente, tuvo sus pequeñas sombras y sus temas
psicoespirituales que trabajar. Como todos nosotros. Pero la gracia de Dios triunfó claramente en él. Fue un gran testigo del Evangelio, un profundo amante de María, un hermano de una exquisita delicadeza y bondad, y de una servicialidad sin límites.
Todos los que pudimos cultivar su amistad y convivir con él guardaremos su nombre en nuestro corazón, y su recuerdo noS servirá de estímulo y de inspiración. Especialmente para los que dudan de la plenitud humana y apostólica a la que puede llevar la vocación de hermano laico marianista, la vida de Ventura puede motivarlos y conmoverlos.
Señalé como, en los últimos tiempos, costaba mucho entender lo que Ventura quería decir, aunque él sí se enteraba de todo y seguía todas las conversaciones.
Cuando se le “recriminó” que no se haya quedado sentado esperando a su cuidadora, cosa que generó la última caída que lo llevó a la operación y a la muerte, él dijo de modo bien inteligible y con su innato sentido del humor: “al que no hace nada, nada le pasa.
Gracias querido hermano por el testimonio de vida que nos has legado. Descansa en paz.
P. Luis Casala sm
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