BOLSA DE CEREALES
Buenos Aires, 24 de Agosto de 2011
LA TENDECIA CLIMÁTICA PARA LA CAMPAÑA AGRÍCOLA 2010/2011 EVOLUCIONA HACIA LA TENDECIA CLIMÁTICA PARA LA CAMPAÑA AGRÍCOLA 2010/2011 EVOLUCIONA HACIA LA TENDECIA CLIMÁTICA PARA LA CAMPAÑA AGRÍCOLA 2010/2011 EVOLUCIONA HACIA LA TENDECIA CLIMÁTICA PARA LA CAMPAÑA AGRÍCOLA 2010/2011 EVOLUCIONA HACIA
UN ESTADO DE “LA NIÑA” CON DESARROLLO LENTO QUE ALCANZARÍA SU MAYOR UN ESTADO DE “LA NIÑA” CON DESARROLLO LENTO QUE ALCANZARÍA SU MAYOR UN ESTADO DE “LA NIÑA” CON DESARROLLO LENTO QUE ALCANZARÍA SU MAYOR UN ESTADO DE “LA NIÑA” CON DESARROLLO LENTO QUE ALCANZARÍA SU MAYOR
INTENSIDAD HACIA MARZO DE 2012 INTENSIDAD HACIA MARZO DE 2012INTENSIDAD HACIA MARZO DE 2012 INTENSIDAD HACIA MARZO DE 2012
El episodio de “La Niña” que afectó a la campaña agrícola 2010/20011 observó un desarrollo significativamente superior a la media por lo que fue calificado como uno de los más intensos de las últimas décadas.
“La Niña” constituye la fase fría del fenómeno de “El Niño Oscilación del Sur” (ENSO), encontrándose asociada a un incremento de la intensidad de los vientos alisios ecuatoriales y a un enfriamiento del Océano Pacífico Ecuatorial. Los episodios bien desarrollados producen lluvias por debajo de lo normal, desde Noviembre hasta Marzo, en el sur del Brasil, el Uruguay, el este de la Región del Chaco, la Mesopotamia y la Región Pampeana. Por el contrario, el norte y el centro-oeste de
Sudamérica (Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y el norte del Brasil), el NOA y gran parte de Cuyo observan precipitaciones sobre lo normal. En el Paraguay, sus efectos son positivos en el extremo norte del área agrícola oriental, y negativos, en el sur de la misma. Entre ambas áreas se ubica una franja de transición que, según la intensidad del episodio en curso, se comporta en forma positiva o negativa.
Afortunadamente, el escenario climático 2010/2011 incluyó la presencia de extensas áreas con aguas con temperatura superior a lo normal en el Océano Atlántico, las cuales, aunque de una manera muy irregular, compensaron en buena parte los efectos negativos de “La Niña”.
Gracias a ello, los meses de verano y la mayor parte del otoño observaron una serie de lluvias, que repusieron las reservas de humedad en la mayor parte del este y el centro del área agrícola nacional, si bien subsisten amplios focos de sequía en su porción occidental.
El notable vigor del episodio de “La Niña” 2010/2011, generó una fuerte acción residual, haciendo que la definición del escenario climático para la campaña 2011/2012 demorara mucho en definirse.
Recién hacia mediados de Julio, la evolución climática comenzó a mostrar una tendencia clara, apuntando en forma definida hacia un estado de “La Niña”, que se iría desarrollando en forma muy lenta, alcanzando su máxima intensidad hacia Marzo de 2012.
Por esta causa, durante la mayor parte de la presente campaña agrícola, su intensidad podría ser débil, aunque su acción residual podría afecta considerablemente el comienzo de la siguiente campaña agrícola.
De esta manera se estaría repitiendo el patrón evolutivo de tres años que parece haberse instalado hace algunos años, cuya secuencia es:
1° Un “El Niño” fuerte (2006/2007 y 2009/2010), que produce lluvias superiores a lo normal, dando una buena cosecha y dejando los suelos con buenos contenidos de humedad.
2° Una “La Niña” fuerte (2007/2008 y 2010/2011), que provoca lluvias inferiores a lo normal pero que, gracias a la humedad dejada en los suelos por el “El Niño” precedente, no llega a afectar sensiblemente el resultado de la cosecha.
3° Una “La Niña” débil (2008/2009 y 2011/2012). Si bien este segundo episodio consecutivo es de escasa intensidad, su efecto acumulativo lo potencia. Si, por efecto del proceso precedente, los suelos quedan desprovistos de humedad, como ocurrió durante la campaña 2008/2009, sus consecuencias pueden ser graves.
Lo expuesto genera el temor de que pudiera repetirse una evolución como la experimentada durante la campaña 200/2009 pero, afortunadamente, en la presente campaña se observan varias diferencias positivas que generan una perspectiva más moderada:
1) La velocidad de desarrollo del fenómeno es lenta. Durante lo que queda del invierno y la
primera parte de la primavera se mantendrá en el rango neutral-frío, y recién entrará en la categoría de “La Niña” hacia noviembre.
2) El Océano Atlántico registra amplias áreas con aguas cálidas, mientras que en 2008/2009
estaba frío.
3) La actividad solar se encuentra en su fase de incremento, mientras que en 200/2009
atravesaba un mínimo histórico.
4) Las reservas de humedad son mucho mejores que a igual fecha de 2008. No obstante, se nota
un fuerte gradiente negativo hacia el oeste.
Por lo tanto, la perspectiva es mejor que en 2008/2009, aunque puede esperarse una temporada perfectamente normal y totalmente exenta de riesgos, pudiendo preverse la siguiente secuencia:
• Invierno con lluvias bajo la media, en la mayor parte del área agrícola nacional, con fríos
intensos en su primera parte, pero con una moderación del régimen térmico hacia su etapa final.
• Primavera con lluvias abundantes en todo el norte y el centro-este del área agrícola, pero con
valores escasos en el centro-oeste y todo el sur. Por su parte, el riesgo de heladas tardías parece moderado a escaso.
• Verano con una mejoría del régimen hídrico, que aportará buenas cantidades de humedad al
área agrícola principal, pero dejará extensas áreas del oeste sin recibir alivio efectivo.
• Otoño con lluvias inferiores a lo normal, debido al desarrollo tardío de “La Niña”, con riesgo
de la mayor parte del área agrícola nacional quede con reservas escasas, complicando el inicio de la campaña siguiente.
La perspectiva estacional que se expone a continuación, fue elaborada tomando en cuenta a los informes difundidos por el Servicio Meteorológico Nacional Argentino, los principales centros del Cono Sur, como el Centro de Pesquisas Espaciais (CPTEC) y el Instituto Nacional de Meteorología (INMET), del Brasil, la Dirección de Meteorología de Chile, etc. Asimismo, se consultaron las principales agencias internacionales, como al National Oceanic and Atmospheric Administration (NOAA), el International Research Institute for Climate and Society (IRI), el Climate Forecast System (CFS), el European, el Canadian Center for Climate Modelling and Analysis (CCCma), el Australian Bureau of Meteorology (BOM), el Experimental Climate Prediction Center (ECPC), el European Centre for Medium-Range Weather Forecasts (ECMWF), etc.
Las situaciones expuestas en el presente informe se ilustran mediante una serie de imágenes complementarias:
a) Precipitaciones en valor absoluto: Se provee el valor de la precipitación, observada o
pronosticada, según el caso, en mm.
b) Temperatura expresada como anomalía con respecto a lo normal: Se indican los grados
centígrados por encima o por debajo del promedio: Valores de 1°C o más indican un ambiente más cálido que lo normal; el rango entre -1°C y +1°C indica el ambiente normal o no perturbado significativamente; Valores de -1°C o menores, indican un ambiente significativamente por debajo de lo normal.
c) Potencial de tormentas: Se indica la probabilidad de experimentar tormentas severas, con
vientos, granizo y aguaceros torrenciales, con riesgos de anegamientos locales y desbordes de ríos.
Las lluvias otoño Las lluvias otoño Las lluvias otoño
Las lluvias otoño----invernales repusieron la humedadinvernales repusieron la humedadinvernales repusieron la humedadinvernales repusieron la humedad en el área agrícola orientalen el área agrícola orientalen el área agrícola orientalen el área agrícola oriental
Las lluvias ocurridas durante el otoño y lo que va del invierno 2011 repusieron las reservas de humedad en el área agrícola oriental, donde se concentra la mayor parte de la producción del país.
Es interesante comparar la situación hídrica actual con la existente a igual fecha de 2008, ya que ello pone en evidencia la mayor capacidad de hacer frente a posibles lapsos secos que posee el agro argentino al comenzar la campaña agrícola 2011/2012.
No obstante, debe señalarse que, en el margen occidental del área agrícola, subsisten varias zonas con reservas escasas, que continúan siendo muy vulnerables a posibles lapsos secos:
• Gran parte del NOA.
• Gran parte de la Región del Chaco
• Oeste y parte del centro de Córdoba.
• Centro y sur de La Pampa.
• Gran parte de Cuyo.
El Final del Invierno observará Precipitaciones sobre el Litoral Fluvial El Final del Invierno observará Precipitaciones sobre el Litoral Fluvial El Final del Invierno observará Precipitaciones sobre el Litoral Fluvial El Final del Invierno observará Precipitaciones sobre el Litoral Fluvial
El final del invierno observará precipitaciones
extremadamente desparejas, con valores
abundantes en el ángulo nordeste del área agrícola nacional, y registros inferiores a lo normal en la mayor parte del resto.
• Sólo la Región del Chaco, el norte de
Santa Fe y el centro y el norte de la Mesopotamia observarán precipitaciones abundantes (más de 75 mm).
• El extremo oriental del NOA, el centro de
Santa Fe, la mayor parte de Entre Ríos y el extremo oriental de Buenos Aires observarán precipitaciones moderadas (25 a 75 mm).
• El resto del área agrícola observará
precipitaciones escasas (menos de 25 mm).
• La cordillera sur y central registrará
fuertes tormentas con nieve y lluvia.
Debido a las tormentas cordilleranas, se producirán cortas pero intensas entradas de aire frío, con moderado riesgo de heladas.
Estas entrada de frío, se alternarán con lapsos templados que incrementarán el consumo de humedad, por lo que el manejo de las reservas será esencial para arribar al inicio de la primavera en buenas condiciones.
El potencial de tormentas se concentrará sobre el ángulo nordeste del área agrícola nacional, siendo muy escaso sobre la mayor parte del resto.
La primavera mostrará los primeros signos del desarrollo del segundo episodio consecutivo de La primavera mostrará los primeros signos del desarrollo del segundo episodio consecutivo de La primavera mostrará los primeros signos del desarrollo del segundo episodio consecutivo de La primavera mostrará los primeros signos del desarrollo del segundo episodio consecutivo de “La “La “La “La
Niña” Niña” Niña” Niña”
La primavera será afectada por la acción de “La Niña” en desarrollo, que provocará una distribución muy desigual de las precipitaciones y alterará el régimen térmico.
• El NOA, observará precipitaciones muy
abundantes, pero el inicio de la temporada húmeda se producirá en forma tardía, por lo que los meses de Octubre y Noviembre serán secos y cálidos, desarrollándose una intensa sequía. Por lo tanto, cuando se registre el comienzo de las lluvias, lo cual sucederá
entre principios y mediados de
Diciembre, se experimentarán fuertes tormentas, con vientos, granizo y aguaceros, que causarán desbordes y anegamientos.
• La Región del Chaco observará un
comienzo temprano de las lluvias
primaverales, que serán muy
abundantes, con numerosos focos de tormentas severas, con vientos y granizo, presentándose el riesgo de desbordes de los ríos.
• La Mesopotamia observará lluvias de
variada intensidad, desde moderadas hasta abundantes, con un moderado a alto potencial de tormentas.
• Cuyo observará precipitaciones
moderadas a escasas, inferiores a lo normal, que continuarán acentuando la sequía que sufre la región.
• La Región Pampeana observará lluvias
muy abundantes sobre su extremo nordeste; valores moderados en la mayor parte del centro y el este; algunas lluvias abundantes sobre su extremo sur; y
valores escasos sobre su margen
occidental.
El comienzo de la primavera producirá un ascenso general de la temperatura, pero los lapsos cálidos continuarán alternándose con fuertes irrupciones de aire polar que podrían causar un leve a moderado riesgo de heladas tardías.
El verano 2012 evolucionará hacia El verano 2012 evolucionará hacia El verano 2012 evolucionará hacia
El verano 2012 evolucionará hacia un escenario cercano a lo normal, pero el margen occidental del un escenario cercano a lo normal, pero el margen occidental del un escenario cercano a lo normal, pero el margen occidental del un escenario cercano a lo normal, pero el margen occidental del área agrícola continuará observando lluvias escasas
área agrícola continuará observando lluvias escasasárea agrícola continuará observando lluvias escasas área agrícola continuará observando lluvias escasas
Según es el patrón típico de “La Niña”, cabe esperar que, hacia comienzos del verano, las precipitaciones tiendan a normalizarse, trayendo alivio a las zonas afectadas por la sequía primaveral.
• La mayor parte del NOA y la mayor parte
de la Región del Chaco observarán fuertes tormentas, con riesgo de vientos, granizo y aguaceros torrenciales con peligro de anegamientos y desbordes de ríos.
• La Mesopotamia observará
precipitaciones moderadas en su parte norte, y valores abundantes en sus porciones centro y sur.
• Cuyo registrará cierto incremento de las
precipitaciones pero las mismas se mantendrán bajo lo normal, aportando un alivio parcial a la sequía.
• La Región Pampeana observará
precipitaciones moderadas a abundantes en el este y centro, pero el oeste
continuará observando valores
moderados a escasos.
La llegada del verano provocará un ascenso de la temperatura, provocando amplias área con temperaturas sobre lo normal.
El potencial de tormentas se mantendrá elevado en todo el norte del área agrícola incrementando el riesgo de vientos, granizo y aguaceros torrenciales, lo cual dificultará las labores y favorecerá el ataque de enfermedades y plagas.
CONCLUSIÓN CONCLUSIÓN CONCLUSIÓN CONCLUSIÓN
El pronóstico de desarrollo de un segundo episodio consecutivo de “La Niña” genera el temor de que pudiera repetirse una evolución como la experimentada durante la campaña 200/2009 pero, afortunadamente, en la presente campaña se observan varias diferencias positivas que generan una perspectiva más moderada:
1) La velocidad de desarrollo del fenómeno es lenta. Durante lo que queda del invierno y la
primera parte de la primavera se mantendrá en el rango neutral-frío, y recién entrará en la categoría de “La Niña” hacia noviembre, manteniéndose en ese estado durante Enero y Febrero.
2) El Océano Atlántico registra amplias áreas con aguas cálidas, mientras que en 2008/2009
estaba frío.
3) La actividad solar se encuentra en su fase de incremento, mientras que en 200/2009
atravesaba un mínimo histórico.
4) Las reservas de humedad son mucho mejores en el este y centro del área agrícola, si bien debe
prestarse atención de que, en el oeste, son inferiores a lo normal.
Aunque menos perturbada que otras temporadas, esta evolución planteará una sucesión de dificultades, que habrá que sortear sucesivamente.
En la mayor parte del área agrícola nacional, estas dificultades podrán superarse mediante un cuidadoso planteo productivo y un riguroso manejo.
No obstante, es probable que, en el margen occidental del área agrícola, la falta de precipitaciones adecuadas genere un amplio foco de sequía, donde las mermas productivas podrían ser importantes. Debido al desarrollo tardío de “La Niña”, las lluvias otoñales podrían ser escasas, haciendo que la campaña agrícola 2012/2013 se inicie en un escenario de suelos con escasas reservas de humedad en la mayor parte del área agrícola nacional.
Buenos Aires, 24 de Agosto de 2011 Ing. Agr. Eduardo M. Sierra
Especialista en Agroclimatología