Santa Eucaristía
El segundo domingo después de Pentecostés
La misa de hoy sera dirigida por el Diácono Steve Alder y
líderes laicos de nuestra comunidad
6 de junio 2021 12:30 p.m.
¡Bienvenidos a San Lucas!
Somos una comunidad inclusiva y multicultural en búsqueda de transformación espiritual y social. La Iglesia San Lucas le da la bienvenida a toda persona por igual como hijos y hijas de Dios creados en la imagen del Señor. Si te encuentras visitando nuestra ciudad, buscando una nueva iglesia, en búsqueda de Dios, o quieres saber más acerca de Jesucristo, te invitamos a que nos acompañes a nuestra misa. Sin importar tu pasado religioso, edad, raza, género, orientación sexual, o situación económica, te damos la bienvenida. Dondequiera que te encuentres en tu camino espiritual, te invitamos a recibir la eucaristía con nosotros. Si deseas saber más sobre nuestra parroquia, visita nuestra pagina de red www.stlukeslb.org o llama a la oficina 562-436-4047. Para ponerte en contacto con la Reverenda Nancy le puedes mandar un correo electronico a
revnancy@stlukeslb.org.
Iglesia Episcopal de San Lucas
525 E. 7th St. Long Beach, CA 90813 Tel: 562-436-4047
Correo electronico de la Oficina parroquial: office@stlukeslb.org Web: http://www.stlukeslb.org
Himno de Entrada Flor y canto
1.
Con mi canto ya te digo lo que siento. En mi alma canta alegre un ruiseñor Y una rosa que ha nacido en mis entrañas Es poema y es aroma de mi amor.
Es poema y es aroma de mi amor. (estribillo)
Mi canción es una flor agradecida Por lo mucho que me quieres y me das. Flor y canto de mi alma estremecida Que alimentas día a día con tu pan, Que alimentas día a día con tu pan.
2.
Que te alaben los que beben en mi fuente. Que te amen si han venido a mi jardín. Los que vengan a mi casa que te encuentren, Que confíen y se apoyen sólo en Tí.
Que confíen y se apoyen sólo en Tí. (estribillo)
Aclamación de Apertura
Diácono Bendito sea Dios: Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Pueblo Y bendito sea su reino, ahora y por siempre. Amén.
Colecta de Pureza
Dios omnipotente, para quien todos los corazones están manifiestos, todos los deseos son conocidos y ningún secretos se halla encubierto: Purifica los pensamientos de nuestros corazones por la inspiración de tu Santo Espíritu, para que perfectamente te amemos y dignamente proclamemos la grandeza de tu santo Nombre; por Cristo nuestro Señor. Amén.
Gloria, Gloria Aleluya en Nombre del Señor
(estribillo)
Gloria, Gloria aleluya, Gloria Gloria aleluya Gloria, Gloria aleluya en nombre del Señor
Gloria al padre que ha creado todo el mundo por amor Gloria al hijo que ha nacido, por salvarnos del dolor Gloria demos al espiritu divino del amor
Cantemos al Señor (estribillo)
Cuando sientas que tu hermano, nesecita de tu amor No le cierres tus entranas, ni el calor del Corazón Busca pronto en tu recuerdo, la palabra del Señor Mi ley es el amor
Colecta del Día
Diácono El Señor sea con ustedes.
Pueblo Y con tu Espíritu.
Diácono Oremos.
Oh Dios, de quien procede todo lo bueno: Concede, por tu inspiración, que pensemos lo justo y, guiados por ti, podamos hacerlo; por Jesucristo nuestro Señor, que vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
La Lectura Génesis 3:8–15
Lectura del Libro del Génesis.
El hombre y su mujer escucharon que Dios el Señor andaba por el jardín a la hora en que sopla el viento de la tarde, y corrieron a esconderse de él entre los árboles del jardín. Pero Dios el Señor llamó al hombre y le preguntó: —¿Dónde estás? El hombre contestó: —Escuché que andabas por el jardín y tuve miedo, porque estoy desnudo; por eso me escondí. Entonces Dios le preguntó: —¿Y quién te ha dicho que estás desnudo? ¿Acaso has comido del fruto del árbol del que te dije que no comieras? El hombre contestó: —La mujer que me diste por compañera me dio de ese fruto, y yo lo comí.
Entonces Dios el Señor le preguntó a la mujer: —¿Por qué lo hiciste? Y ella respondió: —La serpiente me engañó, y por eso comí del fruto. Entonces Dios el Señor dijo a la serpiente: —Por esto que has hecho, maldita serás entre todos los demás animales. De hoy en adelante caminarás arrastrándote y comerás tierra. Haré que tú y la mujer sean enemigas, lo mismo que tu descendencia y su
descendencia. Su descendencia te aplastará la cabeza, y tú le morderás el talón. Palabra del Señor. Demos gracias a Dios.
Canto Gradual Tengo sed de tí
Tengo sed de tí Oh, fuente del amor Tengo sed de ti Tu amor es libertad
La Lectura 2 Corintios 4:13–5:1
Lectura de la Segunda Carta de San Pablo a los Corintios.
La Escritura dice: «Tuve fe, y por eso hablé.» De igual manera, nosotros, con esa misma actitud de fe, creemos y también hablamos. Porque sabemos que Dios, que resucitó de la muerte al Señor Jesús, también nos resucitará a nosotros con él, y junto con ustedes nos llevará a su presencia. Todo esto ha sucedido para bien de ustedes, para que, recibiendo muchos la gracia de Dios, muchos sean también los que le den gracias, para la gloria de Dios. Por eso no nos desanimamos. Pues aunque por fuera nos vamos deteriorando, por dentro nos renovamos día a día. Lo que sufrimos en esta vida es cosa ligera, que pronto pasa; pero nos trae como resultado una gloria eterna mucho más grande y abundante. Porque no nos fijamos en lo que se ve, sino en lo que no se ve, ya que las cosas que se ven son
pasajeras, pero las que no se ven son eternas. Nosotros somos como una casa terrenal, como una tienda de campaña no permanente; pero sabemos que si esta tienda se destruye, Dios nos tiene preparada en el cielo una casa eterna, que no ha sido hecha por manos humanas.
Himno Aleluya
Aleluya, aleluya (bis)
Gloria a tí Señor, Hijo de Dios viviente Gloria a ti Señor, Rey de la Gloria Eterna Aleluya, aleluya (bis)
El Evangelio San Marcos 3:20–35
El Santo Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo según San Marcos.
¡Gloria a ti, Cristo Señor!
Entró Jesús en una casa, y otra vez se juntó tanta gente, que ni siquiera podían comer él y sus discípulos. Cuando lo supieron los parientes de Jesús, fueron a llevárselo, pues decían que se había vuelto loco. También los maestros de la ley que habían llegado de Jerusalén decían: «Beelzebú, el propio jefe de los demonios, es quien le ha dado a este hombre el poder de expulsarlos.» Jesús los llamó, y les puso un ejemplo, diciendo: «¿Cómo puede Satanás expulsar al propio Satanás? Un país dividido en bandos enemigos, no puede mantenerse; y una familia dividida, no puede mantenerse. Así también, si Satanás se divide y se levanta contra sí mismo, no podrá mantenerse; habrá llegado su fin. »Nadie puede entrar en la casa de un hombre fuerte y robarle sus cosas, si no lo ata primero; solamente así podrá robárselas. »Les aseguro que Dios dará su perdón a los hombres por todos los pecados y todo lo malo que digan: pero el que ofenda con sus palabras al Espíritu Santo, nunca tendrá perdón, sino que será culpable para siempre.» Esto lo dijo Jesús porque ellos afirmaban que tenía un espíritu impuro. Entre tanto llegaron la madre y los hermanos de Jesús, pero se quedaron afuera y mandaron llamarlo. La gente que estaba sentada alrededor de Jesús le dijo: —Tu madre, tus hermanos y tus hermanas están afuera, y te buscan. Él les contestó: —¿Quiénes son mi madre y mis hermanos? Luego, mirando a los que estaban sentados a su alrededor, añadió: —Éstos son mi madre y mis hermanos. Pues cualquiera que hace la voluntad de Dios, ése es mi hermano, mi hermana y mi madre.
El Evangelio del Señor. Te alabamos, Cristo Señor.
Sermón Benjamín Galán
Credo Niceno
El pueblo se levanta y todos dicen.
Creemos en un solo Dios, Padre todopoderoso,
Creador de cielo y tierra, de todo lo visible e invisible. Creemos en un solo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios, Nacido del Padre antes de todos los siglos:
Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, Engendrado, no creado, de la misma naturaleza que el Padre, Por quien todo fue hecho;
Que por nosotros y por nuestra salvación bajó del cielo:
Por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre. Por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato:
Padeció y fue sepultado. Resucitó al tercer día, según las Escrituras, Subió al cielo y está sentado a la derecha del Padre.
De nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin.
Creemos en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida,
Que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo
Recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creemos en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Reconocemos un solo Bautismo para el perdón de los pecados.
Esperamos la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén.
La Paz
Diácono La paz del Señor sea siempre con ustedes.
Pueblo Y con tu espíritu.
Ofertorio
Anden en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios.
Himno del Ofertorio Por que nos invitas
Por que nos invitas venimos a tu altar Oímos tu palabra comemos de tu pan Hijos de la Iglesia Fraterna comunión tu muerte celebramos Y tu résurrection Tu palabra es vida Y es luz de corazón Tu pan es sacramento Del mas sublime amor El altar es mesa y Calvario redentor Te ofreces a ti mismo Por nuestra salvación
Comunión del Sacramento Reservado
El pueblo permanece de pie.
Diácono El Señor sea con ustedes.
Pueblo Y con tu espíritu.
Oremos.
Padre todopoderoso, cuyo amado Hijo, en la noche antes de su pasión, instituyó el Sacramento de su Cuerpo y de la Sangre: En Tu misericordia, te pedimos que recibamos estos dones con gratitud en memoria de Jesucristo, nuestro Señor, Quién en estos santos misterios nos da una prenda de la vida eterna; y quien vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.
Por tanto te alabamos, uniendo nuestras voces con los Ángeles y Arcángeles, y con todos los coros celestiales que, proclamando la gloria de tu Nombre, por siempre cantan este himno:
Diácono y Pueblo
Santo, santo, santo es el Señor, Dios del universo. Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria. Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor. Hosanna en el cielo
Letanía
Líder Dios de gracia, al reunirnos en comunidad santa en todos los lugares del mundo, orando unidos y recibiendo tu sostén, pedimos tu bendición hacia todos los que buscan tu presencia,
respondiendo a tu llamado a compartir con los demás las bendiciones que tú nos has dado, con generosidad, con gozo y con gracia infinita. Señor escucha nuestra oración.
Líder Dios generoso, danos un corazón capaz de reconocer las necesidades del mundo que nos rodea. Abre nuestros ojos ante la realidad del hambre, la enfermedad, la violencia y la opresión, y llévanos a responder según la capacidad y la abilidad que tú nos has dado.
Señor escucha nuestra oración.
Líder Dios fiel, nuestra comunidad se enfrenta a muchos obstáculos. Guíanos por tu luz para que usemos las ofrendas de nuestro pueblo, como recursos que tú nos has encomendado, para ser testigos de tu paz en el medio de las dificultades que se nos han presentado.
Señor escucha nuestra oración.
Líder Dios de sanación, derrama tu espíritu sobre todos los que sufren, para que vivan en el poder y en el misterio de tu presencia en cada una de sus vidas. Señor escucha nuestra oración.
Diácono y Pueblo
Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre,
venga tu reino, hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día. Perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden.
No nos dejes caer en tentación y líbranos del mal.
Porque tuyo es el reino,
tuyo es el poder, y tuya es la gloria, ahora y por siempre. Amén.
Líder Bendito eres Tu, Dios de toda creación. Por Tu voluntad tenemos estas ofrendas que son símbolos de vida y trabajo. Que estas ofrendas puedan ser usadas en Tú iglesia para el trabajo que Tu nos has dado.
Pueblo Bendecidos somos por Dios todos los Dias.
Líder Bendito eres Tu, Dios de toda creación. Por Tu bondad nos has otorgado este pan y este Vino. Regalos que han sido consagrados y hechos el Cuerpo y la Sangre de Cristo.
Pueblo Bendecidos somos por Dios todos los Dias.
El Pueblo de Dios comparte el Pan y el Vino. Toda persona es invitada a recir la comunión.
Himno de Comunión Que Alegria
(estribillo)
Que alegria cuando me dijeron, vamos a la casa del Señor Ya estan llegando nuestros pies, a tus puertas Jerusalen
Jerusalen esta fundada, como ciudad bien compacta Alla suben las tribus,
las tribus del Señor (estribillo)
Desead la paz a Jerusalen, vivan seguros los que te aman Haya paz dentro de tus muro , en tus palacios seguridad (estribillo)
Por mis hermanos y companeros, voy a decir la paz contigo
Por la casa del Senor nuestro Dios, te deseo todo bien (estribillo)
Oración después de la Comunión
Diácono Oremos.
Eterno Dios, Padre celestial, en tu bondad nos has aceptado como miembros vivos de tu Hijo, nuestro Salvador Jesucristo; nos has nutrido con alimento espiritual en el Sacramento de su Cuerpo y de su Sangre. Envíanos ahora en paz al mundo; revístenos de fuerza y de valor para amarte y servirte con alegría y sencillez de corazón; por Cristo nuestro Señor. Amén.
Bendicion de la Comunidad
Diácono Al llegar al final de nuestra misa. Oramos dando gracias a Dios por las bendiciones recibidad y pedimos la Santa bendicion para nuestra comunida, nuestra familia y nosotros mismos.
Pueblo Santisimo Creador, tu nos bendices en todos momento. Te damos gracias por todas las bendiciones chicas y grandes que tu nos das cada dia. Te pedimos que nos sigas bendiciendo con tu amor, que camines con nosotros en nuestro camino y que nos inspires a tranformar nuestras vidas para mejor servite. Amén.
Anuncios La Despedida
Diácono Salgamos al mundo en paz; siendo buenas personas; reteniendo lo bueno; No hagán a nadie mal por mal; fortalezcan a los desanimados; apoyen a los débiles; ayuden a los afligidos; Denle honra a toda persona y sirvan al Señor, regocijándose en el poder del Espíritu Santo. Vayan ahora en paz para amar y servir al Señor.
Pueblo Demos gracias a Dios.
Himno de Salida Eres Todo Poderoso
La única razón de mi adoración, eres tu mi Jesus Él único motivo para vivir, eres tu mi Señor
Mi única verdad, esta en ti, eres mi luz y mi salvación Mi único amor, estés tu Señor, y por siempre te alabaré Tu eres todo, poderoso, eres grande y majestuoso Eres fuerte, invincible y no hay nadie como tu (bis)
